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Published by conchita9int, 2020-05-20 10:23:55

Historia del Rock

historia-del-rock-el-pas-1211200916328561-9

"SOY UN NIÑO EN ESTAS COLINAS. / ESTOY BUSCANDO AGUA, /
ESTOY BUSCANDO VIDA" (Jackson Browne, 1968)

serie televisiva M.A.S.H. Estuvo casado Joan Armatrading ha reflejado las
batallas del sexo en canciones
una larga temporada con la cantante ca- contundentes.

nadiense Kate McGarrigle y se unió pos- El revivalismo ha llegado
teriormente a Suzzy Roche, del grupo The bien se inició mu-
Roches. Sus álbumes en principio venían sicalmente en el también al folk en los años
ordenados ordinalmente: I, 11, 111. Otros: ambiente folk de ochenta. Teniendo siempre
Attempted Mustache y, en los años ochen- Londres en los como referencia la famosa
ta, Fame and wealth, o More love songs. década prodigiosa, una serie
primeros años se- de artistas (entre los que
destacan los nombres
senta. Pronto su femeninos) ha vuelto su mirada
Jim Webb (1946). Celebérrimo composi- carisma se hizo hacia una canción sencilla,
tor, alcanzó como tal los máximos hono- notar y su perso- sensitiva, incorporando algunos
aspectos de corrientes
res posibles. Llegó de Elk City (Oklahoma). En 1962 se instaló en San Bernardi- na iba adquirien- sonoras contemporáneas.
no (California), y pronto empezó a traba- do una mayor re- Dentro de esta promisoria
jar para la compañía Motown. Pero sus putación. London tendencia hay que situar los
primeros hits llegarían en 1967, de la mano nombres de Phranc, Ferron y
conversation, The sobre todo de la neoyorquina
tumbler, Storm- Suzanne Vega. Por el lado
masculino, Peter Case y T-Bone
y en la voz del relamido Glen Campbell: bringer (con parti- Burnett representan el deseo
de contar sentimientos con
By the time I get to Phoenix, Galveston, Wi- cipación de miem- acompañamientos básicos.
chita Lineman. Al mismo tiempo, éxitos bros de The Band)
para la Fifth Dimension (Up, up and away) y Road to ruin (en
y otras firmas menores. Un año más tarde, unión de su espo-
la consagración absoluta a nivel de sa, Beverly) fue-
Grammy: nada menos que ocho para el ron sus primeri-
tema McArthur Park y resto de canciones zos esfuerzos dis-
incluidas en el primer elepé como cantante cográficos. Des-
del actor británico Richard Harris, A pués llegarían sus
tramp shining. La continuación, The year obras maestras:

went on forever, no tuvo un éxito tan apara- Bless the weather,

toso. Entonces, Webb fue tentado por el Solid air, Inside
diablo: realizó sus propios elepés, más
bien impersonales y anodinos. No fue lla- out, Sunday's
mado por los cielos para esos menesteres,
aunque siguió rodeándose de gente sol- child. Su inconfor
ventes: Joni Mitchell, Ringo Starr, The mismo le ha llevado a experiencias a veces
Supremes. complejas y sincréticas, de un sofisticado
hermetismo. Piece by piece, su más recien-
te contribución, es un elegante ejemplo de
Por lo que respecta al contingente bri- ello.
tánico, también contó con autores de gran

categoría, de muy variada orientación es- Cat Stevens (1948). Después de una eta-
tilística. Aparte de personajes inclasifica-
bles como Roy Harper, éstos fueron los pa netamente pop, con títulos como I love
nombres principales: my dog y Matthew and son, así como hits
para los Tremeloes y P. P. Arnold, este

Joan Armatrading (1950). Esta morenita londinense de ascendencia balcánica rea-
británica nació en St. Kitts, isla del Cari- lizó una serie de álbumes supuestamente
be. A los ocho años se trasladó a Birming- conceptuales, repletos de cándida imagi-
ham, y un lustro más tarde comienza a nería infantil y acústicas resonancias pos-
componer y a cantar en público. Muy afi-
cionada al jazz, varios de sus discos po- hippies: Mona bone jakon, Tea for the tiller-

man, Teaser and the firecat -el más inspi-
rado- y Catch bull at four fueron algunos
seen acentuadas connotaciones de ese gé- de sus aciertos. Convertido al islamismo,
nero. Ha vendido la nada despreciable ha abandonado la música casi por com-
cantidad de siete millones de ejemplares pleto.
de elepés. A resaltar entre ellos: Secret, se-

crets; To the limit; Me myself I; Walk under Al Stewart (1945). Este escocés tuvo ine-
vitable influencia dylaniana en sus prime-
ladders, y el más reciente Slide ofhand. Po-

see una voz febril y sinuosa, en la más ros años de advenedizo folk-singer. Versá-
pura línea de Nina Simone. til y experimentalista, en su primer elepé,

Bedsitter images (1967), introdujo una am-
John Martyn (1948). Inquieto e incisivo plia sección de cuerdas, hecho inusual por
guitarrista, cantante y compositor nacido, entonces. Escribió después sus devaneos
al igual que Al Stewart, en Glasgow, si sentimentales en Love chronicles y entró

con buen pie en la nueva década: Zero she

fl ies, Orange y Past, presente and future con-

solidaron su creciente fortuna y su paso a
los temas de contenido histórico. Pero fue

con Modern times y The year of the cat
cuando rompió definitivamente y traspasó
fronteras.

"NUESTRA MÚSICA RESISTIRÁ. LAS FUTURAS GENERACIONES ENTENDERÁN
QUE ÉRAMOS SERES HUMANOS LO MÁS AUTÉNTICOS POSIBLE" (G: Nash, 1983)

De izquierda a derecha, David Crosby, ricas guitarras acústicas- y su actuación
Stephen Stilis y Graham Nash. en el festival de Woodstock les catapultan
como nuevas estrellas de la facción más
relajada de la progresía. La aridez de las
letanías de Crosby se combina perfecta-
mente con la exuberancia lírica de Stills y
el pop dulce de Nash: toda una conmoción
en la California ácida, hasta el punto de
influir en los sucesivos trabajos de grupos
i mportantes como Grateful Dead y Jef erson Airplane.

La ausencia de discos ROSBY, STILLS Es, sin embargo, un sonido demasiado
de CSN&Y como grupo entre frágil para días tan turbulentos y, ya en la
1972 y 1977 no significó una Y HASH: CUESTIÓN aparición de Woodstock, Stills aporta la
separación en toda regla. A solución al incluir a Neil Young, ex com-
pesar de que los cuatro DE EGOS pañero suyo en Buffalo Springfield, como
diesen prioridad a sus discos en
solitario -Stephen Stilis DAVID S. MORDOH cuarto miembro. Con su presencia ganan
incluso forma una macrobanda en todos los aspectos, al conjugar este mú-
de country rock llamada CSN. O, mejor aún, CS&N. No eran unos sico canadiense su carácter huraño -ya
Manassas-, jamás perdieron el grandes almacenes londinenses o un parti- se sabe, credibilidad- con unas cualida-
contacto. La afinidad de Nash do político. Eran las iniciales de Crosby, des musicales únicas. Voz hiriente, guita-
y Crosby produjo dos elepés Stills y Nash, trío musical. Se formaron rra afilada, el contrapunto ideal a los exce-
conjuntos; mientras, Stills y con la fiebre de los supergrupos, auténtica sos empalagosos de Nash. Gracias a él,
Young no quisieron ser menos y epidemia de finales de los sesenta. Un su- Déjá vu adquiere una densidad impensa-
publicaron Long may you run. pergrupo era algo así como una fuga de ce- ble en el disco anterior, permitiendo a
También hubo esporádicas rebros que se encuentran en un mismo cada componente del cuarteto mantener
reuniones del cuarteto en conjunto. Algunos daban este paso para su identidad por separado como solista,
directo. sacar el máximo partido de su creatividad; pero, a la vez, capaz de respetar las reglas
otros, para codearse con los mejores; de comunes esenciales que toda obra sólida
cualquier modo, casi todos para ganar requiere. Four way street (Calle en cuatro
más dinero. direcciones) -publicado en el verano de
1971- queda atrapado en el fango de los
David van Cortland, conocido como personalismos.,, su propio título lo indica.
David Crosby, fue miembro de los Byrds Y como ellos lo tenían asumido antes de
hasta que se peleó con Roger McGuinn, fi- embarcarse en la aventura, se disuelven
nalizando en 1967. Stephen Stills abando- sin dramas de envergadura. Atrás quedan
nó Buffalo Springfield durante la primave- seis éxitos moderados en sencillo: Marra-
ra de 1968. Ensayando ambos en casa de
John Sebastian, encuentran a Graham kesh Express; Suite: Judy blue eyes; Wood-
Nash, miembro del grupo británico The
Hollies, de vacaciones en California. Fue stock (escrita por Joni Mitchell); Teach
tal la belleza obtenida de la conjunción de your children; Our house, y Ohio, esta últi-
sus tres voces que rápidamente deciden ma canción, un amargo comentario sobre
agruparse. Un solo elepé -forjado con la represión policial en las manifestacio-
cruces vocales exquisitos sobre fondo de nes estudiantiles.

La voracidad de Crosby con las drogas y
lo poco brillante de las carreras de Stills y
Nash por separado impulsan la reunión de
1977. El elepé consiguiente -escuetamente
bautizado CSN- fue un balón de oxígeno
para quienes sufrían de indigestión ~ Y,
aunque el resultado no pasase de lo agrada-
ble, es mucho más digno que el de Dayúght
again (1982), disco completamente fuera de
órbita: esos preciosos juegos vocales ya no
encajaban en los gustos de un público que
había encontrado en la tecnología una vál-
vula de escape al dominio de lo natural im-
puesto por la generación anterior. En 1987,
con un Crosby ya curado, han vuelto a
juntarse con Neil Young, manifestando
-¡cómo no!- que suenan como nunca.•

"SE TIENE QUE CAMBIAR. D E CAMISA, DE MUJER, DE LO QUE SEA. SI EL
PRECIO ES PERDER A GENTE EN EL CAMINO, LO PAGARÉ" (Nell Young)

Neil Young, en su fase rockabilly, de
1983.

NEIL YOUNG, EL música; el resulta-
do es Everybody
ÚLTIMO INCA
knows this is now-
IGNACIO JULIÁ e interesa expresar lo que
here (1969) y el pasa por mi mente. No espero
Contradictorio y siempre cambiante, Neil inicio de una fruc- que la gente escuche ml
Young es el perfecto paradigma del can- tífera colabora- música a todas horas. A veces
tautor, en su caso, eléctrico, que sublima ción. Con After the es demasiado intensa. Si
sus inseguridades y anestesia sus más do- goldrush (1970), quieres poner un disco a las
lorosas vivencias expresándolas en públi- su espléndido ter- once de la mañana, no
co. Epiléptico y de carácter melancólico, cer elepé, llega la pongas Tonight's the night. Pon
cuando no abiertamente depresivo, este madurez; después a los Doobie Brothers".
canadiense alto, desgarbado y de maneras vendrán el lanza-
algo torpes ha hecho un poco de todo para miento junto a (No¡¡ Young.)
escapar del encasillamiento al que se vio Crosby, Stills y
sometido tras el éxito masivo de Crosby, Nash, y la consa-
Stills, Nash and Young. Desde la separa- gración con Har-
ción de Buffalo Springfield, en 1968, ha vest (1972), y la
sido folksinger siniestro, guitarrista heroi- canción Heart of
co, defensor de la épica negativa del punk gold en el primer
y hasta arribista del techo. Sin olvidar su puesto de las lis-
faceta secreta como cineasta. Su carrera tas. Su recién ad-
musical ha sido irregular, sistemáticamen- quirida condición
te puntuada por altibajos y, sin embargo, de rock-star y la
coherente. Mejores o peores, sus discos muerte por sobre-
conforman una sincera autobiografia en dosis de Danny
sonido. Whitten, guita-
rrista de Crazy
Hijo de un conocido periodista depor- Horse, le empu-
tivo, nació el 12 de noviembre de 1945 en jan a realizar una
Toronto, Canadá. Tras pasar por el ukele- serie de obras
le y el banjo, encuentra en la guitarra un descarnadas e in-
sugerente caudal de posibilidades expresi- quietantes. El ar-
vas. Su ídolo de aquellos días es Hank tista se resiste a
Marvin, de los Shadows. Poco después, ser embalsamado
las canciones de los Beatles le empujan a en vida. Son tres elepés sombríos donde se
transitar por varios conjuntos adolescen- entierra definitivamente la utopía hippy
tes de su ciudad, hasta que, a mediados de desde la experiencia personal; tres pelda-
los sesenta, viaja hasta Nueva York, don- ños de bajada que concluyen, tras Time fa-
de conoce a Bruce Palmer, que le introdu- des away (1973) y On the beach (1974), en
ce en los Mynah Birds de Rick James, gru- el magistral Tonight's the night (1975): una
po que grabará algunas maquetas para inspirada crónica de la desesperación ba-
Motown, sin llegar a más. ñada en vapores etílicos y visitada por el
fantasma del amigo perdido. Las resta-
A principios de 1966 llegó a Los Ánge- llantes guitarras de Zuma (1975) anuncian
les con Palmer, y encuentra a Stephen su recuperación. Sus siguientes discos in-
Stills, Richie Furay y Dewey Martin, a los cluyen un digno apaño de sobras, Ameri-
que se unen para formar Buffalo Spring- can stars'n 'bars (1977); una recopilación
field. Tras una atribulada trayectoria y más que sensata, el triple Decade (1978), y
tres excelentes elepés, el grupo desaparece una colección de temas de aires country,
y Neil se embarca en solitario. Su primer Comes a time (1978).
trabajo (1968) descubre un músico ator-
Rust never sleeps (1979) es una nueva sor-
mentado, entre la paranoia y la autocom- presa: en contadas ocasiones ha sabido un
pasión. Para su segundo disco adopta al artista rock saltar de generación en genera-
grupo Crazy Horse y le da un giro a su ción sin hacer el ridículo, como lo consigue
aquí Neil Young invocando a Johnny Rot-
ten y extendiendo el muy original concepto
del elepé a una gira, un doble en vivo y una
película. Desde entonces, Young ha deam-
bulado sin rumbo, pasando del rockabilly al
techo y regresando a sus raíces sin lograr re-
sultados dignos de mención. No obstante, la
decadencia, por estéril que parezca, sigue
siendo parte de esa imagen completa que
siempre ha pretendido mostrarnos.

"HE LIMITADO EL NÚMERO DE COSAS QUE QUIERO HACER EN MI VIDA.
PERO QUIERO VIVIRLAS MÁS INTENSAMENTE QUE NUNCA" (Tim Buckley, 1974)

TEM BucKLEY provisar. Era un Tim Buckley osciló entre el folk, el Jazz y
espíritu en efer- el rock, en busca de una música
ÁNGEL DEL DESASOSIEGO vescencia: Blue auténticamente personal.
afiernoon (1969),
DIEGO A. MANRIQUE Lorca (1970) y la bargo, era la inmensa presencia de
mayor parte de Buckley. Una voz en celo, más domi-
Para los rockistas militantes, los can- Starsailor (1971) nante que implorante, que intentaba
tautores pos-Dylan constituyen una se grabaron en un conciliar las exigencias del sexo y el
aberración: su flaccidez expresiva, sus mes febril. Esa amor en declaraciones a corazón abier-
problemas de niños bien, su tendencia trilogía tormen- to: "Hacer el amor contigo / es como la
lacrimógena, les hacen merecedores de tosa tuvo efec- marea arañando la orilla, / y cuando
un desprecio rotundo. De esta conde- tos catastróficos: sueño contigo,/ ¡Señor!, ansío ser la
nación apenas se salvan dos o tres he- Buckley se quedó arena".
terodoxos. En esa tema suele figurar sin oyentes. Una
Timothy Charles Buckley III. Cuenta cosa eran los cóc- Esa sensualidad, a la vez profunda
teles amables de y epidérmica, no logró conmover a los
con todas las credenciales: alta sensibi- jazz-rock, tan del compradores de discos, pero no tuvo
lidad, inquietud creativa, escasa fortu- gusto de aquel tiempo de desesperarse: planeaba re-
na y, la guinda, un final sórdido. Por no momento, y otra, capitular su trayectoria musical en un
hablar de una voz singular y algunos mucho más inti- disco en directo, tenía ofertas teatra-
discos pletóricos. No es casualidad que midante, aquella les (había interpretado a Sartre y Al-
sea uno de los nombres de mención expedición al fon- bee), maduraba guiones cinematográ-
obligada para exquisitos artistas britá- do de sus posibili- ficos y la adaptación musical de una
nicos: la versión de Song to a siren, de dades vocales. novela de Joseph Conrad. No pudo
This Mortal Coil, forma parte de esos ser. Un domingo de 1975 apareció
homenajes a distancia. Una dura lec- muerto en su apartamento de Santa
ción. Frustrado, Mónica. El forense explicó que había
Vino al mundo en Washington dejó el negocio. tomado heroína pensando que era co-
Condujo un taxi caína. Tim Buckley entraba involun-
(1947) y creció entre Nueva York y Ca- y fue el chófer tariamente en el panteón de los mal-
lifornia. Su habilidad con el banjo y la particular de Sly ditos.
guitarra le ganó puestos en bandas de Stone hasta que
country, recorriendo el circuito con una consiguió un
de nombre inolvidable: Princess Ramo- puesto como pro-
na and the Cherokee Riders. Fue la ci- fesor de etnomu-
tada Princesa Ramona la que lo enca- sicología en la
minó hacia los folk clubs de Los Ánge- universidad de
les, donde coincidió con otros chicos California. Se
ambiciosos como Jackson Browne y casó y estuvo ru-
Steve Noonan; serían bautizados como miando su nueva
los Tres del Condado de Orange. Tim jugada. Nada de vibráfonos sinuosos,
fue el primero en conseguir un contrato exhibiciones de cuerdas vocales o to-
de grabación con un sello prestigioso rrenciales delirios. Tim Buckley vol-
(Elektra). Parecía destinado al éxito: ri- vió convertido en paladín de un rock
zos dylanianos, rasgos atractivos, tier- carnal, iluminado por un erotismo de
nas canciones, garganta pura y pode- inaudita intensidad.
rosa.
Greetings from L. A. (1972), Sefronia
Tuvo impacto inmediato. El roman- (1973) y Look at the fool (1974) conte-
ticismo de Tim Buckley (1966), la au- nían surcos calientes: rock, blues y soul
reola contracultural de Goodbye and en una combinación no muy lejana de
hello (1967) y el soñador ambiente de la de otros ciudadanos de California
Happy sad (1969) le ganaron público y como Little Feat. Había en ellos un
respeto crítico. No era uno más entre la cierto aire de compromiso, un deseo
marabunta de trovadores rudimenta- evidente de conectar con los compra-
rios: entre los músicos que le acompa- dores de discos. Lo esencial, sin em-
ñaban aparecían nombres como Lee
Underwood, Billy Mundi, Van Dyke HISTORIA DEL `ROCK'
Parks, Jim Fielder, David Friedman,
PRóXIMO CAPÍTULO
Car l er C. C. Collins, Don Randi. Pau-
latinamente, Buckley incorporaba el 'COUNTRY-ROCK'
jazz de vanguardia en su búsqueda de
una expresión propia.

Investigaba el folclor de los pig-
meos, quería convertir su voz en un
instrumento más, se arriesgaba a im-

HISTORIA DEL `ROCK'

Si las aproximaciones de Bob Dylan al country en la segunda
mitad de los años sesenta causaron cierto escándalo, en los
setenta, con el ansia de una vida más simple y pegada a la
tierra, se produce una reconciliación del rock con uno de sus
sonidos progenitores. Los protagonistas son grupos califor-
nianos (Eagles, Poco, Flying Burrito Bros.) y renegados mu-
sicales de la ciudad de Nashville (en el sureste de Estados

Unidos) como Willie Nelson, Billy Swan (en la foto) o Waylon Jennings. Entre unos y otros recuperan tanto la vertiente
lacrimógena como el lado más festivo del country, conectando con un público
juvenil y de pelos largos. La capital de la música vaquera, Nashville, terminaría
aceptando en sus estudios de grabación esa invasión de los valores del rock.

NACIONALISTA Y CONSERVADOR, EL `COUNTRY' SE OPUSO AL `ROCK', PERO
AMBOS CONCEPTOS SE UNIERON MUSICALMENTE EN LOS AÑOS SETENTA

OUNTRY-ROCK' Músicos como los de la Charlie Daniels Band 29

recuperaron los mitos. del viejo Oeste. En Tejas, los

cabecillas del country-rock se autodenominaron

forajidos para marcar sus distancias frente al

convencionalismo de Nashville.

"¿ESTÁS PREPARADO PARA EL CAMPO? / PORQUE YA ES
TIEMPO DE IR" (Nell Young, `Are you ready for the country?')

El grupo Poco, en 1969: músicos de ra en Nashville las sesiones de grabación de
rock con vestimentas y sensibilidad un doble elepé histórico, Blonde on blonde.

country. Después de su accidente, un convale-
ciente Bob Dylan reordena sus ideas y se
mantiene terco; sus álbumes John Wesley
Hardin o Nashville skyline siguen siendo refe-
rencia obligada para el nacimiento del country-rock. Haymásgruposintersadosenel

En la actualidad se AQUEROS tema. En Long Beach (California) nace la
produce un fenómeno similar al Nitty Gritty Dirt Band, organizada por un
de los primeros años setenta: DE ASFALTO folkie, Jeff Hanna, y que en su primera for-
la reintroducción del country en mación incluye a un desconocido cantante-
los circuitos de música pop. JOAN RIBERA RIBERA compositor, Jackson Browne. De las ceni-
Archivada la etiqueta de zas de Buffalo Springfield nacerá Poco, ver-
country-rock, se habla hoy de En Norteamérica, la música country tiene sión suave del fenómeno, continuada luego
los nuevos tradicionalistas, sus particulares canales de distribución. por Loggins & Messina. De los Shilohs, pa-
briosos intérpretes que Música para vaqueros, conductores de dili- sando por la International Submarine
recogen todas las enseñanzas gencias y otros mastodontes de la carretera, Band, partirá Gram Parsons para incorpo-
de sus mayores, evitando en es para ellos el pop de cada día. Que esa mú- rarse a los Byrds en Sweetheart of the rodeo,
lo posible caer en sus tics, sica fuera conocida internacionalmente, y organizar luego otra de las bandas de im-
repetidos hasta la saciedad. más allá de los cerrados circuitos norteame- presión, los Flying Burrito Bros.; The Band;
Dwight Yoakam, Randy Travis y ricanos, se debe a un invento, con visos de Crosby, Stills & Nash; Grateful Dead, o los
Steve Earle son los más montaje publicitario: el country-rock Cual Eagles, también traen aromas campestres.
activos, en puro country, y etiqueta denominadora de origen, se popu-
grupos de rock como Jason & larizó a finales de los años sesenta en la Desde el otro lado, aparecen iniciativas
The Scorchers, Beat Farmers o costa californiana, aunque ya se había usa- como Area Code 615, agrupación de los
Long Ryders no desdeñan la do para describir la música de los Everly músicos que tocaron en las sesiones de
inclusión de armonías e Brothers, Ricky Nelson y otros pioneros de Dylan en Nashville, quienes utilizan estruc-
instrumentaciones country en los años cincuenta. turas country para interpretar pop. El Sur re-
sus canciones. nace de nuevo con el cambio de década, y
En 1964, Bob Dylan tiene muy asegura- de Alabama a Memphis, de Tejas a Califor-
da la fama comofolk-singer, y nia, el country marcará la personalidad de
muchos de los grupos. No se trata de home-
unfamososureño,JohnnyCash,quenoadmiteetiquetas najear a las viejas glorias: el fenómeno pasa
musicales, decide grabar It ain't me, babe, de por asumir la instrumentación tópica de las
Dylan. Cash pide la aprobación de Dylan, canciones de vaqueros, como cogiendo al
invitándole además a su programa de televi- toro por los cuernos y llevándolo al terreno
sión. Dylan entra en contacto con el pro- del pop, hasta entonces reacio a experien-
ductor de Cash, Bob Johnston, y éste prepa- cias similares. La industria utilizará el tár-
mino crossover para bautizar las creaciones
de esos peces que por nadar entre dos aguas
no caen en sus redes. Numerosos persona-
jes de Nashville se sumergen en el estilo de
vida del rock son Kris Kristofferson, Guy

Clark, Gary Stewart, Rodney Crowell. Algunos veteranos -Willie Nelson, Waylon
Jennings, Johnny Paycheck-, cambian de
atuendo y de peinado, presidiendo un her-
manamiento entre las dos culturas. Es el
country de pelo largo, versión sureña y ruda
del country-rock californiano.

Más allá de los nombres, rascando en los
conceptos o levantando las etiquetas, siem-
pre queda un nombre; rock and roll, que vino
del country, y con el tiempo derivó hacia el
pop. Establecer una relación directa entre
country y rock quizá fue una estratagema de
mercadotecnia, pero lo cierto es que más
allá de las imitaciones pobres, no es una re-
lación incoherente. El mestizaje, también en
música, tiene sus ventajas.

"HABLAMOS DE BÚSQUEDA. BÚSQUEDA DE UNA MUJER, DEL ÉXITO,
DE LA FELICIDAD. Y DE QUÉ HACER CUANDO LO TIENES" (Don Henley)

Los Eagies de 1974-1975. De
Izquierda a derecha, Leadon, Frey,
Henley, Meisner y Feider.

