Historia del Rock

"NO PI ENSES EN ELLO, NO PIENSES E N ELLO PARA NADA. / NO NECESITAS COMER.
BAILA EL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL" ('Halber mensch', Einstürzende Neubaten)

Cabaret Voltalre mantienen una doble ros quedaron recogidos en 100 cintas de contemplación. Son capaces de convertir
actividad: discos accesibles con los que 30 minutos cada una. Entre sus últimas un álbum de los Beatles en una serie de
financian audiovisuales experimentales. propuestas destacan los conciertos portáti- himnos nazis, de ilustrar cinco leyendas
les. $l, en plena calle, con un casco que le esquimales con 40 minutos de muzak sal-
La mayor parte del trabajo sirve de altavoz en la cabeza y un equipo vaje, de componer óperas extravagantes y
realizado en grupo es tape- walkman, con música suya, conectado a de versionar a carrozas norteamericanos
music. Eso significa que, de los cascos. como Giershwin o Sousa. No se detienen
estar tocado en directo, sonaría ante nada, tal vez porque están inmuniza-
l a cinta. La máquina es Por su parte, Roedelius y Moebius con- dos ante cualquier ataque.
nuestro principal Instrumento. tinuaron, ya como Cluster, hasta 1981 ma-
También usamos una nufacturando discos aceptables con pro- Y en el Reino Unido, Throbbing Grist-le, o el sueño
cantidad de materiales fusión de efectos electrónicos antes de em- hiperdélico deGenesiP,
acústicos. Las técnicas de prender sus respectivas carreras en solita-
collage son utilizadas para rio. El puente entre Cluster y el tecno in- Orridge. Una mente torturada y perversa
evitar la identificación dustrial lo tenderían Kraftwerk y Der Plan que, al igual que los Residents, se anticipó
procesada, dándole a la música años más tarde. al punk con sus posturas radicales y su
un carácter no Identiflcativo. obscenidad bien entendida. Sus adjetivos
En lo que concierne a los Aunque los Residente no lo sepan, o tal favoritos eran repulsión.. rovocación, chi-
conciertos, P16.D4 desarrolla vez sí, su música tiene más de un punto de rriante. No era muy extraño sorprenderle
una música concreta, contacto con la teoría de las catástrofes, en un ejercicio salvaje de body-art, autole-
I mprovisada, que combina del matemático francés René Thom. sionándose con cuchillos, u organizando
sonidos creados en directo con Como él, son los mejores embajadores del exposiciones como Prostitution, a base de
otros pregrabados, pudiendo caos controlado, y se divierten planeando fotografías pornográficas y prendas ínti-
ser procesados durante el interminables emisiones de músicas difíci- mas usadas. Por supuesto, su música no
concierto". les. No en vano a menudo se jactan de su se escapa a esas coordenadas extremistas
Roger schnauer, P16.D4. analfabetismo musical: "Nosotros no so- y rezuma perversión. Genesis y sus com-
mos músicos, ninguno de nosotros sabe pinches conocen muy bien el poder de los
tocar„. Antes del punk ya estaban los Resi- infrasonidos y de los ultrasonidos, y en sus
dents, que sin duda asistieron a su funeral acciones los utilizaban para provocar so-
con indisimulada maldad. Después del lapadamente excitaciones y agresiones.
punk quedan los Residents, los últimos Baste reseñar que en la Factoría de la
ídolos, los ídolos sin rostro. Nadie en 17 Muerte, en la que ensayaban, tenían que
años ha conseguido descubrir su identi- proteger los altavoces con una capa de
dad, y a lo largo de este tiempo, ellos se hormigón armado para que resistieran las
han encargado de cultivar con esmero frecuencias sónicas a las que los sometían.
esta imagen de antiestrellas. Para los entendidos era un sonido ciento
por ciento Industrial, o lo que es lo mismo,
Los Residents ya pertenecen a esa ge- terrorismo musical, absolutamente reco-
neración autosuficiente y polifacética. To- mendable para despertar cerebros dor-
can más de 100 instrumentos, algunos
construidos por ellos mismos, con los que midos.
retuercen el sonido, le insuflan la corres-
pondiente dosis de caos y lo disparan sin Seguramente porque dudaban que al-
guien se atreviera a manejar aquellos soni-
dos contaminantes, junto a Daniel Miller
-otro precursor, con el grupo Normal-,
fundaron el sello Industrial Records, que
con el paso del tiempo cedería su nombre

para definir a este movimiento de francoti-
radores musicales. En 1981 se separaron,
y de su escisión nacen otros dos grupos
fundamentales de la segunda ola indus-
trial, Chris & Cosey y Psychic TV.

A partir de 1977, el carrusel de las mo-
das se dispara. Por un lado están los
punks, los mods, los skinheads y demás tri-
bus. Por otro lado, los amigos de las má-
quinas, los fans de la música industrial,
que configuran la facción más discreta,
aunque no menos eficaz. Manejan sus má-
quinas de ruidos. No tocan rock and rol¡
porque tendrían que aprender a tocar la
guitarra y eso les resulta aburrido. Y ade-
más, inútil, ante la inevitable invasión de

"YO SOY LA ANTENA. / YO CAPTO LA VIBRACIÓN. / Tú ERES EL
TRANSFORMADOR. / PÁSAME LA INFORMACIÓN" ('Radio-activity', Kraftwerk)

autómatas. Por cierto, Kraftwerk, en algu- Peter Principale. A sus conoci- Throbbing Cristie, autores de las
nos de sus conciertos, se suplantaban a sí mientos musicales añaden refe- experiencias más provocadoras de la
mismos por cuatro maniquíes que daban la rencias cinematográficas, tea- vanguardia británica.
cara en el escenario, se dirigían hacia sus trales y plásticas. Por eso, aun-
instrumentos, accionaban los potencióme- que empezaron haciendo músi- L as vanguardias
tros, acariciaban los teclados, efectuaban ca para restaurantes, pronto
unos pasos de danza y saludaban al público. sintieron la atracción de los electrónicas españolas se
multimedia, en los que acaba- mantienen Inmutables en sus
A pesar de las críticas adversas de los rían integrando todas sus habi- posturas radicales, dando la
defensores del viejo rock and roll, la ascen- lidades. espalda al techo, en favor de
sión del tecno industrial ya es inevitable, y en l os ritmos más repetitivos y
la cresta de la segunda ola se instalan otros Zoviet France es otro grupo
nombres importantes, como Cabaret Vol- cuya obra desborda lo estricta- estridentes. Conspiración es
taire, SPK, Tuxedo Moon, Test Dpt., Eins- mente musical. Ninguno de sus
türzende Neubaten, Suicide, Metabolist, discos tiene créditos, y algunos, un muestrario fundamental: son
Non, White House y una lista interminable. ni título, pero el tratamiento de todos los que están (entre
las portadas compensa cual- ellos, Esplendor Geométrico, La
En 1916, el Cabaret Voltaire era un antro quier olvido voluntario: una, Otra Cara de un Jardín o
de Zúrich en el que los dadaístas lanzaron confeccionada con tela de saco; Depósito Legal), pero no están
sus primeros manifiestos. A partir de 1974 otra, con papel de aluminio, y todos los que son. Faltan
será también el nombre de uno de los gru- ya el colmo, la casete doble Po- nombres Imprescindibles,
pos más sólidos del tecno evolucionado. Si pular soviet song and youth mu- como Macromassa,
en sus comienzos se conformaban con ex- sic, embalada en un estuche de Comando Bruno, Diseño
perimentar en sus casas con cintas, ahora cerámica con palo y pluma de Corbusier y Neo Zelanda.
son verdaderas biomáquinas, y utilizan la ave incluidos. La música tam- Casi todos tienen en común su
parafernalia electrónica más sofisticada a bién merece la pena: minimal vocación Internacionalista y
modo de apéndice personal, para fabricar electrónico para la mente y el su afición a las cintas tratadas,
techo-funk comercial; envidiosos sin duda de cuerpo. al mall-art, al videoarte, a las
los éxitos de sus vecinos de Shefield, Hu- I nstalaciones, a las
man League. Sin embargo, en sus últimas Los grupos de esta segunda hornada irri- performances y ahora a los
composiciones late todavía esa densidad so- tante de la música industrial coquetearon en espectáculos multimedia.
nora tan apreciada por sus seguidores. Fría, algún momento con el punk, o al menos con
obsesiva, sintética, pero a la vez asequible. algunas de sus propuestas. Tuxedo Moon,
Aunque los que persiguen sonidos más her- sin ir más lejos, pero también bandas legen-
méticos los desprecien, Cabaret Voltaire no darias, como Metabolist, o de culto, como
dejan de acusar el impacto de la era de la DAF. En un espacio similar, aunque no tan
información, y sus discos son verdaderos
documentos sonoros del presente para el fu- apasionado, se desenvolvieron Einstürzen-e Neubaten, intentando demostrar hasta el
turo. final la teoría del dadaísta Richard Holsen-
beck: "El ruido es la prueba de la acción".
Los australianos SPK han recorrido la Pero la palma en cuanto a agresión sonora
misma senda que Cabaret Voltaire, desli- se la lleva el norteamericano Non con sus
zándose con habilidad desde las catacum- temas infinitos.
bas de las vanguardias, en las que se limita-
ban a aporrear martillos y a arrastrar cade- En Europa cabe destacar a los holande-
nas sobre vigas de acero, hasta los progra- ses De Fabriek, especializados en construir
mas de televisión en los que ahora pasan re- secuencias minimales con fondos electróni-
vista a sus col¡~ sonoros a base de mucho cos; en Francia, Vivenza, un personaje au-
sintetizador y cintas preprogramadas. Y lo daz que no toca ningún instrumento y se li-
mismo sirve para Der Plan en la RFA. Co- mita a recorrer las fábricas para recoger con
menzaron como activos militantes de la ge- su grabadora los lamentos de las grúas, de
neración after-punk, interesados en utilizar las máquinas transfer y de las prensas; en
las nuevas tecnologías como correa de Italia tenemos a Mauricio Bianchi y su mú-
transmisión sonora de su particular sentido sica industrial para extraterrestres, y en Ja-
del humor cáustico y apocalíptico, y ahora pón, a Merzow, entregado, como tantos
los reclama la televisión alemana para que otros, a registrar los sonidos más chirriantes
produzcan la música de los programas in- del universo. Los amigos de las máquinas
fantiles. han creado una verdadera red planetaria
que se extiende desde San Francisco hasta
Tuxedo Moon es sin duda uno de los Moscú, pasando por Tokio o Sidney. Gra-
grupos más versátiles del techo industrial, no cias al correo, sus composiciones ruidistas
en vano en su formación coincidieron indi- viajan anónimamente de un extremo a otro
vidualidades tan competentes como Steven del planeta. Las tendencias se multiplican:
Brown, Blaine Reininger, Winston Tong y tape-collages, hardcore electrónico, audio-
mail o psicodelia industrial. Los habitantes
de este planeta salvaje defienden su biotopo
y protegen sus sonidos.

"VAMOS A SER LOS NUEVOS ABBA. NO SABEMOS MÚSICA, PERO HACEMOS
ÉXITOS CON LOS APARATOS Y UN POCO DE CEREBRO" (Phil Oakey, 1981)

THE HUMAN no ha llegado su The Human League, en 1981. De
LEAGUE tiempo: invitados a Izquierda a derecha, Oekey, Wripht,
ser teloneros de Catherall, Sulley, Burden y Callis.
EL JUGUETE QUE se AVERIÓ Talking Heada,
anuncian que pre- ta profesional (Jo Callia, ex Rezillos),
DIEGO A. MANRIQUE sentarán "30 minu- todo lo que suena son aparatos.
tos de entreteni-
Era el tipo de chico que reclama aten- miento audiovisual Dare pone banda sonora a 1982: ac-
ción. Phil Oakey, hijo de un empleado por control remo- cesible e inteligente, convierte a la Liga
de correos, había pasado su niñez reco- to" sin estar física- en prototipo del tecno más humano. Y
rriendo diversas localidades británicas. mente en el escena- sigue la racha con un homenaje a Mo-
Problemático en las aulas, destacaba rio; los neoyorqui- town (Mirror man, 1982) y el vigoroso
entre sus compañeros por su pelo, nos se asustan y les Keep feeling fascination (1983), aparte
siempre más largo o más corto de lo despiden. de un elepé como The League Unlimi-
habitual. Reside en la ciudad industrial ted Orchestra (Love and dancing, 1982),
de Sheffield cuando siente el calambre Sin embargo, remezcla para discoteca de Dare. Sin
del punk, que predica el cualquiera- Virgin no pierde la embargo, hay problemas: Oakey, re-
puede-salir-al-escenario. Una propues- fe: les financia su cién casado con Joanne, se envanece a
ta seductora para alguien sin oficio fijo propio estudio de la par que sufre un bloqueo creativo.
y que carece de la disciplina precisa grabación, donde
para dominar un instrumento. Oakey se hace cómoda- Pasan meses encerrados en el estu-
ve su oportunidad con un grupo local, mente Travelogue dio sin resultado. Rushent, obligado
The Future: Martyn Ware e Ian Marsh, (1980). Todavía no por compromisos previos, les abando-
técnicos en informática que se solazan entran en las listas na, y otros productores (Chris Thomas,
con los sintetizadores y que se han de singles. Los fra Hugh Padgham) intentan reconducir el
atrevido a asomar el hocico por Lon- casos crean fisuras: a finales de año, trabajo. Hysteria (1984) exhibe todo
dres, intentando colocar sus piezas ins- Ware y Marsh se marchan para formar este proceso: abunda la paja, y Phil se
t rumentales. Les dice que necesitan un una "sociedad anónima de produccio- despista al editar The Lebanon como
cantante, y le aceptan. De la misma nes, a medio camino entre PIL y Chic". primer single. Quedan destellos de su
forma casual entra Philip Wright, adic- Wright y Oakey recomponen el grupo: sagacidad para el melodrama cotidiano
to a los Ramones y la ficción científica, en un club descubren a Susanne Sulley en Loulse y Life on your own, pero se ha
que propone proyectar sus diapositivas y Joanne Catherall, dos chicas sin ex- revelado falible. En 1985, nuevo error:
en las actuaciones. Se bautizan como periencia, que son invitadas a bailar y Oakey graba un disco deslucido a me-
The Human League, uno de loa bandos hacer coros; también contratan a un dias con Giorgio Moroder.
en un juego de mesa bélico. músico de verdad, Ian Burden.
La táctica de recurrir a productores
Nacidos en 1955, todos son retoños Ya van encajando las piezas. A con sello personal da mejores resultados
del rock. Pero prefieren a James Brown principios de 1981 colocan en las listas en Crash (1986). Jimmy Jam y Terry Le-
y otros guerreros de la pista de baile. Boys and girls. Para el siguiente single wis, aventajados discípulos de Prince, les
Tampoco les gustan la guitarra eléctri- cuentan con un buen productor, Mar- acogen en Minneápolis y lea inyectan au-
ca (¡demasiado anticuada!) o la batería tin Rushent, y Sound of the crowd llega ténticas vitaminas de funk A pesar de
(un incordio a la hora del transporte). al número 12. Cuando Love action al- ello, lo esquemático de letras y melodías
No quieren sublevarse a lo punk, pero canza el número 3 ya no hay duda: rit- evidencia el empobrecimiento de la vi-
también rechazan el purismo rockero: mo bailable, estribillos cautivadores, sión de Oakey. El hechizo del pop, esa
hacen temas de Gary Glitter, citan to- fervor vocal y acabado refulgente. Phil, misteriosa mezcla de sinceridad emocio-
nadas publicitarias, se respaldan con con sus melenas a lo Lauren Bacaf y nal y artesanía sensorial, dejó de visitarle
imágenes de series televisivas... Su ob- detalles de ambigüedad sexual, es el regularmente desde 1982.
jetivo es confeccionar éxitos usando la elemento estelar, mientras que las chi-
nueva tecnología y obviando su igno- cas añaden un simpático amateurismo.
rancia musical. El contraste entre sus voces da credibi-
lidad a Don't you want me, que vende
Editan dos singles en una indepen- millones. Lo mismo ocurre con el ter-
diente antes de fichar por Virgin. Allí cer álbum, Dare (1981). Pop eterno, op-
ven que hay bellas ideas con una plas- timista o doliente, con envoltura sinté-
mación deficiente. Como compromiso tica: a pesar de contar con un guitarris-
graban I don't depend on you bajo el
alias de The Men y con músicos de se- HISTORIA DEL `ROCK'
sión. No pasa nada, y deciden conti-
nuar con su viejo nombre para su pri- PRÓXIMO CAPÍTULO
mer álbum, Reproduction (1979). Su
atroz portada y la aspereza de los sur- 'POP' DE LOS
cos no les ganan nuevos fans. Todavía OCHENTA

HISTORIA DEL `ROCK'

Frente al rutilante imperio del pop sintético, parte del rock
británico mantiene una actitud de resistencia, tanto en lo
musical como en lo ideológico. La principal fuente de estas
alternativas es la red de sellos independientes, cuyos artistas
tienen su eco en una influyente prensa musical. La descen-
tralización permite que zonas como Escocia o ciudades
como Liverpool se hayan convertido en vivero de notables
grupos. Generalmente, les une su politización -a veces, re-
flejada en las letras de las canciones; otras, únicamente en
sus actividades públicas-, un sentimiento nacionalista y su devoción por las gui-
tarras. Paradigma de estas actitudes son los irlandeses que componen U2 (en la
foto, su cantante, Bono).

SIN OLVIDAR LA DIMENSIÓN COMERCIAL DEL `ROCK', MUCHOS GRUPOS BRITÁNICOS
INTENTAN MANTENER CIERTO IDEALISMO Y EL CONTROL SOBRE SU CARRERA

AS A través del sello independiente Rough Trade, los 44
ALTERNATIVAS Smiths han triunfado con una producción discográfica
que no rehúye los temas comprometidos,
renunciando a soportes publicitarios como el videoclip.

Su cantante, Morrissey (con flores en la mano), se ha
convertido en un personaje polémico pero respetado.

"QUEMA LA DISCOTECA, / CUELGA AL BENDITO 'DISC JOCKEY, / PORQUE
LA MUSICA QUE SUENA / NO DICE NADA SOBRE CÓMO VIVES" ('Panic', The Smiths)

El rock gótico (en la foto, Alien Sex OLIAT roll al tener mayor audacia y oídos más fi-
Fiend) emergió en Londres gracias a nos que las grandes compañías, ajenos a
SE COME A DAVID
discográficas independientes. los rumores de la calle. Los
DIEGO A. MANRIQUE padres del invento pueden ser
actory es la más locales de actuaciones, tien-
enigmática de las Ya no tienen las compañías independien- das de discos, revistas aventu-
i ndependientes británicas. tes aquel empaque de santidad, de cruza- reras, estudios de grabación,
Fundada por Tony Wilson, un da contra el corrupto establishment disco-
presentador de televisión, se gráfico. Reducidas a la marginalidad o aficionados devotos, renega-
ha distinguido por tácticas tan convertidas involuntariamente en bancos dos de las compañías fuertes
heterodoxas como editar de pruebas de las multinacionales, han o músicos laboriosos. En la
discos con bellas portadas en asimilado duras lecciones de economía segunda mitad de los setenta
l as que no hay textos que empresarial o se han contagiado del ansia les une el deseo de dar salida
i dentifiquen al artista, o de triunfo que define el momento presen- al extraordinario florecimien-
renunciar a la promoción te. Sin embargo, no es posible minimizar to de nuevos grupos rebeldes.
habitual para dar un toque su aportación, sobre todo en el Reino Son realistas en lo financiero
exclusivo a determinados Unido. Por las independientes han pasa- (mínimos gastos de funciona-
lanzamientos. Algunos de sus do luminarias como Police, U-2, Simple miento, presupuestos de gra-
conceptos han inspirado a Minds, Elvis Costello, Adam & The bación ajustados), están en
compañías como la belga Les Ants, Human League, UB 40 y 100 más. contacto directo con su mer-
Disques du Crépuscule o la Gracias a su existencia han prosperado la cado potencial y desean dar
española Nuevos Medios. new wave, el ska, el tecno, los sonidos in- un corte de mangas a sus es-
dustriales, el punk positivo, el rock gótico, cleróticas hermanas mayores.
el electro funk, el nuevo heavy metal y todo Tienen en su favor el hecho de
tipo de aleaciones o resurrecciones nos- que el Reino Unido sea un te-
tálgicas. rritorio relativamente peque-
ño, en el que -a diferencia de
Las indies surgen como movimiento Estados Unidos- se pueden
compacto en los días del punk. Recogen el establecer redes alternativas
testigo de sellos míticos (Sun, Chess, At- de distribución de cierta efica-
lantic, Specialty) que propiciaron en los cia, donde tienen enorme in-
años cincuenta la irrupción del rock and fluencia los semanarios musicales (predis-
puestos hacia la novedad y las propuestas
descentralizadoras) y existen amplias mi-
norías curiosas. Y dan un vigoroso revol-
cón al mundo musical británico.
Gran fiebre. Brotan iniciativas en Bel-
fast (Good Vibrations), Manchester
(Factory), Liverpool (The Zoo), Co-
ventry (2-Tone), Glasgow (Postcard),
Edimburgo (Fast Product) o Londres
(Stiff, Rough Trade, Cherry Red, Mute).
Cada una tiene su orientación musical, su
actitud política, sus métodos de funcio-
namiento. Las hay oscurantistas, desor-
ganizadas, anarquistas, altamente profe-
sionalizadas, ambiciosas, eclécticas o fa-
náticas, pero su efecto acumulativo es
deslumbrante. Oleadas de grupos fla-
mantes salen al mercado con ofertas iné-
ditas. Hay margen para locuras dentro de
la concepción del pop como negocio lúdi-
co: se lanzan singles dobles o plásticos en-
vueltos en disparatadas fundas, se juega
con el afán de los coleccionistas por te-
nerlo todo; Cherry Red llega a comercia-

"LAS INDEPENDIENTES DICEN QUE SON ÚNICAS, QUE SON PURAS, PERO SI
VENDEN SE DEJAN ABSORBER POR LAS GRANDES" (Dave Robinson, sello Stiff, 1984)

lizar un elepé recopilatorio de su catálogo badoras y distribuidoras, forzando a las Depeche Mode, grupo independiente
por un precio imposible (menos de una li- supervivientes a prescindir de nociones al- con ventas que no se ha pasado
bra). Abundan las historias de éxito: al ha- truistas y organizarse como cualquier otra a sellos más prósperos.
ber descendido las ventas de singles, pue- empresa. Finalmente, a mediados de los
den entrar en el hit parade con holgura. ochenta se empobrece la oferta indepen- ough Trade nace a partir de
Les ayuda la inquisitiva Prensa musical y diente, que llega a ser caricaturizada una tienda de discos londinense
el programa radiofónico de John Peel en la como un gueto de tribus encerradas en sí especializada en
mismas, generando surcos incompetentes producciones oscuras.
BBC, que descubren nombres infatigable- y tediosos. Organizada como una
mente y consolidan esa abigarrada oposi- cooperativa, mantiene severos
ción: la revista de la industria, Record Bu- Pero el concepto sigue funcionando. filtros ideológicos y se niega
siness, reconoce el fenómeno y crea los in- Tal vez sellos más recientes, como Gol i nicialmente a firmar contratos
die charts, lista de éxitos de las indepen- Discs, Kitchenware, Blanco y Negro, de larga duración, dejando a
dientes. Al mismo tiempo que las estrellas Creation o Some Bizzarre, carezcan del l os artistas la opción de
de este underground se dan a conocer en idealismo de sus predecesores, pero han abandonar el sello en el
otros países, la idea de fundar indepen- encarrilado un fenomenal número de pro- momento que deseen. Algunos
dientes prende por todo el mundo. puestas frescas. Posiblemente la envidia reveses económicos les
ante las fortalezas del entretenimiento sea obligan a replantearse tanta
Es una ofensiva en toda regla. Pero los ahora más viva que la indignación contra generosidad. Su mejor fichaje
amenazados gigantes del disco reaccionan sus métodos, pero ya se sabe que el pop es han sido los Smiths, que les han
con flexibilidad: crean sellos satélites (Ko- un negocio volátil, de cortas vidas profe- proporcionado presencia
rova, Radar, Pre), se alían con las indies sionales, sin segundas oportunidades: el comercial e innumerables
pujantes, ofreciendo sus eficientes servi- éxito palpable es una fruta más apetecible conflictos: al final de su
cios y su capital, o simplemente agitan que la autonomía discográfica. Afortuna- relación, el grupo los ha
cheques delante de figuras apetecibles. En damente, en la periferia siguen respirando abandonado por una
realidad, las pequeñas marcas son compa- irredentas iniciativas que atienden cultos multinacional.
tibles con su imperio: experimentan nue- minoritarios o músicas malditas. Praxis
vas tendencias, dan el biberón a genios vital para ese monstruo de mil cabezas
primerizos, animan el mercado, el trabajo que es el rock contemporáneo.
sucio. Las grandes sólo tienen que esperar
a que se confirmen sus descubrimientos
para sacarlos de la tercera regional y lle-
várselos a primera división. Si en sus ini-
cios los artistas acudían a las indies por
afinidades ideológicas, voluntad de expre-
sarse libremente o imposibilidad de entrar
en las compañías establecidas, ahora asu-
men que ése es el primer paso para darse a
conocer, a la espera de que llegue el oron-
do pescador con el cebo adecuado.

