Libro v1 (baja)

superficies de ambas porciones no se tomaron en cuenta (no se sumó ni restó según el caso), para el cálculo
de la superficie total de la Sierra de Las Minas, pensando en que las carreteras en cuestión son a largo plazo
menos susceptibles de sufrir variaciones significativas en su trayecto, comparándolas especialmente con esos
grandes ríos.

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En cuanto a la extensión territorial la SM3 posee Los restantes 2074 kilómetros cuadrados (42.42%)
unos 4889 kilómetros cuadrados, de los cuales unos corresponden a la parte más desconocida de la sierra,
2815 (57.58%) son más o menos conocidos y más donde aún existen grandes extensiones de montaña
o menos habitados, aun cuando las comunidades que no han sido pisadas por persona alguna, lugares
más alejadas están un poco dispersas o aisladas. alejados hasta 20-25 kilómetros de las comunidades

3Para obtener esta cifra, se dibujó el polígono de la sierra y el área se calculó por medio del Programa Arc Gis, formato PDF, por el cartógrafo Leo Tebalán,
del Instituto Geográfico Nacional (IGN). Haciendo el debido énfasis en que esta medición se hace sobre la superficie “plana” de la sierra, sin tomar en
cuenta lo accidentado de la topografía que presenta esta montaña, como son las múltiples elevaciones, depresiones y curvas, que por supuesto “amplían” muy
significativamente la extensión territorial total, hasta en varias centenas de kilómetros cuadrados de dicha SM.

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más cercanas, las cuales a su vez pueden estar a 15-25 los más conocidos y habitados. En el tercio central
km de la carretera CA9, pudiéndose acceder a ellas está la parte más desconocida y los parajes más
solo en vehículos 4X4, lo cual en época de invierno recónditos y prístinos de la montaña, es la parte
a veces es imposible. Algo similar ocurre a lo largo misteriosa o mágica de la sierra, con bellas cataratas,
de la cuenca del río Polochic (carretera 7A), aunque las cimas más altas, selvas inextricables, hermosos
aquí las comunidades están mucho más cerca del ríos no contaminados aún, y donde todavía pueden
río, porque las laderas de la SM son más agrestes, en encontrarse fauna y flora naturalmente protegidas;
algunas partes en forma de infranqueables farallones esta es la parte de la SM que ha sido de nuestro
o acantilados. particular interés, caminándolo en los últimos 25
años. Este mismo tercio central de la sierra de 50 km
Para tener una idea de cómo poder distribuir de largo de montaña, desde el cerro Pinalón al cerro
geográficamente estas áreas de la sierra, dividiremos El Picudo, corresponde a 66 km de distancia sobre la
sus 165 km de largo en tercios de norte a sur, que carretera CA9 desde un punto cercano a la entrada a
correspondan a las áreas más y menos pobladas, así San Agustín Acasaguastlán (kilómetro 90) a otro en
el tercio occidental abarca 37 km desde la cumbre de el kilómetro 156, a tres km de la entrada a la aldea
Santa Elena, Morazán y El Rancho, al cerro Pinalón; Santiago, en jurisdicción de río Hondo, Zacapa,
el tercio central de 50 km, del cerro Pinalón (El comparación equivalente, que tendrá importancia
Progreso), al cerro El Picudo (Zacapa), y el tercio cuando más adelante en un capítulo aparte, hagamos
oriental de 78 km desde el cerro El Picudo (Zacapa), la narrativa de la Travesía de la Sierra de Las Minas.
al cruce de La Ruidosa y el Río Dulce (Izabal). De los (ver croquis n° 1)
tres tercios, los dos de los extremos corresponden a

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Es importante mencionar que la población que autóctono en su mayor parte. Esta diferencia de raza
habita la SM es etnológicamente diferente según también hace diferencia en cuanto a la posibilidad
la región que se analice, así: si se toma la vertiente de socializar con los habitantes, y derivado de eso,
suroriental hasta la ribera del Río del Motagua que es la posibilidad de incursionar más o menos con
la más extensa, poblada e importante, está habitada confianza y seguridad por esas mismas regiones de la
casi totalmente por población mestiza o ladina de sierra. Los pobladores del noroccidente son hostiles,
origen español, con rasgos bien definidos como de ríspida personalidad, no confiables y muy poco
piel blanca, muchos con ojos claros y tendencia a hospitalarios, que se abrogan derechos sobre las
estaturas promedio alto y hablando idioma español. montañas que no les corresponden; los pobladores
Por otro lado, la población que habita la vertiente del suroriente por el contrario son amables, francos,
noroccidental hacia la cuenca del Río Polochic, es hospitalarios y confiables. Más adelante un capítulo
en su gran mayoría de origen indígena K´ekchí, de aparte de esta misma serie, estará dedicado a estos
piel morena, de baja estatura y hablando su idioma últimos con agradecimiento, admiración y respeto.

¿Cómo acceder a la Sierra de Las Minas?

Para acceder a la SM existen una serie de entradas 5°) Por Llano Grande (kilómetro 123), para
principales a lo largo de las carreteras que a manera llegar a las cascadas de Santa Rosalía Mármol,
de enorme anillo periférico la circundan, así: a los cerros: El Chifle, El Cerrón, El Tablero o
Revolcadero, El Mojón de Joya de Bueyes, La
A) POR LA CARRETERA CA9 (AL ATLÁNTICO) Peña Rajada, el Cenagal, y para las caminatas
DE OCCIDENTE A ORIENTE, puede ingresarse de Santa Rosalía -Cañón de Teculután y Santa
por: Rosalía- al cerro Mármol y hacia el nacimiento
del río Repollal. Además, por aquí también puede
1°) Por El Rancho (kilómetro 85), para llegar al llegarse a las canteras de San Lorenzo Mármol.
cerro de la Muerte.
6°) Por río Hondo (kilómetro 126), se puede
2°) Por San Agustín Acasaguastlán (kilómetro subir a la Finca Alejandría y ascender El Volcán
87), para ascender al cerro Pinalón. (cerro) Palomas, los cerros El Imposible y Santo
Toribio; y es también punto de partida para bajar
3°) Por La estancia de la Virgen (kilómetro 100), de Alejandría a Jones.
por donde se puede alcanzar el filón de la ruta
Pinalón-El Siglo. 7°) Por La Papelera (kilómetro 132), ingreso
también muy importante para La Marmolera de
4°) Por El Jute (kilómetro 111), esta es una San Lorenzo, y destino al cerro El Volcán (cerro)
entrada muy importante porque es acceso común del Mono y las bellas caminatas San Lorenzo -
para muchos destinos en lo alto de la sierra: Para Alejandría, San Lorenzo - Río Agua Fría, San
la ruta Pinalón-El Siglo, para el cerro Bandera Lorenzo - Río Colorado y San Lorenzo - Jones;
Perdida, para el cerro de Mancilla, el De Las así como para ir a las cataratas del río Agua Fría
Pulgas, para la cumbre de La Cucaracha, para y del río colorado.
el cerro 1911, el Mululjá, y para ascender el
emblemático Cerro Raxón.

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8°) Entrada a Jones (kilómetro 135), para el amigo Dr. Alfredo MacKenney, las cuales según
ascenso a los cerros: Colorado, De la Vista, El cuentan -porque nunca lo pude comprobar-,
Zollate, De la Cruz, Tabla de Mesa y Chimilí, fueron dinamitadas y cerradas en tiempo de la
así como para las muy agotadoras caminatas a las guerra interna en Guatemala, y volviéndose
montañas Del Licenciado, del Imposible y a las abrir unos años después.
De Cabrera, caminata Jones - Morán y Jones -
Alejandría, así como para ir también al Volcán 14°) Por la Finca Los Manacales (kilómetro 195),
(cerrro) Palomas y ruta a la catarata del cerro se llega a Los Cerritos y al cerro El Tipón.
Colorado o De Jones.
Estos son los 14 accesos más importantes a lo largo de
9°) Entrada por Santiago (kilómetro 153), la cual la carretera CA9, sin embargo existen innumerables
es también muy importante por la cantidad de entradas que no ascienden mucho de dicha carretera
destinos finales a los que se accede, pues llegando hacia la sierra, son puntos ciegos que carecen de
a Morán como campamento base, se pueden importancia porque no alcanzan más allá de los 450
ascender los cerros: El Portezuelo, El Volcán ms.n.m., todavía en regiones de bosques desérticos.
(cerro) San Jacinto, El Cuchillo y Medio, El
Palmar, El Mojón de San Jacinto, La Cumbre de B) POR LA CARRETERA CA13 A RÍO DULCE,
La Sierra, El Caldero y el también emblemático que inicia en el km 257; este tramo mide
Cerro El Picudo; y quizás lo más significativo, aproximadamente 34 km, corresponde a lo que se
porque este acceso llevó a nuestro Grupo de puede llamar “la colita” suroriental de la SM que solo
Montañismo Tzuul Tak´a, al descubrimiento de mide como 7 km de ancho; y en ella no conocemos
la Catarata que lleva su nombre. ninguna entrada de importancia “montañista”, lo
cual sí es cierto en su prolongación hacia el oriente,
10°) Acceso por El Manzanotal (kilómetro 154), la que corresponde ya a las montañas Del Mico con
por esta entrada se sube al cerro San Antonio y su representativo bello Cerro San GIL.
se puede hacer una bonita caminata hasta llegar a
un lugar llamado Plan del Bote. C) POR LA PRIMERA PARTE DE LA
CARRETERA CA14, de El Rancho a La Cumbre de
11°) Entrada por Mayuelas (kilómetro 164): Por Santa Elena hay varios accesos:
aquí se accede a los cerros: El Cañital, El Mojón del
Cañital y El De Los Siete, preciosas ascensiones 1°) Por la entrada al municipio de Tulumaje y la
en una zona muy apartada de la sierra. aldea Comaja (kilómetro 92), para ascender el
cerro con el mismo nombre de la última y varios
12°) Accediendo por Doña María (kilómetro cerros sin nombre a lo largo de unos 18 km de
188), se llegan a las grutas del mismo nombre, empinados caminos hacia el nororiente, siendo
que aunque no son muy profundas, sí son el más alto uno de 2648 ms.n.m.
interesantes de conocer.
2°) Por el kilómetro 104, entrada a Morazán,
13°) Muy cerca de Quiriguá, aproximadamente para caminar por las montañas del municipio
por el kilómetro 208, está a la orilla de la carretera y conocer el pino más grande que se conoce
la entrada a las hermosas grutas y río subterráneo llamado El Abuelo, el que se encuentra como
de El Silvino, las que tuve la suerte de conocer a 1:30 horas de camino desde la población. Se
allá por el año 1965, en compañía de mi querido pueden efectuar caminatas más largas y ascensos

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a varios cerros sin nombre, aunque el área es 4°) Kilómetro 167 se puede llegar a la catarata
muy calurosa y sin mucho paisaje. Este tramo de Ruam Tzul después de una caminata de solo 35
carretera limita el extremo occidental de la SM, minutos.
entre los departamentos de El Progreso y Baja
Verapaz, una parte muy habitada y por lo tanto 5°) Kilómetro 174 en el municipio de Purulhá:
“agredida por las hachas y motosierras arboricidas por aquí se inicia el ascenso del Cerro Mocohan
de los pobladores”. muy cerca de la población y también se toma el
camino para llegar por otra ruta a la finca San
D) POR EL SIGUIENTE TRAMO DE LA MISMA Rafael y escalar desde allí el cerro Tu Miguel y
CARRETERA CA14, DE LA CUMBRE DE SANTA conocer la Peña Del Ángel (diferente a la que está
ELENA A SAN JULIÁN, hay varios accesos: al ascender el cerro Pinalón).

1°) Por el kilómetro 144 entrada a la aldea 6°) Kilómetro 177 Pantín: desde aquí se inicia el
Chilascó, se puede ir a conocer la hermosa ascenso al cerro del mismo nombre y al Canxul o
cascada del mismo nombre, así como otras dos de La Cruz en cuyas faldas nace el río Cahabón,
más pequeñas por el mismo rumbo; es también formando como a los 400 m de dicho nacimiento
el inicio de la bonita y exigente caminata por una la catarata que se ve desde la carretera, para luego
ruta diferente al cerro Pinalón y el de la larga dirigirse en dirección hacia Cobán.
y agotadora caminata a la finca San Rafael, en
jurisdicción de Purulhá, e ir al lugar conocido E) POR LA CARRETERA 7A DE SAN JULIÁN
como Los Encuentros, donde se unen los ríos AL ESTOR: Por esta ruta se puede acceder a la SM
Panimá y Chilascó, uno más limpio y frío y el solo por cortas distancias ya que la mayor parte de
otro más turbio y caliente respectivamente. Es la cara nororiental de la misma, está flanqueada
por aquí también el inicio de la más exigente por escarpadas y muy inclinadas laderas, algunas
caminata Chilascó-cabañas del Pinalón vía Vega de ellas verdaderas paredes, acantilados o farallones
Larga, la que narraremos más adelante. inextricables, que corresponden a la cara norte de
las cumbres de La Cucaracha, Caquipec, El Raxón,
2°) Por el kilómetro 150 en la aldea Niño Perdido, Santo Toribio, El Picudo, el cerro De Los Siete, y
se puede ascender al cerro El Pitón o Niño otros más sin nombre, a los cuales es prácticamente
Perdido, el cual es muy interesante por el tipo de imposible de acceder por esta vertiente, la que
bosque húmedo y frío, con muchas orquídeas y constituye un verdadero reto para los montañistas,
otras epífitas. Aunque no pertenecen a la SM, por no solo por la gran dificultad que presenta para su
estar situados sobre el lado norte de la carretera, ascenso, sino por lo hostil de las comunidades por
por este mismo punto se pueden ascender los las que hay que pasar en el intento; uno de estos
cerros El Repollal I y El Repollal II. desafíos puede ser el escalar el cerro Santo Toribio
entrando por Telemán (kilómetro 243), a 63 km
3°) Por el kilómetro 162 en la aldea La Unión de San Julián, atravesando luego el río Polochic
Barrios, se inicia el ascenso del cerro Verde, de para llegar a la finca Tinajas y las comunidades:
tan gratos recuerdos para el grupo Tzuul Tak´a, río Chiquito I y II, Peñas Blancas y Santa Bárbara;
por ser uno de los nueve cerros conquistados por cierto comunidades de gente muy hostil y muy
por nosotros, los cuales según nuestras poco amigable para con los foráneos. Poco más
averiguaciones, no habían sido ascendidos jamás allá de Telemán pero sobre la ribera occidental del
por persona alguna.

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Polochic, por la aldea Boca Ancha, se puede acceder al Cerro de la Roca, una formación en forma de agudo
espolón de 1442 ms.n.m. Siguiendo ya el margen occidental del Lago de Izabal por la aldea Selemptín, se
puede ascender al Cerro del mismo nombre de 1032 ms.n.m. (ver croquis n°2)

Estos son los 22 accesos más importantes a la SM, a lo largo de los aproximadamente 542 km de carreteras
y caminos que la circundan, posibles entradas para los trotacerros aventureros, amantes de experiencias
pedestres en esta bella montaña, que estamos seguros pervivirían por siempre en sus memorias.

