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Published by mauroluri, 2023-08-30 09:26:46

Candelaria.2023

Candelaria, a y er , ho y y siempr e...
Candelaria, ayer, hoy y siempre...

educativo. Las exigencias para seguir ejerciendo la do-
cencia en las distintas asignaturas fueron: poseer título
docente, de secretaría, preceptoría o poseer como míni-
mo el certificado del Nivel Medio completo.

En un inicio, contó con 60 inscriptos de todas las
edades, concurrieron alumnas ya jubiladas que no tuvie-
ron inconvenientes en compartir horas en el aula y recreos
con adolescente. La primera promoción de 25 estudiantes
egresó en 1974.

Episodios ocurridos en aquel primer

año tan numeroso

Una de las historias que se recuerda de esa época se
relaciona con la gran diferencia de edad de los compañe-
ros. ¡Cuántas travesuras de los jóvenes soportaron aquellas
personas mayores! En una oportunidad sonó el timbre in-
dicando la entrada a clases, la directora preguntó: “¿Nadie
se quedó en el patio?” Carlitos respondió: “¡Sí, señora! Don
Pedro y don José siguen jugando a la bolita allá”.

Además, ocurrió un suceso lamentable. Rosendo sal-
tó la ventana y a grandes pasos entre los alumnos llegó a la
dirección y, sin saludar, increpó a la directora: “¡Mediante tu
gestión ahora tenemos un montón de haraganes y ¿quién va
a carpir en los yerbales? ¡Vos estás loca!”. Así fueron los pri-
meros pasos estudiando para progresar y ser más útiles para
la sociedad, esto no a todos alegraba y había quienes no pen-
saban en el futuro y las posibilidades de aquellas personas.

En un comienzo, las dificultades que afrontaron fue-
ron muchas, no se esperaba la ayuda absoluta del Estado
Provincial sino de la asociación cooperadora, encargada de
proveer elementos fundamentales para la escuela.

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El lugar donde funcionaba en ese entonces era la vi-
vienda que se alquilaba a María Delia Schubert, una casa
de familia que contaba con habitaciones muy amplias pero
con dimensiones poco espaciosas para albergar a tanta
cantidad de alumnos. En poco tiempo, se presentaron 150
estudiantes y se hizo imperiosa la necesidad de contar con
un edificio propio y adecuado para el futuro de lo que hoy
es el Bachillerato Orientado Provincial N°5 Juan Martín de
Pueyrredón.

Desde el año 1968, se iniciaron las gestiones a fin de
lograr la edificación propia que culminó felizmente recién
en el año 1974. La obra significó un proyecto de arquitectu-
ra escolar con amplias instalaciones para alojar a más de
1000 alumnos .

El primer establecimiento de la localidad estuvo a
cargo de la señora Nidia Beatriz De Simón, la sucedieron los
siguientes directivos: Alejo Correa, Nélida De Simón de Flei-
tas, Norma De Simón, Felipe Santiago Fleitas, María Dominga
González, Lilia Jagniaux y, en la actualidad, Margarita Dziewa.

Se presentaron desde el mismo, trabajos relevan-
tes que se destacaron en la primera feria de ciencias de
la provincia teniendo como tema Plantas epífitas, obtuvo
el apoyo y la enseñanza de la profesora de Ciencias Bioló-
gicas, la señora Ramona Beatriz Velázquez, hoy abogada y
ministro del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia.
Presentó un stand donde se podían observar orquídeas en
todo su crecimiento hasta la floración. Este trabajo ganó el
primer puesto y llegó a la Ciudad de Córdoba donde tam-
bién alcanzó el podio con un premio honorífico. Para poder
solventar los gastos, debieron vender algunos de los ejem-
plares de orquídeas, no se pudo realizar el viaje previsto a
San Pablo, Brasil, por razones económicas.

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Es justo destacar el desempeño de la profesora y
doctora Ramona Beatriz Velázquez porque siempre supo
estimular a sus alumnos y, mediante ese trato especial,
lograba que trabajaran y estudiaran con alegría. Su paso
por Candelaria dejó hondas huellas, por su buena disposi-
ción para avanzar en todos los quehaceres de la educación.
Los sábados se organizaban actos llamados de Extensión
Cultural, en ellos se llevaban a cabo charlas, conferencias
sobre distintos temas, representaciones teatrales, actua-
ciones musicales, práctica de danzas folclóricas y de ins-
trumentos musicales. Contaban con numerosa asistencia
de los vecinos, quienes esperaban estas celebraciones. Era
no solamente movimiento cultural sino también de espar-
cimiento para los candelarienses.