ÁGUILAS
CALIFORNIANAS

DAVID S. MORDOH 1974). La mano de su sustituto, Bill a escena californiana
Szymczyk, se nota en el resultado final. resurgió en los setenta y
El desplome de la California hippy, nada Canciones bien acabadas, profesionalidad coincidió con el auge de
más entrar los setenta, fue un poco como hasta el último detalle, y nada de riesgos. Eagles. Se trataba de discos
la caída del imperio romano. Tras la Es la fórmula para entrar en las emisoras pulcros y soleados, poco
muerte de Jimi Hendrix, Janis Joplin y Jim americanas. Es el éxito. Así lo prueba The estridentes, normalmente de
Morrison, con los sueños de cambio con- best of my love, canción a la que siguen las jóvenes compositores.
vertidos en pesadillas, el rock queda roto triunfales One of these nights, Lyin' eyes y Gracias al aval económico de
como unidad cultural y pierde su papel de Take it to Che limit, estas últimas extraídas las casas discográficas, se
portavoz generacional; se acabaron las del disco One of these nights (1975). Pero a rodeaban de experimentados
peregrinaciones a San Francisco. Esa la consagración definitiva le falta ese pe- músicos de sesión del mundo
época de vacío es aprovechada por gente queño empujón que viene en forma de del country o del jazz; quedaba
agazapada en la sombra -mayormente, Grandes éxitos (1976), demostrando, con así garantizada la calidad,
músicos exentos de las lacras ideológicas sus ocho millones de copias vendidas, que dependiendo las únicas
de la catástrofe- para intentar abrirse Eagles saben hacer magníficas canciones sorpresas de las
camino. En Los Ángeles se reúnen los dispersas en elepés mediocres. composiciones. Los diferentes
Eagles en 1971. miembros de Eagles
Finalizando 1975, se marcha Bernie participaron en incontables
Gente con experiencia: Don Henley to- Leadon. Para sustituirlo, fichaje de lujo: proyectos de aquellos días.
caba la batería para Shilohs; Randy Meis- Joe Walsh. Guitarrista viril con amplia
ner fue bajista de Poco; Bernie Leadon discografia bajo su nombre, tiene un histo-
formó parte de la legendaria Dillard and rial en el que destaca poderosamente la
Clark Expedition, y Glenn Frey estuvo a época pasada en el trío legendario James
las órdenes de, entre otros, Bo Diddley y Gang. Aporta más bien poco, aunque es lo
Bob Seger. Aparecen como grupo de suficientemente polivalente -los teclados
acompañamiento de Linda Ronstadt. de New kid in tocan, por ejemplo- como
para no defraudar.
Escuchando su primer trabajo, Eagles
(1972), nadie podía imaginar que se con- Hotel California (1977) marca la cúspi-
vertirían en uno de los conjuntos más ta- de -más de diez millones de discos ven-
quilleros del planeta. Es un disco agrada- didos-. Tras él, un declinar lento que se
ble, de guitarras cristalinas y voces en- esboza con The long run -Tim Schmidt,
sambladas con maestría, fraguado sobre de Poco, entra por Randy Meisner- has-
cimientos de country rock. Como les falta ta concretarse en 1980 con el doble Live.
mordiente en las composiciones más Eagles habían intentado evolucionar, in-
musculosas, destacan inmediatamente, cluso probaron algo de soul, pero éste no
además del éxito Take it easy (escrita a era exactamente el problema. En algún lu-
medias con Jackson Browne), los pasajes gar del camino que lleva de la mansión al
tranquilos. Lo mismo ocurre en 1973 con banco, perdieron la inspiración. Y ni los
su segundo elepé Desperado, el mejor de esporádicos éxitos de alguno de sus miem-
su carrera-, sólo que ahora han subsana- bros en solitario consigue, en la actuali-
do algunos errores: entre las innumerables dad, pellizcar la fibra de la añoranza.
gozadas melódicas se pueden también en-
contrar guitarras afiladas dispuestas a en-
trar en combate. Lo produce, al igual que
el anterior, Glyn Johns.

El disco, sin embargo, fracasa comer-
cialmente. Presionados por tal inoperan-
cia, adoptan medidas drásticas con la in-
clusión de un tercer guitarrista -Don
Felder- y el despido de Johns a mitad de
grabación del tercer disco (On the border,

"ME FUI DE POCO PORQUE ESTABA CONSIGUIENDO MUCHO
PRESTIGIO, PERO NADA DE DINERO" (Jim Messina)

Rita Coolidge y Kris Kristofferson los años setenta las coyunturas dieron una
prolífica producción a todo tipo de mari-
contribuyeron a renovar el ambiente dajes sonoros que tuvieran el rock como
de Nashville, capital del country. bandera.

El country-rock tuvo más razón de ser
(por génesis y realidad social) que otras
fusiones, en cambio, más perdurables. El
género no contiene elementos de fascina-
ción ni de intelectualismo, ni antes ni aho-
ra, careciendo también de la parafernalia
culturalista de otras formas mistificantes
del rock progresivo; eso sí, ha sido un re-
trato en polaroid de una música instantá-
nea, divertida, contagiosa, de rancias cos-
tumbres y dispuesta a fecundarse de san-
gre joven.

Área Code 615. Supergrupo de los más co-
tizados y omnipresentes sesioneros de
Nashville: Mac Gaydon (guitarra), Nor-
bert Putnam (bajo), Wayne Moss (guita-
rra), Bobby Thompson (banjo), Buddy
Spicher (violín), Weldon Myrick (pedal
steel), Charlie McCoy (armónica), David
Briggs (teclados) y Kenny Buttrey (bate-
ría). Concebida como banda de estudio,
grabaron dos elepés entre 1970 y 1971,
combinando vigorosamente sus raíces
country con recreaciones de Dylan y los
Beatles. Varios de ellos siguieron unidos
bajo el nombre de Barefoot Jerry, pero el
trabajo asalariado para discos de otros ar-
tistas les cercenaba toda posibilidad de
vuelo autonómico. Un grupo excesiva-
mente perfecto.

En pleno furor A COSECHA DEL Asleep at the Wheel. Lo que empezó sien-
comercial de cadencias country do un modesto trío que ensayaba en una
se dieron a conocer algunas `COUNTRY-ROCK' granja de Virginia Occidental se convirtió
bandas pop -America, Bread, en un quinteto que buscaba la fama en
Brewer & Shipley, Seals & ANTONIO DE MIGUEL San Francisco y terminó como una big-
Croft- que utilizaban band de hasta 11 miembros, asentada defi-
pequeñas dosis de folk y Country, pero rock. Armonías vocales, nitivamente en Austin (Tejas). El primer
country, más como condimento pero instrumentación caliente; ritmo rápi- disco llegó en 1973, ya con Chris O'Con-
efectista que como materia do, pero dulce; tradición, pero evolu- nell de vocalista. Cambiaron de casa dis-
prima real. Casi todas ellas ción... Finalidad última: pasarlo bien con cográfica tanto como de formación, y se
alcanzaron varios éxitos a una música que se oye con la misma facili- caracterizaron por fusionar country, rock y
golpe de mesura y dad con que se bebe una cerveza. El coun- jazz con singular desparpajo. Su lugar pre-
try-rock ha dado a la historia del pop una ferido de actuación fueron los jolgoriosos
blandenguería. Fueron parte larga lista de compositores, una brisa de bares de country. Muy recomendables sus
de lo que se llamó el soft-rock. amabilidad e intrascendencia y un buen elepés Wheelin' and dealin' (1976) y Wheel
ramillete de canciones éxitos de venta. (1977).
Bien es cierto que, salvo media docena de
nombres, sus protagonistas no resistirían Commander Cody and bis Lost Planet Air-
una criba si buscáramos una elite de im- men. Desde primeros del año 1967, Geor-
prescindibles figuras rock. Y también es ge Frayne, alias Commander Cody (piano),
verdad que el country-rock se observa hoy y John Tichy (guitarra) aglutinaron en tor-
con similar efecto al de un lancero bengalí no suyo diversos músicos de soul y country
en medio de una estación nuclear; pero en que se tomaban la música como una bro-
ma de fin de semana. La variable banda

"LA EMISORA DE MÚSICA 'COUNTRY' SUENA SUAVE, / PERO NO HAY
NINGÚN MOTIVO PARA APAGARLA" ('Visions of Johanna', Bob Dylan, 1966)

tenía por sede Detroit, y no se fue estabili- podían variar, Linda Ronstadt ha realizado una
zando hasta que entraron en ella tipos pero la perenne i nsólita carrera, que va desde el country
como Bill Kirchen (guitarra), Andy Stein dirección de Da- hasta las canciones del Tin Pan Alley.
(violín, saxo) o Billy C. Farlow (voz). En niels era férrea,
1969 deciden convertirse en la banda muy apegada al Fueron legión los
country-hippie de San Francisco, y es allí rock, gustosa de cantantes puristas de country
donde comienza su leyenda discográfica lanzarse a mara- (casi todos ellos asentados en
con Lost in the ozone (1971). Todos sus dis- tonianas giras y l a meca Nashville) que se
cos fueron baratos de presupuesto (el se- con una envidia- l anzaron a flirtear con el pop y
gundo costó 5.000 dólares y se grabó en ble disciplina a la el rock de una forma esporádica
cuatro pistas), escasos en tiempos de tra- hora de com- o persistente, según
bajo, imperfectos; pero con una esponta- poner. capacidades: Dolly Parton, Don
neidad, un saltarse las reglas de lo conven- Williama. Glen Campell
cional, que en seguida les granjeó amplias Joe Ely. Una de- Tanya Tucker, Cristal Gayle,
simpatías de un público ecléctico. Se di- vastadora mezcla Freddy Fender, Larry Gatlin.
solvieron en 1976, después de seis diverti- de tex-mex, coun- El crossover los atrajo para
dos álbumes y un último en directo, testa- extender su popularidad
mento de su valiosa aportación al country- try, blues, rocka- entre un público joven que los
rock sin almíbares (We've got a live one desconocía. El rey de la
billy y honky-rock. edulcorancia country pop es
here). Kenny Rogers.
Joe Ely es un fo-
Rita Coolidge. Nacida en Nashville (1944). rajido hispano del
Leon Russell la bautizó cariñosamente sonido más fron-
terizo. Admirado
como Delta Lady. Trabajó como cantante y reclamado
de coro en iglesias, hizo tímidas aparicio- como artista invi-
nes como solista de grupos (The Moon- tado en varias gi-
pies) y lució su voz de lujoso acompaña- ras por los
miento para Delaney and Bonnie, Joe Co- Cramps y los
cker, Stephen Stills o Eric Clapton (entre Clash, sus traba-
otros cientos). Su primer disco se edita en jos han dejado
1971, con el sello A&M, compañía ideal atrás el gorro va-
para sus relajados trabajos, de limpio aro- quero y las pro-
ma country, versiones de estándares y bri- ducciones de
llante entretejido musical. Pureza y finura Chip Young para
a prueba de exigentes. Mientras estuvo encarar los tiem-
pos vertiginosos
casada con Kris Kristofferson, grabó con que nos acechan
él varios elepés, incidiendo en una fórmula en álbumes como
tan country como son los duetos. Con la Live shots (1980) y Musta notta gotta lotta
Coolidge no es cuestión de resaltar algu- (1981). Un chico inquieto, que experi-
nos de sus discos sobre otros; todos son menta últimamente con los sintetiza-
algodonosos y de espléndidos recursos vo- dores.
cales.
Emmyloa Harris. Nacida en Birmingham
Charlie Daniels Band. El corpulento Char- (Alabama) en 1949. Después de patearse
lie Daniels (guitarra y violín) empezó a ser todos los clubes de folk de Nueva York,
conocido cuando, de su Carolina del Nor- Gram Parsons se la lleva a Los Ángeles, y
te natal, se trasladó a Nashville, en 1967, el idilio se junta con la profesión en esos
para tocar en discos de Flatt and Scruggs, dos elepés que Gram nos dejó antes de su
Pete Seeger, Ringo Starr y Bob Dylan, o muerte. Emmylou se erige en albacea de
para escribir canciones que interpretaron sus geniales intuiciones country-rock y a la
Elvis Presley, Tammy Wynette, etcétera. necrófila sombra del héroe encarrilará su
En 1971 le ofrecen un contrato discográfi- trayectoria solista. Pieces of the sky (1975),
co y funda la Charlie Daniels Band, con Elite hotel (1976) y Luxury liner (1977)
Joel di Gregorio (teclados), Fred Edwards compensan las baladas con los arranques
(batería), Barry Barnes (guitarra), Mark rockeros de sus fabulosos músicos (la Hot
Fitzgerald (bajo) y Gary Allen (batería), Band). Se casa en 1977 con su productor,
sólida formación al estilo sureño que im- Brian Ahern, y los años ochenta traen a
primió una compacta serie de álbumes: una Emmylou más sosa de imagen, sin la
finura sexy de las primeras carpetas, más
Fire on the mountain, Nightrider, Saddle centrada en el country de salón, demasia-
do seria.
tramp, Uneasy rider... Algunos miembros

Kristofen.Nacd1936 Kris

Brownsville (Tejas). Vida azarosa y nove-

"LOS TIPOS DE NASHVILLE TOCAN TAN LIMPIO COMO EL AGUA DEL CAMPO,
TAN FRESCO COMO EL ROCÍO DE LA MONTAÑA" ('Nashville cats', John Sebastian, 1966)

Emmylou Harris apostó por la ción por el deber cumplido. Su canción
más conocida fue Your mamma don't dan-
recuperación de la esencia del ce. La posterior carrera de Loggins en so-
country. litario ha discurrido por caminos más zig-
zagueantes.

New Riders of the Purple Sage. Título áci-
do de Zane Grey para esta banda creada
en 1970 por David Nelson (voz y guitarra)
y John Marmaduke Dawson (voz y guita-
rra), junto al trío Jerry García, Phil Lesh y
Mickey Hart, de Grateful Dead. Para su
primer disco cambiaron a Lesh y Hart por
Dave Torbert y el ex Jefferson Spencer
Dryden. Grupo para el divertimiento, con
acusada vertiente ecológica y siempre dis-
puesto a rellenar elepés. Con CBS graba-
ron siete en cinco años. Al igual que Com-
mander Cody, eran informales, jocosos,
rebosantes de música y con una espléndi-
da fama de malditos rockeros.

• • illie Nelson, lesca la que llevó este hombre hasta su Nitty Gritty Dirt Band. Bruce Kunkel,
Waylon Jennings, contrato con Monument. Estancias en In- Jeff Hanna, Jimmy Fadden, John
Tompall Glaser y Jessi Colter glaterra como estudiante de literatura, es- McEuen, Leslie Thompson y Ralph Tay-
fueron los delfines del critor frustrado y novel compositor; estan- lor se juntaron en 1966 en Long Beach
movimiento outlaw (forajidos, cias en la República Federal de Alemania para llamarse The Illegitimate Jug Band.
fuera de la ley), que se como piloto de helicópteros; estancia en Ya como NGDB graban varios discos he-
enfrentó a las normas de West Point como profesor militar; estan- terogéneos y oscuros, para afrontar los
pureza, clan y monopolio que cia en Nashville como hombre-de-la-lim- años setenta con nuevos músicos y una
se ordenaban desde Nashville. pieza; estancia en México como piloto de estrategia que dio buenos frutos: tomar
Buscaron una música menos transporte para Gulf.. Como compositor material escrito por otros (Michael Nes-
estándar, se relacionaron había dejado atrás adolescentes escrituras mith, J. J. Walker, K. Loggins) y conver-
estrechamente con muchas pro Vietnam para centrarse en letras tirlo en éxito. Su álbum definitivo es Will
figuras del rock y al final como Me and Bobby McGee, inmortaliza- the circle be unbroken (1973), monumental
da en voz y nervio por Janis Joplin. Du- obra sobre los orígenes de la música
rompieron los muros de la rante algunos años, K. K. fue la pieza de country, un triple elepé enciclopédico, al
metrópolis, siendo reconocidos recambio para los fans desahuciados de que siguieron obras más modernistas
como estrellas del country. Dylan. Lo mejor son sus primeras obras: (Dream, 1975). Fue la primera banda nor-
The silver tongued devil and I (1971), Border teamericana en lanzarse a una gira sovié-
tica (en 1977). Por esa época crearon el
lord (1972) o Jesus was a Capricom (1973). sello Aspen Recording Society, entidad
Poseedor de un porte varonil y recio, fue que velaría por la pureza étnica de las raí-
abandonando sus músicas para dedicarse ces musicales americanas.
al cine.
Ozark Mountain Daredevils. Sexteto de
Loggins and Messina. Kenny Loggins Springfield, Misuri, que debutaron en
( Washington, 1948), y Jim Messina (Cali- 1973 con un más que notable álbum de
fornia, 1947) se encuentran por primera igual nombre, en el que se contenía un sin-
vez en 1970. Messina (ex Buffalo Spring- gle memorable, If you want to get to heaven.
field, ex Poco) fue designado como el pro- A pesar de mantener una línea muy digna
ductor de Loggins (cantante y composi- de trabajo en sus siguientes elepés, nunca
tor para otros artistas, de reconocido pudieron zafarse de las comparaciones
prestigio). Lo que nació no fue el primer con los Eagles.
disco de un solista, sino el primer disco
de un dúo nuevo y cargado de éxitos, Poco. Pesos pesados del country-rock. Dos
Loggins and Messina. Hasta 1976, L&M ex Buffalo Springfield, Richie Furay y Jim
fue una de las más comerciales y renta- Messina, junto a Rusty Young, Randy
bles bandas de country-rock, vendiendo Meisner y George Grantham, forman
en todo el mundo y optando por separar- Poco en el verano de 1968. Enseguida se
se, después de casi una decena de elepés,
en un clima de utópica amistad y satisfac-

"LA MEXICANA LOLA BELTRÁN FUE MI MAYOR INFLUENCIA MUSICAL
EN MIS PRIMEROS AÑOS. UNA HEROÍNA" (Linda Ronstadt)

producirían cambios de personal y se des- Buddy Cage, de los New Riders of the
crubiría una especial tensión entre los di- Purple Sege, con un instrumento básico
versos gustos de cada músico. Poco pre-
tendieron hacer un country-rock elabora- del country: la steel guitar.
do, algo trascendente, en el que Furay te-
nía un papel mesiánico y que no consiguió
todo el éxito que se presagiaba para la
banda. Pickin' up the pieces, Deliverink,

From the incide o A good feelin' to know for-
man parte de esta búsqueda atractiva y no
siempre acoplada. Guando Furay se va, en
1973, Poco queda formado por Paul Co-
tton (guitarra), Tim Schmitt (bajo), Rusty
Young (pedal steel) y Grantham (batería).
Con menos egomanías, la banda funciona
mucho mejor, más esquemática y más di-
recta en sus planteamientos: así van lle-
gando Cantamos, Head over heels y el po-
pularísimo, casi estándar ya, Rose of Ci-
marron (1976). Fantásticas voces, engra-
naje sereno de los dos compositores (Co-
tton y Young) y una altura musical de mu-
chos brillos pop.

PUre Prairie League. Nombre tomado de (1978)... Si uno de sus factores de no ries- sí como el Reino
una sociedad antialcohólica femenina que go es la exigente selección de material Unido ha dado muy buenos
aparece en una película de Errol Flynn y (equilibrando desde Elvis Presley a Elvis grupos de folk-rock y de
tras el que salieron a la palestra en 1972 Costello), otro, y tan importante, es la pro- blues-rock, su asimilación de
cinco músicos, encabezados por Craig Fu- ducción maestra de Peter Asher, sabio ex- l as bases country no fue,
ller (guitarra y voz). Para el segundo dis- plotador de filones. En los ochenta, se ha
co, la banda estaba ya disuelta y se recu- dedicado con gran fortuna a recuperar evidentemente, tan productiva.
rrió a músicos de estudio para ayudar a standards elegantes y sofisticados.
Fuller. En 1974, la compañía edita un sin- Eso sí, no se puede olvidar la
gle de manera involuntaria, Amie, que se The Souther, Hillman, Furay Band. A ima-
encarama hasta lo alto de las listas. La gen y semejanza de Crosby, Stills, Nash & ilusionada carrera de lan
banda se rehace y vuelven a fichar por Young, los reciclados John David Souther
RCA, garantizando una tanda de discos (guitarra), Chris Hilhnan (bajo) y Richie Matthews o de unos Heads
meticulosos, disfrutables, rockeros y efec- Furay (guitarra) tuvieron su experiencia
tivos, como Two lane highway (1975) y If de superbanda. El año 1973 les vio agru- Hands & Feet, de donde saldría
the soe fits (1976). parse y el 1975 les vio separarse. Nadie se
rasgó las vestiduras. Sólo tiempo útil para l a mejor figura del country-
Linda Ronstadt. Nacida en 1946 en Tuc- dos elepés, con más trompeteo publicitario rock británico, el guitarrista y
son, Arizona. De ascendencia mexicana y que aceptación real y un irresoluto proble- cantante Albert Lee,
alemana, su familia tenía gran inclinación ma de egos.
por la música. Con 18 años se traslada a acompañante de todas las
Los Ángeles, y con otros dos ilusionados Billy Swan. Cuando I can help fue núme-
amigos forma Stone Poneys. Tres elepés, y ro uno casi mundial en 1974, .nadie cono- estrellas norteamericanas y
Linda, que demostraba su nacer-para-es- cía a Billy Swan. Dueño de una vida nó-
trella, se desborda en su arte baladístico. mada desde que nació, en Misuri, fue poseedor de unos discos en
Álbumes en solitario, sesiones en Nashvi- músico de Kristofferson y desempeñó solitario deliciosos.
lle y reclutamiento de los futuros Eagles trabajos eventuales hasta que esa can-
para servirle de músicos acompañantes en ción le llevó a vender muchísimos discos
Linda Ronstadi (1972) constituirían los ci- y ser objeto de críticas (muchas injustas)
mientos de su gran éxito en los setenta. por su facilidad para confeccionar temas
Éxito que invadió el terreno pop con el dis- comerciales cargados de referencias evi-
co Heart like a wheel, con dos singles núme- dentes. Fue uno de los primeros músi-
ro uno y otros álbumes cargados de infali- cos en recuperar la veta perdida del
bles composiciones: Prisoner in disguise rockabilly.
(1975), Hasten down the wind (1976), Sim-
ple dreams (1977), Living in the USA

"LAS PERSONAS CON VISIONES SOMBRÍAS O FATALISTAS VEN LA LUZ
ANTES QUE LOS DEMÁS. GRAM FUE UNA DE ELLAS" (Emmylou Harris)

Una de las primeras formaciones de los

Flying Burrito Bros., con Gram Parsons
(segundo por la derecha).

LA ASCENSIÓN
AL CIELO DE
GRAM PARSONS

J. MARTA REY ternational Submarine Band en Los su segundo, Burrito deluxe (1970), Mi-
Ángeles. Allí su seducción personal lo chael Clarke (otro ex Byrd) ocupa los
Gram Parsons creó Flying Burrito introduce en Hollywood. Intima con tambores y Bernie Leadon (futuro Ea-
Bros. Los contagió de su visión: un Brandon de Wilde (el niño-actor de gle) la guitarra. Un accidente de moto
country renovador que llevara al oyente Raíces profundas), que ayuda al cuarte- aparta a Parsons de la escena. Cuando
tradicional la insurrección de los tiem- to en su disco inicial, aún inédito: las el disco sale ya no está con ellos: es
pos y al hippy a las raíces. Frágil y tími- cintas desaparecieron. ahora inseparable de Keith Richard, el
do, su agitada biografia lo convirtió en guitarrista de los Rolling Stones. Son
mártir de lujo. Hoy, mientras sus com- Siguen dos singles (uno de ellos tiempos de pendiente por las drogas
pañeros de viaje se apolillan como reli- tema central del filme Que vienen los ru- duras, viajes sin fondo que afloran más
quias, su leyenda crece entre genera- sos), una aparición peliculera (The trip) tarde en sus dos únicos y transidos dis-
ciones que aún llevaban pañales cuan- y el álbum Safe at home, verdadero cos individuales: G. P. (1973), y el pós-
do él vivió. debú del country-rock, aunque nadie lle- tumo, Grievous angel (1974). Ambos,
gó a enterarse. Con los Byrds registra junto a su musa particular, Emmylou
Los Byrds se apuntaron la inaugura- Sweetheart of the rodeo (1968). Pero, Harris.
ción oficial del country-rock. Pero los algo engreído, exige destacar su nom-
Burrito escribieron las más gloriosas bre sobre el del grupo. Finalmente los Rick Roberts lo sustituye. Le suce-
páginas del género. En ambos casos fue abandona a los tres meses, negándose den deserciones y reemplazos, inclu-
Parsons el responsable. Tenía una voz a tocar en la racista Suráfrica. Al regre- yendo a miembros de Country Gazette,
de ángel triste que encarnaba con per- so, Chris Hillman le sigue. cuyo sonido blue-grass domina final-
versa ironía y sentimiento su íntimo mente. Los Burrito aguantan dos dis-
conflicto: un chico bien, atrapado entre Parsons y Hillman reúnen en los cos más, y se disuelven en 1971, cuan-
el sur profundo y cristiano y los excesos Flying Burrito Bros. a músicos de estu- do Hillman y Al Perkins se unen a Ma-
de la ciudad del pecado. Sin él el grupo dio como Chris Ethridge (bajo), nassas. En 1974, Kleinow y el violinista
pasó a ser uno de tantos imitadores del Sneeky Pete Kleinow (steel guitar) y un Gib Guilbeau retoman el nombre,
estilo que ellos iniciaron. desfile de baterías. Sorprenden al mun- manteniéndolo en vulgar actividad
do con Gilded palace of sin (1969). Para hasta la fecha.
Fueron los primeros cowboys eléc-
tricos. Su mentolada simbiosis de imá- HISTORIA DEL `ROCK' El 19 de septiembre de 1973 Par-
genes hippies de honky tonk hipodérmi- sons es encontrado muerto en el desier-
co y repesca de la tradición camionera PRóXIMO CAPITULO to cercano a Los Ángeles. En su sangre
supusieron un reto adelantado a su hay rastros de morfina, cocaína y alco-
tiempo. Para el público vaquero eran 'ROCK' SUREÑO hol. Unos días después, su compinche
sólo otros hippies greñudos. Para el de y empresario Phil Kaufman secuestra
rock, en una época radical, aquello era el féretro camino de su familia (en Nue-
country, el odiado estandarte del con- va Orleans) y quema sus restos en el lu-
servadurismo nacional. Cuando los gar de la muerte, cumpliendo así los de-
Burrito aparecieron con aquellos flori- seos del difunto.
dos trajes de Roy Rogers endominga-
do de Hollywood en su primera porta-
da, fue demasiado. Nadie los aceptó;
años más tarde eran el modelo más
i mitado. Sencillamente, habían cons-
truido el sonido californiano de la pró-
xima década.

El suicidio de su padre -cantautor
country- marcaría la fijación musical
de Parsons. Nacido Cecil Connor en
Winterhaven (Florida) en 1946, creció
en Georgia. Adoptado por un acomo-
dado padrastro, cambia de nombre y
domicilio (a Nueva Orleans), pero se
fuga de casa. Deambula por Nueva
York antes de formar los Shilohs
(1964), aspirantes a Kingston Trio. En
1965 ingresa en la universidad de Har-
vard, que abandona para montar su In-

HISTORIA DEL `ROCK'

El fértil sur de Estados Unidos, que ha incubado
eljazz, el blues, el rockabilly o el soul, se puebla en
los años setenta de grupos hirsutos que combi-
nan las especialidades musicales de la región y
abanderan una renovación de las costumbres.
La Allman Brothers Band cumple la función de
rompehielos, y logra devolver la confianza en si
mismos y el orgullo a sus paisanos. Esa misma
época ve la eclosión de otros movimientos sonoros de la zona: el rock del pantano,
con veteranos como Dr. John (en la foto), y los outlaws (renovadores del country).
Es el renacimiento musical de un territorio hasta entonces marginado por la in-
dustria del rock.