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Biodiversidad de la Sierra de Las Minas

Con las características que hemos mencionado, Polochic desembocando en el Lago de Izabal, o ver
la SM es la montaña más rica en biodiversidad en el recorrido del Motagua a lo largo del gran valle
flora y fauna de Guatemala, con cientos de biomas del mismo nombre hasta cerca de su desembocadura
o ecosistemas y miles de hábitats, por lo que está en el Golfo de Honduras, ver a lo lejos los volcanes
considerada la reserva de biósfera más importante de Fuego, Agua, Acatenango, las Montañas del
de Guatemala; con sus bosques, selvas y tierras más Merendón y del Espíritu Santo, así como las de la
ubérrimas y la fauna mejor protegida naturalmente, región nor-occidental de Honduras, espectaculares
por lo arcano o recóndito de algunas de sus regiones. e inolvidables amaneceres y atardeceres, noches de
plenilunio o en noches obscuras viendo a través del
Geográficamente no se le conocen volcanes, esto dosel del bosque las miríadas de estrellas y nebulosas.
es debido a que esta sierra se encuentra más allá de Desde esas cimas se pueden ver incontables caseríos,
los 50-60 km de distancia de la cadena volcánica aldeas y pueblos diseminados en la lejanía a los 360°
de la Sierra Madre, que sí es parte del cinturón de de hermosa visión, tanto de día, como durante una
fuego. Sin embargo, siendo todo el continente de maravillosa noche de verano, donde los grupos
origen básicamente volcánico, existe la posibilidad grandes y pequeños de titilantes luces, hacen
que geológicamente algunos de sus elevados y bellos parecer aquel paisaje como un enorme nacimiento
cerros de hasta los 3015 ms.n.m., sí puedan ser de Navidad.
catalogados como volcanes. A propósito de cerros
diremos que en la SM se encuentran unos 100 cerros Por otro lado en la misma SM, están las innumerables
bien definidos que sobresalen por su altura, de los experiencias de contactos cercanos con animales
cuales unos 55 se identifican con nombres propios como: quetzales, pajuiles (el macho llamado pavo
y el resto en su mayoría son desconocidos porque de cacho), y cojolitas, mapaches, pizotes, ardillas,
nadie ha llegado a sus cumbres; en otros, el lograrlo venados, conejos, armadillos, gavilanes, azacuanes,
requiere de gran esfuerzo y sacrificio, porque halcones, taltuzas, tecolotes, lechuzas, coches de
significan de tres a cinco días de arduos ascensos por monte, monos zaraguates o aulladores, ranas y
montañas inexploradas, por lo que la logística y la mariposas de todos tamaños y hermosos colores,
estrategia necesarias para su ascenso son un reto de cangrejos, escarabajos, tarántulas y otras extrañas
planificación, la cual muchas veces no es suficiente arañas e insectos, cientos de pájaros de diferentes
para lograr las cimas. Para formarse una idea del tamaños, bellos colores y canoros trinos como:
grado de dificultad que estos ascensos significan, chejes o carpinteros, guardabarrancos, cenzontles,
baste decir que no hay en Guatemala ascenso a oropéndolas, gorriones, sharas, etc.; variedad de
ninguno de los 38 volcanes oficiales que requiera palomas como la espumuy, cachagina, calentura,
más de 15 horas de caminata efectiva ida y regreso codorníz, perdíz y tortolita; también urracas, garzas,
(sin incluir los períodos de descanso), en contra de correcaminos, pericos, loros, chachalacas y otras, así
21, 24 y hasta 27 horas que toma ascender a la cumbre como cientos de serpientes arbóreas y terrestres, la
de algunos de los cerros en la SM; sacrificio que se gran mayoría no venenosas como la mazacuata, la
ve recompensado con creces al tener la maravillosa sabanera, la zumbadora y la falsa coral, pero algunas
experiencia de poner en la cumbre de esta sierra, un como la cascabel o tzacban, la coral verdadera,
pie en la vertiente del Polochic y otro en la vertiente el cantíl tamagás y el timbo o mano de piedra,
del Motagua, y gozar de las hermosas vistas del río que sí lo son. Aquí quiero hacer un paréntesis a

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propósito de animales en las montañas. Sin temor a En cuanto a la flora de la SM se refiere, es otra
equivocarme, la pregunta que más me han hecho en experiencia muy gratificante y enriquecedora, pues
toda mi “carrera” montañista es: “¿No le da miedo amén de que algunas plantas se pueden comer; se
ser atacado por algún animal en las montañas?”. Por ven, se tocan y se huelen cientos de plantas y flores
los más de 61 años de experiencia personal de andar de todo tamaño, color y forma, desde pequeñísimas
de trotacerros, y la vasta información que se tiene tillandsias, hasta hermosos musgos, bromelias,
al respecto; me permito afirmar sin duda alguna, helechos, líquenes, hongos y por supuesto bellísimas
que no hay animal que deliberadamente ataque al orquídeas de las más hermosas formas y colores;
hombre (por lo menos en nuestro medio), porque su todas ellas en sus propios hábitats, brindando un
instinto de conservación le dice que es precisamente espectáculo maravilloso. Luego están los enormes
al hombre al que hay que temerle, porque es el pinos y encinos de hasta 1.7 m de diámetro y viejos
depredador implacable, el que mata sin que en cipreses y pinabetes de hasta 2 m. Existen grandes
la mayoría de las veces exista razón alguna, mata y centenarios amates literalmente forrados de
porque simplemente la premisa es: “Si es un animal miles de epífitas, especialmente de la comúnmente
hay que matarlo”; y por eso los animales en principio llamada “pashte” (Tillandsia Usneoides), que los
se alejan de él. Todo lo que se dice -en nuestro adornan con enormes cortinajes de hasta 7- 8 m de
medio también-, que por ahí hay un tigre que ataca largo, que son toda una alegoría a su longevidad.
a la gente o que se ha comido como 20 reses, cabras Igualmente existen en la ruta al cerro de Los Siete,
o pelibueyes, son solo fábulas con las que la gente del entrando por Mayuelas, Zacapa; un pequeño
campo da rienda suelta a su imaginación; lo mismo bosque de centenarios liquidámbares (Liquidámbar
sucede con el cuento de que hay unas serpientes que Stiraciflua), algunos de los cuales miden 2.5 m y
siguen a las personas para morderlas, que siguen la más de diámetro y unos 60 m de altura, verdaderos
luz de las linternas o que se suben a la cama de las monumentos al reino vegetal, solo superados en
madres lactantes para lactar, etc., etc. Las serpientes nuestro país por los Cipreses Sabinos (Taxodium
muerden porque las personas invaden su territorio, Mucronatum) ó Ahuehuetes (de ahí el nombre
hasta que están al alcance de ellas, de no ser así huyen de Huehuetenango: del náhuatl: huehuetl = viejo
o se quedan inmóviles mientras la persona se aleja, árbol, atl = agua y tenango = tierra de, = lugar de
ellas nunca toman la iniciativa de morder porque viejos árboles de agua), que existen cerca de la aldea
sabiamente entienden que están en desventaja ante Chaquial en Huehuetenango, viejos gigantes de más
un animal más grande. Que los zaraguates le lancen de 1500 años de edad, 4.5 m de diámetro y más de 70
a uno ramas o que intenten orinarlo desde lo alto m de altura, los más grandes de Guatemala, primos
de los árboles eso sí puede ocurrir, y aun eso será hermanos de las famosas Sequoias de California y
también por invadir sus dominios. Sin embargo, y hermanos de los mencionados ahuehuetes comunes
volviendo a la pregunta inicial, puedo afirmar con en México (Árbol Nacional de ese país).
absoluta certeza que en mi experiencia los únicos
animales peligrosos en las montañas son, en su Además existen gran variedad de palmáceas
orden: 1° Las abejas, 2° Las hormigas, 3° Los alacranes (palmitos), y otras plantas comestibles, juníperos
y 4° Algunas arañas; y como los animales que causan de caprichosas formas en las cumbres más altas
más molestias, siendo muchas veces insoportables. de la sierra, zacatales, una espacie de hiedra que
Sin lugar a duda los mosquitos y los zancudos; aparte es sumamente difícil de cortar para avanzar al ir
de estos no hemos encontrado ningún otro animal haciendo brecha, molestos e hirientes zarzales,
peligroso, excepto que uno quisiera atrapar alguno y igualmente hirientes morales pero que en
saliera herido en el intento. compensación nos brindan sus deliciosas frutos; se

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encuentran también en algunas partes deliciosas Por otro lado existen en la SM unas 25-30 cataratas
frambuesas silvestres, que son un deleite cuando desde 10 m hasta 115 m o más de altura, de las cuales
se las encuentra. Algo que se puede hallar en la se conoce unas 20, igualmente hay como cinco
recóndita y primitiva selva entre el cerro Pinalón y cavernas y cuevas y unas nueve rocas importantes.
el cerro El Siglo, son las más largas lianas o bejucos Además, de enorme importancia por lo que significa
que hemos conocido, con más 20-30 m de largo y el agua para el hombre, en la SM nacen alrededor de 58
5-8 cm de diámetro, las cuales cuelgan en caída libre de los más importantes ríos de la región nororiental
de los altos amates y otros grandes árboles que allí del país, 19 de los cuales son afluentes directos del
abundan, y que precisamente su presencia hace una río Motagua, nueve desembocan en el Lago de
de las diferencias entre un bosque y una verdadera Izabal y 4-5 son grandes tributarios del río Polochic.
selva. Se debe de tomar en cuenta que existen entre 70-
80 quebradas y riachuelos importantes, muchos de
ellos sin nombre conocido, que nacen en las partes
altas de la sierra a partir de pequeños hontanares y
veneros, algunos de los cuales llegan a ser afluentes
de los ríos grandes que desembocan en el Motagua
y en el Polochic, y muchos otros recorriendo varias
leguas, desembocan directamente en dichos ríos.
Por ej. el río Teculután nace en las faldas del cerro
Mululjá al inicio del gran Cañón de Teculután, con
el nombre de río Santa Clara, luego recibe las aguas
del río Blanco que viene de las laderas cercanas del
cerro El Siglo, más adelante las del río Don Po que
nace en las faldas del cerro La Cucaracha, más allá
aumenta su caudal con las aguas de los ríos Santo
Domingo y Negro, que descienden por dos cañadas
de la ladera occidental del cerro Raxón, desde este
punto (La Golondrina), toma el nombre de río
Teculután con el que llega a la entrada del municipio
del mismo nombre en Zacapa. Cosa igual ocurre con
los restantes 18 ríos que vemos desembocar en el
Motagua y en los del Polochic, representando cada
uno de ellos a tres o cuatro ríos que literalmente
han “bañado” grandes extensiones de las tierras
altas de la sierra y finalmente proporcionan el vital
líquido a miles de pobladores de cientos de caseríos,
comunidades, aldeas, municipios y cabeceras de
los departamentos que recorren en su vertiginoso
descenso; por lo que en justicia podemos decir que
en la SM nacen más de 130-140 ríos, con todo lo que
eso significa como recurso fluvial para le economía
del país y la sobrevivencia de los habitantes de la
región. (ver croquis n° 3)

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En las cercanías de la aldea Morán, río Hondo, existe en la cumbre del cerro El Palmar a manera de cráter,
una pequeña laguneta o poza como de 12x20 m de diámetro y poco profunda; este fenómeno geológico solo
lo hemos visto en la cumbre de otro cerro cerca de la aldea Nueva Chicapná en Alta Verapaz; son reservas
de agua diferentes a la laguna de Ipala, la laguna de Chicabal, la laguna de El Hoyo, en los volcanes Ipala,
Chicabal y Tahual respectivamente, pues estas lagunetas solo captan el agua de lluvia durante el invierno y
luego casi se secan durante el verano.

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Importancia agropecuaria e industrial
de la Sierra de Las Minas

En la parte baja de la SM hacia el Valle del Motagua entre estas el shate y varias especies de Izote, estas
propiamente dicho, de los 250 a 350 ms.n.m., últimas se exportan en trozos vivos cortados de
se ven los característicos matorrales espinosos, diferentes tamaños, para ser resembrados. Sin
montarrales, guatales, diferentes clases de cactus, embargo lo que predomina es el cultivo de maíz
acacias espinozas, morales y zacatales o pastizales; y frijol para alimento básico de las poblaciones.
extensiones predominantemente planas o con Desde hace unas pocas décadas se ha incrementado
pocos altozanos que se ven divididas paralelamente el cultivo de uva y frutas rastreras como: melón,
por los ríos que bajando de la sierra, corren por sandía, fresa y gran cantidad de verduras en el valle
el valle formando verdaderos oasis a lo largo de del Motagua, irrigado por los ríos que descienden
sus cauces, en los que se ven infinidad de árboles de la SM. Es conocido también el hecho de que en
frutales de mango, papaya, naranja, zapote, limón, esta sierra se han explotado desde la primera mitad
coco, fruta de pan, etc. En esta parte se destinan del siglo pasado, canteras de mármol en jurisdicción
extensiones importantes de tierras para la industria del departamento de Zacapa, existiendo aún a la
de la ganadería porcina, equina, y caprina, pero fecha una en plena producción, y en otra parte de la
predominantemente bovina, con hatos de razas sierra, vestigios de la infraestructura de otra cantera
tanto lecheras como de carne; existiendo además que floreció hace muchos años. Igualmente se han
grandes granjas avícolas. explotado canteras de jade.

En la SM se explota tanto en forma controlada Existen por lo menos dos hidroeléctricas en los
como en forma ilegal, la tala de coníferas y otros ríos Pasabién y Colorado en jurisdicción del
árboles maderables para construcción y mueblería, departamento de Zacapa y actualmente se están
así como para combustible en los hogares, en caleras proyectando la construcción de varias más, tanto en
y pequeñas fábricas de ladrillo, etc. Se cultivan en vertientes sobre el valle del Motagua como sobre las
la parte más occidental y en la vertiente de Alta del Polochic.
Verapaz, café, cardamomo y plantas ornamentales;

62

Segunda
parte

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64

“TRAVESÍA SOBRE LA SIERRA DE LAS MINAS”
UNA AVENTURA NO PLANIFICADA...

“No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo por escrito”
Oscar Wilde

Tal como lo dijimos en el capítulo sobre los límites descendiendo profundos cañones, llevando a cabo
de la Sierra de Las Minas -SM-, el tercio central de largas y extenuantes caminatas, acampando en bellos
su longitud total es el más importante e interesante y recónditos parajes, descubriendo pintorescos
desde el punto de vista montañista, por las razones lugares, hermosas cataratas, desafiantes rocas, etc.
descritas anteriormente. Este tramo de montaña Cabe anotar que algunos de estos lugares habían
medido en línea recta desde la cima del cerro El permanecido ignotos para toda persona, hasta
Pinalón (W89°54.57´26´´- N15°4´48.89´´), a la cima nuestra llegada.
del cerro El Picudo (W89°28´61´´- N15°11´42.80´´),
mide exactamente 49.91 km, medida tomada Durante esos 25 años llevamos a cabo esas actividades,
desde sus respectivas coordenadas sobre el mapa planificándolas de acuerdo con informes de personas
geopolítico de la República de Guatemala a escala que nos referían de lo interesante que podía ser
1/50000. Por otro lado, ese mismo tramo de aventurarnos por los diferentes destinos, otras veces,
montaña proyectado sobre la carretera CA9, que la decisión de ir a tal o cual lugar dependía de los
corre paralelamente a la dirección de la sierra en datos que obteníamos de los mapas consultados en
todo su trayecto, corresponde a la distancia de 66 el Instituto Geográfico Nacional -IGN-, donde nos
km que existen sobre dicha carretera CA9, entre parecía interesante la localización, altitud y grado
la proyección de un meridiano que partiendo del de dificultad de llegar a un cerro dado, la existencia
kilómetro 226.5 de la carretera 7A (4.5 km antes de una recóndita catarata en medio de una gran
de llegar a La Tinta yendo de San Julián al Estor), extensión de montaña despoblada, la presencia de
pase por la cumbre del cerro El Pinalón y llegue al un importante río alejado, o la posibilidad de hacer
kilómetro 90 de la carretera CA9 (a Puerto Barrios), una caminata de varios días para unir dos puntos
en jurisdicción de San Agustín Acasaguastlán (3 km interesantes, etc., etc.
después de la entrada a ese municipio), y por el otro
lado, la proyección de otro meridiano paralelo al Así fuimos logrando innumerables destinos, tanto
anterior, que parta del kilómetro 286.5 de la misma a lo largo de la línea de las cumbres más altas, como
carretera 7A (24,5 km después de Panzós hacia El en cañones y montañas sin seguir ningún orden
Estor), pase por la cumbre del cerro El Picudo y direccional, es decir; en una ocasión íbamos a un
llegue al kilómetro 156 de la misma carretera CA9, cerro en el extremo occidental de la sierra, y en otra,
a solo 3 km de la entrada a Santiago, en jurisdicción con meses de diferencia, a una caminata en un tramo
de río Hondo, Zacapa. (ver croquis n° 1) muy al oriente de la anterior, aunque sobre la misma
línea de cumbres, en otra oportunidad más, podíamos
Este mismo tercio de la SM, es en el que hemos ir a buscar una catarata a un ramal de montaña fuera
andado en los últimos 25 años, encumbrando de esa línea de cumbres; y así yendo a diferentes
montañas hasta alcanzar las cimas más importantes, destinos fueron transcurriendo los 25 años. Después

65

de haber efectuado muchas expediciones por cerros El Pinalón y El Picudo de ese tan mencionado
distintas regiones de la SM, mencionamos entre las tercio de la SM, que en “EN LÍNEA RECTA” de
más significativas: tres ascensos al cerro Raxón, la acuerdo con las coordenadas geográficas de ambos
conquista de la cumbre de La Cucaracha, la del cerro cerros mide exactamente 49.91 km (50 para objeto
El Picudo, la del cerro Mármol, la del cerro Mululjá, de cálculos rápidos y referencias), de manera que la
la Trilogía de los cerros Palomas, Santo Toribio y idea de llevar a cabo el proyecto de unir caminando
El Imposible y muchas más; en algún momento nos esos 50 km sobre la SM, tomó forma en nuestro
percatamos que sin haberlo planificado, habíamos pensamiento y a partir de ese momento nuestro
caminado horizontalmente unos cuantos tramos de interés se centró en completar lo que dimos en
la magnífica sierra, separados entre sí por otros que llamar “La Travesía Sobre la Sierra de Las Minas”,
aún no conocíamos, y que faltaban para completar que es el objeto de esta narrativa.
una secuencia longitudinal de tramos, que así unidos, (ver mapa).
completarían la distancia comprendida entre los

66

Sin embargo para que el lector tenga una idea más el orden cronológico en que se fueron realizando
clara de lo que fue esta travesía, tiene que estar dichas etapas. En esta forma pretendemos que
consciente de que el relato de cada una de las etapas el amable lector vaya caminando con nosotros
y tramos de algunas de ellas, es una fiel narración de las distintas etapas, sin detenernos en el tiempo,
lo que ocurrió “en esas fechas”; pero que esa etapa o es una secuencia direccional, no una secuencia
ese tramo de una etapa, no llevó una secuencia en cronológica. Para empezar, presentaremos la lista
el orden cronológico, en relación con la dirección de las diferentes etapas y tramos de algunas de ellas,
que sigue la descripción de la “travesía”; tal como con los nombres del punto de partida y del punto
lo pueden notar en este ejemplo: el segundo tramo de llegada de cada una, así como las fechas en las
de la segunda etapa se realizó en el año 2007, pero que se llevaron a cabo, la distancia aproximada de
la décima primera etapa, se llevó a cabo mucho la caminata, el tiempo efectivo de dicha caminata
antes, en el 2002; porque como hemos dicho, la (no tomando en cuenta los períodos de descanso),
narración se hace en un orden direccional continuo, el número de campamentos instalados, y otros datos
de noroccidente a sur-oriente, que no coincide con más de interés.