Hasta hoy se mantiene la Exposición de las Alfom-
bras Florales que se lleva a cabo hace 32 años por iniciativa
de la profesora Edita Mussard de Ayala, cuando era director
el profesor Felipe Santiago Fleitas. Ha sido declarada de
interés provincial por el Gobierno de la Provincia de Misio-
nes. En dichas alfombras se puede notar la creatividad de
los alumnos, duran nada más que 24 horas pero durante
ese tiempo están a la visita de todos los interesados.

Una vez más, Candelaria es el centro de atención ya
que el trabajo de Alfombras Florales que realiza el B.O.P.
N°5 logró relevancia internacional. Recibieron una invita-
ción proveniente de España para la exposición de la Alfom-
bra Mundial del Jacobeo 2021 de Santiago de Compostela ,
realizada el día 24 y 25 de julio de 2022. En forma inmediata
se puso en marcha el proyecto, fue expuesto de manera
presencial para la zona y a nivel internacional de manera
virtual para las 270 ciudades participantes.




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El profesor Ariel Figueredo formó parte del equipo
responsable, fue convocado el intendente Carlos Omar Flo-
res quien brindó amplio apoyo para la concreción del trabajo.
Candelaria está muy feliz de ser nuevamente protagonista.
También hay que destacar la labor desinteresada y
ad honorem efecturada por el ex alumno del B.O.P. 5, ar-
quitecto Fernando Fleitas, quien diseñó la plantilla, réplica
ampliada del original exigido por España que debía cum-
plir con los requisitos para la presentación. Asistió público
local y del interior de la provincia y hubo una gran difusión
radial, televisiva, medios impresos y digitales.


Otros establecimientos educacionales
Actualmente en Candelaria existen en total 4 esta-
blecimientos de Nivel Medio y ellos son: B.O.P. N°5, B.O.P.
N° 82, E.P.E.T. N° 40 y el Instituto Privado Nuestra Señora de
la Candelaria.

En la localidad, actualmente hay un Centro de Edu-
cación Musical (CEMU N°1). En esta institución de forma-
ción, niños y jóvenes pueden acceder a un aprendizaje cul-
tural desde la práctica instrumental y coral.

Encuadrado en la ley de Educación N° 26.206 como
formación artística vocacional, fue creado como escuela en
el año 2010 con el número 2540 mediante el Ministerio de
Cultura, Educación y Ciencia Tecnológica de Misiones en el
Consejo General de Educación de la Provincia.

Los aprendizajes que se imparten en la institución
comprenden ensayos parciales y generales donde se in-
cluyen contenidos de lectoescritura musical, métodos de
ejecución instrumental, preparación física y entrenamiento
(vocalización y audioperceptiva).

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Los profesores poseen una buena formación, se
puede escuchar el resultado en los actos patrios o eventos
sociales en que los estudiantes ejecutan instrumentos o
participan en pequeños coros.

La directora del CEMU a nivel provincial es la profe-
sora María Alejandra Vendrell, manifiesta con satisfacción
que al iniciarse el proyecto habían sólo 70 alumnos inscrip-
tos en los talleres de coro, un año después la cifra aumentó
a más de 200 jóvenes.

Vendrell resaltó que con la música los estudiantes
de coro aumentan la capacidad de memoria, de atención
y de trabajo en equipo ya que la responsabilidad indivi-
dual repercute en el trabajo de todos. Afirmó, también,
que los talleres corales promueven la inserción comu-
nitaria de los chicos que participan y de la comunidad
educativa que apoya el proyecto.































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Su esencia como identidad






Este lugar es identificado con un escudo, es el mis-
mo desde hace más de 30 años. Durante la intendencia de
Salomón Amiel, se lanzó un concurso libre de participación
para la creación del mismo teniendo como ganador a Ri-
cardo Esteban Zarza.

Simboliza un homenaje al creador de la bandera,
la unidad de los pueblos entre los guaraníes y los je-
suitas, alusión a las reducciones jesuíticas y también al
sarandí simbólico.
La bandera de Candelaria


El 31 de mayo de 2018, en un acto que se realizó en la
plaza local, el intendente Daniel Luna junto al vicegoberna-
dor Oscar Herrera Ahuad (actual gobernador de la provin-
cia), se presentó de manera oficial la bandera diseñada por
Candela Ibarra de 14 años, alumna del B.O.P. N° 5. Resultó
ganadora de un concurso en el marco del programa llama-
do Revalorización de la Identidad Misionera, propulsado
por el entonces vicegobernador de la provincia.

La idea de la creación de este símbolo, como así
también de la canción oficial, pertenece al vecino y docen-
te local Gustavo Aníbal Gauto quien propuso el proyecto y
las bases del concurso posteriormente aprobados en una
sesión del Concejo Deliberante.

Esta persona en más de una oportunidad reflexio-
nó: “¿Por qué Candelaria no tiene identificada y creada
su bandera y tampoco su canción? ¡Candelaria ha sido

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capital de los Pueblos Jesuíticos!” El 22 de noviembre de
2016, aceptaron lo propuesto y surgió la ordenanza por la
que se llamó a concurso.