El espejismo de la independencia se
evapora lentamente. Resulta que los in-
surgentes no tienen músculos de distribu-
ción y promoción, no pueden rentabilizar
éxitos: hay carreras que se atascan cuan-
do la editora carece de liquidez para pren-
sar más copias de una referencia caliente.
Las limitaciones económicas se hacen

sentir cuando hay que realizar produccio-
nes costosas o giras ambiciosas. El mismo
estandarte se deteriora cuando las listas
de indies se llenan de discos que cumplen
el requisito mínimo (son producto de hu-
mildes marcas), pero contienen músicas
ramplonas. Llegan las hecatombes de gra-

"NO COMPRENDO LA OBSESIÓN BRITÁNICA POR LA FAMILIA REAL. UN POCO DE
CIANURO EN EL DESAYUNO NOS LIBRARÍA DE ESOS PARÁSITOS" (Morrissey)

Morrissey (con camisa de lunares) y HE SMITHS, (bajo) y Mike Joyce (batería); con la ex-
Johnny Marr pusieron el peso de los cepción del último, militante en oscuros
Smiths para relanzar a Sandie Shaw. CEGADORAS grupos punks, ninguno atesoraba excesiva
experiencia musical.
La admiración de LUCES DEL NORTE
Morrissey por la estética y La atención sobre el grupo se centra
ciertas músicas de los JUAN CERVERA desde el inicio en Morrissey: solitario e in-
sesenta lo llevó a recuperar en trovertido, narcisista y defensor del celi-
1984, con éxito, a Sandie Es poco probable que los asistentes a la bato, vegetariano y exhibicionista, charla-
Shaw. La cantante volvió a los primera actuación pública de los Smiths, tán y mitómano. Contradictorio. Polémi-
charts con tres canciones de celebrada el 4 de octubre de 1982 en el co. La naturalidad y la emoción son sus
Morrissey-Marr y el respaldo club Hacienda de Manchester, como telo- armas. Morrissey habla de soledad, inco-
i nstrumental de los Smiths. neros, intuyeran que estaban presencian- municación y desengaño amoroso. Relata
Igualmente, Morrissey utiliza las do el debú de uno de los fenómenos más en viñetas cotidianas las partes más grises
cubiertas de los discos para destacables del pop británico. de la vida de provincias y recrea sucesos
dar rienda suelta a su locales teñidos de una agria ironía. Los
mitomanía: Terence Stamp, Anterior a esta aventura, Steven Pa- imaginativos y nítidos dibujos sonoros de
James Dean, Jean Marais, Jose trick Morrissey (voz, letras) había intenta- Marr, con su extraordinaria técnica guita-
Dallesandro, Alain Delon, do, sin fortuna, hacerse con un lugar en el rrística, aportan el contrapunto perfecto
Truman Capote o Elvis Presley mundo del periodismo musical. Johnny para conjugar en canciones ágiles y comu-
han prestado su imagen a la Marr -nacido John Maher- (guitarras, nicativas fogonazos de pop directo, ro-
música del grupo. música) halló en Morrissey el apoyo idó- mántico y enérgico. Una regeneración en
neo para concretar en canciones las melo- toda regla de una brillante y casi perdida
días que surgían de su guitarra. La base tradición de música inglesa.
rítmica se completaría con Andy Rourke
Unas sesiones radiofónicas en el pro-
grama de John Peel en la BBC convierten
a los Smiths en una banda comentada. En
1983 firman contrato con la independiente
Rough Trade y sus dos primeros singles,
Hand in glove y This charming man, les re-
portan sendos triunfos y una desmesurada
expectación. No defraudan. Su primer ál-
bum, The Smiths (1984), es una admirable
obra que encierra toda su filosofia a través
de bellísimas baladas quejumbrosas y de
briosos retales de rock vibrante y podero-
so. Sus siguientes entregas, Meat is murder
(1985) y The queen is dead (1986), lejos de
mostrarlos acomodados, los presentan
cada vez más maduros. El tan criticado
amaneramiento vocal de Morrissey se
desvanece y su garganta se descubre más
eficaz que nunca acompañando las inago-
tables composiciones de Marr. Entre elepé
y elepé, un reguero de rotundos singles que
se recopilan en Haful of hollow (1984) y
The world won't listen (1987); para el reacio
mercado de EE UU editan un doble de
grandes éxitos, Louder than bombs (1987).

El precio de un triunfo tan indiscutible
se paga. El cuarteto se convierte en la dia-
na favorita de un sector de crítica intransi-

gente. Son acusados en diversos momen-
tos de su carrera de pederastas, machis-
tas, racistas y homosexuales, pero la ima-
gen y creatividad de la banda no se resien-
te en absoluto. Si exceptuamos el corto
abandono de Andy Rourke, sustituido
temporalmente por Craig Gannon, el
cuarteto continúa cohesionado y sin fre-
nar en su febril actividad. El inminente
trasvase a una multinacional (EMI) no pa-
rece que vaya a rebajar el siempre alto ni-
vel. Luces del norte en el sombrío panora-
ma de los ochenta.

"LIVERPOOL ES UN LUGAR DE PANDILLAS, MUY INSULAR. TODOS
NOS DESPRECIAMOS MUTUAMENTE EN BROMA" (Julian Cope)

LIVERPOOL: dos canciones que Tras disolver The Teardrop S
sabían un día y al Explodes, Julian Cope ha iniciado una
DE LOS `CUATRO siguiente debuta peripatética singladura en solitario. 0ó
ban de teloneros de
FABULOSOS' A LOS los Yatchs. esconectados del resto U
del mundo durante los años
`TRES CRUCIALES' Sin pretenderlo, setenta, los músicos más a
Big in Japan esta- j óvenes de Liverpool
IGNACIO JULIÁ blecieron una nue- desarrollan una adoración
va forma de enten- especial por Love, Doors, Velvet
Símbolo viviente de lo que la decadencia der la música que Underground y otros grupos
industrial puede hacerle a una ciudad, Li- marcaría al resto norteamericanos, influencia
verpool es universalmente conocida por de grupos que iban que se revela decisiva en sus
un dato bastante más frívolo: haber dado a devolver su credi- primeros discos. Julian Cope,
bilidad musical a la aparte de emprender una
vida al grupo pop por antonomasia, los fa- ciudad en los cruzada particular para
bulosos Beatles. Esta ciudad del norte del ochenta. Big in Ja- reivindicar al melodramático
Reino Unido, que conoció el significado pan eran músicos Scott Walker, también hace
del término crisis económica mucho antes aficionados y au- buen uso de sus extensos
de que éste se pusiera de moda, salió a flo- toindulgentes, pero conocimientos sobre el rock de
te musicalmente con John, Paul, George, también innovado- garaje.
Ringo y los conjuntos merseybeat que se res y divertidos.
apuntaron a la movida, para sumirse nue- Como respuesta a
vamente en la oscuridad cuando el fenó- su atrevimiento,
meno remitió. Julian Cope, Pete
Wylie, Budgie y
Durante una década larga, ser músico Pete Griffiths for
en Liverpool y no acercarse al modelo im- maron, también en 1977, The Nova Mob,
puesto por los Beatles era casi una maldi- grupo que complementaba sus desvaríos
ción. Tuvo que llegar el punk y ensuciar un musicales con una campaña de descalifi-
poco más las turbias aguas del río Mersey cación de Big in Japan que incluía murales
para que esta urbe formada por una amal- y camisetas, diseñados para destruir la re-
gama de nativos mezclados con emigran- putación de la competencia.
tes españoles, italianos, irlandeses, chinos
y africanos recuperara su tradicional vo- Antes de militar en The Nova Mob, Ju-
cación sonora. Los liverpudlians no sólo
poseen el nivel más alto de delincuencia y lian Cope formó parte de los dudosos The
paro juvenil, también son los súbditos de Crucial Three, nombre profético si se tiene
su graciosa majestad que más fuman (el en cuenta que los otros dos eran lan
nivel de cáncer de pulmón es el doble que McCulloch y Pete Wylie. Al parecer, toda
la media del resto del país) y beben. Por su biografia se reduce a unos cuantos en-
ello no resulta extraño que sientan una cuentros fortuitos en casa de Pete, donde
predisposición natural hacia los ritmos interpretaban infames versiones de Velvet
ebrios del rock and roll. Underground que hacían sonrojar al ver-
gonzoso McCulloch. Hubo otros grupos,
El precedente de este renacimiento transitorios o imaginados, como The
musical debe situarse en Deaf School, Mystery Girls, Industrial Domestic, The
grupo liderado por Clive Langer, que con Love Pastels o A Shallow Madness, que
su excéntrica personalidad pop se adelan- les sirvieron de escuela improvisada hasta
tó varios años al concepto new wave. que, a finales de 1978, McCulloch funda
Como suele ocurrirles a los pioneros, Deaf Echo and the Bunnymen, Cope hace lo
School se separaron en 1978 sin haber su- propio con The Teardrop Explodes y
perado la fastidiosa etiqueta de grupo de Wylie pone en marcha Wah! Heat. El trío
culto. La antorcha fue recogida por un crucial se dividía para imprimir nuevo co-
grupo poco menos que mítico en la escena lor a la habitualmente gris, frustrante y
de Liverpool: Big in Japan. Eran Bill sórdida Liverpool. La cosa estaba en
Drummond (guitarras y voz), Kevin Ward marcha.
(bajo y voz) y Phil Allen (batería), quienes,
inspirados por la actuación de los Clash Respaldado por la eminencia gris del
en el club Eric's, en 1977, y con equipo grupo, Will Sergeant (guitarra), y acompa-
prestado por Deaf School, ensayaron las ñado por Les Pattison (bajo) y Pete de
Freitas (batería que sustituyó a la inicial
caja de ritmos), McCulloch da cuerpo a
un sonido brillante, ligeramente psicodéli-
co (en el sentido puramente auditivo), ur-
gente, eléctrico, épico, de textos crípticos
y personales. Con canciones del calibre de
Rescue, Do it clean o Pictures on my wall, los

"HACEMOS MÚSICA DE TANTA ALTURA COMO LAS OBRAS DE SHAKESPEARE O VAN GOGH,

NADA QUE VER CON U2, SIMPLE MINDS Y ESOS CHARLATANES" flan McCulloch, 1983)

Echo and The Bunnymen Bunnymen fabri- a mediados de 1979, empiezan a ser consi-
paseando por las ruinas can un asombroso derados figuras centrales de un nuevo so-
del Liverpool industrial. primer elepé, Cro- nido merseybeat, que algunos piensan pue-
codiles, que en 1980 de ser el detonante de una segunda edad
f es recibido con re- de oro musical para Liverpool.
ó verencia por crítica
°> y público. En esce- Cuando aparece su primer elepé, el es-
Ú na resultan algo es- tupendo Kilimanjaro (1980), David Balfe
á táticos, por lo que (socio de Drummond en Zoo) y Allan Gill
Wxx Bil Drummond, su han reemplazado a los dos guitarristas en
m representante y ge- teclados y guitarra, respectivamente. El
rente del sello inde- disco, una excelente colección de cancio-
El cielo parece lleno pendiente Zoo, les nes pop endulzadas por la afición psico-
sugiere adoptar délica de Cope y potenciadas por arreglos
cuando estás en la cuna. / La vestimentas y para- duros que invitan al baile, sufre de una
ll uvia caerá y lavará tus fernalia de camu- producción algo plana que le resta poten-
sueños. / Las estrellas son flaje militar, que cial radiofónico. A pesar de esto, The
estrellas y brillan con fuerza. / dan a sus actuacio- Teardrop Explodes son un grupo en el
Ahora le escupes al cielo nes un aire entre vértice del éxito cuando aparece su segun-
porque está vacío. / Y hueco, misterioso y apoca- do álbum, Wilder (1981), más logrado aun-
y todos tus sueños han sido líptico. que menos atractivo a escala comercial.
puestos a secar. / Las Pero, tras nuevos cambios en la forma-
estrellas son estrellas y brillan Su segundo dis- ción, incluso con Troy Tate, el sublime y a
tan fríamente" (Stars are la vez ridículo Cope decide desmontar el
stars, McCulloch, Sergeant, co, Heaven up here grupo. Los problemas de ego y los efectos
Pattison, De Freitas). secundarios del LSD terminaban así con
(1981), los sorpren- un proyecto que parecía tener un buen fu-
de explorando pai- turo por delante.
sajes gélidos y de-
sérticos donde de- De potencial teen-idol a figura de culto,
sarrollar su muy Julian Cope ha grabado tres elepés en soli-
particular visión tario y ha regresado a primera línea con
sonora. En el vera- una apetecible propuesta donde la comer-
no de ese mismo cialidad y el talento conviven sin proble-
año emprenden su ma. Sus dos primeros discos, editados
primera gira mun- ambos en 1984, World shut your mouth y
dial presentándose Fried, le contemplaban como a otro margi-
en América, Aus nado genial dispuesto a quemar sus naves
tralia, Europa y su propio país. Después en nombre de la demencia y el arte convul-
de un lapso creativo en el que recargan su sivo, pero Saint Julian (1987) lo ha aupado
inspiración, publican el penetrante Porcu- de nuevo al escaparate del pop con temas
pine (1983), disco áspero y ejemplar del tan redondos como Trampolene. Sólo falta
que se extraen como singles un par de can- que sustituya a algunos majaderos que
ciones, The cutter y The back of love, donde normalmente ocupan los primeros pues-
demuestran que han estado puliendo su tos de las listas para que este mundo sea
arte. Con Ocean rain, que sale al año si- un poco más justo.
guiente, rebajan el impacto de su sonido y
tienden hacia un lirismo ingenuo que les El renacimiento de Liverpool, no obs-
gana la antipatía de un sector de la crítica. tante, no hubiera sido posible sin la apor-
Desde entonces se han limitado a reciclar tación de propuestas más vendibles, cuya
sus canciones más conocidas en un reco- más reciente expresión la encontramos en
pilatorio al uso, manteniéndose alejados Frankie goes to Hollywood. Grupos como
del mundillo musical, hasta volver en el Orchestral Manoeuvres in the Dark (que
verano de 1987, como si no se hubieran han diluido su inicial afán experimental en
marchado, en muestra de su total confian- tonadas insípidas), Dead or Alive (el circo
za en sí mismos. regentado por una criatura tan exuberante
La historia del divino Julian Cope y de y bizarra como Pete Bums), A Flock of
su primera encarnación como cantante de Seagulls (sonidos tecnocosméticos que
The Teardrop Explodes es bastante más únicamente lograron embaucar al público
compleja. Cope es un personaje excéntri- norteamericano) y China Crisis (quienes
co, ególatra, genial a ratos y muchas cosas no han dudado en ir transformando las
más. Galés de nacimiento, pero estudiante enseñanzas de Bowie-Eno en Low para
en Liverpool, formó el grupo en el otoño llegar a un sonido pastoral sólo apto para
de 1978 con Paul Simpson (guitarra), hemofílicos). Un abanico de grupos y
Mike Finkler (guitarra) y Gary Dwyer nombres de muy diversa índole que en
(batería); él se encargaba del bajo. Con su conjunto han devuelto al mapa del pop la
segundo single, Bouncing babies, publicado ciudad que vio nacer a los Beatles.

"LA CLAVE ES QUE SONAMOS MUY HUMANOS, SIN GRANDILOCUENCIAS
DE SUPERESTRELLA NI LÁGRIMAS INTIMISTAS" (Roddy Frame)

ESCOCIA do y producido por Roddy Frame, cuyos discos con
EN EL CORAZÓN Mark Knopfler- Aztec Camera muestran la faceta tierna
muestran a un ta- del pop escocés.
DAVID S. MORDOH lento reflexivo y
sensible del que, Por estar ligado el pop a lo
Tierra fecunda en talentos musicales, Es- pese a un período efímero, solamente han
cocia siempre ha procurado exportar na- sin grabar superior sobrevivido con éxito los
cionalismo a través del canal de la cultura. a los tres años, aún productos escoceses más
Al igual que muchas regiones europeas se espera lo mejor. ligados al rock, como Simple
que se sienten mutiladas por un poder También con Post- Minds. Tras ellos han venido Big
central, necesita símbolos que mantengan card empezaron Country (de las cenizas de
permanentemente viva la llama de la iden- Orange Juice, qui- Skids) con rugidos suavizados
tidad. Así, hablar de un grupo escocés jotes del pop con- por melodías tradicionales.
suele implicar referencias a una serie de centrado de Glas- Waterboys añaden a su
valores -convicción, honestidad, digni- gow. Instrumen- delicado aire épico las
dad- en constante demanda dentro del tistas primarios di- pinceladas poéticas del
compositor Mike Scott,
rock. rigidos por Edwyn corriendo la herencia
Collins -fanático americana -entre el country
Durante años, Escocia infiltró a sus de Velvet Under- y Lou Reed- a cargo de Lloyd
contados protegidos con mimo y dedica- ground- han es- Cole.
ción, buscando ocupar el mayor espectro crito una de las pá-
posible en los diferentes géneros. Lulú o ginas más ricas de
Rod Stewart, en el pop de masas; Al Ste- la década con los
wart o John Martyn, para los más exigen- álbumes You can't
tes. Unos enamorados del soul, otros ten-
tados por las posibilidades expresivas del hide your love fore-
folk. Sin embargo, entre 1980 y 1984 sur-
ge de allí un conglomerado de nombres ver (1982), Rip it up
suficientemente numeroso como para (1982), Texas fever
crear una etiqueta nueva: "el sonido de la (1984) y Orange
joven Escocia". Es un término rescatado Juice 111 (1984),
de las consignas de Motown que busca todos para Poly-
revivir el espíritu de aquellas grabaciones gram. Menos suer-
semifamiliares. Lo propaga Postcard Re- te tuvieron Josef K
cords, compañía gobernada por Alan (Edimburgo), el
Horne, astuto empresario que cree en el producto más contundente del sello. Es-
ímpetu juvenil. No pretende copiar el so- peraron en el anonimato su oportunidad
nido de Detroit, aunque sí la estrategia. hasta disolverse, aunque el jefe de filas,
Fichajes extremadamente jóvenes, con- Paul Haig, con esquemas más suaves
diciones de contrato leoninas, ambiente esté obteniendo el premio a tanta pa-
de clan entre los músicos de los distintos ciencia. Tampoco han sido afortunados
grupos y sobre todo agresividad comer- los expertos en variadas gamas de pop-
cial, ejemplo para las independientes dis-
puestas a no ceder ante las presiones de rock.
las multinacionales.
Pero la escena escocesa no sólo de-
Grupos más tarde venerados coinci- pendía de Postcard. Al mismo tiempo,
dieron en sus comienzos en las filas de varios grupos trabajaban esquemas pa-
Postcard. Muchos de ellos no grabaron ralelos. Headboys, con su poder pop im-
con Horne más de dos singles, atracción personal, rozaron la fama; Europeans
suficiente para cautivar a los cazatalen- propusieron aristas afiladas con ramala-
tos reluctantes de las grandes discográfi- zos tecno, Scars emularon el nuevo soni-
cas. Es el caso de Aztec Camera, proyec- do de Liverpool; el light pop encantador
to ideado por un excelente compositor salpicado de folk de Friends Again; viñe-
tas entre lánguidas y sombrías de Blue
procedente de East Kilbride, colmena su- Nile; el sonido único, barroco y apasiona-
burbial de Glasgow, llamado Roddy Fra- do de Associates, dúo comandado por la
me. Guitarrista ágil y joven, dotado para voz de Billy MacKenzie; la infantil y se-
lo bello, se consagrará con un par de ál- ductora Clare Grogan, de Altered Ima-
bumes, el independiente High land, hard ges, paseándose eufórica por los arreglos
rain (1983) y Knife (1984) -más recarga- espectaculares de Martin Rushent en éxi-
tos como Happy birthday, See those eyes y
I could be happy; las espumosas caricatu-
ras de los Rezillos /Revillos. Todos ellos

pequeños héroes de barrio, pequeños ar-
tesanos de pequeñas canciones para
grandes momentos del discurrir coti-
diano.

"TOMA ESTA CANCIÓN DE LIBERTAD Y ÁRMATE PARA LA LUCHA. NUESTROS
CORAZONES DEBEN TENER EL VALOR PARA SEGUIR MARCHANDO" (Alarm, 'Declaration')

The Alarm, grupo A VUELTA ruleta del revival. Además, los punks han
de origen galés fascinado por crecido y el rock supone su reconversión
DE LAS GUITARRAS más asequible, mientras sus hermanos pe-
l a estética del western. queños reaccionan al caos con la búsque-
J. MARTA REY da de valores estables y una ética que ha-
Guste o no, la música ble de futuro. Justo lo que el nuevo movi-
popular tiene influencia en la La regeneración musical que abre los miento ofrece.
gente. Yo he intentado coger ochenta proscribe al rock y confina las gui-
mis raíces y combinar esa tarras -su símbolo más visible- a tareas Como el spaghetti respecto al western
música con situaciones de servicio. Para los nuevos estetas, el clásico, el nuevo rock nace como una inte-
humanas actuales que me rock es la cabeza de turco contra la que lectualización distorsionada que subraya
afectan fuertemente, lanzar los dardos de su autoafirmación. su faceta socio-misional. Son himnos de
esperando que pueda añadir Su sola mención es pecado, y practicarlo lucha y esperanza; generalizaciones tópi-
más comprensión entre equivale al descrédito. El pop es la contra- cas esgrimidas con ardor y rasgos físicos
gentes de diversas culturas y seña. Hasta que la inexorable dinámica in- diferentes del pasado: espinosa fibra gui-
clases sociales. Creo que dustrial lo desvirtúa en exportable formu- tarrística, énfasis épico y nervio contem-
hacer el esfuerzo es mejor que lismo de teñidos capilares y sonoros. poráneo, que prefieren el mensaje inspira-
sucumbir a la apatía que Como ocurrió en los sesenta, frente a la cional -aunque sea oportunista- antes
domina los países occidentales. artificiosidad resurgen exigencias de com- que la angustia del cambio de peinado.
Los grupos de pop tienen promiso con la realidad de a pie, de nueva
más responsabilidad con la trascendencia; se redescubre al rock como Compañeros de viaje fueron Alarm, ga-
gente que les apoya que mensajero idealista y se rehabilita el pro- leses de voz encrespada (Mike Peters) e
tratarlos como meras cifras de tagonismo rebelde de las guitarras. impactantes revigorizaciones de Dylan y
mercado". Clash. Pretendieron reinventar el folk, y
Stuart Adamson, de Big Vuelven los pelos largos, esta vez en pusieron de moda sus pelambres enhies-
Country frondosos penachos, y la música se recru- tas profiriendo moralistas -pero incon-
dece. Esta infiltración gradual del rock, cretas- arengas de combate y vehemen-
que cambiará sonido, imagen y actitudes cia heroica de fulgurante ascenso (Decla-
de la década, tiene prólogo en el punk posi- ration, 1984). Les otorgaron oficialmente
tivo. Al aval de pioneros como Joy Divi- la llave de oro de Los Ángeles, que no
sion o Echo and The Bunnymen, recon- abrió, sin embargo, la puerta del mercado
versores cruciales del patrimonio rockero, americano, pese a su más convencional
se alían otros factores: es su turno en la Strength (1985). Desde Escocia llegaron
Big Country, que fueron la sorpresa de

1983 con su sonido gaitero, emitido a dos
guitarras, que Stuart Adamson ya ensayó
con sus Skids. Dieron vida a una cadena
de triunfales singles iluminados de fervor
emocional y horizontes de grandeza de in-
mediata seducción: parábolas con paisaje
local (The Crossing, 1983), el declive indus-
trial (Steeltown, 1984) o la armonía utópica
(The seer, 1986). Tres discos de gran éxito,
ilustres invitados (Kate Bush), pero men-
guantes ideas. Distintas ideas tienen los
Lords of The New Church, supergrupo de
refugiados del punk, que revenden una
burlona pose de malditos y superchería li-
túrgica. Sus prelados, Bryan James (Dam-
ned) y el americano Stiv Bators (Dead
Boys), se conocieron en el Nueva York
salvaje de 1977. Tras mutuos bandazos en
solitario, un sobresaliente álbum homóni-
mo (1982) los presenta como original
cuarteto de rock que, bajo apocalipsis y
fantochadas, encierra feroces críticas y lú-
cidos estribillos, envilecidos progresiva-.
mente en un vano intento de aceptación
americana. Una tentación que evita el bri-
tánico Kirk Brandon al reavivar en 1982 el
fuego airado de sus Theatre of Hate con el
rock polifacético de Spear of Destiny: des-
garro sobre el mapa de la injusticia en tres
álbumes, de la austeridad al refinamiento.
Suspendidos en 1985, Brandon vuelve
ahora con Marco Pirroni (ex Ant).

"SOY LA PERSONA QUE HA HECHO PERFECCIONISMO CON LOS INSTRUMENTOS
ACÚSTICOS; IGUAL QUE TREVOR HORN CON LOS SECUENCIADORES" (Robin Millar)

Weekend, importante grupo jazzy de

breve vida. De izquierda a derecha,
Simon Booth, Spike y Alison Statton.

MIRANDO
HACIA ATRÁS SIN EA

SANTI CARRILLO (guitarra), quien, junto a un viejo zorro del El productor Robin Millar,
jazz británico, Larry Stabbins (saxo), y a
Todo empezó con Colossal youth (1980), el una cantante experimentada, Julie Ro- un músico cuya casi total
primer y único elepé de un trío de jóvenes berts, dan vida a una empresa hinchada ceguera no le ha impedido
galeses de Cardiff con serios atisbos de de temperamento y compromiso: Working dominar los secretos del
minimalismo en sus notas. Los hermanos Week. Con dos elepés ( mejor Working estudio de grabación, fue el
Moxham, Stuart y Philip, y la dulce Alison nights, 1985, que Compañeros, 1986) de- artífice fundamental de los
Statton redujeron los esquemas musicales muestran manejar más jazz por estría vi- orígenes y consolidación de
de Young Marble Giants a una escueta ex- nilizada que sus antecesores: orquestacio- l a onda jazzy. Sus producciones
presión: lo exiguo como garantía de crea- nes fogosas, impulsos desbocados, vigor y para Weekend (La variété),
ción depurada, nuevo descubrimiento en movimiento, más robustez en las formas. Working Week (Working
el pop británico de los ochenta. La apari- Todo lo contrario a la saga Everything But nights), Everything But The
ción por generación espontánea de los Jó- The Girl, tierna pareja formada por Ben Girl (Eden y Love not money),
venes Gigantes de Mármol, radiografian- Watt y Tracey Thorn, que emprende su Sade y Fine Young Cannibals
do hipnóticamente lo más básico del pop, camino con una apropiación del Night and coincidieron con un momento
es referencia obligada para la variété, los day, de Cole Porter. Doble afirmación: la de esplendor de esta
grupos posteriores que encauzaron toda- referencia eterna (una garantía) y la apor- revitalización de las formas
vía mejor este camino: pasión, pero tam- tación personal (una valiente y sedosa suaves. Un sonido ya
bién distanciamiento, obsesiones particu- reinterpretación). Ya con tres elepés a sus aceptado plenamente: son
lares de épocas, sonidos y artistas rescata- espaldas, han ido debilitándose en sus ap- muchos los elepés de éxito
dos con nostalgia y bastante buen gusto. titudes al no acomodarse a su suerte ini- con al menos un tema de
cial e incorporar, con menor fortuna, gui- ambiente jazz (contrabajo,
Sin la teórica frialdad de los Young tarras correosas (Love not money, 1985) y saxo, batería tocada con
Marble Giants, los hermanos Moxham se violines inconvenientes (Baby, the stars shi- escobillas).
aventuraron a seguir gestando inmarchi- ne bright, 1986) al relajado acierto de su
tables gotas de pop con The Gist (Embrace primer trabajo (Eden, 1984). Ben Watt y
the herd, 1983), su nuevo proyecto: la evo- Tracey Thorn en solitario, y ella, además,
dentro del trío femenino Marine Girls,
lución de lo na f como fórmula en tren de han contribuido a extender su particular
bucolismo otoñal a través de canciones
desarrollo. Alison Statton, la cantante, que entroncan con la tradición de folk sin-
encontró en Weekend el medio ideal para gers crepusculares. Talante acústico que
desentumecer sus caricias vocales a base
de quiebros tomados del jazz, los ritmos
latinos y la cimbreante bossa nova. Un tex-
to en la contraportada de su elepé La va-
riété (1983) da la clave al respecto: "La va-
riété, término francés empleado en la radio
popular, designa a todo lo que no es rock
fuerte; música facturada con ánimo de di-
versidad y profundidad". El espíritu de la
onda suave u onda jazzy quedaba instaura-
do. Todos en busca de un estilo, de un to-
que de clase. La (pretendida) exquisitez
de planteamientos de los estilistas -segui-
dores del Bryan Ferry de esmoquin- los
aleja del rock como ejercicio musical; pre-
fieren dirigirse hacia fusiones y mestizajes
enriquecidos con la chispa de lo conocido
y el riesgo de la incógnita. Jazz, ecos afri-
canos u orientales, suavidades tropicales,
soul ocasional, swing cadencioso, tiempo
de reggae... El cóctel dispuesto para ir sa-
boreando posiciones en busca del carné
de artesanos-de-la-canción.