EL `ROCK' SUREÑO ANUNCIA LA RECUPERACIÓN DE LA ZONA: EN 1976,
EL SUREÑO JIMMY CARTER LLEGA A LA PRESIDENCIA

ROCK' SUREÑO Producto tardío de la revolución cultural de
l os sesenta, el rock sureño mantiene un

equilibrio entre los nuevos conceptos vitales y
una devoción a ultranza por su tierra; grupos
como la Atlanta Rhythm Section proclaman
altivos su origen sureño.

"TENGO OTRO DÓLAR DE PLATA / Y EL CAMINO NO ACABA NUNCA. / NO VOY
A DEJAR QUE ATRAPEN AL JINETE DE MEDIANOCHE" (G. Allman, 1970)

Lynyrd Skynyrd defendía como EBELION EN LA Han cambiado las cosas. En los sesen-
ta, cualquier muchacho sureño que se des-
grupo las esencias más rancias CONFEDERACIÓN viaba de la normalidad tenía que enfren-
tarse a las consecuencias o emigrar
de la cultura sureña. DIEGO A. MANRIQUE -caso de Janis Joplin- a climas más to-
lerantes. Así, gentes como los hermanos
El rock sureño es una Una noche de 1974, la mansión del gober- Allman toman esa ruta de fuga, pero des-
nador de Georgia recibe a unos desacos- cubren que California no es el paraíso pro-
síntesis de elementos diversos. tumbrados visitantes: Bob Dylan, que metido y vuelven a su tierra. Allí crean nú-
acaba de dar un concierto, llega acompa- cleos de resistencia en los que experimen-
Del gospel toma su fuerza ñado por músicos locales. El gobernador, tan con nuevos estilos de vida: la sensa-
vestido con pantalones vaqueros, los reci- ción de estar rodeados fortalece su música
i nterior y carácter comunitario. be amistosamente y mantienen una charla y sus convicciones. Se desarrolla un pro-
hasta las tantas. El político en cuestión al- fundo sentido de la hermandad, el ácido
Con el blues, sus guitarras canzará dimensiones internacionales crea un curioso misticismo, se celebran los
poco después: se llama Jimmy Carter. Y el excesos como reacción al ambiente purita-
cantan y gimen. El country mismo hecho de que se celebre tal encuen- no y represivo. Es el germen del rock su-
aporta sentimentalismo, tro evidencia que el sur de Estados Uni- reño.
mientras que el soul dos ya no es ese territorio hostil a las tri-
proporciona vitalidad. bus contraculturales que se podría dedu- Doble lucha. En casa tienen que luchar
I nspirados por los grupos cir de películas como Easy rider (1969), para que sea aceptada su diferencia. Cara
británicos y californianos, donde brutales paletos acaban a tiros con al exterior deben afirmar su orgullo de ori-
desarrollan esas bases en los hippies californianos que han osado ho- gen ante unos medios y una industria que
i mprovisaciones exaltadas: llar sus carreteras. les miran por encima del hombro. Son los
l os mejores discos combinan Allman Brothers los responsables de
ese impulso aventurero con obrar el milagro: tras ganarse al público
una sólida asimilación de la sureño, conquistan el respeto de las me-
herencia sonora del Sur. trópolis con música enfebrecida. Les ayu-
dan los buenos contactos de Phil Walden,
su mentor y director del sello Capricorn.
Ese modelo de ascensión será repetido en
años posteriores por infinidad de grupos
de la zona, que hacen gala de sus raíces,
buscan la identificación con sus seguido-
res y exhiben gran facilidad para crear
música festiva.

Con un paisano instalado en la Casa
Blanca, el sonido del Sur vive años de
prosperidad. Pero está descabezado: la
desintegración de los Allman Brothers re-
vela los conflictos entre los ideales origi-
nales y una realidad cambiante. Sus here-
deros se hacen más chovinistas, buscan
complacer los oídos masivos y caen en la
reiteración. Aunque no se extingue el mer-
cado del boogie bullicioso -atendidos por
unos ZZ Top que saben dosificarse y cam-
biar de chasis-, el rock del Sur cae en
descrédito. Coincide prácticamente la ig-
nominiosa derrota de Carter a manos de
Ronald Reagan con la bancarrota del sello
Capricorn.

Hay una posdata feliz. Aunque los tem-
blores del punk y la nueva ola llegan tarde,
los ochenta han visto otros grupos sure-
ños. Son los hermanos menores de los
muchachos que iban a fumar marihuana a
la tumba de Duane Allman, en busca de
no se sabe qué revelación. El grupo para-
digmático es actualmente REM; aunque
alejados de los esquemas de sus anteceso-
res, maduran con igual individualismo y
modestia en un suelo especialmente fe-
cundo.

"QUIERO A ESTE GUITARRISTA, PRESENTÁDMELO. ¿CÓMO
CONSIGUE TOCAR ASÍ?" (Eric Clapton, antes de grabar 'Layla' junto a Duane Allman)

ALLMAN bargo, no estará dispo- Duane Allman, líder de Allman
BROTHERS: JINETES nible hasta el segundo Brothers, fue uno de los guitarristas
DE MEDIANOCHE elepé, Idlewild south, ya i nfluyentes de los primeros setenta.
en 1970. Para entonces
DAVID S. MORDOH han pulido su sonido. ntes de partir hacia
Gregg se desgañita con California, Duane y Greeg
Sobre el papel, la propuesta del rock los blues mientras los de- Allman tenían un grupo
sureñoteníasugancho:unabasede blues(lo dos de Duane corretean ll amado Aliman Joys. En 1966
velozmente. En los te- contacta con ellos John
negro) inundada de guitarras eléctricas mas largos suelen usar Loudermilk -compositor de
robustas (el rock) con gotitas de country (lo esquemas de jazz, con Tobacco road- y les hace
blanco). La Banda de los Hermanos All- ciertas partes improvi- grabar unas cintas, editadas
man tal vez no sea exponente fiel del géne- sadas tras la entrada-es- mucho más tarde, en 1973.
ro, pero sí el más digno representante. A tribillo, aunque percu- En cuanto a su frustrante
diferencia de otros paisanos encerrados sión y órgano también periplo por la costa oeste, fue
en estructuras arquetípicas, buscaron en- mantienen algún que como parte de The Hourglass
riquecer sus canciones dotándolas de sen- otro paralelismo con con los que grabaron dos
tido del espacio. Para ello, en música for- Santana. Recogiendo su discos poco convincentes.
zosamente debe flexibilizarse el tiempo, y potencia en directo, en Después volvieron a Florida
éste no importa con tal de extraer un ren- para incorporarse a 31st of
dimiento máximo: canciones de hasta 30 1971 se publica el doble February. Estas experiencias
minutos, donde cada uno de los seis com- Live at the Fillmore East. les sirvieron para fundar Aliman
ponentes puede, de cuando en cuando, es- Allman Brothers Band Brothers en Macon (Georgia),
capar de los convencionalismos del rock. es la gran esperanza con voluntad de autonomía
norteamericana. creativa y deseos de reflejar
Una característica de la Allman Broth- los nuevos tiempos sureños.
ers Band es la presencia de dos baterías Y justo entonces,
(a cargo de Jai Johanny Johanson y Butch con la parte espinosa
Trucks). Junto al bajo de Berry Oakley, del camino recorrida,
crean la plataforma idónea para los juegos sobreviene la desgracia.
de guitarra de Dickey Betts y Duane All- Duane muere en acci-
man. Gregg, hermano menor de este últi- dente de moto (1971).
mo, aporta los teclados, así como una voz Él, que nunca toleró
muy personal, entre lo nasal y lo rancio. drogas duras en la ban-
Duane es el cerebro indiscutible. Ambos da, que intentó llevarla
hermanos nacieron en Nashville, crecie- cual gran familia para que durase, caía
ron en Florida y emigraron a California cuando estaba a punto de cruzar el um-
como músicos; el mayor volvió para ga- bral de la popularidad al colaborar con
narse gran reputación como guitarrista de Clapton en Layla. Un año después, ha-
estudio, grabando en Muscle Shoals junto biendo publicado la banda otro doble en
a artistas soul de la talla de Wilson Pickett, directo homenajeándole, fallece en idénti-
Arthur Conley, King Curtis o Aretha cas circunstancias -y muy cerca del mis-
Franklin. mo lugar- el bajista Berry Oakley.

Phil Walden, capitoste de Capricorn Continuaron pese a los reveses. Ramblin'man-contemáticaparecida Mid-
Records, muestra interés, y busca a un
productor ilustre (Tom Dowd), para que night rider, la canción más significativa del
despeguen con garantías. Dowd, sin em- grupo- triunfa rotundamente en 1973, al
igual que Brothers and sisters, álbum con
ribetes de country del que se extrajo. No
obstante, tanta amputación no frena la
enfermedad: el tambaleante liderazgo de
Gregg se va a pique cuando éste, ya en-
frascado en su carrera como solista y ca-
sado con la cantante Cher, declara en con-
tra de un empleado del grupo por narco-
tráfico. Tras la separación, en 1976, los di-
ferentes miembros se dedican a sus pro-
yectos personales. Gregg, en solitario y
con su señora; Betts, con Great Southern,
y Trucks y Jaimoe en Sea Level. En 1978,
una reunión fructifica en el aceptable En-
lightened rogues, aunque las últimas ofertas
dejan claro que Allman Brothers Band no
encaja en los ochenta. No importa: Gregg
graba, ahora por su cuenta, sin renunciar
a su larga melena rubia.

"EL `ROCK' SUREÑO ES `BLUES' MÁS '.COUNTRY, AGITADOS
CON ENERGÍA" (Dicky Betts, guitarrista de Allman Bros)

La Marshall Tucker Band practicaba el Atlanta Rhythm Section. Ha sido una de
las bandas más tenaces del rock sureño,
boogie típico del rock sureño, pero
con cierta elegancia. superando la decena de álbu-
mes y manteniendo casi idén-
tica formación desde el princi-
pio, en 1972. Eran músicos de
sesión habituales en Doraville
(Georgia), y tienen en su cu-
rrículo grabaciones con Ike &
Tina Turner, Al Kooper o Roy
Orbison. La ARS es un mode-
lo de grupo profesional y re-
sultón, sin grandes individua-
lidades, pero que se autoali-
menta de sus propias compo-
siciones, y que si bien comen-
zó dosificando blues y boogie
se fue decantando hacia mo-
delos más eclécticos y cosmo-
polítas (Under dog, 1979; The
boys from Doraville, 1980), lle-
gando hasta completas mues-
tras de la más inofensiva ver-
satilidad (Quinella, 1981). Una
obra en conjunto sólida, pero
exenta de magia.

i algodón y vi negro, / UITARRAS Elvin Bishop (1942). Hizo su
altas mansiones blancas y DEL SUR bachiller guitarrístico con la
pequeñas chozas. / Sureño, Paul Buterfield Blues Band de
¿cuándo les harás pagar? / Oí ANTONIO DE MIGUEL Chicago durante buena parte
gritos y látigos de los años sesenta, donde
chasqueando. / ¿Hasta En todos los Estados del sur de Estados aprendió mucha técnica del malogrado
cuándo? / ¿Hasta cuándo? / Unidos la música reflejaba una acendrada Mike Bloomfield, hasta que en 1968 se de-
Lily Bel¡, tu pelo es castaño conciencia del pasado y de la comunidad, cidió a emprender la aventura solista yén-
dorado, / he visto a tu un fácil delirio por las celebraciones colec- dose a San Francisco. Siguió a vueltas con
hombre negro rondando. / Te tivas -grandes festivales maratonianos, el blues hasta que fichó por Capricorn. El
juro por Dios que lo como Volunteer Jam-, estructuras musi- giro en su música se hace radical, adopta
tumbaré. / He oído gritos y cales intensas sustentadas en dobles y tri- maneras más bailables y fluidas; música
l átigos chasqueando. / ples guitarras solistas, doblete de baterías y de codazo y sudor con finísimos retoques
¿Hasta cuándo? ¿Hasta toda una estética de signos, referencias, hé- de blues aquí o allá, proyectando el calor
cuándo?". roes y batallar político. El rock sureño dio guitarrístico de Bishop y Johnny Vernazza
muchos nombres y un intrépido sonido fá- sobre las parrillas siempre dispuestas de
(Neil Young, Southern man, cilmente identificable, gozoso y contagioso. Phil Aaberg (teclados).
1970.)
Amazing Rhythm Aces. Se formaron en Black Oak Arkansas. Juntos desde 1964,
1972, aunque su primer disco no llegó has- se hicieron llamar Knowbody Else hasta
ta 1975, Stacked deck, grabado en el estu- que en 1969 se asientan en Los Ángeles y
dio de Sam Philips en Memphis. Grupo se bautizan con el nombre de su pueblo
correcto, bien engrasado de boogie, fácil (Black Oak) y de su Estado (Arkansas).
ejecutante de melodías encantadoras y No hubiesen sido más que otra banda del
poco laureado de éxitos. Su gran caracte- montón sin las pericias extravertidas de su
rística fue el control, la templanza, lo que vocalista Jim Mangrum, alias Am Dandy,
les llevó a fórmulas de más pureza country mancebo con cuerpo de alfeñique, largas
(Burning the ballroom down, 1977) y menos melenas rubias, ropas prietas, sangre roc-
conexión con el público rockero. kera e inesperada voz cavernícola. Han
sido los prolíficos por excelencia del rock
sureño, a juzgar por el gran número de ele-
pés grabados, cantidad que sin duda les

"SOMOS AGRESIVOS, PERO ESO NO ES MALO. S I BUSCAS PROBLEMAS, SIEMPRE
HAY ALGUIEN QUE ESTÁ DISPUESTO A DÁRTELOS" (Dave Hlubek, de Molly Hatchet)

mermó calidad. No pasaron nunca de esa ría), Bill Payne (te- Leon Russell impulsó el rock sureño
serie B en la que parecían encontrarse clados) y Ritchie con el sello Shelter y colaborando con
muy a gusto. Su fichaje por Capricorn en Hayward (batería). Clapton o J. Cocker.
1977 coincide con una reestructuración Los dos primeros ha-
general de la banda y con el sometimiento bían participado en ¡ en, oí a Mr. Young
de Dandy a un refinamiento vocal de éxito discos de Zappa, cantando de ella. / Bien, oí al
que dio como resultado su mejor disco, aunque Little Feat viejo Neil degradándola. /
no nacía con intere- Bien, espero que Neil Young
Race with the devil. ses minoritarios. Sus recordará / que un sureño no
elepés iniciales que- l e necesita merodeando por
Johnny van Zant Band. Tercer eslabón de daron sólo para de- aquí. / Dulce hogar,
la saga Van Zant (los otros dos son Ron- gustadores de lo ex- Alabama, / donde el cielo está
nie, de Lynyrd Skynyrd, y Donnie, de 38 quisito. Con el cam- azul. / Dulce hogar,
Special). En su Jacksonville natal, y ya bio de Estrada por Alabama. / Señor, regreso a
desde los 16 años, Johnny formó un ilusio- tres músicos -Paul casa por ti".
nado grupo para tocar en bares y clubes (Lynyrd Skynyrd, Sweet
locales. Hacen tres álbumes en los albores Barrere, Ken Grad- home, Alabama, 1974.)
de los ochenta, el primero de ellos produ- ney y Sam Clayton-
cido por Al Kooper. En 1985, reduciendo el grupo grabó otro
su nombre a Van Zant, graban un álbum disco, de coleccionis-
homónimo, hard-rock de muchos grados tas: Dixie chicken
pero de discutible imaginación. (1973). Siempre ace-
chados por la sepa-
Leon Russell (1941). Nombre sagrado de ración, tentados ha-
la historia del rock. Cantante, multiinstru- cia buenas remune-
mentista, arreglador, compositor, produc- raciones como sesio-
tor y ejecutivo, Russell es una personali- neros, Little Feat
dad volcánica, amplio conocedor del rock continuó destilando
como arte y como negocio, siempre dis- su jugoso rock, teñi-
puesto a embarcarse en aventuras a las do de soul y músculo,
que él termina dando su temperamental en álbumes de mayor
sello. Nació en Lawton (Oklahoma), y ha repercusión comer-
desarrollado su carrera en California. Por cial, como Feats,
sus dedos han pasado todos los instru- Don't fail me now (1974), The last record al-
mentos pensables y él ha pasado por los bum (1975) o el suculento Waiting for Co-
discos de muchísima gente. Aparte de ser lumbus (1978). Una historia discográfica
elegido por Phil Spector como músico de rebosante de matices y sazonada agria-
sesión fijo, su mayor fama la consiguió mente por el hálito de la maldición.
como alma-mater de los Mad Dogs y En-
glishmen, que acompañaron a Joe Cocker Lynyrd Skynyrd. Su origen se remonta a
en 1970. Creó su estudio de grabación, y 1964, cuando Ronnie van Zant (voz) se
dirigió dos compañías discográficas (Shel- alía a Allen Collins y Gary Rossington,
ter y Paradise), es respetado por seguido- guitarristas y alumnos del mismo instituto
res y músicos del blues, el rock, del soul, del que Ronnie en Jacksonville. Dice la leyen-
country y del pop, y su aspecto de noble da que LS es la derivación del nombre de
medieval esconde a un cálido maestro de un profesor de gimnasia que les traía fritos
todas las formas musicales. Como solista por la longitud de sus cabellos. Con la in-
se pueden destacar sus elepés Carney corporación de Ed King (guitarra), Leon
(1972) y el triple Live (1973). Un genio de Wilkeson (bajo), Billy Powell (teclados) y
carne y hueso. Bob Bums (batería) se dispusieron a gra-
bar en 1972 su primer disco, Pronounced
Little Feat. Banda de culto, aclamada por leh-nerd skin-nerd, bajo el patronazgo de
críticos y gourmets, su tenacidad les pro- su descubridor, Al Kooper. Inmediata-
porcionó un cierto éxito en sus años fina- mente la banda empezó a enseñar sus afi-
les, y pagaron el pasaparte a la inmortali- ladas uñas sureñas. LS se convirtió en la
dad con la desaparición de su líder, Lowell publicidad rockera del orgullo sureño:
George, en 1979. Californianos, es de ley
incluirlos en este diccionario por su soni- banderas confederadas, altivez surfista,
do. La banda se formó en 1970, con Lo- elogios a políticos tan reaccionarios como
well George (guitarra), Roy Estrada (bate- George Wallace, letras batalladoras, pero,
eso sí, una magistral facilidad para pro-
yectar convincente boogie-rock, sin que fal -
ten los mejores trucos para llevarse a la
audiencia al huerto (entradas espectacula-
res de guitarras, voces bien moduladas so-
bre estribillos básicos). Así lo hicieron en

"SOMOS TIPOS NORMALES DEL SUR. N I ESTAMOS ORGULLOSOS NI AVERGONZADOS.
Y AQUÍ NO HAY SUPERESTRELLAS. SOMOS GENTE DE LA CALLE" (D. Allman)

LIttle Feat era un memorable grupo mantados en la energía de Lynyrd
californiano conectado con los Skynyrd, y tomando como modelo el éxito
sonidos sureños.
del heavy-metal en todo el
mundo. Molly Hatchet pasa-
ron a ser los abanderados del
boogie-rock más duro y peleón
del Sur. Sin competencia en
su estilo, la banda ha vendido
millones de discos, con pocas
sutilezas sonoras, pero siem-
pre efectivos, demoledores,
coherentes. Algo así como los
AC/DC radiografiados en su-
reño. óigase cómo resumen
de todo esto su Double trouble
live (1985).

En el rock sureño hubo Second helping (1974), Nuthin' Fancy The Outlaws. Fueron los pri-
también bandas de menor (1975) y el doble en directo One more from meros artistas fichados por
entidad, surgidas al calor del the road (1976): boogie calentón, versiones Clive Davis (ex capo de la
fuego comercial que de J. J. Cale, poderío instrumental de los CBS) para su sello Arista.
experimentó esta etiqueta: tres guitarristas y un notable mérito como Quinteto de Tampa (Florida)
Blackfoot, White Witch, autores. El tema Sweet home Alabama fue que incidía en el triplete de
Cowboy, Stillwater, Hydra o su mayor éxito en singles, una contesta- guitarristas (Hughie Thomas
los Grinderswitch. Respecto a ción provocadora al Southern man de Neil son, Billy Jones, Henry Paul), eran adictos
solistas, destacaron Don Nix, Young. Los LS se labraron una epopeya a las armonías vocales, y si bien han con-
Don Preston, J. J. Cale y Leon de excesos, violencias, anchas tragaderas seguido figurar en lo alto de las listas de
Russell. Algunos grupos alcohólicas y un inagotable trabajo a pie éxito, nunca han logrado credibilidad:
californianos (Little Feat, de carretera. Un accidente de aviación cambios permanentes de productor, eclec-
Doobie Brothers) se segó la vida de Ronnie y del nuevo guita- ticismo despersonalizado, intentos de pa-
empaparon de sonidos sureños, rrista, Steve Gaines, el 20 de octubre de sarse al country-rock más comercial. Sus
aparte de cantantes (Bob 1977. Tras la necrofilia discográfica, los discos les acreditan como una banda ale-
Seger, Alex Taylor) que dos guitarras restantes del grupo forman gre, potente y sin complejos, pero con un
grabaron en estudios de la poco afortunada Rossington-Collins problema evidente de horizonte.
Alabama. Band en 1980.
38 Special. También nacidos en Jackson-
The Marshall Tucker Band. Pasarán a la ville, tienen a Donnie van Zant como can-
historia del rock sureño como su banda tante. Su año de unión fue 1974. Duro tra-
más refrescante. ¿Motivos? El saxo-flauta bajo de teloneros a lo largo y ancho de
de Jerry Eubanks, o la guitarra siempre EE UU, hasta que en 1977 fichan por A &
inspirada de Toy Caldwell, o esa perfuma- M. Lo que en su primer disco fueron bala-
da mixtura de country más rock más brisas das alternadas con discreto rock e imagen
jazzificantes que transpira su música. Pri- blanda, se ha ido transformando en una
mero como The Toy Factory, luego como música de corte estándar, poco relaciona-
Marshall Tucker Band, estos chicos te- da con las claves sureñas y más encasilla-
nían unos especiales encantos: amantes dle en los rediles del rock adulto.
de las estructuras melódicas, de los carno-
sos desarrollos instrumentales, la voz na- Wet Willie. Jimmy Hall (voz, saxo, armó-
sal de Dou Gray es un modelo de maleabi- nica) fue su cabecilla. Se dedicaron a las
lidad y el cóctel resultante es tan fino recreaciones blancas de blues, soul e inclu-
como gratificante. Más de 10 elepés, todos so gospel. Tras dos elepés algo confusos les
digeribles y con amigos invitados. Impres- llega la fortuna con discos llenos de ele-
cindible resaltar el doble Where we all be- gancia, sin alardes guitarreros y con un
long (1974) y su tema estrella, This ol' notable esfuerzo de composición: Drippin'
cowboy. Un grupo con clase. wet (1973), Keep on smilin' (1974), Dixie
rock (1975). Una reestructuración de per-
sonal y un viaje a Londres les colocan ante
unos planteamientos menos atractivos
(Manorisms,.1978), que no enturbian la in-
teligente herencia de esta banda.

Molly Hatchet. Tomaron su nombre de
una sombría dama del siglo XVII que de-
capitaba a sus amantes con un hacha. Co-
menzaron en 1971, en Jacksonville, ama-

"MI CONOCIMIENTO DE LOS PANTANOS VIENE DE MARK TWAIN. PERO OYES
A FATS DOMINO Y SIENTES ESE MUNDO" (John Fogerty, 1970)

La exuberancia de Delaney and
Bonnie arrastró a Eric Clapton, que tocó
con ellos como acompañante.

EFLUVIOS
DEL PANTANO

DIEGO A. MANRIQUE cas rurales. Muchas de las grabaciones Aparecen ecos del
pantanosas tuvieron como protagonistas a pantano en grabaciones de
Los Estados sureños, humillados por la un núcleo de intérpretes de la lejana artistas tan dispares como
historia y reducidos durante décadas a pa- Oklahoma. Habitantes del submundo de Freddy Fender y los Neville
tio trasero del sueño norteamericano, los estudios de Los Ángeles se dieron a co- Brothers. El primero es un
cuentan, sin embargo, con la principal re- nocer como soporte instrumental del dúo cantante country de origen
serva de leyendas estadounidenses. Una Delaney and Bonnie, una agrupación que hispano que graba bajo la
mitología que ha alimentado literatura y influyó decisivamente sobre Eric Clapton, tutela de Huey Meaux,
cine con sus evocaciones de un pasado Joe Cocker, George Harrison, Mick Jag- productor con extensas
atormentado. Y en el corazón metafórico ger y otros famosos británicos. Entre los credenciales. Por el lado negro,
del Sur, los tenebrosos pantanos de Luisia- amigos de la pareja estaban el prolífico los hermanos Neville han
na. Tierras inhóspitas donde no penetra ni Leon Russell y un esquivo personaje lla- desarrollado su bayou funk en
el sol ni la civilización, habitada por ariscos mado J. J. Cale; sus canciones encajaban sabrosos discos que
personajes aferrados a costumbres primiti- en las quimeras del Sur profundo. actualizan los aires de Nueva
vas que a veces -los cajuns, descendientes Orleans.
de emigrantes franceses expulsados de Ca- Nunca fue una etiqueta vendedora lo
nadá- ni siquiera hablan inglés. Es el de swamp rock, aunque ahora vuelva a re-
mundo del pantano, bayou o swamp. surgir en discos de Nick Cave, Gun Club y
otros exploradores de rincones oscuros.
Lo de swamp rock fue una ocurrencia Mientras, los auténticos pantanos de Lui-
del productor Jerry Wexler para agrupar siana siguen viviendo a ritmo lento; con
una serie de grabaciones de finales de los raras excepciones -la última fue My toot-
sesenta que esbozaban el universo mítico toot, de Rockin' Sidney, en 1985-, los so-
de los pantanos sobre agrestes fondos so- nes del cajun y el zydeco no traspasan la
noros. Algunos de los autores -los cali- espesa frontera vegetal del bayou.

fornianos Creedence Clearwater Revi-
val- no habían puesto los pies en aque-
llos parajes; sin embargo, captaron sus di-
mensiones fabulosas, con barcos de rue-
das, misteriosas supersticiones y pesadi-
llas de agua podrida. Por el contrario,
Tony Joe White era un nativo de Luisiana
y sus historias tenían un mayor realismo:

Polk Salad Annie, Roosevelt and Ira Lee o
Rainy night in Georgia transportaban al
oyente a una sociedad encerrada en su mi-
seria y sus fantasmas.