El jurado estuvo representado por el gobierno mu-
nicipal y provincial, artistas locales y de la provincia, veci-
nos, docentes de nivel primario, secundario y universitario,
estudiantes y ex funcionarios del municipio. Los autores
fueron David Frutos (letra y música de la canción oficial) y
Candela Ibarra (bandera).
Candelaria quiero nombrar, Sarandí añoso de ayer
Gracias, muchas gracias, Gustavo Aníbal Gauto, en
nombre de Candelaria. Donde descansó el gran general, y Belgrano vio que empezó a nacer
la Constitución hecha realidad.

Recordar hoy quiero también, al bravío Guacurarí
guerrero sagaz, pueblo guaraní

embriagado en grito de libertad, luchando se fue se dejó morir…
Junto al Paraná, costanera y sol, Candelaria va

con su carnaval, danza y color, muralismo y flor
con su cielo azul, misteriosa flor, lapacho y pindó

pájaro y nidal, cedro y arribol, plaza del ayer
jesuita inmortal, vieja capital esta tierra fue.

Estribillo
Día de la Bandera de Candelaria
Junto al Paraná, costanera y sol, Candelaria va

El Consejo General de Educación instituyó al 31 de con su carnaval, danza y color, muralismo y flor
mayo de cada año como Día de la Bandera de Candelaria con su cielo azul, misteriosa flor, lapacho y pindó
por haber sido ese el día en que fue izada por primera vez.
pájaro y nidal, cedro y arribol, plaza del ayer
Se estableció que sería enarbolada en las instituciones
públicas junto a las de Misiones y de Argentina. jesuita inmortal, vieja capital esta tierra fue.


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Canción Oficial de Candelaria

En el marco del 391° Aniversario de Candelaria se
realizó un festival artístico donde se presentó la canción
interpretada por Cecilia Villalba en la voz y Fabricio Ertl en
el acordeón, con letra y música de David Frutos.
Revaloriza la identidad misionera cumpliendo obje-
tivos del doctor Oscar Herrera Ahuad.

Candelaria quiero nombrar, Sarandí añoso de ayer

Donde descansó el gran general, y Belgrano vio que empezó a nacer
la Constitución hecha realidad.

Recordar hoy quiero también, al bravío Guacurarí
guerrero sagaz, pueblo guaraní

embriagado en grito de libertad, luchando se fue se dejó morir…
Junto al Paraná, costanera y sol, Candelaria va

con su carnaval, danza y color, muralismo y flor
con su cielo azul, misteriosa flor, lapacho y pindó

pájaro y nidal, cedro y arribol, plaza del ayer
jesuita inmortal, vieja capital esta tierra fue.

Estribillo
Junto al Paraná, costanera y sol, Candelaria va

con su carnaval, danza y color, muralismo y flor
con su cielo azul, misteriosa flor, lapacho y pindó

pájaro y nidal, cedro y arribol, plaza del ayer
jesuita inmortal, vieja capital esta tierra fue.



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David Frutos manifestó el orgullo de que la letra y
canción de su autoría ganaran el concurso y mencionó que
la hizo en ritmo de galopa, uno de los más característicos
de la provincia de Misiones.
En toda la tarea cultural, realizada en la gestión de
Daniel Luna, fue destacado el trabajo de la Profesora Nor-
ma Isabel González quien en esta instancia tuvo honda
participación y para la concreción de los símbolos men-
cionados. Durante el tiempo que ejerció su función de se-
cretaria de Cultura lo hizo con acierto, responsabilidad y
amplio conocimiento.

20 de junio: Día de la Bandera

El señor Anastasio Cabrera fue intendente munici-
pal y diputado a partir del año 1960, mediante su iniciativa
se fijó la localidad como sede de los actos oficiales en con-
memoración del Día de la Bandera Nacional y en homenaje
al ilustre General don Manuel Belgrano. Así está pautado
en el Art. 2 teniendo de fundamento los antecedentes que
registra Candelaria desde los inicios de la conformación de
la Primera Junta de Gobierno de Buenos Aires.

Entre los episodios que jalonan la historia de Cande-
laria se encuentran la redacción de las bases de lo que sería
el Primer Ensayo Constitucional. Vamos a recordar algunos de
los fundamentos que decían: Candelaria, primero bajo el sig-
no de la Cruz, tratando la civilización y conversión de los nati-
vos. Más adelante, la gesta histórica de la independencia, es-
tando alerta al servicio de la causa emancipadora. Después,
el accionar de Belgrano, General Improvisado, no sabemos
con exactitud si fue Candelaria por donde pasaron las fuerzas
que llevaron el grito de libertad a la hermana República del
Paraguay. Lo que sí sabemos es que por esta zona pasó el
ejército de la libertad, así lo recuerda la gratitud popular.