Y Weekend apuntalando el primer
paso en un eslabón encadenado de indivi-
duos-motores. De ahí surge Simon Booth

"CUANDO UN ARTISTA DE `FOLK' SALE A TOCAR CON SU GUITARRA PIENSA QUE
ES JAMES TAYLOR O BOB DYLAN; YO PIENSO QUE SOY THE CLASH" (Billy Bragg)

Billy Bragg, aguerrido invita a acurrucarse en la honda melanco- plica social en el mundo del rock, involu-
trovador con lía de los temas. crándose éste en el juego de las denuncias.
El rodillo Thatcher, puesto en tela de jui-
guitarra eléctrica. Por contra, el acercamiento del trío cio constantemente: letras concienciadas,
Carmel (la rubia Carmel McCourt, voz e acciones mancomunadas, giras políticas
En la misma línea de folk i magen) al fenómeno jazz es uno de los de la mano de la Red Wedge, asociación
actualizado de los Pogues menos complacientes y, por ende, brillan- de músicos afines al Partido Laborista. En
militan otras formaciones tes. Sus dos elepés (The drum is everything, esa disyuntiva de compromiso social, y
como The Men They Couldn't 1984, y, en menor medida, The falling, junto a la plana mayor de los citados pro-
Hang, The Boothill Foot 1986) son aridez, voluptuosidad y poten- tagonistas de la onda suave, destaca un
Tappers, The Shillellagh Sisters, cia. Una cantante de garganta moldeable tipo de lo más peculiar: Billy Bragg. No
Blubberry Hellbillies o Skiff que se balancea entre el desgarro y la fi- jazz, pero sí, también, vuelta a lo básico.
Skats, algunas de ellas ya brosidad, unas percusiones severas que
desaparecidas. De los folk- progresan laberínticamente y unos vientos Surtido casi exclusivamente de una gui-
clubs han surgido iniciativas soplados sin cortapisas dan la medida tarra eléctrica incisiva, que no afilada, y de
menos llamativas, como The exacta de un repertorio que bebe sin repa- una voz infantil y desamparada, Billy Bragg
Oyster Band o Tiger Moth, que ros de las fuentes clásicas. Y aunque otros (Steven Williams de nombre) se convierte
continúan el ecléctico espíritu muchos grupos o artistas involucrados en el (re)inventor del folk urbano de los
de Fairport Convention, y el más directamente en el sustrato pop han ochenta: one mand band de letras airadas
gran Richard Thompson. Las tanteado sin reparos el terreno jazz (de que desglosa letanías rabiosas, irónicas y, a
aventuras acústicas de Elvis Joe Jackson a Style Council, por ejemplo), veces, también ingenuas ("no estoy buscan-
Costello también han son The Special AKA, una entidad multi- do una nueva Inglaterra, / simplemente,
otorgado credibilidad a estas rracial liderada por el ex Special Jerry busco una nueva chica"). Sus discos, Life s
opciones tranquilas. Dammers, quienes se erigen en piedra de a riot with spy vs. spy (1983), Brewing up with
toque fundamental del retorno a la música Billy Bragg (1984) y Talking with the taxman
coloreada en sus diversas modalidades. about poetry (1986), rebosan inconformismo
Un abanico multiforme de ruidos exube- y declarada motivación punk. En una línea
rantes rozando la emoción de lo original y poco cultivada hasta la fecha (en América,
con el acicate extra de una postura ideoló- las féminas Phranc y Michelle-Shocked),
gica militante. La apabullante riqueza de Bragg, con el timbre lineal de su trova, es un
su elepé In the studio (1984) los coloca con seguro francotirador que dibuja / delata epi-
facilidad en la cumbre del movimiento. sodios de la sociedad británica con un cierto
desencanto no exento de dulzura. Guitarris-
Este acercamiento a las raíces va ga- ta punk o cantante folk eléctrico, no deja de
nando adeptos gracias a una dispersión en ser una saludable contradicción que con
el concepto y a una vulgarización de sus unos recursos tan limitados haya logrado el
adjetivos: el estilismo va perdiendo su poso éxito mayoritario en el Reino Unido. El re-
de sugerente trascendencia en favor de una novado interés por el Dylan de los años se-
postura meramente estetizante. Mientras, senta y el triunfal reciclaje de la figura de la
el Reino Unido vive tiempos de intensa ré- cantautora intimista Suzanne Vega hacen
presumir que esta tendencia va a crecer en
los próximos tiempos.

También desde una plataforma folk, pero
con planteamientos punk, el septeto The Po-
gues encabeza una corriente que musica
tradición gaélica con intensidad y arrojo,
rastreando sentimientos añejos embebidos
en temperamentales dosis de romanticismo
y evocación histórica. De origen netamente
irlandés y representados por la impagable
i magen (infecta dentadura) de Shane
McGowan, su cantante y líder, los Pogues
conjugan aires populares, voluntad épica y
reflexiones de carácter social con una grose-
ría altisonante, que a fuerza de altercados
ha acabado por identificarles. Disponen de
dos elepés: Red coses for me (1984) y Rum,
sodomy & the lash (1985).

El miminalismo, el jazz, la música negra
o el folk son ramas que convergen en un mis-
mo tronco; volver la vista hacia el pasado
con renovado interés para remodelar estilos
e insuflarles así una nueva vitalidad, tanto
estética como ideológica, que no desentone
con el tiempo presente.

"EL PÚBLICO NO DESTROZABA EL LOCAL, ESTABA DESTROZANDO EL `POP'. PONEMOS
EXCITACIÓN EN EL 'ROCK'. ESTO ES ARTE COMO TERRORISMO" (Jesus and Mary Chain)

Big Audio Dynamite. De izquierda a
derecha, Greg Roberts, Don Letts, Mick
Jones, Leo 'E-Zee Kill' Williams.

CANTERA
DE IDEAS

J. MARTA REY siones de Ziggy Stardust y Telegram Sam. I circuito independiente
El desgaste y éxito denegado les disgregó fue hábitat y portavoz de los
La sólida infraestructura del circuito inde- en 1983. Peter Murphy anunciaría casetes góticos, hijastros de Siouxie
pendiente inglés, propiciado por la new y, tras su efímero Dali's Car, trabaja en and the Banshees, que pusieron
wave, fomenta una visión del pop diferente, solitario. David J. (bajo) se reveló como de moda el luto, las mallas y el
alternativa a la del mercado oficial, crean- un Leonard Cohen eléctrico hasta unirse a cuero. Se exhibían en clubes
do un proverbial antagonismo entre indies los Tones on Tail de As y Kevin Askins
(independientes) y multinacionales. Dos (batería), que, como Love and Rockets, como el Batcave. Specimen
conceptos opuestos con un mismo fin: inauguran el reciclaje hippie con acústicas eran la banda de la casa. Flesh
vender discos. Sin menoscabo para artis- morosas y ecos de Pink Floyd. for Lulu falsificaban los
tas que trabajan a gusto en la dinámica de sesenta con morbo glam y
las grandes compañías, es en la oferta in- BAD (Big Audio Dinamite). Escaldado del afiladas guitarras. Más
die donde asoma mayor creatividad e redentorismo tras su expulsión de Clas, l óbregos y atormentados
ideas de futuro, que las grandes rentabili- Mick Jones contraataca con una original sonaban Sex Gang Children.
zan muchas veces apropiándose de artis- mutación defunk-rock frío y disciplinas au- Y Danse Society acabaron
tas ya instalados -con el consiguiente tómatas de sorprendente relajo caribeño. siendo pop. Lo mejor fue
ahorro- utilizando la labor de las peque- Son instantáneas ácidas y excelentes me- Sisters of Mercy; sus
ñas como banco de cultivo. lodías que cuentan con el ingenio e ironía atmósferas eléctricas de
del cineasta y ex disc jockey del Roxy (his- fatalismo frío no necesitaban
Aunque parece existir un techo de ven- tórico garito punk) Don Letts, uno de los maquillarse ojeras. De ellos
tas, especialmente en la proyección inter- dos negros del quinteto. Él activa la ac- surgirían The Mission.
nacional de los grupos, lo cierto es que el ción intercalando scratchs y pregrabados
engranaje indie funciona perfectamente. electrónicos, extraídos de la subculta
Son cientos de sellos, por libre o agrupa- audiovisual, en sus dos ascendentes ele-
dos en competentes distribuidoras. Dis- pés: This is B A D (1985) y N°- 10 Upping
ponen de sus propias listas de ventas pa- Street (1987).
ralelas, compitiendo con cifras de envidia.
Su base es el pop alternativo. Artistas y Blow Monkeys. Para ser diferentes nacen
grupos que se multiplican y renuevan en en la multinacional RCA, a la que Bruce
un hervidero de estilos, fanatismos fuga- Howard (alias Dr. Robert) vende un pro-
ces o modas excéntricas que llegan a tras-
cender su ámbito minoritario. A su alrede-
dor surgen cultos, capillas o simple interés
por la novedad, pero conforman una filo-
sofía de exigencia -¿autenticidad?- ante
el proceso creativo del pop, presente en
nombres como los que siguen y docenas
más de menor suerte:

Bauhaus. Preceptores del after punk góti-
co, nunca vendieron muchos discos, pero
sí tremenda imagen e influencia. Daniel
Ash estrangulaba inquietantes crujidos a
su guitarra, y Peter Murphy reencarnaba
el magnetismo andrógino de Bowie, con
quien actúan en el filme The Hunger. Las
criptas de Norhampton les conocían antes
como Craze. Pero rebautizados de cultura
europea (1978) vendían vanguardia, aun-
que sus discos fueran fiestas lóbregas con
los fantasmas del pasado (Bowie, Bo-
lan...) y empacho de terror peliculero. A
su primer maxi, el truculento Bela Lugosi's
dead (1979), siguieron cuatro álbumes de
congoja nihilista y un paquete de más me-
morizables sencillos, destacando sus ver-

"VOY A PONERME EN EL LADO GANADOR, ACOMODARME. / HE METIDO UN NUEVO
GOL, / VOY A CAMBIAR, / A DONDE EL DINERO MANDA" (`This is not a love song', PIL)

Los Bluebells ocultaban Blue Nile. El azar cuenta. Paul Buchanan
(voz), Robert Bell (bajo) y el teclista Paul
bajo su liviano pop escocés
canciones combativas. Moore serían unos desconoci-
dos universitarios (Glasgow)
de no ser por una empresa de
sonido (Linn) que licenció un
sello para ficharles. El motivo
era un delicado disco sorpresa

(A walk across the rooftops,
1984), poblado de exquisitos

decorados, desafiantes arreglos
entre la tecnología y la clásica;
y una hermosa pieza (Stay) de
celofán emocional ya insinuado
antes en un autofinanciado sin-
gle (I love this life, 1981).Sumi-nuciosidadlesharecluido

otros tres años hasta su anun-
ciada continuación (1987).

La libertad alternativa grama al estrellato fielmente cumplido. Chameleons. Surgidos con la
estimuló la singularidad Junto a tres músicos de respetable pasa- década, Mark Burgess (voz y
artística de variopintas chicas do, asalta las revistas con supuestas ame- bajo) y sus tres cómplices cre-
i ndependientes. Entre ellas, nazas masónicas por culpa de un meda- cieron atentos al cercano
brujillas provocadoras de llón. Pintoresca imagen para un deslum- Manchester, trasladando su
imposible nombre, como We've brante debú (Limping for a generation, timidez estudiantil y zozobra
Got A Fuzzbox And We're 1984) de exotismo underground. sitars, existencial a sonidos derivati-
Gonna Use It; ingenuas jazz, política, Marc Bolan y estilo; trau- vos (In shred, 1982) y afortu-
indómitas como Shop mas de vendedor de discos en Australia, nadas réplicas de Psychedelic
Assistans, poetisas tecno- donde vio pasar el punk hasta montar la Furs, que conformarán sus meditabundas
existenciales como Anne banda en Londres (1981). Pero de pronto atmósferas a dos guitarras. Canciones ho-
Clark; rapsodas radicales tipo un insípido y mentiroso título (Animal ma- nestas entre el tedio y la reiteración, puli-
Joolz, o impresionistas gic, 1986) los pone al día: funk-blanco y ele- das desde su debú independiente, Script of
frágiles de formación clásica, gancia de rebajas, continuada por el más the bridge (1983), hasta su tercero y multi-
como Virginia Astley. Sin sólido She was only a grocer's daughter nacional, Strange times (1986).
olvidar Europa, con el swing de (1987), de cálidos contornos y amistades
Ana Dominó (americana), la valiosas (Cutis Mayfield), en una feroz in- Cocteau Twins. Pese a su modesto aspec-
más soleada Isabelle Antena vectiva a Margareth Thatcher (The day af- to, su música conjura ensoñadora imagi-
(belga), mujeres fatales como ter you) con censura preelectoral y éxito nería prerrafaelista de fuerte incidencia
Anne Pigalle (franco-tunecina) o establecido. estética en la moda. Mística, magia y mis-
estilistas seguras como la terio envuelven serenamente la voz espiri-
holandesa Mathilde Santing. Bluebells. Producto de la efervescencia tual de Liz Frazer en piezas de belleza ne-
l ocal, se constituyeron en Glasgow bulosa editadas a veces sólo en maxis. Ini-
(1982). Allí, Robert Hodgens, un conoci- ciados como trío a la sombra gótica de los
do fanzineroso con gafas, y los herma- Banshees (Garland, 1982), Liz y Robin
nos McCluskey (Ken, voz, y David, ba- Guthrie -unidos sentimentalmente-
tería) encauzaron al quinteto por un diá- trabajan como dúo (Head over Heels,
fano pop de guitarras: restauraciones del 1983) hasta el ingreso del bajista Simon
folk-rock sesentista con arrebatadoras Raymonde (Treasure, 1984) o su exclusión
estrofas contemporáneas (Cath, Fore- en Victorialand (1986), con ligero cambio
vermore) y sutiles arreglos de cuerda y ai- hacia paisajes acústicos. De éxitos de ven-
res country. Apadrinados por Elvis Cos- ta independientes han pasado al éxito na-
tello, que producía sus caras B, tenían el cional sin rendir su fidelidad al sello 4 A
nervio y precisión melódica que faltaba D, hogar de alternativas más obtusas
al pop escocés. Pero tras un delicioso ál- como Wolgang Press o Dif Juz -produci-
bum (Sisters, 1984) se separaron. Los dos por Guthrie- o Colour Box y Mo-
McCluskey Brothers son hoy un airado dern English, con quienes colaboran como
dúo neofolk. This Mortal Coil, responsables de la in-
descriptible versión del Song to siren, de
Tim Bukley.

"PARA SEGUIR CON LA CABEZA FUERA DEL AGUA, HAY QUE MANTENER TU CARA EN LAS
LISTAS; SER `UNDERGROUND' EQUIVALE A IMPOPULARIDAD" (Roddy Frame, Aztec Camera)

Lloyd Cole and The Commotions. Vieja fór- sas armonías y contagio Carmel es una vigorosa vocalista
mula para nuevo éxito: 1. Chico con pinta arrollador. Izquierdistas fu- que ha saltado a una compañía fuerte
de soñador rebelde ronroneando con voz ribundos y apasionados del en busca de mayor audiencia.
cálida y viril; 2. Maravillosas canciones gospel, su música fluctúa en-
sin edad, una tras otra, y 3. Una banda tre El capital y la Biblia: fer- urgidos como moda
perfecta. Con ellos el pop escocés se hizo vor y denuncia -extendida divertida, los nuevos hippies
rock sin perder los deleitables estribillos. a ataques televisivos a la son un fenómeno en alza.
Es decir, guitarras y teclados bonitos, ro- monarquía y la Thatcher-, Punks reciclados a místicos,
manticismo y sensualidad de hoy. Aunque no exenta de humor sano, l ucen melenas y blusas
son en realidad un quinteto, Cole roba los emociones de primera mano psicodélicas, y revenden a los
primeros planos. Él escribe el repertorio. y versiones accapella (Cara- más jóvenes viejos ritos e
Podía pasar por otro doble de Lou Red van of love). El cuarteto nació i deales. The Cult llevan la
(afectación y arrogancia), pero le delata su en Hull (1982) cuando al bandera. Su gurú, lan
acento de ternura. Formados en Glasgow anuncio puesto por un folkie Adsbury, les guía, de Hendrix a
(1982), desde su primer single, Perfect skin, (Stan Cullimore, guitarra) l a metafísica eléctrica de Led
fueron la revelación del año y aspirantes a respondió Paul Heaton Zeppelin. Menos heavys son
clásicos con un soberbio álbum, Rattlesnke (voz), conocido en comisa- Balaam and the Angel, tres
(1984), y el menos inspirado Easy Pieces ría por su fanzine extremista. hermanos que hacen
(1985), donde reinciden peligrosamente Flag day fue su envidiable canturreable y pop un gótico
en la jugada. bautizo, continuado -con moroso. También
dos cambios de formación- ceremoniales, The Mission
Danielle Dax. Incomparable musa del un- en cinco singles y un álbum tienen ya secuela mitológica
derground, es una extraña beldad pionera impagable, London 0-Hull 4 con chica (All about Eve).
del art-body (el cuerpo como arte). Actua- (1986).
ba desnuda, pintada de tela de araña, en
bandas informales, como Lemon Kittens Immaculate Fools. Más co-
(1979), y sin pintar en el filme En compa- nocido en España que en su
ñía de lobos. Francotiradora independien- país, son dos parejas de her-
te, reaparece en 1983 como la primera manos (Ross y Weatherill).
mujer que autoproduce, compone, diseña Aparecieron en Kent (1982) con Kevin
y toca todos los instrumentos en un ál- Weatherill al frente, un tipo cadavérico
bum, Pop eyes. Su sangrante portada echa con problemas metafisicos y de páncreas,
para atrás. Dentro sólo alberga exóticas escondido en gafas negras y lacia melena.
maravillas. Nieta de una médium, concita Su voz gravosa reconforta sueños rotos en
enigmas, sitars, T. Rex o los Doors en pér- canciones tristonas de rock transido y gui-
fidas dosis de seducción instantánea, pro- tarras electroacústicas, entre la intensidad
seguidas con versátil brillo en Jesus egg y el desplome. Su primer elepé, Hearts of
that wept (1984) e Inki Bloaters (1987). fortune (1984), reúne sus mejores logros,
pese al lujo variado y portada de García
Durutti Column. Un nombre recio para la Lorca de Dump poet (1987).
música frágil y contemplativa de Vini
Reilly, un autodidacto enfermizo de Jesus & Mary Chain. De la cola del paro
Manchester, protegido de Tony Wilson (Glasgow) a escándalo de 1985. Provoca-
(cerebro de la independiente Factory). ban disturbios. Salían en los sucesos. Y
Debutó con The return of the Durutti Co- resultaban insufribles: devolvían al pop su
lumn (1979), su único disco con grupo. En provocación. No tocaban mucho, pero
los cinco restantes sólo está su guitarra, emitían rodajas instantáneas de dos minu-
piano y la fiel percusión de Bruce Mit- tos: una diabólica mezcla de caos, feed-
chel. Son construcciones impresionistas back y melodías virginales entre Phil Spec-
entre Mike Oldfield y los repetitivos: cris- tor, Beach Boys, Velvet Underground y
tal taciturno ocasionalmente cantado que Ramones. Algo absolutamente perverso
se alarga a partir de Without merey (1984). que la crítica británica amplificó como la
No se hará millonario, pero es querido en definitiva manifestación del art pop. La in-
Europa. dependiente Creation los traspasó a
WEA, donde su álbum Psychocandy
Housemártins. Escapados de un saldo con (1985) capitalizaría esto en ventas. La
sus anoraks y caras paletas, subvertirían cuestión era diferenciar las canciones.
1986 instalando en las listas un refrescan- Tras replantearse las cosas, pararon casi
te atentado de pop radical. Son píldoras un año, editando sólo un single, Some
ágiles de sobriedad instrumental, hermo- candy talking (1986), otra inmaculada pie-
za de pop venenoso, desarmado ya del rui-
do, que irán repitiendo con nuevos títulos
en 1987. El núcleo del cuarteto son los
hermanos Reid, y su problema, los bate-

"NOSOTROS NO SOMOS PARTE NI SENTIMOS AFINIDAD POR NADA NI NADIE. ME PARECE
OFENSIVO QUE NOS AMONTONEN COMO `ROCK"' (Robín Guthrie, The Cocteau Twins)

Jesus & Mary Chain han sido el más nales (Suráfrica, Nicaragua...). Editan
equilibradas auscultaciones, más cerca de
i mpactante lanzamiento del sello
i ndependiente Creation. los sentimientos que de las
ideologías, enviadas por co-
rreo desde Liverpool por su
letrista galés (Mike Jones), a
las que Steve Skaith (guitarra
y uno de los tres vocalistas)
pone gasa sonora de cosmo-
polita fluidez (reggae, rock,
funk, pop) desde 1983. Serían
descubiertos en Europa gra-
cias a Radio África y un sucu-
lento primer álbum, Modern ti-
mes (1985), al que Mick and
Caroline (1987) no aventaja,
aun incluyendo gemas sinuo-
sas como Nomzamo, home-
naje a Winnie Mandela.

Con peor suerte rías. Bobby Gillespie, su segundo, les dejó PIL (Public Image Limited).
comercial que otros, Cherry para nadar entre el pop tierno y la nostal- Es el compló ideado por
Red es, sin embargo, uno de gia hippie con Primal Scream, vendidos, a John Lydon al despedirse de
los sellos independientes más su vez, a WEA por Alan McGee, capitoste Sex Pistols, como reacción a
apreciados. Allí dieron a luz de Creation. Éste es hoy un sello de moda, éstos. Su primera bofetada,
las primeras antologías crecido con la ola roquista y en el que PIL (1978), se encarama a
nuevaoleras, y su catálogo McGee -que lidera sus Biff Bag Pow- las listas, incluyendo única-
dispone aún de la temeridad ejerce un revisionismo sesentista donde mente un dadaísta desguace
polifacética de Eyeless in caben la austeridad literaria de Weather de ruido, balbuceos rítmicos
Gaza; las solitarias lecturas Prophets o el techno-chicle de Baby Amp- y letanías sexpistolianas,
provincianas de Marine Girls hetamine. más un innovador régimen
o el neofolk de Ben Watts. Por guitarrístico de chirriantes zumbidos
sus filas pasaron las guitarras Killing Joke. Desde que salieron de las (Keith Levine). Eran anti-rock, aunque
preciosistas de líricos como catacumbas after-punk han ido repar- en sus follones de egos y expulsiones no
Felt, y las desventuras del tiendo en seis elepés la inquietante claus- diferían del enemigo. Entre la vanguar-
Monochrome Set, grupo trofobia de amenazas metálicas y pesa- dia y la provocación, fomentaban alter-
imprevisible, con Bid -un dillas rituales establecidas en Requiem cados en directo. Pero su expresionismo
indio de Calcuta- al frente, que (1980), un primer álbum que no han su- obsesivo producía hipnosis neopsicodé-
dejó media docena de perado. Su particular empanada licas (Second edition, 1980), enriquecidas
ingeniosos álbumes y nietzscheana ha añadido nihilismo fas- de enigma oriental (Flowers of romance,
enternecedores cistoide (Follow the leader, Love of mas- 1981) o manifiestos de cinismo delibera-
instrumentales Twan-punk. ses) o ambiguos salmos a la voluntad de damente asequibles (This is not a love
poder, con tintes sadomasoquistas (Kings song), hasta que Lydon, solo e instalado
and queens). Reunidos alrededor de Jaz en Nueva York, deja atónita a su cliente-
Coleman -su dirigente- por sus afinida- la con un álbum (1986) de títulos mono-
des esotericas, superaron una fuerte crisis sílabos y canciones bonitas (Rise), total-
(1982) cuando Jaz y Geordie (guitarra) se mente heavy. Jah Wobble, su inicial ba-
l argaron a Islandia, mientras Youth (bajo) jista, prosigue sus aventuras privadas de
formaba los inestables Brilliant. Aún si- lo exótico al tecno funk. Y Lydon grazna
guen, oportunamente acicalados de or- apocalipsis junto a Africa Bambaataa
questaciones pop. (World destruction) y prueba como actor
y autor de banda sonora en el filme Cop

killer.

Scritti Politti. Green Gartside sólo ven-
de arte. Incluso en sus dos enjutos singles
iniciales como trío de punk radical. Es
guapo, de voz tentadora, capaz de citar
a WitIgenstein y Aretha Franklin y ex-

presar una coherente teoría posmarxista

Latin Quarter. Llevan nombre de bohemia
francesa y hacen música distinguida. Pero
este septeto mixto y blanquinegro sintoni-
za un noticiero de injusticias internacio-

"NOSOTROS INTENTAMOS CASAR CIERTOS SENTIMIENTOS CRISTIANOS CON
UN SOCIALISMO RADICAL, NO EL DEL PARTIDO LABORISTA" (Housemartins)

resumida en "utiliza el sistema". El cam- mántica y visio- Green Gartside, de Scritti Politti,
bio llegó con Song to remember (1981) nes de grandeza en su última reencarnación
-aunque sólo dos hicieran honor al títu- emocional. Co-
lo-. Era el boceto: inteligencia, tecnolo- menzó con un neoyorquina.
gía y sensualidad. Expulsa a su compin-
che (Tom Morley), se pasa a una impor- fanzine (1977) ras la gloria de 1.12,
tante compañía y se aloja en Nueva York I rlanda ha desencadenado un
con David Gamson, teclista multiuso, que derivó en floreciente polvorín rockista,
con quien diseña la fibrosa seda pop -funk grupos como sin grandes estrellas, pero con
de Cupid and psyche (1985). Goza demás Another Pretty i dentidad sonora. Énfasis y
crédito que ventas, pero sus canciones Face o Funhou- militancia política,
son solicitadas por artistas como Al Ja- se -con atípi- especialmente en el Norte.
rreau o Miles Davis. cas e implosivas That Petrol Emotion buscan
piezas pianísti- emociones entre el fragor de
The Sound. Fueron de los primeros en de- cas-. Y tras l a lucha. Y también del Ulster es
senterrar a los Doors y las guitarras. Pero una desastrosa el rock acusatorio de Ruefrex.
incluso en su mejor momento -su acla- cita en Nueva Los aires celtas pegan más
mado despegue- (Jeopardy, 1980, y espe- York con Lenny fuerte en Dublín, donde 112
cialmente From the lions mouth. 1981) no Kaye (Patti mantienen su filantrópico sello
pasaron de ser una calcomanía de Echo Smith) reapare- Modern. En él comenzaron In
and The Bunnymen: rock tenso, dramático ce con Water- Tua Nua su étnica electricidad y
y existencial, más opaco que el de éstos y boys (1983). En Cactus World News su tópica
elaborado por Adrian Borland, su notable él recapitula energía. En tales fusiones
guitarra. Más reputados en Europa, Bor- fasis -que U2 Clannad son una institución,
land ha producido a los belgas Dole, ter- estudiarán se- con la que Bono ha colaborado.
minando por firmar con el mismo sello maestras de be-
belga su sexto álbum, en el que reponen la lleza clásica (A
misma película con distinto título, Thunde
pagan place,
up (1987).
1984, y This is
The The. Es el alter-ego utilizado por
Matt Johnson en sus distanciados pro- the sea, 1985).
yectos. Multiinstrumentista imaginativo
y sagaz usuario de los recursos de estu- Rock espacioso
dio, combina con pasmosa facilidad lo e imágenes poé-
viejo y lo nuevo en cautivadoras síntesis ticas entre la se-
(Perfect, This is the day...), autorrealiza- renidad y el én-
das íntegramente. Un atractivo concepto, fasis -que U-2
exigente y comprometido, encarnado en estudiarán se-
Soul mining (1983). Era su primer álbum riamente-, co-
en CBS, a la que sacó -con ayuda de su protagonizadas
protector, Stevo- un misterioso contra- por Karl Wallin
to ajustado al contado en una cita noctur- ger, músico polivalente que abandona en
na cuando sólo disponía de una canción pleno éxito, formando World Party. Des-
(Uncertain smile) pagada por otro sello. de entonces, inestable y autócrata, Scott
Previamente había realizado, aún con su alterna disidencias con grandes giras, apa-
nombre, Burning blue soul (1981): expre- riciones sorpresa en pubs, retiro irlandés y
sionismo experimental con injertos étni- disolución final (1986).
cos e introspecciones emocionales que
reincidirán fugazmente en Infected Woodentops. Su primer sencillo (Plenty,
(1986), de trama tensa, más seca, influen- 1984) era un calco de los Smiths. Pero
cias negras y ayuda de otros músicos. ellos no. Dos años y seis oxigenantes im-
Contiene Sweet bird of truth: un piloto pactos a las listas independientes dela-
americano derribado en una misión sobre tan su alto riesgo creativo. Su imagen sil-
un país árabe, tema premonitorio, ya que vestre choca en la edad de la boutique y
-según él- fue realizado meses antes su música transgrede lo previsible. Es
del bombardeo de Libia. pop escurridizo y nómada; del pop-abilly
a los trópicos; de huella fugaz y subver-
Waterboys. Funcionan con guión de Mike sión acústica. El cabecilla es Rolo
Scott, un escocés (Edimburgo) de vena ro- McGuinty, de infancia viajera en el coro
municipal y febril ansiedad por reescri-
bir en dos minutos su historia del pop.
Creció en Oxford, fue mod en Londres,
estuvo en Liverpool (Wild Swans) y se
llevó a la teclista (Alice Thompson) de
Jazz Butcher. Giant (1986), primer ál-
bum del quinteto, les muestra exquisitos.
Y desbocados, su siguiente título, Hypno

beat (1987).