Etapas de la travesía sobre La Sierra de Las Minas

No. de Tramo Punto de partida y Fechas de la Kilómetros Tiempo efectivo Recorrido en Recorrido en Campamentos
etapa punto de llegada actividad de caminata de caminata asfalto (KM) terraceria (KM)
1ero. (horas)
1 2do. Ascenso a la 31 de agosto de 21 09:00 176 29 0
3ro. Cumbre del Cerro 1,994 18 16:10 222
2 31.2 26:10 222 41 2
de Pinalón 13, 14 y 15 de 28 222
3 abril del 2,007 7 17:31 222 41 3
4 Del Cerro El 12, 13, 14 y 15 0 05:45 222
5 Pinalón al Cerro de diciembre 57 2
6 10.5 0 222 41 1
El Siglo del 2,007
8, 9 y 10 de 39.1 03:45 250 53 0
A la cumbre del febrero del
Cerro El Siglo 27:30 53 2
Del Collado 2,008
15, 16 y 17 de 22 2
Del Siglo al junio de 1,996
Campamento El
9, 10 y 11 de
Aguacate junio de 1,995
Del Campamento
16, 17 y 18 de
El Aguacate al febrero de 1,996
Valle de las Vegas
Del Valle de Las 9, 10 y 11 de
marzo del 2,007
Vegas a Aldea
Santa Rosalía

Mármol

Continua en la siguiente página

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No. de Tramo Punto de partida y Fechas de la Kilómetros Tiempo efectivo Recorrido en Recorrido en Campamentos
etapa punto de llegada actividad de caminata de caminata asfalto (KM) terraceria (KM)
(horas) 2
7 De Aldea Santa 12, 13 y 14 de 0 250 42
Rosalía a San marzo de 1,997 0 2
8 Lorenzo Mármol 29.5 256 39 2
9 12, 13 y 14 de 66 15:05 270 28 0
10 De San Lorenzo diciembre del 28 276 24 1
11 Mármol a Finca 31 26:25 306 30 19
2,008 309.3 Km 18:30 3116 Km 500 Km Campamentos
Alejandría 9, 10 y 11 de
agosto de 1,996 15:05
De Finca Alejandría 7, 8 y 9 de febrero 180:56 h
a Aldea Jones (7 d 12h 56m)
del 2,007
De Aldea Jones a
Aldea Morán 22 y 23 de junio
del 2,002
De Aldea Morán a
Cumbre del Cerro 37 días

Picudo

Totales

Elaborado por Carlos Beteta

Esta distancia (309.3 km) caminada sobre la Sierra, representa 4.69 veces la distancia (66 km), por la carretera
CA9, entre los dos puntos correspondientes a los extremos de la caminata, proyectados en dicha carretera, o
2.34 veces cuando esta misma distancia (309.3 km) se compara con solo la mitad (solo de ida) del recorrido
(154.7 km). Representa también 6.2 veces la distancia entre lo caminado (309.3 km) y la distancia exacta en
línea recta entre las dos coordenadas de los extremos de la travesía que son 49.91 km y 3.1 veces si se toma
en cuenta solo la mitad del recorrido (solo de ida) de 154.7 km.

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Primera Etapa:
Ascenso a la Cumbre del Cerro “El Pinalón”

(27 de abril de 1994)

“Nunca lamentes que te estés haciendo viejo, porque a muchos
les ha sido negado este privilegio”
Proverbio Irlandés

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Pocos meses después de haber terminado de ascender
los 38 volcanes de la República de Guatemala, el 27
de abril de 1994, nos reunimos Héctor Monzón,
Roberto de León, Federico Scheel y el suscrito
(algunos de los que solo unos meses después, el 12 de
agosto de 1994, seríamos los fundadores de nuestro
querido Grupo de Montañismo Tzuul Tak´a), con el
objeto de llevar a cabo el ascenso del Cerro Pinalón,
en el extremo occidental de la Sierra de las Minas,
en jurisdicción del departamento de El Progreso;
actividad que marcaba la escalada de nuestro primer
cerro en esa enigmática, emblemática y casi mágica
montaña.

Salimos el domingo 31 de agosto de 1994 a las 4:00 Piedra del Ángel
horas rumbo a San Agustín Acasaguastlán, bajo un
cielo que presagiaba sería un día despejado; desde de aquella majestuosa alfombra de bosques, y a lo
este municipio por un camino de terracería en lejos en el horizonte, los volcanes Acatenango,
regulares condiciones llegamos a la aldea Albores y Fuego, Agua y Pacaya, hermosos motivos para
de allí finalmente a las 7:45 horas a la finca Las Nubes unas lindas fotografías. A partir de aquí se camina
de Don Carlos Méndez, reconocido ecologista, cuya por un sendero señalizado por Don Carlos que
finca es un verdadero santuario de la naturaleza. lleva el nombre de Alex, en memoria de un hijo
Don Carlos, con la amabilidad que lo caracteriza, suyo muerto trágicamente hacía tan solo dos años,
nos dio una amplia información sobre la ruta a a manos precisamente de depredadores madereros.
seguir, enfatizándonos que no deberíamos de pasar Este sendero húmedo es muy agradable y hermoso,
por determinado lugar, el cual aunque pertenecía en su trayecto se puede observar bosque milenario
a la finca, era la ruta seguida por los depredadores de enormes cipreses y amates de hasta 60 m de
furtivos de bosques que eran personas “peligrosas”. alto, literalmente cubiertos de miles de epífitas de
muchas especies, incluyendo orquídeas y tillandsias
Iniciamos el ascenso a las 8:15 horas por una amplia
pero muy inclinada vereda, con mucha piedra al
principio, y mucho lodo después y más que lodo
era barro muy resbaloso, hasta llegar a la “Piedra
del Ángel, que es una enorme piedra caliza de
hermosos colores, en forma de ala de ave como de
40 m de alto y unos 25 m de base, que termina en
una cima puntiaguda de solo unos 50 cm cuadrados
de superficie, a la que algunos de nosotros pudimos
llegar escalando la roca como lagartijas, con cierto
grado de dificultad y riesgo (posteriormente le
han colocado una cadena que facilita le escalada),
obteniendo como recompensa una hermosa vista de
360° a la redonda, para admirar el verdor variopinto

70

(pashte). Un kilómetro y medio más delante de que allí debía de ser la verdadera cumbre. El espíritu
estos árboles, y siendo como las 11:30 horas, se de conquista y la perseverancia del grupo -léase
desemboca abruptamente al lugar conocido como “El necedad u obstinación-, nos hizo buscar la manera
Campamento”, un espacio de unos 3000 m2 con tres de llegar hasta ese sitio, a pesar de que para lograrlo
pequeñas cabañas/refugio de madera, construidas teníamos que hacer brecha a través de un inextricable
sobre pilotes de troncos, suficientemente cómodas bosque, con mucha ramazón semipodrida y cubierta
para 4 personas cada una, con una pequeña cocina de grueso musgo, por donde se corría el riesgo de
con algunos enseres; inclusive en esta ocasión hundirse golpeándose o inclusive fracturarse un
encontramos un poco de arroz, dos latas de frijoles, hueso, por lo que cada paso lo dábamos con mucho
un poco de mosh y fósforos, que algún montañista cuidado. Como a los 45 minutos, siendo las 14:20
dejó para que fueran utilizados por alguien más. horas y después de 6:05 h de caminata, llegamos a
lo más alto que se podía, donde habían unas rocas
El campamento cuenta con tres letrinas muy limpias, grandes en un área de más o menos 8-9 m cuadrados,
con su respectivo papel higiénico y agua entubada esta sí era la verdadera cumbre a 2977 ms.n.m. (W
proveniente de un venero cercano, de manera que 89°54.57´26´´- N 15°4´48.89´´), la tercera en altitud
por comodidad no nos podíamos quejar, aunque de toda la SM. Nos reunimos, nos dimos el abrazo
lamentablemente no la podíamos disfrutar porque de “feliz cumbre”, nos tomamos las obligadas fotos,
no íbamos a pernoctar allí, solo descansamos un rato leímos la oración de cumbre del Grupo Tzul Tak´a y
para luego seguir nuestra andada hacia la ansiada dimos por ascendida por primera vez, y por nuestro
cumbre, a través de un ancho sendero siempre entre grupo montañista, La Cumbre del cerro El Pinalón,
bosque virgen de árboles centenarios, en uno de los el Grupo la había conquistado, pues no había
cuales como de 70 m de alto, vimos tres pavos de evidencia de que alguien hubiera estado allí antes,
cacho salvajes. Después de más o menos 1:30 h y 3 solo habían llegado hasta la caseta, confirmándolo
km de caminata desde el campamento, llegamos a más tarde con Don Carlos, de que nadie antes había
un cruce de cuatro caminos muy anchos, donde se llegado hasta este punto. Descansamos, comimos
podían ver huellas de neumáticos de gran tamaño, algo, nos hidratamos, comentamos las peripecias
obviamente de grandes camiones. del recorrido y la satisfacción del logro alcanzado, y
luego nos dispusimos a desandar la vereda, y lo que
Este era el punto hasta donde Don Carlos nos nos había tomado 6:05 h de dura subida, nos llevó
había recomendado llegar; sin embargo no era la 3:15 h de descenso de tiempo efectivo, es decir, sin
cumbre propiamente, por lo que como montañistas tomar en cuenta los descansos que tomamos durante
sentíamos el deseo de seguir para tratar de llegar la caminata; eran las 17:35 horas. Una agradable
a ella. Contraviniendo las indicaciones recibidas caminada de aproximadamente 21 km en 9:20 h, a
y quizás tácitamente autorizados por unos rótulos un promedio de 26.6 min/km, lo cual significa que
que estaban en lo alto de algunos árboles, en donde no era un terreno muy inclinado, ni muy difícil de
la institución Defensores de la Naturaleza (a la cual caminarlo. Cuando llevamos a cabo esta actividad
pertenecía Don Carlos), indicaba que esa era un área de poca dificultad, no pensamos que fuera a tener
protegida por ella, decidimos seguir por un sendero la importancia que hoy tiene, por el hecho de que se
más angosto caminando unos 35 minutos más, hasta trata del punto de partida de “La Travesía Sobre la
llegar a una caseta con antena de radio/repetidora; sin Sierra de Las Minas” que aquí estamos empezando
embargo al ver por los alrededores, se podía apreciar también a relatar.
que un poco más allá, había una pequeña elevación
más alta que donde estábamos, por lo que inferimos

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Segunda Etapa:
Desde el Cerro “El Siglo” al cerro “El Pinalón”

(8, 9 y 10 de febrero de 2008)

“La vida es tan corta y el oficio de vivirla tan difícil,
que cuando uno empieza a aprenderlo, ya hay que morirse”

Ernesto Sábato

Habiendo efectuado la etapa anterior, la presente diferente… De hecho lo primero que hay que decir
es el segundo eslabón de la travesía, objeto de es que para completar el trayecto de esta etapa, fue
esta narración. Este segmento de la SM medido necesario dividirla en tres tramos, cuya caminata se
entre las coordenadas geográficas de ambos cerros efectuó en distintas fechas cada uno de ellos y para su
representa solo 7.42 km en línea recta, sin embargo, narración se seguirá el orden direccional de oriente
como se podrá apreciar después de leer este relato, la a occidente, tal como se efectuó; es decir desde el
caminata sobre el terreno fue de una distancia muy cerro El Siglo hacia el cerro El Pinalón.

Primer tramo de la Segunda Etapa
(13, 14 y 15 de abril del 2007)

“Las montañas son genéricamente unas damas.
Admíralas, defiéndelas, ámalas y respétalas”
Carlos Beteta

Este fue el primer tramo que planificamos ya con la yo deseaba, solo lo podía hacer por dos, lo cual
idea firme de ir completando la travesía, proyecto de finalmente acepté. En esas fechas tampoco mi amigo
nuestro interés en los últimos cinco años, que “en el montañista Luis De La Vega me podía acompañar,
papel” no parecía tan difícil, porque prácticamente por lo que para aprovechar la ocasión decidí ir
la mitad de las etapas ya las habíamos caminado, solo con los guías. Según Pablo en el trayecto de
quedándonos solo la mitad restante. Era un proyecto esa caminata no había disponibilidad de agua para
ambicioso pero factible para nosotros, que de beber, lo cual agregaba un grado más de dificultad a
lograrlo seríamos los primeros. Para hacer realidad la expedición, porque era un peso más que debíamos
este primer tramo, me comuniqué en la aldea El de cargar, supuestamente para completar “toda” la
Jute, con mi amigo guía y porteador en la conquista etapa desde El Siglo al Pinalón..., ¡qué incautos e
de La Cucaracha: Pablo Alonso (sobrino de Don inocentes!
Toño, de quien hablaremos más adelante), quien
con mucho entusiasmo aceptó el reto, llevando Salí el viernes 13 de abril a las 4:00 horas, pues
como acompañante a un amigo suyo oriundo de la tenía que estar en la aldea El Chico a las 7:00 horas
aldea El Chico. Por cuestiones de trabajo Pablo no después de pasar por Pablo al municipio El Jute.
me podía acompañar por tres o cuatro días como Con una puntualidad inglesa a las 7:04 estábamos en

72

El Chico recogiendo a Israel López (así se llamaba Como a las 3:30 h de caminar se entra al bosque alto,
el otro miembro de la expedición). Seguimos por cerrado, húmedo y muy inclinado, pasando túneles
el camino tantas veces recorrido rumbo a la finca de inextricables ramazones zarza incluida, donde se
La Constancia de la empresa Maderas El Alto S.A. trababan manos, pies, cabeza, mochila, ojos, lengua,
(MEASA), para entregar el respectivo permiso hipófisis, nervio trigémino, etc., etc.; además de
de paso hacia la cumbre donde está el cruce para quedarse a veces enredado entre bejucos y carrizales
El Siglo. Aquí por una estrecha brecha entramos difíciles de librar. La verdad es que la brecha que
unos 300 m para dejar a mi fiel Nissan Patrol por iba haciendo Israel no era muy buena y Pablo atrás
ahí sola y triste. Arreglamos y distribuimos todos tampoco iba ayudándolo mucho que digamos.
los telenques en sendos costales para llevarlos a
tuto con mecapal, que es la forma más cómoda para En el recorrido nos vamos guiando por el mapa a
llevar la carga según los muchachos. Yo, a la sazón escala 1/50000 y la brújula. Después de agotadoras
con mis 72 años (carcachita modelo 35), solo llevaría 5:07 horas de caminata, llegamos a un punto donde
una mochila de asalto con lo indispensable de uso Pablo dijo que por ahí, a unos 300 m desviándonos
inmediato: un litro de té y uno de agua, bastimento, a la derecha de la vereda, se encontraba una vieja
algunas golosinas dulces, navaja, machete, capa caseta y una antena de radio abandonadas, las mismas
y por supuesto “serpentina de la ancha” como se que yo conocí en el viaje que hicimos con Mario
le llama al papel higiénico en la jerga montañista. Da Silva (en mala hora guiados por un tal Fermín),
Además por supuesto, no podían faltar mis enseres hacía ya la bicoca de 11 años…; Pablo me preguntó
fotográficos, todo lo cual hacía más o menos 20-22 si quería ir a verla, y aunque tenía curiosidad de
lb de peso, que para mí maltrecha humanidad era volverla a ver, el objetivo de esta caminata era llegar
más que suficiente. al Pinalón..., y yo no estaba para desperdiciar valioso
tiempo y energías, sino al contrario, debíamos
Siendo exactamente las 8:48 horas y a 2300 ms.n.m., avanzar para encontrar un lugar adecuado para
con tiempo frío pero agradable, iniciamos la trepada acampar. Más tarde yo llegué a pensar que de haber
por la conocida brecha ancha e inclinada que lleva ido en esa ocasión a la caseta, la historia de este viaje
a la base del Siglo a 2710 ms.n.m., llegando allí en hubiera sido un poco diferente…
2:12 h, de aquí en lugar de ascender a la cumbre, se
sigue por una vereda angosta pero bien marcada, Yendo por esta parte tuvimos vistas muy bonitas de
que bordea en forma horizontal la base del cerro por la SM, pudiéndose identificar los cerros Raxón, la
la ladera sur. En un trayecto de aproximadamente “puntita” del Santo Toribio, y el Mármol.
1 km empezamos a ver a intervalos de solo unas
decenas de metros, una serie de cinco serpientes Vista de los Cerros Raxón, Santo Toribio y Mármol.
Timbo o Cantil Tamagás, las cuales son venenosas;
de tamaños desde 25 cm hasta la más grande de más
o menos 90 cm de largo y unos 3.5 cm de grueso,
todas estaban en la vereda hechas un yagual en
lugares donde el sol las calentaba, afortunadamente
no las pisamos, porque esto hubiera sido muy
posible de no andar con cuidado. Tomamos fotos de
algunas y seguimos un poco preocupados, porque
en verdad no era usual que se encontraran tantas en
un recorrido tan corto, luego la preocupación pasó.