El rock del pantano era enjuto en instru-
mentación y pesado en ritmo, empapado
de gospel, blues, soul y otras olorosas rece-
tas propias de Luisiana. Había margen
para el delirio: Mac Rebennack, músico
de los años cincuenta, reapareció en 1968
como Dr. John Creaux the Night Tripper,
gran sacerdote del vudú psicodélico de
Nueva Orleans. Al otro extremo, Joe
South añadía comentarios sociales a sus
daguerrotipos sureños en piezas como

Down in the boondocks, Games people play o

Walk a mile in my shoes.
Para otros, el swamp rock servía de ex-

cusa para desatar una imaginación ali-
mentada por la escucha de vetustas músi-

"EN TEJAS, UNA BUENA NOCHE DEL SÁBADO DURA HASTA EL LUNES. ASÍ
QUE TIENES QUE TENER AGUANTE. Y ESO SE NOTA EN LA MÚSICA" (Billy Gibbons)

ZZ Top hacen uso del español para sus
títulos, pero su música es inequívocamente
sureña.

ZZ TOP

LA FIEBRE DEL DESIERTO

J. MARTA REY nacotecas y arte moderno, que forma raje, como los Warlocks, mutados en
parte del consejo patrocinador del Mu- American Blues, un grupo que se teñía
Los reyes del boogie-metal. Imprevisi- seo de Houston. Lo que no contrarres- el pelo de azul. Tras un single indepen-
bles y extravagantes, Z Z Top ondean ta aficiones más prosaicas: el coleccio- diente y dos álbumes de presentación,
las barbas más disparatadas del rock. nismo de coches. Vive en una casa de el éxito de La Grange (1974) y su elepé
Su inconfundible estampa de cowboys medio millón de dólares que, para fasti- Tres hombres (1973) los establece entre
ricachos (sombreros Stetson y trajes dio de sus infelices invitados, mantiene públicos diversos. Gracias a su mortí-
bordados), contrapuesta por anacróni- vacía salvo una cama y una sinfonola fero e insistente boogie, hasta el contin-
cas y luengas barbas de pope ortodoxo, con discos de otra leyenda tejana, gente heavy puede adoptarlos.
es casi más popular que su millonaria Roky Erickson. Incluso se le puede en-
gastronomía sureña: blues-rock caliente contrar en congresos internacionales Avalados por su fuerza de convoca-
y autopistas eléctricas. de magia, como el reciente de Madrid. toria en vivo, todos sus discos alcanza-
rán ventas de oro o platino. Sin embar-
Pese a su tremenda fama siempre Natural de Houston, es hijo de un go, ni uno solo es en directo, excepto
han esquivado los relampagueos de so- director de orquesta local y la secreta- una cara de Fandango (1975). Misterio-
ciedad. Remisos a servir de plancton ga- ria personal del ex presidente Lyndon samente, tras la expedición triunfal de
cetillero, prefieren la reclusión familiar B. Johnson. Éste visitaba su casa mien- Tejas, el grupo se esfuma. Hay rumores
de su Tejas cuando se lo permiten sus tras Billy iba de hippie y abandonaba de disolución. Se dice que han muerto
abultadas giras. Aún en activo, con más sus estudios de diseño para tocar con en accidente. Pasan tres años. Y cuan-
éxito si cabe, son hoy los únicos supervi- Moving Sidewalk. Con ellos teloneó a do el mundo los da por desaparecidos,
vientes del añejo esplendor del rock su- Doors, Hendrix y demás estrellas en vi- regresan con Degüello (1979). Próximos
reño. ¿Su secreto?: evitar la quema del sita tejana. Fue Hendrix quien lo descu- lapsus, bienales, traen El loco (1981) y
primer plano de actualidad mediante in- brió, citándolo en un programa televisi- Eliminator (1983): rotunda puesta al día
termitentes ausencias pero mantenien- vo como el más prometedor guitarrista e inmensas ventas.
do la fidelidad de su público con impre- del país. No iba descaminado. Especie
sionantes actuaciones y distanciadas de Mark Knopfler de la Gibson, posee No importa que un antiguo colabo-
grabaciones que compensarán la espe- una ingeniosa habilidad para extraer rador saque a la luz feos asuntos, de-
ra. Por otra parte, un oportuno lavado los más singulares sonidos. mandándolos por no haberle pagado
de cara les ha permeabilizado a los soni- su cesión de la autoría de un tema.
dos y conceptos contemporáneos: del El trío despegó a finales de 1970. Tampoco que a Hill se le dispare en el
bar de carretera a la sofisticación digital Auténtica locomotora rítmica, Frank estómago una de sus armas; o que
de Eliminator o Afterburner (sus últimos Beard (batería) y Hill llevan tocando Beard -que a pesar del apellido es el
trabajos), sin perder su identidad. Antes juntos 20 años. Nativos de Dallas, se único que se afeitó la barba- prefiera
eran una banda consecuente con las exi- iniciaron en formaciones locales de ga- repartirse entre el golf, su negocio de-
gencias de la época. Ahora, una pinto- portivo y su ayuda a los programas de
resca atracción pop cuyos vídeos son HISTORIA DEL `ROCK' rehabilitación para drogadictos. Z Z
dieta obligada en los programas musica- Top están sólidamente instalados. Son
les de televisión. PRÓXIMO CAPÍTULO dignos norteamericanos de derechas.
Pero aún saben escribir -o comprar-
Su gran baza han sido los concier- 'GLAM ROCK' decentes canciones. Eso sí, con alto
tos. La gira de su álbum Tejas (1976) contenido lúdrico: "Nadie se mete con
parecía casi una feria de muestras. Jun- nosotros. Nuestros elepés se colocan en
el último cajón y los comités de la mo-
to al trío podían verse diversas espe- ralidad se desmayan al llegar a los dis-
cies de la zona: coyotes, crótalos y has- cos de Zappa".
ta un búfalo. Todos ellos en vivo. Y sus
más recientes giras no le van a la zaga:
máscaras gigantes de Tutankamón
echando laser rojo por los ojos y, el
cuadro central, Billy Gibbons (guita-
rra) y Dusty Hill (bajo) en traje negro
con el remate chiflado de una gorra de
béisbol.

Artífice de esto es Gibbons, parlan-
chín admirador del fallecido Howard
Hughes. Dispuesto a superar a éste en
excentricidad, Gibbons es una fuente
de sorpresas y contradicciones. Su tos-
ca pose de noble bruto rockero oculta
un adorador de Gaudí, experto en pi-

HISTORIA DEL `ROCK'

En España fue conocido como gay rock por sus connotacio-
nes homosexuales. En otros países se usaron indistintamen-
te los términos de glam rock y glitter rock para calificar la
llamativa fauna que invadió los escenarios, a principios de la
década de los setenta, con todo tipo de maquillaje. David
Bowie (en la fotografía), Elton John, Marc Bolan, Rod Ste-
wart, Sweet, Slade y otros muchos artistas británicos reivin-
dicaban el gusto por el espectáculo más rutilante, vendiendo
fantasía y extravagancias a un público ávido de audacias.
Del mismo tronco salieron dandis de nuevo cuño, como Bryan Ferry. Por el lado
norteamericano predominaron esperpentos a lo Alice Cooper, que pusieron banda
sonora a los mitos del terror.

ENTRE EL CONCEPTUALISMO DE BOWIE Y LA ESFORZADA VULGARIDAD DE
SLADE, EL 'GLAM' SUPUSO UN NUEVO IMPULSO ADOLESCENTE AL `ROCK'

Con su música tosca y un evidente desprecio
por las reglas gramaticales del inglés, Siade
fueron los paladines del glam rock más
abrumador y populachero.

"ÉL SE LLAMA LUCY Y ES MUY HERMOSO; SE VISTE COMO UNA REINA. / PERO
PUEDE PEGAR COMO UNA MULA; UN TIPO RUDO" ('Al¡ the young dudes', D. Bowie, 1972)

Sweet eran el glam llevado al A HORA DE El ejecutivo en cuestión no deseaba
paroxismo. En su primera visita a destapar la olla de los truenos. El rock and
España fueron expulsados de TVE. LA PASARELA roll, y la música juvenil en general, tenía
una pegajosa reputación de antro de ho-
Prácticamente, DIEGO A. MANRIQUE mosexualidad. Eran actividades de puer-
España fue el único país donde tas adentro, con la rara excepción del des-
el término de gay rock En 1965, un solista británico de segunda lumbrante Little Richard. Y muchos ru-
alcanzó difusión, propiciando fila llamado Ian Whitcomb hizo las Amé- mores de representantes desaprensivos y
incluso la aparición de un ricas con el tema You turn me on. Allí des- tiernos protegidos.
libro combativo del mismo cubrió que, debido a su voz aguda, el disco
título, escrito por Eduardo era una especie de himno en la clandesti- Pocos se atrevieron a violar el tabú. En
Haro lbars (Ediciones Júcar, nidad gay. Uno de sus nuevos seguidores 1970, los Kinks colocaron en lo alto de las
1975). Hubo también le envió una composición propia, una pie- listas Lola, la jocosa historia de un inocen-
ocurrencias tan pintorescas za frívola titulada Quiero hacerte una pre- te seducido por un travestido en un club
-en las que se confundía gunta muy personal, querida Aubrey (¿Pue- del Soho. Pero Ray Davies encajaba en la
forma y contenido- como la des prestarme a Bobby esta noche?). Ian tradición del music-hall británico. Nada
salida de un álbum de viejos pasó la cinta a su discográfica. Al día si- escandaloso en comparación con el alu-
temas de David Bowie con el guiente, el cantante recibía un antológico vión de exuberantes animales que invade
título de El rey del gay power. telegrama firmado por el jefe de la empre- el Top 30 británico en la primera mitad de
sa: "Ian. Llevo 25 años en este negocio. los setenta.
He trabajado con Sinatra. Por favor, no
-repito, no- intentes registrar cancio- Para conectar con un público tierno,
nes de naturaleza homosexual. Buena que no comprende los laberintos del rock
suerte. Mantente comercial". progresivo, grupos y solistas exhiben re-
fulgentes atuendos, martilleando ritmos
de batalla para canciones chillonas. Una
irrupción de color, de fantasía y de provo-
cación, que consigue arrastrar a las masas
juveniles.

Es el glitter rock o glam rock, término
que engloba a todo artista resplandeciente
del período 1971-1976. La mayor parte,
gente orientada a las ventas: Sweet, Slade,
Gary Glitter. Otros tienen una visión pro-
pia: Marc Bolan, Elton John, David Bo-
wie. Y los pantalones superajustados, la
abundante bisutería, las botas de platafor-
ma, los maquillajes, pasan a ser parte del
bagaje de muchas estrellas establecidas,
desde los Rolling Stones a los hermanos
Winter. Hasta Lou Reed, el rudo cabecilla
de Velvet Underground, adopta poses
equívocas e infiltra en las listas su Paseo
por el lado salvaje. Finalmente, la estética
glam pasa al cine en Elfantasma del parai-

so y The Rocky Picture Horror Show.

Para algunos es una atrocidad que re-
trasa el glorioso avance del rock hacia
cumbres artísticas inalcanzadas. John
Lennon es más tolerante: preguntado por
Bowie sobre la opinión que le merece el
glam responde que "no es más que rock
and rol! con pintalabios". Exacto: un movi-
miento que recluta nuevos oyentes para el
rock y que será punto de partida para
grandes carreras. No es, sin embargo, una
reivindicación de la conducta homose-
xual: el travestismo no pasa de ser una
táctica de choque. Hasta 1977 no aparece
Tom Robínson, primer cantante clara-
mente alineado con el ala militante del
Frente de Liberación Gay.

"SI TE VE UN MODELO NUEVO DE ZAPATOS, AL DÍA SIGUIENTE LOS TIENE. TODOS
CREEN QUE ES UN DESCUBRIMIENTO SUYO" (Mick Jagger, sobre David Bowie)

DAVID BOWIE, posición paterna, A lo largo de la década de los
EL HOMBRE QUE empieza a tocar el setenta, David Bowie se anticipó a las
COMPRÓ EL MUNDO saxo. Se interesa principales tendencias del rock.
por el jazz y flirtea
SANTI CARRILLO con la filosofía owie ha reafirmado
budista al tiempo en los ochenta su
Primera evidencia: nadie como David Bo- que devora las en- heterosexualidad: "La mayor
wie ha sabido plasmar de manera tan cla- señanzas de la equivocación de mi vida fue
ra y rotunda los caprichosos vaivenes del beat generation. declarar que era bisexual,
rock como manifestación artística de con- Influenciado por cuando en realidad sólo estaba
su hermano ma- experimentando, como
sumo popular. Y es que Bowie, mutante e yor, deja la escue- cualquier persona joven". Tony
imprevisible, siempre ha jugado con un la e inicia traba- Visconti, que fue su
poder visionario que le ha permitido ir jos de dibujante productor y compartió
más allá que al resto de sus coetáneos, publicitario. residencia con David y Angie,
usando una amplísima gama de músicos y recuerda que "los miércoles él
productores, remodelando episodios de la De regreso a i ba a un club homosexual, y
historia del rock a medida que ésta avan- Londres, su acer- ella, a un local de lesbianas;
zaba, anticipándose a corrientes y modas, camiento a la mú- ambos traían gente a casa.
jugando con ellas y utilizándolas, siempre Aquellas noches tenías que
ventajosamente, para su propio lucimien- sica es realizado cerrar el dormitorio: los
to. Y es que lo más importante, en definiti- básicamente des- i nvitados iban de cama en cama
va, era / es él mismo. de una perspecti- buscando sangre nueva".
va estética. Era
Toda una estrella que, imbuida de las 1963. Como reac-
suficientes dosis de ingenio, ha sabido en- ción al pop impe-
mascarar con brillantez sus particulares rante, The Kíng
apropiaciones de referencias ya conocidas Bees, The Man-
para, reconvertidas por su hábil carácter y nish Boys y Davis
filtradas a través de su desbordante perso-
nalidad, lograr conectar con las inquietu- Jones and The
des de su tiempo gracias a un asombroso Lower Third, sus
poder de intuición; aunque no todas sus primeros grupos,
hazañas le pertenecen, él así lo hace creer. van en una línea
Doble mérito para un artista que, sin ce- de rhythm and
rrar los ojos a lo evidente del contexto se- blues camuflada
leccionado, sabe imprimir a éste su fuerte cuidadosamente
huella creativa e ir más allá del simple co- bajo un estudiado
barniz mod: ya
llage de retales. desde los inicios,
Segunda evidencia: un tipo que se curte siempre presente
el aspecto visual.
sacando provecho a los momentos adver- Hasta 1967 regis-
sos. Ya en su infancia, y a consecuencia de tra numerosos
un fuerte golpe en una pelea escolar, casi singles (el prime
pierde el ojo izquierdo; lo salva a costa de ro, Liza Jane, con los King Bees, aparece
sacrificar gran parte de la visión, pero su en junio de 1964) para compañías como
pupila inmóvil lo marca de por vida. Pri-
mer detalle de afirmación personal: la di- Vocalion, Parlophone, Pye, Decca, Philips
ferencia como orgulloso signo de dis- y Mercury; canciones embrionarias que
tinción. serán luego reeditadas incesantemente.

David Robert Jones nace en Londres el Su ego se rebela contra David Jones:
8 de enero de 1947, en el seno de una fami- para evitar confusiones con Davy Jones,
lia pequeñoburguesa asentada en el barrio cantante de los Monkees, transforma su
obrero de Brixton. Al poco tiempo se tras- apellido en Bowie, nombre que designa a
ladan al condado de Yorkshire y, por im- un cuchillo de caza. Junto a su amigo
Marc Bolan se va introduciendo en los
ambientes artísticos del swinging London y
termina integrándose en la efervescencia
hippy del momento. Se interesa por el tea-
tro, especialmente por la mímica, y entra a
formar parte de la troupe de Lindsay
Kemp, en la que permanece año y medio.
El rompedor sentido del espectáculo de
Kemp influirá enormemente en sus poste-
riores puestas en escena. Tiene luego su

propia compañía, Feathers, participando
al mismo tiempo en talleres artísticos ex-

"EL 'ROCK' PASA POR REPRESENTAR LA ACTUALIDAD, PERO USA SIEMPRE
REFERENCIAS Y EMOCIONES DE UNOS CUANTOS AÑOS ANTES" (David Bowie)

Bowie, en el papel de Ziggy Stardust, la perimentales (art-labs), del mundillo un- definición de Bowie como fulgurante es-
estrella de rock que termina siendo trella del rock más punzante. Aladdin sane
asesinada por sus fans. derground. (1973) y Pin-ups (1973) completan esta
En 1969 se casa con Angela Barnet, etapa de entronización.
David Bowie ha
mantenido con el Angie. Es el año de su primer impacto con Las carpetas ilustran las peculiares ob-
norteamericano Iggy Pop una el sencillo Space oddity. Inspirado en la pe- sesiones de Bowie: animal asexuado en
relación profesional muy lícula 2001: una odisea del espacio, de Stan- una, y pareja futurista (con Twiggy, la chi-
i ntensa. Desde las mezclas de ley Kubrick, es la historia de un astronau- ca símbolo por excelencia del Londres
Raw power (1973), de los ta, el mayor Tom, que durante una misión pop) en otra. Musicalmente, ambas refle-
Stooges, le ha producido queda atrapado en el espacio exterior; jan un fecundo estado de creatividad, aun-
elepés en solitario: The idiot este personaje sería recuperado 11 años que sin alcanzar la magistral cohesión de
(1977), Lust for life (1977) y más tarde, y de forma crítica, en el tema Ziggy Stardust. El sonido adquiere una vi-
Blah-blah-blah (1986). También Ashes to ashes. El hit abre David Bowie gorosa textura que muestra las aristas del
colaboró con él tocando (1969), su primer elepé oficial, reeditado Bowie más rockero. Si en Aladdin sane se
teclados en su gira de 1977, y posteriormente bajo el nombre de Space despacha con una contundente versión
ha grabado muchos temas oddity. Un período tamizado por el fantas- del Let's spend the night together, de los Ro-
suyos: China girl, Don't look ma de Bob Dylan a la búsqueda de un so- lling Stones, Pin-ups lo dedica a rendir tri-
down, Tonight, nido propio: timón acústico, narraciones buto a las músicas que habían alimentado
Neighborhood threat y Bang de largo desarrollo, cabellos rizados. su adolescencia, que reinterpreta con fo-
bang. Otras de las
producciones de Bowie han Durante 1971 pone en circulación The gosa pasión.
sido: Lou Reed (Transformer, man who sold the world y Hunky Dory. Si Cuando lo más fácil hubiese sido conti-
1972), Mott The Hoople (All the bien el primero se muestra como un balbu-
young dudes, 1972), Dana ciente rastreo de su identidad eléctrica, es nuar por esa línea, Bowie disuelve a los
Gillespie (dos temas en el elepé ya en el segundo donde consigue ejecutar
Weren't born a man, 1972) y con maestría su astuto ideario de preme- Spiders y se aproxima a la sensibilidad
Lulú (el sencillo The man who ditada ambigüedad sexual; peinados y norteamericana. Diamond dogs (1974) es-
sold the world, 1974). vestimentas femeninos en la mejor tradi- tablece otra de sus salvajes mutaciones:
ción del glamour de Hollywood. En Hunky mitad hombre, mitad perro en la portada,
lanza extrañas proclamas sobre la aniqui-
Dory caben ambiguos homenajes a Dylan lación del mundo en unas canciones que
(Song for Bob Dylan) y a Warhol (Andy van oteando su próxima meta, el soul. El
Warhol). El reconocimiento hacia la obra doble David live (1974), su primer disco en
del primero es compartido con los provo-
cativos conceptos de vanguardia que irra- directo, es un eslabón más en su paulatino
dia el segundo. Convertir la farsa en genia- acercamiento a la música negra: grabado
lidad empieza a ser su meta. Y Warhol en la capital del Philadelphfa sound, y con
sabe mucho de eso. una versión del Knock on wood, de Eddie
Floyd, prepara el camino para Young ame-
Cada vez se afianza más en su papel de ricans (1975), otra de sus obras capitales,
maestro de ceremonias en la inexplorada un perfecto diseño de ritmos ejecutados
comunión entre música e imagen. Son los por músicos de sesión negros en la mismí-
tiempos del glam rock, la etapa más identi- sima Filadelfia. Como adorno suplemen-
ficativa de toda la trayectoria de Bowie y tario, colabora John Lennon en Fame y
la que por extensión lo define: de hecho, la
utilizó como vehículo de lanzamiento para Across the universe.
desarrollar a posteriori todos sus camaleó- Reincide en esta línea de febril funky-
nicos cambios.
soul con Station to station (1976) y, acto se-
Diseña su propio vestuario, combina guido, agobiado por los excesos de la vida
maquillaje extremado con peluquería de- en Los Angeles, regresa a Europa. Fasci-
saforada y ficción científica de cartón-pie- nado por los métodos de Brian Eno, se
dra, se exhibe impúdicamente hortera pasa a la música electrónica: David Bowie
desde unos zapatos de plataforma y se en- asume el papel de profeta de la cool wave.
vuelve en ropas procaces, colores desqui- Resultado de la colaboración con el ex
ciados, lentejuelas mil y mallas transpa- Roxy Music es la trilogía compuesta por
rentes: estética de la provocación, un ro- Low (1977), Heroes (1977) y Lodger (1979).
mance con el mal gusto que él controla a Tres retratos despiadados del final de una
su antojo desde la cuerda floja de su au- década. Experimentación y pesimismo,
daz transformismo. Justo entonces graba estética austera, expresionismo distorsio-
una de las piedras angulares de toda la nado, crispación controlada.
historia del rock: se trata de The rise and
El tema Heroes (con la guitarra cortan-
fall of Ziggy Stardust and the Spiders From te de Robert Fripp) se convierte en el him-
Mars (1972), parábola sobre la idolatría no definitorio de toda una generación fer-
del rock y sus estrellas. Con el potente mentada en un caldo de cultivo nihilista.
apoyo a la guitarra de Mick Ronson, for- Curiosa paradoja: cuando el mundo está
ma el grupo The Spiders From Mars, jun-
to a Woody Woodmansey (batería) y Tre-
vor Bolder (bajo), formación clave en la

APARTE DE TEMAS CLÁSICOS DEL `ROCK', BOWIE HA DEMOSTRADO SU
ECLECTICISMO CANTANDO A KURT WEILL, JACQUES BREL O DOMENICO MODUGNO

Brian Eno, Robert Fripp y David
Bowie, en un estudio de Berlín, ciudad
donde realizó sus discos más
experimentales.

siendo sacudido por la marejada punk vado por la revolución del videoclip, Bowie ecuerdo / cuando
(que tiene en Bowie uno de sus puntos de tantea el terreno y da el paso: quiere ser estábamos / junto al muro. /
referencia), el artista se refugia en las som- importante también en el cine. Pero, pri- Las pistolas / disparaban
bras de Berlín y preconiza un movimiento mera contradicción, David Bowie es sobre nuestras cabezas. /
cibernético posteriormente vulgarizado arrastrado por su devorador ego y se des- Entonces nos besamos. /
por el tecno pop. Entre Heroes y Lodger cubre su medianía interpretativa. Y es que Nada podía derrumbarse, / y la
edita Stage (1978), segunda recapitulación la estrella absoluta parece no cuajar como vergüenza / estaba al otro
en directo. bestia cinematográfica; aunque oportuni- l ado. / Oh, podemos
dades no le han faltado para demostrarlo, golpearles / siempre y para
Mil novecientos ochenta. Con la nueva Bowie continúa sin justificar su supuesto siempre, / y entonces podemos
década, nuevo Bowie. Las partes más ex- talento dramático. ser héroes / sólo por un
perimentales de la trilogía berlinesa que- día... / Yo seré el rey, / y tú... /
dan perfectamente ensambladas en la co- Con la excepción de su experiencia tea- Y tú serás la reina. / Nada
lección de canciones que componen Scary tral (el deforme John Merrick en The elep- podrá desterrarlos. / Podemos
monsters (1980), su última obra maestra. hant man, 1981) y televisiva (el vagabundo golpearles / sólo por un día, /
Una condensación de lo mejor de Bowie arribista de Baal, de Bertolt Brecht, 1982) podemos ser héroes / sólo por
que da carpetazo a más de 10 años de y de su primera incursión en la pantalla un día".
constantes inquietudes y le permite afron- grande (el extraterrestre de The man who
tar los nuevos tiempos con un sentido fell to earth, de Nicolas Roeg, 1976), en el David Bowie: Héroes, 1977.
pragmático del negocio. Más estrella que resto de sus incursiones filmicas no ha
nunca, elimina los elementos perturbado- destacado especialmente con la brillantez
res y, sin dejar de generar modas y modos, artística ni el magnetismo succionador
se acomoda en su autocomplacencia e in- que su rutilante cartel le adjudica de en-
tenta abarcar lo poco que todavía no tenía trada. Bowie, malabarista de la fascina-
controlado. Bowie se masifica, se dispara, ción aplicada a la imagen, no da la medida
se desdobla y escenifica como nadie el pa- exacta cuando ha de prescindir de la usual
pel de hombre estrella para todos los pú- piel de actor que le identifica día a día y
blicos. Es el momento de tomarse en serio ha de hacerse cargo, en la ficción, de unos
sus escarceos con la interpretación. Moti- papeles a los que inevitablemente regala
con sus adquiridos y camaleónicos tics de
conducta.

Interpretándose a sí mismo, está la fil-
mación del último concierto de la saga
Ziggy, y una breve aparición en Yo, Cristi-
na F. Y, si bien Dentro del laberinto y Princi-
piantes se han beneficiado, además de su

"NO CREO QUE SEA POSIBLE PARA UN ARTISTA DECIR MÁS DE DOS COSAS
REALMENTE NUEVAS EN ESTO DEL `ROCK AND ROLL" (David Bowie)

En directo, Bowie se ha revelado como
un intérprete magnético y seductor.

