The words you are searching are inside this book. To get more targeted content, please make full-text search by clicking here.
Discover the best professional documents and content resources in AnyFlip Document Base.
Search
Published by Embajada de la República Dominicana en Brasil, 2017-09-13 19:22:56

Arte e Historia

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

1985 es artista mujer de activismo gráfico y pictórico con individuales y registros en colectivas. En 1992 fue
seleccionada para figurar en la muestra «Mujer y Arte Dominicana Hoy».

Obras ejemplares en colección: «Composición de un futuro incierto», óleo/tela, 104x107 cms., s.f. v «Paso
a paso», mixta/tela, 149x149 cms., 1996 v «En busca de justicia», mixta/tela, 132x102 cms., 1997 v «Al pie de la jus-
ticia», acrílica/tela, 173x150 cms., 1997.

Daniel Díaz. (Nace en 1945). En 1978 expone en colectiva del círculo de coleccionistas, celebrando ex-

hibiciones personales en el Centro de Arte Nouveau en 1983 y 1986. En este centro de Santo Domingo
expone en la Bienal de Miniatura y en la colectiva Arte Erótico (1986). Concurre el Tercer Salón Nacional
de Dibujo (1943) y al Cuarto Salón Internacional de 1995, auspiciado por la Fundación Arawak.

Obras ejemplares en colección: «Niños», tinta y tinta/papel, 19x23 pulgs., 1983 v «Limpiabota», tinta/papel,
19x23 pulgs., 1983.

Remberto Rondón. (Nace en 1960). Estudia en la Escuela Nacional de Bellas Artes. Milita en el Colecti-

vo Generación 80 y obtiene premio único de dibujo en los concursos de la FAO y de Jóvenes de las Américas
organizado en 1986, cuando también registra su primera individual. Junto a su labor de dibujante reconoci-
do realiza instalaciones y posteriormente celebra exposición de pintura en el Museo de Arte Moderno.

Obra ejemplar en colección: «Abuela con niño», lápiz/papel, 19x23 pulgs., s.f.

«Niños», Daniel Díaz y «Abuela con niño», Remberto Rondón.

252

Danilo De los Santos

Vladimir Velázquez. (Santo Domingo, 1963). Con formación

inicial en la Escuela de la Fundación Eugenio Mendoza, de Cara-
cas, Venezuela y en las academias de Elías Delgado (1974) y Cándi-
do Bidó (1977), estudia arquitectura en la UASD (1981-1985). Ex-
pone en colectivas de la Generación 80. Registra las individuales
«Agnus Dei», (1989) y «Un viaje a través de las Sombras», (1993).
Obtiene Premio de Dibujo en la Bienal Nacional del 1990.

«Vladimir Velázquez posee un talento escaso en la plástica domi-
nicana. Es a un tiempo dibujante y pintor con profunda conciencia del
oficio, adquirida en copiosas lecturas y arduo trabajo durante muchos
años. Tiene un vasto conocimiento de la pintura universal y exhibe un
estilo propio, minucioso y perfeccionista, con el que ausculta certeramen-
te el corazón de la humanidad. El artista crea un mundo sobrecogedor
de visiones oníricas que subvierten las convenciones sociales. Suyo es un
orbe poblado de figuras alucinantes y monstruosas que representan los
horrores de la guerra y el holocausto, la destrucción ecológica, las per-
versiones políticas, en fin, todos esos demonios que el exorciza mediante
alegorías iluminadoras». (José Alcántara Almánzar, en «Líneas al-
ternativas, Vladimir Velázquez», edición Banco Central, 2006).

Obra ejemplar en colección: «Ángel con soga al cuello»,
mixta/papel, 110x64 cms., 1990.

Inés Tolentino. (Santo Domingo, 1962). Estudió en París,

Francia, en la Escuela Superior de Bellas Artes (1980) y en la
Sorbona donde realiza licenciatura y maestría en Artes Plásticas
y Ciencias del Arte, además de doctorado en Estética (1982-
1985). Participante en muestras del Colectivo Generación 80,
registra 10 muestras personales entre 1985-1994. Con premios
en certámenes dominicanos e internacionales, fue seleccionada
como expositora de «Mujer y Arte Dominicana Hoy» (1992).

Obras ejemplares en colección: «Rostros con cayenas», se-
rigrafía/papel, 85x60 cms., 1986 v «La memoria ingrata», mixta y
collage/tela, 82x121 cms., 1993.

«Ángel con soga al cuello», Vladimir Velázquez.
«Rostros con cayenas», Inés Tolentino

253

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Abstracto», Hilario Olivo.

254

Danilo De los Santos

Hilario Olivo. (San Francisco de Macorís, 1959). Inició estudios artísticos en la ciudad natal, trasladán-

dose luego a Santo Domingo. Ingresó en la Escuela Nacional de Bellas Artes, graduándose en 1979. Con
once individuales entre 1983-2005, su obra parte de un fondeo de espacios rojos con insólitos conceptos
donde el sueño surreal se evidenció, aperturando otras visiones como el selvático y tropical jardín lleno de
alucinados enigmas. Olivo es un maestro de lo disímil, fantástico y la neosurrealidad antillana.

Obras ejemplares en colección: «Abstracto», acrílica/tela, 160x95 cms., s.f. v «Sin título», acrílica/tela,
100x76 cms., s.f. v «Habitantes de los oscuro I», acrílica/tela, 101x96 cms., 1994.

Eduardo Rosario. «Es uno de los integrantes de la agrupación Arte Joven Integral (AJI) que sigue técnica de la

Escuela Grafística alemana Bauhaus. Conjuntamente con los demás miembros del grupo participó en una colectiva
en 1988» (Cándido Gerón). Por los caracteres estilísticos de sus cuadros, Eduardo Rosario se asocia a los
jóvenes y nuevos abstraccionistas nacionales, ofreciendo soluciones de calidades cromáticas suaves, contras-
tantes y con aéreos movimientos compositivos.

Obras ejemplares en colección: «Composición», acrílica/tela, 24x36 pulgs., 1990 v «Abstracto», acríli-
ca/tela, 24x36 pulgs., 1990.

«Abstracto», Eduardo Rosario.

255

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

256

Danilo De los Santos

Carlos Santos Durán. (Santo Domingo, 1956). Con estudios en la Escuela Nacional de Bellas Artes y

en la Universidad Autónoma, en donde se titula de sociólogo, tiene en su haber cuatro muestras personales
entre 1987-1996 e igualmente registro en importantes colectivas. Galardonado en certámenes nacionales,
entre ellos el Concurso León Jimenes (1987) y bienales oficiales de Artes Visuales de 1992, 1993 y 1994, su
discurso se mantiene del canon concreto de la abstracción geométrica y matérica, sin rebuscados efectos, a
no ser el rigor de enormes conceptos monocromados, más bien estructuras de hechura compositiva incon-
fundible en la sobriedad estética.

Obra ejemplar en colección: «Antropología del culto», mixta/tela, 76x66 cms., 2001.

Manuel Traboux. (Santo Domingo, 1955). Estudia en la Escuela Nacional de Bellas Artes, donde obtuvo

profesorado en dibujo (1978-1982) y en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Autónoma, en donde
se graduó con altas calificaciones (1987). Expositor del Colectivo Generación 80, del que fue cofundador
y directivo, en 1984 registra la individual de acuarelas «Caballo, forma y expresión». Docente del dibujo en
varios centros académicos. Es pintor muralista, escultor, además de notable dibujante.