"DICEN QUE NOS TOMAMOS DEMASIADO EN SERIO. ES CIERTO. MEJOR
DICHO, NOS TOMAMOS NUESTRA MÚSICA EN SERIO" (Bono, 1983)

u2 tante, reflejado en U2 en Madrid (1987). De izquierda a
el enfoque literario derecha, Bono, The Edge y Larry Mullen
EL CÁNTICO ESPIRITUAL de sus temas, e in- ( A. Clayton no posa ante la Prensa).
cluso del negocio
JOSÉ LUIS F. ABEL musical mismo vilismo, U2 consiguen su jugada maes-
(aún hoy nunca to- tra con el cambio de productor: en The
Lo cierto es que a estas alturas resulta can en domingo). unforgettable fire (1984) y The Joshua
ya una rutina tediosa, más que un tópi- October (1981), con tree (1987), gracias a los oficios del
co, encontrarse con calificativos tales su canción Gloria, y mago Brian Eno y de Daniel Lanois,
como místicos, apoteósicos, épicos o definitivamente las canciones del grupo ganan en rique-
magníficos referidos a U2. Aunque, War (1983), su ter- za de matices y detalles, adquieren lige-
para sus detractores, más bien habría cer álbum, los en- reza y brillos desconocidos sin perder
que tildarlos de dinosáuricos, mesiánicos cumbran y son mu- un ápice de su potencia de siempre. Sin
y demagógicos. Acaso tanto unos como cho más que un perder la identidad, se aproximan a
otros lleven su parte de razón -por grupo de éxito. fórmulas establecidas del rock estado-
más que cada cual cargue las tintas en unidense. Lógicamente, es el delirio.
el aspecto que más se adecue a su gusto Ahondando en
personal-. En todo caso, demasiadas la línea de músicas En otras palabras, es el ahora. Em-
esdrújulas seguidas. intensas que arro- barcados en una gira mundial que les va
pan sus caracterís- a llevar por todos los rincones del plane-
Lo irrefutable es que U2 se han ticos textos con ta a lo largo de año y pico, encaramados
convertido -¡incluso en España!- en mensaje, los tres firmemente en lo alto de todas las listas
algo parecido a un fenómeno sociológi- discos (con el des- con temas como With or without you y
co: bombardeo informativo (¿cuántos tacable factor de Still haven't found what I'm looking for, se
cientos de artículos se habrán publica- apoyo de la rotun- hace dificil imaginar un más allá para el
do sobre ellos sólo en este último año?), da producción de cuarteto. Puede que sucumban a las
ventas disparadas en progresión geo- Steve Lillywhite) tensiones y contradicciones que por do-
métrica, mastodónticas presentaciones van dando pie a quier les afectan (la última: su negativa
en directo (¿hace falta hablar de la de unos directos cada a suspender actuaciones en algún esta-
Madrid, en julio de 1987?)... Hay un vez más apabullan- dio norteamericano como medida de
peligro evidente de saturación: puede tes y renombrados, presión para que sea declarado festivo
ser agobiante el hallarlos sonando por verdaderas cere- el aniversario de M. Luther King, a
todo el dial (de las emisoras más tradi- monias casi religio quien U2 ha dedicado temas); o quizá
cionales a la más ínfima de las piratas), sas donde Bono se erige en sumo sacer- l ogren una pirueta aún más asombrosa
de verlos en la televisión de forma dote, oficiante de un ritual de rock a la que los eleve a. .. ¿a dónde? ¿Hasta
constante y de aparecer con la más vieja usanza -de ahí comienzan a sur- dónde? Por de pronto, algo sí está cla-
irrelevante noticia suya en cualquier gir las acusaciones de mesianismo y ro: el presente les pertenece.
medio informativo: hasta la revista del grandilocuencia gratuita- que provo-
corazón Hola entrevistó a Bono a raíz ca auténticos éxtasis colectivos en los
de su concierto hispano. No siempre anonadados y enardecidos feligreses.
fue así, claro está. Una musculosa e imparable base rítmi-
ca proporciona el colchón sobre el que
U2 saltó a la palestra con Boy, su libremente evolucionan la guitarra in-
primer elepé, en 1980. Paul Hewson, creíblemente versátil de The Edge y la
alias Bono (voz, 1960) David Evans, garganta de Bono; esta básica forma-
alias The Edge (guitarra, 1961) Larry ción, unida al carisma humano del últi-
Mullen (bajo, 1961), y Adam Clayton mo, basta para convertir a U2 en una
(batería, 1960) formaban el grupo: cua- monstruosa máquina de rock a todo va-
tro muchachos dublineses, fervientes por (óigase Under a blood red sky, minie-
católicos de clase media-baja, que ofre- lepé en directo extraído de las actuacio-
cían una música apasionada, contun- nes de 1983).
dente y melódica a un tiempo, lírica o
belicosa según las ocasiones. Coinci- Y justo en ese delicado momento,
dente en el tiempo con propuestas mu- cuando en medio del esplendor co-
sicales semejantes (Echo & The Bun- mienza a acechar la amenaza del inmo-
nymen, The Teardrop Explodes...), don-
de se rescataba el dramatismo vócal de HISTORIA DEL `ROCK'
un Jim Morrison junto a la exuberancia
guitarrística del mejor rock de finales PRÓXIMO CAPITULO
de los sesenta, los particularizaba el
positivismo a ultranza de sus posturas MÚSICA DE BAILE
vitales y, sobre todo, el notorio peso es-
pecífico del componente religioso-mili-

HISTORIA DEL `ROCK'

En los años ochenta, las listas de éxitos internacionales refle-
jan la difuminación de fronteras entre el pop y la música ne-
gra. Esta última deja de ser producto para un mercado redu-
cido: Michael Jackson convierte su Thriller en el máximo
vendedor de la historia del disco. Las estrellas blancas,
como Madonna (en la foto), utilizan rutinariamente produc-
tores, músicos y fórmulas del sonido negro. Y aunque no se
renuncie a las baladas, siempre rentables para cualquier ar-
tista, todos hacen dance music. No cesan las sorpresas: Tina
Turner, antigua vocalista de soul, se transforma en reina del rock a los 45 años,
mientras que Prince, la más pujante figura del nuevo funk, hace incursiones en la
psicodelia de 1967.

EL DENOMINADOR COMÚN DE LOS TRIUNFADORES DE LOS OCHENTA ES EL
CULTIVO DEL `MAXISINGLE', VEHÍCULO IDEAL DE LA MÚSICA DE BAILE

Grupos como Grandmaster Flash representan la
vitalidad de la cultura hip-hop, que incluye
manifestaciones como el graffiti callejero, el
break-dance, el rap, el scratch o el electro.
Tendencias nacidas en los barrios negros
neoyorquinos que terminan siendo adoptadas
universalmente.

"PRESENTAS EL NOMBRE, LA IMAGEN Y EL VÍDEO. LUEGO OYEN EL
DISCO. ASÍ FUNCIONAN AHORA LAS COMPAÑÍAS" (Huey Lewis, 1984)

El crossover propicia insólitas rock- se empezó a cuartear cuando algu-
amistades: Julio iglesias con Janet y nos puntos del dial ampliaron su abanico
de programación con la declarada inten-'
Michael Jackson. ción de sumar nuevos oyentes a su audien-
cia habitual. Luego llegarían el canal de
Las dificultades de los L CRISOL DE clips MTV y Michael Jackson, las películas
musicales modulares a lo Flashdance y
artistas negros para acceder al LA `DANCE MUSIC' Prince, Madonna y la pasión por la break-
gran público todavía eran
considerables a principios de DIEGO A. MANRIQUE dance.
los ochenta. El canal de vídeo
MTV vetó el irresistible Billie La palabra mágica es crossover. En la jerga El resultado actual es que se desdibu-
Jean, de Michael Jackson, de la industria discográfica, el disco o ar- jan los elementos diferenciales de los di-
hasta que su discográfica tista que supera los límites de su público versos géneros -rock, gospel, pop, middle
amenazó con cortar el previsible para entrar en otros mercados. of the road, black music- en favor de un
suministro de clips. incluso el Un salto que se aprecia inmediatamente sonido más homogeneizado; los factores
respetable Herbie Hancock en las cuentas corrientes de todos los im- que determinan que tal disco entre por
tuvo que desaparecer casi plicados. Para la música popular norte- uno u otro campo son la imagen del artista
completamente del clip para americana, los ochenta han sido años de y la estrategia de mercadotecnia.
su éxito Rockit (1983), crossover (es decir, de prosperidad).
consciente de que una Eso significa que un Kenny Rogers, ar-
excesiva presencia negra Aclaraciones. Los miles de emisoras tista de inclinación country, se destapa con
podría disminuir su que funcionan en Estados Unidos tienden discos semidiscotequeros o baladas con-
aceptación. hacia la especialización en diferentes tipos vencionales; Lionel Ritchie, antigua fiera
de fórmulas. La rigidez de estos formatos de los Commodores, puede compatibilizar
-nada de lo que sonaba en la radio de temas de ritmo tropical con piezas para
country aparecía en la de album-oriented adormecer amas de casa que podrían ir
firmadas por el citado Rogers (ambos
comparten management). El mismo Julio
Iglesias diseñó su irrupción en el mercado
anglosajón con guiños a los mercados del
country, el soul y el pop (grabaciones con
Willie Nelson, Diana Ross y los Beach
Boys, respectivamente). Todo es viable:
Michael Jackson bate todos los récords de
las superestrellas blancas con Thriller
-más de 40 millones de ejemplares ven-
didos internacionalmente-, mientras que
caras pálidas como Madonna, Culture
Club o Hall & Oates figuran orgullosa-
mente en las listas de música negra.

El crossover produce prodigiosos mons-
truos. Thriller es finalmente un apetitoso
plato combinado que va desde el almíbar
(The girl is mine, con Paul McCartney) has-
ta la paranoia misógina (Billie Jean), pa-
sando por el rock duro (guitarra de Eddie
van Halen en Beat it) o el cine de terror
para-todos-los-públicos (la canción que
da título al elepé). El protagonista es un
modoso muchacho negro que ha pasado
la mayor parte de su vida bajo los focos,
perfecta criatura del más puro show busi-

"NO QUIERO HACER `SOUL': NO SONARÍA NI EN LAS RADIOS NEGRAS NI EN LAS
BLANCAS. L A VERDAD ES QUE EL DINERO ESTÁ EN EL `ROCK" (Tina Turner, 1985)

ness. Peter Pan de la era Reagan, Michael Arthur Baker, John Jellybean Benítez, Bill Antiguos punks, los Beastie Boys
puede permitirse desmarcarse racialmen- Laswell, François Kevorkian o John triunfan en 1987 con una explosiva
te reconstruyendo su nariz, boca, pómulos Luongo pueden remezclar al gusto de las mezcla de rap y heavy metal.
y cabellera en busca de facciones más pistas de baile discos confeccionados por
acordes con los módulos grecolatinos. otros productores, revivir las fortunas dis- El crossover de ideas
cográficas de desorientadas estrellas del
Los máximos triunfadores de los rock, dar forma monumental a los sueños entre músicos blancos y negros
ochenta organizan férreamente sus carre- de humildes chicos del Bronx o grabar hace que un rapper como
ras alrededor del crossover. Y aprenden de bajo sus propios nombres o con modestos Afrika Bambaata construya sus
sus errores: Prince, rechazado cerrilmente seudónimos. Ellos redefinen diariamente proclamas sobre retazos de
por los seguidores de los Rolling Stones los parámetros de la música de baile. éxitos tecno de Kraftwerk, Gary
en 1981, seduce luego al público del rock Numan o la Yellow Magic
Es el latido del momento. Rock y funk y Orchestra; sus vecinos de Run-
con sus invocaciones a Jimi Hendrix, una tecno en variadas dosis. En términos gene- DMC han combinado el pulso
película cruda que sublima su agitada bio- rales, la dance music tiene un impacto salu- del Bronx con guitarras heavy.
grafía y una política de hedonismo sexual dable al desintegrar prejuicios y falsas Herbie Hancock reconoce
que contrasta vivamente con el puritanis- fronteras. Efecto más que saludable para que su interés por el hip-hop
mo de Jackson. Apenas concede entrevis- los artistas que han podido evadirse de neoyorquino vino a través de
tas, por aquello de la aureola enigmática, agobiantes categorías raciales y tomar la l os discos del británico Malcolm
pero sus subordinados se encargan de autopista hacia Beverly Hills. Aunque eso McLaren. Y no faltan los
deshacer mitos explicando que no es ho- suponga, en muchos casos, la renuncia de plagios, algunos tan evidentes
mosexual ni admite las drogas. su individualidad a las leyes del crossover. como Ghostbusters (Ray
Parker) con respecto a I want a
Para Prince, todo es trabajo. Y algo así El dilema no está entre encastillarse o new drug (Huey Lewis and the
ocurre con Madonna. Su resuelta volun- venderse. Todos los intérpretes quieren News).
tad de triunfar podría llegar a espantar a venderse lo mejor posible. El problema
los más hambrientos chicos de Fama. No está en la magnitud de la contrapartida. Y
tiene grandes recursos artísticos, pero ex- son muchos los posibles platos de lente-
prime hasta la última gota de su erotismo jas. Unos se degradan en clips promocio-
y personalidad. Y no se entienda eso como nales o se autoparodian en spots publicita-
una recriminación: al menos ella es un rios en pro de una bebida o un vehículo.
personaje más sugerente que Prince o Mi- Otros ponen su talento al servicio del cine
chael, encerrados en sus propias jaulas juvenil de los ochenta, concebido con mó-
doradas. Una chica emancipada, pero con dulos musicales.
rastros de su educación en colegio de
monjas, que combina feminidad con dure- Y nada puede sorprender: estimados
za, romántica a la vez que interesada, ma- jazzmen se ponen al servicio de Sting,
terialista y aventurera, tan disciplinada mientras una sacerdotisa de la negritud
como independiente. Dificil resistirse a su como Tina Turner abjura del soul para
poder de subyugación o al deseo de anali- vestir modelitos de rock confeccionados
zarla despiadadamente. por músicos británicos. Una Babel de esti-
los y ambiciones: el continente del crosso-
Madonna también es una maestra del ver, parque tecnológico de la moderna mú-
camaleonismo musical. Debuta con insípi- sica de baile.
dos trapos discotequeros, pero endurece
su envoltorio con funk cincelado por el
productor Nile Rodgers, sin descuidar al-
gún achuchón melódico, recuerdos a los
grupos de chicas o pop adhesivo con estribi-
llos en español. Nile Rodgers milita en un
regimiento de sagaces artesanos neoyor-
quinos que saben refinar los inventos del
gueto para consumo masivo. Rodgers,

"LA MÚSICA NEGRA HA SIDO SEGUNDO VIOLÍN DEMASIADO TIEMPO, PESE A SER EL MOTOR
DEL 'POP'; MICHAEL JACKSON HA CONECTADO CON TODO EL MUNDO" (Quincy Jones)

Michael Jackson, en los años ICHAEL restos del hombre elefante y vivir 150 años,
ochenta, tras la operación deja pasar media década sin editar un dis-
que cambió su cara. JACKSOH, EL ALTO co y cuando lo hace es una cancioncilla
vulgar de letra insustancial que titula Ijust
Casi todos los PRECIO DE LA FAMA can't stop loving you. Michael Jackson es
hermanos Jackson han iniciado sin duda víctima de su propio triunfo e in-
carreras en solitario. La más PATRICIA GODES directamente de su propio talento.
sólida es la de Jermaine, con 11
elepés y un par de clásicos Ser famoso, tener éxito y triunfar son los Porque, no cabe duda, lo tiene. Es el
(Let's be young tonight y Let's objetivos de todos los entertainers, cantan- dueño de una voz personalísima, vibrante,
get serious) a sus espaldas; le tes, artistas e intérpretes. Michael Joseph potente, con amplio registro, muy bien en-
sigue la benjamina, Janet, con Jackson (1958) lo ha conseguido de la ma- trenada y con un estilo inconfundible con
dos discos más, destacando nera más absoluta -40 millones de com- el que ha sido capaz de conmover a todo
el popularísimo Control, de pradores de su Thriller sirven de prueba-, el mundo. Desde niño, su vida estuvo en-
1986. También Jackie lo pero el éxito no ha resultado demasiado caminada a ese éxito que llegó de una ma-
intentó en 1973, al igual que las conveniente para él. Las noticias de sus nera desmesurada.
otras dos hermanas, Latoya y extravagancias llenan las páginas de la
Rebbie. Incluso Randy sacó en prensa sensacionalista: el cantante vive Jackson empezó a cantar profesional-
1973 un single, How can I be aislado del mundo en su mansión de Enci- mente a los cuatro años: su dinamismo y
sure. no (California), se empeña en adquirir los grandes dotes musicales lo convirtieron
en el centro del grupo que formaba con
sus cuatro hermanos mayores, The Jack-
son 5. La familia Jackson vivía en Gary
(Indiana), ciudad llamada del pecado por-
que servía de escondite a los habitantes de
Chicago y del resto del estado, y a sus vi-
cios secretos. La madre, Katherine, con
nueve niños -cinco de ellos formaban el
grupo- era una oriunda de Alabama,
mientras su marido, Joe, provenía de Ten-
nessee. Ambos apoyaron la vocación mu-
sical de sus hijos varones para apartarles
de la calle y sus peligros en una ciudad de
vida tan poco recomendable.

El grupo ganaba todos los concursos a
los que se presentaban gracias al encanto,
desparpajo y sorprendente savoir -faire de
su pequeño líder. Ya en la mitad de los se-
senta grabaron dos singles para la marca
Steel Town Records (I'm a big boy now y
You don't have to be over 21) que son encan-
tadores, pero poco contundentes; de ahí
que no fueran éxito.

La cantante y diva negra Diana Ross
quedó prendada de los niños, y cuando les
ficha la poderosa Motown -donde real-
mente se presentaron por consejo de
Gladys Knight and the Pips-, actuó
como su madrina. El primer elepé de Jac-
kie (1951), Tito (1953), Jermaine (1954),
Marlon (1957) y de Michael se llamaba
Diana Ross presents The Jackson S e incluía
su primer gran éxito, I want you back, que
había sido editado a finales de 1969 y
triunfó plenamente, iniciando oficialmente
una nueva etapa en la música negra. Adiós
al entrañable primitivismo de los clásicos,
hola a las nuevas generaciones educadas y
bien alimentadas.

Dadas las edades de sus intérpretes,
sus primeros discos eran un producto per-
fecto para los adolescentes del momento,
pero, analizados a posteriori, tienen ese sa-
bor algo amargo que deja la madurez pre-
cozmente adquirida; los niños Jackson ha-
bían recorrido EE UU de punta a punta

"DICEN QUE ES `GAY': ESO ESTÁ CONTRA LA BIBLIA, CONTRA
SU RELIGIÓN Y CONTRA DIOS. MICHAEL NO ES 'GAY" (Joe Jackson, su padre).

actuando con la profesionalidad que se you). Allí se coció el estilo saltarín, poppy y Quincy Jones (con gafas), recibiendo
exigía a los intérpretes adultos y viviendo electrónico que se sublimaría en Thriller. trofeos por su producción de Thriller, el
prematuramente sus mismos problemas y disco más vendido de la historia.
experiencias. Su continuado éxito entre Cuando los Jackson lanzaron Triumph
los adolescentes con ABC, The Love you en 1980, compuesto y producido por ellos ichael, prototipo del
save, i'll be there, Mamas pearl -todos totalmente, su reputación ya estaba asen- artista contemporáneo, ha
números uno a nivel nacional-, Never can tada. El álbum era una muestra de su ma- sabido aprovechar las
say goodbye, Looking throughthe windows, durez y ambiciones, y gustó, de modo que oportunidades. Junto a Jackson
Hallelujah day y Dancing machine se con- cuando The girl is mine, cantada a dúo por 5 protagonizó el show de
virtieron en un arma de dos filos cuando Michael y Paul McCarthey, salió a forales televisión Going back to Indiana
los cinco Jackson fueron convirtiéndose, de 1982, el mundo ya estaba listo para lo (1971), cantó el tema musical
por ley de vida, en jóvenes adultos. que iba a venir: el álbum más vendedor de del largometraje Ben (1972),
la historia, esa pequeña obra maestra de participó en el documental
Además de nueve elepés con el grupo la música bailable que se llamó Thriller. benéfico Save the children
-entre los que destaca el avanzado Get it Quizá el disco no sea lo mejor hecho por (1972) e interpretó el papel de
together (1973)-, Michael había grabado Michael, pero sí lo más comercial, tanto espantapájaros en el filme
Got to be there (1971), Ben (1972), Music que su creador no ha necesitado editar rodado sobre la obra de
and me (1973) y Forever Michael (1975), nada en cinco años, y el público no le ha Charles Small The wiz(1978). Es
primeros pasos de si carrera en solitario, olvidado. de sobra conocido el cuidado
discos de un soul dulce, sofisticado y tier- que pone en sus vídeos
no donde su hermosa voz juvenil realiza- El futuro es problemático a nivel pro- promocionales: llegó a
ba notables hazañas y demostraba sus in- fesional: el último disco que sacó con sus contratar al realizador
sólitas cualidades. hermanos, Victory (1984), tuvo buenas cinematográfico John Landis
ventas, pero malas críticas; su gran gira para visualizar Thriller; el éxito
Sin embargo, a pesar de aciertos como por EE UU en 1984 fue literalmente in del clip multiplicó las ventas
el número dos Dancing machine, en 1974, escándalo, por la cantidad de dinero que del disco, dando lugar a un
los Jackson tenían problemas con Mo- movió y las inexplicables situaciones que documental que recogía su
town. Era una relación complicada: Jer- desencadenó. A continuación, Michael l aborioso rodaje.
maine se había casado con la hija del fac- se encerró en el estudio con Quincy Jo-
totum de la compañía, Berry Gordy, y eso nes para trabajar en la continuación de
los mantenía prácticamente atados a pe- Thriller. Varias falsas alarmas de edición
sar de que su incipiente creatividad y ga- crearon un clima de desconfianza y ten-
nas de adquirir una mayor participación sión. Por lo pronto, in single que se iba a
en la creación de sis discos, que habían editar en febrero fue retirado, el previsto
aumentando con sus edades, se veían frus- dúo con Barbra Streisand parece haber-
trados. Tito Jackson, excelente guitarrista se frustrado, el anunciado título del ál-
del grupo, declararía luego que nunca se bum se ha cambiado de Smooth criminal
sintieron manipulados, pero sus hermanos a Bad, y el primer single lanzado es poco
dijeron que habían compuesto muchas valiente. El tiempo dirá si Michael Jack-
canciones y que querían grabarlas, en vez son ha sobrevivido a su propio triunfo
del material de un equipo de autores (The o no.
Corporation) de la casa.

La separación no fue amistosa. Mo-
town los demandó (tuvieron que indemni-
zar a la compañía con seiscientos mil dó-
lares) y se quedó con el nombre, obligán-
doles a bautizarse como The Jacksons. En
1976 firmaron contracto con Epic, sustitu-
yeron a Jermaine por Randy (1962), el
más joven de sus hermanos, y editaron un
álbum que incluía algunas composiciones
propias entre las piezas de los producto-
res Kenny Gamble y Leon Huff. Tras The
Jacksons se repitió la fórmula con Goin'
places (1977), pero fue con Destiny (1978)
cuando la creatividad de los chicos se des-
tapó. Compuesto -menos una canción-
por ellos cinco, el disco era humilde y sin-
cero. Despertó una cierta expectación a su
alrededor que fructificaría a forales de año
con el quinto elepé en solitario de Michael,
Off the wall, producido por un hombre del
jazz, Quincy Jones, que resultó irresistible
en las listas, convirtiéndose en disco de
platino y dando lugar a dos números uno
(Don't stop till you get enough y Rock with

"EL SEXO SÓLO ES ALGO SUCIO

CUANDO NO TE BAÑAS" (Madonna, 1987)

Lejos de la típica cantante manipulada, ADONNA, sical de los ochenta por excelencia, un fe-
Madonna ha dirigido su carrera con nómeno de voluptuosa imagen pública. Su
determinación. JUGUETE CARNAL voz da vida a felices temas pop con esque-
leto funky que hablan de chicas ricas, chi-
C uando estaba RAFA CERVERA cas inmaculadas y danzarinas nocturnas
que encandilan.
creciendo, recuerdo que me El nombre de Madonna Louise Ciccone
gustaba mi cuerpo. Ahora, Penas está unido a rimbombantes califica- Como buen productor que presume de
cuando publican desnudos tivos, se debe a respetables récords de self--made, Madonna conjura las penurias
míos, no me produce ningún ventas discográficas y es sinónimo de la de su pasado en cada entrevista. De raíces
sobresalto: no me avergüenzo consagración de una gran ambición que italianas y familia humilde, nació en De-
de nada de lo que he hecho. triunfa sobre unas modestas cuotas de ta- troit (1958), compartió su infancia con sie-
Desde que era una niña supe lento. Sirena de cántico millonario, ninfa te hermanos, a los seis años perdió a su
que ser chica me daba un que se supone la versión pop de la Monroe madre y posteriormente aborreció a su
montón de posibilidades. o la Dietrich, Madonna es la historia mu- madrastra. Aprendiz de bailarina, se tras-
Carecía de inhibiciones: si me lada a Nueva York en 1978, respaldada
gustaba un chico, se lo por su camarada Steve Bray (músico y
planteaba directamente" compositor), el cual firma canciones que
la harían fichar por Sire Records.