Resulta revelador que la presencia, de canciones compuestas espe- crooner en piezas sueltas de desiguales
fuerte personalidad de Bowie cialmente para la ocasión, en otras pelícu- méritos: This is not America; Absolute begin-
sucumba sin remisión cada las su participación se ha limitado a ilus- ners; Underground; When the wind blows,
vez que se enfrenta a la cámara, trar bandas sonoras: Radio On (Chris Pe- todas destinadas al adorno de soundtracks.
ya sea de protagonista tit, 1979), El beso de la pantera (Paul Tampoco podía faltar la estrella en el ma-
principal o de episódico Schrader, 1982), El juego del halcón (John yor espectáculo del rock: su participación
secundón. En ambos casos la Schlesinger, 1985) y When the wind blows en el macrofestival Live aid se concreta en
estrella se eclipsa: seductor (Jimmy T. Murakami, 1986). una videoalianza con Mick Jagger para in-
atormentado en Gigoló terpretar a dúo el clásico Dancing in the
(David Hemings, 1978), Al margen del cine, y después de su ex-
prisionero de guerra en Feliz periencia como narrador en la versión que street.
Navidad, Mr. Lawrence (Nagisa hizo la Orquesta de Filadelfia de Pedro y el Y llega 1987. El poco sorprendente Ne-
Oshima, 1983), vampiro en El lobo, de Prokofiev (1978), David Bowie se
ansia (Tony Scott, 1983) y genio atreve con todo: forma pareja con Bing ver let me down, que incluye un rap com-
maligno en Dentro del Crosby para un tema navideño (Little partido con Mickey Rourke, y el anuncio
laberinto (Jim Henson, 1986). drummer boy) y no pone reparos en aso- de una nueva gira monstruosa en la que,
Hombre tiburón en Los ciarse a Queen (Under pressure). Está a por fin, España está programada. Para
desmadrados piratas de Barba punto de aparecer Let's dance (1983), pri- preparar el evento se digna venir por vez
Amarilla ( Me¡ Damski, 1983), mera entrega para EMI tras 10 años en primera de visita promocional, e incluso
hampón en Cuando llega la RCA, y una chispeante operación perfec- intenta grabar un tema en castellano que
noche (John Landis, 1985) y tamente programada que lo consolida finalmente desecha. ¿Concesión de una
ejecutivo en Principiantes como la megastar por excelencia. estrella en declive? Quizá sí, pero de Bo-
(Julian Temple, 1985). wie, glorioso embaucador, aún puede es-
La consiguiente Serious moonlight tour perarse todo. Su extraordinario legado a
le hace llegar, en olor de multitudes, a casi la historia del rock obliga a mantener la
todos los rincones del planeta. Bowie al- confianza en su sorprendente e inagotable
canza su techo. A partir de aquí, un peli- poder de cambio.
groso descenso. Tonight (1984) es una con-
tinuación fallida de la anterior fórmula de
Let's dance. Tina Turner e Iggy Pop son

los invitados de excepción en un álbum
decididamente menor. Paralelamente, Bo-
wie desempolva su admiración hacia
Frank Sinatra y se aferra a su vocación de

"ELTON JOHN ES UNA DE ESAS POCAS PERSONAS CON LAS QUE SE TRABAJA
BIEN; PERO, SOBRE TODO, ES MUY DIVERTIDO" (Chris Thomas, productor)

E LTON JOHN, tradicional, boni- Elton John se cree en la necesidad de
tas melodías eje- asombrar a sus seguidores con las
EFERVESCENTE AVE cutadas por un vestimentas más caprichosas.
pianista de voz
DEL PARAÍSO agradable, sólo ¡ton John es activo,
que ahora Elton rico y entusiasta del fútbol.
DAVID S. MORDOH suelta las amarras Semejante trinomio no puede
de su pasión ocul- más que desembocar en el
Calvito, gordito, bajito, a Elton John le ta por el rock and sillón presidencia¡ de una
sientan bien los diminutivos. Lo hacen en- roll, tanto musi- entidad deportiva. Cogió al
trañable, y porque lo es, lo definen mejor. calmente como en equipo de fútbol de Watford
Mirando cualquier fotografía suya se hace cuestión de ves- -periferia londinense- en
difícil apostar por él como triunfador, so- tuario, sumido en Cuarta División y lo llevó a
bre todo en una disciplina de las caracte- un mundo priva- Primera en sólo cinco
rísticas del show biz, que exige que la belle- do de lentejuelas temporadas, llegando a
za venda tanto o más que el contenido ar- y zapatos de pla- clasificarlo incluso en finales de
tístico. Pero Elton fue listo. Suplió sus li- taforma, más su Copa en Gran Bretaña y en
mitaciones físicas a base de imaginación y colección de gafas torneos continentales. ¿Que el
buen humor, se convirtió en una especie de sol. club sufre un bache? Elton
de payaso adorable capaz de encandilar a siempre está dispuesto a
todo tipo de audiencias; el contrapunto Rocket man; desembolsar un millón de
perfecto a una profesionalidad y un talen- Honky cat, Daniel; li bras para fichajes.
to de envergadura. Saturday night's
alright for fighting;
En cierto modo tuvo suerte. Le tocó Crocodile rock;
hacerse famoso en la época del glam rock y Bennie and the jets
no le costó mucho adaptar su idiosincra- y otros temas
sia -un innato placer por lo estridente, vendieron millo-
cayendo en la vulgaridad- a la tendencia nes hasta conver-
dominante. Hasta los primeros setenta El- tirlo en el artis-
ton no era más que un buen compositor de ta rentable por
presencia grisácea, confortablemente ope- excelencia de la
rativo en el seno del pop romántico. Origi- década. Pero su
nario de la región inglesa de Middlessex primer número
(1947), su nombre verdadero es Reginald uno en su país lo
Kenneth Dwight. Forma parte de Blueso- obtuvo gracias a
logy como teclista antes de conocer a Ber- una canción a me-
nie Taupin, poeta con el que colaboraba dias con Kiki Dee
haciendo canciones por encargo y que se -protegida de su
convertirá en su mano derecha. A partir propio sello, Roc
de 1970, juntos forman la pareja composi- ket-, Don't go breaking my heart (1976).
tora más importante a nivel comercial
después de Lennon y McCartney. Para entonces, los álbumes de Elton
John han perdido encanto en pos del sa-
En aquellos días Elton despega con su voir (aire norteamericano. Obsesionado
segundo elepé, el que contiene la inmortal por aventuras vecinas -Bowie y Lennon
Your song. Aunque el Reino Unido mues- en Fame se separa del imprescindible
tre recelos, los norteamericanos lo acogen Taupin, creyendo que encontrará en otras
rápidamente. Después de un tercer disco fórmulas el secreto de la eterna juventud
-Tumbleweed connection (1970) apare- musical. Numerosos proyectos dan fe de
ce el extraordinario Madman across the su carencia de rumbo. Ya no son colabo-
water (1971), su cumbre lírica. Llega a la raciones desde la cúspide, como la de la
consagración masiva por la vía de Honky película Tommy, de Ken Russell, o las que
chateau (1972); Don't shoot me: I'm only the le proyectaban un futuro como quinto
piano player (1973), y el doble Goodbye ye- beatle, sino los zarpazos ciegos del despo-
llow brick road (1973). Es un pop de lo más seído jugando a retirarse. Es la oferta de
Elton John para los ochenta, resignado a
su música y al papel de estrella mítica en
decadencia -en parte causada por la ino-
portuna confesión de bisexualidad-, ca-
paz en un momento de gracia de sorpren-
der con productos aceptables Too low
for zero, 1983-, pero consciente de que su
futuro será actuar, junto a otros cuarento-
nes, en la fiesta de cumpleaños de algún
miembro de la familia real británica.

"BRYAN FERRY ES UN ENGREÍDO CON CIERTA TENDENCIA I NTELECTUAL.
NO TIENE IDEA DE NADA; ES UN PURO ESNOB" (Bryan Eno, 1977)

Los primeros Roxy Music. En pie, de RYAN FERRY: vuelto con una capa inicialmente anárqui-
izquierda a derecha, Manzanera, Ferry ca para acabarlo en algo más aburgue-
y Thompson. En el suelo, Eno y Mackay. ESTILO Y VISION sado.

U n disco no tiene sólo JULIÁN RUIZ Esa actitud provocadora de los prime-
ros años venía avalada por dos estrategias
que sonar bien: debe tener una Quizá el tono del art-rock de los setenta de Ferry. La primera de ellas tuvo como
bonita portada. Las de Roxy esté capitalizado por Roxy Music (1970- factor determinante la imagen. Los mode-
Music son un trabajo de equipo 1983), es decir, Bryan Ferry (1945), direc- los de Anthony Price de aquella época
-las modelos, el fotógrafo, tor, conductor y dictador del concepto del eran algo más que vanguardia y sobrepa-
l os iluminadores-, pero con grupo hasta devorarlo y prolongarlo con saban el mundo del glam, aunque a los
una dirección que es mía. La su propio nombre. La última prueba irre- Roxy se les incluyera en ese tópico saco.
continuidad está en una futable es Boys and girls (1986), un álbum La segunda estrategia de Ferry, una vez
persona y su gusto. Sería una de definición Roxy pero firmado por maquillada la imagen, era proteger su
locura haber dejado eso al Ferry. aterciopelada voz con músicos nada con-
departamento gráfico de la vencionales. El más importante, Brian
compañía discográfica. Debe Que la idiosincrasia de Roxy Music Eno (1948), era el exponente del atrevi-
ser algo de mi devoción por el haya alcanzado nuestros días prueba que miento amateur aplicado a la electrónica.
pop-art. las imágenes de la la fórmula era inteligente, persuasiva y se- Pero se convirtió en un peligroso opositor
publicidad siempre me han ductora. Ferry creó un grupo de rock inno- de su dictadura con aquellos rizos anár-
i ntrigado". vador, apoyando su elegante ironía ro- quicos de sintetizador y fue expulsado del
Bryan Ferry mántica con el toque de un crooner de los grupo poco después del segundo álbum,
que acariciaban standards. Todo ello en- For you pleasure (1973).

Los otros músicos también tenían pedi-
grí vanguardista. El saxo Andy Mackay
(1946) había estudiado música electrónica
con Morton Feldman y John Cage en Ita-
lia. Y el guitarrista Phil Manzanera
(1951), hijo de cubanos escapados del ré-
gimen de Castro, había trabajado con el
grupo experimental Quiet Sun. En toda la
procesión de discos de Roxy o Ferry, la
sección rítmica nunca ha sido fija, aunque
Paul Thompson fue el batería original y
oficial. Pero expulsado Eno, tanto Mac-
kay como Manzanera eran, junto a Ferry,
los dos únicos músicos propietarios del
nombre Roxy Music.

Dictadas las estrategias, Ferry alzó a
su grupo con un primer clásico de art-rock,
el tema Virginia Plain, que alcanzó las lis-
tas de éxitos en el Reino Unido en 1972.
Ferry pretendió implantar la idea de que
los singles jamás se incluyeran en los álbu-
mes. Pero esa idea murió con el segundo
sencillo, Pyjamarama.

Aquella imagen de estilo retro-chic
aupó el primer álbum, producido miméti-
camente por Pete Sinfield, letrista de King
Crimson. El modelo Roxy funcionó en la
vieja Europa, pero pasó inadvertido para
los norteamericanos, aunque les fuera pre-
sentado con ayuda de Jethro Tull, en una
gira a forales de aquel año 1972.

El ego de Ferry no tardó en asomar. En
1974 se publicaba su primer álbum en soli-
tario con su nombre, These foolish things,
una colección del pop y el rock, desde
Dylan hasta los Stones, pasando por Mo-
town. Ferry quería ser el Bing Crosby de
esos años. Y en la misma fecha se publica-

"NUNCA PRETENDÍ S ER LA ELITE O UN HÉROE DEL `ROCK'. SÓLO
QUIERO SER UN CANTANTE AL QUE LE GUSTA LA MÚSICA" (Bryan Ferry)

ba Stranded, con el nombre Roxy y el pri- sic. No le quedaba otra jugada. Eso fue en Bryan Ferry ha cultivado sabiamente
mer número uno automático en las listas octubre de 1978. Durante los cuatro años l a estética de cantante atormentado por
británicas de álbumes. Para sustituir a posteriores, tanto Ferry como Mackay y l os dilemas del amor.
Eno, el elegido fue Eddie Job- Manzanera hicieron la mejor música de
son (1955), por aquel tiempo todas sus carreras. Música inteligente y i empre he
un niño prodigio de los sinteti- sofisticada, no tan atrevida como al prin- considerado mi música como
zadores, estudiante de violín y cipio, pero con alta calidad. Esos cuatro algo visual. Cuando empecé a
miembro previo de Curved años están resumidos en los álbumes Ma- componer usaba imágenes.
Air, un grupo de vanguardia, nifiesto (1979), Flesh and blood (1980) y, so- Las letras eran
donde Stewart Coppeland, el bre todo, Avalon (1982), la trilogía cumbre yuxtaposiciones estilísticas:
batería de Police, había hecho de Roxy Music. Pero a Ferry volvió a olvi- clichés vulgares, frases de
sus primeros ritmos. Ferry fue dársele que su ego sólo se comercializaba revistas, comentarios
tan condescendiente que dejó con el grupo. Se despidió con una gira en coloquiales. Pero todo muy
incluso que Manzanera y 1983, llamada High road, que incluso pasó estructurado; nada de
Mackay firmaran algunas por nuestro país. Otro disco en vivo cerró colocarlo en desorden. Lo
canciones. esa segunda etapa. mismo con la música: las
canciones parecen simples,
A finales de 1974 también Y llegamos al final de la historia, por el pero suelen tener varios
publicaba su segundo álbum momento. Ferry es un respetado cuaren- cambios de ambiente. Yo
en solitario, Another time, tón que vive en una mansión en el campo, absorbo muchas influencias y
another place, en la vena de su feliz y aburrido en su matrimonio con dos creo algo nuevo a partir de
ópera prima, pero insistiendo hijos. Hace discos porque le gusta, pero ya elementos clásicos".
aún más en la nostalgia: se no posee ningún tipo de agresividad. Tar- Bryan Ferry
atrevió incluso a versionar El dó más de dos años en terminar su Boys
humo ciega tus ojos y un tema and girls (1986), su última obra por el mo-
de Cole Porter. Y, claro, para- mento, repleta de invitados especiales,
lelamente, su nuevo álbum desde Mark Knopler a Nile Rodgers. Pero
con Roxy, Country life, con aun así suena como un disco más de Roxy.
una portada de dos chicas en Simplemente ha cambiado su nombre por
bragas y sujetador, que fue otro.
prohibida en España cuando
todavía vivía Franco. Y también en Esta- Mackay y Manzanera, que durante
dos Unidos, donde los programadores de muchos años de espera realizaron un sin-
radio norteamericanos no encontraban fín de proyectos en solitario, acabaron por
huecos para su música. formar un grupo, The Explorers (1985),
pero no les fue bien. En cualquier caso, su
Este desengaño con el sueño america- jefe no tardará mucho en resucitar por ter-
no hizo que Ferry se atreviera a un farol cera vez a su hijo predilecto, la idea de su
más arriesgado. Debía matar a los Roxy
para que su nombre pudiera llegar a ser vida: el refinado concepto Roxy Music. a
como un Sinatra moderno. Como Roxy
Music se publicó Siren (1975), y fue el can-
to del cisne, o, mejor dicho, el de la sirena.
Ya no habría más Roxy por el momento.
Ferry vivía en aquella época con la mode-
lo Jerry Hall, que había aparecido en la
portada de Siren, y ella le había empujado
un poco más en su ambición. Pero ni Let's
stick together (1976) ni In your mind (1977),
dos álbumes con la etiqueta de Ferry, fun-
cionaron; para colmo, Jerry le abandonó
por Mick Jagger.

Los Roxy Music se despidieron con un
concierto en el Wembley Arena de Lon-
dres, en octubre de 1975. Como regalo fi-
nal apareció, en 1976, Viva Roxy Music, un
álbum en directo. El último y desesperado
intento de Ferry de conquistar América
fue su álbum The bride stripped bare (1978),
grabado con músicos de sesión norteame-
ricanos. Tampoco pasó nada.

Ferry decidió resucitar a los Roxi Mu-

"COINCIDO CON LOS QUE DICEN QUE HACEMOS 'ROCK' SIN CEREBRO. NUESTRA
MÚSICA NO ES PARA LA CABEZA; ES PARA LAS TRIPAS" (`Noddy holder', Slade)

Gary Glitter era un cantante sin éxito Gran Bretaña de los setenta. Gracias a él
hasta que decidió aprovecharse del la década tomó color, y sabihondos como
nuevo mercado del glam rock. Rick Wakeman o aristócratas como Mi-
chel Des Barres tuvieron que vestirse de
luces.

Hasta la new wave de 1978, su fuerza
popular fue innegable. Guitarristas hea-
vies, como Rick Derringer; cuasi clásicos,
como Todd Rundgren, y soul sisters, como
Labelle, adoptaron su estilo. Edgar Win-
ter se encontró a sí mismo tras la sombra
de ojos azul y las botas de plataforma. Fol-
kies como Steeleye Span accedieron a ser
producidos por Mike Batt, un artífice de
pop infantil, y se llegó a divertidas aberra-
ciones, como la de Jobriath. Fue una edad
dorada en la que el culto a la imagen llegó
a extremos nunca imaginados. El único
problema lo tenían los fans, pues imitar a
los ídolos se volvió casi imposible: era
toda una hazaña encontrar un modelo si-
milar a los de Dave Hill (de Slade), pero
todavía lo era mayor salir a la calle con
eso puesto. Éstos fueron los protago-
nistas:

0 LAM ROCK': Gary Glitter. A mitad de camino entre el
Elvis de Las Vegas y sir Monty Rock III,
• ilipendiado entonces TODO LO QUE este ídolo con tendencia a engordar y edad
por las autoridades musicales
como producto comercial e BRILLA ES ORO indefinida (él declara haber nacido en
i ntrascendente, el tiempo ha 1940) se llama en realidad Paul Francis
demostrado que el glitter PATRICIA GODES Gadd. Cantó bajo una larga serie de seu-
rock no era una idiotez Los dónimos, hasta que las sabias directrices
temas de Slade y Sweet Con ellos llegó el escándalo, con las estre- del productor Mike Leander le convirtie-
vuelven a triunfar interpretados llas del glitter-rock, sus maquillajes, vesti- ron en un rey del glam. Con él grabó Rock
por Quiet Riot y Krokus; los mentas y poses. La portada del primer ele- & roll, que hubiera pasado sin pena ni glo-
pantalones de campana y la pé de T. Rex, en 1971, ofrecía una imagen ria a no ser porque se descubrió la extra-
plataforma son verdaderos insólita para un grupo de rock, pero rápi- ordinaria parte segunda, escondida en la
mitos. Hasta Gary Glitter es damente fue superada por los alardes y cara b del disco, que acabó siendo una de
respetado. Sin duda, ni el atrevimientos de una serie de artistas que las canciones del verano de 1972. Le si-
punk ni el heavy metal habrían se presentaban con el aspecto de las vedet- guieron Do you want me; Hello i'm back
llegado adonde están sin las tes de revista y la desfachatez del triunfa- again; I'm the leader of the gang (I am); I
dosis de imaginación y dor. Inspirado en la moda espacial y ador-
frivolidad que el glitter rock nado con boas, strasses y pestañas posti- love you to love me; Oh, yes you are beauti-
l es imbuyó. zas de cabaretera, el glam o glitter, música ful, etcétera, todos cortados con el mismo
discotequera, reiterativa, adolescente y patrón. También tuvieron mucho éxito sus
descarada, supuso la contraposición más acompañantes, The Glitter Band (Angel
perfecta a la pedantería progresiva en la face), creadores de la mejor y más estri-
dente música macarra. Gary se quemó
muy pronto, pero hizo una gran aporta-
ción: volvió a hacer música que no necesi-
taba de la droga para ser bailada, tras el
largo paréntesis del hippismo y la psicode-
lia. Hoy día continúa en activo, haciendo
el payaso con gracia y simpatía.

Mike Chapman y Nicky Chinn. Un austra-
liano y un londinense fueron los responsa-
bles de gran parte de los éxitos del glam.
Se conocieron en un club, decidieron es-
cribir canciones juntos y tuvieron éxito, en

"DECÍAN QUE HACÍAMOS DISCOS COMO SALCHICHAS. QUIZÁ ERA CIERTO; PERO,
COMO TRIUNFARON, NO VEO NADA MALO EN ELLO" (Mike Chapman, productor)

1971, con Funny Funny. A finales del año creciente. Triunfaron en Emigrada de Estados Unidos, Suzi
se consolidaron con Tom tom turn around, 1974 con dos elepés lla- Quatro triunfó en el Reino Unido con sus
de unos australianos llamados New mados The human me- trajes de cuero y su sonido duro.
World. Descubrieron a grandes figuras:
Sweet y Suzi Quatro principalmente, se- nagerie y The psychomo- I rock and roll de los
guidos inmediatamente por Mud, Smokie cincuenta liberó, en la era glam,
y Exile. Acusados por la crítica de ser in- do. Harley también gra- su faceta más frívola por la vía
trascendentes y manipular a sus artistas, bó en solitario, pero no de los discos de The Rubettes
Chinichap superaron su mala reputación, ha quedado ninguno de (Jukebox fi ve, 1 can do it,
y a finales de la década ya eran respeta- sus títulos. Sugar baby love),
bles (sin ningún esfuerzo de su parte, todo Showaddywaddy (Hey rock
hay que decirlo). Chapman, productor ar- Suzi Quatro. Nació en and roll) o Mud (Tiger teet),
tístico de los discos, triunfó por todo lo Detroit, de una familia grupos cabareteros de gran
alto con sus trabajos para Blondie y The muy musical. Triunfó, a calidad vocal y afición a dar
Knack al principio de la new wawe. versiones de los clásicos. La
sus 22 años, de la mano gran estrella fue Alvin Stardust,
Mott TU Hoople. Grupo típico del pos- que, enfundado en cuero
hippismo británico, siempre inseguro acer- de Mickie Most, con un negro, decía que era intocable,
ca de su línea; ahora heavy, ahora acústi- precioso conjunto de i mitaba a Gary Glitter y tuvo
co-vocal. David Bowie aclaró su futuro al cuero y arrolladoras varios éxitos divertidos: Jealous
pasarles un gran tema, All the young dudes, composiciones de Chin- mlnd y My coo ca choo. Sin
a finales de 1972, iniciando una nueva eta- nychap: Can the can; 48 ellos, quizá el rock and roll no
pa para el grupo, que fructificó con elepés crash; The wild one, et- hubiera recuperado nunca su
como Mott y The hoople, en la faceta más cétera. Vendía una ima- popularidad.
seria del glitter. Su líder, Ian Hunter, se gen de chica dura, pero
erigió en el Dylan glam, más que nada por su cara infantil sugería
el aspecto, y adquirió una sólida fama de que tenía un corazón
persona interesante gracias a su reticencia tierno, y el resultado
a quitarse las gafas de sol. Grabó también era que todos los chicos
en solitario, pero su influencia no fue nun- se volvían locos por
ca tan decisiva como la de otros coetáneos ella, y las chicas por ser
más horteras. como ella. Por su parte,
la crítica musical la
Slade. Dave Hill, Jim Lea, Don Powell y despreciaba. Después
Noddy Holder eran skinheads, se llama- de 1975 pasó a un se-
ban Ambrose Slade y grababan para Fon- gundo plano.
tana. Eran horribles, pero Chas Chandler
-ex Animal y ex manager de Jimi Hen- Sweet. Eran Brian Con-
drix- intuyó su gran potencial. Sacó a nolly, Andy Scott, Mic
flote su feeling rockanrolero, y lo hizo cre- ke Tucker y Steve Priest. Tenían un as-
cer a la vez que sus cabelleras. Joyas como pecto tan deplorable que rompieron con la
tradición teen de admirar al ídolo por los
Cum on feel the noize; Look wot you dun; deseos de ser como él. A Sweet se les ad-
miraba por sus buenos discos o por las
Skweeze me pleeze me; Mama weer all era- apoplejías que provocaban en los reaccio-
narios, pero nunca nadie en su sano juicio
zee now, o Coz i luv you, maravillosamente querría ser como ellos. Tuvieron una de
histéricas y conmovedoramente rápidas, las más impresionantes series de hits de la
le demostraron que tenía razón. El aspec- historia, desde Funny Funny, en la prima-
to del grupo era atroz, pero quizá porque vera de 1971, pasando por Coco; Poppa
ellos mismos componían su repertorio lo-
graron una credibilidad de la que carecían Joe; Little Willy; Big Wam bam; Blockbus-
sus competidores. Han sobrevivido muy
bien al transcurrir del tiempo, cultivando ter; Ballroom blitz; Teenage ramipage, y
el heavy metal, y son una verdadera insti-
tución británica, con la tradicional cos- Hellraiser, hasta Fox on the run, cuatro
tumbre de editar un disco navideño cada años después. Por entonces tomaron las
año. riendas de su carrera aunque su populari-
dad no logró mantenerse; pero son inexcu-
Steve Harley and Cokney Rebel. Junto a sablemente clásicos.
Roxy Music son los inventores de un con-
cepto musical muy británico y pretencio- Wizzard. Sinónimo de Roy Wood, vieja
so, que ha llegado hasta hoy con fuerza gloria pop británica que transmutó en he-
chicero sideral y se dedicó a adular a los
Beach Boys, hasta que Brian Wilson se
dio por enterado, le invitó a cenar y sus
hijas le dedicaron una versión de su Fore-
ver. Wood había estado con Move, fundó
la Electric Light Orchestra, grabó alterna-
tivamente bajo su nombre real y el artísti-
co y siempre mantuvo un buen nivel.