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El presidente de la legislatura, el señor Escalada,
propuso la votación que resultó afirmativa por unanimi-
dad, sin observaciones, haciéndose la comunicación co-
rrespondiente al Poder Ejecutivo.

Las celebraciones de la fecha son memorables: gran-
des desfiles cívico–militares, danzas folclóricas y demos-
traciones de este tipo frente al palco oficial en el que sue-
len ubicarse autoridades de la provincia encabezadas por
el gobernador, los ministros y responsables de otras áreas
del gobierno. En todas las cuadras adyacentes se observa
la presencia de los habitantes y vecinos de alrededores,
esta fiesta ya es una tradición en la localidad.







































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Casa con misterios






En una de las casas donde habitó Basilio De Simón
junto a su familia se presenciaron, supuestamente, episo-
dios paranormales. ¿Por qué será?

Una de las hijas de Basilio, Emilia, preparaba su ca-
samiento. Era muy joven. El futuro esposo fue a comprar y
traer los muebles desde Corrientes, debiendo pasar por el
arroyo Garupá afectado por una creciente. Esto no permitió
el cruce normal de la balsa por lo que tuvo que esperar a
que las aguas bajaran. Los días transcurrieron y Emilia con-
tinuaba esperando, una mujer que se decía espiritista y vi-
dente le anunció que su prometido no regresaría. Abatida,
decidió suicidarse tomando cianuro, cuando su novio pudo
volver fue al velatorio encontrándola vestida de novia en el
cajón mortuorio.

La costumbre de aquellos tiempos no permitía de-
positar a los muertos en el predio del cementerio porque
se consideraba que el suicidio era “pecado mortal”. Fue en-
terrada fuera del camposanto y hoy no se registra ningún
rastro de su existencia. Aparentemente, como una paradoja
del destino, Basilio se vio en la difícil situación de sepultar
a su hija en su propia casa después de haberse enfrentado
varias veces con los habitantes que se oponían a trasladar
a sus muertos al cementerio local.

Dicen los que han vivido en esa casa que se registran
voces extrañas y el transitar de una silueta vestida de blan-
co. Extrañamente, los inquilinos habitan poco tiempo en
ella porque a menudo los episodios provocan desasosiego,
inquietudes y mucho miedo.

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Basilio y su familia no pudieron soportar la trage-
dia y se trasladaron a la casa que construyó y en la que
vivió hasta sus últimos años. Continúa existiendo y se
conserva intacta. La misma perteneció hasta hace poco
a Julio Alberto Argentino De Simón, su nieto, quien reside
actualmente en Oberá.



















































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Primera Ordenacion
Sacerdotal en Candelaria


El 5 de diciembre de 1998, se celebró a la primera
ordenación sacerdotal en esta localidad. Héctor Amado
“Charito” Arrúa, hijo de Nemesio Arrúa Cardozo y de Vicen-
ta Duarte, fue consagrado sacerdote.

Frente a la iglesia local con la asistencia de muchísi-
mas personas que cubrieron casi toda la avenida, una cua-
dra y gran parte de la plaza, se llevó a cabo la ceremonia.
El obispo monseñor Fernando Lugo Méndez, Misionero del
Verbo Divino, ofició el acto.

Estuvieron presentes sus padres, hermanos (Alicia,
Leonarda, Norma, Lucila, Corina, Saúl y Eliza), demás fami-
liares, amigos, afectos y vecinos de Candelaria.





























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El padre Héctor Amado realizó sus estudios prima-
rios en la escuela N°8 y el colegio secundario en Garupá. La
preparación como sacerdote comenzó en Fátima, ubicada
en el barrio Miguel Lanús, después en Villa Allende, Córdo-
ba y, por último, en Villa Calzada, Buenos Aires. En todos los
lugares se destacó como brillante alumno. Su primer des-
tino como sacerdote fue la zona sur de Buenos Aires, lue-
go Cutralcó, Neuquén y, posteriormente, inmediaciones de
Montevideo, Uruguay. Su último destino fue la Isla de Cuba,
más precisamente, Holguín a 30 km de la Habana, donde
reside y se siente útil, ayudando a sus semejantes quienes
lo tratan con cariño y lo conocen como el padre “Charito”.

Antes de iniciar de su carrera sacerdotal, con sólo 17
años, trabajó en la chacra y en el monte, aunque todos aque-
llos que estuvieron en contacto con él destacan sus bellas con-
diciones humanas. Tiene 52 años, está físicamente lejos pero
cerca de quienes lo recuerdan con agradecimiento y amor.

En Candelaria y sus alre-
dedores ofició varias misas. La
primera al otro día de su consa-
gración a las 19:30 hs. Cada vez
que vuelve celebra sacramentos
como el bautismo, la primera co-
munión y la confirmación. La úl-
tima vez que regresó fue en no-
viembre de 2021.