73

Seguimos por una vereda casi inexistente, tan difícil estaba sucediendo. Habiendo caminado 6:56 horas
como por la que veníamos, solo que más plana con con un grado significativo de dificultad y aunque
una serie de columpios suaves, hasta que salimos a eran solo las 15:40 horas, según lo caminado hasta
una vieja brecha maderera abandonada que llegaba ahora era poco probable encontrar un lugar parecido
a una explanada como de 70 x 70 m, semicircular, a este para acampar, pues teníamos inclusive mucha
plana, donde habían unas cinco pilas de gruesos madera seca para hacer una fogata, sin riesgo alguno
troncos de pino, haciendo un total de más o menos de incendio por lo despejado del sitio. Por estas
60-70 de ellos, de 22- 32 y hasta de 40 pulgadas de ventajas decidimos armar campamento con una
diámetro y de 5-6 m de largo, troncos abandonados carpa pequeña y una champa grande con piezas de
desde hacía mucho tiempo y la mayoría ya medio plástico, que serviría también para proteger todos
podridos. Se notaba que el área había servido como los bártulos. Cuando tratábamos de mover un
un centro de acopio de la madera halada con bueyes. tronco para usarlo como banca cerca de la fogata,
Uno no puede comprender el por qué no fueron encontramos bajo ese tronco una serpiente como
sacados de ese lugar para ser bien aprovechados. de 40 cm de largo, color café claro muy bonita, con
Troncos de donde se pudieron obtener -restando características de no ser venenosa, y cerca de ella se
lo que se quitara de lepa-, tablas de 18-28 pulgadas encontraba el dermatoesqueleto de una tarántula
de ancho, que hoy día son sumamente raras y muy como de 3.5 cm de cuerpo y patas de unos 6-8 cm de
costosas; uno no puede menos que entristecerse largo, y aunque ya hecha cecina y el color ya no era
profundamente al ver esta ingrata, inútil y sin el verdadero, daba la impresión de haber sido café
propósito depredación. Estando en este punto obscuro; ambos especímenes muy interesantes, pero
no teníamos idea de hacia dónde seguiríamos de todos modos a la serpiente la llevamos lejos de
caminando, pues yo esperaba que a partir de la caseta nosotros. Siendo como las 19:00 horas preparamos
caminaríamos por un filón de montaña con algunas la cena con una lata de frijoles colorados con chorizo,
hondonadas y en dirección al occidente, lo cual no un sándwich de jamón y queso, y refrescos de té y

Campamento Maderero. Cantil Tamagás.

74

horchata. No queríamos hacer sopa ni café para no otros objetos. Desayunamos algo, comentamos lo
consumir mucha agua, pues no sabíamos cuánta del tigre y la lluvia, y después fuimos a explorar por
podríamos necesitar más adelante. Por el temor de los alrededores para ver por dónde podríamos seguir
que algún animal se acercara al campamento en la nuestra caminata en busca del Pinalón... Decidimos
noche, los muchachos colocaron en forma circular dejar el campamento armado para el regreso. Con
como a 10 m de la carpa y la champa, algunas la ayuda del mapa y la brújula, optamos por tomar
bolsas de plástico y costales colgados de los lazos y en dirección al occidente haciendo brecha con los
cuerdas que llevábamos, a manera de espantapájaros machetes, eran las 8:10 horas, estábamos a 2725
o mejor dicho “espantacualquier” animal, y entre ms.n.m. y nuestro objetivo a 2977...
ellos Pablo mencionó al tigre, al cual yo no le di
importancia como posibilidad. Después vino la Después de algún rato de avanzar lentamente y
hora del tradicional coloquio postprandial, donde con mucha dificultad, más nos dábamos cuenta
no faltaron las sartas de falacias sobre el tigre, el de que no íbamos por el camino correcto y que
león y por supuesto el coyote minusválido…, que estábamos perdidos; no veíamos por ninguna
se encuentran en esas montañas, pero que nadie parte las características de un filón de montaña que
ha visto. Finalmente planificamos la ruta a seguir esperábamos encontrar, para seguirlo en dirección
al día siguiente, y siendo como las 20:45 horas nos al occidente como era nuestra intención; por el
acostamos. El tiempo nublado pero con temperatura contrario, andábamos en terreno abarrancado entre
agradable. profundashondonadas deubérrimaselvavirgen, alta,
húmeda de flora mixta, con el suelo cubierto de un
La noche trascurría tranquila, pero como a las 3:30 colchón de musgo muy grueso y empapado, en otras
de la madrugada un fuerte rugido nos despertó y partes enormes pinos de más de 30-40 m, así como
nos asustó a todos, los muchachos aseguraban que amates y otros grandes árboles, de cuyas altas ramas
se trataba del tigre y yo estaba seguro que lo era. caían las hojas de una especie poco común de cactus,
Pablo e Israel se levantaron con lámparas en mano estas hojas triangulares y espinosas que medían
(por cierto con excelente luz) y blandiendo sendos hasta 5-7 m de alto y unos 10 cm de grueso, en mi
machetes. Aun la fogata ardía activamente, pues ya larga historia de subirmontes, jamás había visto
se habían dejado unos gruesos troncos con ese este tipo de epífitas, como tampoco pude encontrar
propósito. Yo solo saqué la cabeza por la puerta de la referencia alguna de especie parecida, excepto una
carpa y luego me volví a acostar, en el resto de la noche con nombre científico: Acanthocereus Tetragonus,
no volvimos a escuchar ruido alguno, y si realmente pero mucho más pequeña. En este paraíso ignoto y
el supuesto tigre llegó, se asustó con todo el barullo recóndito también vimos grandes rocas literalmente
que armamos. Al preguntarle a ellos si alguna vez cubiertas de orquídeas de diferentes tamaños, formas
habían visto un tigre, respondieron que no, pero y colores, así como árboles muy grandes de 50-70
que hacía como seis años alguien había matado uno m de alto, parecidos a los que encontráramos yendo
en una montaña cercana, un testimonio no muy por la anterior ruta al Pinalón por la finca de Don
digno de credibilidad. Como a las 5:00 horas empezó Carlos, solo que ahora la topografía era totalmente
a llover y como en algunas otras ocasiones, a mí me diferente. Habiendo caminado como cuatro horas y
entró el agua a la carpa aun cuando la lluvia no fue ya cansados, deshidratados, con hambre, espinados
muy fuerte, al extremo que tuve que estar sacando y sobre todo muy frustrados, nos encontrábamos
agua empapando y exprimiendo mis pañuelos para en una cumbre a 2770 ms.n.m., la cual estábamos
la cabeza, hasta que siendo las 6:00 horas me levanté seguros que no había sido pisada anteriormente
pues se me había mojado el sleeping, el colchón y por persona alguna, lo que fue asentido también

75

por nuestros guías, por lo que decidimos bautizar y ramas semipodridas, que dejan profundos hoyos
dicha cumbre con el nombre de Cerro CAPI (por las en el piso cubiertos solo con hojarasca y musgo,
iniciales: CA=Carlos, P= Pablo e I= Israel). que son una trampa para una posible fractura o
por lo menos un fuerte somatón. Paramos para
descansar un rato, para beber algo de refresco y
comer un poco: Pollo Campero, pan y tortillas. En ese
momento oímos los característicos e intimidantes
gritos de un grupo de zaraguates en las cercanías,
que fueron respondidos por otro que se oía más
lejano. Reiniciamos la marcha encaramándonos en
matorrales y roquedales. Olvidé relatar que en la
ida, cerca del campamento pasando por una pequeña
hondonada, Pablo me dijo: ¡mire Don Carlos!...,
¡aquí hay un “casi agua”!, yo solo veía una pequeña
área húmeda en el suelo, cubierta de hojarasca. Aquí
-prosiguió Pablo-, si hacemos un hoyo, es posible
que se junte agua, pues ya nos hace falta, y se puso
en cuclillas para hacer un hoyo con el machete y las
manos y mientras lo profundizaba, la tierra se hacía
más húmeda, luego lodosa, hasta que cuando había
escarbado como 20 cm un hoyo de más o menos
25 de diámetro, paró y me dijo: “Cuando pasemos
de regreso va´ver”. Pues bien, cuando pasamos de
regreso el “casi agua” estaba lleno con más o menos
cinco litros de agua, que aunque turbia, si podría
utilizarse en caso de emergencia, y allí la dejamos
“por si las moscas”. Tomé fotos tanto del proceso de
construcción como del resultado.

“Árbol de Navidad” hecho con telas de araña y el rocío matinal. A las 14:51 horas llegamos desfalleciendo al
campamento, después de 6:41 horas de ardua
El agua era escasa y pensando que nuestro objetivo caminata, descansamos un rato haciendo los
no se vislumbraba por ninguna parte, tomamos la comentarios de la dura jornada, reavivamos la
difícil decisión de abortar nuestro intento, echando fogata con los tizones que habían, tomé fotos del
marcha atrás cuando eran las 12:45 horas, después campamento -que no lo había hecho-, y en eso estaba,
de 4:35 h de difícil y peligrosa caminata, andando cuando recibí el llamado imperioso de la naturaleza
en ese bosque oscuro, con gran cantidad de troncos para satisfacer una necesidad corporal, por lo que en
forma muy discreta tomé mi rollo de serpentina de
la ancha y me fui alejando en dirección al límite del
campamento, atrás de una de las pilas de troncos, sin
percatarme que había sido el mismo lugar escogido
por alguno de los muchachos la noche anterior,
embarrándome mi bota con aquella &$%#…, me dio

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una rabia como nunca, por lo estúpido que había la dirección correcta, y avanzar un poco más hacia
sido al no darme cuenta por dónde iba poniendo los nuestro objetivo y no nos hubiéramos extraviado
pies y maldiciendo mi mala suerte…, habiendo tanto como nos sucedió. Claro que no hubiéramos llegado
terreno disponible. Una muy pestilente anécdota, de ninguna manera al Pinalón, porque no teníamos
que no sé por qué la narro, quizás porque aun la suficiente agua ni alimentos, y es que los muchachos
huelo y me molesta… no llevaron suficiente agua ni comida para ellos tal
como habíamos quedado, teniendo que compartir
En lo que Pablo y yo estábamos viendo lo del “casi lo mío entre los tres. Pero lo cierto es que no nos
agua”, Israel se había adelantado al campamento y hubiéramos sentido tan frustrados por el gran
en forma abusiva había sacado de mi tienda una lata desgaste físico que tuvimos que sufrir. Por lo menos
de frijoles sin mi consentimiento y cuando nosotros ahora ya sabíamos por dónde debemos caminar en la
llegamos, el “chulo” ya se la había comido, lo cual próxima expedición, la cual ya íbamos planificando
nos molestó mucho a Pablo y a mí, pues esa la durante el regreso. Seguimos por la vereda llegando
habíamos dejado para cenar más tarde; le hicimos a las llamadas Rocas de Las Cuñas a 2800 ms.n.m. y
la observación cuidando que no se “ofendiera”, pero poquito más adelante estábamos en el último tercio
que si recibiera nuestro mensaje… Como a las 17:00 de la caminata. En este tramo encontraríamos lo que
horas, los muchachos fueron por el agua recolectada, era la prueba inequívoca de la existencia del jaguar
trayendo un doble litro y una botella más, y aunque en estas montañas: heces fecales con escíbalos de un
un poco turbia, después de hervirla nos sirvió para diámetro de más o menos 3 cm (ya secas), que no
beber y lavar los utensilios de cocina. El tiempo podían ser de un mamífero pequeño, exceptuando
estaba un poco nublado y fresco, no sabíamos si el coyote, pero a decir de los lugareños por ahí no
llovería. Nos acostamos temprano pensando que los hay; las heces encontradas contenían fragmentos
al día siguiente la caminata sería muy dura, ya que de huesos y muchos pelos obscuros. Tengo las fotos.
iríamos hacia arriba entre aquellos túneles con zarza, Por otro lado recuerdo que aunque han pasado 11
bejucos etc., etc. Al día siguiente nos levantamos a las años, el antecedente es válido, cuando acampando
6:30 horas, recogimos el campamento ordenando y en compañía de mi estimado amigo Mario Da Silva,
distribuyendo el jaracatal de chunches, desayunamos a poca distancia del sitio donde hoy estábamos, oí
algo y cuando eran las 7:51 horas, iniciamos el largo el rugido inequívoco del jaguar. Es importante
y difícil regreso. Ahora el terreno estaba lodoso y mencionar que estos terrenos son de propiedad
muy resbaloso y los arbustos y el zacate de la orilla privada, donde es terminantemente prohibida
de la vereda mojados, los lugares muy inclinados la entrada sin permiso y la cacería, lo cual hace
teníamos que treparlos gateando; era difícil, a pesar factible la existencia del felino. En la última parte
de ello llegamos al cruce a la caseta como en 1:30 h, del descenso pude pepenar muchas bellotas o piñas
y ahora si tuve la curiosidad de ir a verla, dándome de pino, tan grandes que no lo podía dejar de hacer,
cuenta que estaba a solo unos 250 m de dicho cruce; pues ya las veía formando un bonito arreglo de
por cierto que al ver la caseta y la torre, me invadió navidad, como en efecto fue, quedando espectacular.
una gran nostalgia, pues era obvio su abandono por
lo enmontado y lo oxidado de los hierros, porque
hacía 11 años la había visto recién construida para
servir como una repetidora de señales de radio de la
empresa MEASA. En fin en ese momento pensé, que
si hubiéramos llegado a esa caseta en la ida, hubiera
sido el punto de referencia para haber seguido en

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Caseta de las Antenas, 11 años después de mi primera visita.

Muy cansados llegamos a las 12:45 horas a mi
patrol, quien nos recibió “con las llantas abiertas”,
habíamos caminado 4:54 h desde el campamento
para un total de 16:10 horas de caminata efectiva
y aproximadamente 18 km recorridos, a un
promedio de 53.9 min/km. Esta caminata sin
embargo había quedado inconclusa, pues creíamos
que nos habían faltado como 3-4 km para llegar
al Pinalón y unas 3 h más de caminata..., aunque
siguiendo la ruta correcta ese tiempo se reduciría
aún más..., y por supuesto la próxima vez la
dotación de agua y bastimento cuidaríamos que
fueran suficientes. Por otro lado esperaba que en
esa ocasión ya me acompañara mi estimado amigo
y excelente montañista Luis De La Vega, con su GPS
colgado al cuello para no perdernos.

¿ Heces de tigre ?