Obra ejemplar en colección: «Caballos», acuarela/papel, 63x84 cms., 1984.

2. Los Setentistas que producen obras en los años 90 son artistas que en su mayoría siguen sus

discursos temáticos aunque fortaleciéndolos con nuevas escenas compositivas, mayor vitalidad cromática y
visiones acordes con el lenguaje que cada uno de ellos individualiza. Si algunos excepcionales autores rom-
pen visualmente con discursos precedentes, ello obedece a una locación en realidades externas al país nativo,
lo que no significa que los asuntos o referencias identitarias estén ausentes o no connotadaos. Dionisio
Blanco, Luis Bretón, Carolina Cepeda, Alonso Cuevas, Carlos Hidalgo, Freddy Javier, Teté Marella, Manuel
Montilla, Amaya Salazar, Francisco Santos, Alberto Ulloa y Fernando Ureña Rib, se inscriben también en la
colección –casi todos– con obras realizadas en fechas de los últimos diez años del pasado siglo XX.

Melchor Terrero. (Enriquillo, provincia Barahona, 1942). Emigra del municipio natal, iniciando orien-

tación pictórica con un maestro español, quien lo introduce en el conocimiento de artistas clásicos. Entre
1967-1972, realiza estudios en la ENBA. Celebra su primera exposición individual con obras al pastel (Casa
de Teatro 1974). En la segunda muestra aparecen los sujetos obesos, hembras y varones, el tema reitera la
desmesura corpórea planteada en escenas diversas, como los agradables paisajes donde especialmente las
gordas se ven ataviadas tropicalmente, portando frutas y flores o cubriéndose con una sombrilla.

Obras ejemplares en colección: «Paseo por la aldea», serigrafía/papel, 72x51 cms., 1986 v «Jardinera», acrí-
lica/tela, 75x100 cms., 1990.

«Antropología del culto»
Carlos Santos Durán

257

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Dionisio Blanco. (San Cristóbal, 1953). Monta exposición individual en Nueva York, en 1993, mos-

trando un discurso consecuente donde los motivos reales, conjugados en un espacio imaginario, tradu-
cen una revelación mágica. La poeta Juana Rosa Pita lo considera paleta universal de la pintura domi-
nicana de hoy (El Caribe, suplemento, diciembre 11, 1993). A su vez el crítico neoyorquino Rodolfo A.
Windhausen escribe: «En la pintura del artista dominicano Dionisio Blanco el sentido de fusión y realidad es
el rasgo más prominente (…) es leal a un atributo muy caribeño: el realismo mágico» (R.W. catálogo Dionisio
Blanco, junio 17, 1994).

Obras ejemplares en colección: «Fantasía onírica», acrílica/tela, 75x100 cms., 1992 v «Sembradores con cartas
del deseo», acrílica/tela, 75x100 cms., 1996 v «Serie Fantasía onírica de sembradores», acrílica/tela, 75x100 cms.,
1997 v «Sembradores», acrílica/tela, 75x100 cms., 1997.

«Sembradores», Dionisio Blanco.

258

Danilo De los Santos

«Sembradores», Dionisio Blanco.

259

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Carlos Hidalgo. (Santiago Rodríguez, 1948). En su amplio discurso en torno a la realidad paisajística, y

las costumbres o vernáculas, este pintor abundante, laborioso y con la dominicanidad asumida como una
fiesta visionaria, sigue ofreciendo desde 1989 y durante el decenio de 1990, una escritura pictórica que
atraviesa la geografía desde el interior campestre del país a los extremos urbanos y marítimos. Su paleta
expande, sobre todo, el amarillo como sinónimo de realidad soleada.

«Paisaje campestre», Carlos Hidalgo.

Obras ejemplares en colección: «Playa», óleo/tela, 75x90 cms., 1989 v «Pueblo», óleo/tela, 75x90 cms., 1996
v «Calle El Conde», óleo/tela, 75x100 cms., 1999.

Luis Bretón. (San Francisco de Macorís, 1953). Con señas surreales, su discurso, al abordar el espacio

urbano, ciudades provinciales y Santo Domingo, dota las calles y recintos arquitecturales de un clima
metafísico de espejismos y silencios. La natal ciudad macorisana, La Vega y Santiago de los Caballeros
han sido focos visuales del pintor que rinde «Homenaje a Santo Domingo», título de un discurso suyo
del 1993. «Este pintor de ciudades», le llama el escritor Pedro Antonio Valdez, «retrata con precisión y rasgos

260

Danilo De los Santos

encantados diversos fragmentos de nuestro paisaje urbano. El observador de cualquier parte del mundo que pase
la vista por estos lienzos, podrá disfrutar siguiendo la precisión de una línea diestra que, sin descomponerse en los
fulgores del color, lo conducirá por una ciudad compuesta por una doble estructura concreta y onírica». El escritor
Valdez escribe un texto titulado «La otra ciudad de tela», a propósito de la onceava exposición individual
del pintor (P.A.V. diciembre 14, de 2004).

«Isabel la Católica esquina Emiliano Tejera» y Calle de pueblo» Luis Bretón.

Obras ejemplares en colección: «Casa del Cordón», óleo/tela, 101x176 cms., 1990 v «Puerta del Cordón»,
acrílica/tela, 119x89 cms., 1995 v «Calle las Damas. Panteón Nacional», acrílica/tela, 119x89 cms., 1995 v «Una
Venecia en San Francisco», acrílica/tela, 37x100 cms., 1995 v «Calle El Conde», acrílica/tela, 73x100 cms., 1999.

261

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Carolina Cepeda. (Río San Juan, provincia Trinidad Sánchez, 1952). Con un buen número de exposiciones

personales y su vinculación a la Escuela Pictórica de Santiago, su importancia como artista mujer permitió la esti-
mación de su nombre y obras en «Mujer y Arte Dominicano Hoy. Homenaje a Celeste Woss y Gil» (1992). Situada
en la capital del país es fiel al paisaje luminoso y tropical, lleno de soluciones compositivas y técnicas como el em-
pleo de relieves a la espátula. Paisajes suyos marcados por gamas multicolores y amables visiones son producto de
una cosecha como los fechados entre 1989-1991: paisajes emblemáticos y propios de un personal estilo radiante.

Obras ejemplares en colección: «Paisaje», acrílica/tela, 75x100 cms., 1990 v «Paisaje», acrílica/tela, 60x75
cms., 1990 v «Paisaje», acrílica/tela, 136x49 cms., 1990 v «Paisaje», acrílica/tela, 60x75 cms., 1991 v «Paisaje», acrí-
lica/tela, 100x75 cms., 1991 v «Paisaje», acrílica/tela, 75x60 cms., 1991 v «Hojas de Plátano», óleo/tela, 60x49
cms., 1991 v «Paisaje y rio», acrílica/tela, 60x75 cms., 1991.

«Paisaje río», Carolina Cepeda.

262

Danilo De los Santos

Amaya Salazar. (Santo Domingo, 1951). Como escultora y pintora figura entre las 40 expositoras

de «Mujer y Arte Dominicano Hoy. Homenaje a Celeste Woss y Gil», evento celebrado en Casa de
Bastidas, en 1992.