"PODRÍAMOS TOCAR COMPLETAMENTE A OSCURAS O CON CUATRO BOMBILLAS
Y LA GENTE SEGUIRÍA APLAUDIÉNDONOS..." (Freddie Mercury)

A caballo de todas las tendencias, A AMBIGUA (1974), Sheer heart attack (1974), A night at
Queen ha sabido mantenerse entre the opera (1975) y A day al the races
l as primeras atracciones del rock. MAGIA DE QUEEN (1976)- el éxito del grupo se disparó in-
ternacionalmente. Temas como el desco-
A kind of magic, el JULIO MURILLO munal Bohemian rhapsody (uno de los dis-
cos más vendidos en el Reino Unido, se-
último álbum de Queen, es al En los días en que lo andrógino era moda gún los anales de la industria fonográfica)
mismo tiempo banda sonora y subrayar los ojos con una linea de rimel confirmaron a Queen como máximo expo-
del filme Highlander, de Russell signo de distinción, nació Queen. Roy nente de una monarquía autocrática y
Mulcahy. A lo largo de su Thomas Baker, un avispado productor, se ejemplo a seguir por muchas bandas.
carrera, el grupo no ha encargó de que el invento sonara alto y
permanecido alejado del fuerte, potenciando también la baza bise- Y el éxito sumió inevitablemente al
mundo cinematográfico. Aparte xual y glamourosa del cuarteto. El cantan- cuarteto en las estructuras mastodónticas
de discos propios con títulos te, Freddie Mercury (1946); el bajista del negocio: escenarios inmensos, teatrali-
i nspirados por los Hermanos John Deacon (1951); el guitarrista Brian dad y golpes efectistas, como esa corona
Marx, han realizado la banda May (1947), y el batería Roger Taylor de 5.000 libras de peso que descendía des-
sonora del Flash Gordon de (1949) integraban una formación que ha de lo alto ocultando al grupo al finalizar
Dino de Laurentiis. Sus temas resistido a las mil maravillas los embates sus shows, sin olvidar fotos promocionales
han contribuido al éxito de de las modas posteriores y las sañudas crí- en las que más de 50 chicas en traje de
películas como ¡ron eagle, ticas de la Prensa musical. Eva se aprestaban a una carrera de bici-
Revenge of the nerds, cletas en el Wembley Stadium, o presenta-
Metropolis y Teachers, entre May y Taylor procedían de una banda ciones con call-girls en top-less paseándose
otras. llamada Smile; Deacon y Mercury debu- entre los invitados. Todo en el mundo de
taban por vez primera en un grupo. Queen Queen era grandilocuencia, desmesura.
(1973), su primer álbum, constituía todo
un despliegue estratégico de buen hacer. Curiosamente, los vapores del cham-
El sonido rozaba el rock duro: guitarras paña no abocaron la obra del grupo a una
aceradas, salvajes, fluidas; bases rítmicas resaca eterna. Desde News of the world
contundentes, y una cobertura vocal bas- (1976), Queen ha dado forma a muchos
tante insólita, que recordaba inevitable- elepés, unos mejores y otros peores, ha-
mente a las polifonías corales clásicas. Y, ciendo gala siempre de una extraordinaria
como contaban en la contraportada, nadie capacidad de adaptación, apuntándose
tocaba los sintetizadores. por igual al funk, al disco-sound, al rocka-
billy, a las baladas o a la moda imperante
Con sus siguientes discos -Queen II del momento. Su imagen también ha cam-
biado; hoy el glam es sólo un recuerdo
ocultado por cazadoras de cuero negro y
posturas virilmente rockeras; gorras de
plato, gafas oscuras, bigotes poblados y
pelo corto. Que otros muerdan el polvo.

Musicalmente, Queen halló su fórmula
ideal en lo que ellos mismos denominan
sus "canciones himno, piezas fácilmente
identificables, de esquema sencillo y tono
epopéyico como We are champions; We will
rock you; One vision, o Radio Ga-Ga, que
constituyen los momentos más altos de
su directo. Intercalan los elepés de estudio
con greatest hits, plásticos en vivo, discos
en solitario, colaboraciones, bandas sono-
ras y singles aislados, que suponen en su
totalidad un volumen de ventas superior a
los 80 millones de ejemplares. Son cam-
peones en el arte de la dosificación, apun-
tan y dan en la diana, arrastran multitudes
y, como gobernantes magnánimos que
son, han puesto fin al ostracismo al que
habían condenado a los sintetizadores.

"TÉCNICAMENTE SOY MALO, PERO TENGO ALGO MUCHO
MEJOR QUE OFRECER: EL 'FEELING" (Rod Stewart)

bodas y funerales, fue Animal de directo, Rod Stewart
renuncia a toda sutilidad para fascinar a
sólo un divertimento l os espectadores.

para Rod. Pede el leopardo
perder sus manchas? No puedo
RO D STEWART: Su cerebro, en cam- cambiar mis orígenes. Soy de
bio, era mucho más exi- l a clase obrera, pero no quiero
gente con los trabajos convertirme en héroe de
LA VOZ ARENOSA propios. Empezó ha- nadie ni de nada. Sólo soy un
cantante de rock and roll, y a
ciendo gala de sus raí- veces he pensado que el peor
enemigo de la clase obrera es
ANTONIO DE MIGUEL ces folk pero derivó ella misma".
Rod Stewart
Al contrario que su viejo amigo Jeff Beck, pronto hacia el rock-

Rod Stewart sí que ha nacido para estrella soul. Demostró buen

del rock. Acumula en su personalidad va- gusto para seleccionar

rias características útiles para tan envidia- temas ajenos y compu-

do menester: origen obrero, carencia de so algunos impresio-
sutilezas, fervor por las lentejuelas, ham- nantes. En su discogra-
bre de lujos, imagen de triunfador, bicéfa- fia hay baches, pero to-
la proyección sexual y una calidad intrín- dos los elepés tienen algo
seca. Su voz, personal e intransferible, un recomendable: An oíd

DNI enmarcado entre neones vitalicios., raincoat won't ever let you
Roderick David Stewart es uno de esos down (1969), Gasoline

nombres del pop que suelen suscitar pasio- alley (1970), Every pictu-

nes encontradas. re tells a story (1971), Ne-

Nació el 10 de enero de 1945 en High- vera dull moment (1972),
gate, Londres, de familia enconadamente Smiler (1974), Atlantic
escocesa. Desde pequeño no hacía más crossing (1976), A night
que jugar al fútbol -hasta fichó por el on the town (1976), Foot

Brentford, y un buen día escuchó a Sam loose & fancy free (1977),
Cooke: "Mi vida cambió radicalmente Blondes have more fun
desde ese momento". Ejerció de beatnik (1978), Foolish beha-
por Barcelona y, tras algunas sesiones viour (1980), Tonight ¡'m

como armonicista, debutó en 1964 gra- yours (1981), Absolutely

bando el célebre blues de Sony Boy Wi- live (1982), Body wishes

lliamson Good morning little schoolgirl. (1983), Camouflage

Pero las rosas no tapizaban su naciente (1984) y Every beat of my

carrera. Aprendió el oficio junto a Long heart (1986). Discos en los que se alternan

John Baldry y varios grupos negroides de sucios espasmos rockeros de riffs siempre
los años 1965-1967, hasta que viaja a Es- stonianos y baladas de un poder calorífico
tados Unidos para encamar el papel de que derrite el hielo. La dicotomía se dibuja
vocalista en el estruendoso Jeff Beck con una misma voz única, algo macarra,
Group. Superó la reválida cum laude. En poco educada pero estriada de músculo y
1969 le contrata la compañía Mercury, verdad. Rod se machaca la garganta, sin

dando comienzo a una vitalista y fulguran- tecnicismos, como una amasadora de hor-
te carrera como destemplada figura del migón desbrozando oro y brillantes a pie de

rock. mina. Canta. Encanta. Mueve. Conmue-

Paralelamente, Rod acepta formar par- ve. Con esos principios no puede generar

te de The Faces hasta 1975, una alocada más que pasiones, las mismas que él sien-

banda de boogie-rock grosero y stoniano, te por el ritmo de los Stones o las melo-

bañado en cerveza (una de sus muchas días de Dylan, por ejemplo.
debilidades), verdadero fracaso discográ- Visualmente, Rod Stewart no ha sido
fico que, sin embargo, le sirvió de entreno nunca ejemplo de distinción. Pelos de
disciplinado para dominar los secretos de alambre, bufandas delirantes, ropas es-
un escenario. Faces, que se definirían candalosas, mirada desafiante. Se ha ga-

como "siempre disponibles para fiestas, nado a pulso los títulos de hortera exube-

rante o el más sociológico de "epítome de

la generación de Camaby Street". Procli-

ve a las borracheras colectivas, política-

mente conservador, apologista del confort

de Hollywood, coleccionista de rubias y

dado a los más inusitados caprichos (los

ejecutivos de su discografia podrían con-
tar miles de anécdotas), Rod Stewart tie-

ne en su piel ese misterio sagrado que úni-
camente los grandes conocen: dar vida a
a
una canción.

"EL PÚBLICO QUIERE SEXO Y VIOLENCIA. YO SÉ DE SUS GUSTOS:
ME PASO EL DÍA ANTE LA TELEVISIÓN" (Alice Cooper)

Alice Cooper desarrolló todas las representaba una truculenta fábula moral
posibilidades del rock como
espectáculo teatral. sobre rock erizado. Viaje a los infiemos y

A ¡ice Cooper tuvo catarsis comunitarias.

algunos predecesores y Comenzó su vida en 1945 como Vin-
muchos continuadores.
Screamin Jay Hawkins, cent Foumier. Creció en Phoenix (Ari-
cantante negro que se
presentaba en vivo con zona) y fue un buen atleta con tendencia a
calaveras y ataúdes, hizo en
19561 put an spell on you, la rebelión. Tuvo grupos y, buscando el fi-
apabullante historia de
hechizos. En los años nal del arco iris, recaló en Califomia en
siguientes, locutores como plena apoteosis hippy. Dado que paz y
Zacherle (Dinner with drac) y amor era el lema de rigor, Vincent optó
Boris Pickett (Monster mash)
triunfaron con narraciones por lo contrario. Adoptó el nombre de una
escalofriantes. A finales de
l os setenta, unos zombies campesina quemada en el siglo XVII bajo
neoyorquinos llamados The
Cramps pusieron de moda el la acusación de brujería y se dedicó a es-
chapoteo en las
profundidades del cine de serie candalizar a los niños de las flores. En poco
B, y el rock marginal se llenó
de científicos chiflados, tiempo eran la banda más odiada de Los
monstruos inimaginables y Ángeles.
alienígenas peligrosos.
Frank Zappa, connoisseur del mal gus-
to, les apoyó y editó sus primeros discos.

Pero fue el representante Shep Gordon el

que puso a punto el fenómeno con ayuda

de expertos músicos de estudio y del pro-

ductor Bob Ezrin. Con él Alice se especia-

lizó en trallazos de rock que glorificaban el

fin de curso, los ardores eróticos y demás

preocupaciones del teenager medio. Tam-

bién tenía otra faceta: se declaraba necro-
filico ("Me encantan los muertos / justo

antes de que se queden fríos), cantaba a

los Niños muertos, se proponía como can-

didato presidencial (Elected), se ponía tier-

no para hablar de la menstruación (Sólo

las mujeres sangran), y alienaba a todo pa-

dre decente. Además, su espectáculo al-

canzaba insólitas cotas de premeditada

locura y se destapó como un concepto
vendible: en la primera mitad de los seten-

ta, Alice Cooper fue la gran estrella del

circuito norteamericano.

Como en los cuentos, tuvo su castigo.

Despidió a sus compinches, pasó por el
túnel del alcoholismo y terminó revelán-

dose como un buen patriota conservador,
defensor de Nixon e infiltrado en la jet-set

N ESPERPENTO de Hollywood. Jugaba al golf con Bob
LLAMADO ALICE
Hope, altemaba con Groucho Marx, com-
DIEGO A. MANRIQUE
petía en extravagancias con Salvador
Música de vocación adolescente y adicta a
las sensaciones primarias, el rock tiene Dalí. El odiado pervertidor de jóvenes go-
una vieja querencia por el universo del te-
rror. Y nadie ha hecho más por explorar zaba con los contrastes. Pero su público,
los mitos sangrientos que Alice Cooper.
Hijo de ingeniero de la NASA que tam- que quería escándalo, no vio el chiste y le
bién ejercía como ministro de la Iglesia de dio la espalda, prefiriendo caricaturas más
Jesucristo, Alice rebasó ampliamente los
límites morales y teatrales del rock. Lleva- burdas, como Kiss.
ba al escenario serpientes y monstruos, Un lento eclipse. En 1984 pasó por Es-
muñecos y dientes bailarines. Era la pesa-
dilla nacional: greñudo y esquelético, ma- paña para filmar una película barata diri-
quillado grotescamente, ejercía de ser de-
pravado. No tenía redención y sobre las gida por un realizador italiano. Seguía en
tablas pagaba por sus excesos siendo va-
puleado, electrocutado, guillotinado o en- sus trece: era el creador del rock teatral, el
cerrado en un manicomio. Alice Cooper
pionero del video-clip, el progenitor del
a
punk. Y no le faltaba razón.

"CANTABA ANTE 50.000 CHICAS ENAMORADAS DE MÍ, PERO NO PODÍA
CONSEGUIR UNA CITA PARA LA NOCHE DEL SÁBADO" (David Cassidy)

PODER cortada fielmente se- David Cassidy, ídolo de muchachitas,
ADOLESCENTE gún este patrón. Hijo buscó más tarde infructuosamente una
de un actor de fama I magen serla.
PATRICIA GODES mediana en Holly-
wood, tuvo éxitos omo fenómeno
La historia musical es particularmente in- apabullantes (Could i mportado, el rock español ha
justa con los ídolos juveniles. La condena sufrido de muchas lagunas, y
afecta a todos los que han tenido la des- it be forever, Rock me una de las más graves quizá sea
gracia de triunfar entre el público adoles- baby, How can I be l a que afecta a los ídolos de
cente femenino. Los críticos musicales, sure; Daydreamer; adolescentes. Unos, como
por lo común hombres y adultos, no son The puppy song), y Miguel Ríos, renegaron
capaces de entender que el histerismo de rompió más corazo- rápidamente; otros, como Mike
las fans es una de las grandes tradiciones nes que nadie desde Kennedy y Junior, se
rockeras y que quienes auparon a Elvis y Elvis y los Beatles. malograron. Ha habido figuras,
los Beatles no eran otras que esas gritonas Sus discos con el algunas de las cuales
que ellos tanto desprecian. Los Rolling grupo no eran muy resisten, como Miguel Bosé,
Stones se encumbraron asimismo por en- buenos, pero sus Tequila, Pecos y Hombres G,
cima de Manfred Mann o los Animals competidores direc- que coinciden con el concepto
porque lograron encandilar a las quincea- tos, los Osmonds (fa- original -uno de los
ñeras, público mucho más entusiasta y fiel milia mormona fa- fenómenos más divertidos y
que el que apoyaba habitualmente el mosa en salas de auténticos del rock and roll,
rhythm and blues británico. fiestas desde años pese a los intentos de
atrás), resultaron ser desvirtuarlo.
Como contrapartida al rock progresivo verdaderos talentos.
poshippie, adulto y con ínfulas intelectua- Llegaron al número
les, hubo un renacer de la fiebre musical uno con una respues-
teen. Desmayos, gritos y suspiros volvie- ta ñoña a los Jack-
ron a ensordecer el firmamento pop. Los son 5, One bad apple,
ídolos de la etapa 1970-1978 se dirigieron y su cantante solista,
a un público muy escaso en años para el Donny, niño angeli-
que valores como autenticidad y credibili- cal de bella voz blan-
dad no importaban, pero que no era tan ca, era todo blandu-
bobo como parecía y sabía lo que le gusta- ra, pero elepés como
ba mucho mejor que los mayores. Es muy Crazy horses y The
dificil, de hecho, darle a este público gato plan deberían tomar-
por liebre, y quien triunfa entre las fans es se muy en serio.
siempre porque ha sabido dar lo que ellas
exigen: buen aspecto, fantasías sentimen- Antes estuvieron
tales y una música suficientemente respe- los Cowsills, otro clan familiar, esta vez
table como para que no sea despreciada con padres incluidos. Sus aproximaciones
por sus amistades masculinas, fácil de es- naives al lado lewiscarrolliano de la psico-
cuchar y sin problemas para satisfacer su delia (The park, the rain and other things;
gusto. We can fly, su versión de Hair, Le opere de
Bartolomeo) abrieron las puertas de las in-
Un recurso utilizado con gran fortuna quietudes creativas a los artistas Leen.
fueron los guiños rockanroleros y las fór-
mulas de éxito comprobado: versiones de Quien eloqueció a las chicas norteame-
los sesenta, armonías vocales refrescantes ricanas con sus bonitas canciones y su as-
y un clasicismo estándar casi auténtico. pecto saludable fue Bobby Sherman (Julie
La carrera de David Cassidy, guitarra y do ya love me; Lalala; If I had you). Más
voz del grupo televisivo The Patridge Fa- tarde, en el otro lado del océano, David
mily (Mamá y sus increíbles hijos), parece Essex (Gonna make you a star) presentó
otra faceta del fenómeno, también inolvi-
dable para quien le conoció y admiró en su
momento. Pero de todos los ídolos que de-
leitaban a las jovencitas en los primeros
setenta, los más definitorios son los esco-
ceses Bay City Rollers, que, dirigidos por
Eric Faulkner, enloquecían a las chicas
sembrando lo que se llamó tartan terror.
Tuvieron muchos éxitos (Mañana; Re-
member; Shalala; Shang a lang), pero nadie
con más de 14 años pudo comprender su
éxito ni compartir el apasionamiento y la
admiración de sus fans; por eso es tan
arriesgado menospreciar el poder adoles-
cente.

"NO HAY NADA MÁS DESTRUCTOR QUE EL ÉXITO. NADIE TE EXPLICA
LO QUE HAS DE HACER CUANDO LLEGAS A LA CIMA" (Marc Bolan)

En las postrimerías Marc Bolan, poeta del underground, se
recicló felizmente como estrella del pop.
de 1969, Steve abando-
salvación: de ella nace, a finales de
ARC BOLAN na el grupo, y su lugar es 1975, su hijo Roland, y tras una cura de
ocupado por Mickey desintoxicación, Marc vuelve a grabar:
EL VERDADERO REY DEL 'GLAM' Finn, un excéntrico per- New York city logra buenos puestos en
las listas, e incluso M. Finn regresa a
sonaje que compartirá un T. Rex reforzado con músicos de es-
tudio.
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ ABEL con Bolan las horas de
Se llamaba Mark Feld, y había nacido máxima gloria. El nom- En 1977, ya con la llegada del punk,
se publica Dandy in the underworld, últi-
el 30 de septiembre de 1947. Murió en bre del combo es abre- mo elepé aparecido en vida de Bolan.
Londres, su ciudad natal, 30 años des- viado a T. Rex, y Marc Una gira con los Damned de teloneros
es un éxito, y en verano Granada TV
pués. Fue mala suerte. Justo cuando empuña definitivamen- comienza un programa semanal llama-
do Marc, donde Bolan interpreta nue-
empezaba a levantar de nuevo el vuelo, te la guitarra eléctrica. vos temas y viejos éxitos, y por donde
desfilan David Bowie, Thin Lizzy o los
después de un período de oscuridad Con Ride a white swan Boomtown Rats. Todo parece encarri-
larse de nuevo, cuando el 16 de sep-
provocado por problemas personales. (1970) alcanzan el nú- tiembre de 1977 el mini que conduce
Gloria Jones se estrella y Marc Bolan
Justo, asimismo, cuando apenas daban mero dos en las listas: pierde la vida.

sus primeros pasos discípulos, fanáti- es el pistoletazo de sali- Después, la norma: discos póstu-
mos, elepés en directo, vídeos recopila-
cos e hijos putativos suyos que ya en da para la Bolanmanía. torios... Por suerte, sin llegar a los ex-
estos ochenta han erigido sin ningún El grupo se configura tremos de lo ocurrido con su buen ami-
falso pudor el nombre de Bolan como establemente con la in- go Jimi Hendrix. Quizá estén los dos
bailando en los bailes de Marte.
estandarte, ya fuera con versiones de corporación de Steve

sus temas o con homenajes explícitos: Currie al bajo y Bill Le-

desde Bauhaus a Prince, de Radio Fu- gend a la batería, y los

tura hasta Dinarama, desde Frankie números unos, con ven-

Goes to Hollywood a Lunes de Hierro. tas millonarias, se suce-

Y, sin embargo, no ha sido su muer- den ininterrumpida-

te, pese a la mitificación inevitable que mente: Hot love; Get it

tal circunstancia acarrea en un negocio on; Telegram Sam...
tan necrofilico como el del rock, la ra- Las actuaciones en di-
zón primordial de su descubrimiento recto se convierten en
Que lo potenciara aún más, sí, qué auténticos delirios co-

duda cabe; pero lo que es evidente es lectivos: un público en

que el nombre de Marc Bolan perte- el umbral de la adoles-

necía desde hacía ya bastantes años a cencia aúpa a Bolan al

la cateogría de estrella rutilante de la nivel de mito. Los álbu-

música pop. Un tipo prolífico y verboso mes Electric warrior, The
que concilió los mitos del rock and roll slider; Bolan boogie, y

con sus particulares fantasías en un Tanx, encumbran a T.
universo sonoro inconfundible. Rex como los reyes del glam-rock por

De hecho, su primer disco, The wi- aclamación. Ringo Starr los filma ac-
zard, salió en 1965. Atrás quedaban ve- tuando-en el Wembley Empire Pool y

leidades de modelo publicitario o can- da forma a la película Born to boogie

tautor a lo Dylan. Tras editar un par de (1973). Es el cenit.

singles más, con los que apenas pasó Porque de pronto, en 1975, todo pa-

nada, Bolan entra a formar parte de rece irse a pique. El glam va pasando

John's Children, un grupo de de moda, Mickey Finn abandona el

flower -po-werde1967.Conelosrealizaunagira grupo, June -mujer de Bolan- pide el

por la Alemania Occidental, como telo- divorcio y él mismo se entrega por me-
neros de los Who, y registra Desdémo- ses enteros al uso y abuso del alcohol y
na (1967). El tema obtiene cierta reper- las drogas.

cusión gracias, sobre todo, al veto que Su relación con la cantante norte-

recibe de la BBC. americana Gloria Jones es la tabla de

Es ese mismo año, 1967, cuando co-

noce a Steve Peregrine Took, un percu-

sionista apasionado como Bolan por la f~yri¡
literatura fantástica, juntos deciden

formar un dúo de nombre Tyrannosau-

rus Rex. Bajo la dirección de Tony Vis- HISTORIA DEL 'ROCK'
conti, productor también de David Bo-

wie, editan en los años 1968 y 1969 va-

rios álbumes imbuidos de lirismo mági- PRÓXIMO CAPITULO
co y dulce exotismo, con títulos tan

arrebatadores como Mi gente era her-

mosa y tenía el cielo en el pelo, pero ahora 'HEAVY METAL'
son felices por llevar estrellas en la frente.

HISTORIA DEL `ROCK'

Dentro del reino del rock, el heavy metal constituye uno de
los apartados más extensos e irreductibles. Sus orígenes se
remontan a la segunda mitad de los sesenta, cuando comen-
zó el culto a los guitarristas y se incrementó en volumen y
crudeza el arsenal sonoro que éstos tenían a su disposición.
Tras Led Zeppelin, Deep Purple, Black Sabbath y demás
grupos británicos que sentaron las bases del género, el heavy
conoce una rápida expansión internacional, centrada sobre

todo en Estados Unidos, y sigue manteniendo una amplísi- ma audiencia. En la actualidad, el término engloba desde los bramidos de guita-
rristas desbocados y auténticos como Ted Nugent (en la foto) hasta los acicalados
sonidos de grupos ligeros como Europe o Bon Jovi.

TANTO LOS MÚSICOS COMO LOS OYENTES DEL `HEAVY METAL' PREFIEREN
DESIGNAR A SU MÚSICA COMO `ROCK', EL ÚNICO `ROCK' AUTÉNTICO

EAVY METAL' En directo, grupos como AC/DC proporcionan a 32
sus seguidores una inmersión total en torrentes
de luz y sonido, junto con la integración
en una masa vibrante que considera al rock
como núcleo aglutinador de un estilo de vida
que la diferencia y enaltece.

"EL `ROCK' ES EL CANAL QUE NOS PERMITE DAR SALIDA A TODAS
LAS FRUSTRACIONES Y CARENCIAS" (Bon Scott, AC/DC, 1979)

El heavy cuenta con grupos drix- define el perfil de los reyes de la
i rrefrenables como Motorhead, de guitarra con libertad para atormentar las
cuerdas, deformar el sonido y esculpirlo
sonido sucio y veloz. cón enormes columnas; Jeff Beck se ex-
presa con frases borrascosas e hirientes,
El rock es entretenimiento L IMPERATIVO colocando las agujas en la zona roja; final-
mente, Jimmy Page moldea los bloques
escapista. Algo que toda CATEGÓRICO sonoros, extrayendo posibilidades dramá-
sociedad necesita, sea ticas del enfrentamiento entre una guita-
occidental o comunista. En este DIEGO A. MANRIQUE rra en cinerama y una voz estratosférica.
sentido hacemos lo mismo
que Fred Astaire y Ginger Fue en Nova Express donde el escritor Wi- Éstas son las fases del asalto: la monu-
Rogers, sólo que usamos un lliam Burroughs apodó a uno de sus per- mentalidad de Led Zeppelin abre el mer-
volumen mayor de sonido. La sonajes como The Heavy Metal Kid. Aho- cado; mucho menos estetas, Deep Purple
gente viene a nuestros ra el mundo rebosa de chicos de metal pesa- plasman una espectacularidad febril mien-
conciertos y se olvida de los do. Se trata de una secta prohibida para tras que Black Sabbath carecen de refina-
conflictos con su mujer, o con adultos y buscadores de valores conven- miento pero predican un nihilismo que en-
su novia, o con el jefe de la cionales. Es música intimidante, repetiti- caja con la turbulencia de los primeros
oficina o el profesor. Hay va, visceral. Embutida en sudor, decibe- años setenta. Producto tardío de la viola-
países que lo intentan prohibir lios y muecas, preserva en estado puro el ción del blues por músicos blancos, el rock
pero es inútil: esas tácticas mito adolescente del rock como bandera duro se aprovecha de la nueva tecnología
sólo consiguen que la gente se de rebelión. Sospechosa ante los medios sonora para adueñarse de auditorios y fes-
i dentifique más con el de comunicación, su falta de respetabili- tivales campestres. Se enfrenta al mundo
concepto del rock". dad exacerba su aureola de heroísmo. que le rodea, promete aplastar la apatía y
Aparenta estar fuera de la ley (y de la in- recargar las baterías de jóvenes con ansia
David Lee Roth, 1982. dustria del espectáculo) para reforzar su de identidad comunitaria.
magnetismo y vender una arisca válvula
de escape. Lo empiezan a denominar heavy metal
(metal pesado) y, en la primera mitad de los
Rastreando en su cosmogonía se llega sesenta, queda codificado. Musicalmente,
hasta los Kinks, cuyo You really got me
(1964) contiene inconfundibles guitarras con mayor o menor deuda hacia el blues
macizas; al año siguiente, el My generation eléctrico, es la suma de un bajo atronador,
de los Who añade desafio generacional al una batería machacona, una guitarra so-
poderío instrumental. Pero los forjadores lista desaforada y poco más; la voz se in-
del ruido metálico son los tres guitarristas tenta abrir paso, chillando entre instru-
que pasan por los Yardbirds: Eric Clapton mentos amplificados más allá del límite
-con la ayuda posterior de Jimi Hen- del dolor. No conoce la sutilidad; prefiere
el impacto fisico, ojos y oídos asaltados
por la enormidad de los decibelios e impo-
nentes despliegues de luces.