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Segundo tramo de la Segunda Etapa
(12, 13, 14 y 15 de diciembre de 2007)

“El montañismo es como una enfermedad congénita y moral,
pues se nace con él y se terminará hasta cuando uno muere”

Carlos Beteta

Después de haber llevado a cabo la caminata del carga a transportar fuera menos pesada para cada
tramo anterior, se avivó la ilusión por efectuar uno de ellos.
otro intento por completar la travesía de la SM,
un objetivo que se había convertido en nuestra A los ocho meses de nuestro primer intento por
prioridad montañista. Para la nueva incursión Luis alcanzar el cerro Pinalón, salimos para una nueva
De La Vega afortunadamente iría conmigo, lo cual prueba de necedad Luis y él que escribe. Partimos
me daba una seguridad muy grande, pues además el miércoles 12 de diciembre de 2007 a las 5:00
de ser un excelente montañista con quien habíamos horas rumbo al nororiente, por la ruta tantas veces
compartido agradablemente muchas experiencias recorrida de El Jute y El Chico, para llegar primero
pedestres, era un experto manejando la tecnología a La Montañita siendo las 7:45 horas, donde vive
del GPS, y por si fuera poco, era el chef oficial en precisamente Herlindo, quien ya nos esperaba
la montaña. Para esta nueva aventura montaraz junto a un joven de 19 años: Pedro Jacinto, quien
tomaríamos muy en cuenta los errores cometidos por cierto aparentaba unos 16. Subimos a la Patrol
anteriormente, para planificar con cuidado la un par de tanates que llevaban, que en esencia eran
logística y la mejor estrategia para el éxito de la sus tujas y su comida: frijoles, un gran “muñeco”
empresa. Ahora habíamos preparado un segmento de tortillas y solo un doble litro de agua para cada
de mapa al 1/50000, correspondiente a la región uno, pues compartiríamos con ellos la que nosotros
que caminaríamos, anotando las coordenadas de los llevábamos, así como la comida. Abordamos nuestro
puntos de referencia más importantes del trayecto, fotingo (espero que no se ofenda mi querida Nissan,
los que compararíamos con las mediciones que pues la llamo así con cariño…), y a poca distancia
iríamos haciendo con GPS durante la caminata pasamos la puerta de la finca La Constancia, donde
para nuestra exacta ubicación; además, pondríamos entregamos la consabida autorización de paso para
especial atención en la cantidad de líquidos a llevar, iniciar la difícil subida hacia el collado de El Siglo. El
para que su escasez no fuera problema, como lo fue camino como siempre en malas condiciones, porque
la última vez. Previamente habíamos contactado los camiones madereros forman esas profundas
a Herlindo Gutiérrez, nuestro guía/porteador en zanjas, dejando en medio un camellón, en el que la
el ascenso reciente a la Montaña de Mansilla en “panza” de nuestro vehículo volvió a topar varias
septiembre recién pasado, quien nos impresionó veces, con riesgo de dañar algo de su estructura, por
por el interés que mostraba por acompañarnos, que lo que la marcha era literalmente a vuelta de rueda.
iba mucho más allá del solo interés por agenciarse Llegamos al portezuelo de los cuatro caminos, para
de algunos Quetzales extras, se le notaba un genuino tomar una vez más hacia el occidente, hacia El
gusto por la caminata en sí, y un verdadero placer al Siglo, e internarnos los mismos 300 m para dejar
compartir con nosotros la experiencia. Le pedimos allí estacionada nuestra camioneta triste, y solitaria
que consiguiera uno o dos amigos más, para que la durante los cuatro días que duraría nuestra caminata,

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eran las 8:20 horas. Procedimos a distribuir y avíos y las etcéteras. Fuimos a cortar suficiente
acomodar aquella caterva de bártulos entre aperos, hoja de pino que había en abundancia alrededor de
vituallas, y un montón de etcéteras, y especialmente la caseta, para ponerlo en el piso como colchón, y
la gran dotación de agua que representaba el mayor armamos una champa dentro del corredor con las
peso, porque se trataba de más o menos 35 litros piezas de plástico que llevábamos, consiguiendo
en total, contenidos en un tambo de cinco galones, así un espacio cerrado para los cuatro, y quedarnos
dos de una y algunas botellas, cantidad que incluía allí jateados muy cómodamente. El frío era muy
la que se usaría para hacer la comida. Los dos intenso, valga decir que a las 17:30 horas estábamos
bultos metidos en sendas redes que cargarían los a 12°C. Nos abrigamos muy bien y encendimos una
muchachos a miches, se sentían muy pesados (más gran hoguera, y acto seguido el chef Luis preparó
o menos 70 lb cada uno), y muy anchos, lo que sería una deliciosa, abundante y caliente cena: sopa mixta
un obstáculo al pasar por los lugares enmontados de pollo, fideos y res, frijolitos volteados, tortillas,
por los que pasaríamos. Yo como siempre con mi pan de manteca y café hervido con rapadura; ¡Para
mochila de asalto y estrictamente lo que necesitaría qué más! Como sobremesa una amplia charla, para
para ir caminando y por supuesto teniendo a la mano comentar la jornada efectuada y planificar la del día
la “serpentina de la ancha” por si las moscas..., y agua; siguiente. Como a las 19:30 horas con mucho más
además, mi bolsa con los avíos de fotografía; todo frío y viento que lo aumentaba, nos acostamos. Como
pesando aproximadamente unas 25 lb, que es con los muchachos no llevaban mucha ropa, Luis les dio
lo que mi maltrecha humanidad puede responder. su carpa para que se cubrieran con ella, mientras
Luis como siempre cargando un mochilón de tres Luis y yo nos metimos con todo y ropa dentro de
cuerpos, parecido a uno de esos closets de gimnasio, nuestras bolsas. Estando tan cansados todos, nos
era algo descomunal. dormimos como troncos muy agradablemente, pues
el plástico nos protegía del viento que ululaba afuera
El día era despejado y muy fresco por lo sombreado en forma intimidante. Así pasó la noche sin siquiera
del pinal. Iniciamos la marcha lentamente por la salir para satisfacer necesidades menores, al fin y al
ancha y empinada brecha a las 9:00 horas y después cabo estábamos un poco deshidratados por lo que
de 2 h y unos tres descansos, llegábamos al punto no teníamos nada para desperdiciar. Despertamos a
cerca de la cima de El Siglo, para seguir bordeándola las 6:30 horas aún con sueño y yertos de frío, porque
horizontalmente, y luego de 2 h más llegamos a la estábamos a 8°C y probablemente unas horas antes
roca de La Cuña, ya entre montaña alta y húmeda habían sido como 6°C. Preparamos un desayuno
(esta vez no vimos ni una serpiente en este tramo), ligero, levantamos campamento dejando 2.5 litros
poco más adelante dos pasos difíciles y peligrosos de agua y dos latas de atún, para cuando pasáramos
por paredones muy inclinados. Fue en este trayecto de regreso. Siendo las 8:15 horas iniciamos la 2ª
donde se notó la gran dificultad que tuvieron los etapa de este viaje, y mi sorpresa fue darme cuenta
muchachos para avanzar con los grandes bultos que la brecha que seguiríamos era la misma por la
que llevaban a tuto. A las 15:35 horas llegamos a la que caminamos la vez anterior con Pablo e Israel
caseta abandonada (6:35 h de caminata, 1:28 h más hacía ocho meses, creyendo yo en esa ocasión, que
que lo que tardamos la vez anterior en este mismo el no haber entrado a la caseta para encontrar la
trayecto: 5:07 h).Todos estábamos muy cansados. brecha correcta, había sido nuestro error, hoy me
Como era muy temprano y estaba planificado daba cuenta que no había sido así. Pedro Jacinto
pernoctar esa noche en ese punto, tuvimos tiempo quien conocía muy bien esos lugares, me dio mucha
para limpiar el pequeño corredor de la caseta de seguridad y confianza para seguir adelante; además
más o menos 3.5 x 2 m, y acomodar los pertrechos, el GPS nos indicaba que la dirección era la correcta.

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La caminata ahora era relativamente fácil por aquella de una pequeña champa de ramas y algunas latas
brecha maderera abandonada durante más de 40 vacías de comida. Este sería un excelente punto para
años y que aún se encontraba parcialmente abierta acampar si fuera necesario. Pedro nos dijo que hasta
por nuestro paso hacía ocho meses. Caminamos aquí había llegado en una oportunidad, y que desde
un trecho en bajada suave, llegando como en 45 aquí en adelante ya no conocía nada, por lo que a
minutos al campamento maderero abandonado partir de aquí seguiríamos guiados solo por GPS y el
donde acampamos la última vez. Descansamos un mapa; además, desde aquí tendríamos que avanzar
rato y luego Pedro fue a hacer un reconocimiento sin brecha alguna, teniendo que ir abriéndola dentro
por los linderos del campamento, en un punto de un bosque tropical, virgen, húmedo, alto y muy
diametralmente opuesto al que tomamos la última tupido, por donde estábamos seguros que nadie se
vez con Pablo; dándome cuenta entonces, que fue había aventurado a pasar jamás. Estábamos a 2700
precisamente aquí y no en la caseta, donde perdimos ms.n.m. y eran las 14:45 horas, pero debíamos
la ruta que nos costaría tanto tiempo y esfuerzo en avanzar más para acercarnos al punto cinco, para
esa ocasión, pues no llevando GPS, nos dirigimos que desde allí según nuestros cálculos..., al tercer
solo con la brújula y el mapa, lo cual no fue suficiente, día con solo mochila de asalto podríamos llegar al
pues la “salida del campamento” era por un punto Pinalón, regresar al mismo punto cinco y ocupar los
opuesto al que habíamos tomado. últimos dos días para completar el regreso…

Pues bien, saliendo del campamento por entre un Así las cosas, los muchachos que habían venido
guatal intrincado, se encuentra a poca distancia, la caminando “solo” por brecha sin cansarse
continuación de la brecha maderera abandonada más demasiado, aceptaron caminar un poco más dentro
o menos despejada, teniendo que ir solo chapeando de la selva, iniciando así la última parte de la jornada
los arbustos y la poca maleza, por lo que la marcha del día. Al principio el trayecto es bastante plano y
era más rápida pues también se caminaba casi en relativamente fácil, pero con muchos troncos caídos
plano; así el punto cuatro que teníamos anotado en semipodridos cubiertos de musgo y sotobosque bajo.
el mapa lo pasamos como a 75 m de distancia pero Más adelante una serie de columpios, pequeñas
no lo llegamos a tocar, pues el GPS nos indicaba mesetas en alto y bajo, con algo de dificultad por
que podíamos seguir adelante, sin desviarnos de la sus laderas empinadas, húmedas y resbalosas, con
brecha que seguía a lo largo del filón de la montaña. muchos troncos y oquedades en el piso. Aunque
Este punto cuatro es el que en el viaje anterior, era temprano en la tarde, la oscuridad en la selva
alcanzamos con Pablo viniendo del campamento impedía una buena visibilidad. Encontramos un
por una ruta totalmente distinta a la que tomamos primer mogote como de 75 ms.n.m., cuyo ascenso
hoy, y por la que finalmente llegamos después fue agotador, dándonos cuenta que ya estábamos
de tantas dificultades al cerro CAPI, al que hoy cansados, especialmente los muchachos cargando los
afortunadamente no teníamos que llegar. Después bultos. Cuando eran como las 16:00 horas (7:45 h de
de más o menos 6:30 h de caminata llegamos a una caminata efectiva), y tratando de acercarnos lo más
meseta amplia, donde la brecha se convierte en un posible al punto cinco (elevación de 2814 ms.n.m.),
camino como de 2.5 m de ancho, que bajando hacia que según el GPS estaba como a 200 m en línea recta,
la derecha y abajo (hacia el norte), se llega, según seguimos con mayor dificultad, encontrando más
Pedro, a entroncar a más o menos 5 km en un lugar adelante otro cerrito como de 100 ms.n.m., el que
conocido como cuatro caminos, con el que viene tratamos de bordearlo caminando horizontalmente
del Aguacate hacia la antigua finca Santa Clara. para no ascenderlo y salir por el lado opuesto, sin
En esta meseta encontramos los restos muy viejos embargo eso fue muy difícil por lo inexpugnable de

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la selva, pues los muchachos tenían que ir haciendo descansar solo un “ratito”, pues teníamos que armar
la brecha con la pesada carga encima, lo cual a estas el campamento lo más pronto posible porque ya nos
alturas de la caminata era sumamente difícil, aun quedábamos sin luz. Todos procedimos a cortar los
cuando alguno de nosotros ayudaba con machete y postes y las “costillas” para la champa, que esta vez
tronchando ramas con la mano. Cuando habíamos nos albergaría a los cuatro. Limpiamos muy bien
bordeado el “cerrito” como en una cuarta parte, el lugar, colocando en el piso muchas hojas de una
decidimos regresar como 10 minutos, pues en ese especie de palma parecida a la manaca y encima una
trayecto habíamos divisado el único lugar más o pieza de nylon grande y una aún más grande como
menos adecuado para acampar; así lo hicimos, y techo; luego tratamos de hacer una fogata, lo cual
cuando eran las 17:20 horas (9:05 h de caminata), y a fue muy difícil porque todo estaba muy húmedo
2750 ms.n.m., nos detuvimos ya casi en la oscuridad. y aun con la ayuda de un poco de gasolina de la
estufa, fue una proeza, y es que una buena fogata
Todos estábamos visiblemente agotados, por lo que era imprescindible para calentarnos, pues el frío
lo primero que hicimos fue tirarnos al suelo para empezaba a sentirse.

Bosque, troncos con musgo y campamento.

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Ya con todo listo pensamos en hacer la cena. Con poco hasta las 7:00 horas cuando nos levantamos,
la preocupación de que la cantidad de agua no fuera preparamos nuestras mochilas de asalto y
suficiente para lo que faltaba por caminar hacia desayunamos algo (yo como de costumbre solo un
adelante y para el regreso, decidimos ahorrarla no jugo y un paquetito de galletas), Luis y los muchachos
haciendo sopa, sino cenando comida enlatada, café, tomaron café y comieron memelas de frijol. Ya todos
pan y algunas golosinas, que costaba engullirlas sin listos y siendo las 8:10 horas, iniciamos todavía con
el suficiente líquido. Platicamos un rato comentando mucho frío, el ascenso al cerrito (creemos que la
la dura jornada del día, y conscientes de que aún temperatura a las cuatro o cinco de la madrugada
faltaba por alcanzar la cumbre del punto 5 y 3 km pudo haber llegado a los 6-8°C), y aun cuando no
más hasta El Pinalón, y solo contábamos con dos días llevábamos mayor carga (excepto yo que llevaba
para llegar y regresar todo lo andado, concluimos además de mi cámara, algo para beber y comer), la
que no podríamos lograrlo en esta ocasión; pues marcha era lenta por lo cerrado de la selva a pesar
esos 3 km finales serían los más difíciles, porque de que íbamos tres haciendo la brecha. Alcanzamos
deberíamos ascender como 200 ms.n.m. y salvar dos falsas cumbres y una roca muy grande que hubo
una serie de columpios, y porque el agua disponible que bordear, además un enorme árbol caído que
era suficiente para dos días, pero no lo sería si se constituyó un obstáculo al paso. Finalmente después
prolongaba el tiempo o surgiera algún imprevisto. de 1:10 h de encumbrar alcanzamos los 2814 ms.n.m.
Con todo esto en mente, llegamos a la conclusión del punto cinco. Esta cumbre que no aparece en el
de que al día siguiente con mochila de asalto mapa con nombre alguno solo con las coordenadas:
ascenderíamos directamente a la cumbre del punto W 89° 53´11.94´´ y N 15°4´55.91´´, simbólicamente
cinco a 2814 ms.n.m., es decir a solo 64 ms.n.m. la bautizamos con el nombre de cerro Carlupeh (por
del campamento, luego bajaríamos a levantar el las iniciales: CARlos, LUis, PEdro, Herlindo), por
campamento para iniciar el regreso definitivo y los que participamos en su primer ascenso. Desde
empezar a planificar un tercer intento para llegar al esa cumbre solo se podía ver selva y solo selva,
tan ansiado y escurridizo Cerro Pinalón… excepto una pequeña meseta al lado opuesto al que
tomamos para encaramarnos, esto quería decir que
Cuando eran como las 20:30 horas temblábamos cualquier ruta a seguir sería difícil, lo que significaba
por el intenso frío, porque estábamos a 10°C y las que los 3 km que nos separaban del Pinalón
manos ya nos dolían, pues para ajuste teníamos la serían muy agotadores. Descansamos un rato, nos
ropa húmeda por andar entre las plantas mojadas comimos un tentempié y luego nos dispusimos a
de la brecha. Los muchachos se envolvieron con iniciar desde este punto, el largo viaje de retorno
la carpa de Luis y nosotros nos metimos a nuestras con un doble sentimiento: por un lado el de una
bolsas con la ropa, gorra y guantes y así todos nos gran frustración al no haber logrado por segunda
dispusimos para un merecido y reparador descanso. ocasión el objetivo tan deseado, especialmente para
La noche transcurrió sin novedad y si algo pasó yo mí, porque significaba una caminata que formaba
no me di cuenta pues caí en un sueño tan profundo, parte del proyecto: “Travesía Sobre la Sierra de
casi en estado catatónico. Despertamos con Luis Las Minas”, el que una vez más seguía sin avanzar;
a las 6:30 a.m. porque los muchachos fieles a su y por otro lado, la gran satisfacción de haber llevado
costumbre, se levantaron temprano para “juntar” el a cabo la mitad de una jornada pedestre muy
fuego, haciendo ruidos y hablando en voz alta sin extenuante y exigente para mi desvencijado cacaxte
ninguna consideración para quienes deseábamos del año 1935. Pues bien, estos eran los sentimientos
seguir en brazos de Morfeo un ratito más. ¡En fin!, que me invadían en esos momentos. No había más
despertamos y nos fuimos desperezando poco a tiempo para meditar pues teníamos que iniciar la

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marcha, el descenso era tan lento como el ascenso (para este mismo tramo en la ida habíamos hecho
por lo inclinado del terreno y la cantidad de troncos 2:35 h; es decir 50 minutos menos, esto por venir
y rocas cubiertos de grueso y resbaloso musgo, de sobre la brecha ya abierta). Este es un punto ideal
modo que hicimos la misma 1:10 h de tiempo de para descansar que aprovechamos para almorzar
regreso, caminando solo 1 km. comiéndonos el Pollo Campero, que para entonces
ya tenía más de tres días de comprado y aun sabía
Eran las 10:30 horas cuando bajamos, y rápidamente delicioso dadas las circunstancias. Ahora venía la
empezamos a levantar el campamento, a distribuir y parte de la brecha maderera con una ligera inclinación
acomodar los telenques, notándose ahora que el peso en ascenso. Como el descanso se hizo un poco largo
de los bultos era menor, especialmente por haberse para todos, yo, siendo el más lento para caminar,
consumido agua y comida enlatada; aun así todavía aproveché para salir adelante mientras los demás
pesaban bastante. Siendo las 11:30 horas iniciamos aun descansaban, logrando adelantarme una hora
la marcha con la idea de llegar este día al punto tres como solitario andarín hasta que me alcanzaron. En
(la caseta de las antenas). Con menos peso la marcha este tramo tuve la suerte de ver un pavo de montaña
se hizo más rápida, siendo obvio el avance. A pesar y dos hongos que jamás había visto, pues uno tenía
de la hora la selva era obscura. En ese mismo tramo un tallo de más o menos 40 cm de largo y 2 cm de
de la caminata tal como nos ocurrió a la ida, nos grosor y la sombrilla o el hongo propiamente dicho,
encontramos con un grupo de monos aulladores que como de 7 cm de diámetro, y el otro era un hongo
a corta distancia trataban de intimidarnos con sus totalmente negro, preciosos ejemplares y muy raros
rugidos. En 1:45 h llegamos a la meseta de los cuatro para mí, que habiendo andado por tantas montañas
caminos donde empieza la brecha hacia la caseta, durante tantos años, no había visto unos así.