Lanzada como dulce discotequero,
Madonna (1983) es un correcto elepé de
piezas bailables que no consigue hacerla

despegar del todo. Experta en rodearse de
útiles compañías (su nuevo productor y
novio, el mezclador John Jellybean Bení-
tez), que sabe reemplazar a tiempo, su pri-
mer gran impacto llega con el sencillo Ho-
liday (1984). El resto consiste en dar los
pasos convenientes: reputado productor
para su nuevo álbum (Nile Rodgers y Like

a Virgin, respectivamente); fomentar una
rentable imagen de rubia-explosiva-pero-
ingenua a través de sus videoclips, y apro-
vechar su participación en un filme de
bajo presupuesto, Buscando a Susan deses-
peradamente, anunciado como catalizador
del estereotipo Madonna. La madonnama-
nía se adueña de medio planeta a lo largo
de 1985, mientras sus discos se venden a
razón de 75.000 copias diarias.

Megaestrella indiscutible, insiste en
convertir su ascenso en un evento espec-
tacular. Flirtea con Prince, Don Johnson y
David Lee Roth, pero termina casándose
con un actor de dudoso futuro (Sean
Penn), y, calculadora que es ella, ni siquie-
ra se inmuta cuando Penthouse y Playboy
publican añejos desnudos de la estrella.

A pesar de ser la artista femenina más
vendedora en la historia del pop, fracasa
con su siguiente película (Shangai surprise)
de un modo estrepitoso -lo suyo no es el
melodrama-, de tal manera que hasta las
ventas de su tercer elepé (True blue, 1986)
se ven frenadas durante algunos meses.
Con el single La isla Bonita vuelve a insta-
larse en la cima de las listas de éxitos y,
aprendida la lección, reincide en un papel
de cándida fémina envuelta en problemas
para su nueva incursión cinematográfica,
Who's that girl, que la mantiene junto a la
homónima canción- en el candelero. Con
más empeño que cualidades, Madonna es
el prototipo de ídolo para esta década; un
fenómeno que brilla con luz propia.

"EL SEXO ES ALGO QUE TODOS COMPRENDEN. ES I LIMITADO. LO QUE
INTENTO ES HACER CANCIONES CON DISTINTAS LECTURAS" (Prince)

Prince (con sombrero)
y su grupo, mixto
en lo racial y lo sexual.

LOS MÚLTIPLES

ORGANISMOS

DE PRINCE

ANTONIO DE MIGUEL en la música negra. Dos años después, el n torno a Prince se ha
dueño del Moon Sound Studio ofrece a nucleado una cohorte musical
Personaje enigmático, cancerbero de sus Prince el puesto de ayudante. Prince en- que, si bien se beneficia de su
misterios, poseído por fiebres de sexo y re- contró su nueva casa: allí vivía, dormía, mecenazgo y marca de
ligión, avaro de su intimidad, con voca- trabajaba, aprendía alquimia técnica y garantía, ha demostrado por
ción de hombre-orquesta, generoso en grababa un montón de cintas con sus in- sí misma ser atracción de
mecenazgos, la figura de Prince es un re- somnios febriles. calidad. El variable clan lo
bosante oasis de atractivos síndromes. han integrado The Revolution,
Imposible de equiparar a otras estrellas Un tal Owen Husney coge varias cin- su banda de directo; The
negras del firmamento musical, su ascen- tas, se erige en manager del joven genio y Time, liderados por Morris Day;
sión ha sido meteórica -aún no ha cum- viaja a Los Ángeles para hacer una oferta Vanity Six y Apollonia Six;
plido los 30 años-, sabia combinación de a diversas compañías discográficas. Es Sheila E.; André Cymone y Dez
efervescentes caramelos para la galería Warner quien le ofrece el contrato más
(Purple rain, 1984), junto a sus más radica- ventajoso, un millón de dólares por tres Dickerson, bajista y guitarra
les visiones porno-sonoras (Dirty mind, elepés, y libertad artística. No es normal de Prince, que han grabado
1980) y unos ajustadísimos desmarques que a un mocoso sin éxitos le permitan discos en solitario, y Jimmy
de elite supraterrenal (Sign of the times, trabajar solo: para demostrar sus mañas,
1987). Prince cuida su carrera con mano le hacen pasar un examen en un estudio de Jam y Terry Lewis, antiguos
férrea y mente fría, escurriéndose hábil- grabación con tres productores de presti- miembros de The Time, que
mente de las trampas que el circo del rock gio (Gary Katz, Lenny Waronker, Russ
propone a los triunfadores. Inaccesibili- Titelman); antes de terminar la sesión, los han hecho afamada carrera
dad personal, discos exigentes, letras es- profesionales le dan su asombrada apro- como productores-
cabrosas, y una demostrada capacidad de bación. En abril de 1978 está a la venta el compositores. De cuando en
absorción/asimilación/recreación de to- primer álbum, For you. Al igual que en su cuando apoya a gente que no
dos los estilos que confluyen en su cosmos segundo disco (Prince, 1979), todo el mate- pertenece directamente a su
sonoro: soul, tecno Punk, jazz, psicodelia, rial está compuesto, interpretado, arregla- familia, caso de las Bangles o
pop, rhythm and blues, rock... son algunas do y producido por él mismo. Hasta parti- Shena Easton, con
de las estrategias dilatorias que ejercita cipa en el diseño de las portadas. Juanpa-
Prince para vencer sin ser atrapado por lomo feroz y egoísta, Prince es de los po- composiciones en las que se
las sérpicas redes del show-biz. cos artistas que han manifestado y logra- permite el lujo del seudónimo.
do que el control completo de sus obras le
Prince Rogers Nelson vino al mundo pertenezca. Cuestión que le llevaría años
en Minneapolis (Minnesota) el 7 de junio más tarde a crear su propio sello discográ-
de 1958. Padre músico, madre cantante, fico, Paisley Park, y su empresa de pro-
divorciados cuando Prince contaba siete ducción, Starr Company.
años. Se va de casa cinco años después,
vive con unos tíos hasta que se instala en Prince toca en ellos un total de 27 ins-
el hogar de su íntimo amigo André Ander- trumentos y ambos trabajos inaugurales
son (luego apellidado Cymone). Desde constituyen su etapa más ingenua, pero
este instante Prince se buscó la vida en lo también más intuitiva, polícromo arco iris
que irremediablemente le bullía por sus de sus gustos por el cóctel musical más
células de piel mestiza: la música.

Su padre le había enseñado a tocar el
piano y le había regalado una guitarra, que
Prince se encargó pronto de domesticar.
En lo que aún se mostraba tímido era en
cantar. Con 15 años, Prince y André for-
man su primera banda, Grand Central, re-
bautizada luego Champagne, en la que es-
taba otro futuro miembro del clan, el bate-
ría Morris Day. Tocaban los éxitos radio-
fónicos y se hicieron realmente populares
en Minneapolis, zona carente de tradición

"LO QUE ECHO EN FALTA EN LA MÚSICA `POP' ES EL GUSTO
POR EL PELIGRO, POR LA EXCITACIÓN Y EL MISTERIO" (Prince)

Según David Bowie, lenta historia de sexo oral provocada por
"los ochenta el acceso y derribo a una novia en su cami-
no a la iglesia (Head), todo el disco des-
pertenecen a Prince". borda lujuria. Es prohibido en muchísi-
mas emisoras, y todavía lo usan las aso-
Cosa caliente, / cosa cargado de tintas. Poseedor de un falseto ciaciones moralistas para denunciar los
caliente, apenas 21; / cosa vocal sedoso y dúctil, que toda la crítica se peligros del rock.
caliente; podías llamar a tus empeña en calificar como idéntico al de
viejos, / diles que vas al Crystal Smokey Robinson, Prince sienta sus rea- Para esta ocasión Prince se rodea ya de
Ball, / diles que irás tarde a les de una forma harto convincente como una banda compuesta por André Cymone,
casa, / si es que vas, / diles que promesa de la nueva música negra norte- Lisa Coleman, Dez Dickerson, Bobby Z. y
has encontrado un nuevo americana. Dr. Fink. Banda mixta interracial, de si-
juguete; / no puedo niestra catadura, como las propias ape-
aguantarme hasta que Y lo que en algunos temas de su segun- tencias musicales de Prince.
lleguemos a casa. / ¿Dónde do álbum son veladas insinuaciones de ja-
podemos estar solos? / Cosa deos físicos (Sexy dancer) o referencias su- Siguen otros dos discos, menos carga-
caliente, podría leerte una tiles a la incompleta satisfacción del les- dos de temática sexual, en los que Prince
poesía y luego haríamos una bianismo (Bambi), se convierte en su pró- aborda asuntos de militarismo junto a un
historia con nosotros mismos". ximo elepé (1980), en apología descarada mayor regusto por las cadencias pop y roc-
de las más sórdidas actividades sexuales. keras. Controversy (1981), y el doble 1999
(Hot Thing, Sign of the times.) Esa inclinación porro que siempre hará de (1982) suponen un gran avance de éxito
Prince persona non-grata para su engullí- comercial. De 1999 se editan tres singles y
miento comercial, alcanzó aquí su mate- vende tres millones de copias. En pleno
rialización más radical. Desde el título ayuno de discos de Michael Thriller Jack-
Dirty Mind (Mente sucia), a las fotos de car- son, Prince se descuelga con un disco -y
peta, y sobre todo en dos temas de fácil película- que le llevó al número uno en
escándalo, la incestuosa Sister y la trucu- todo el mundo, Purple rain, 1984. Una fan-
tasía cinematográfica basada en su vida y
que va a suponer el lanzamiento artístico
de la modelo Patty Apollonia Kotero.

Las comparaciones con Michael Jack-
son están servidas en bandeja y son he-
chas por los que desconocían la verdadera
trayectoria de este príncipe de las tinieblas
ambiguas. Significa un vuelo rasante en su
vida artística, pero sus sensores detectan
la boca del lobo, y Prince opta por el des-
pegue hacia terrenos menos farragosos.

De hecho sus dos siguientes trabajos
son fruto de la resaca y ese exacerbado
sentimiento religioso en que actualmente
se halla sumido: Around the world in a day,
1985; Parade, 1986, y Prince recluido en su
palacio a orillas de un lago. Desde 1981
sólo ha concedido una entrevista. Su look
ha olvidado pasadas locuras rococós, ha
optado por el esquematismo casi lúgubre
y ha grabado su noveno álbum en forma
de disco doble, saturado de electricidad,
tensión y fantasía, en una música tan bella
como impetuosa. Sign of the times (1987)

es un suculento banquete de música con-
temporánea. El rhythm and blues de Prince
en su expresión abigarrada, golosa y mis-
teriosa. Música que florece apretada de
exuberancia, fresca y bailable, anímica,
seductora. Principesca.

"SERÍA MÁS FÁCIL TRABAJAR PARA EL PÚBLICO BLANCO; TENGO QUE TRIUNFAR PRIMERO
ENTRE LOS NEGROS PARA SALTAR AL MERCADO BLANCO" (Narada Michael Walden)

André Cymore, antiguo compañero
de Prince y seguidor de su línea de funk-
rock moderno.

DEL GUETO
A LA GLORIA

PATRICIA GODES En los setenta, la música rock cayó en ara mí, soul y música
una crisis de la que no ha logrado salir, negra no son necesariamente lo
Nunca se ha dudado que la música negra cuando por culpa del punk (a nivel teórico)
es el origen de casi todos los géneros musi- y la disco-music (a nivel práctico), se pusie- mismo. Música negra es
cales de la era del rock, pero tampoco se ron en duda sus valores y su superviven- música hecha por negros, y el
ha evitado echar, siempre que la ocasión cia. Para mantenerse tuvo que recurrir a la soul ha de ser crudo, directo,
lo permitía, tierra sobre tan evidente ver- más creativa de las culturas musicales, la con una base simple y lineal.
dad. En los sesenta y setenta, sólo los más negroamericana. La industria del disco
concienciados de entre Tos fans se acorda- comprendió el proceso y lo aceleró inteli- Creo que hoy el soul ha
ban de valorar el peso de Chuck Berry o gente y rápidamente. El resultado ha sido desaparecido, hay un montón
Smokey Robinson sobre los Beatles y Sto- un híbrido, bautizado con un nombre que de bandas que suenan igual,
nes. En la actualidad, la situación ha cam- habitualmente se evita pronunciar con el no tienen dirección, hacen
biado, los derivados del soul y el funk son mayor de los pudores, pero que, sin em- portadas, graban discos,
prácticamente la corriente dominante del bargo, es el ideal para englobar la música pero no tienen contenido
pop, y no sólo sus influencias, sino sus fór- de los ochenta y superar las nefastas y ya poético". (Bobby Womack.)
mulas y maneras se encuentran en todo desfasadas clasificaciones raciales: disco-
producto comercial con ambiciones.
rock.
Nunca antes la música negra tuvo tan-
ta y tan amplia repercusión, nunca fue tan Decir soul, funk o música negra es ya si-
respetada, pero tampoco nunca ha sido nónimo de exquisitez y clase; sin embargo,
tan descaradamente copiada, manipulada como consecuencia de la simbiosis con el
y mediatizada en favor del menguado ta- rock, sus cualidades musicales han queda-
lento y las cada vez mayores cuentas co- do profundamente dañadas: quizá en bus-
rrientes de los desaprensivos. Gran parte ca de un mal entendido espíritu comercial,
de los últimos éxitos pop anglosajones son quizá porque las condiciones sociales han
plagios de los clásicos de Motown y Spec- cambiado mucho en EE UU, ha desapare-
tor de hace 20 años (Bananarama, Wham!, cido la conciencia de negritud y ya no se
Kim Wilde, Cindy Lauper), cuando no se escriben, con honrosas excepciones, can-
hacen simple y llanamente versiones. In- ciones con mensaje. Por otro lado, los
cluso se estila recuperar a clásicos como adelantos en la instrumentación electróni-
Curtis Mayfield o Lamont Dozier para ca y el abaratamiento de los nuevos me-
dar vida a los mediocres discos de las star- dios técnicos han facilitado la uniformiza-
lettes que les han sustituido en las prefe- ción de sonidos e incluso de creatividad; la
rencias de los compradores. Igualmente, música negra está dominada por la fórmu-
los trucos discotequeros son utilizados la y donde antes había 10 subestilos, aho-
una y mil veces para captar la atención del ra no hay más que una ingente morralla de
oyente hacia cualquier mediocre canción y mediocridad en una escena que, por su
los mejores productores de música negra
son contratados por todo el mundo con
ambición y falta de ideas frescas, desde
Bowie, Dylan, Springsteen o Jagger a Du-
ran Duran y quien se tercie. Todo el mun-
do graba dúos con Michael Jackson, Dia-
na Ross o Aretha Franklin, y todo compo-
sitor que se precie pasa canciones a Tina
Turner a ver si su buen oficio las salva y
cuelan como geniales.

"LOS MÚSICOS DE `JAZZ' SON CREATIVAMENTE CAPACES DE TRASVASARSE HACIA
CUALQUIER LADO. EL `JAZZ' RESULTA PERJUDICADO, PERO A LA VEZ CRECE" (P. Rushen)

Grace Jones realizó una extraordinaria condición margi- Maze. La personalidad más heterodoxa de
serie de discos sincréticos antes de nal, sólo permitía la la década será Grace Jones, que, después
derivar hacia el cine. supervivencia de de tres elepés de disco-music convencional,
los más geniales. inicia en 1980 su aventura vanguardista
Los grandes con Warm leatherette, mezclando influen-
productores blancos, Bill Hoy día todo el cias reggae y de rock sofisticado con una
Laswell, Don Was, Arthur mundo tiene acce- fuerte imagen andrógina y exhibicionista.
Baker o Jellybean Benitez, so a comprender y A su lado lo más radical será, en la música
dictan las leyes en los disfrutar de la mú- negra de los ochenta, el hip-hop, cultura ca-
estudios de grabación, aunque sica negra, pero llejera neoyorquina cuyas manifestaciones
poco tienen que ver con sus también es verdad principales son el break-dance, baile acro-
desaprensivos antecesores de que ésta atraviesa bático de los teen-agers hispanos y negros
l os años cincuenta y sesenta. una etapa poco bri- del Bronx, el estilo electrónico que los in-
La relación interracial a nivel llante: cara y cruz gleses llaman electro funk, de D-Train y
musical ha dado sustanciosos del interesante re- The System, y el rap o parlamentos rima-
frutos en nuestros días, como ciclaje sufrido por dos que incluyen historias, anuncios y de-
l os discos de Teena Marie, este género. ¿Cómo dicatorias de los disc-jockeys. Kurtis
The System, Mary Jane Girls o se ha llegado a esta Blow, Afrika Bambaata and The Soul So-
l os triunfadores Beastie Boys. situación? Se trata nic Forge y Grand Master Flash and the
de una lenta y sor- Furious Five fueron los primeros maes-
prendente evo- tros de un estilo que entró por primera
lución. vez (1979) en las listas con el Rapper's de-
light de Sugar Hill Gang, basado en un riff
La disco-music de Chic.
era dueña de la es-
cena al comienzo Tal como avanza la década se acelera
de la década -in- el proceso de aburguesamiento de la músi-
cluso, clásicos ca negra. Músicos de formación jazzistica
como Gene Chand- (Charles Earland, Ramsey Lewis, Rodney
ler, Tina Turner o Franklin, Bob James) trabajan para las
Ben E. King graba- discotecas. También funcionan comercial-
ban disco-, pero mente Crusaders, supergrupo muy versá-
ya Donna Summer til formado por tres virtuosos, el saxofo-
había triunfado con nista Grover Washington Jr., y Patrice
Hot stuff dando un Rushen, pianista creadora de haven't you
paso gigante hacia heard y Forget me nots. Son, sobre todo, el
el rock y decidiendo guitarrista George Benson y el cantante
la batalla: la disco-music, que hacía uso ge- Al Jarreau, que combinan añejas técnicas
neroso de grandes orquestas, era mucho instrumentales y vocales de jazz con soni-
más cara que el rock, que además atrave- dos modernos y atmósferas de música am-
saba, gracias a la nueva ola, una etapa mi- biental, los que se llevan el gato al agua,
nimalista. A la industria, evidentemente, pues sus discos tienen las ventajas de la
le interesaba promover los conceptos roc- buena música seria junto a las de la buena
keros -artistas de mayor longevidad, música de consumo. Herbie Hancok y
más mitificables y explotables- y no le George Duke prefieren dedicar sus esfuer-
importó quemar a los magos de las pistas zos a la música más puramente bailable,
de baile. Sólo quedó a salvo el mejor y mientras a lo largo de la década son
más creativo de los grupos disco, Chic, Quincy Jones y Narada Michael Walden,
convertidos en un secreto a voces. Tras otros dos músicos con raíces en el jazz, los
producir el We are family, de Sister Sled- productores de más éxito e influencia.
ge, se consagraron definitivamente para
terminar convirtiéndose en productores Un joven bajito de Minneápolis llama-
cotizadísimos por quienes apuestan hasta do Prince se convertirá en un verdadero
las más consagradas estrellas de rock. La mito con su híbrido de funk and roll, con
pescadilla se muerte la cola. ayuda de un arma frágil y peligrosa, como
Earth Wind and Fire serán otra de las es el escándalo. Su gran competidor será
grandes influencias de la década recién co- Rick James, estrafalario y veterano guita-
menzada. En 1980, con Let me talk logran rrista de Motown cuyos avanzados con-
que su sonido facilón y bailable sobrepase
la transcendencia de su mística y sus men-
sajes. Son promocionados como sólo la
multinacional CBS sabe hacerlo y se con-
vierten en líderes de la música negra. Tras
sus huellas muchos grupos multitudinarios
saltan a la palestra. Slave, Jeffrey Osborne
y LTD, Atlantic Starr, los veteranos War, y

"NECESITO CANTAR PARA MANTENER MI CORDURA; SI NO LO HICIERA,
ME CONVERTIRÍA EN UNA ASESINA DE MASAS O ALGO ASÍ" (Chakka Kahn)

ceptos teóricos no se reflejan en sus discos Bobby Womack, cabecilla de una
de funk convencional. El guitarrista de se- dinastía musical que ha mantenido la
sión Ray Parker Jr. también flirteó con la ll ama del soul.

fórmula rockera en canciones como The heila E, Jellybean
Benitez o Angela Bofill son los
other woman y Ghostbusters. sucesores de los grandes
mitos del latín-soul(Van McCoy,
Los nombres de Evelyn King, Gap Odyssey y Gloria Gaynor), y
Band, Stephanie Mills y Randy Crawford aunque ha sido un grupo de
origen sospechoso, Miami
empiezan a sonar, pero muy pronto se Sound Machine, y su cantante,
Gloria Estefan, los que más
hace evidente por dónde irán los tiros en alta han mantenido la
conciencia racial, junto' a los
el futuro próximo y se establece un tipo de salseros Fania All Stars y sus
elepés híbridos (Delicate and
canción bailable, basada en dos acordes, jumpy, Spanishfever, Rhythm
machine y Social change).
sobre ritmo de cuatro tiempos de bombo-

caja-bombo-caja, instrumentación elec-
trónica y estructura pop que será inevita-

ble en los próximos años. Todos, desde

Ritchie Family (I'll do my best), hasta Ste-
vie Wonder (Love light in flight) pasando
por Narada Michael Walden (I should

have loved ya), Odissey (Incide out), Janet
Jackson, la etapa moderna de las Pointer

Sisters, B.B. & Q. Band, Evelyn King, et-

cétera, copian el modelo hasta el aburri-
miento.

El éxito de la escudería Solar (Sound of

Los Angeles Records), gracias a los discos
de Shalamar (Friends, sobre todo), Whis-

pers y las producciones de Leon Sylvers,

gustan mucho en Europa y hacen renacer
el concepto disco, aunque no la denomina-

ción. Los veteranos Kool and the Gang se

van a establecer como líderes, con cancio-
nes efervescentes (Ladies' night, Celebra-

tion, Get down on it, etc.)

En 1983, con el éxito insuperable del

Thriller, de Michael Jackson, la música ne-

gra logra cimas que nunca soñó; el resulta-
do es a la larga contraproducente, pues
comparados con los récords de Michael, Eurythmics, Mick Jagger y los Jacksons,
las ventas de cualquier artista resultan Aretha y George Michael, Patti Labelle y
irrisorias. Finalmente, decenas de contra- Michael McDonald, Tina Turner y Brian
tos son rescindidos, quedando sin compa- Adams... o, peor aún, combinaciones
aberrantes, como Phillip Bailey y Phil
ñía artistas de probado talento y reputa-
ción: afortunadamente, Bobby Womack Collins.
Hay un renacer del concepto crooner, el
mantiene la bandera del soul con The Poet
y Marvin Gaye demuestra con Sexual hea- vocalista aterciopelado y romántico, gra-
ling lo sugerente y elegante que puede ser cias quizá al éxito de Lionel Ritchie y la
respetabilidad de Luther Vandross, des-
una canción de éxito. cubierto por David Bowie: Richard Dim-
ples Field, James Ingram, Eugene Wilde,
Se potencia la política de los dúos, ini- Jeffrey Osborne y, recientemente, Gregory
Abbott, hacen lo que pueden por recupe-
ciada por Roberta Flack y el gris Peabo rar la tradición de las buenas voces y las

Bryson, que conduce a las combinaciones

más inesperadas en sus intentos de am-

pliar mercados y los más insulsos resulta- grandes canciones tras la desaparición,
dos como efecto de rebote de sus mismas más o menos trágica, de Jackie Wilson,
ambiciones. Michael Jackson y Dave Ma- Marvin Gaye o Walter Jackson. En mu-
son, Diana Ross y Julio Iglesias, Michael chos casos, la insulsez de la nueva era im-
Jackson y Paul McCartney, Aretha y los pedirá los resultados apetecidos.

También es tiempo de divas. Randy
Crawford pone incluso voz en discos de

los Crusaders (Streedife), mientras Anita
Baker utiliza su bien educada garganta en

grabaciones elegantes pero escasamente

innovadoras. Pero la más afortunada es

Whitney Houston, con prestigiosos ante-

cedentes (su madre y tía son, respectiva-
mente, Cissy Houston y Dionne Worwick)

y discos tan rutilantes como faltos de es-

pontaneidad.

"LA GENTE TE SIGUE POR LA CASA, PERO NUNCA HASTA EL BAÑO. A MENUDO
ESCRIBO CANCIONES ALLÍ, LO HE CONVERTIDO EN MI SANTUARIO" (Lionel Ritchie)

Rick James, pionero de la aproximación como Chakka Kahn recurre a las cancio-
entre el rock y l a música negra.
nes principescas para mantenerse en las
El pop negro británico
listas. También existe un proceso de recu-
ha florecido en los ochenta
probando nuevas fórmulas. peración de clásicos; tras el éxito de Tina,
Heatwave lograron gran
repercusión durante el se lanza a Patti Labelle, Nona Hendryx,
cambio de décadas, y el
veterano Billy Ocean ha los Neville Bros. y James Brown, habitual-
l ogrado convertirse en una mente protegidos por los menos idóneos
figura internacional. Leve¡ 42
e Imagination han triunfado en nombres de la música blanca. Los resulta-
toda Europa, a pesar de que
grandes esperanzas como Light dos son impersonales y rutinarios, y ni las
Of The World, Beggar and Co.
estrellas ni sus fieles seguidores quedan
y Linx quedasen frustradas o las
satisfechos a pesar de algunos impactos
actuales figuras, Junior,
David Grant, Jackie Graham, ocasionales en el mercado.
Haywood y Princess no
acaben de encontrarse a sí Un síntoma de que los productos con-
mismos.
temporáneos tienen poca imaginación y

menos credibilidad, es la reedición de dis-
cos de la era dorada del soul, tanto éxitos

como grabaciones perdidas. Unas veces

son las compañías originales, otras edito-

ras especializadas (Reino en Califomia,

Ace y Demon/Edsel en el Reino Unido), y

resulta altamente curioso ver a un mismo

tiempo escalar las listas a Ben E. King,

Sam Cooke y Jackie Wilson. Se recuperan

también éxitos de los setenta, como es el

caso de Real Thing, que llegan de nuevo al
número uno en el Reino Unido 10 años

después de su aparición; o de Club Nou-

veau, que recuperan el Lean on me, de Bill

Whithers. Esta situación, impensable a

principios de los setenta, es por supuesto

consecuencia de la falta de competencia

que las producciones actuales suponen.
Si exceptuamos a los geniales Womack

& Womack y otros pocos más, la música
de consumo negroamericana se ha sacrifi-

cado a sí misma por su excesiva ambición.