En el siguiente año 1993 ella celebra muestra personal en la que reconfirma inequívoca el espacio perso-
nalísimo que ha conseguido como artista, sobre todo preservando una fidelidad de estilo sosegado, lumino-
so y refrescante. Su estilo lírico de figuraciones refluyentes conjuga la luz y el color como gamas encendidas
en los textos pictóricos representan un ascenso y una consolidación de su fuero, puesto de manifiesto en la
Galería Guernica en la fecha citada.

Obras ejemplares en colección: «Maternidad», acrílica/tela, 30x42 pulgs., s.f. v «Maternidades», acrílica/
tela, 30x40 pulgs., s.f.

«Maternidad», Amaya Salazar.

263

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«La mesa», Francisco Santos.

Francisco Santos. (Santo Domingo, 1949). Todavía el pintor enfocaba entre 1989-1994 a la mulata con pa-

lomas y a estas aves agrupadas o solas en su discurso filial de la neofiguración dominicana. Después produjo su
discurso «Vivencias del Barrio. Homenaje a un Amigo…», presentado en el Museo de Arte Moderno (1997), en
el cual las representaciones, también figurativas, resultan alusiones anónimas y narrativas de sujetos expresando
vivencias cotidianas no ajenas a la realidad social. Conjuga, como un afectivo neoconstructivo antillano, los usos
anaranjados, el morado y sobre todo el negro. Unitario del discurso resulta en el pintor una elocuente apología
de esteticismo y conciencia personal, de pertenencia y amplia mirada en el temario.

Obras ejemplares en colección: «La mesa», acrílica/tela, 47x28 pulgs., 1988 v «Composición», mixta/tela,
100x100 cms., 1996 v «Camino a la libertad», acrílica/tela, 40x30 pulgs., 1997.

Teté Marella. (Buenos Aires, 1943). Residiendo en Santo Domingo durante más de tres décadas y asumien-

do la ciudadanía dominicana, la incipiente iconografía al dibujo de dulces gordillas fue buscando contextos
escénicos arquitecturales y con el tiempo aumentaron las formas, el fuerte influjo del color antillano y por

264

Danilo De los Santos

«Sin título», Teté Marella.

265

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

supuesto, del país que esos personajes subscribieron. Ellos patentizaron el universo marellano como inquietas y
lúdicas, gordas y gordos que en nada tienen que ver con otras obesidades de carne fría, hierática, tiesa. Las tete-
sianas son candorosas, teatrales, traviesas, juguetonas y hasta «prima donna» que cantan en las telas y danzan.

Obras ejemplares en colección: «Retrato de señora gorda», acrílica/tela, 70x50 cms., 1992 v «Retrato de
niña», acrílica/tela, 60x50 cms., 1992 v «Doña flor», mixta/tela, 76x60 cms., 1995 v «Algo entremanos», mixta/
tela, 75x60 cms., 1997 v «Abertura con vicios», acrílica/tela, 24x30 pulgs., 1997.

Freddy Javier. (Hato Mayor, provincia El Seibo, 1946). Color, movimiento y pasajeros masificados en las ca-

lles sobre todo en la transportación como las populares guaguas de Onatrate, incluso el concho y el motocon-
cho, y lo que el pintor enfoca de una realidad inspiradora de su discurso dramático, expresionista y paródico,
con el cual él autor se consagra. Los años culminativos de sus discursos sobre la calle y la transportación, mo-
vilidad y marcha de guaguas voladoras ofrecen varios ingredientes lingüísticos en una refrescante polisíntesis

«Si las guaguas volaran», Freddy Javier.

266

Danilo De los Santos

«Mujeres flotantes» y «Submarina», Fernando Ureña Rib.

que reoge obras culminativas entre 1989-1990. «Serie Transporte» a la cual pertenecen casi todas las obras
coleccionadas como fondos atesorados del Banco Popular.

Fernando Ureña Rib. (La Romana, 1951). El dibujante onírico, el escultor orgánico, el pintor de varias

facetas se excluye de la imagen grotesca y del paisaje constructivo para anteponer una poética de las aguas
donde el sueño submarino le ayuda a sustraer conceptualidades astrales, cardúmenes, formas carnívoras,
eróticas y florales en insólitas acumulaciones o contrariamente autotransmutándose en soliloquio. Varios
discursos expositivos de acentuación surreal y sumersión onírica devienen con la afluencia floral, frutal y
vegetal de la realidad marina: «Crisálida» (1991), «Danza de primavera» (1992) y «Oceánica» (1993).

Obras ejemplares en colección: «Carnívoras», óleo/tela, 40x30 pulgs., s.f. v «La crisálida», óleo/tela,
32x50 pulgs., s.f. v «Bailarinas», óleo/tela, 67x87 pulgs., s.f. v «Soroche», acrílica/tela, 115x97 cms., 1987 v
«Sueños submarinos», óleo/tela, 128x90 cms., 1987 v «Ninfas», acrílica/tela, 173x122 cms., s.f. v «Submarina
astral», óleo/tela, 98x72 cms., 1990 v «Las crisálidas entre rocas», óleo/tela, 30x40 pulgs., s.f.

267

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Retrato de un desconocido», Alberto Ulloa.

268

Danilo De los Santos

Alberto Ulloa. (Puerto Plata, 1950/Santo Domingo, 2011). Registra ochenta exposiciones individuales

hasta el 2002, en ciudades dominicanas e internacionales, incluso varias itinerantes. Además de participar
en más de mil colectivas e ingresar su sobras en importantes colecciones museísticas y privadas, la crítica
de arte le observa resaltando los nexos de sus obras y las conjugaciones lingüísticas perceptibles llevadas a
la polisíntesis. Abundante, intenso y creador plural, es por igual ceramista, dibujante, escultor y pintor. El
crítico español Raúl Chavarri lo ha enjuiciado cuando concluía sus estudios en España. «Alberto Ulloa es
un pintor mágico y sorprendente, que hace de la realidad cotidiana, del encuentro de todos los días, una posibilidad de
descubrimiento insólito, una cadencia de sorpresa y un ritmo de colores y trazos». (El Caribe, junio 4, 1977) a su vez,
el crítico Armando Álvarez Bravo señala que: Alberto Ulloa es auténtica expresión de la magia y el espíritu del
Caribe. (El Nuevo Herald, Miami, Florida).

«Sin título», Alberto Ulloa.

269

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Obras ejemplares en colección: «Retrato de extraño», acrílica/tela, 98x152 cms., 1988 v «Sin título», acrílica/
tela, 75x101 cms., 1997 v «La pregonera», acrílica/tela, 100x75 cms., 1990 v «Juana la negra alírica», acrílica/tela,
155x 83 cms., 1995 v «El gallo y la luna», mixta/tela, 126x102 cms., 1991 v «María moñito», mixta/tela, 100x75 cms.,
1990 v «Rostro», mixta/tela, 100x75 cms., 1990 v «Two woman», mixta/tela, 150x100 cms., 1997.

Alonso Cuevas. (El Limón, provincia Jimaní, 1953). Residente en Europa donde expone en colectiva,

registra individuales y obtiene reconocimientos, entre ellos los Premios del Festival de Las Palmas, España, y
de la Villa de Vitry (1980); Premio Internacional de Mónaco, Montecarlo (1981) y Primera Paleta de Oro del
Festival de Pintura de Cagnes-Sur-Mer, Francia (1985). Con frecuencia retorna a Santo Domingo exponiendo,
asumiendo docencia y representando el país en eventos mundiales. En 1986 presenta, en el Museo de Arte
Moderno, su discurso «Memoria de la Tierra», cuya secuela es otro título, «Retratos escritos sobre uno retratos
pintados». Altamente ponderado por los críticos locales e internacionales, los discursos que se citan resultan
acumulaciones de elementos desechados que connotan en la versión del pintor una poética de la realidad
atemporal, de la vida como recuerdo identitario, como vocero evocativo de la facultad imaginativa. Entre el
dato real y el imaginario, un halo surreal de la escritura, por demás alucinada y mágica.