“La oveja negra de los hongos”.

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Ya todos juntos seguimos avanzando rápidamente km), habiéndonos tomado 9:05 h de ida (33.7 min/
por la brecha, llegando a las 15:00 horas al km) que es exactamente el doble del tiempo que
campamento de las pilas de madera donde tardamos en la ida, haciendo la observación que la
acampáramos en el viaje anterior con Pablo e Israel, mayor dificultad fue en esos últimos 2 km.
y sin detenernos allí, continuamos por la brecha
hacia la parte inclinada, trecho de charrales cerrados A las 16:10 horas cuando llegamos a la caseta había
que finalmente nos llevaría a la caseta de la antena, sol, sin embargo se sentía frío, no tanto como
a donde llegamos a las 16:10 horas. Hicimos en a la ida pues ahora había menos viento. No nos
increíbles 4:40 h desde el campamento, o 7 h tomando sentíamos tan cansados a pesar de lo caminado,
en cuenta el ascenso y descenso del Cerro Carlupeh, de manera que nos pusimos de inmediato a cortar
lo que nos tomó 9:05 h de ida, demostrando así lo mucha hoja de pino -conífera muy abundante en
lento que puede ser la caminata en los tramos donde ese lugar-, para ponerla de mullido colchón en el
hay que ir abriendo brecha en plena selva virgen. suelo; armamos nuestro “dormitorio común” en el
Habíamos caminado aproximadamente 16 km en corredor de la caseta, cuidando ahora que quedara
este último tramo, (siendo apenas 10.2 km medidos más ancho y la entrada más alta, para que cada uno
sobre el mapa), a una velocidad en la ida de 34 min/ tuviera más libertad de movimiento y que no nos
km, excepto en los últimos 2 km, donde hicimos tuviéramos que agazapar mucho y entrar con mayor
3:05 h, a una velocidad de 1:32 h/km y de regreso comodidad. Sabiendo que de aquí en adelante ya no
en esos mismos 2 km hicimos 1:45 h (52 min/km). necesitaríamos mucha agua, preparamos como a las
Hasta la caseta hicimos 4:40 h de regreso (17.5 min/ 19:00 horas una suculenta cena con sopa, frijoles

Bajando al Valle del Motagua.

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colorados, café, pan, galletas, dos últimos pedazos Procedimos a acomodar todos nuestros telenques
de Pollo Campero aún “en perfecto estado de salud”, en la Nissan para emprender la marcha pasando por
Luis abrió una lata de atún y yo una de salchichas, La Constancia y luego dejar a los muchachos en La
de modo que no hubo limitación alguna para cenar. Montañita, a donde llegamos siendo las 14:00 horas.
Hicimos una espectacular fogata con un gran tronco,
la que nos daba un calorcito muy agradable en esa En esta como en otras ocasiones habíamos llevado
fría noche. La plática postprandial se prolongó hasta una cantidad de ropa usada pero en buenas
las 20:30 h, y así en alegre coloquio abordamos condiciones para todas las edades, que repartiríamos
una serie de temas, unos cuantos chascarrillos, precisamente al regreso entre las cinco familias de
comentarios de las jornadas etc., etc., para luego ese pequeño caserío; separamos unas cuantas piezas
acostarnos para amanecer e iniciar al día siguiente porque queríamos pasar al Jute para entregárselas a
la última etapa del regreso. Dormimos muy bien, no Don Toño. Después de la repartición “arreglamos
hubo mucho frío. Despertamos como hasta las 7:20 cuentas” con nuestros guías/porteadores, agregando
a.m. pues habíamos tenido la precaución de decirle una bonificación por su impecable desempeño, por
a los muchachos que si se levantaban más temprano, su disposición y su comportamiento durante toda
que no hicieran ruido ni hablaran en voz alta para la jornada, esperando que ellos hayan quedado
que nosotros pudiéramos dormir “un poquito también complacidos. La esposa de Herlindo nos
más”. Nos levantamos, desayunamos frijoles, pan, invitó a comer un plato de frijoles parados con
café y galletas y acto seguido a arreglar y distribuir huevos revueltos, y lo más sabroso: “tortillitas
aquella retahíla de chunches que aún quedaban. acabaditas de salir del comal”; además dos grandes
Ahora ya podíamos dejar de llevar el agua que ya picheles de limonada bien cargada. Fue todo un
no necesitaríamos, por lo que el peso de la carga era “boccatta di cardinale” comer caliente, sentados y
notoriamente menor para alegría de Herlindo y de con mesa servida; después de cuatro días de andar
Pedro. Siendo las 9:40 horas salimos para iniciar el 4° enmontañados en condiciones de sobrevivencia.
día de actividad montaraz, rumbo a reencontrarnos Comimos agradeciendo las atenciones de que fuimos
con nuestra Patrol quien ya estaría reclamando objeto y salimos hacia El Jute, donde pasaríamos
nuestra presencia. Empezamos a desandar este ya a saludar a mi querido amigo Don Toño, a quien
bien conocido tramo, pasando por la selva húmeda, casualmente encontramos caminando a la orilla
La piedra de la Cuña, y un par de rocas que tuvimos de río del mismo nombre: El Jute, que atraviesa
que escalar para luego llegar a los zacatales de las el pueblo de extremo a extremo; por ahí iba Don
heces de tigre y de allí llegar finalmente a la base Toño acompañado de tres de sus nietos que ahora
del Siglo y al último descenso hacia el carro. En a sus 86 años de edad viven con él, porque su hija
esta parte yo me quedé en la zaga para recoger una los abandonó, atendiéndolos él solo, sin trabajo,
buena cantidad de unas hermosas “piñas de pino”, y por supuesto sin medios para subsistir y con su
para hacer arreglos de Navidad que tenía en mente. característico renquear de su pierna derecha, y por
Llegué al carro como 40 minutos más tarde que el si fuera poco, hacía apenas una semana que había
resto del grupo, y esto fue a las 13:00 horas (los demás enterrado a su hijo Oscar a quien habían asesinado.
llegaron a las 12:20 horas). Es decir 2:40 h desde la Una tragedia humana digna de una película de
caseta (22.8 min/km), lo que de ida nos tomó 6:05 drama, que nos entristeció mucho al no comprender
h para los aproximadamente 7 km de distancia (52 por qué la vida se ensaña de esa manera con quienes
min/km). En total en este segundo tramo de la gran no lo merecen. La entrega de la ropa, algunas latas,
travesía, habíamos caminado aproximadamente dulces y otras cositas ya no fue tan alegre, pues
31.2 km en 26:10 h, a un promedio de 50.3 min/km. además las fiestas de Navidad estaban muy cerca, las

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que no serían muy felices para Don Toño. Con un se refiere a la cantidad de agua, pues uno nunca está
nudo en la garganta me despedí de él con un fuerte seguro de cuánto del vital líquido necesita para los 3
y muy sentido abrazo y aún escucho su voz apagada km que restan por caminar vistos en el mapa, cuando
con la que me agradeció y me deseó bendiciones. En se convierten en seis a ocho cuando se recorren
el fondo de mi corazón sólo pensé: ojalá y lo pueda caminándolos in situ. El segundo factor es el tiempo,
volver a ver, ojalá… Casi sin pronunciar palabra pues hay que tomar en cuenta que cada día que se
salimos de la aldea para entroncar con la carretera camina hacia adelante, es un día más también hacia
CA9 y enfilar hacia Guatemala, con tan mala suerte atrás, con el consiguiente desgaste físico y consumo
que cuando nos acercábamos a la aldea La Estancia de vituallas; además, que todo aumento en la
de la Virgen (kilómetro 100), encontramos una cantidad de insumos representa carga a la hora de la
larga cola de vehículos sin avanzar, debido a un planificación de la logística y estrategia del proyecto
aparatoso accidente de tránsito entre dos trailers, y que en principio representa mayor esfuerzo para
afortunadamente pudimos tomar un camino los porteadores, los cuales entonces deben de ser en
alternativo que pasando por el municipio de El mayor número para compensarlo.
Jícaro nos llevó unos kilómetros más adelante
del obstáculo vial, pero adelante del restaurante En esta ocasión en particular, el factor determinante
“Chicharrones Don Carlos”, al cual no podíamos fue el tiempo, porque el intentar llegar al Pinalón
dejar de pasar, por lo que tuvimos que regresar un implicaba dos días más -pudiendo ser más-, y Luis
poco para tomarnos las “obligadas” dos cervecitas tenía que regresar impostergablemente al 4° día.
Dorada Ice bien frías, con el respectivo plato gigante En fin, la verdad es que no conseguimos el deseado
de chicharrones, carnitas, yuca y aguacate; un plato objetivo y ahora debíamos de pensar en un tercer
que con solo recordarlo “se me hace agua la boca”. intento, el cual debería llevarse a cabo lo más pronto
Con los abdómenes tipo Buda, salimos hacia la posible para aprovechar la brecha ya abierta que nos
capital llegando como a las 18:00 horas. permitiría avanzar más rápido, especialmente en la
parte de selva cerrada, y para aprovechar también
Esta nueva expedición era muy significativa para la época de verano, porque en invierno aunque se
mí, porque de haber logrado el objetivo de llegar al puede aprovechar el agua de lluvia para nuestras
Cerro El Pinalón, hubiese sido la culminación del necesidades, lo torrencial de las lluvias que ocurren
sueño que he tenido por muchos años: completar en las altas montañas de la sierra y el intenso frío,
por etapas la travesía sobre la SM a través de sus hacen sumamente difícil la caminata. Por otro lado
cumbres más altas, cañones y montañas; travesía que se acerca para los muchachos la época de la tapisca
como lo hemos dicho anteriormente, representa en de maíz y frijol, luego la preparación del terreno
la carretera CA9 que corre paralela a dicha sierra, para la siguiente siembra, etc., por lo que ya no
66 km de distancia, y que no sabíamos hasta este podríamos contar con ellos para un nuevo intento
momento, a cuánto correspondería en distancia, en ese tiempo.
haciendo el recorrido paralelo a pata que nos
proponíamos sobre la sierra. Este segundo intento Comparto aquí lo que escribí al final de la bitácora
fallido me hacía sentir frustrado, a pesar de haber de esta caminata: “Ojalá pueda lograr caminar en un
sido una maravillosa experiencia desde el punto futuro esos últimos 3 km y terminar así la narración
de vista montañista, por la inmensa cantidad de de la Travesía Sobre la Sierra de Las Minas, aunque
enseñanzas obtenidas, especialmente porque eran sea lo último que haga”…
varias las razones de nuestro “fracaso”, las cuales
ahora podrían ser prevenidas, especialmente la que

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Tercer tramo de la Segunda Etapa
(8, 9 y 10 de febrero de 2008)

“Una montaña es un lugar por ahí, entre ninguna parte y el paraíso,
sólo un poco más allá, pero muy cerca del cielo...”
Carlos Beteta

No sé si es ya una obsesión compulsiva, una jamás formado para una actividad montañista: ocho
necedad, un reto conmigo mismo, un simple deseo en total. Seguimos por la ruta bien conocida pasando
de aventura o el hecho de no darme por vencido por La Constancia y el ascenso hacia la horqueta
ante las adversidades que me presenta el deporte o collado de los cuatro caminos, donde ahora por
de mis amores: el montañismo; el cual he venido primera vez no tomaríamos por la brecha que nos
practicando desde hace más de sesenta y tantos años, llevó a la base del Siglo; hoy según la estrategia
y más activamente en los últimos 25. Lo cierto es que planeada, pensábamos llegar a esa misma última
después de los dos muy sufridos intentos anteriores meseta en forma directa por el camino que vimos
durante siete días en la montaña, no logramos llegar que bajaba de ella y que según Pedro venía de un
al cerro Pinalón para completar la Travesía Sobre lugar conocido también como cuatro caminos. Por
la Sierra de Las Minas, que es el mayor proyecto eso, ahora seguimos en los vehículos del collado
montañista que hayamos querido llevar a cabo. hacia El Aguacate, un lugar que funcionaba como un
Ante la segunda frustrada aproximación, Luis De gran campamento de la empresa MEASA y que hoy
La Vega y el suscrito planificamos una logística y ha quedado reducido a solo tres viviendas habitadas
estrategia diferentes para efectuar un tercer intento, por gente extraña a la empresa. Bajando por este
que nos darían las mejores probabilidades de éxito. angosto, inclinado y peligroso trayecto de 6 km de
En esta nueva ocasión se apuntaría un miembro más camino en malas condiciones, aprovechamos, al
al grupo, nuestro amigo y colega el Dr. Luis Luján contar con un día esplendorosamente despejado, para
Lorenzana. gozar de las mejores vistas de las más emblemáticas
cumbres de la SM como son: La Cucaracha, y los
Para tal propósito, salimos el viernes 8 de febrero a cerros Raxón, Cenagal, Mojón de Joya de Bueyes
las 5:30 horas en dos vehículos, nuestra inseparable e y Piedra Rajada; así como la oportunidad de ver
incomparable Nissan Patrol y el pick up nuevo Mazda el espectacular Cañón del río Teculután, que por
BT50 del Dr. Luján, pues ahora nos acompañarían su lado occidental tiene como 900 m y por el lado
cuatro porteadores previamente apalabrados por
Herlindo, quien en principio no nos acompañaría Cerros La Cucaracha, Caquipec, Raxón, Santo Toribio y Mármol.
por tener compromisos previamente adquiridos.
Llegamos a La Montañita (caserío donde viven los
porteadores), y Herlindo visiblemente entusiasmado
finalmente decidió acompañarnos, aunque no
le pagáramos..., nos dijo; quedando conformado
el grupo de cinco guías/porteadores: Herlindo
Gutiérrez, Pedro Jacinto y Roberto Rodríguez, y dos
más cuyos apellidos no supimos: Luis y Rolando,
más los Luises y el suscrito; el grupo más grande

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oriental más de 1000 de profundidad. Después de caminata era lenta pero continua, y yo como siempre
pasar El Aguacate, seguimos bajando rumbo a la finca más lento que los demás pero sintiéndome en muy
Santa Rosa también propiedad de MEASA (ahora buenas condiciones tratando de llevar mi paso sin
en litigio con antiguos trabajadores de la compañía). “quemarme” prematuramente, muy entusiasmado,
Después de avanzar como 4 km, llegamos al lugar aunque en el fondo invadiéndome la duda de si esta
conocido como cuatro caminos, lugar desde donde vez lograríamos nuestro ansiado objetivo, pues de no
Pedro decía que llegaríamos a la meseta en el viaje ser así estaba casi seguro que no volvería a intentarlo
anterior. Tratamos de seguir un poco más desde el más…, por todo lo que implica la planificación
entrón que por una brecha abandonada en pésimas especialmente en cuanto a la disponibilidad de
condiciones que se dirigía hacia arriba, avanzamos porteadores, vehículos, insumos, coincidencia de
como 200 m encontrando profundas zanjas, curvas tiempo disponible de los participantes, etc., etc.
y ganchos muy cerrados que pusieron a prueba la
doble tracción de los vehículos y la pericia de los En esta primera parte de la ruta, nos llamó la
pilotos, logrando finalmente avanzar unos 150 m atención encontrar por primera vez en la SM
más, ya con una inclinación de más de 33°, hasta árboles de pinabete, lo cual fue posteriormente
que fue literalmente imposible continuar, teniendo motivo de consulta con algunos biólogos, quienes
que dejar los carros. Eran las 10:20 horas, 5:20 h tampoco tenían conocimiento de su existencia en
desde Guatemala y a 2075 ms.n.m. Bajamos aquel esa región de la sierra. Después de ascender tan solo
promontorio impresionante de toda clase de objetos: 1:50 h inesperadamente llegamos a la meseta del
mochilas, cajas con latas y comida, recipientes con filón de la sierra a 2814 ms.n.m., que era el punto
agua, costales, redes, cuerdas, bordones, machetes, cuatro en el mapa, al que en el viaje anterior nos
estufas, piezas de plástico, y como siempre una aún había tomado un día y medio llegar; eran solo las
más larga lista de etcéteras. 12:40 horas y ya nos habíamos ahorrado un día y
medio de tiempo y más de 13 km de caminata;
Procedimos a ordenar y distribuir equitativamente esto nos hizo sentir muy optimistas y eufóricos,
aquel jaracatal de bártulos dentro de sendos costales, creciendo el entusiasmo entre todos. Aun cuando
los que serían llevados por los porteadores a no estábamos cansados, pensamos que el lugar era el
cucuche con mecapales. A las 10:50 horas iniciamos adecuado para detenernos un rato y aprovechar para
en fila india la caminata por una de las muchas almorzar, porque luego de este punto entraríamos
brechas abandonadas de la región, la que estaba bien a le selva cerrada. Hicimos una fogata para calentar
marcada y con una inclinación al principio de unos frijoles, tortillas, comimos sándwiches y bebimos
20°-25°. El clima un poco nuboso y temperatura agua, y en mi caso té frío.
fresca agradable. Se debe insistir en que siendo el
agua el elemento determinante para el éxito de la Descansando en la Meseta del Filón.
empresa, en este tercer intento llevábamos unos 80
litros en total (aproximadamente 175 lb de peso),
calculados para cuatro días de expedición, que
corresponden a 2.5 lt/persona/día, lo cual es poco
tomando en cuenta el tipo de actividad física que se
desarrolla, pero confiando en que los muchachos
consumen muy poca agua, sin explicación científica
que lo explique. De esa cantidad la mayor parte por
supuesto era trasportada por los porteadores. La