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Repercusion de la noticia

de la Guerra de Malvinas

en Candelaria



Los habitantes querían colaborar con los jóvenes,
casi adolescentes, que fueron llevados a semejante y
trágico hecho histórico.

La mayoría de la información faltaba a la verdad,
esto fue confirmado más adelante. Se pedía colaboración
de todo tipo, en el municipio los habitantes depositaron
objetos varios (abrigos, alimentos secos, muchas cartas de
aliento, elementos de higiene y alhajas, algunas de gran
valor) ¿A dónde fueron a parar? Estos se llevaron pero no
precisamente para ayudar a nuestros soldados.

En el Servicio Penitenciario Federal, el jefe fue una
persona de apellido Muñoz. Constituyó una formación con
todo el personal y pidió que se expresaran los que estaban
dispuestos a acudir a la guerra, si fuera necesario. Advirtió
que los voluntarios debían ser, en principio, hombres sol-
teros. Sin embargo, los presentes pronunciaron su volun-
tad de acudir en ayuda de la patria.

En el país seguíamos las noticias de la guerra, como
en todo lugar donde esta ocurre, casi siempre, lo primero
que se pierde es la verdad…

“¡Estamos ganando!”… y se hundía el Crucero General
Manuel Belgrano. “¡Que venga el principito!”, decían algu-
nos medios burlándose de los ingleses. Nuestros jóvenes,
casi niños sin entrenamiento, se enfrentaban con sufri-
miento al misterio de la muerte... Lejos, muy lejos, cuando
a esa edad, se gestan los sueños de la familia, del progreso,
rodeados de los seres queridos.
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“¡Tras un manto de neblina, clama el viento y ruge el
mar!” perdía la vida el capitán Carlos Krause en un avión
Hércules. Misionero, valiente y recordado, nunca volvió.

El 14 de junio de 1982, con la capitulación de Argen-
tina, finalizó el conflicto bélico y nos encontramos con la
cruda verdad, esa realidad dejó sumido al pueblo argenti-
no en profunda tristeza. Todavía surgen testimonios de los
que sobrevivieron, algunos con profundas cicatrices en el
cuerpo y todos con heridas en el alma.

Carlos Krause, hijo de un maestro de frontera, Gui-
llermo Krause y de María Grahl. Nació en Oberá el 4 de abril
de 1848. Fue alumno del Colegio Roque González durante
la primaria y secundaria. Estudió en la Escuela Militar de
Aviación en Córdoba. En principio quería ser médico pero
un tío lo convenció de que fuera militar. Su esposa, Hada-
liz da Nilda, es una correntina oriunda de Goya.

Carlos Krause murió en la guerra cuando faltaban
dos semanas para el final. Fue muy cara la derrota y des-
pertó la admiración del mundo, incluso la de los ingle-
ses. La desaparición fue el 1 de junio de 1982, tenía 34
años. Dejó a su esposa y cuatro hijos pequeños, la mayor
llamada María Eugenia de 8 años, Guillermo de 6 años,
Germán de 2 años y Walter de 1. Amó a su familia, a la
tierra colorada, al mate y al chamamé.

Desde el año 2000, el Aeropuerto Internacional de
Puerto Iguazú lleva su nombre. A 40 años de su muerte se
descubrió una placa recordatoria, al benemérito acto con-
currieron familiares de este héroe valiente que nunca volvió.







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los entierros

Antes, las únicas formas de guardar dinero, mone-
das y otras pertenencias de valor eran en cántaros de cerá-
mica y, por seguridad, enterrados. El lugar era conocido por
sus dueños y podían tener como referencia algún elemento
natural del entorno (un árbol, alguna piedra especial u otro
elemento dejado a propósito). Es así como se han observa-
do excavaciones varias sobre todo en las inmediaciones de
las Ruinas Jesuíticas. En alguna oportunidad, se ha resca-
tado debajo de la tierra máscaras recubiertas de oro, no se
conoce su destino final.

Dicen que los bienes llamados entierros, despiden
señales luminiscentes a flor de tierra debido a la acumula-
ción de gases que al entrar en contacto con el oxígeno se
encienden. Este proceso no se ha podido comprobar cien-
tíficamente. La creencia popular afirma que los antiguos
dueños no descansan en paz hasta que alguien descubre y
desentierra esos elementos.
Muchas narraciones existen sobre estos fenómenos,
algunas son fantasías pero otras tienen características rea-
les. Hay testimonios de tareas de excavación, en las inme-
diaciones de los restos de las Misiones Jesuíticas y en pre-
dios pertenecientes a viviendas particulares, donde más
de una vez se encontraron vestigios: cántaros de cerámica,
cajas de metales vacíos con monedas de bronce en forma
de águila en su interior.