Obra ejemplar en colección: «Composición 1. Serie Memoria de la tierra», mixta/tela, 76x104 cms., 1989.

3. Los Sesentistas que confluyen activos en la década 1990 son Cándido Bidó, Elsa Núñez y
Leopoldo Pérez, los cuales integraron el Grupo «Los Tres» cuando egresaron de la Escuela Nacional
de Bellas Artes. Volvieron a reunirse posteriormente para celebrar la hermandad en el arte. Sucedió
lo mismo con integrantes del Grupo Friordano, cuyas obras producidas entre 1968-1971 conformaron
retrospectivas en los 80 y 90. En el presente siglo XXI una selección de sus pinturas se incluye en la sala
de arte del Centro Cultural Eduardo León Jimenes. El Grupo Friordano estuvo integrado por Frinette
Torres, Orlando Menicucci, Roberto Ceballos, Daniel Henríquez, Danicel y Nonora Fondeur. En su
casi totalidad, los friordanos y Los Tres, mantienen un activismo que se proyecta desde que emergen
artísticamente en el decenio 1960; una vigencia expositiva con registros en los años noventa y hasta el
presente siglo XXI. Sucede lo mismo con otros artistas de la generación sesenta con obras en la colec-
ción bancaria: Norberto Santana, Julio Susana, Justo Susana, Ramón Oviedo.

Daniel Henríquez. (Santiago, 1946-1996). Hasta 1991 el pintor ha registrado 16 muestras individuales,

entre ellas «La transfiguración de mis sueños», exhibida en la nativa ciudad, en el citado año. En el catálogo
de la exposición escribe el historiador y crítico Carlos Dobal: «De entrada observo que los cuadros de esta horna-
da de Daniel Henríquez parecen representar vagos sueños o incoherentes apariencias. Las telas están veladas por una
incognoscible realidad trasmundana, como diría Ortega. Todas estas obras parecen poseer una “belleza que sentimos”
como piensa Winckelman, pero que no podemos explicar fácilmente».

Obra ejemplar en colección: «Casita dominicana», acrílica/tela, 103x78 cms., 1991.

270

Danilo De los Santos

«Casita dominicana», Daniel Henríquez.

271

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Paseo», Leopoldo Pérez (Lepe).

Leopoldo Pérez (Lepe). (Santo Domingo, 1938). Pintor depurado, diferenciado, reflexivo y sin apresu-

ramiento en sus registros discursivos. Celebra «Lepe M+FM, I, FG», en 1990, su duodécima muestra perso-
nal. Tiene rango de maestro doblemente, como artista y como docente. Testimonia su colega Elsa Núñez:
«A lo largo de su carrera Lepe ha tratado varios temas, tales como paisajes, Cristos, bodegones y animales, pero siempre
su preocupación por el ser humano fue predominante. En la citada exposición del 1990 el temario como la dicción ofrece
variedad: cabezas, cristos, casaberas, paisajes, amantes…».

Obras ejemplares en colección: «La casabera», mixta/tela, 101x76 cms., 1990 v «Paseo», mixta/tela, 88x104 cms., s.f.

Danicel/Danilo De los Santos. (Puerto Plata, 1942). Con un registro de innumerables exposiciones

individuales entre 1972-1996, dos de ellas en Ponce, Puerto Rico y en Petrópolis, Brasil, se registra en
importantes colectivas nacionales y galardones en las bienales nacionales de 1992 (Dibujo e Instalación) y

272

Danilo De los Santos

«Carnaval», Danicel.

1994 (Escultura). Regularmente se aparta de su conocido tema maroliano para producir discursos y obras
pictóricas de excepción sobre temas paisajísticos, mágicos y carnavalescos, como el que forma parte de la
colección bancaria, obra concebida para un cartel del carnaval de Santiago. Posteriormente celebra peque-
ña retrospectiva y en los noventa expone en Chicago, Lawrence, Massachusets y en Moscú, Rusia. Se des-
empeña como investigador, historiador del arte y curador de exposiciones. Ha sido jurado de certámenes
nacionales.

Obra ejemplar en colección: «Carnaval», medios mixtos/papel, 74x109 cms., 1990.

Julio Susana. (Jamo, sección La Vega, 1937). Celebra exposición individual en 1959, siendo estudiante

de la Escuela Nacional de Bellas Artes, de la que egresa para montar otra individual en 1964. Dibujante,
escultor y pintor. Fue becado para estudiar en la Escuela de San Francisco, de Madrid, España.

Al retornar a Santo Domingo activa su proyección pictórica de contenidos sociales y subscrita al lla-
mado «Cubismo Colonial». Susana se marcha a los Estados Unidos, residiendo en Miami, Florida y en
Nueva York, pero manteniendo nexos con el país nativo.

273

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Protección de vida», Julio Susana.

274

Danilo De los Santos

El escritor John Austin habla de «Magia revelada» en las pinturas de Susana. «El resultado visual es
inquietantemente, arte autentico que trasciende el tiempo, el espacio y las fronteras culturales. El aspecto mágico
de cada obra es residuo psíquico que queda entre la distancia inefable de la realidad consciente e inconsciente…».
(Catálogo Justo Susana, con texto de John Austin, noviembre 3, 2010).

Obra ejemplar en colección: «Protección de vida», óleo/tela, 128x89 cms., 1999.

Cándido Bidó. (Bonao, 1936/Santo Domingo, 2011). Pequeño de estatura, empero, grande como pintor.

En 1999, cuando se publicó la monografía «El paraíso azul», y este título fue tema de la individual de Panamá
en el referido año, subscribía una historia artística de casi medio siglo, con decenas de exposiciones individua-
les, registros en importantes colectivas, muchos galardones y un notable prestigio internacional.

«Vendedora con pájaros de juguete», Cándido Bidó.

275

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Obras ejemplares en colección: «Vendedora con pájaro de juguete», acrílica/tela, 30x40 cms., 1987. «Sembra-
dores», acrílica/tela, 90x106 cms., 1991 v «Dama con sombrilla azul», acrílica/tela, 101x101 cms., 1992 v «Materni-
dad», acrílica/tela, 80x59 cms., 1996 v «El árbol y los pájaros», mixta/tela, 102x1o2 cms., 1981.

«El árbol y los pájaros», Cándido Bidó.

276

Danilo De los Santos

Elsa Núñez. (Santo Domingo, 1943). Hasta 1995, cuando registra su discurso «De vuelta al ayer», la

pintora ha realizado 31 exposiciones individuales, que aun variadas en los asuntos temáticos, extraídos
de diversas fuentes intelectuales y de vida, ofrecen la impronta de un estilo inconfundible y personal.
Medalla al mérito por la Dirección General de Promoción de la Mujer (1996), el reconocimiento es uno
de los muchos recibidos por una sostenida linealidad de oradora. En 2013 celebra retrospectiva, al llegar
a los cincuenta años de actividad artística.