La tentación de un reciclaje en los merca-

dos multirraciales es fuerte para artistas,

productores y editoras. ¿Por qué confor-

marse con ser marginal si se pueden tras-

pasar las fronteras comerciales con facili-

En los años de Michael Jackson, todos dad? ¿Por qué permanecer en el gueto del
sus hermanos e imitadores van a intentar soul cuando se puede reciclar a nivel pop?

recoger alguna migaja de su gloria e inclu- Los jóvenes negros no han tenido los pro-
so su concuñado Rockwell -hijo de Berry
Gordy- logrará un éxito a su sombra. Se blemas de segregación que vivieron sus
consagran Madonna, Tina Turner y Prin-
ce en 1984 y gracias al cine se produce el padres y abuelos y no sienten la necesidad
reciclaje del hip-hop. Una nueva genera-
ción de artistas callejeros obtiene gran de ser puristas. La existencia del nuevo
credibilidad entre los adolescentes gracias
a combinar letras rebeldes y aspecto rudo pop negro es una auténtica hazaña para su

con una música tan machacona como in- raza, una sólida realidad. Si sobrevive, se
tragable para los mayores. Run/D.M.C., le pueden exigir resultados más sustancio-
Fat Boys, L. L. Cool J., Beastie Boys, Full
Force y sus protegidos Lisa Lisa and the sos; ahora, el simple hecho de que todo el
Cult Jam y The Real Roxanne, y Force
Md's, son los más reconocidos. Aunque mundo consuma música negra supone un
los grupos más pop, como De Barge o New
Edition, siguen triunfando sin complica- cambio social tan grande que merece la
ciones.
pena soportar la falta de sabor de la in-
Desde Minneápolis surge una caterva
de protegidos y ex compañeros de Prince, mensa mayoría de las producciones ac-
entre los que destacan Sheila E y la pareja a
de productores Jimmy Jam-Terry Lewis, y tuales.
hasta alguien con tanta personalidad

"LO TENGO CLARO. L A CUESTIÓN AHORA ES HACER
ÉXITOS, GANAR DINERO" (Andrew Gold, de Wax, 1986)

Huey Lewis and The News son uno de los

pocos grupos rockeros al viejo estilo que
triunfan en las listas estadounidenses.

INDIVIDUALISTAS

Y ESTRELLAS

FUGACES

SANTIAGO ALCANDA abandonó el poderoso grupo The Raspbe- unque los grupos
rries, de Cleveland, su tierra natal, para australianos suelen terminar en
Los que se comentan a continuación son iniciar su carrera en solitario en 1975. Un el Reino Unido, algunos han
solistas o grupos de los ochenta que apa- año después logró su máximo éxito, All by cultivado el mercado
recen y desaparecen en las listas de éxi- myself, de su primer elepé. Los tres siguien- norteamericano con buena
tos estadounidenses, que alcanzan o se tes pasaron inadvertidos. Carmen hubo fortuna. Men at Work se formó
aproximan al ansiado número uno, o que de esperar a 1984 para llamar la atención en 1982 y se separó en 1985,
permanecen en el estado de gracia de la con I wanna hear it from your lips. No con- con tres elepés y algunos clips
popularidad o incluso en el del prestigio. fundir con Phil Carmen, también cantante memorables. El primero,
Muchos habían conocido ya tiempos di- y guitarrista, un canadiense afincado en Business as usual, fue su acierto
chosos o sencillamente mediocres en al- Suiza que ha resurgido en la mitad de los para entrar en Estados
guna banda de los setenta y, no querien- ochenta para la audiencia europea. Unidos gracias a dos temas,
do perderse en el anonimato, renovaron Who can it be now? y Down
sus planteamientos, su estilo, y afronta- Sheena Easton. Esta escocesa de 1959, under. Después sacaron Cargo
ron con mayor o menor suerte los nue- elegida como sujeto central de un docu- en 1983 y Two hearts en
vos tiempos. En todos los casos, la técni- mental de la BBC sobre cantantes aspi- 1985, y sus canciones y
ca más la experiencia están en sus rantes, hubo de marcharse a Estados relaciones fueron de mal en
manos. Unidos al comprobar que su canción 9 to peor. El cantante Colin James
S llegó al primer puesto de las listas. Su Hay salió airoso de la quema y
Berlín. Réplica californiana al espíritu éxito se extendió a Japón y Canadá e in- comenzó su propio camino con
tecno, con la relajación y calidez propias cluso grabó baladas en castellano para el Looking for Jack.
del lugar. Terri Nunn, diminuta rubia de público hispano. Ganó un grammy a la
ojos infantiles, aprovechó su sensuali- cantante femenina promesa de 1981 gra-
dad para interpretar textos propios so- cias a su interpretación del tema princi-
bre la música de su compañero John pal del filme Sólo para tus ojos, de la saga
Crawford, como Sex (I'm a ... ). Resuci- James Bond. En 1982, su tercer álbum,
tan comercialmente en 1986 con Take Locura, dinero y música, inició la carrera
me breath away, de Giorgio Moroder, de descendente de una británica en Califor-
la película Top gun. nia, contrarrestada por el sugerente Su-
gar walls, de Prince.
Stephen Bishop. Irrumpió en 1976 con Ca-
reless, grabado junto a estrellas simpati- Michael Franks (1944). Su apego inicial a
zantes, como el guitarrista Eric Clapton, las raíces del country, con el manejo de la
Art Garfunkel o Chaka Khan. A los dos guitarra acústica y el banjo en los prime-
años continuó su obra ejemplar, de exqui- ros días de los setenta, se sustituye por un
sita sensibilidad, con Bish, cuya portada espíritu jazzistico muy abierto a otras co-
reflejó su afición al cine, confirmada por rrientes que van desde Eric Satie a Miles
su intervención en un par de películas de Davis o Antonio Carlos Jobim, sin perder
John Landis, Desmadre a la americana y nunca contacto con el gusto popular. Le
Granujas a todo ritmo, y por su relación da a conocer The art of tea, con The Crusa-
sentimental con la actriz Karen Allen. Su
tercer disco, Red cab to Manhattan, de
1980, contó con la ayuda de Phil Collins.
Bishop devolvió el favor al batería de Gé-
nesis con su canción Separate lives, tema
central de la película Noches de sol. Ade-
más, Bishop ha interpretado o compuesto
los temas principales de películas como
Tootsie, Síndrome de China o Desmadre a
la americana.

Erie Carmen. Guitarrista y productor,

"LAS DISCOGRÁFICAS NORTEAMERICANAS NO TIENEN N I NG ÚN RESPETO POR NUESTRA
TRADICIÓN MUSICAL; PREFIEREN VENDER `POP' INSÍPIDO" (Huey Lewis, 1985)

Cyndi Lauper divide su tiempo entre ders, y no deja de nitivo llegó con Power of love, su número
su carrera musical y el oficio perseguir la reno- uno, tema central de Regreso alfuturo, pe-
vación, duchándo- lícula de la factoría Spielberg, en la que el
de representante de luchadoras. se de literatura tro- propio Lewis interpretó el personaje de
pical y pasional, y profesor de Michael J. Fox.
En los años ochenta,
un buen número de actores han de su adoración a Cyndi Lauper (1953). Esta pequeña neo-
pasado al campo del rock: la pintura. Los sin- yorquina con cara de muñeca de porcela-
dado que ya cuentan con una tetizadores y la am- na grabó en 1980 como cantante de Blue
imagen reconocible, plificación de soni- Angel, grupo de estilo nuevaolero, con una
consideran que lo de triunfar en dos de la guitarra repercusión aceptable. En 1984, el sello
la música es cosa fácil. Don no han sido un pro- Portrait dispuso de sus mejores medios
Johnson (Miami vice), Bruce blema para él, auxi- para descubrir una voz modélica y unas
Willis (Luz de luna), Eddie liado siempre por canciones directas y contagiosas, fuertes,
Murphie, Chevy Chase o William los mejores músi- Girls just want to have fun, o tranquilas,
Katt (El gran héroe cos de sesión en Time after time. Favorecieron su éxito sus
americano) no dudan en grabar cada uno de los 10 vídeoclips y la interpretación del tema cen-
discos. Don Johnson había elepés editados has- tral de The goonies.
intervenido en elepés de Allman ta 1987, incluida
Brothers Band antes del éxito una demostración Kenny Loggins (1948). Entró en los estu-
de la serie Corrupción en Miami, de sus registros vo- dios en 1972, para grabar en solitario con
en la que Glenn Frey, Tina cales en vivo. la producción de Jim Messina. El álbum
Turner o Fiona tampoco han Sittin'in salió finalmente como Loggins
vacilado en aparecer, para Don Henley (1947). and Messina, y Kenny no grabó solo hasta
bien de sus propios discos. Formó parte de la 1977. Desde entonces su carrera, más cer-
banda country-rock cana al gran público, ha mejorado tiempos
por excelencia, Ea- pasados, con la edición incluso de un ál-
gles. Henley ya bum doble en directo que incluía su ver-
cantaba y tocaba la sión de What a fool believes, primero de
batería en el grupo una serie de temas en comandita con Mi-
Shiloh. Henley fue chael McDonald. Loggins ha frenado su
quien interpretó ímpetu creativo con interpretaciones flo-
jas de los temas principales de Footloose y
Desperado, One of
Top gun.
these nights y Hotel
Michael McDonald. Tiene tres facetas:
California, clásicos toca los teclados, compone y, sobre
del rock estadouni todo, canta cual negro disfrazado de
dense. Su colaboración en discos ajenos blanco. McDonald, miembro eventual
en los estudios californianos es muy co- de Steely Dan, presentó una maqueta a
rriente. En 1982 publicó su primer disco Warner Records, lo que le ayudó a unir-
en solitario, 1 can't stand still, y normalizó se a los Doobie Brothers en 1976; la ca-
su dúo compositor junto al guitarrista rrera de la banda cambió rotundamente
Danny Kortchmar para crear temas tan y McDonald no tardó en convertirse en
divertidos como Dirty laundry o Johnny el líder. Fue responsable de la estructura
can't read. En 1985, Building the perfect musical de What a fool believes, pieza co-
beast, su segundo álbum, alcanza la cifra piada repetidamente. Es fácil reconocer
de dos millones de copias vendidas sólo sus armonías vocales en discos de Chris-
en Estados Unidos. El fenómeno, paralelo topher Cross, Toto, Carly Simon, Kenny
al resurgir de John Fogerty, responde a la Loggins o "David Pack, primera voz de
agridulce nostalgia por los sesenta, puesta Ambrosia. Su carrera en solitario se ha
de moda por la película Reencuentro. levantado gracias a un par de dúos voca-
les junto a Patti Labelle en On my own y
Huey Lewis and The News. Huey Lewis, James Ingram, protegido de Quincy Jo-
voz y armónica, estuvo en la banda califor- nes, en Yah mo be there, y al tema princi-
niana de country-rock Clover, que actuó en pal de Apunta, dispara y... corre, una
locales de Londres e intervino en discos de composición de Rod Temperton llamada
Elvis Costello (My aim is true) y Phil Lynott.
Huey y el teclista Sean Hopper fundaron Sweet freedom.
en 1982 Huey Lewis and The News, junto
al guitarrista Johnny Colla, el bajista Mario Mr. Mister. Richard Page y Steve George,
Cipollina y el batería Bill Gibson, proce- voces cotizadas de los estudios california-
dentes del grupo Soundhole. Influidos por nos, que han llegado a colaborar con Dia-
el rock and roll de los cincuenta y las gran- na Ross, Al Jarreau, Randy Crawford o
des melodías de Sam Cooke, su tercer ele- Julio Iglesias, crearon el grupo Pages a
pé, Sports, de 1984, vendió seis millones de
copias en Estados Unidos. El remate defi-

"LA MEJOR MÚSICA SE HACE ENTRE AMIGOS, Y ASTRUD GILBERTO, TOOTS
THIELEMANS, MICHAEL BRECKER Y DAVID SANBORN SON MIS AMIGOS" (Michael Franks)

mediados de los setenta y editaron tres espontaneidad fun- A pesar de su imagen, el canadiense
discos. Según George, "las canciones eran dida con virtuosis- Gino Vannelli se ha especializado
muy buenas, pero alcanzaban más a una mo; 1 just wanna en sonidos etéreos.
audiencia de músicos que a una audiencia stop, una melodía
de oyentes medios. Necesitábamos tomar contagiosa, contri- n el Reino Unido
otra dirección". El segundo álbum de Mr. buyó a vender dis- despuntan artistas con
Mister, es decir, Pages reciclados, consi- cos. Vannelli pudo vocación transatlántica. Paul
guió el número uno con Broken wings. Se convertirse en una Carrack (ex Ace, ex Squeeze)
llamó Bienvenidos al mundo real, para indi- estrella discográfi- cruzó el océano con Nick
car por dónde iban. ca pero prefirió Lowe para mezclarse con los
continuar en la ex- músicos de Nashville y la voz
Olivia Newtohn-John (1948). Una inglesita perimentación. de Carlene Carter, grabando en
de Cambridge criada en Australia sor- Tras Night-walker y como cantante de Mike and
prendió a la audiencia norteamericana (1981), calló tres The Mechanics. Murray Head,
con sus recreaciones melosas de country años y halló un so- cantante-compositor y actor
hasta situarse en el primer puesto de la lis- nido propio que -protagonizó Madame
ta pop con I honesdy love you en 1974. Des- aceptó el sello fran- Claude-, ha desarrollado
pués vino su papel estelar de adolescente cés Dreyfuss: Black una carrera muy regular gracias
-cuando ya tenía 30 años- en Grease cars ha presentado a su primer tema celebrado,
junto a John Travolta y las canciones You- el apellido Vannelli Say it ain't so, Joe. Chris Rea,
al gran público. un multiinstrumentista, ha
're the one that I want y Summer night y su repetido su éxito de los setenta
J. D. Souther. ínti- (Fool if you think is over) en
interpretación de protagonista de Xanadú, mo de Linda Rons- l os ochenta con On the beach.
película en la que bailó o se movió junto a tadt y amigo de los
Gene Kelly. Grabó Xanadú con la Electric Eagles, destacó
Light Orchestra, y a continuación dúos cuando Peter As-
junto a Andy Gibb y Cliff Richard. En so- her, productor y
litario repitió número uno con Physical. manager personal
de Ronstadt y Ja-
Kenny Rogers (1939). El éxito se resistió mes Taylor, dirigió
ocho años al tejano Kenny Rogers, que la grabación de su
con el grupo First Edition despertó la segundo disco,
atención con la canción Ruby don't take Black rose, con la
your love to tocan en 1969. Reapareció en colaboración de David Crosby, Joni Mit-
solitario en 1977 con Lucille, y en 1979, chell y Art Garfunkel, entre otros. Al tiem-
con The gambler y Coward of the county. po formó trío junto a Richie Furay, ex Buf-
Rogers empezó sus dúos melódicos junto fallo Springfield y ex Poco, y Chris Hill-
a Kim Carnes -cantante que también se man, ex Byrd y ex Burrito con el nombre
había aproximado a la audiencia pop con de Souther-Hillman-Furay Band, que edi-
Bette Davis eye.—, Sheena Easton y Dolly tó dos elepés. Durante un período se con-
Parton, ayudado además por las composi- virtió en el llamado sexto Eagle y escribió
ciones de Lionel Richie, caso de Lady, que juntó .a Glenn Frey el triunfal New kid in
fue número uno. tocan, de Eagles. Como J. D. Souther gra-
bó dos elepés, You're only lonely, con éxito,
Rick Springfield (1949). Australiano, can- y Home by down, con una colaboración en-
tante y compositor con aspiraciones de tre medias para James Taylor en el tema
actor, Springfield grabó discos que pasa-
ron sin pena ni gloria en los años setenta. Her tocan too.
En los ochenta, protagonizó la serie televi-
siva norteamericana General Hospital y su Wax. Son Graham Gouldman y Andrew
canción Jessie's girl le valió un grammy al Gold. Gouldman, británico, estuvo en
mejor vocalista de rock de 1981. Continuó Mindbenders, Hotlegs y escribió el éxito
el éxito con el álbum El éxito no me ha afec- For your love para los Yardbirds antes de
tado todavía, en el que se incluía una ver- fundar 10 CC en 1972. Gold, californiano,
sión de Black is black de Los Bravos. hijo del compositor Ernest Gold, domina
todos los instrumentos, como demuestra
Gino Vannelli. Nació en Montreal (Cana- en sus cuatro discos en solitario. Produjo
dá). Ayudado por sus hermanos Joe, pia- a Rita Coolidge, Moon Martin, Nicolette
nista extraordinario, y Ross, compositor Larson, Linda Ronstadt y a 10 CC en
exquisito, experimentó sonidos diversos 1982, año en que conoció a Graham
cercanos al soul, jazz y la bossa desde su Gouldman. En 1984 ambos decidieron
primera grabación en 1973, Crazy life, rea- fundar Wax, una experiencia que ha resul-
lizada en Los Ángeles. Su álbum clave es tado beneficiosa gracias al éxito Right bet-
Brother to brother, un repertorio completo
de música de fusión, instrumentada con ween the eyes.

"DESPUÉS DE LO QUE HE SUFRIDO CON IKE, MI MENSAJE SE CENTRA
EN LA IGUALDAD ENTRE EL HOMBRE Y LA MUJER" (Tina Turner)

TINA TURNER ciende meteóricamente. Tina Turner, en compañía de Lionel
Bien guiada por un manager Ritchie: dos protagonistas
EL GRAN RECICLAJE hambriento, se atreve con de metamorfosis musicales.
un tratamiento relajado de
DAVID S. MORDOH Help! (Beatles), donde pue- Break every rule, segunda oferta
de pasear las habilidades vo- triunfal, explota el filón al fin hallado
El arco formado por las piernas desnu- cales. No hay más que resca- evitando en lo posible aventuras de fi-
das de Tina Turner (1938) en el centro tar en las entrevistas el pasa- nal incierto. Aunque ahora ya no hay
del escenario, tapadas justo donde do legendario para crear ex- premuras de tiempo ni de presupues-
se juntan al resto del cuerpo- con al- pectación, llenar aforos im- to, repite la fórmula (reparto de los
gún harapo desgarrado remotamente pensables un año antes y ro- cortes del elepé entre diferentes pro-
parecido a un vestido, es una de las dearse de colaboradores de ductores) que tan bonito resultado
imágenes sagradas del rock. Estas pier- lujo. Prívate dancer, el elepé dio con su Private dancer. Repite can-
nas, todo músculo, de piel brillante, del retorno en 1984, crece ción de Bowie (Girls), Knopfler (Over-
moviéndose excitante y frenéticamen- con pulso firme hasta con- night sensation) y Rupert Hine (Break
te, incansables, se convirtieron en vertirse en producto hiper- every rule, I'll be thunder). Hasta el
símbolo para el público blanco harto millonario. Nunca se ha momento, de él se han extraído cua-
de músicos peludos sin ningún encanto dado este caso: una figura tro sencillos que, sin la operatividad
sexual; Tina Turner queda inmortaliza- veterana recuperada con comercial de sus antecesores, mantie-
da en las mentes del gran público como tanta fortuna que eclipsa sus nen a la dama en cartel.
ejemplar único de negra fogosa, con un viejas hazañas. Los flirteos
marido que no parece -vista su pre- de Tina con el rock por pri- La falda ahora casi le llega a las ro-
sencia humana casi famélica- capaz mera vez decantan la balan- dillas; el peinado leonino y el maqui-
de complacerla como merece. Pero Ike, za hacia este lado: nada de llaje meticuloso esconden los estra-
según ella misma confiesa en declara- atavismos genéticos ni raí- gos de la edad; Tina sigue moviendo
ciones típicas de famosos ansiosos de ces, eso no vende; sí en cam- los pies cuando actúa, pero ya no
cimentar su éxito recordando los tiem- bio el "rock" -entre comi- hace tantos kilómetros ni pone en ac-
pos difíciles, no era el pelele que apa- llas- pulidito y arreglado ción todos sus músculos: con casi 50
rentaba. Durante años la atemorizó, para el consumo masivo, el años, la calidad técnica prevalece so-
maltrató y utilizó, hasta que Tina deci- de los músicos de melena bre la fuerza, y sólo esa capacidad
dió poner fin a tan desgraciada convi- bien sujeta por la laca, eter- profunda e ilimitada suya de generar
vencia largándose a mediados de los na sonrisa perfumada y ca- sentimiento -la mueca, unas veces
setenta. Tras 16 años llenos de prome- misa limpia. Un híbrido perfecto que sensual, otras sufrida, que esbozan
sas y algún que otro hit aislado, se rom- goza de los favores de visionarios sus labios, ya sea con un tema de
pía así el dúo musical de color protegi- (Ware produciendo la versión de 1984 Prince o Z. Z. Top- recuerda lo
do de las superestrellas blancas y britá- de Bowie), famosos (Mark Knopfier le grande que ha sido y debe seguir
nicas. cede Private dancer, desecho del disco siendo.
Love overgold), y músicos míticos (toca
La separación deja a Tina en la mi- el mismísimo Jeff Beck), aunque no
seria. Sin nada a su nombre, es como puede -ni lo pretende, a tenor del ma-
volver a empezar. Para un artista con saje visual propagandístico forzado
40 años y cierto renombre durante el por Capitol- esquivar la etiqueta de
pasado, lo normal es dirigirse a ese ce- producto de la nueva era, la dominada
menterio de elefantes que es el circuito por los videoclips y los canales privados
de cabarés tipo Las Vegas (exceptuan- como MTV: omnipresente en la peque-
do esporádicas giras europeas repletas ña pantalla, tanto con los éxitos como
de adaptaciones al rhythm and blues de con conciertos en los que las figuras in-
clásicos de rock). Del marasmo se en- vitadas se llaman David Bowie o Bryan
cargan de sacarla Heaven 17, facción Adams, actriz reconvertida -ya tuvo
escindida de los ingleses Human Lea- un papel años ha en Tommy- para
gue, que planea un álbum de tenno funk Mad Max 3, es un personaje fundamen-
con temas inmortales a cargo de dife- tal para comprender la evolución del
rentes celebridades. Tina recrea Ball of mercado en los últimos tiempos.
confusión, de Temptations. Su voz in-
cendiaria, respaldada por arreglos ac- HISTORIA DEL `ROCK'
tualizados, asombra tanto a la crítica
como al propio cabecilla de Heaven 17, PRóXIMO CA PÍTULO
Martyn Ware, quien le producirá el pri-
mer éxito para Capitol Records en 'ROCK' ESPAÑOL
1983, otra versión, esta vez el gran
Let's stay together, de Al Green. AÑOS OCHENTA

A partir de entonces, su carrera as-

EL PAIS

HISTORIA DEL `ROCK'

Al mismo tiempo que se produce el encumbramiento
de las ideas surgidas durante la nueva ola, los años
ochenta ven en España la consolidación de otros mo-
vimientos musicales. El heavy metal logra implanta-

ción popular gracias a grupos como Obús o Barón

Rojo, mientras se convierten en estrellas cantautores
como Luis Eduardo Aute o Joaquín Sabina (en la
foto), que se hacen acompañar de grupos de rock. An-
dalucía sigue produciendo sorpresas de la talla de
Martirio, mientras que en el Norte privan los sonidos duros: lo confirman los
Ilegales o el llamado rock radical vasco, que alcanzan un público considerable sin
apoyo de los grandes medios de comunicación.

LA POLÍTICA INSTITUCIONAL DE CONCIERTOS HACE QUE EL `ROCK' ESPAÑOL
SALGA DE LA MARGINALIDAD Y VIVA UNA RELATIVA PROSPERIDAD

OCK' ESPAÑOL, Con Barón Rojo, el heavy metal español 46
l ogra alcanzar una madurez instrumental
w para presentarse dignamente ante
audiencias internacionales. Las letras del
ANOS OCHENTA grupo pretenden reflejar las inquietudes de

l os sectores juveniles menos privilegiados.

"¡VAMOS MUY BIEN, BORRACHOS COMO CUBAS... Y QUÉ! / AÚN NOS
MANTENEMOS... EN PIE, / Y YA NO PARAREMOS HASTA NO PODER VER" (Obús)

Las canciones de Obús son odas a la XPLOSIÓN en los albores de la década de los ochenta,
vida peligrosa, a la velocidad y a los cuando los músicos sinfónicos y del llama-
DE METAL do rock urbano le vieron los dientes a la re-
excesos. conversión (luchar o morir). Y decidieron
JESÚS ORDOVÁS luchar. Así, por ejemplo, Fortu (Fructuo-
El último disco de so Sánchez, burgalés de 1954), el cantante
El gran público supo por primera vez del de Obús, ya había probado suerte con
Obús es un doble álbum que monstruo cuando oyó el rugido de la fiera Nudo -un grupo sin demasiada cuerda
recoge el concierto que el embravecida y orgullosa, allá en la plaza que intentó alcanzar el éxito presentándo-
cuarteto madrileño dio en el de toros de Las Ventas. Miles de cuerpos se al Festival de Benidorm-, Colores,
pabellón deportivo del Real sudorosos llenaron el ruedo y las gradas Araxes y Unión Pacific, con los que tam-
Madrid en febrero de 1987. Más del inmenso coso la noche que Obús ganó poco llegó demasiado lejos. Pero el heavy
de 5.000 brazos se alzaron el primer premio del IV Concurso Rock de pega fuerte en todo el mundo y Fortu se
con el puño cerrado aquella Madrid (mayo de 1981). Nunca antes se alía con tres instrumentistas curtidos en el
noche, mientras el grupo había visto nada igual. El vocalista Fortu género (Fernando Sánchez, Juan Luis y
soltaba su mejor metralla anunció con tono apocalíptico que iba "a Francisco Laguna) y en octubre de 1981
repertorio y la cerveza corría estallar el Obús", y de pronto se abrieron lanzan el primer elepé español de rock
por las gargantas de los jevis. los cielos de par en par, se vio un fogonazo duro con tachas en la portada.
Pocas veces la estructura de que dejó ciegos a los nuevaoleros, y el equi-
hierro y cemento del po de sonido empezó a echar fuego y a vo- Después de una larga década de mise-
polideportivo ha soportado mitar metralla. rias y despropósitos, el rock español em-
tal volumen brutal. Sin haberlo pieza a tomar fuerza y a ganar adeptos a
visto, resultaría difícil Pero nada de esa fanfarria era nuevo su causa. Las ventas de elepés alcanzan el
entender la historia suicida de para las gargantas que entonaron al uníso- oro y el platino (50.000 y 100.000 copias);
Obús: "Subo el volumen / no Sólo lo hago en mi moto y otros himnos los pabellones y plazas de toros se llenan
siempre. Una litrona / siempre. guerreros con los que los hijos del agobio de un público muy joven, ávido de sensa-
Globo tras globo / siempre. celebraban su triunfo sobre los popis. Era ciones fuertes. Obús, Leño y Barón Rojo
Suena que atruena". la primera vez que los jevis, llegados de Va- se convierten en los puntales del "movi-
llecas, San Blas, Vicálvaro y demás ba- miento de rock auténtico", como diría Ma-
rrios y pueblos de los alrededores de Ma- riscal Romero, motor del sello Chapa, que
drid, triunfaban con todas las de la ley en vivió eufórico el momento del triunfo des-
el concurso de Madrid. Hasta entonces, pués de haber luchado sin cuartel por el
las bandas de rock duro habían sido discri- éxito de sus grupos.
minadas en beneficio de los grupos pop.
Pero había llegado el momento de los jevis. Sin embargo, el primer elepé de Obús
(Prepárate, 1981) es producido por Tino
Las bandas duras españolas nacieron Casal, rey del glam, y Luis Cobos. Y eso a
muchos jevis no les cuadra. Pero Obús son
menos cuadriculados que sus fieles y el as-
turiano también les produce Poderoso
como el trueno (1982), que les confirma en
su puesto de líderes del género ("los que

más", dicen los locutores duros).
Su tercer álbum será precisamente El

que más (1983). Y en esta ocasión es el
propio Mariscal Romero, con la ayuda de
Luis Soler, el encargado de darle el toque
internacional al plástico, grabado en Ibiza
con técnicos anglosajones; el guitarrista
de Iron Maiden, Adrian Smith, aporta un
tema para el disco. Su compañía los lanza
con un gran aparato publicitario, incluso
en América del Sur. El grupo vive sus me-
jores momentos.