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Troncos cubiertos de musgo. El paso que llevaba el grupo era rápido, pues la brecha
abierta hacía un mes era muy visible, de manera que
Yo me seguía sintiendo físicamente muy bien sin darnos cuenta llegamos al campamento anterior
y deseaba seguir lo más pronto posible, porque a las 15:15 horas. Paramos para analizar la situación,
deseaba llegar más allá de donde habíamos llegado el porque era muy temprano para quedarnos allí
segundo día en el intento anterior, y eso significaba como sugería Luis De La Vega, agregando que de
4:30 h más de caminata. Dejamos un poco de agua quedarnos, al día siguiente partiríamos solo con
escondida entre el monte para el regreso (no sé mochila de asalto para tratar de alcanzar la cumbre
por qué la escondíamos, pues las probabilidades del Pinalón y regresar al mismo punto donde
de que alguien llegara por esos recónditos lugares estábamos. Yo me oponía, pues era impredecible
eran prácticamente cero), y siendo las 13:12 horas afirmar que los 3 km que nos faltaban por caminar
iniciamos la marcha entre esa primitiva montaña -medidos en el mapa- lograríamos hacerlos en
en la parte más plana, exceptuando los pequeños un día ida y vuelta; yo proponía la opción de que
columpios y altosanos que hay en el trayecto. En sintiéndonos tan en buenas condiciones a esta hora,
ese tramo casi todo el suelo y los troncos caídos siguiéramos con el equipo completo por 1-1.5 km
estaban ahora cubierto de musgo, grandes hongos más y acampáramos por ahí, para continuar al
de hasta 20-40 cm de diámetro pegados a los troncos día siguiente con equipo de asalto de acuerdo a la
de enormes árboles a manera de repisas o gradas, distancia que faltara para hacer el asalto final a la
y de consistencia casi pétrea; habían infinidad de cumbre y luego regresar al punto donde habíamos
líquenes, helechos, tillandsias, orquídeas, grandes dejado el equipo. El vehemente deseo de avanzar más
bromelias con hermosas flores rojas, volvimos a ver para tener mayores posibilidades de lograr el éxito,
aguacatales silvestres cuyos frutos aun camagues me hizo insistir en que siguiéramos caminando
degustamos, vimos también una pareja de caracoles hasta la cumbre a la que llegamos la última vez,
de montaña de unos 10 cm de largo en el momento aprovechando que la brecha ya estaba abierta, Luis
de aparearse y les tomamos fotos (qué indiscretos De La Vega y otros no querían, pues decían que no
verdad), vimos también muy cerca monos zaraguates encontraríamos un lugar adecuado para acampar
que trataron de intimidarnos con sus horrísonos como en el que estaba este campamento, yo por
rugidos. el contrario aducía que según el mapa, “existía”
adelante una meseta suficientemente grande,
Por alguna razón esta vez nos parecía que la selva era bajando al otro lado de la cumbre a la que llegamos
menos obscura que la vez pasada, a pesar de ser más la vez anterior y que me había parecido avistar en
o menos la misma hora del día que cuando pasamos esa ocasión. Aunque sentí que no estaban muy de
la última vez. acuerdo conmigo, no sé por qué decidieron aceptar
mi sugerencia y seguimos caminando, dándonos
cuenta que la escalada del cerro la hacíamos ahora
con menos esfuerzo, aun cuando de todos modos los
arbustos y charrales nos cerraban mucho el sendero.
Llegamos a la cumbre bordeando dos grandes rocas
(estábamos a 2814 ms.n.m.), para luego descender
por el lado opuesto con algunas dificultades, para
llegar tal como lo indicaba el mapa, a una especie
de meseta en medio de la selva, donde por cierto
hallamos otro grupo de pinabetes pero más grandes

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que los que vimos al inicio de esta caminata. En No muy cansados y con la satisfacción de haber
este lugar encontramos más de un sitio adecuado avanzado 1:22 h desde que tomamos la decisión de
para armar el campamento, lo cual nos tranquilizó seguir caminando, a mí en particular me producía la
a todos, a pesar de que solo habíamos caminado sensación de estar cada vez más cerca del objetivo;
2:45 h desde la meseta donde almorzáramos y 4:35 habíamos caminado desde que dejamos los vehículos
h de caminata efectiva desde los carros. Todo nos solo 4:35 hrs lo cual era una buena jornada. Todos
iba saliendo mejor de lo esperado hasta el momento, nos sentíamos bien incluyendo a los muchachos,
por lo que optamos por “escoger” el mejor lugar para quienes en esta ocasión cargaban menos peso
instalar nuestro campamento, eran las 15:25 horas por ser cinco personas, comparándolo con la vez
y estábamos a 2725 ms.n.m., aún con suficiente luz anterior que solo eran dos, una gran diferencia.
aun dentro de la espesura de la montaña. Procedimos a construir una gran champa bajo
mi acertada dirección arquitectónica, pues ahora
éramos ocho los que la habitaríamos; para una obra
de tal envergadura, habíamos llevado dos grandes
piezas de nylon de 5x4 m cada una, y habían en el
bosque muchos árboles rectos de todos los gruesos
que necesitábamos para hacer una champa de 4.5
m de largo por 3.5 m de ancho, con un techo de
“una sola agua”. El terreno lo escogimos con una
ligera inclinación hacia abajo (hacia los pies), para
compensar la falta de almohadas; aquella era la más
monumental champa jamás construida por nosotros
y quién sabe si por alguien más…

Hongo pétreo en tronco. Champa en construcción.

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Champa en construcción. La noche transcurrió tranquilamente, sin mucho
frío -mucho menos que la última vez, en ese mismo
Después de semejante obra de ingeniería encendimos lugar-, aquí recordé a un querido amigo montañista
una gran fogata; los muchachos calentaron frijoles mexicano, Chava Lemus, quien durante una escalada
y sacaron tortillas tostadas tipo totoposte y Luis de de alta montaña en el volcán Popocatépetl nos decía
La Vega, nuestro “chef” de planta, preparó una olla en simpática broma para consolarnos: “Muchachos,
grande de sopa de pollo con fideos, café, pan y una estamos a 0°C , ni frío, ni calor”. Pues bien, yo no
que otra de las delicatessen con las que Luis Luján dormí mucho porque por un error arquitectónico,
siempre nos sorprende para sobremesa. Al terminar lo que creímos sería cómoda inclinación del terreno,
vino la obligada plática postprandial, donde se habló no lo fue tanto, porque durante la noche y ya uno
de todo un poco, incluyendo las chuscas fábulas sobre dormido y relajado se va resbalando hacia los pies
los animales de la selva. El lenguaraz y falsario de y si no se mueve cada poco hacia arriba, termina
Roberto (uno de los porteadores), aun roznando un quedando sedimentado en la parte baja de la champa.
pedazo de totoposte, contó muy convincentemente Habíamos acordado levantarnos a las 6:00 horas para
de la existencia de un león con gran melena, que en salir a las siete, pero como siempre los muchachos
alguna parte de la sierra había seguido de cerca por se levantaron a las cinco, hablando en voz alta,
un largo trecho a un viandante tío suyo…; otro de juntando el fuego, riendo y haciendo toda clase
los muchachos refirió el encuentro con enormes de ruidos, despertándonos a los que hubiéramos
serpientes que se comían a las gallinas y gatos de las querido dormir una hora más. Así nos levantamos
casas. Cuando ya empezábamos a creer semejantes a las seis y después de evaluar la situación con mapa
historias…, nos invadió el sueño y siendo las y GPS en mano, nos dimos cuenta que estábamos
20:25 p.m. uno a uno nos fuimos acostando todos, a 2.5 km (en línea recta), de la cumbre del Pinalón
previo discreto alejamiento por los alrededores, y ahora sí seguiríamos con el equipo mínimo con
para satisfacer alguna necesidad fisiológica que solo tres mochilas de asalto, agua y algo de comida
nos permitiera un descanso sin muchas levantadas para una 6-8 h de caminata ida y vuelta. Pensando
más tarde. Solo Luis De La Vega, como en otras que esta última parte era completamente virgen
ocasiones, se quedó un buen rato más con su sin sendero alguno y desconociendo los obstáculos
lámpara de cabeza, una libreta y bolígrafo en mano que podríamos encontrar, dejamos el campamento
escribiendo, “cosas”…, como le respondió a Luis armado y con todas nuestras pertenencias, con la
Luján cuando le preguntó qué escribía. absoluta seguridad de que ninguna persona andaría
aventurándose por esos ignotos rincones del Señor
Tzuul Tak´a; pero sí corrían riesgo nuestras cosas
de ser “atacadas” por algunos animales como: coches
de monte, mapaches, monos zaraguates, armadillos,
ardillas y otros; por lo que las dejamos dentro de los
costales guindadas de los árboles, para que no les fuera
“tan fácil” alcanzarlas. Siendo las 8:08 horas salimos
del campamento con un día despejado, según se
podía ver a través de la ubérrima selva, con enormes
árboles de 40-50 m de alto y cuyas frondosas copas
formaban un dosel que casi cerraba por completo la
entrada de la luz del sol; el sotobosque lo componían
árboles pequeños, arbustos, algunas palmáceas y

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Selva Inextricable.

mil especies más, era el terreno húmedo típico del llegado en la misma dirección que la nuestra y luego
bosque tropical nuboso. se había regresado. Después de andar por 3:30 h a una
velocidad muy aceptable sobre terreno más o menos
Alrededor de las 2:30 h de caminar, encontramos plano, excepto unos cuantos columpios, llegamos a
sutiles señales de que en algún momento alguna una pequeña cumbre desde donde se podía ver en
persona había pasado por ahí, dejando unas casi la lejanía la cima del Pinalón con las torres que lo
imperceptibles huellas de sendero, que solo la identificaban, todos nos entusiasmamos sabiendo
experiencia y el extraordinario conocimiento sin embargo que aún faltaba mucho por caminar…
montaraz de Herlindo y Pedro, eran capaces de
reconocer después de muchos años de haber sido
dejadas. A partir de estas primeras horas se entra
a un bosque más tupido y más húmedo aún, con
muchos restos de troncos parcialmente podridos,
que cubren agujeros en el suelo con el riesgo de caer
en ellos si uno no tiene cuidado, el que muchas veces
no es suficiente cuando se camina por estos arcanos
lugares.

A continuación se camina por una parte donde ya Cumbre de El Pinalón a la distancia.
no hay ni el más mínimo indicio de que algún ser
humano haya pasado por ahí alguna vez, lo que nos
hacía pensar que también hasta allí alguien había

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Más adelante encontramos en una pequeña construida sobre un pequeño roquedal. Estábamos
hondonada, una estructura de hierro ya ruginoso a 2977 ms.n.m., altura que coincidía con la que
y cubierta de musgo, con la forma de una base de en el mapa identificaba al Cerro El Pinalón, una
mesa o algo así, como de 1.5 x 2 m; este era el primer cumbre insignificante comparada con las muchas
vestigio irrefutable de presencia humana, que nos dificultades que hubo que salvar para su logro; eran
hizo pensar que provendría del otro extremo de la las 12:20 p.m., es decir 4:12 h desde que salimos del
caminata, es decir de gente que del Pinalón había campamento.
caminado hacia este punto, hacia el oriente, hacia El
Siglo. Previamente antes de salir del campamento yo En ese momento teníamos sentimientos encontrados
había comentado, especialmente a los muchachos, de euforia y enorme felicidad, pero estábamos
que en los últimos 3-4 años se habían tenido noticias también nerviosos y temerosos de ser descubiertos
-no confirmadas-, de ataques y demostraciones por alguien…, por lo que la celebración de “feliz
hostiles a excursionistas que trataban de llegar al cumbre” no pudo ser como se lo merecía. Nos
Pinalón por la ruta de San Agustín Acasaguastlán ya apresuramos a tomarnos las fotos de cumbre y un
muy cerca de la cumbre, perpetrados por grupos de corto descanso para salir de regreso lo más pronto
personas identificadas como depredadores furtivos posible e ir a almorzar ya un poco retirados de la
de los bosques de la zona; les hice ver que por “zona de peligro”. Por cierto que yo, que era el único
ningún motivo si fuéramos interceptados por ellos, que había llegado a la cumbre del Pinalón hacía ya
reaccionáramos en forma violenta, que no quería 14 años por la ruta de la Peña del Ángel, me fue
actos heroicos de nadie, que en todo caso me dejaran muy difícil identificar el sitio, excepto porque que sí
hablar a mí, pues ya llevaba preconcebido el discurso me parecían familiares las rocas circundantes, pues
que esperaba me diera resultado. Pues bien, con todo cuando ese grupo llegó en 1994, solo descubrimos
esto en mente, cuando encontramos el almatroste las rocas entre la maleza como el punto más alto,
de metal nos sentimos un tanto temerosos, con nadie había llegado antes y no había ninguna antena
esa sensación de intranquilidad e incertidumbre allí todavía.
que ya hemos experimentado en 4-5 ocasiones en
otras montañas. Avanzamos sigilosos tratando de Ese ambiente de temor y nerviosismo que rodeó
no hablar mucho y hacer el mínimo ruido posible. el momento culminante de alcanzar la tan deseada
A las cuatro horas y quince minutos de caminata, cumbre que tanto esfuerzo nos había costado, evitó
llegamos inesperadamente a una primera caseta que yo experimentara la fruición, ese placer inmenso,
y una antena abandonada y a partir de allí, una el summun, la enorme satisfacción de concluir con
vereda bien marcada aunque poco trillada dentro este ascenso, una muy agotadora etapa de tres tramos.
de un bosque más bajo, muy fresco y agradable. A Así ensombrecida la llegada a esta emblemática
las 11:40 horas llegamos a otra caseta y dos antenas cima, mi yo interno les aseguro, si lo gozó y celebró
también abandonadas, así como restos chatarra de a plenitud. Con esa desagradable sensación de temor
paneles solares y baterías para los mismos, envases e inseguridad que se podía sentir en el grupo, pero
de plástico y mucha basura, pero ninguna evidencia especialmente entre los muchachos, iniciamos el
de presencia humana aún. Desde este punto se retorno no habiendo objeción alguna a la sugerencia
veía en lo alto de un roquerío como de 15 m de de que fuéramos a almorzar hasta donde habíamos
altura, una antena más, sin embargo viendo que el encontrado aquella estructura metálica, lo que quería
sendero seguía subiendo sin acceder a esa antena, decir aguantarnos unos 45 minutos más de caminata.
decidimos continuar y poco después llegamos a una Llegamos allí como a las 13:15 horas, hicimos una
cuarta caseta abandonada con su respectiva antena, fogata, bebimos, comimos y descansamos un rato.

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En la Cumbre del Pinalón (Luis De La Vega tomó la foto).

Descansando al regresar de la Cumbre. Jacinto y Herlindo, quienes se turnaban para irme
esperando. Cuando eran como las 16:00 horas yo me
Ahora venía la lucha contra el tiempo porque no sentía realmente cansado y a punto de esmorecer, y
podíamos correr el riesgo de que nos atrapara la solo porque el temor a la noche era mayor, me hacía
oscuridad en plena montaña, lo que ocurre allí como sobreponerme para seguir caminando. Luis De La
a las 17:00 horas, confiábamos en que ya con la Vega me consolaba asegurándome que llegaríamos
brecha abierta la marcha sería mucho más rápida; sin aún con luz de día al campamento. Siendo las 16:30
embargo estábamos ya cansados, y a mí en particular, horas terminamos de desandar lo andado en esta
la falta de un buen descanso la noche anterior me dura jornada; habíamos caminado 8:12 h efectivas.
estaba pasando factura. Terminamos la parada y Tenía razón mi maltrecha humanidad modelo 1935
enfilamos hacia el campamento. Efectivamente la para casi pedirme su renuncia irrevocable, lo cual
marcha fue más rápida y fácil excepto para mí que fui no sucedió porque el mejor reconstituyente era la
siempre de último con mis ángeles de la guarda: Pedro inmensa satisfacción de haber logrado la cumbre
que se me había negado en dos ocasiones anteriores.
Al solo llegar, dejé caer al suelo cual costal de papas,
lo que quedaba de mi desvencijado cuerpo.