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Los clubes


Uno de los primeros clubes que existió en Candela-
ria se llamó El Indiano, en él se realizaban actividades so-
ciales de todo tipo, funcionó la primera sala de cine y las
recreaciones se fueron transformando ya que al comienzo
eran muy selectivas y discriminatorias. No todos podían
concurrir porque dependía del estatus socioeconómico.
La situación de privilegio de algunos provocó que el club
decayera y luego desapareciera.


Club Atlético Candelaria
Se transformó en una institución de fútbol y se man-
tuvo a través del tiempo. Cuenta con cancha para practicar
este deporte en la que se llevaron a cabo muchísimos tor-
neos a los que siempre concurrió amplio público. Respecto
a la trayectoria futbolística de este club, se puede destacar
que, en el año 1966, se afilió a la Liga Posadeña de Fútbol,
el presidente de aquel entonces era el señor “Ki” Meza.

La máxima actuación en su instancia deportiva ocu-
rrió en el año 2004, cuando en un partido realizado en Cór-
doba, Villa María, se destacó y ganó ascendiendo al Torneo
Federal A. A partir de ahí, realizó un largo recorrido en dis-
tintas provincias durante dos años.

El técnico era el señor Luis Bruchón. El presidente
del club, Miguel Ayala y el secretario, Rigoberto Espinoza,
contaron con el apoyo de los siguientes patrocinadores:
Crucero del Norte, Rosamonte, New Imagen y el trabajo
permanente de vecinos de Candelaria que realizaban todo
tipo de ventas, sobre todo de comidas para solventar lo

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que significaba el traslado y movimiento de los jugadores.
Semejante ascenso duró hasta 2006, nuevamente regresó a
la 1° B, terminándose el período de gloria del club. Actual-
mente, continúa sin actividades debido a la pandemia que
afectó al mundo entero.

El Club Belgrano

Funcionó donde actualmente se ubica la escuela
provincial N° 285 Santa Cecilia. En la institución, durante
muchos años se realizaron actividades y eventos de bás-
quet, pelota al cesto y patín, fiestas de cumpleaños, aniver-
sarios y los bailes en vísperas de fiestas patrias o recorda-
ciones del 2 de febrero.

Los bailes entre las décadas del 50 y 70 contaban
con grandes orquestas, muchas veces contratadas desde
Buenos Aires, eran llamadas Típica y de Jazz.

A nivel local, existían muy buenos artistas: Vicente
Fernández, se desempeñaba como excelente sastre y su
instrumento musical era el bandoneón. Otro de ellos era
Felipe Hermosilla quien solía actuar en fiestas locales, re-
cordado como un excelente músico.

En el Club Belgrano, en una oportunidad ocurrió un
episodio trágico: el encuentro comenzó a las 9 de la noche
y debía terminar a las 2 de la mañana del día siguiente (así
eran las costumbres), después de ese horario los que con-
currían debían retirarse a sus domicilios, la policía contro-
laba. En la mencionada noche, cuando casi todos los que
asistieron volvían a sus domicilios, se registró un tiroteo
que terminó con la vida de una persona. A partir de enton-
ces, el Club Belgrano fue en decadencia, la comisión direc-
tiva no se ocupó de esta situación y, pasado un tiempo, se
cerraron sus instalaciones hasta que dejó de funcionar.

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Existían además de los clubes de fútbol, las llama-
das instituciones sociales: la Sociedad Protectora de Niños
Pobres y un club de gimnasia y esgrima.
Club de Leones
En el año 2007, mediante la gestión de Adolfo Salva-
tierra, se comenzó a gestionar la incorporación del Club de
Leones a la localidad. En el 2008, se concretó y comenzó su
accionar, el juramento de rigor fue tomado en una reunión
festiva en la que asistió público númeroso.

Este organismo internacional tiene como principio
ayudar a otras entidades y personas siendo siempre solida-
rios con los que más necesitan. En Candelaria está afianzado
el trabajo de las distintas comisiones rotativas, lograron obte-
ner botiquines para todas las escuelas primarias locales (N°
8, N° 285, N° 698, N° 45, N° 54 de Profundidad) y el Colegio
Polivalente N° 5. Además, entregaron al hospital un equipo
electrógeno para suministrar energía durante cortes de luz,
colchones y almohadas, más de cincuenta juegos de sábanas,
elementos de limpieza e insumos de uso hospitalario, camas
ortopédicas, sillas y mesas para la sala de espera, cortinas,
colchas y un equipo de rayos de alta generación. Este último
equipo fue conseguido gracias a la intervención del doctor
Humberto Schiavoni mientras se desempeñaba como se-
nador provincial. Entre las acciones solidarias se destaca el
pago de luz a la parroquia Nuestra Señora de la Candelaria.