Es una fe basada en la idea de la resis-
tencia -a pesar de su origen proletario,
no hay ansias revolucionarias- que ad-
quiere pleno sentido en los rituales del di-
recto, donde se alcanza una íntima com-
penetración entre espectadores y ofician-
tes. Los músicos son saludados con puños
cerrados, el símbolo de la victoria y gritos
de ánimo: su presencia ha hecho una piña
desafiante de seres dispersos. Desde el es-
cenario, esa masa en tensión es pulsada
con habilidad: los artilleros del heavy gus-
tan de exhibir su poder. Poder para domi-
nar los sentidos descargando himnos

"EN ESTE CAMPO, LA IMAGEN ES CASI TAN IMPORTANTE COMO LA
MÚSICA" (Derek Shulman, descubridor de Bon Jovi, 1987)

apocalípticos o relatos de hazañas sexua- de un público La voz de Robert Plant y la guitarra
les. La estrella metálica es el nuevo agente fresco, retorno a de Jimmy Page fueron los elementos
007, con permiso para todo. Presume de lo básico-, apa- distintivos de Led Zeppelin.
una libertad sin freno ni responsabilidad. recen Iron Mai-
Bebe Dom Perignon a morro, tiene mil den, Def Leppard ay artistas que olvidan que
orificios disponibles para satisfacer su y otros apóstoles: su primera obligación es la de
priapismo, lleva las melenas más largas y entra la new wave entretener al público. Pete
los pantalones más ajustados, consume Townshend era uno de ésos,
todas las drogas, se permite arrasar las of british heavy sólo pensaba en la música. Y
habitaciones de los hoteles o da un corte así acabaron los Who. Yo me
de mangas a un sistema que predica el tra- metal. Sangre ocupo de los negocios, de los
bajo duro y la vida moderada. sana para el viejo contratos, del dinero. No me
monstruo. conformo con lo que tengo: el
Ésta es una imagen inmensamente próximo año haré discos que
atractiva para sus seguidores, que estam- Es la demos- venderán más millones de
pan en sus uniformes los nombres de sus tración de la vita- copias, tocaré más conciertos,
ídolos, invocaciones a una galaxia orgullo- lidad del heavy. podré comprarme dos
sa que se considera depositaria de los va- No es un cuerpo mansiones en vez de una".
lores primarios del rock. Y es cierto: el enclenque: la más Jon Bon Jovi, 1987.
heavy es rock elevado al cuadrado, el refle- autorizada enci-
jo es un espejo deformante de todas las clopedia del géne-
fantasías que han nutrido esa música des- ro contiene en su
de sus orígenes. Le han colgado el sambe- última edición
nito de la violencia pero no se ha hecho 1.500 nombres de
merecedor de esa medalla a pesar de las todas las latitu-
poses y de las letras. Prefiere invocar des. Y puede refu-
como méritos la veteranía y la digitación tar fácilmente la
de sus músicos, su simbiosis con los cre- acusación de que
yentes, su defensa a ultranza de una au- "todo suena
tenticidad vital y musical frente a tribus igual". Junto a los
más influenciables por las modas. plomizos supervi-
vientes del boogie
Esa supuesta pureza oculta un sofisti- de los setenta
cado tinglado comercial. En un campo brota la tralla del
enormemente competitivo -y con acceso speed metal. Cabe
limitado a la prensa, radio y televisión-, todo: los expertos
los lanzamientos se planifican con preci- en asustar a los
sión militar. Las campañas de giras -allí bienpensantes
está el dinero, tanto en entradas como en con referencias
la venta de parafernalia- son exhaustivas satánicas y erotis-
y han triturado a más de un grupo. Este mo crudo -en
implacable ritmo de trabajo repercute en
la producción discográfica, que tiende a Estados Unidos, han sido objeto incluso
las rutinas abismales. Una existencia he- de una reciente investigación del Congre-
donista y la adulación fácil contribuyen a so que presiona para que los discos sean
li mar las cuchillas. clasificados moralmente- pisan los mis-
mos escenarios que jóvenes metalúrgicos
Sin embargo, como toda música que que citan la Biblia como compás. Ni si-
responde a una potente realidad sociológi- quiera tiene ya sentido la definición del
ca, el heavy metal es capaz de autorregene- heavy como música para chicos: siguiendo
rarse. A finales de los setenta, con unas la pista de Van Halen, los últimos alqui-
estrellas dedicadas a la repetición mecáni- mistas son Bon Jovi, que endulzan sus
ca, ocurre una pequeña revolución en pa- pintas y canciones para conectar con co-
lacio. Siguiendo el ejemplo del punk -pe- razones femeninos.
queños sellos independientes, búsqueda
Ahí está el dilema. La pérdida de fie-
reza rítmica y virulencia estética es el
peaje para entrar en los grandes circui-
tos. Una concesión que se traduce en
A.O.R. (rock de agradable digestión) al
gusto de los estudios demográficos de la
industria. Una tentación excesivamente
golosa, aunque los millones de Bon Jovi
no impedirán que surjan nuevos guerri-
lleros capaces de descubrir el placer de
subir el volumen sintiendo cómo los de-
dos generan olas de sonido mientras al-
guien vocifera calentura y otras frustra-
ciones.

"YO QUERÍA QUE LOS MC5 FUERAN MÁS IMPORTANTES QUE MAO; ELLOS SE
CONFORMABAN CON SER MÁS FAMOSOS QUE LOS BEATLES" (John Sinclair)

MC5. De izquierda a derecha: Rob A COMUNA denas de montaje en la capital de la indus-
Tyner, Michael Davis, Fred Smith, tria del motor, fabricaban éxitos en vez de
Wayne Kramer y Dennis Thompson. DE DETROIT coches. Pero con la llegada de los melenu

En 1968, los MC5 llevaron JOSÉ M. REY dos británicos, los aburridos
hasta Chicago su rock hijos de la clase media se
terrorista, animando el Silos años sesenta fueron un reguero de amotinan y cambian la facha-
célebre festival de la vida, burla agitación y cambios, la llama alcanzó en da sonora de la urbe. Será el
yippie (facción polítizada de Detroit proporciones extremas. Allí, entre otro sonido Detroit, rugiente,
los hippies) celebrada 1967 y 1969, música y política confluyeron ceñudo, poseído de inusual
paralelamente a la en una escena de radicalismo izquierdista agresividad y verdadera ante-
convención del Partido con la firme creencia en el rock como len- sala del heavy metal.
Demócrata (entonces en el guaje de la revolución. En realidad era
poder y en Vietnam). Tras los obra de un grupo minúsculo para una ciu- Además de negros famo-
violentos sucesos que dad con más de cuatro millones de habi- sos, por la ciudad pululaban
siguieron, las autoridades tantes; pero, amplificado por la Prensa un- chicas rebeldes como Suzi
comenzaron a preocuparse. derground y la oficial, aquello parecía un Quatro (antes de la fama), o
Varios meses después, John polvorín. Tenía su ideólogo en John Sin- chicanos emigrados como
Sinclair, su mentor, era clair, líder de la organización activista Question Mark and The
detenido por proporcionar dos Panteras Blancas y, a su vez, guía espiri- Mysterians (96 tears). Flint,
porros de marihuana a unos tual y artístico del más prominente grupo
infiltrados agentes del FBI. local, los MC5. Funcionaban en comunas algo más al Norte, era el lugar
Todo el peso de la justicia y parecían organizados: una guerrilla urba- de residencia de los cerriles
caería sobre él: 10 años de na que quería explotar las contradicciones Grand Funk Railroad. Más
cárcel. Las campañas de del sistema y ofrecer alternativas. popular entonces era Mitch
simpatizantes como John Ryder, voz ruda al frente de
Lennon lograrían acortar la Obviamente, no todo eran revoluciona- Detroit Wheels, entre el rock
sentencia. rios eléctricos. Detroit, un desparrame in- despiadado y el soul hirviente,
dustrial con rascacielos asomado a un que escandalizó al país con su
lago y unido a Canadá por un largo puen- clásico Sock it to me baby
te, es una ciudad dura. Hasta entonces, (1967). Todavía le rinden plei-
era la marca del sonido exportada por tesia: John Cougar produjo su
Tamla Motown. Acostumbrados a las ca- más reciente disco, y Bruce Springsteen
suele hacer un medley con sus viejos temas.
Rare Earth vendían bien un ungüento
de rock-soul trascendentalista (Get ready,
1969). Más tensos eran los Rationals, aun-
que nadie se enteró. Bob Seger, un can-
tante de ímpetu arenoso, plasmó sus desli-
ces más indómitos entre el cruce de déca-
das en una ristra de irregulares álbumes,
hasta que en 1975 pasó a explotar su le-
yenda perdedora con baladas tibias y fo-

gosas crónicas urbanas. En el lado bestia
andaban los Amboy Dukes, con un aluci-
nado Ted Nugent. Indeciso entre los blues
llameantes (Baby please don't go) y los via-
jes al centro de la mente, finalmente se deci-
dió por el heavy. El grupo Frost contaba
con otro guitarrista letal, Dick Wagner,
futuro socio de Lou Reed.

Los Stooges eran otra cosa. La más
arrogante bofetada de desarraigo nihilista.
Pura provocación, Iggy Pop se contorsio-
naba a torso desnudo, entre un vómito de
vatios. Y, finalmente, los MC5. Su anar-
quía espasmódica de ruido y riffs turbulen-
tos se adelantó 10 años al punk. La repre-
sión y sus propias incoherencias termina-
ron por separarles en 1971. Pese al caos,
hicieron canciones memorables y fueron
el último fogonazo de idealismo de una
década cansada.

"ES CIERTO QUE CAMBIO MUCHO DE MÚSICOS. TODOS TERMINAN
ODIÁNDOME. TIENEN LIMITACIONES, NO PUEDEN SEGUIRME" (Ritchie Blackmore)

Una versión primeriza de Deep
Purple, grupo que estableció muchas
señales distintivas del heavy metal.

DEEP PURPLE,
EL PESO
DE LA LEYENDA

ANTONIO DE MIGUEL álbumes In rock (1970), Fireball (1971) y Ma- El paulatino
chine head (1972). Rigurosos trabajos de
El incansable afán mitificador del cosmos composición (temas estructurados y modu- resquebrajamiento de Deep
heavy ha colocado a Deep Purple en un lu lares), claves instrumentales coordinadas Purple originó otras muchas
gar privilegiado de su parnaso. Lugar y le- entre guitarra-voz-teclados, riffs limpios y propuestas de sus miembros: la
yenda conseguidos por unos cuantos temas frustrante lan Gillan Band; las
célebres, un trío de músicos carismáticos y comerciales; en fin, un sonido molde clara- guirnaldas clásicas de Jon Lord
una abultada historia de descendencias bas- (Gemini suite y Windows), l a
tardas. Pero no todo fueron durezas en la mente identificable que cristaliza en singles descabellada carrera al heavy
historia de este grupo británico. A decir ver- fantásticos como Highway star; Smoke on the furibundo de Ritchie
dad, cuando Deep Purple nace, en febrero Blackmore's Rainbow,
de 1968, sus componentes no tienen claro water, o Strange kind of woman. generador de media docena
qué tipo de música van a realizar. de elepés con ayuda de gente
La pugna de egos llega en sus días de atractiva, como Ronnie
Jon Lord (1941), un teclista con estudios máximo esplendor, reprochándose unos a James Dio y Cozy Powell; por
musicales clásicos, que pasó por algunos otros el encasillamiento estilístico. Antes de último, David Coverdale creó
grupos de rhythm and blues (The Artwoods); que Gillan y Glover se vayan, dejan graba- l os Whitesnake para dar asilo a
Ritchie Blackmore (1945), un guitarrista in- do un doble álbum de lujo, Made in Japan viejas glorias del rock
tenso que acompañaba a seres extravagan- (1972), lúdica antología, aún válida, de lo británico, Lord y Paice
tes como Screaming Lord Sutch; Ian Paice que aportó el grupo en los años setenta. i ncluidos.
(1948), batería miope y contumaz; el bajista
Nicky Simper (1946), y el vocalista Rod Con la incorporación de Glenn Hughes
(batería) y el desconocido vocalista David
Evans (1945), salen a la palestra con una Coverdale (1951), Deep Purple tiene años
afortunada versión de Hush, del sureño Joe de vida irregular, con mucha competencia
South. Pasó inadvertido en el Reino Unido, pisándoles los talones. Who do we think we
pero se encarama al número cuatro de las are? (1973); Burn, Stormbringer (1974), sólo
listas norteamericanas en el verano de 1968. convencieron a sus fans. Blackmore, hipo-
Voces melodiosas y juegos pantanosos de condriaco egocéntrico y agresivo, sueña con
órgano. Se incluye en su primer álbum, Sha- su gloria particular. Lord es un espectro. El
trueque de Blackmore por el norteamerica-
des ofDeep Purple, atractivo crisol de psico- no Tommy Bolin (1951) inyecta bríos más
oxigenados al grupo (Come taste the band
delias, blues-rock y latiguillos progresivos en (1975), casi enteramente compuesto por él
el que Jon Lord ordenaba y mandaba. Las En julio de 1976 se disuelve la banda y el
querencias beatles les embarcan en una al- año acaba con un disco póstumo, Made in
godonosa, casi reverencial versión de Help. Europe, y con la muerte de Bolin en Miami.
Después de infructuosas aventuras, Lord-
En similar régimen de agradable mesco- Paice-Blackmore-Glover-Gillan decidieron
lanza se mueven sus siguientes álbumes, reanudar en 1984 su vieja amistad en una
nueva edición (sospechosa de insinceridad)
Book of Taliesyn y Deep Purple, ambos de de Deep Purple.

1969. Lord los lleva a su terreno cuando
graban Concerto for grupp & orchestra, en el
Royal Albert Hall londinense, con la Royal
Philharmonic Orchestra. Por suerte, para
ese momento se han producido ya los dos
primeros cambios: el cantante Ian Gillan
(1945) y el batería Roger Clover (1945) an-
sían, junto a Blackmore, dar una definición
más granítica al sonido Deep Purple. La voz y
la guitarra ganan la apuesta a Lord, y apare-
ce su primer éxito británico, Black night, ma-
triz de su nueva línea, que se concreta en los

"EL 'ROCK AND ROLL' NO ES CONTAMINACIÓN SONORA. /
EL 'ROCK AND ROLL' NO VA A MORIR" (AC/DC, 1980)

Angus Young (con pantalones cortos) En 1976 se plantan en Londres, con la
es el elemento humorístico de AC/DC. ambición de conquistar todos los mercados
empezando desde cero. Actúan en locales
Cuando te conviertes en un A FUERZA de aforo reducido, sudan la camiseta noche
grupo de primera fila, lo bonito tras noche y logran el apoyo del público. En
es darle al público un buen BRUTA DE AC/DC realidad se limitan a ofrecer con generosi-
espectáculo, algo dad lo que los chavales reclaman: energía en
extraordinario, eso sí, I GNACIO JULIÁ bruto, facilidad para las melodías de acero
acoplado al mismo tipo de Forjador de un electrizante y muy popular blindado, un sonido crudo y sabroso y un
atmósfera que lograríamos blues metálico, AC/DC estableció un excitante guitarra solista siempre en primer
en un pequeño pub. Pero, puente entre el decadente rock duro de plano. Su presencia en escena, que es donde
personalmente, lo que me mediados de los setenta y la nueva ola verdaderamente se aprecia su efectividad,
gusta es tocar: tengo bastante heavy de principios de esta década. Aus- se apoya por igual en un irresistible sentido
con una guitarra y un ampli, tralianos, se dieron a conocer internacio-
no me hace falta nada más". nalmente casi al mismo tiempo que el rítmico que retoma influencias glam y un
Angus Young, 1984. punk, fenómeno que parecía negar desde
su sonido tradicional, pero con el que truco visual mínimo: el personaje de diabóli-
compartían ciertas actitudes. Nacieron en co colegial a la inglesa interpretado por el
1974, entre Sidney y Melbourne, alrede- menudo pero espectacular Angus (1959).
dor del núcleo de los hermanos Young, y Lo acompaña su hermano Malcolm (1953),
ofrecieron una alternativa válida a la seni- a la rítmica; Mark Evans y posteriormente
lidad prematura de los grandes monstruos
del género. Su propuesta se basaba princi- Cliff Williams (1949), al bajo; Phil Rudd
palmente en la inmediatez, la energía y la (1946), a la batería, y un cantante limitado
falta de pretensiones. En su despegue ini- pero incendiario, Bon Scott (1946). El gran
cial tuvo especial importancia la asisten- público, primero en el Reino Unido y des-
cia de George Young, hermano mayor de pués en Estados Unidos, se rinde incondi-
Angus y Malcolm, quien había acumulado cionalmente ante sus descargas y su espec-
experiencia musical durante los sesenta táculo. En España, su influencia entre cier-
como miembro de Easybeats (los de Fri- tos sectores de la afición resulta sorpren-
day on my mind), y que junto a su socio dente; en los barrios periféricos de las gran-
Harry Vanda supo sacar el mayor prove- des ciudades se les adora como a dioses,
cho del grupo ya en sus primeras graba- mientras en las paredes su anagrama com-
ciones. pite con las pintadas políticas.

En 1979 llega el clímax artístico de su ca-
rrera con Highway to hell. Es una impactante
producción de Roy Thomas Baker, en la
que el grupo demuestra su sobriedad y soli-
dez. Pero en abril de ese mismo año pierden
a Bon Scott, que fallece tirado en el asiento

trasero de un coche a causa de sus abusos
alcohólicos. Afortunadamente encuentran
en Brian Johnson, ex miembro del grupo
Geordie, un magnífico sustituto que sabe
berrear con la misma vehemencia que su
antecesor y además es aceptado sin reparos
por su público. Como en cualquier familia,
la pérdida de Scott afianzó los lazos que les
unían a su público. Su siguiente disco, Back
in black (1980), y la gira en la que presenta-
ron al nuevo vocalista fueron un rotundo
triunfo.

Desde entonces el grupo se ha limitado a
cubrir el expediente discográfico (sus elepés
siempre contienen uno o dos cortes cierta-
mente aprovechables). En vivo, detrás de

los efectos especiales y la cortina de humo,
sigue palpitando una sección rítmica que es
dinamita pura. Y delante, como centro neu-
rálgico del show, un nervioso geniecillo de la
guitarra Gibson SG que, como los verdade-
ramente grandes, supera el tópico. En su
caso, el del heavy.

"ME GUSTA LA SELVA; TRABAJO EN EL MUNDO DEL DISCO Y ESTOY
HABITUADO A ALIMAÑAS, INSECTOS Y FIERAS" (David Lee Roth)

EL CINTURÓN haber grabado Con David Lee Roth (sentado), Van
ninguna canción Halen conquistaron un público
DE VAN HALEN con menos de 85 masivo a base de inteligencia musical,
decibelios, deno-
PATRICIA GODES mina su estilo big ddie van Halen constituye
rock y le gusta de- uno de los hitos de la guitarra
El heavy metal no es un género respetado. jar claro que Van contemporánea. Influido por
El grupo Van Halen lo es. Algo en el cuar- Halen tiene más Jimmy Page, Hendrix y Clapton,
teto logra la aquiescencia de críticos y afi- clave que todos ha desarrollado un estilo
cionados, y ese algo es David Lee Roth, sus competidores vertiginoso y ha inspirado a una
cantante nacido en Bloomington (India- heavies juntos. legión de imitadores. Ha
na), en 1955, y hasta hace poco voz del "Con otro acom- colaborado incluso con Michael
grupo. pañamiento y Jackson (Beat it). Su
otras armonías obsesión por su instrumento le
Resulta dificil no simpatizar con el sen- vocales sonaría- ha llevado a construir su
tido del humor y la desfachatez de que mos más como propia guitarra con los
Roth hace gala. Su arrogancia deja al des- Smokey Robin- elementos que le proporciona
cubierto, sin embargo, una inteligencia son que como Fender, su marca favorita.
poco usual en su ambiente. Prototipo del Ronnie James
macho rockero, exhibicionista y provoca- Dio".
dor, resultaría esperpéntico si no fuese él
mismo el primero en reírse. Pero Roth no Los Van Halen
es un cínico, y la prueba más irrefutable es
la convicción con que interpreta su papel han sabido dar
de divo -duro como el pedernal y vanido- siempre al con-
so como nadie- en vídeos y entrevistas, o cepto canción el
cuando canta. David Lee Roth es todo un valor que se me-
personaje, pero también un gran artista. rece, y sus prime-
ros elepés (Van
Y Van Halen es un gran grupo. Con un
estupendo guitarrista y un buen composi- Halen, II, Fair
tor, versátil y sin prejuicios, en la persona
de Eddie van Halen (1957), músico nacido warning, Diver
en Holanda, con educación musical clási-
ca. Su habilidad, al igual que la de su her- down y 1984) han
mano, el batería Alex (1955), impresionó a tenido inmensas
Roth cuando los conoció en las aulas mu- ventas. Jump, su
sicales del Pasadena City College. El gru- número uno de
po quedó completo inmediatamente con el 1984, les ha hecho
bajista Michael Anthony (1955). saber que el pú-
blico está de su
El resultado es prácticamente perfecto: lado, permitién
gran imagen, todo colorido y dinamismo, doles tomarse libertades estilísticas (sinte-
dominio técnico, facilidad para resultar tizadores, temas pop) normalmente prohi-
abrumadoramente espectaculares y una bidas en su campo.
negrísima reputación, cualidad que no
debe ser desdeñada. Los rumores sobre Pero tras la superlativa gira que sigue
las bacanales con que festejan sus éxitos al lanzamiento de 1984, Roth, deportista,
corren de boca en boca para escándalo de fanático de las artes marciales y aventure-
unos y envidia de otros. La leyenda sigue
hablando del Roth perseguido por miles ro impenitente, se embarca en un safari
de madres solteras que le imputan la pa- por Latinoamérica y regresa con la idea de
ternidad de sus hijos, y recuerda su estan- grabar cuatro versiones de temas más o
cia en un rancho para adolescentes pro- menos clásicos, que no encontraron cabi-
blemáticos y sus tres años de tratamiento da en los discos del grupo. El resultado es
psiquiátrico. Sus discos son consecuentes Crazy from the heart, su primer disco en
con las habladurías: Roth alardea de no
solitario, que conduce al cantante a divor-
ciarse de los Van Halen. Su primer disco
grande, Eat 'em and smile (1986), ha tenido
una acogida tibia, señal de que gran parte
de sus seguidores lo preferían en su anti-
guo puesto. El mismo año, sus ex compa-
ñeros lo sustituyen por Sammy Hagar, es-
trella por méritos propios, con toda una
carrera a sus espaldas, pero el disco 5150
no ha logrado aceptación general.

Hasta aquí llega la apabullante trayec-
toria de un grupo a la vez divertido, brutal
e imaginativo. Un nombre imprescindible
para captar la dimensión circense del rock
en sus últimos años.

"EL 'HE AVY' HA VUELTO PORQUE LA GENTE ESTÁ HARTA DE `PUNK', `REGGAE'
Y ESAS COSAS PROMOVIDAS POR LA RADIO Y LA PRENSA" (Ozzy Osburne, 1981)

Aerosmith prosperaron añadiendo de coches, carteles disputados y un ina-
volumen y exhibicionismo a un barcable mercado paralelo (pulseras, re-
maches y demás parafernalia identificati-
sonido basado en los Rolling Stones. va) y, ¿por qué no?, sueños húmedos (Joe
Tempest, Bon Jovi) o de gloria. Éstos son
algunos de los responsables.

Aerosmith. Pura fotocopia de Mick Jag-
ger, su cantante, Steven Tyler (1948), es-
grimía idéntica entonación y chulería. Y
hasta los mismos labios saltones. Arran-
caron de Boston, y su Toys in the attic
(1975) los elevó a estrellas de platino con
su mortífero cóctel de riffs stonianos y me-
lodías perversas. Pero el éxito y las giras
se llevaron la inspiración y las ventas. Joe
Perry se largó por su cuenta, seguido al
poco por Brad Whitford, el otro guitarra.
Su bastardización del Come together, de
los Beatles, en el filme Sgt. Pepper es sim-
plemente antológica.

Anthrax. La tendencia hard-core. Quinteto
neoyorquino de última hornada, se ven-
gan de la sociedad con un baño frenético
de ruido.