Un éxito merecido: fueron los primeros
en trasladar con éxito a nuestro país los es-
pectaculares montajes de las bandas anglo-
sajonas. Pero también impregnaron a esa
parafernalia de un sentido del humor, una
humanidad y un lenguaje propio que, con la
estandarización y comercialización del gé-
nero, corre peligro de perder su gracia.

"MADRID ES LA CAPITAL CON MAYOR NIVEL DE IDEAS ARTÍSTICAS Y
CREATIVAS DE EUROPA. EL ÚNICO PROBLEMA ES EL DINERO" (Miguel Bosé)

Miguel Bosé exhibe su españolidad

en canciones y vídeos, aunque trabaja
con músicos italianos.

ROCK' ESPAÑOL,
A PESAR DE TODO

PATRICIA GODES do el panorama, demostrando una mayor Con un mercado
comprensión del mercado que algunas abierto a los últimos
La diferencia entre la escena musical roc- multinacionales. Chapa, filial de una com- triunfadores británicos y
kera española y la extránjera se aprecia fá- pañía establecida, ya ha cumplido 10 años saturado de grupos nacionales,
cilmente cuando se leen las revistas para de respaldo al rock suburbial, con triunfos el rock español se plantea
músicos. La pregunta %qué equipo te gus- indiscutibles. exportar sus producciones. A
taría tener?", en el extranjero es, por su- pesar del interés causado por
puesto, %qué equipo tienes?". Indudable- La otra cara de la moneda está en la la movida, no es posible vender
mente, el factor económico es básico, y la presencia de personas que se han aprove- a Europa, ya que se necesita
escasez de medios afecta gravemente a chado de las circunstancias, presentando cantar en inglés. Por tanto,
nuestros jóvenes músicos, a pesar del productos muchas veces indefendibles; la Dinarama, Mecano, Hombres
triunfalismo de algunos medios de comu- tentación por el estrellato se ha hecho G, Miguel Ríos y algunos grupos
nicación. También es posible que se haya enorme, dado que parece muy fácil llegar heavy han hecho visitas a
sacado de quicio, inflándolo despropor- a él. Es igualmente cierto que muchas per- México, Perú, Venezuela,
cionadamente, un movimiento que, por sonas con escaso interés por la música tie- Argentina y otros países
sus orígenes y necesidades, es intrínseca- nen puestos de responsabilidad en su latinoamericanos. Parece la
mente humilde y minoritario. Igualmente, mundo, a nivel de negocios, de medios de salida lógica, vista la
hay que recordar aquí la ayuda de ayunta- comunicación o entre los mismos artistas. incapacidad de las compañías
mientos y otras instituciones, que han pa- El interés por lo musical se ha sustituido para lanzar música española
trocinado concursos, ediciones discográfi- en ocasiones por el interés por la vida so- en los países vecinos,
cas y, sobre todo, conciertos masivos gra- cial, con el consabido menoscabo para la demostrada en casos como el
tuitos; gracias a ese circuito oficial muchos creatividad. A diferencia de otros países, de Lobo-hombre en París, de La
grupos han logrado una estabilidad eco- aquí son muchos los grupos que se hacen Unión.
nómica. famosos sin apenas haber pisado un esce-
nario. Por el contrario, hay ejemplos alec-
Desde la nueva ola, que algunos han lla- cionadores -Los Ilegales, Kortatu, La
mado acertadamente rock de colegio, el Polla Records- de gente que, ignorada
rock español ha ido, poco a poco y a veces por la televisión y las radios de fórmula,
forzadamente, consolidándose. El balance han conseguido establecerse gracias al vi-
es saludable si se tienen en cuenta las pe- gor y la abundancia de sus actuaciones.
nurias que sus creadores soportan. Caso
distinto es el de la nueva industria del dis- Así, es dificil dar una visión global, ni
co. Gracias a lo que se llamó movida inde- señalar características generales de la ac-
pendiente, que dio algunos frutos discográ- tividad del rock español de los ochenta. La
ficos interesantes allá por 1983, varias búsqueda de una sobrevalorada originali-
compañías menores se han establecido, dad ha hecho que surja un intrincado dé-
ampliando el mercado y facilitando el ac- dalo de subgéneros, todos ellos en compe-
ceso hasta él. Hoy día, grabar un disco tición por el favor del público. Vista la de-
está al alcance de cualquiera. Los resortes solada realidad, surgen las mil y una es-
que permiten lograrlo han sido ya revela-
dos, y el músico con inquietudes puede
dar rienda suelta a su creatividad y ver sus
frutos. En ese aspecto, la política de Dis-
cos Radiactivos Organizados (DRO) ha
sido la más radicalmente opuesta a la de
las antiguas compañías. Su amplísimo ca-
tálogo de producciones propias así lo con-
firma, al igual que su entramado de subse-
llos (Tres Cipreses, Kraken, Neón Dan-
za.. . ). Grabaciones Accidentales, con una
política más selectiva, y Nuevos Medios,
con un cierto toque elitista, han enriqueci-

"EL MUNDO NOS ODIA PORQUE SOMOS GUAPOS. LAS CHICAS AL VERNOS
QUEDAN PRENDADAS DE MI CALVA DESLUMBRANTE" (Jorge Martínez, de Ilegales)

La Frontera, el western musical visto una respetabilidad a través de inteligentes
desde España. entrevistas, portadas cuidadas (incluida
una firmada por Andy Warhol), y sucesi

vos reciclajes hasta convencer
al consumidor y al periodista
de que, en efecto, Bosé no era
un producto endeble. Sus ele-

pés Bandido y Salamandra

(1986) han sido considerados
por parte de la crítica como
i mpostados, vacuos y prototí-
picos de la música actual es-
pañola: más cuidado de la for-
ma que del fondo.

Barón Rojo. Superestrellas del

heavy-metal. Es in cuarteto
formado por veteranos de los

setenta (Coz), con ambiciones

internacionales y público fiel

que los ensalza y admira
como a verdaderos mesías.

Sus canciones pretenden y lo-
gran ser himnos, como Los ro-

queros van al infierno, Con bo-

tas sucias, Breakthoveen, etcé-

tera. Espléndidos instrumen-

tistas, sis nombres aparecen
c n las enciclopedias anglosa-

jonas del género. En los últi-

mos tiempos, la demagogia de

sus letras y el recurso a los tó

peculaciones de cómo debe ser el ideal de picos heavy hacen temer un agotamiento
la música española juvenil. Éstas son algu- creativo.
nas de las muchas ofertas que circulan ac-
La tendencia auténtica tualmente por el país: Casal Asturiano, con experiencia acumu-
surgió en 1984 y engloba a lada desde los sesenta (con el grupo Los
todos los grupos revivalistas Ariel Rot. Fue sex symbol juvenil ciando Archiduques) y una gran profesionalidad
de los setenta, el rock de garaje debutó, en los años setenta, como guita- gracias a la cual logró, cuando llegó el mo-
y la psicodelia. Entre sus rrista de Tequila. Su carrera en solitario mento, una perfecta identificación con el
numerosos representantes se está formada por dos álbumes, Debajo del nuevo romanticismo, convirtiéndose en su
cuentan Negativos, Sex puente (1984) y Vértigo (1985), que, a pesar portavoz a nivel ibérico. Aparte de éxitos
Museum, Brigada Lincoln, de la sobrepromoción, no han constituido como Embrujada y Pánico en el Edén, tiene
Enemigos, La Granja, La i mpacto alguno. El público y la crítica, en habilidad para trabajar en el estudio de
Coartada, Ex Crocodiles, general, le tienen simpatía, le juzgan con grabación y explotar las posibilidades vi-
Objetivo Perdido, o los benevolencia y están a la espera de que suales de su música sin temor al ridículo.
mismos Ángel y las Guays, 091 haga algo valioso y triunfal.
o Las Ruedas, que La Dama se Esconde. Este dúo de San Se-
representarían una faceta Alarma. Se llamaban Cucharada y mez- bastián comenzó con el seudónimo kaf-
menos ortodoxa. Lo claban rock poshippie con montaje teatral kiano de Agrimensor K. Eran siniestros y
auténtico constituye una esperpéntico y criticismo iconoclasta. Su tenían pretensiones radicales. Como La
especie de gueto o elite, ya complejo ante la nueva ola les hizo replan- Dama encontraron una línea más melódi-
que no ha logrado desbancar a tearse erróneamente su orientación, re- ca e intimista en discos como Avestruces
los grupos más sofisticados. bautizándose como Alarma y tratando de (1985) y Armarios y camas (1986). Acaban
Sólo los Ronaldos, con su encontrar una línea más rockera que no de fimar contrato con una multinacional,
sonido abrasivo e ímpetu acaba de cuajar, aunque ha proporciona-
juvenil, parecen tener do alguna joya como Frío.
posibilidades de conectar
con un público amplio. Miguel Bosé. En los setenta, como ídolo
adolescente, sexual y provocador, repre-
sentó un papel decisivo para la apertura
musical de la entonces puritana escena
musical española. Pop de consumo, rock
sencillo y disco-music naif eran los elemen-
tos de sus primeros y famosos discos. De
mayor, ha intentado obsesivamente lograr

"EL PROBLEMA EN SAN SEBASTIÁN RADICA EN QUE LAS CASAS
DE DISCOS SÓLO SE ARRIESGAN CON FOLCLOR" (Duncan Dhu)

Martirio y Kiko Veneno, dos de los
personajes más insólitos que ha dado la

facción sureña del pop español.

Desperados. Único grupo con-
ceptual de un género que ad-
mite tan poco los conceptua-
lismos como el rock and roll
auténtico. Dirigidos por un
crítico musical (Fernando
Martín), hacen buenos discos
envueltos en fundas llenas de
referencias históricas, versio-
nean a los clásicos (Dúo Di-
námico, Lone Star, Brincos),
y tienen gran vocación comer-
cial, pero no acaban de cua-
jar, a pesar de temas tan oídos
como Molly.

Duncan Dhu. Trío modélico,
natural y sin pretensiones,
con raíces en el rockabilly, el
swing y el folk. Han triunfado
de modo absoluto con su se-
gunda grabación, el elepé Can-
ciones (1986). Son de San Se-
bastián y gustan a los públicos
más dispares. Pueden ser el
nombre de repuesto ante el
deterioro de Hombres G.

Ilegales. Tres asturianos sin Luz Casal. Cantante cuya imagen, en dis- La música
pelos en la lengua que hacen cos y fotografias, está muy cuidada, y que discotequera española ha
un rock ruidoso y genuino. Su no ha logrado todavía la plena consolida- preferido seguir los caminos
líder, Jorge Martínez, da una ción. Tiene grandes apoyos de todo tipo y tecno, como en el caso de los
imagen pública maleducada y violenta; sin es la eterna aspirante a gran dama del rock populares Azul y Negro, o las
embargo, los que le conocen dicen que es español. La canción con más gracia que producciones del misterioso
un músico serio, profesional, culto y cor- ha hecho es Rufino, una de sus colabora- personaje que se esconde
tés, que colecciona guitarras y soldaditos ciones con el dúo Vainica Doble. Indecisa bajo el seudónimo de RT1,
de plomo. Creaciones como Hola, mamon- i nicialmente entre el pop y el rock duro, pa- responsable del éxito
cete; Eres una puta o Soy un macarra han rece haber hallado una línea propia, con europeo de Iván con Fotonovela
eclipsado a otros temas más maduros y canciones creadas especialmente para ella y de un grupo fantasma, Vicio
aprovechables. En directo, demuestran donde aparecen firmas como las de Anto- Latino. RT1 venía del grupo
unas tablas y un sonido nada habituales nio Vega o José Luis Fernández Abel. alicantino Todo Todo, ahora
en estos pagos. llamados Muzak, únicos
Los Mestizos. Sexteto de Huesca, donde supervivientes de los
La Frontera. El sueño del salvaje Oeste re- han generado una verdadera legión de conceptos bailables frívolos,
vivido por unos antiguos punks madrile- grupos (Muertos, Los del Transmuro, junto a los anónimos
ños. Lo que comenzó como chiste se ha Broca...) y gran ambiente. Su edad media artesanos de las memamix, de
convertido en una verdadera carrera pro- es de 18 años y ya han hecho uno de los gran éxito a partir de 1986.
fesional gracias a temas tan populares mejores singles del pop español, La pócima Por el contrario, el experimento
como Pobre tahúr o Judas el miserable, co- del amor -buenas críticas, escasas ven- aflamencado de Laín fracasó,
brando un matiz embarazoso y afectado, tas-, con una interesante y sorprendente a pesar de que prometía ser una
en consecuencia. Les salvan canciones de mezcla de latinidad, rock and roll auténti- vía exportable.
su repertorio y su energía escénica. co, psicodelia y soul.

Martirio. Sevillana protegida de Kiko Ve-
neno, a quien ha superado en popularidad
y trascendencia, ya que va camino de con-
vertirse en fenómeno de índole social. Tie-
ne un solo disco (Estoy mala, 1987), que se
ha vendido sorprendentemente bien, y se

"VIVIR, SER, ESTAR, / TENER LAS TRIPAS EN ORDEN, / ENAMORARSE DE
LOS ARCENES DE LAS CARRETERAS / DE CÁDIZ EN PRIMAVERA" (Martirio)

Rosendo, un músico cuyo carisma Rosendo. Fue líder de Leño, grupo que
reside en su sencillez musical y evolucionó hacia unos sonidos urbanos,
personal. que son los que han sobrevivido en los dos
elepés del guitarrista en solitario (Loco por

incordiar, 1985, y Fuera de lugar, 1986).
Pretende ser una respuesta auténtica a Ra-
moncín, ha mantenido un contacto abso-
luto con la calle, entre cuyos sectores más
jóvenes es prácticamente idolatrado. Inte-
lectualmente aceptado por los teóricos,
Rosendo se alza como uno de los grandes
candidatos al superestrellato rockero es-
pañol, con su voz arrasada y temas que
buscan la identificación espiritual con su

audiencia.

Stukas. Son unos veteranísimos asturia-
nos especialistas en la linea rockera que
domina aquellas tierras. Ese arraigo del
rock and roll y el rhythm and blues, aun an-
tes de que se pusieran de moda, se nota en
paisanos, como La Banda del Tren, o veci-
nos, como Los Cardiacos de León. Stukas
son una prueba de la peculiar escena mu-
sical de aquella zona, que permite una su-
pervivencia y una profesionalidad a sus
grupos, a nivel local y sin necesidad de re-
ciclaje discográfico, algo muy dificil en el
resto de España.

Toreros Muertos. Versión actualizada de
las orquestinas. Humor fácil, cuartelero y

chabacano, montado sobre música sim-ple, machacona y ruidosa, son los rasgos
característicos de un grupo cuyo éxito se
basa en su capacidad de sorprender. Su
pieza más coreada: Mi agüita amarilla.

Trúpita. Cantautor rockero que buscó una

vía más arriesgada e inteligente que la de
Sabina y sus imitadores. En vez de confor-
0
°> marse con añadir a su música el acompaña-

U miento de rock convencional, Trúpita osó

Dentro de la línea más trabajar con un productor comercial espe-
i ndefinible destacan los
catalanes Claustrofobia, ha erigido en la gran reina del kitsch con su cializado en música terno bailable como es
dirigidos por el inquieto Pedro versión actualizada (citas musicales de
Burruezo, que reconoce en Lou Reed, acentos funky) de la clásica to- Julián Ruiz, y lo bueno del caso es que el
los surcos su admiración por el nadilla española. resultado fue coherente y digno, como se
Camarón, James Brown y
German Coppini. Otra demuestra en canciones como Esta noche
chaenretarondteoxyagsuiintasruriesrttaeMeesrlcaedes a
Ferrer, por no hablar de me quiero descolgar (1984).
proyectos más oscuros como
los donostiarras M-aK o los Pata Negra. La mixtura flamenco-rock ha
canarios Arte Moderno y Juan sido considerada desde siempre como la
Belda. panacea para todos los males de nuestra
música. Formados alrededor del guitarris-
ta Raimundo Amador, otro colaborador
de Kiko Veneno, Pata Negra mezclan gui-
tarra hendrixana, blues y raíz gitana y han
logrado una sólida reputación entre los
conocedores, a pesar de que el gran públi-
co se muestra sordo ante sus discos (Pata
Negra, 1981; Rock gitano, 1984, y Guitarras
callejeras, 1986). Otro grupo que practica
la hibridación flamenca es Ketama, que
también pertenece a una familia de rancio
abolengo flamenco, mientras Laberinto
buscó una vía más comercial con su disco

Qué passa (1984).

"COMO VES, MI GUITARRA NO DISPARA, PERO SÉ A DÓNDE
APUNTO, AUNQUE A VECES NO VEAS LA BALA" (Kortatu)

El punk combativo de grupos vascos
como La Polla Récords ha alcanzado

gran impacto social.

ROCK# VASCO,
DESEO DEL CAMBIO

IÑAKI ZARATA señala como fecha de despegue del movi- unto al estruendo
miento una jornada contra un polígono de
Aunque convertida en arma combativa l a OTAN. Se habló del rock radical vasco, radical, la otra cara del
por mor de las circunstancias, la nueva y la polémica etiqueta haría pronto furor. efervescente rockerío vasco
canción vasca (Laboa, Lete Lertxundi, Ar- El sello pamplonés Soñua pasó de jotero a l a pone el pop guipuzcoano
tola) amaba las melancolías marinas y la punk y el cambio afectó luego a Discos (Duncan Dhu, Itoiz, La Dama,
placidez campestre. Lo de los conjuntos Suicidas, IZ o Elkar. La buena nueva con- Mak, La Cofradía), algunos
apenas había sido un leve sarampión: con- taba con un soporte empresarial discreto veteranos grupos vizcaínos,
tra Franco todo era demasiado urgente y pero eficaz, más el entusiasta apoyo de bandas mods como Scooters y
la generación de los setenta no pudo en- multitud defanzines, radios libres y gaxtet- el potencial rockanrolero de
tretenerse en devaneos culturales forá- xes (centros juveniles), muchos de ellos O. K. Corral, Refugiados, Bazar
neos. Cuando la historia disminuyó su ocupados ilegalmente. Central o Dinamita Pa Los
tensión, surgieron del asfalto los primeros Pollos. Siguen en la brecha, en
síntomas de adecuación a los aires que so- Mientras los incómodos Eskorbuto ofi- estilos diferenciados, los
plaban de allende el Cantábrico. Los Bra- ciaban de oposición autónoma, el trío irunés Ordorika, Oskorri o Imanol. Y al
kaman de Jaime Stinus habían hecho rock Kortatu y sus panfletos skatalíticos dirigie- otro lado de la frontera, los
en inglés y la Orquesta Mondragón era ron las huestes radicales a uno de los centros radicales Zein Ere, KGB o
pura provocación escénica. Emigraban del compromiso político: Herri Batasuna. Uharteko Punka relevan a los
Poch y Alejo (Derribos Arias), Rafa Bal- Había nacido la Euskadi alegre y combativa. históricos Etxart o Duhalde.
maseda (Parálisis Permanente) o el con-
trovertido Ángel Altolaguirre. Sin apenas La marabunta posterior es caótica fiesta de
romper su cascarón, el poperío vasco ex- frentes diversos. Hertzainak, Kortatu, Pota-
portaba cerebros. to, Baldin Bada, Korroskada y otros impor-
tan ritmos jamaicanos. El rock en diferentes
Abierta la espita de los nuevos tiem- variantes lo fabrican Zarama, Jotakie, Be-
pos, un caudal de sones eléctricos inundó lladona, Tijuana y una larga lista. Por el
la zona. Puskarra, Mogollón o UHF in- lado duro avanzan Barricada, Ángeles del
tentaron venderse como Donosti sound. La Infierno, Leize y otros. La revolución a tra-
modernez vizcaína se apellidaba Rufus, vés del hardcore y similares agrupa a La Po-
Los Santos o Lavabos Iturriaga. Al incla- lla Records, RIP, Cicatriz, BAP, Delirium y
sificable Ruper Ordorika y grupos como un sinfin de siglas.
Oskorri, Itoiz o Zarama les unía el uso del
euskera en sus mensajes. Pero a espaldas El noviazgo más escandaloso entre tra-
del confiado moderneo rugía el volcán. Los dición y modernidad se llama trikipunk,
primeros síntomas se detectaron en pue- mezcla de pandero-acordeón diatónica y
blos-colmena donde tardíos agrupamien- bronca vocal. Tarde, pero seguro, el rock
tos punks levantaban el hacha de guerra. vasco asienta sus reales hasta proponerse,
La Euskadi del txistu y tamboril amagaba siguiendo a Hertzainak, que Euskadi sea
por entrar en la Europa del imperdible. libre y tropical, llena de negros y vagos,
porrusalda y ron, cocoteros por pinos, pi-
La marea se extendió con rapidez, y se ratas por pescadores, el roble de Gernika
convertido en palmera y todos en bermu-
das moviendo el trasero.

"NO ME CUIDO ABSOLUTAMENTE NADA... CREO QUE HAY QUE QUEMARSE DE
ALGÚN MODO Y LO MEJOR ES QUEMARSE RÁPIDO" (Joaquín Sabina, 1984)

Joaquín Sabina ha convertido a la gran
ciudad -en su caso, Madrid- en otro
personaje de sus canciones.

JOAQUÍN SABINA, político que ha colocado un cóctel mo- nocido en la capital inglesa. Intuyendo
lotov a las puertas de un banco, a raíz que puede arder en la misma hoguera
CARNE DE NEÓN del proceso de Burgos. Años de cris- que los demás, dosifica sus apariciones
pación estudiantil e insólita concien- en mítines políticos y, principalmente,
MATÍAS URIBE ciación política para un estudiante de evita la calle como escenario de su mú-
Románicas que ha pasado por los sa- sica y como andamio para ganarse la
Antes que Sabina lo intentó Hilario lesianos y es hijo de un comisario de vida. Un ejecutivo que le vio en Lon-
Camacho, pero la propuesta del autor policía. La culpa la tendrá aquella dres le propone grabar un disco y nace
de De paso no cuajó masivamente. Así guitarra que, frente al disgusto fami- el elepé Inventario. Absoluta indiferen-
es que podría decirse que hemos esta- liar, vino a sustituir al reloj con el que cia. Pero ya pule su estilo y aguza su
do huérfanos de esa especie criada (y tradicionalmente se premiaba en casa ingenio de cronista urbano en La Man-
abundante) en Estados Unidos, cual es de los Sabina a los hijos aplicados al
la del cantautor eléctrico. Aun cuando finalizar su bachillerato elemental. drágora. Ficha por CBS.
Aute se ha visto arropado por un grupo Sale en 1981 Malas compañías, elepé
de rock, lo suyo no podría tomarse Dura pero solvente academia. Sa-
como muestra de cantautor urbano, bina sobrevive en Londres tocando en disperso pero rebosante de grandes
aunque justo es reconocer que su nom- la calle y en los restaurantes de lujo momentos musicales, que le muestra
bre y el de Serrat resucitan con más (llega a actuar ante Liz Taylor y Geor- como cantautor distinto. En 1983 traza
brío que nunca en los ochenta y se ge Harrison) y, cuando, al cabo de sie- el mismo arco que su maestro Dylan y,
adueñan del brillo de los cantautores. te años, regresa a España, se encuen- de cantante seudoacústico, pasa a can-
Signo inequívoco de que para la ternu- tra con un panorama de la canción po- tautor eléctrico con Ruleta rusa. Su me-
ra siempre hubo y hay tiempo, parafra- pular efervescente, pero confuso, bien jor elepé hasta hoy, Juez y parte (1985),
seando a Víctor Manuel y Ana Belén, distante de los modelos que él ha co- vivo lienzo sonoro de cálidos colores y
el otro tándem de triunfadores en la entrañables confesiones personales, así
presente década. HISTORIA DEL `ROCK' como un doble álbum grabado en di-
recto y un especial en Televisión Espa-
Caótico, bohemio insaciable, noctí- PRÓXIMO CAPITULO ñola en 1986, le colocan en la elipsis del
vago, buscador de placeres, intoxicado éxito masivo. Con Hotel, dulce hotel,
por la nicotina y los vapores del blues, REVIVALISMO editado en mayo de 1987, se le ve su-
Joaquín Sabina, pese a la irrupción de friendo la enfermedad del triunfador
nuevos valores como los tres javieres que hace discos por compromiso, por
(Bergia, Batanero y Ruibal) es el mejor formulario. Ha de recuperarse: el neón
representante en España del cantautor sigue luciendo todas las noches en la
eléctrico norteamericano, quien mejor ciudad y son muchas historias de in-
ha puesto aquí guitarras calientes a la fierno y purgatorio las que seguir con-
voluntad poética y contestataria de los tando.
cantautores.

Sabina ha escrito deslumbrantes
odas a la grisura de la gran ciudad, ha
inmortalizado al Madrid sombrío de
las buhardillas y los soles de butano, ha
pintado lienzos autobiográficos de un
realismo y una mordacidad silbantes,
ha canonizado a toda una peculiar ga-
lería de personajes marginales, ha com-
puesto melancólicas piezas al descon-
suelo amoroso, tallado frisos de ironía
desbordante a través de algunos de los
personajes reaccionarios de la historia
del país y hasta se ha permitido el lujo
de parodiar a su maestro Dylan. Sabi-
na ha roto con el esquema de cantautor
político ofreciendo poesía urbana y
música de calidad.

Mientras a finales se los sesenta
varios de sus colegas intentan alisar,
a golpe de estrofa rebelde, las rugosi-
dades políticas del franquismo, Joa-
quín Sabina (Úbeda, Jaén, 1949) hace
acopio de sus mejores materiales so-
noros en Londres, donde se ha refu-
giado tras una novia británica y hu-
yendo de la policía granadina, que le
busca por formar parte de un grupo

HISTORIA DEL `ROCK'

De una forma creciente, el rock contemporáneo se alimen-
ta del pillaje y reciclaje de fórmulas arcaicas: el revival
constante marca su discurrir. Entre las múltiples formas
que adquiere esta obsesión por el pasado destacan la res-
tauración del rockabilly sureño y el recurso a los inagota-
bles años sesenta. En Estados Unidos surge en la presente
década el nuevo rock norteamericano o rock de raíces, con
una desbordante propuesta de grupos y solistas de guita-
rras. Ninguno de estos artistas ha conseguido la repercu
sión de predecesores como Tom Petty (en la foto), pero plantean en conjunto
una vitalista alternativa a las tendencias homogeneizadoras de la industria del
entretenimiento.

LOS AÑOS OCHENTA VEN EL RESURGIMIENTO DEL `ROCK' PURISTA EN
ESTADOS UNIDOS, CON GRAN IMPLANTACIÓN EN VARIAS ZONAS

Chicanos de Los Ángeles, Los Lobos han 47
ofrecido una vigorosa combinación de aires de la
frontera tejana y rancios sonidos de los
cincuenta. De izquierda a derecha, Conrad
Lozano, César Rosas, Louie Pérez y David
Hidalgo.