Presentan concursos de dibujo y pintura en las fe-
chas patrias (20 de junio, 25 de mayo y 9 de julio) con im-
portantes premios para la escuela y los alumnos partici-
pantes como también maratones y campeonatos de pesca
en la costanera local y hasta Profundidad. Las recompen-
sas suelen ser bicicletas y elementos deportivos.


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En 2008, hubo un tornado que maltrató a muchas
familias de Misiones, Los Leones de Candelaria ayudaron
a sobrellevar dicha situación acercándoles colchones, al-
mohadas, frazadas, sábanas y otros enseres. En vísperas
de Navidad, con el título Noche Buena para Todos llevan
cajas que contienen alimentos propios de esta época, los
primeros en recibirlas son los merenderos y las familias de
muy bajos recursos.

Los Leones, en cualquier lugar del mundo tienen
como lema “Servir a los demás”. En Candelaria quienes tra-
bajan en estos espacios a través de las comisiones lo cum-
plen con creces, algunos de los integrantes se alejaron con
el tiempo por distintas razones, pero en ciertas ocasiones
regresaron.

Entre los que están desde los comienzos activamen-
te se puede nombrar a: Gabriel Russo, Silvia Nosiglia Na-
vaja, Marcelo Alberto Figueredo, Gabriela von Knobloch y
Norma De Simón.

Adolfo “Dipi” Salvatierra era muy buen docente y
como tal supo transmitir todos sus conocimientos y expe-
riencia. Falleció imprevistamente siendo joven, había viaja-
do a varios lugares del mundo siendo un León que amaba
lo que hacía con convicción y afán de servir a los demás.
Dejó su ejemplo solidaridad constante, siempre con opti-
mismo a pesar de las dificultades que no faltan cuando se
ejerce la tarea desinteresada de ayudar.

En la actualidad ejerce la presidencia del club el señor
Gabriel Russo y la vicepresidencia, la señora Mercedes Báez.







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El Festival del Encuentro

Se realizó por única vez El Festival del Encuentro en
1971, los organizadores fueron José Francisco Vasena, Ama-
lio Díaz, Santiago Fleitas, Teresa Viana, Luis Alberto “Beto”
De Simón quien también fue un notable intérprete que se
destacó con su guitarra y armónica, las que ejecutaba en
forma simultánea como León Gieco.

Concurrieron músicos, bailarines, cuentistas, humo-
ristas y recitadores no sólo de Candelaria, demostraron des-
trezas de todo tipo, por ejemplo, carreras cuadreras, corridas
de sortija y otras actividades. A mediodía, grandes asados,
quioscos con ventas de choripanes, empanadas, bebidas,
alcohólicas para mayores; a la noche, el gran festival con
notable participación. El salón municipal fue utilizado para
las actuaciones artísticas: canto, cuentos, recitado y, a veces,
bailes. Otra parte del festival se llevó a cabo en el Club Atlé-
tico Candelaria, este fue el lugar adecuado por la cantidad
de concurrentes. Se cobró una entrada mínima a voluntad.

El encuentro duró dos o tres días y no se volvió a
repetir. Sin embargo, quedó en el recuerdo de quienes
asistieron, ya que su buena organización causó alegría en
los candelarienses.


















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Otras particularidades

de las fiestas o bailes eran…

Las conmemoraciones patrias también tenían su es-
pectáculo. Antes de la medianoche, los jóvenes presenta-
ban danzas folclóricas (gatos, chacareras, zamba) con trajes
típicos, terminando con el Pericón Nacional. Esta costum-
bre se perdió con el tiempo, pero en aquel entonces llena-
ba de orgullo y regocijo a los espectadores.

Al amanecer, se lanzaban y escuchaban salvas de
bombas, generalmente a las seis de la mañana. Para el iza-
miento de la bandera nacional a las siete de la mañana,
en el mástil local, había concurrencia de las autoridades
municipales y delegaciones escolares. La presencia de los
estudiantes, que para ese horario eran pocos, era un honor.

Costumbres en los clubes

Se elegían reinas de las fiestas, en las elecciones los
votos eran vendidos y comprados, se pactaba con anticipa-
ción que los fondos adquiridos se donaran a instituciones
de distintos tipos.


Otras actividades recreativas
El Fortín Sarandí

Consistió en una agrupación tradicionalista de
personas que practicaban equitación, carreras y destre-
zas con caballos. La misma realizaba encuentros en Can-
delaria y alrededores. En el gran desfile del 20 de junio
se los podía obsevar.





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Los carnavales en
Candelaria

Entre las actividades recreativas que perduran
están los carnavales, pero con el tiempo naturalmente
fueron cambiando.

Durante los tres días permitidos (por cuestiones re-
ligiosas), en horas de la siesta, se jugaba con el lanzamien-
to de agua, era común mojar totalmente al transeúnte que
salía a caminar después del mediodía. También se solía
arrojar cenizas a aquellos que transitaban.