Los brillos ambiguos y April Wine. Son canadienses (Montreal).
travestidos del glam también Dirigidos por Myles Goodwyn, llevan 15
disponen hoy de su años en activo, y su docena de álbumes es
equivalente metálico, réplicas una lección práctica sobre la adaptación
de Kiss o Sweet. Es en Los del género al medio: de la crudeza primiti-
Ángeles donde más prolifera. va al plexiglás sofisticado y los estribillos
De allí surgieron Motley Crue, A. O. R.
con unas pintas de pecado
mortal, y Cinderella, un lujo OS SEÑORES Argent. Reunidos en 1969 por Rod Argent
macarra de cardados y (teclista de Zombies, 1945), se movían en-
pañuelos colgantes. Los más DEL RUIDO tre la pompa y los ganchos melódicos. Su
gamberros del cutre-lux son único gran éxito fue Hold your head up
Twisted Sister. Entre las JOSÉ M. REY (1972), y su mayor mérito, descubrir a
últimas hornadas de fantasía se Russ Ballard, guitarra cantante que prefi-
cuentan Stryper, pura Despreciado por la crítica, mal visto so- rió ir por su lado. Ballard ha producido a
bisutería, y los mejores, Poison, cialmente, el heavy ha superado, no obs-
con música realmente tante, la erosión de los tiempos. Ahí está, Leo Sayer y Roger Daltrey, y ha surtido de
venenosa. En Europa hay en lo alto de las listas, todavía vendiendo canciones a artistas tan diversos como
réplicas finlandesas (Hanoi desafío estereotipado. Claro que poco Santana o Miguel Bosé. El grupo sobrevi-
Rocks) y suecas (Easy Action). queda, en la sonrisa dentífrica de caras vió hasta 1976. Ahora, Rod se dedica a su
nuevas como Europe, del primitivo ani- tienda de instrumentos y hace escasas gra-
malismo de los Stooges. Pero, con sus baciones individuales.
cambios de plumaje, el esquema permane-
ce: poder, virilidad, volumen. Nacido al fi- Bachman Turner Overdrive. El heavy mor-
nal de los sesenta, el heavy fue eclipsado món. Pese a su imagen de leñadores y su
sólo levemente por los rupturistas presu- moral rígida, fueron la más famosa agru-
puestos de 1977 (punk; new wave), para re- pación canadiense de los setenta. Sus can-
surgir con su nueva ola a principios de ciones ágiles de rock obstinado han queda-
esta década. do como un millonario precedente del
A. O. R. Tras el fogonazo internacional de
Lleva casi 20 años suministrando fan- los Guess Who (American woman), un ál-
tasías épicas para colmar esa ansiedad he- bum propio y dos como Brave Belt, Randy
roica de la adolescencia (y cuantiosos in- Bachman (1943), sus hermanos menores
gresos a la industria del disco). Eso lo ha (Tim y Robbie) y su compinche Fred Tur-
convertido en uno de los género más pe-
rennes y recurridos. Por ello, a pesar del
uniforme sonoro, es posible la diversidad:
politizados, sinfónicos, satánicos, humor,
sexo y sangre. El heavy sigue acaparando
portadas, fondos musicales para anuncios

"PARA LOS CRÍTICOS, LO NUESTRO SON CLISÉS. PERO ES NOVEDAD PARA
LOS CHAVALES. Y ÉSOS SON LOS QUE PAGAN" (Jon Bon Jovi, 1987)

ner forman B. T. O. y aguantan estoica- entonces no se El heavy de grupos como Bon Jovi
mente la negativa de 25 compañías. Mer- han apeado de -en la foto, uno de sus miembros-
cury se llevó el pastel. Su paseo triunfal no ellas, a pesar de bate récords de ventas en EE UU.
cesó hasta la marcha en solitario de las crisis. Tras in-
Randy, que formará Ironhouse y Union. fructuosa puesta El heavy metal es un lenguaje
En 1986 se reunieron de nuevo. al día, Ozzy aca-
bó yéndose universal. Los alemanes
Bad Company. Nacieron como superestre- (1979), siendo Scorpions no son los únicos
llas. Paul Rodgers (voz, 1949) y Simon sustituido por en triunfar fuera de casa.
Kirke (batería, 1950) eran la mitad de Ronnie Dio y más Accept, también alemanes,
Free. Surgidos en 1968, su blues-rock emo- tarde por lan Gi- son la más reciente revelación
cional, su azarosa biografia y la muerte llan. Ward tam- i nternacional. Los suizos
trágica de Paul Kossof (1976) convirtie- bién huyó. Pero el Krokus actúan regularmente en
ron a Free en grupo mítico. De crucial Sabbath aún ejer- Estados Unidos. Los
trascendencia, con temas como All right ce como reliquia australianos Rose Tatoo
now, su tensión contenida y desesperación de cartón piedra pasearon sus tatuajes por
vocal sirvieron de argumento a Bad Co. medio mundo. Los franceses de
La elegancia aplastante de Mick Ralphs en nuevos discos Trust llegaron al Festival de
(ex Mott the Hoople) sustituirá a la tortu- de inercia ram- Reading. Vic Vergat, italiano, ha
ra guitarrística de Kossof junto al bajo só- plona. teloneado fuera a estrellas
lido de Boz Burrell (ex King Crimson). i mportantes. El toque japonés
Bad Co. grabaron su debú homónimo en Blue Oyster Cult. l o ponen Bow Wow, y, en el
10 días. Al poco tiempo, eran número uno El heavy intelec- caso español, Barón Rojo, con
internacional con Cant't get enough (1974). tual. En una épo- gran éxito crítico en sus
Era el mejor disco de Free. Los siguientes ca dada a lo eso- visitas británicas.
continuaron la receta y las ventas millona- térico, aparecie-
rias hasta que la rutina se los llevó en ron en 1970 con
1983. un enigmático
cargamento de
Black Sabbath. La misa negra. Odiados claves oscuras y
por la crítica, vendieron millones de dis- simbología fascis-
cos convocando a macarras, hippies, hor- toide. Su logoti-
teras de discoteca y curiosos. Todos se pu- po, el signo mito-
sieron de acuerdo: eran impresionantes. lógico de Cronos,
Su ingeniosa mascarada de imágenes so- presidía la metró-
brecogedoras, sonido catafáltico y abuso polis geométrica
de graves y volumen inauguró el rock góti- de su primera
co, un subgénero probadamente inmune a portada. Mera su
tiempo y modas. perchería imitadora. Fabulada por su gurú
(el crítico Sandy Pearlman), tan borgiana
Era simple rock-blues deformado por imaginería no era sino excusa para sus
una apisonadora. Pero su efectista trucu- descargas metálicas: riffs inflamados, me-
lencia, truenos, cruces, amenazas guita- lodía sugerente y ductilidad instrumental.
rreras y la voz maligna de Ozzy Osbourne Rock neoyorquino precursor de Spring-
(1948), junto a una serie de pasmosas can- steen o Patti Smith, colaboradora even-
ciones, sembró furor en la América ado- tual del quinteto cuando era novia de su
lescente. Realizaron docenas de giras. teclista, Allen Lanier.
Cuando el truco estuvo visto se desmarca-
ron del supuesto satanismo y se pasaron a Tommy Bolín. Un caso desgraciado. Des-
los apocalipsis. Grupo de elepés, sus cinco tinado a ser el gran guitarrista de los se-
primeros son clásicos indispensables del tenta, sólo llegó a hacer suplencias. Tocó
género. A la larga han sido el grupo más en los peores discos de James Gang; en el
imitado. más discutido de Deep Purple (Come taste
the band), y su primera aventura (Te~
Compañeros de escuela, Ozzy, Tony fue un fracaso. Adiestrado en grupos de
Iommy (guitarra, 1951), Geezer Butler blues, frecuenta el jazz-rock neoyorquino
(bajo, 1949) y Bill Ward (batería, 1948) hasta que Joe Walsh le recomienda a Ja-
eran, antes de la posesión, chicos normales mes Gang (1973). Sus mejores trabajos se
de Birmingham. Se llamaban Earth y ha- encuentran en discos ajenos. Sus relam-
cían pop en la onda de los Move. Un año pagueantes solos en el Spectmm de Billy
después (1969), ya como Black Sabbath, Cobham deslumbraron a críticos y profa-
entran en las listas con Evil woman. Desde nos, y cuando por fin canaliza su genio en
Private eyes, muere, a causa de una sobre-
dosis de heroína, el 4 de diciembre de
1976. Tenía 26 años.

"ME GUSTA EL `COUNTRY', EL VIEJO `ROCK', LAS CANCIONES DE AMOR...
PERO NOS PIDEN LO OTRO, LO DE SIEMPRE" (Francis Rossi, Status Quo, 1984)

El grupo ¡ron Maiden, cabecera de la Rick Derringer. La cara bonita. Estrella
nueva ola del heavy metal británico. adolescente en los sesenta (McCoys) y ex-
perimentador ignorado, Rick es autor de
electrizantes canciones. Mejor como cata-
lizador que en solitario, los hermanos
Winter le deben sus mejores momentos:
And y Live (los álbumes pop de Johnny
Winter, con Rick de productor y guitarra).
Sus primeros discos se movían con entu-
siasmo entre los estribillos audaces y el
rock enérgico. Desanimado, formó Derrin-
ger, su banda de heavy pop. Momento
oportuno, pero canciones flojas. Mientras
las nuevas generaciones fagocitan sus
ideas, él anda sin contrato.

Dio. Harto de papeles secundarios, Ron-
nie James Dio funda en 1983 el supergru-
po heavy de la temporada. Diminuto y ma-
lencarado, Ronnie ostenta un pedigrí de
primera. Gritador temperamental en
ELF, Rainbow y Black Sabbath, Dio re-
coge lo mejor y lo peor de la década y a
alguno de sus supervivientes. Mitología y
grandiosidad repartidas en cuatro capítu-
los de inesperado nervio.

La cuestión es mantener Bon Jovi. Carne joven. Emergieron en 1983 Europe. Son guapos y suecos. De modales
la excitación. Tanto en los en el vagón de cola del nuevo heavy e ilus- suaves. Visten con distinción y no salen de
discos como en los tran la mutación del género: de la agresión la peluquería. Antes de ellos, el heavy era
escenarios, sólo usamos al hedonismo. Son todo imagen. Sexo tier- cosa de hombres, pero gracias a Joe Tem-
guitarras y batería. Nos no. Maliciosos guiños de lujuria adolescente pest, su líder, ahora interesa más a las ni-
negamos a progresar, a meter servidos en sólidas canciones y lujosa factu- ñas. Para colmo, componen sólidas piezas
sintetizadores. Lo podríamos ra. Liderado por Jon Bon Jovi, el quinteto de anestesia teclística. Con su álbum Final
hacer, pero eso ya no es rock. barre en 1987 en Estados Unidos con su ál- countdown y sus vídeos han arrasado los
Lo mismo con tipos como bum Slippery when weet. La réplica norte- bolsillos y los corazones de miles de
Eddie van Halen. Debería americana y heavy a Duran Duran. europeas.
ensayar en casa, no en el
escenario: quiere demostrar Budgie. La serie B. Típica formación de Foghat. Los emigrantes. Fugitivos del Sa-
que es un virtuoso. Y tal vez lo carretera que nunca encontró su hueco. voy Brown (1971), Dave Peverett y sus
sea, pero es como esos chicos Sobrevivieron gracias a sus constantes gi- tres cómplices desarrollan sus básicos
del colegio que presumen de ras por Estados Unidos, avaladas por el blues con gotas metálicas. En disco eran
lo mucho que saben. No tiene moderado impacto de In for the kilt y sus sositos: ritmos batalladores y zigzagueos
nada que ver con el rock and fogosos ri ffs de boogie metalizado y ador- de rutina. Pero en directo arrollaban.
rol¡". nado con portadas de Roger Dean. En Mientras en su Reino Unido nadie les co-
1978, Tony Bourge, su líder, tiró la toalla. nocía, en Norteamérica corrían en la pri-
Angus Young, AC/DC, 1984. Pero los otros reactivaron el trío. merísima división de conciertos, con dis-
cos de oro y platino (Foolfor the city). Con-
Def Leppard. Volumen bonito. Comenza- tinuaron la buena racha hasta entrados
ron en Sheflield (1978) con un Ep indepen- los años ochenta.
diente dentro de la nueva ola del heavy bri-
tánico. Apuestos y jovenzuelos, sabían lo Foreigner. Venerables segundones, irrum-
que querían: el mercado norteamericano. pieron en medio de la fiebre disco (1977)
El sonido imperativo, la arrogancia juvenil con una sofisticada revisión teclistica de
y sus melodías elegantes de On through the Bad Company. Piezas densas de pulso
night los convirtió automáticamente en es- comprimido y clímax elegante. Los padres
trellas millonarias. Rick Allen, su batería, de la criatura eran Ian McDonald (ex
perdió el brazo en un accidente de coche, King Crimson) y Mike Jones, rezagado
pero su tenacidad ganó y aún sigue mar- guitarrista con extenso curriculum. Lentos
cando el ritmo. pero seguros, entre deserciones y transfu-

"SI EL `SHOW' NO TE DIVIERTE O MI MÚSICA ES DEMASIADO FUERTE
PARA TUS OÍDOS, ES QUE ERES DEMASIADO VIEJO" (Ted Nugent)

Arriba, las
Runaways
californianas,
que abrieron el
rock a los
grupos femeninos
de sonido duro.
A su derecha, el
grupo Mountain
(Leslie West, en el
centro); fue una
de las primeras
respuestas
norteamericanas
al heavy metal
británico. Los
británicos Uriah
Heep (en el centro)
se
caracterizaban
por sus
apocalipsis
rítmicos y
batallas
i nstrumentales.
Debajo, Saxon,
uno de l os
nombres
principales de la
ll amada nueva ola
del heavy metal
británico. A la
derecha, una
i magen de jungla
de Ted Nugent.

"MOTORHEAD NO TIENE SECRETOS. TOCAMOS MÁS DURO, MÁS PESADO,
MÁS FUERTE Y MÁS RÁPIDO QUE NADIE" (Lemmy, 1979)

Judas Priest nacieron como banda el chiste fácil de la crítica, pero batieron
apocalíptica, pero ahora prefieren la récords de audiencia. Cuando la fiesta ter-
minó (1976), Farner montó un negocio de
estética del cuero. energía alternativa y un par de discos tor-
pes, hasta que en 1981 se reunieron tem-
poralmente.

Sammy Hagar. Sammy (1949) era la voz
de fuego que rugía en el primer Montrose.
Hijo de un boxeador y chico ambicioso, se
independiza en 1975 para conducir su
propia banda. Balance: 10 discos. Del
heavy indómito al A. O. R. templado. Fi-
nalmente entró en Van Halen.

Los festivales multitudinarios siones tecno (Tom Dolby, en Urgent), han Iron Maiden. Cabecera de la nueva ola de
son parte esencial de la liturgia vendido más de 20 millones de discos. metal británico, nadie ha conjurado como
heavy. Es la herencia de la era ellos los fantasmas del pasado: energía,
hippy. Miles de personas que Ian Gillan. En 1975, la garganta ululante técnica y épica mitológica. Riffs reencar-
apenas divisan a sus héroes de Deep Purple regresa con una banda de nados y melodías agraciadas esquivando
entre un fragor sonoro, músicos ilustres, vendiendo desastroso cambios de ritmo y lances a dos guitarras.
experimentan la ilusión heavy progresivo. Relegado al circuito eu- Llevan nombre de tortura medieval, y el
ecuménica de la afirmación ropeo y japonés, a partir de 1978 renueva horrible monstruo de sus portadas es po-
tribal. Práctica corriente en su sonido con mayor espoleo rítmico y jó- pular en todo el mundo. Coetáneos del
Estados Unidos, en Europa venes guitarristas. Sin embargo, su cre- punk (1976), rompieron aguas en Londres
florecen en verano. También ciente éxito en el Reino Unido no alcanza con Steve Harris (bajo) al timón; tiempos
en esto el Reino Unido marca la a Estados Unidos, y en 1982 abandona duros recogidos en un disco independien-
pauta. Estrictamente una vez más. Inesperadamente, en 1984 te tras el que entran en la nómina de EMI.
ingresa en Black Sabbath, y dos años más Han sufrido bajas originales, pero conti-
metálicos, los festivales de tarde accede a la resurrección de Deep núan entre el fragor de las giras con los
Reading y Donington se Purple. gritos compulsivos de Bruce Dickinson y
su antigua prestancia algo abollada.
celebran allí. Son los de mayor Golden Earring. Camaleones holandeses.
repercusión y rivalizan en Bajo la guía de George Kooymans (1948) Judas Priest. El metal frío. Iban de acóli-
grandes nombres y en nuevas se han sacudido el polvo de dos décadas.
promesas que acceden a su Son de La Haya y han probado todo: el tos de Black Sabbath (Sad wings of des-
soñada oportunidad. pop de confitería, las semillas hippies, el
hard rock, las giras norteamericanas y, ac- tiny) hasta que Rob Halford, su'cantante,
tualmente, la curiosidad por los sonidos descubrió la peligrosa atracción del públi-
contemporáneos. El telepático sprint de co por su nueva imagen: uniformes seudo-
Radar love (1974) fue su gran hazaña inter- nazis, cuero sadomasoca y violencia urba-
nacional. na. Crecidos entre los dinosaurios y la
nueva generación metálica, son hoy máxi-
Grand Funk Railroad. El noble salvaje.
Antes que Ted Nugent, Mark Farner ma atracción del género, y su estética ha
(1948), su guitarra vocalista, ya iba de fie- sido copiada por bandas como Accept.
ra primitiva a pecho descubierto. Trío za- También sus súbitos cambios de voz. Las
guero de Flint (Michigan, 1969), fueron la letras son machistas y la música tópica,
más tópica banda norteamericana de los pero saben construir canciones coreables
setenta. Derrochaban sudor y entrega ca- entre la vorágine eléctrica de sus imbati-
fre entre versiones crudas y feroces guita- bles guitarristas.
rreos. Música bruta pero eficaz. Diseña-
ron el modelo a seguir: monstruosas giras Kiss. Son un comic. Llegaron en 1973
y discos sin parar. Registraron una docena como la mayor extravagancia del rock. Es-
de álbumes, casi todos de gran éxito. Eran cupían sangre. Echaban fuego. Y hacían
explosiones nucleares, sirenas, mientras
Gene Simmonds movía una viscosa len-
gua. Nadie podía fotografiarles sin el ma-
quillaje. Todo un montaje traducido en 30
millones de discos. Tipos normales, Sim-
monds ejercía de maestro cuando inició la
banda. Era música convencional que fue
adaptándose de los zapatos de plataforma

"NO VAMOS DE ARTISTAS. SALIMOS AL ESCENARIO Y NOS DIVERTIMOS
CON 10.000 AMIGOS ÍNTIMOS" (Alex van Halen, 1983)

(Dressed to kill) al pop (Shandy), los tiznes Scorpions han sabido combinar las
negroides (I was made for lovin'you) o el baladas para todos los públicos con un
A. O. R. (The elder). Fenómeno social, sus
fans formaban el Kiss Army. La casa Mar- rock machacador.
vel editó un tebeo suyo cuya tinta llevaba
sangre auténtica de los músicos, e inspira-
ron una película de dibujos. Ya en los
ochenta, cuando concluyó la función, se
quitaron la máscara y siguieron con dis-
creción.

Metallica. Motorhead en versión norte-
americana. Su bajista, Cliff Burton, murió
en accidente durante una gira escandina-
va (1986).

Ronnie Montrose. El Jeff Beck california-
no. Dueño de fulgurante técnica y reputa-
ción polifacética (Van Morrison, Edgar
Winter), Ronnie fundó Montrose en 1972.
Bad motor scooter echaba chispas de ener-
gía vulcanizada. Eran como MC5 en fino y
con canciones. Perdido el contrapunto de
Sammy Hagar, el incendio remitió. Ron-
nie se enroló en flirtreos experimentales e
inauguró el tecno-heavy con Gamma.

Gary Moore. El heavy inteligente. Su es- ría) se unen al propio Jack Bruce en otro I espíritu de Jimi Hendrix
belta combinación de impacto metálico y coyuntural supertrío. Mick Jagger toca
guante pop es la respuesta perfecta a las guitarra en The great fatsby, de West, en suele comunicarse a través del
nuevas exigencias. Impresionante guita- solitario. Mountain resucitaría varias ve- i nstrumento de algunos
rrista, conserva reflejos y capacidad de ces con o sin Pappalardi, que fue asesina- metálicos famosos. El
sorpresa. Escoge con gusto sus versiones do por su mujer en 1983. canadiense Frank Marino
y evita los solos superfluos. A los 16 años, asegura que Hendrix se le
en Dublín, ya andaba con los experimen- Nazareth. Son escoceses y uno de los po- apareció estando en coma.
tales Skid Row. Prestó servicios en Thin cos grupos heavy con éxito en las emisoras Su trío, Mahogany Rush,
Lizzy y, tras dos discos propios, dirigió no especializadas. Nacen en 1969, cuando explora desde entonces las
G Force, prólogo a su actual estrellato. Manny Charlton, un versátil guitarrista, nebulosas del maestro. Otro
se une a los Shadettes de Dan McCafferty místico es Ulrich Roth, que
Motorhead. Los kamikazes. Su alma máter (voz). Siempre han mostrado inusual dejó Scorpions para afrontar
es Ian Kilmister, alias Lemmy, bajista y atracción por los sonidos californianos y l os dictados eléctricos de
rugidor sincero, obsesionado por los bom- las composiciones de folkies como Bob Jimi. Y no hay que olvidar a
bardeos caóticos. Ex roadie de Hendrix, Dylan y Joni Mitchell. Sin embargo, no to- Robin Trower (ex Procol
compartió los descarríos psicocósmicos marían América hasta Fool circle (1981), Harum), más técnico que
de Hawkwind hasta que le expulsaron. ya en pleno A. O. R. espiritual, que logró sin
Desde 1975, Lemmy ha mantenido Mo- embargo, en los años
torhead en marcha a través de diferentes Ted Nugent. La bestia. Su taparrabos de setenta, una tremenda
encarnaciones. depredador cavernícola y su acoso eléctri- reputación a base de
co le hicieron enormemente popular en los reencarnaciones hendrixianas.
Mountain. Los Cream neoyorquinos. Su setenta. Espectacular guitarrero, creó es-
bajista, Felix Pappalardi (1939), era preci-
samente el productor de Cream, y Leslie cuela con sus ri ffs tercos y metal afilado. Y
West (1945), la réplica guitarrística de
Clapton. Ambos grababan el álbum también una tremenda publicidad gracias
Mountain cuando el trío británico se divor- a su comportamiento: caza sus propios
ció. Añadieron un órgano y corpulencia alimentos, es fanático de las armas, sexis-
para capitalizar la ausencia. Debutaron ta en sus letras y reaccionario en general.
con Climbling (1970), su instante de mayor Hoy suena más civilizado, pero sin la inspi-
gloria, que luego perderían en veleidades ración de antaño.
progresivas. En 1972, West y Laing (bate-

Ozzy Osbourne. El desvarío. Evadido de
Black Sabbath, Ozzy reapareció con una
estilizada puesta al día de sus viejas tru-
cuencias. En Los Ángeles descubrió a
Randy Rhoads, excepcional guitarrista
que introduce figuras barrocas (Vivaldi)
entre las erupciones eléctricas de su nota-

"¡NO NOS LLAMES 'HEAVY' ESO ES UN CHISTE, UNA POSE. HACEMOS
` ROCK' COMO LOS STONES, 'ROCK' Y NADA MÁS" (Eddie van Halen, 1983)

Desde 1982, Wasp se esfuerzan por Thin Lizzy. Venían de Dublín. Su negro lí-
aumentar la carga provocadora del der, Phil Lynott, borboteaba con voz hú-
meda canciones enérgicas. Y su música,
rock and roll. aunque tapizada de formalismo heavy, te-
nía ligereza pop y amplitud de miras. For-
ble debú, Blizzard mó Lizzy con Brian Downey en 1970. Wis-
key in ajar (1973) les dio el primer empu-
of Ozz (1980). jón, seguido de un profuso baile de músi-
cos y elepés superventas. Lynott moriría
Rhoads moriría por sobredosis en 1986.
en accidente al
año siguiente, UFO. Herederos de Free, exhibían un en-
pero Ozzy conti- tusiasmo febril del que Bad Company ca-
núa cosechando recían. Nervio de acero y sensibilidad pop
éxitos y escánda- envuelto en portadas con una extraña fija-
los publicitarios. ción por las cañerías. Comandados por
Phil Moog (voz, 1951) y Pete Way (bajo),
Quiet Riot. Gua- como cuarteto progresivo tuvieron en sus
pitos de Los Án- primeros tiempos más éxito en Europa y
geles, famosos en Japón que en su Reino Unido natal. Tras
vídeo por sus ver- varios cambios, desaparecen en 1984.
siones de Slade.
Era el grupo del
malogrado Randy
Rhoads (Ozzy).

En un género habitualmente Rush. Los reyes Uriah Heep. Durante sus buenos años
masculino, pocas chicas han del heavy-ficción. (1972-1975), América tembló con su pre-
AlopgarartdeodhealcaesrsReunuanwhauyesc,o. Son de Toronto tencioso espejo de los excesos de la época
Girschool son el ejemplo más (1969) y han na- de estos británicos. El órgano tremebundo
ilustre: duras, inspiradas y vegado desde el de Ken Hensley (1945) y el melodrama
buenas instrumentistas. Zeppelin acústico gritón de David Byron (1947) se abrían
Luego está Lee Aaron, beldad al atletismo de paso entre apocalipsis rítmicos y profusas
canadiense, cada día más Police (Moving batallas instrumentales. Adoptaron el
sofisticada. Dos de las pictures). nombre del malévolo personaje de Dic-
miembros del trío londinense kens, y Roger Dean les dibujó portadas.
Rock Goddes eran hermanas. Saxon. La tor- Su biografia es un incesante tráfico de
De las Runaways salió Lita menta. Versión nombres repartidos en 17 discos. También
Ford, con más técnica pero turbo de Judas hay muertos: Gary Thain (1976) y Byron
menos suerte que su ex Priest, descerra- (1984), ambos expulsados. Sólo Mick Box
compañera Joan Jett. jan supersónicos permanece aún con el nombre.
duelos de guita-
rras entre una Whitesnake. Tras imitar los aullidos de
desbocada loco- Ian Gillan en los tres últimos años de
motora rítmica. Deep Purple, David Coverdale, escama-
Tienen un vigoro- do, se abre camino en plan modesto con
so vocalista (Biff una banda que recupera la tensión de Free
Byford) y un inventario surtido de clichés y el vigor del blues británico. Whitesnake
de supervivencia urbana que han amaina- le descubre como vocalista cálido e inspi-
do hacia el A. O. R. rado compositor. Con ayuda de inteligen-
tes artesanos (Mick Moody), la ulterior
Scorpions. Acero alemán. Pese a sus fluc- repesca de algunos músicos purpúreos y la
tuaciones internas, han logrado estable- acogida ferviente a elepés como Come and
cerse como primera potencia del género. get it (1981), el grupo alcanza la primera
Salieron de Hannover en 1971 con el nu- división.
cleo de los hermanos Schenker (Michael y
Rudolph) y su chillador, Klaus Meine. Sus WASP. Los carroñeros. Arrojan carne
filas han albergado a extraordinarios gui- cruda al público entre orgías cavernícolas
tarristas: Michael, traspasado a UFO; Ul- de humo y volumen. Llevan brazaletes
rich Roth, un zíngaro hendrixiano, y Mat- con sierras, cadenas y cueros. Toda una
hias Jabs. Su fase más creativa se recoge patraña de sexo y violencia explotada por
en Tokio tape (1979). Blackie Lawless y otros tres listos de Los
Ángeles. Las feministas les odian y son el
Status Quo. No son heavy, pero durante 15 escándalo último del circo del rock.
años (llevan más de dos décadas en acti-
vo) han agitado sus melenas con sus tras-
nochados vaqueros e infalible receta de
boogie pegajoso. Francis Rossi (guitarra,
1949), Rick Parfitt (guitarra, 1948), Alan
Lancaster (bajo, 1949) y John Coughlan
(batería, 1946).


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