Elsa Núñez discurre en un territorio que se extiende desde el testimonio expresionista hasta el de las
visiones románticas, geográficas, simbolistas y mayormente figurativas casi todas sus obras.

Obras ejemplares en colección: «Sin título», óleo/tela, 100x75 cms., 1991 v «Mujer alada», acrílica/tela,
100x75 cms., 1991 v «Dama con flores», mixta/tela, 75x100 cms., 1992 v «Mujer acostada con mariposas», mixta/
tela, 75x100 cms., 1995 v Mujer en reposo», acrílica/tela, 75x100, s.f.

«Mujer en reposo», Elsa Núñez.

277

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Mujer alada», Elsa Núñez.

278

Danilo De los Santos

Ramón Oviedo. (Barahona, 1927). Sujeto artístico de diversas monografías escritas entre 1987-1999,

por Efraín Castillo, Cándido Gerón y Marianne de Tolentino. Todas resultan documentos valiosos sobre
el rol de este «Maestro ilustre de la pintura dominicana», como lo declara la Cámara de Diputados de la
Republica en 1997, año en el cual presenta Oviedo su producción «Persistencia Evolutiva de la Forma en la
Materia», en Ecuador, Venezuela, Estados Unidos y en el país natal.

Obras ejemplares en colección: «En algún lugar», mixta/tela, 30x40 pulgs., 1992 v «El Canal de la Mona»,
acrílica/tela, 30x40 pulgs., 1992 v «Flautista sobre una escultura de Antonio Toribio», mixta/tela, 52x11 cms., s.f.

«Flautista sobre una escultura de Antonio Toribio», Ramón Oviedo.

279

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Sin título», Ramón Oviedo.

280

Danilo De los Santos

«En algún lugar», Ramón Oviedo.

Norberto Santana. (Santo Domingo, 1943). Muralista, pintor de caballete y docente de carrera. hasta

1999 ha registrado dieciséis muestras personales, además de múltiples registros en colectivas. Sobre su estilo
escribe Odalis G. Pérez: «Puede decirse que en Norberto Santana la geometría sensible es luz en el dibujo y este parti-
culariza un objeto que no podemos catalogar como cubista o neocubista o simplemente neoexpresionista, sino más bien
estilísticamente sincrético. Pues el objeto pictórico se organiza en la superficie planimétrica cobrando su significación
en las diversas pantallas perceptivas del sujeto pictórico». (Catálogo de Norberto Santana, contexto de Odalis G.
Pérez, noviembre 15, 2006).

Obra ejemplar en colección: «La guagua», acrílica/tela, 60x75 cms., 1993.

Jorge Severino. (Puerto Plata, 1935). Hasta el año 1986, cuando se edita la monografía «Jorge Severino/

Veinte años de pintura», escrita por Marianne de Tolentino, el artista nacido en el litoral norte ha cele-
brado ocho exposiciones individuales, todas en el país, cantidad que sobrepasa sus registros en colectivas
nacionales e internacionales. Con un temario centrado en la negritud, él se ha referido a un linaje paren-
tal, enmarcando sus mujeres en recreaciones del Art Nouveau, con indicadores del pintor checo Alfons

281

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Novia 1», Jorge Severino.

282

Danilo De los Santos

Mucha o del «Salón des Moulin», patentizado por Toulusse-Lauetrec, deviniendo posteriormente las novias
del mitológico Ogún y otras novias elegantes, novias encopetadas, divas morenas.

Obras ejemplares en colección: «La novia», mixta/tela, 106x90 cms., 1992 v Sin título», acrílica/tela, 104x90
cms., 1993 v «Dama negra», acrílica/tela, 101x76 cms., 1994 v «Novia 1», acrílica/tela, 101x91 cms., 1994.

Justo Susana. (Jamo, La Vega 1918/Santo Domingo, 2001). Reconocido pintor naif, cuyo ingenuo rea-

lismo maravilloso desveló un discurso personal que se ensanchó desde sus primeros registros en la década
1960, Reconocido a unanimidad como el máximo representante de un estilo deslumbrante. Sus temas de la
realidad, en principio definido por una escritura densa en color, línea y tema que resultaba de partida muy
«primitiva», fueron ampliándose en el transcurso de las cuatro décadas finales del siglo XX. Sus visiones del
paisaje insular, de vega recreada y entorno costero llegaron a la plenitud paradisiaca con un cielo luminoso
e iluminador.

Obras ejemplares en colección: «Sin título», acrílica/tela, 60x75 cms., 1990 v «Paisaje», acrílica/tela, 75x60
cms., 1990 v «Paisaje», acrílica/tela, 60x75 cms., 1990 v «Sin título», acrílica/tela, 100x126 cms., 1992 v «Sin títu-
lo», acrílica/tela, 123x150 cms., 1993 v «Paisaje», acrílica/tela, 75x66 cms., 1993 v «Paisaje», acrílica/tela, 75x60
cms., 1993 v Paisaje infantil», acrílica/tela, 100x75 cms., 1994.

Geo Ripley. (Caracas, Venezuela, 1950). Pintor abstracto, partidario del conceptualismo performativo,

instalador ritualista y estudioso de la creencia mágico religiosa «Ripley es el músico de una pintura de Matrams
y tambores y el bailarín que no se para nunca», anota Silvio Raigorodski en el catálogo de la exposición que el
artista celebró en el Museo de Arte Moderno en marzo, 2007.

Obra ejemplar en colección: «Sin título», mixta/papel, 68x48 cms., s.f.

4. Representantes de tres generaciones. Cincuentistas: Ada Balcácer, José Ceste-
ro, Domingo Liz, Fernando Peña Defilló y Guillo Pérez; Cuarentistas: Vela Zanetti y Marianela Jiménez,
la única pintora de la generación 1940; y Treintistas: Darío Zuro y Federico Izquirdo, este último, único
pintor sobreviviente de la generación de 1930.

Domingo Liz. (Santo Domingo, 1931/2013). El distintivo está representado por tres obras que reiteran

su peculiar discurso con el que interpreta el submundo de La Ciénaga, situado a orillas del Ozama, como
un alucinado maravilloso de la realidad. Sus personajes son de extracción popular, individualizados por
una oratoria lírica, lúdica y matizada de antillana surrealidad en color, forma y movimiento. Son tres las
obras ejecutadas dos décadas antes de su fallecimiento acaecido en 2013, año en que le fue concedido en
vida el Premio Nacional de las Artes, otorgado por el Estado dominicano.

Las tres obras del maestro Domingo Liz están ejecutadas en acrílica/tela, en 1993, con los títulos: «Com-
posición 1» (76x101 cms.) v «Composición» (75x60 cms.) v «Ciclista» (100x75 cms.).

283

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Fernando Peña Defilló. (Nace en 1928). Pintor de temas diversos, conjugados con la pericia de un

maestro ejercitado y dotado de un lirismo especial para sus tratados «sobre la materia y el espíritu». Desta-
can obras del período 1981-1984, ya referidas, al igual que las serigrafías a color de 1985.

«Serie Sobre la materia y el espíritu», Fernando Peña Defilló.

284

Danilo De los Santos

Este maestro, subscriben el en decenio del 90 tres obras ejemplares: «Mariposas», mixta/tela, 76x88 cms.,
1990 v «Flores silvestres», mixta/tela, 101x142 cms., 1995 v «Farallón», mixta/tela, 100x75 cms., 1998.