"NOSOTROS COPIÁBAMOS A LOS NEGROS. VER HOY QUE SE COPIA A GRUPOS
DE LOS SESENTA QUE NOS IMITABAN ME DEJA PERPLEJO" (Mick Jagger, 1985)

Artistas como Chris Isaak evocan los L PASADO con-ansia, que sugiere a los agoreros pro-
años cincuenta tanto en lo físico nósticos terribles sobre el estado actual de,
como en sus canciones. YA ESTA AQUÍ la creatividad musical, se nutre de muy va-
riadas circunstancias. Por un lado, el creci-
I revival ha sido DIEGO A. MANRIQUE miento de la industria del ocio y la comuni-
favorecido por la industria Algo que no necesita el rock es un museo a cación ha abierto el acceso a los sonidos e
discográfica y los medios de lo Madame Tussaud; prácticamente, to- imágenes del pasado: se reeditan grabacio-
comunicación, frecuentemente dos los grandes modelos estilísticos siguen nes antiquísimas (incluyendo surcos que en
dominados por personas que teniendo presencia sobre los escenarios. su momento pasaron inadvertidos), se con-
vivieron aquellos sonidos en su En muchos casos, los protagonistas origi- feccionan vídeos y programas televisivos re-
primera encarnación. nales exhiben sus menguadas energías, un trospectivos y se investiga en páginas ama-
Mientras que los nuevos grupos empecinamiento comprensible: ya se sabe rillentas. El conocimiento del pasado es más
adoptan identidades que lo de "los viejos rockeros nunca mue- amplio que nunca, espoleado por la con-
embellecidas por la distancia, ren" tiene más de supervivencia que de ciencia -una herencia de los pioneros del
l os controladores aceptan testimonio. Pero el mercado de la nostal- pop art- de que estos modelos venerables
esas canciones e imágenes que gia es insignificante en relación con el pre- pueden ser manipulados con diversión y
l es permiten revivir su sente estado de revival. recuperación de provecho. A partir de los primeros Roxy
juventud sin traumas ni añejas composiciones en versiones al gus- Music (1972), manejados por un antiguo es-
conflictos. to del momento, pastiches de sonidos clá- tudiante de arte, se instaura un pop cargado
sicos (el toque Motown rara vez falta en las de guiños y referencias veladas que tiene
listas de vendedores), el saqueo exhausti- una doble lectura: el público nuevo disfruta
vo de imágenes del pasado para vestir clips inocentemente con los clichés y estereotipos
o portadas, la aparición de una caterva de
artistas barbilampiños que idolatran épo- rescatados, mientras que los espectadores
cas pretéritas. Abrumador. veteranos aprecian el juego de la ironía y la
recreación.
Esta epidemia del mirando-hacia-atrás-
La recuperación comenzó con las distin-
tas variedades del rock and roll de los cin-
cuenta, en una época -primeros setenta-
que echaba de menos el candor y la energía
de los pioneros. Luego le tocó el turno a la
gloriosa década de los sesenta soul, surf,
beat, mod, rhythm and blues, psicodelia, gara-
je-, que actualmente ejerce una irresistible
atracción sobre artistas jóvenes que en-
cuentran confortable adoptar disfraces y
marcas de un tiempo en el que el rock estaba
en voraz expansión. También le ha llegado
el turno a los sonidos imperantes en los de-
nigrados años setenta. Incluso hitos anterio-
res (Billie Holiday, Cole Porter, Frank Sina-
tra) entran a formar parte del repertorio ex-
propiable por músicos audaces. Algunos
síntomas: Jim Morrison tiene hoy más imi-
tadores que cuando estaba vivo, el término
rockabilly -de escasa difusión en los cin-
cuenta- ha llegado a englobar otras formas
del rock and roll, Bob Dylan vuelve a ser ver-
sioneado o el culto por los Beatles alcanza
niveles de saturación.

Esta orgía de reivindicación abarca ca-
sos de explotación, fotocopias reverentes,
parodias de sal gruesa y, en su mejor expre-
sión, ejercicios de robo con distanciamiento
que asumen que el proceso del pop puede
ser también una creación artística y que no
se privan de reconocer su inspiración o re-
fractarla a través de prismas perversos. En
todos sus grados el revival forma parte de la
práctica diaria del rock y el pop: el pasado ya
está aquí.

"AMÉRICA DIO AL MUNDO EL `ROCK AND ROLL', PERO AHORA OYE A GENTE
COMO SPANDAU BALLET. ES PATÉTICO" (Sid Griffin, Long Ryders, 1984)

Long Ryders, grupo californiano que
hace gala de su deuda con Buffalo

Springfield o Gram Parsons.

EL NRA

JOSÉ MARTA REY claración de principios: fibra tensa, mira- os Estados sureños
da seca y técnica inexorable. Instalados en brindan una exuberante
En los primeros ochenta, hartos de anes- Slash -sello relacionado con la revista cosecha de NRA. Athens,
tesia (AOR) e incapaces de identificarse local homónima-, el quinteto alista a Lee núcleo universitario de Georgia,
con la ñoñería acrílica i mpuesta desde In- Allen (saxo de Little Richard) y mantiene con apenas 60.000
glaterra, cientos de jovenzuelos america- el pulso firme (Live in London, 1983) con
nos descubren boquiabiertos la riqueza desigual inspiración, entre los devaneos habitantes, cuenta con decenas
natural de su glorioso pasado. Se rifan vie- de Dave Alvin (guitarra) con los X y la de bandas. Aparte de B-52 o
jos discos de sus hermanos mayores y em- fuga de Steve Berlin a Los Lobos. La tre- REM, surte de precursores
peñan el sintetizador para comprar guita- gua de 1986 permite a Phil Alvin (voz) re- (Pylon, Love Tractor) y caras
rras. Ya tenemos el nuevo rock americano correr en compañía del jazzman Sun Ra la
(NRA). historia de la música negra (Unsung sto- nuevas (OH OK, Buzz of Delight,
ries), mientras Dave registra Every night Squalls). También vecinos
Conatos aislados, con ayuda de las about this time (1987). son Guadalcanal Diary y los
FM universitarias y actuaciones indiscri- rugientes Georgia Satellites.
minadas, generan florecientes escenas Del Fuegos. Dirigido por los hermanos En Tejas, la temperatura sube
tanto en metrópolis (Los Ángeles) como Zanes (Dan, voz, y Warren, guitarra), el con sonidos negroides (LeRoi
en el Sur Profundo. Con grupos amateurs cuarteto se organiza por los colegios ma- Brothers, Fabulous
que se multiplican refrescando el panora- yores de Boston (1980). A través de singles Thunderbirds, Omar and the
ma y sellos que crecen con ellos (Enigma, huérfanos y posterior traspaso al sello Howlers), radicales (Butthole
Slash), alcanza difusión internacional. Slash, restauran el lado más físico de la Surfers), chicanos (True
tradición. Sus discos son un manual de es- Believers) o curiosidades
La culpa podría recaer en ingleses tilos, vicios y virtudes del rock: guitarras (Timbuk 3).
como Echo & The Bunnymen o Joy Divi- fieras, romanticismo viril de los Stones y
sion, primeros videntes de la vigencia clá- rockabilly... (Longest day, 1984) que ha ido
sica de Jim Morrison o la Velvet Under- canjeando brío por intensidad contenida
ground. Pero lo que prometía ser chispa cada vez más aplacada (Boston Mass,
de nuevos aires se colapsa en revival más o 1985). Con Stand up (1987) se dejan crecer
menos afortunado. Salvo brillantes excep- el pelo, pero no la inspiración que conti-
ciones como REM, la mayoría de los gru- núe el encanto anterior de I still want you.
pos giran alrededor de tres grandes focos
influenciales: la herencia seráfico-silvestre Dream Syndicate. Reclutados en Los Án-
(Byrds, Burritos, Love), el lado turbio geles por Steve Wynn, crítico musical uni-
(Doors, Velvet...) y el incombustible gara- versitario, prologan la vuelta al rock y las
je psicodélico. guitarras -primero como Goat Deity- y
la moda de las falsificaciones. Dream
Es un movimiento crítico: contracultu- Syndicate (1982) les descubre como la más
ra hippie y realismo punk, que vuelve a subversiva reencarnación de la Velvet Un-
cambiar el sonido de la década y despierta
incondicional fanatismo sin grandes des-
pliegues promocionales. Pero, sobre todo,
es el movimiento frustrado. A diferencia
de su equivalente británico, el NRA no
dispone de estrellas significativas. Tiene
que conformarse con satélites de alcurnia
que apenas cruzan el Top 50, aunque con
trayectorias tan notables como las si-
guientes:

Blasters. Precursores de primera línea,
aparecen entre el fragor punk de Los Án-
geles (1978) con una sólida puesta al día
de las raíces maltrechas del rhythm and
blues y el rockabilly. Su cosecha propia tie-
ne vocación de clasicismo (Marie Marie).
El álbum America music (1979) es su de-

"ME GUSTABAN PISTOLS Y RAMONES, PERO TAMBIÉN LOS DB'S. EL `HARDCORE'
ES AHORA TODAS ESAS COSAS, MENOS 'HEAVY METAL" (Bob MouId, Husker Du)

La carrera de Lone Justice evidencia la Green On Red. Hartos de telonear
dificultad de hallar un equilibrio entre -como Serfers, 1979- a famosos punks
purismo y la tentación de las listas. de paso por Tucson (Arizona), se trans-
plantan el nombre de una de sus cancio-
nes y emigran a Los Ángeles (1981) con
un cargamento de encrespadas secuelas
de Neil Young, Doors y garaje que ani-
man un par de crujientes álbumes. Para
Gas food lodging (1985) recogen a Chuck
Prophet IV, un incisivo guitarra versado
en fraseos retrospectivos, que secunda
la zozobra existencial y etílica de Dan
Stewart, su líder. Son surcos de polvo
moroso, naturalidad agreste y personali-
dad hecha de préstamos (Neil Young),
que coincide con el boom del NRA y el
paisley underground californiano. Ficha-
dos por Mercury, el quinteto se agiliza
en Londres con No free luch (1986), su
disco definitivo, al que nada añade The

killer inside me (1987).

El country también se derground, confirmada por la belleza agi- Gun Club. Acida coartada con la que un
tejano turbulento, Jeffrey Lee Pierce,
beneficia de la reactivación tada de Days ofavine and roses (1982), don- proyecta su vudú de violencia, sexo y re-
rockera. Su contagio ligión: la trilogía sureña. Punks renega-
engendra figuras de añaden sulfuro garajista. Tenían un dos, él y Congo Powers (guitarra) fundan
regeneracionistas como guitarra (Karl Precoda) empeñado en ser el grupo en Los Ángeles (1980). Antes,
Dwight Yoakam, un hillbilly que Neil Young, y una popularidad que crece Pierce deambula por Nueva York (Indi-
triunfa en los locales paralela a sus problemas (la marcha de la viduals, E Types), es presidente del Club
nuevaoleros de Los Ángeles: bajista Kendra Smith). Medicine show de Fans de Blondie y crítico en Slash
planta de duro retraído y ecos (1984) fracasa en sus miras mayoritarias Magazine. Con su parecido a Marlon
de Hank Williams. Frente a él, entre desorientación y asfixias jazzísticas. Brando, sus aullidos quebradizos y su
Steve Earle viaja de San Wynn, que ha producido'a grupos afines pose de excesos (a lo Jim Morrison),
Antonio a Nashville alterando (True West), se alía eventualmente en guía al cuarteto por una tempestad de
esquemas con voz zumosa, Danny & Dusty (1985) con sus amigos de egos, fugas y retornos -estancia en los
mirada social y canciones con Long Ryders y Dan Stewart (Green On Cramps de Powers- y una pionera rein-
dignidad de Bruce Red). Finalmente, reinaugura un Dream serción de blues bastardos, country, rock
Springsteen del género. Más Syndicate más insolvente y de mayor las- pantanoso y otros brebajes, fletados en
puristas resultan Randy tres desiguales álbumes oficiales: Fire of
Travis o las Judds, madre e hija. tre guitarrero (Out of the grey, 1986).
love (1981), Miami (1982) y Las Vegas
Fleshtones. Grupo insignia del nuevo rock
de garaje, son pioneros absolutos. Mien- story (1984). Música desesperada y gui-
tras Nueva York se hace punk, surgen en tarras crudas de ineficacia comercial
1976, de la tozudez de su líder, Peter Za- que Pierce reajusta en Europa con ma-
remba, y de Keith Streng (guitarra), decidi- yor control melódico en solitario (Wild-
dos a rehacer el Grandes Exitos de la pre- weed, 1985). Semiolvidado, ha reorgani-
psicodelia sesentista: órganos bizqueantes, zado un Gun Club con bajista japonesa.
riffs trogloditas y todos los clichés, glorias y
manías del género, transformados en es- Husker Du. Sus pintas son un desastre.
pontáneas maravillas propias que ensom- Un guitarrista de aspecto anodino, un ba-
brecen a sus inspiradoras. Sin embargo, la jista con bigote fin de siglo y un batería
mala suerte les persigue. Sus primeras gra- melenudo que firma las piezas más transi-
baciones sólo ven luz en single (American das (Sorry somehow). Pero, provenientes
beat). El álbum deberá esperar cuatro años del punk más brutal que se hacía en Min-
neapolis, han diseñado una innovadora
(Blast off, 1982). No venden mucho, pero autopista de implacable velocidad con
expanden la fiebre garajista. Gamberros melodías delicadas, énfasis lírico (folk-
incurables, sus incontrolables directos pue- rock), versiones de Byrds y Beatles y men-
den convertirse en parodia. Tras tres exce- sajes positivos. Catarsis de dos minutos e
lentes álbumes multinacionales, han tenido i mpacto sin respiro recogidas desde 1980
que volver a la independencia (Fleshtones

Vr. Reality, 1987).

"LLEGAMOS COMO EMBAJADORES DE AMÉRICA. PERO TENEMOS A ESE HORRIBLE
PRESIDENTE. N O QUIERO MISILES NI EN MI PATIO NI EN EUROPA" (Peter Buck,.REM)

en media docena de álbumes tan ejempla- Originarios de Nashville, Jason & The
res como Candy apple grey (1986). Traba- Scorchers dejan claro el paralelismo
jos recientes como Warehouse: songs & entre el rock y el country genuino.
stories (1987) apuntan mayor amplitud de
miras.

Chris Isaak. Lo tiene todo: una cara de El-
vis tierno -eso sí, con nariz rota delatora
de pinitos boxísticos-, la apostura juvenil
de Ricky Nelson y la voz romántica de
Roy Orbison. Pero no se dedica al revival.
Su música sólo admite leves guiños al pa-
sado: las guitarras rockabillescas de James
Wilsey que se cuelan pérfidas entre el fino
diseño de su rock contemporáneo. Viene
de Stockton -donde John Huston rodó
su Fat city--, vive en San Francisco y,
pese a las discretas ventas, sus dos impre-
sionantes discos (Silversione, 1985, y Ch.
Isaak, 1987) reparten emociones rotas y
orgullos heridos en preciosas canciones.

Jason & The Scorchers. Reinventan el Los Lobos. Auténticas estrellas del rock I papel de los
country-rock con inicial patente punk desde chicano de Los Ángeles, llevan juntos productores es crucial en el
la inmovilista Nashville. Al frente está Ja- desde 1974. Crecen entre la FM rockera sonido de una época. La
son Ringenber, cuya voz es un prodigioso de los sesenta y el tráfico sonoro de la claridad celeste de REM nació en
remedo del agridulce cosquilleo de Gram comunidad latina que su música refleja. l os estudios Drive-in (Carolina
Parsons, además de escribir sublimes fal- Tras dos elepés domésticos y folclóricos del Norte), de la mano de Don
sificaciones de los Flying Burrito que su- se electrifican. Ayudados por Steve Ber- Dixon y Mith Easter. Juntos, o
peran a veces el modelo; al menos en su lin (saxofonista de los Blasters que ter- por separado, ambos son
mini-elepé independiente (Fervor, 1984), mina agregándose a su plantilla), son la responsables sonoros de
que EMI reeditará tras firmar al cuarteto. sensación exótica con And a time to dan- Smithereens, Pylon, Wednesday
Son chicos campestres que pisan el acele- ce (1983), fabuloso cruce de fronteras: Week, Fetchin Bones, Game
tex-mex, rhythm and blues y rock furtivo Theory y otros muchos. Ambos
rador de los tiempos, con frondosidad su- de temple guitarrístico con voz punzante editan discos personales:
reña y versiones de Hank Williams, Neil y descabellados corridos. How will the Easter encabeza los etéreos
Young o los Stones. Buscan su personali- wolf survive (1984) refleja la afortunada Let's Active; Dixon tiene dos
dad entre el inflamable Lost and found hibridez de sus raíces, pero, con el éxito, álbumes propios. T. Bone
(1985) y el cambio de dirección (ecos de el cuarteto evidencia ese sintomático de- Burnet es el tejano que da
los Byrds y complacencias heavy) de Still acabado a los discos de Los
standing (1986) con que tentar a las listas. seo de integración propio de minorías Lobos y colabora con Elvis
acomplejadas. Quieren sentirse america- Costello. Y Don Geham (John
Little Stevens. De origen italiano, crece en nos y complacen erróneamente a sus cre- Cougar) también ha trabajado
Nueva Jersey con grupos sesentañeros cientes seguidores; afán que preside By con REM o X.
como Steel Mill. Allí toca Bruce Spring- the light of the moon (1987) y que corrige
steen, de quien será guitarrista de 1975 a con orgullo racial su participación en el
1983. Para entonces ya ha definido, al fil me La bamba.
frente de sus Disciples of Soul, su propio
sonido caliente y poderoso (Men without Lone Justice. La cara más aceptable del
women, 1981): canciones firmes que se NRA, ideado como cuarteto country-billy
vuelven mestizas de sudor latino y acti- por su dúo fundador: Ryan Hedgecock y
vistas contra la injusticia, sea interna o del
Cono Sur (Desaparecidos), señalándole
como uno de los músicos más air ados
(Voice of America, 1983). Su compromiso
ataca el apartheid (Sun City, con docenas
de artistas estelares) o la política norte-
americana en Centroamérica (Fruta amar-
ga, junto a Rubén Blades) en discos ex-
cepcionales (Freedom, no compromise,

1987).

"LOS PISTOLS ARROJARON EL PASADO AL RETRETE. ESA FALTA DE RESPETO
ES TAN ERRÓNEA COMO TEMERLE DEMASIADO" (Sid Griffin, Long Ryders, 1985)

Los Fleshtones, una de las bandas más ground (graban tres versiones suyas), em-
festivas y veteranas del nuevo rock prenden una cruzada de canciones ágiles,
americano. mitología sureña y rock de nervio sutil:
transfusiones espirituales del pretérito
convertidas en una lección de hallazgos,
innovación y personalidad, desde su sen-
cillo Radio Europe (1980) o el inicial eco de
los Byrds (Chronic tocan, 1982) a su glorio-
so cuarto álbum (Life's rich pageant, 1986).

Charfe Sexton. Es la réplica tejana a Billy
Idol. Dispone del mismo productor (Keith
Forsey) y una imagen cruzada de rebelde
americano y pelambrera gótica londinen-
se, más propia de los Cure. Su música in-
tenta plasmar esto, pero se queda en con-
vencional. Compone sus canciones, es un
fogoso guitarra y lleva desde los 11 años
subido a los escenarios.

El fenómeno de Suzanne Vega Maria McKee. Debutaron en 1985 con un Smithereens. Carecen de imagen: son cuatro
disco sólido de hermosas canciones e im- tipos creciditos. Pero nadie fotografía como
es la clave del resurgir folk. perioso rock tradicionalista, al que Maria ellos el lado amargo del periplo adolescente.
Graduada en literatura y i mprimía desgarro y voz indómita. Ella Su único álbum Specially for you (1986) fue
estudiante en la prestigiosa era una revelación de 21 años, curtida en un revelador éxito independiente: guitarras
escuela que aparece en la las bandas de su hermano (John McLean, y estrofas de arrebato en una refundición
serie televisiva Fama, creció en de Love). Los famosos hacían cola (Dylan actual de invocaciones nostálgicas, ternura
el realismo doméstico de les prestó un tema inédito). La bola creció power pop y melancolía urbana, donde su
cinco hermanos. Luego ha y su compañía decidió jugar la baza de la portavoz, Pat DiNizio, comparte un emoti-
i mpuesto en sus canciones, a chica. Despidió al grupo y envasó con vo dúo con su amiga Suzanne Vega.
contracorriente, la riqueza nuevos músicos un repertorio más cerca-
poética de strip teases no al AOR (Shelter, 1986). Violent Femmes. Pese al nombre, son un
sentimentales, con la huella trío masculino de Milwaukee de libérrima
tangible de Joni Mitchell Long Ryders. Su nombre de western y sus personalidad, costeada con desmitificacio-
trasladada al asfalto arrolladoras restauraciones les han diplo- nes del pasado. Afirman ser descubiertos
neoyorquino y un éxito mado como estrellas populares del nuevo por Chrissie Hynde (1982), aunque ella no
country-rock de Los Ángeles. Su escuela es lo recuerda. Y, bajo su aspecto normal, pro-
ascendente y afirmación Sid Griffin, bullicioso guitarrero de Ken- pulsan una absorbente borrasca acústica
personal (Suzanne Vega, tucky pasado de la psicodelia (Unclaimed) -heredera de Jonathan Richman- e im-
1985; Solitude standing, 1987). a vaquero eléctrico. Las melodías más lu- previsibles jadeos elementales por los que
Tras ella vendrán nombres minosas las firma Stephen McCarthy, su Gordon Cano (voz y guitarra) exorciza un
como Phrank, entre la Mitchell y multiinstrumentista virginiano. Tienen laberinto de contradicciones edípico-reli-
el Dylan más árido, con cuatro elepés y sus mejores momentos ca- giosas y frustraciones juveniles (Violent
balgan por el espíritu de Flying Burrito Femmes, 1983). Se hacen experimentales y
canciones de tintes lésbicos, o Brothers (Native sons, 1984), las huellas de jazzísticos en Hallowed ground (1984) y mi-
Michelle Shocked, tejana más los Byrds o el polvo tex-mex (Two fisted ta- sionales en The blind leading the naked
politizada que triunfa en les, 1987, con presencia de Bangles y Lo- (1986), con embestidas a Reagan, salmos
I nglaterra como réplica a bos), que hacen olvidar el rock burdo de cristianos y producción de Jerry Harrison
Suzanne Vega pero en temas de State of our union (1985). (Talking Heads).
carretera.
REM. La atmosférica ensoñación y huella X. Integran, junto a Christian Death o
fugaz de sus canciones representan la má- Germs, la primera fiebre punk de Los Ánge-
xima expresión artística del NRA. Tam- les (1977), filmada en el documental The de-
bién son los que más impacto comercial cline of western civilization. Ray Manzarek
han logrado, aparte de numerosos imita- ( Doors) les rescata produciendo sus prime-
dores. Nacen en la universidad de Athens ros álbumes: música furibunda de concien-
( Georgia). Michael Stipe, tímido estu- cia social y singularidad melódica (Wild gift,
diante de pintura, será su enigmático le- 1981). Su matrimonio rector, John Doe
trista y espasmódico cantante; Peter (voz, bajo) y Exene Cervenka (voz), recuer-
Buck, erudito vendedor de discos, hace de dan una versión hosca de Jefferson Air-
Lenny Kaye particular como vivaracho plane.
guitarra. Fascinados por la pureza sesen-
tista y el veneno frío de la Velvet Under-

"NUESTRA META NO ES SONAR COMO LOS GRUPOS DE LOS SESENTA;
SOMOS EL `ROCK AND ROLL' DE LOS OCHENTA" (Dave Faulkner, Hoodoo Gurus)

The Church, representantes del

nuevo rock australiano con vocación de
i nternacionalidad.

Ecos

INTERCONTINENTALES

JAVIER PÉREZ DE ALBÉNIZ 0a
Países económica y culturalmente asenta-
dos, como Francia, Australia o Suecia, vie (1977-1981). Tomaron su relevo los No- a música que se hizo
ron cómo en la primera mitad de la década mads, que gracias a su fuerza y a su aspecto en los años sesenta fue algo
de los ochenta decenas de jóvenes grupos se han convertido en la formación de moda
de rock surgían de sus garajes empuñando entre la psicodelia española. Radicalmente magnífico, de eso no hay
guitarras eléctricas. Eran los hijos del punk y opuestos a los Nomads, los Watermelon duda. Pero la mayoría de
la nueva ola, bandas que se alejaban dejas Men basan su poder en unas magníficas nuevos grupos de garaje creo
estructuras clásicas ya establecidas. Musi- composiciones y en el buen hacer de sus que lo entienden de forma
calmente retrocedieron en el tiempo, absor- tres guitarristas. Wayward Souls cuentan equivocada. Intentan sonar
biendo sonidos de los sesenta para luego con intensas canciones y buen sonido. Por como entonces, quieren ser
adaptarlos a su idea de lo que debe ser el el lado pop, los Pushwangers ofrecen vibran- más de otra época que de
rock. De forma paralela crearon sus propios tes canciones escritas por Nome y Adolf ésta, y eso no siempre es
sellos discográficos (Citadel, Big Time o Krant, cantante y guitarrista, respectiva- bueno. Vivimos, nos guste o
Mushroom, en Australia; Tracks on Wax y mente, de la banda; los Playmates llaman la no, en los ochenta".
Amigo, en Suecia; New Rose y Closer, en atención con su primer elepé, producido por
Francia) y surgieron revistas especializadas dos monstruos sagrados del rock australia-
(la francesa Nineteen, la británica Bucket- no, Álan Thorne y Rob Younger. Respecto
full of Brains y la australiana B Side), con- a los Sinners, los Shoutless o Tbe Stomach
virtiendo así productos teóricamente loca- Mouths, decir que coinciden en la juven-
les en objeto de culto y pasión en Estados tud de sus miembros y una pasión desen-
Unidos y Europa. frenada por las guitarras.

Siguiendo la pista a los legendarios Easy- En menor grado otros países europeos
beats (1967-1970) y Radio Birdman (1974- han gozado del nacimiento de grupos de
1980), en Australia han surgido nombres garaje, siendo Francia el más activo a ni-
como los Sunny Boys, con raícen en el punk vel discográfico. Bandas veteranas, como
y el rhythm and blues. Entre 1980 y 1984 lan- Little Bob Story, Gamine o Dogs, compar-
zaron tres sólidos elepés, y son objeto de un ten escenarios con otras que apenas llevan
especial respeto entre los grupos de su país. tres años en la carretera: Kid Pharaon, Les
Tbe Church son conocidos en España gra- Boy Scouts, Surrenders o Les Thugs.
cias a la edición de su discografia básica.
Tienen en el bajista y cantante Steve Kilbey Dejando aparte a los prolíficos Milk-
un líder claro; las limpias guitarras y la pro- shakes, los grupos británicos no tienen el
funda y sugerente voz hacen inconfundible fanatismo de los anteriores. Entre los que
cualquiera de sus temas. Más turbulentos trabajan con base en los sonidos de los se-
son The Saints, cuyo elepé de debú, I'm senta, aparecen The Mighty Lemon Drops
stranded, fue el primer elepé de rock austra- y los ácidos That Petrol Emotion.
liano editado en España (1977). Vivirán tan-
to tiempo como lo haga el cerebro y único
miembro fijo del grupo, Chris Bailey. Otros
grupos con proyección internacional son los
Hoodoo Gurus, respaldados por tres magní-
ficos elepés, y los Lime Spiders, quinteto de
guitarras apocalípticas e ideas tremenda-
mente claras; seis años después de grabar
de forma independiente han fichado por
una multinacional.

En Suecia el único grupo memorable de
rock de la década de los setenta fue Problem