Era la última noche en la montaña y estábamos
gozando al máximo el hecho de encontrar el
campamento armado “con todas las comodidades,
dignas de un hotel cinco estrellas”, incluyendo cena
a la carta y casi a la cama. Esa noche había mucho
viento y más frío que la noche anterior, por lo que

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encendimos una gran fogata que nos hizo sentirnos las 5:00 horas y levantarnos como 30 minutos más
más agradables. Se preparó una suculenta cena con tarde, coincidiendo todos en que habíamos dormido
frijoles colorados con chorizo, sopa mixta (pollo, res, como recién nacidos. Como a las 7:00 horas empezó
verduras y fideos), pan y tortillas. Los muchachos el barullo cuando se puso en movimiento el equipo,
prepararon una gran olla de Incaparina Natural, pero pues ahora teníamos que organizar aquella caterva
con sabor a “vainilla”… sencillamente deliciosa, que de chunches regados por todos lados: doblar,
todos degustamos con las felicitaciones del caso amarrar, guardar, distribuir, acomodar, etc., etc.;
para el equipo de cocineros. La noche despejada, para luego desayunar algo y salir para la última parte
aun cuando el tupido dosel del bosque solo permitía de la caminata de esta expedición. A las 8:43 horas
ver unas pocas estrellas. Hubo poca tertulia todos salieron y yo me atrasé como cuatro minutos,
pues unos más y otros menos, todos estábamos quedándose a mi lado mi ángel Pedro; este atraso me
cansados y además el frío invitaba a meternos permitió ir despacio y tranquilo, pudiendo admirar
pronto en nuestras bolsas a manera de protectores como a los 15 minutos de haber salido, el espectáculo
capullos. Siendo aproximadamente las 20:00 horas de luz y sombra que formaban los rayos de sol
preparamos la fogata con grandes troncos y ramas, penetrando por los resquicios que dejaba la maraña
esperando que durara el mayor tiempo posible. del bosque, estrellándose como potentes reflectores
Yo me metí en mi bolsa, envuelto además en una en el suelo del oscuro bosque; un espectáculo pocas
de esas sábanas térmicas para emergencias. No sé veces visto con esta intensidad y que siempre tuve la
a qué hora me dormí, pero lo cierto fue que solo ilusión de fotografiar. Pocos minutos más adelante
desperté cuando de nuevo el reloj biológico de los tuve otra maravillosa escena: ver el vaho que se
muchachos los hizo levantarse, hablar, hacer ruidos, levantaba del suelo de la húmeda montaña por efecto
etc., obligándonos a recuperar la conciencia como a del calor del sol. Así, lentamente fuimos avanzando

Rayos del sol matinal penetrando la selva.

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y a pesar de que era la cuarta vez que pasaba por grupo puntero de montañistas nos había sacado
este tramo, no tenía presente que aún nos faltaban como 20 minutos de ventaja, por lo que cuando
por ascender dos pequeños altosanos de solo unos arribamos al sitio donde estaban los vehículos ellos
50-70 ms.n.m., estos montículos son muy parecidos ya tenían la fogata a punto. Eran las 12:12 horas,
a los que se ven en las planicies que están después 3:47 h desde el campamento, un excelente tiempo
de Quezada, rumbo a Jutiapa, aunque estos últimos caminando tranquilamente. Terminábamos así el
son geológicamente conos volcánicos. Pues bien, último tramo de esta 2a etapa, después de 17:31 h de
uno de estos cerritos tiene un grado de dificultad caminata efectiva y unos 28 km de distancia,
moderado para crestearlo, porque además de la a un promedio de 37.5 min/km. Se calentó la
ramazón, troncos y hoyos en el suelo, hay una gran comida, siendo hasta aquí cuando nos comimos el
cantidad de un bejuco conocido por los lugareños Pollo Campero de tres días de comprado y que estaba
como bejuco de gonomo o bejuquillo, también en excelentes condiciones y delicioso por cierto; a
conocido como bejuco de alambre, que es el nombre Luis Luján le gustó mucho, por lo que me pidió la
que mejor define las características de este infame “fórmula súper secreta” para que dure hasta cinco
enemigo de los que nos aventuramos a caminar días sin descomponerse (dependiendo en parte de la
por estos lugares y que en muchas ocasiones nos ha temperatura ambiente a la que se mantenga). Nos
hecho caer y en muchas otras, dar rienda suelta a ese cambiamos de ropa (sin bañarnos por supuesto…),
vocabulario, al que en la televisión obligan a ponerle para no ensuciar los asientos de los carros, y una vez
el pitillo y que aquí tampoco lo puedo escribir por más procedimos al acomodo de todo el jaracatal de
respeto a un eventual lector: &#!$%... cosas cada vez más en desorden, los subimos a los
respectivos carros y siendo la 13:00 horas salimos
Así pues, cuando yo ya venía mentalizado a de aquel bonito y sombreado estacionamiento para
caminar solo en terreno plano, me encontré con iniciar la parte cómoda del viaje, porque ahora
estos dos cerritos que no me simpatizaron para nuestros vehículos nos llevarían cargaditos, aunque
nada, afortunadamente luego venía otro tramo por un camino donde los primeros 15 km se recorren
plano ya cerca de la salida a la meseta, a la que con doble tracción por las condiciones del mismo.
finalmente llegamos a las 11:00 horas; 2:17 h desde
el campamento. En este punto descansamos un Llegamos a la Montañita donde vivían nuestros
rato, recogimos los envases con agua que habíamos guías/porteadores, para agradecer y cancelar sus
dejado a la ida y como era aún temprano, decidimos valiosos servicios; por cierto que en un gesto de
descender hasta cuatro caminos -donde dejamos los verdadera solidaridad y reconocimiento al trabajo
carros-, para almorzar allí. Igual que como había realizado por Herlindo, quien se desempeñó en
venido, el descenso lo hice despacio pues por la hora excelente forma igual que sus amigos, y quien
que era teníamos suficiente tiempo para el resto del como recuerdan quería acompañarnos aun sin
regreso. Como siempre Pedro, y ahora Roberto, se devengar sueldo, los compañeros aportaron
quedaron conmigo mientras el resto del grupo se Q25.00 cada uno para él y por nuestra parte Q50.00
adelantó. En este trayecto recogí una rama pequeña para equipararle un merecido sueldo. Como en
de uno de los pinabetes que había visto a la ida y que ocasiones anteriores y ahora ya como una tradición,
junto a otra que corté allá cerca del campamento, obsequiamos a las familias ropa, juguetes y algunos
las quería llevar a un biólogo para saber si esta era víveres en reconocimiento a la invaluable ayuda que
una especie diferente al pinabete que se encuentra nuestros amigos: Herlindo, Pedro, Luis, Roberto
en Totonicapán, Quetzaltenango, Huehuetenango y Rolando nos habían dado, sin la cual hubiera
y otras partes del occidente de Guatemala. El sido humanamente imposible alcanzar el éxito

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del proyecto. Antes de partir fuimos convidados significó una caminata de 10 días, 77.2 km en
a comernos unas tortillitas “saliditas” del comal total, en un tiempo de 59:51 h de tiempo efectivo
con queso de la región, frijoles parados y huevos y la montada de 7 campamentos de montaña. Es
revueltos; lo cual una vez más agradecimos. Desde de hacer notar que aun tomando solo la mitad de
La Montañita ya me vine solo en mi carro, pues esta distancia caminada, es decir 38.6 km; ya que
los Luises se vinieron en la “nueva nave” del Dr. 77.2 km es el doble porque representa lo caminado
Luján. Una vez más pasamos al Jute para dejarle a de ida y vuelta; la distancia de este tramo en línea
mi querido amigo Don Toño Alonso unas cositas recta, medida basada en las coordenadas de ambos
para comer y algo de ropa, para lo cual los Luises extremos, es de tan solo 7.42 km, ¡así de increíble!.
también contribuyeron; luego del siempre emotivo En otras palabras, en esta etapa caminamos más de 5
encuentro con Don Toño, enfilamos sin parar hasta veces la distancia en línea recta que existe entre ambos
“Chicharrones Don Carlos”, donde siendo como las extremos de la misma, siendo la mayor causa de esta
14:45 horas irónicamente pedimos un “desayuno diferencia, el haber andado extraviados durante el
Don Carlos”, sin dejar de pedir -por supuesto-, las primer tramo de esta 2a etapa, y lo tremendamente
cervecitas bien frías para celebrar el logro alcanzado. accidentado de la topografía del área.
Al salir del restaurante nos despedimos, pues ya no
pararíamos más adelante y solo nos veríamos unos La segunda razón de la significación especial del
días más tarde para ver las fotos y comentar las logro de este 3er tramo -el más importante-, es
peripecias del viaje, agradeciendo a mis compañeros que constituye el último tramo de las 11 etapas de
de montaña por su paciencia para con el viejito… caminata de que consta el gran proyecto: “Travesía
Sobre la Sierra de Las Minas de 309.3 km” (desde el
COMENTARIO: cerro El Pinalón en el departamento de El Progreso,
Este viaje en particular tenía para mí un significado hasta el cerro El Picudo, en el departamento de
muy, pero muy especial por dos razones: la primera Zacapa).
porque era la culminación de la última parte de un
proyecto concebido hacía dos años y que intenté
llevar a cabo por primera vez del 13 al 15 de abril
del 2007 en una sufrida caminata de tres días,
intento que relaté en el inicio de esta 2a etapa. Necio,
obstinado o terco, como me quieran llamar; ya con
la valiosa ayuda de Luis De La Vega el experto en
GPS, manejo de brújula y de mapas, y la ayuda de
Herlindo y Pedro Jacinto, llevamos a cabo el 28
intento del 12-15 de diciembre del 2007, ocasión
en que nos quedamos a solo un día de nuestro
objetivo: El Pinalón, pero que tuvimos que abortar
por las razones de falta de tiempo y principalmente
de agua que ya comentamos en el segundo tramo
esta misma etapa. Ya con pleno conocimiento
de todas las vicisitudes que habíamos vivido, se
diseñaron la logística y estrategia diferentes para el
3er intento motivo del presente relato, intento con
el que culminamos este gran proyecto que en total

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Tercera Etapa:
Ascenso a la Cumbre del Cerro “El Siglo”

(15, 16 y junio de 1996)

“Las montañas se suben tres veces:
una con el bastón, otra con la pluma y otra con la cámara fotográfica”

Kurt Diemberger

Con mi querido amigo Mario Da Silva -brasileiro entrada al Jute en el km 111.5 de la carretera CA9 en
por supuesto-, y quien para nuestra suerte se Usumatlán, Zacapa, donde recogeríamos el permiso
incorporara al Grupo Tzuul Tak´a, pues es una de paso y luego por un camino de terracería en
de esas personas a quienes “obligadamente” se les buenas condiciones se llega a la aldea El Jute, y de
aprecia por su don de gente, amabilidad, simpatía, allí empieza el camino ya en regulares condiciones,
humildad y en fin, un tanatal de virtudes; decidimos inclinado, con piedra suelta, hoyos, etc., lo cual no
efectuar una excursión montañista en la SM. Para era reto para la Nissan. Más adelante pasamos por
el efecto planificamos el ascenso al cerro El Siglo la aldea El Chico la última comunidad municipal,
en jurisdicción de Teculután, Zacapa. Como la y de allí seguir subiendo. Conforme nos vamos
primera etapa al cerro El Pinalón, esta no pensamos alejando de la civilización el camino se va haciendo
jamás que llegaría a tener la importancia que hoy cada vez más difícil, pasamos una talanquera en el
tiene, pues quiso la suerte que este cerro fuera el lugar conocido como La Montañita, y solo unos
punto que marcara el final oriental de la segunda 200 m más adelante llegamos a la entrada de la
etapa que narramos anteriormente, y por lo tanto primera finca de MEASA, La Constancia, eran las
tiene los merecimientos propios para ser tomada 10:15 horas, allí entregamos el permiso al guardia
en cuenta para esta significativa aventura. En la fuertemente armado que cuidaba la puerta, a quien
planificación de esta caminata estaba incluida la preguntamos sobre la ruta a seguir hasta el punto
solicitud del permiso de paso que debería extender donde dejaríamos el carro, y como respuesta nos
la empresa -MEASA-, para transitar por terrenos contactó con Fermín, un trabajador de la finca
de dos fincas de su propiedad que están en el que según él conocía el cerro El Siglo; al conocerlo
trayecto de acercamiento a dicho cerro; conseguido personalmente muy espontáneamente se ofreció
este, diseñamos la logística y estrategia para del acompañarnos, pero su personalidad no nos gustó
caso y ya con todo listo, el sábado 15 de junio de a ambos, no nos infundió confianza, por lo que muy
1996, cargamos nuestro cachimbazal de bártulos, “diplomáticamente” hicimos lo posible para que no
mochilas con ropa, bastimento para dos días, carpa, fuera con nosotros, pues teníamos muy claro por
bolsas para dormir, machete, lámparas, bordones y dónde debíamos encarar nuestro objetivo y no lo
un montón de etcéteras, en nuestra infaltable Patrol, necesitábamos; sin embargo insistió tanto que nos
una 4x4 de 4100cc de cilindrada, un tractor con sentimos mal por no aceptar su desinteresada ayuda
forma de camioneta para uso en malos caminos, que y subió al carro. El camino de aquí en adelante es muy
nosotros usábamos hasta donde no había camino malo, con grandes zanjas que hacen los camiones
para que “gateara” subiendo de una en una cada madereros dejando un alto camellón en medio del
rueda. Pues bien, salimos la pareja a las 8:00 horas camino, que a cada poco le raspaba el “ombligo” a
(en muy raras ocasiones salimos tan tarde), hacia la la Patrol. Como 6 km después de la Constancia,

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llegamos al collado entre los cerros El Siglo y La no haber rechazado con firmeza sus sugerencias.
Bandera Perdida a 2300 ms.n.m. por donde nosotros Finalmente después de más de 1 hora de tensión y
habíamos decidido desviarnos para acceder a riesgo, salimos al camino de ascenso antes de llegar
nuestro objetivo, sin embargo Fermín insistió en al collado, por donde habíamos pasado hacía como
que él conocía un camino por donde llegaríamos cinco horas y aquí “bajamos a nuestro experto guía”.
más directamente a la cumbre, por lo que en mala Nosotros, aun cuando habíamos alcanzado una
hora aceptamos tomarlo. Nos hizo seguir bajando cumbre que supuestamente era la del Siglo, yo estaba
hasta el campamento El Aguacate a 1600 ms.n.m. y seguro que esa no lo era y la queríamos buscar para
a 6 km del collado, ya en otra finca: El Jabalí. Desde lograrla costara lo que costara.
aquí subimos en la camioneta por una brecha de
penetración entre el bosque; al principio la brecha Decidimos subir de nuevo al collado y de allí
estaba en condiciones aceptables, hasta que llegamos desviándonos al noroccidente -donde deberíamos
a un punto en pésimas condiciones que pudimos haber seguido al pasar la primera vez- tratar de
seguir hasta encontrar un árbol caído como de 60 cm localizar la cumbre del cerro. Nos metimos por una
de diámetro que nos impidió continuar. Estábamos brecha en buenas condiciones avanzando como
como a 2 km de una cumbre a la que llegamos a 600 m, hasta que una pendiente muy inclinada
pie, donde habían una torre repetidora de radio y con barro resbaloso y mucha ramazón de pino nos
una pequeña caseta de block recién construidas, impidió seguir en carro, de manera que decidimos
estábamos a 2810 ms.n.m. El tiempo nublado nos continuar a pie cargando nuestra mochilas y demás
impidió la visibilidad para orientarnos y ver alguna tepalcates, hasta encontrar un lugar adecuado para
cumbre cercana, pero estábamos seguros que no armar campamento, pues para entonces eran ya las
era la cumbre de El Siglo. Tomamos algunas fotos. 17:15 horas y pronto la oscurana nos sorprendería.
Habíamos decidido regresar por el mismo camino Andábamos en la montaña desde hacía 7h. Como
pero de nuevo el falsario de Fermín nos dijo que a 300 m de donde dejamos el carro encontramos
él conocía un camino más corto y “Sí, dijo Juan un lugar que aunque no era el ideal para instalar el
Baboso…” y le hicimos caso, haciéndonos bajar mejor campamento, el tiempo apremiaba, el cielo
por lo que quedaba de una muy estrecha brecha se había aborrascado y amenazaba lluvia. Armamos
abandonada hacía más de 40 años. A los pocos nuestro campamento y luego procedimos a hacer
metros de iniciada la bajada nos dimos cuenta una fogata para preparar una suculenta cena, pues
que era imposible echar marcha atrás, porque no apenas habíamos comido un ligero tentempié en
se podía dar vuelta ni retroceder, teníamos que la caseta de las antenas y las tripas nos crujían de
seguir bajando dándole de golpes a la camioneta hambre; preparamos sopa, un Nacatamal (tamales
en las loderas, la lámina protectora del tanque y hondureños enlatados), café hervido, pan y galletas.
del diferencial y en el peldaño de la carrocería. Aquí estrené una pequeña lámpara en forma de
Literalmente íbamos haciendo “gatear” a la pobre vasito, que contiene una veladora de parafina pero
Patrol entre rocas, zanjas, troncos semipodridos, que está protegida del viento, ésta la había comprado
paredones y a la orilla de un inclinado y profundo en una tienda REI en EEUU hacía ya unos años y
barranco. Habían partes tan angostas que apenas no la había usado; por cierto que nos funcionó de
cabía el vehículo con peligro de que se derrumbara maravilla. El tiempo mejoró, se despejó el cielo y se
la orilla y cayéramos por la ladera; por supuesto alejó la posibilidad de lluvia, admirando una noche
que durante toda esta odisea me faltaron palabras estrellada como pocas veces se ven.
disonantes para expresar toda mi rabia contra
nuestro “ experto guía” y quizás más contra mí, por Platicamos de muchas cosas, nos congratulamos por

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