Las tres obras son figurativas y subjetivizan lo real como puras referencias conjugadas espiritualmen-
te con una variedad de enfoques singulares. En la pintura «Mariposas», la composición se resuelve en
planos geométricos, cuyo eje es el cuadrado central donde yace una gran mariposa espectral, atrapada en
un pétreo tiempo metafísico, resuelta en dos planos interiores. El superior en azul es coincidente con el
celeste plano posterior, también diurno, dando un remarque blanco fronteriza las dos formas planimé-
tricas. El remarque central y transparente del cuadro se extiende hasta el gran plano inferior, todo negro,
representando la nocturnidad en la que flotan azules mariposas y círculos en germen. El contraste entre
el delicado e inferior tono crema donde se diluye la gran mariposa, aumenta el clima mágico o surreal
del tiempo detenido.

«Flores silvestres» es obra maestra al igual que «Mariposa». Ella ofrece una particular diferencia
tonal, compositiva y en la ambigüedad temática o representación de las «Flores» como emanaciones
germinales de rostros femeninos que encarnan y aluden a las «Tres gracias». Ellas traspasan espectrales
en sus plantíos triplicados en tres planos grises, rectangulares y separados que parecen devenir del
tiempo espacial, puesto que la composición sugiere distancia entre los textos icónicos y el fondo. Las
silvestres flores son espíritus que se perciben objetivos, diluciones de transparentes gamas amarillas y
rosas sobre un blanco nacarado. La obra refleja una traslación mágica, poética y propia de un pintor
lírico en su plenitud.

«Farallón», obra ejecutada con acrílica y óleo/tela, 100x75 cms., de 1998. Es la tercera obra del maestro
Peña Defilló, distinta a las anteriores, concebida con elocuente manejo técnico de efectos combinados en
las gamas y en la composición. Un cuerpo rocoso y simétrico domina el plano esencial de la visión paisajís-
tica; farallón que brinda las variables de la materia que el tiempo vulnera en la condición pétrea, llenándola
de huellas, grafismos o manchas transparentes o abstractas. Sobre el elevado farallón, en su cúspide tres
aves espectrales, en descenso estacionado, tal vez en amenaza de vuelo. Detrás del cuerpo rocoso que se-
meja humanoide, el mar azul y la noche negra salpicada de estrellas. Es un cuadro pictórico que invita a la
reflexión, al goce estético, al encuentro con la armonía de la vida.

José Cestero. (Nace en 1937). Sigue con su discurso biográfico sobre la añeja arquitectura de Santo Do-

mingo, transcribiendo, con la memoria romántica y nostálgica, dos obras en acrílica/tela «Antigua Plaza
Colón» (76x100 cms., 1990) y «Antigua Casa de Diego Colón» (76x101 cms., 1991). Su peculiar estilo pic-
tórico, de escritura espontánea, casi instantánea, evita toda fidelidad académica o realista, siendo fiel a su
personal expresionismo de maestro.

Ada Balcácer. (Nace en 1930). Es inconfundible artista mujer con grado de maestra, a quien le otor-

gó el Estado dominicano el Premio Nacional de las Artes (2012) y cuya exposición «Alas y raíces», en

285

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Baloncesto», Ada Balcácer.

el Centro León (noviembre, 2011/febrero, 2012) reunió una colección de obras producidas entre 1966-2011).
El catálogo ofreció una síntesis de su hoja de vida, señalando sus estudios complementarios después de
egresar de la Escuela Nacional de Bellas Artes, en teoría del color, diseño textil, grabado; e igualmente
su labor docente, gestora y militante, además de muralista. También resaltan los galardones obtenidos
y sus exposiciones personales registradas entre 1966-2002 como son: «Espacios Participantes» (1973),
«Cuentos de Ada» (1980), «Palmera» (1981), «Ensayos de luz tropical» (1986), «Arte de luz tropical»
(1991), «Esculturas selváticas», (1996)… además se registró en importantes colectivas dominicanas: las
del Grupo Proyecta, de la que fue integrante (1968-1970), «Expo Nueva Imagen: Doce Artistas de Van-

286

Danilo De los Santos

guardia» (1972), «Arte Dominicano Contemporáneo» patrocinada por el Banco Popular y registrada
en la Galería Sign de Nueva York (1981).

La colección del Banco Popular posee 17 obras balcacerianas. Además de «La Televisión» (1969), «Jarrón
con Flores» (1973) y «Miami» (1985), referidas en anteriores capítulos, las restantes, se vinculan en su mayoría
a la serie ensayos de luz, que testimonian los alcances pronunciativos de una gran maestra del arte domi-
nicano en el referéndum de las esencialidades del trópico, de la pertenencia antillana, «en el Caribe y más
allá», como apunta el crítico norteamericano Edward J. Sullivan, señalando: Si bien es importante considerar el

«Flores para viajar al Pilar I» y «Flores para viajar al Pilar II», Ada Balcácer.

trabajo de Balcácer como enlace integral en la génesis de la modernidad en la pintura dominicana, especialmente para el
contexto actual, examinar cómo se relaciona ella con espectro mayor de intereses artísticos relacionados al color y la forma
la coloca en un espacio más desarrollado del «Arte Moderno». (E.J.S., texto catálogo «Alas y Raíces», noviembre,
2011, p.20).

Obras ejemplares en colección: «Ensayo de luz 3. Ventana tropical», óleo/tela, 75x60 cms., 1989 v «Haz de
luz. Serie Ensayos de luz», acrílica/tela, 80x129 cms., 1990 v «El Bayou», óleo/tela, 136x202 cms., 1990 v «Corazón
tropical. Serie Ensayos de luz», mixta/tela, 72x59 cms., 1990 v «Ginger. Serie Ensayos de luz», óleo/tela, 128x90
cms., 1990 v «Pincel de luz y trópico», mixta/tela, 75x60 cms., 1991 v «Flores para viaje al Pilar, Zaragoza I,», óleo/

287

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Ensayos de luz tropical» y «Haz de luz». Serie Ensayos de luz, Ada Balcácer.
288

Danilo De los Santos

tela, 76x60 cms., 1991 v «Flores para viajar al Pilar, Zaragoza II», óleo/tela, 76x60 cms., 1991 v «Flores para viajar
al Pilar, Zaragoza III», acrílica/tela, 76x60 cms., 1991 v «Ensayo de luz», acrílica/tela, 88x142 cms., 1992 v «Luces
tropicales II», óleo/tela, 101x76 cms., s.f. v «Texto de luz», óleo/tela, 76x60 cms., s.f. v «Niños jugando», acrílica/
tela, 125x151.5 cms., 1995 v «Baloncesto», acrílica/tela, 20x32 pulgs., 1995 v «Zapatos anti-oxido», mixta/tela,
101x75 cms., 1996 v «El pescador sabio», mixta/tela, 129x95 cms., 1996.

Guillo Pérez. (San Víctor, Moca, 1926). Con 39 exposiciones individuales entre 1958-1989, número que

triplica con registros en importante colectivas internacionales y nativas, este inconfundible maestro, con
muchas distinciones obtenidas de eventos plásticos y de instancias institucionales, es condecorado con la
Orden de Duarte, Sánchez y Mella, en el grado de Caballero por la Presidencia de la República, en 1995.

«Monumental 10», Guillo Pérez.

«El honor corona cincuenta años entregados a la pintura, con la fe de quien entra en religión», escribe Marianne de
Tolentino (Listín Diario, julio 22, 1995). En esa entrega su 28 exposición personal, «Santiago, tiempo, lugar
y color», celebrada en el Centro de la Cultura (1989) e igualmente exhibida en le Galería de Arte Moderno,
de la capital dominicana (1990). Con una conjugación dialéctica, deconstructiva y construccionista, ofrece
una apología visionaria de la ciudad cibaeña.

En el catálogo, nuestro maestro escribe sobre su «Poema pictórico que siempre he sentido por mi tierra natal,
Moca, Santiago, lleno de recuerdos y angustias a tal extremo, que jamás he podido soñar con otro lugar de la tierra que
no sea Santiago. Por estas intimas e infinitas razones, y mi gran fe en Dios, he querido usar mi color, mi forma y mi
expresión para crear este homenaje poético y pictórico a Santiago, al cual le llamo «Santiago, tiempo, lugar y color».

289

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Monumental 3», Guillo Pérez.

El homenaje pictórico es, en opinión del crítico Cándido Bidó: «La narrativa del Reencuentro. En exposi-
ción dedicada a Santiago de los Caballeros, el maestro del color, Guillo Pérez, se propone recuperar lo que todavía no
está contaminando por el esnobismo de la época. Lo que hasta entonces había sido en su pintura (colores y figuras) –de
repente– la propuesta artística se ha convertido en una narrativa de lo popular donde el diseño gráfico y arquitectónico
representa los movimientos de la historia. Me refiero a la historia de su ciudad (…). La iconografía de esa historia nos
habla de un arte popular y de un arte culto. (…) Todos los componentes de esta excepcional muestra pictórica se agluti-
nan dentro de un proceso cultural y de la actividad humana, registrando con su ágil pincel y su fecunda imaginación,
todo y cada uno de los aspectos de la sociedad santiaguense, cada característica psicológica, cada hecho espiritual,
costumbrista y, de modo particular, la mezcla de sangres y costumbres.

290

Danilo De los Santos

«Monumental 6», Guillo Pérez.

No es difícil advertir los dispositivos que este artista logra motivar, desde una atalaya de imágenes y símbolos,
siguiendo su propia lógica y el análisis de la síntesis, sin entrar en contradicción a la hora de bosquejar lo tradicional y
lo moderno. La referencia de estos dispositivos es aportar una por las estampas que el maestro Guillo Pérez logra recrear
mediante un orden cronológico y las necesidades humanas. El punto de mira se concentra –precisamente– en el diseño
arquitectónico, discurriendo desde la libre invención hasta el naturalismo no académico.

En esta exposición, el maestro Guillo Pérez, se nos revela también como un extraordinario dibujante y un historia-
dor de lo visual. Hay, sin dudas, en los motivos que expone, una matización romántica, pero además unos trazos fluidos
y la eficacia de un contorno nítido, debido al rigor de las luces. Nuestro artista capta paisajes, monumentos, caseríos y
animales desde una perspectiva en movimiento y una grafía sentimental o sintética. Es indudable que esta exposición

291

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Monumental 2», Guillo Pérez.

292

Danilo De los Santos

viene a representar en la vida de este artista un hito sin precedente. (…) porque lograr reunir todos los rasgos (…) de una
ciudad tan importante como es Santiago de los Caballeros». (C.B. texto de presentación, noviembre 28, 1989).

Obras ejemplares en colección: «Monumental I», óleo/tela, 55x66 cms., 1989 v «Monumental II», óleo/tela,
83x68 cms., 1989 v «Monumental IV», óleo/tela, 78x88 cms., 1989 v «Monumental V», óleo/tela, 96x104 cms., s.f.
v «Monumental VI», óleo/tela, 88x110 cms., 1989 v «Monumental VII», óleo/tela, 90x104 cms., 1989 v «Monu-
mental VIII», óleo/tela, 97x121 cms., 1989 v «Monumental IX», óleo/tela, 137x266 cms., 1989 v «Monumental X»,
óleo/tela, 137x266 cms., 1988/1989 v «Monumental XI», óleo/tela, 96x53 cms., 1988/1989.

«Monumental 7», Guillo Pérez.

293

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

294

Danilo De los Santos

José Vela Zanetti. (Burgos, 1913-1999). Creció como artista en Santo Domingo desde su arribo en 1939.

Se convirtió en muralista y fue docente de la Escuela Nacional de Bellas Artes. También director, hasta inicios
de los años 50, cuando se marcha a Ciudad México. A su constante regreso a la República Dominicana, que
consideraba su país, se relacionan los dos dibujos que forman parte de la colección del Popular.

Al morir se cumplió su deseo de que parte de sus restos descansaran junto a los de su intrañable amigo
arquitecto José Antonio Caro Álvarez.

«Dibujo»
José Vela Zanetti

«Instrumentos del merengue»
José Vela Zanetti

295

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

Marianela Jiménez. (Mao, Valverde,

1925/Santo Domingo, 2012). Es la única
pintora de la generación de 1940 y del alum-
nado fundador de la Escuela Nacional de
Bellas Artes que sobrevive durante el pasa-
do siglo XX, desplegando una potencialidad
creativa como artista mujer y reconocida
maestra. Ocupaba, en el año 2000, la direc-
ción del plantel académico donde se formó,
y para la citada fecha había celebrado indivi-
duales, figurando sus obras en importantes
colectivas, entre ellas «Mujer y Arte Domini-
cano Hoy. Homenaje a Celeste Woss y Gil»
(1995) y «Merengue ritmos visuales», orga-
nizada por el Centro León y presentada en
el Museo del Barrio de Nueva York (2006).
Paisajista, bodegonista, captadora de escenas
populares y retratista, su pulso seguro para el
dibujo y la pintura dan un vigor más expre-
sionista que otros lenguajes que conjugaba
con una paleta de matizaciones cromáticas.
«Figuras de Mujer», óleo/tela, 127x122 cms.,
fechada en 2001, es obra atesorada en la co-
lección bancaria.

Darío Suro. (La Vega, 1917/Santo Domin-

go, 1997). Inquieto pintor que no se sometió
a estilos lingüísticos, incluso produciendo
obras diferenciadas en fechas similares. Su
«Composición», llena de geometría en azules
y negros sobre fondo amarillo, tiene relación
con su vínculo a la abstracción internacional
que asimila en España. Regresó a Santo Do-
mingo con su esposa, donde fallece.

«Composición», Darío Suro.

296

Danilo De los Santos

Federico Izquierdo. (Monción, 1904/Santiago, 2004). Es el único pintor sobreviviente de la

generación 1930, y cuyo primer registro expositivo fue en la Feria Nacional e Interantillana celebrada
en Santiago de los Caballeros (1927), en donde creció, se formó, ejerciendo docencia como maestro
de Escuela Secundaria y de Bellas Artes. Expositor de la Primera Bienal Nacional (1942) y de otras
exposiciones oficiales. Sus muestras personales se registraron en la ciudad del Yaque. Por su amplia
gestión artística, civil, cultural y educativa, el Estado dominicano lo condecora con la Orden de Duarte,
Sánchez y Mella, en grado de Caballero. Retratista reconocido, pintor de paisajes, del folklor y de las
tipicidades vernáculas. Su obra «Tarde carnaval», óleo/tela, 101x75 cms., del 1999 es la última que
pintó antes de fallecer.

5. Un retorno a la cronología culminativa. Un recorrido desde inicios del siglo XX
hasta la década final del mismo, nos permite focalizar jóvenes artistas de la generación de la década de
1990 y a los cuales llamamos novecentistas. Yolanda Monción (Yuli), Mario José Ángeles, Dinorah Álvarez
y Mariano Sánchez son artistas que egresan de centros formativos, y fechan sus obras y sus nombres se re-
gistran en exposiciones colectivas o individuales, con una importante proyección en el nuevo siglo XXI.

Mario José Ángeles. (Nace en 1965). Realizó estudios de arquitectura en la Universidad Autónoma

de Santo Domingo. También dibujo básico y anatómico con Domingo Liz y Roberto Flores, y pintura
con Guillo Pérez. En 1991 celebra su primera individual titulada «Del Cono Sur a las Antillas», y al
año siguiente (1992) la segunda muestra personal, «La danza de los paraguas», portátiles utensilios
para cubrirse de la lluvia que el artista convierte en un concepto reiterativo del dibujo, la fotografía,
la instalación y la pintura.

Obra ejemplar en colección: «La danza de los paraguas», mixta/tela, 30x40 pulgs., 1997.

Mariano Sánchez. (San Juan de la Maguana, 1964). Inicia formación artística en la Escuela de Bellas

Artes de la ciudad natal. En 1918 ingresa a la Escuela de Arte y Diseño de Altos de Chavón, La Romana.
Obtiene la Beca de la Parsons School of Design de Nueva York patrocinada por Larry Rivera, reconocido
artista norteamericano.

En 1988 se gradúa con honores en Bellas Artes e Ilustración en la Escuela de Chavón. Entre 1991-1999
celebra siete exposiciones personales, tres de ellas en Miami, Florida, Nueva York, San Juan Puerto Rico y
la restantes en el país dominicano.

«Mariano Sánchez no solo es un asimilador y un transmutador de los signos con que los viejos vanguardistas euro-
peos y norteamericanos articularon la modernidad pictórica. Él también se hunde en las profundidades del tiempo y de
la propia historia del arte occidental, para extraer de esa fuente todos los recursos poéticos y formales que le sean necesa-
rios en la definición de un universo visual personal, uno de los más sorprendentes con que cuenta la pintura dominicana
contemporánea». (Amable López Meléndez).

297

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

«Adoración al fuego», Mariano Sánchez.

«El desgarramiento, la incertidumbre de la forma, el doloroso grito de la materia lacerada, señalan el rito estético
que enmarca las antiformas en la pintura de Mariano Sánchez». (Arnulfo Soto).

Obra ejemplar en colección: «Adoración del fuego», acrílica/tela, 76x97 cms., s.f.

Dinorah Álvarez. (Santo Domingo). En la década de 1980 inicia estudios pictóricos en la academia de

Cándido Bidó, prosiguiendo en la Escuela Nacional de Bellas Artes. Su vinculación con Roberto Flores y
su ubicación en Jarabacoa le permiten preparar su primera exposición, celebrada en 1990, seguida de otras
muestras personales en 1995 y en el 2000, además de concurrir a certámenes y otras colectivas. La surreali-
dad marca su discurso sobre espacios celestes, cosmografía y vivencias.

Obra ejemplar en colección: «El vuelo de la reina», óleo/tela, 40x50 pulgs., 1992.

298

Danilo De los Santos

Yolanda Monción (Yuli). (Santiago Rodríguez, 1961). Realiza estudios de psicología en el período 1983-1985

y de arte publicitario durante los años 1985-1987, en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, asistiendo a
diversos talleres sobre grabado y restauración que fortalecen su carrera artística. En 1994 obtiene premio de dibujo
en la XIX Bienal Nacional de Artes Visuales, celebrando en el citado año la primera exposición individual.

Su discurso expositivo «En torno a la lluvia», comienza indagando el «alma oculta del paraguas». Escribe
Cecilia Casamajor: «Que en formatos alargados desarrolla una serie de pinturas de esos artículos indispensables, ubicuos
y molestos. Los colma de vida, los enlaza con la lluvia, los metamorfosea bajo los caprichos del viento, los decolora, los
despinta y los deposita en las manos de los transeúntes o los arranca de los brazos de una niña solitaria». (C.C., El Siglo,
noviembre 14, 1994). Yuli Monción, abandonó su profesión de publicista para dedicarse de lleno al dibujo y a
la pintura, fortaleciéndose con cursos y talleres en Santiago de Cuba. Establece los códigos lingüísticos de un
estilo personal identificable. Ella consigue síntesis entre figuraciones, geometría y abstracción.

Obras ejemplares en colección: «Lección Henri Matisse I», mixta/tela, 75x100 cms., 2001 v «Lección Henri
Matisse II», mixta/tela, 75x100 cms., 2001.

«Lección Henri Matisse II», Yolanda Monción (Yuli).

299

Arte e Historia

en la colección de Artes Visuales del Banco Popular Dominicano

300

La escultura como materia plural

Escultura, como concepto, se origina de la expresión latina «Sculpere o Sculpterum», referida a la acción
de esculpir o tallar un material duro como la piedra y la madera. Los griegos usaban el vocablo «Plasso» que
significa plasmar o modelar un material blando como la arcilla, la cera y el estuco. Las dos palabras «Scul-
pere» y «Plasso» se usan en idiomas modernos como el italiano, significando toda representación artística
de carácter tridimensional y opuesta a la de naturaleza unidimensional. Ambas representaciones forman
parte de las artes plásticas espaciales, por ocupar un lugar físico. A pesar de la condición espacial, el dibujo,
la fotografía o la pintura carecen de la tridimensionalidad de la arquitectura y de la escultura, ya que estas
poseen concritud, solidez y volumen relacionados a la materialidad.

El arte tridimensional de la escultura es presenciable en toda historia nacional de las manifestaciones
artísticas, plásticas o visuales. Presenciable como registro de las colecciones que, por ejemplo, atesoran
obras dominicanas. La colección del Banco Popular posee un conjunto de esculturas que nos refieren
autorías, historias, dominicanidad e incluso especificidades preferenciales en el arte de esculpir la piedra o
tallar la madera modernamente.

Seis importantes escultores nuestros nos permiten una mirada de conjunto sobre el arte espacial-tridi-
mensional presente en la colección del Banco Popular. Son ellos: Luichi Martínez Richiez y Antonio Prats-
Ventós, vinculados a la generación de 1940; Gaspar Mario Cruz, representante de la generación de 1950;
Nicolás Jiménez y José Ramón Rotellini, asociados a la generación de 1960 y Ramiro Matos, escultor que
emerge en la década de 1970.

Antonio Prats-Ventós. (Barcelona, 1925/Nueva York, 1999). Escultor formado por maestros en talleres de

Santo Domingo. Es maestro de sí mismo y docente orientador de un gran número de jóvenes escultores. Reco-
nocido por la crítica nacional y de Europa. Enfrenta todos los materiales para concebir sus esculturas diversas en
estilo, lenguajes, procedimientos técnicos y proporciones. «Con la gubia impulsada por la maceta, Antonio Prats-Ventós
sacaba los volúmenes y la madera iba tomando las formas que ella misma sugería, interpretadas por la mano creadora del
artista», testimonia María Ugarte en el libro «Prats-Ventós 1925-1999», editado por el Banco Popular, en 2001.

«Abstracto»
Antonio Prats-Ventós

301


Click to View FlipBook Version