En las noches, comenzaba el desfile de comparsas
con sus respectivas carrozas y reinas. Estaban integrados
por personas con diferentes disfraces que bailaban al rit-
mo de música y de los tambores, las famosas batucadas.

Aún se distingue la disputa de los barrios ya que lle-
gado el final una comisión de jurados elige los distintos
puestos de acuerdo a la relevancia. Los mejores reciben
elogios y premios.

Hay distintas categorías para niños y adultos: mejor
escola, reina, carroza, vestuario, bastonera, director de es-
cola, pasista, porta estandarte y murgas. En estas últimas,
se nota la habilidad y observación de quienes actúan por-
que generalmente hacen referencia a personas conocidas
de la localidad, políticos y vecinos.

Cuando terminan las jornadas, se constituye el ju-
rado para la distribución de los premios. Están asegura-
dos los descontentos, reclamos y, a veces, largos distan-
ciamientos de los que no ganaron, pero todo esto, pasado


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un tiempo, se olvida o se suaviza y, de nuevo, comienzan
los preparativos para los próximos carnavales. Éstos llevan
tiempo considerable, no sólo para las escolas, músicos,
cuerpos de baile sino también para todo lo que concierne
a su preparación. Casi siempre, en forma efectiva, traba-
ja Sebastián Hermosa, quien se destaca por su habilidad
creativa en el diseño. De la confección de los vestuarios se
ocupa Miguelina Martínez con gran imaginación y empeño.
Tienen manos mágicas en el ejercicio de su profesión.

El carnaval, es una de las expresiones de recreación
que atrae siempre a gran número de jóvenes, desde la tar-
de existe notorio movimiento en la localidad, los vecinos
de zonas aledañas como Cerro Corá, Profundidad y Garupá
se adhieren a la fiesta.



































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La comparsa “Maracatú” fue creada en 1984 por
Carlos Humberto “Polaco” De Simón, docente, músico,
deportista, expenitenciario que hoy trabaja fuertemen-
te en política. Juanito Hollenika, tornero, mecánico, car-
pintero y sobre todo muy inteligente y creativo fabricó
los instrumentos de sonido y musicales, observando los
existentes en Brasil adecuó lo que tenía a mano, tam-
bores, latas y otros elementos. Juanito ya no está entre
nosotros, pero dejó huellas de su enorme inteligencia y
capacidad creativa. Maracatú ganó en la categoría com-
parsa en San Ignacio en 1987.

Más adelante, en Villa Urquiza y Villa Cabello. Gran-
des colaboradores fueron la familia Gómez, Martín Gauvri,
quien ya ha fallecido pero que siempre estaba dispues-
to a resolver inconvenientes. Luego, otros barrios crearon
más comparsas, por ejemplo Irupé, O Carioca y así los días
de carnaval se convirtieron en grandes fiestas con amplia
convocatoria no sólo a localidades vecinas sino de toda la
provincia y también visitantes del país.
Siempre estuvieron sorprendidos por la gratuidad
constante del evento y por los mínimos gastos referidos
nada más que a los consumos individuales de comestibles
y bebidas al paso. Por ello, se considera una de las expre-
siones de recreación que han ayudado al quehacer cotidia-
no y socioeconómico de este lugar.

Hoy, de nuevo, se escuchan los ruidos de preparati-
vos para el próximo carnaval, los que estuvieron en silen-
cio por la pandemia que también afectó a nuestra ciudad.








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Episodios de recuerdos

del Barrio Anselmo




¿Por qué ese barrio lleva el nombre Anselmo?

Anselmo era un pescador, un hombre muy humilde
y sencillo que vivía prácticamente de la pesca, no tenía
residencia fija. En el arroyo San Juan, que desemboca en
el Paraná, abundaban los dorados, pacúes, bogas, sá-
balos. Anselmo los capturaba y los que no eran para su
subsistencia, los vendía. También conocía el método de
ahumado para su conservación.

Muchas veces su hogar era una especie de cueva en
la que se formaban cascadas cuando llovía. Un día, dejó
de transitar las orillas, la posibilidad de pesca desapareció
después del advenimiento de la Represa Yacyretá.

En esa zona existía una casa con todas las co-
modidades incluido un sótano, anexo común en las
residencias de europeos que volvían de la guerra. Allí
vivió al principio el Barón de Kitabgi perteneciente a
la nobleza, poseía además de poderío, por su título
nobiliario, un gran pasar económico. Se sabe que el
origen de sus posesiones fue su trabajo como secre-
tario del Sha de Persia. Viajando por Sudamérica llegó
finalmente a Candelaria, quedó tan encantado que de-
cidió pasar su vida en este territorio entablando amis-
tad con los Lagier y los hermanos Roulett. Alcanzando
la vejez decidió volver a sus raíces.


Esa vivienda pasó a manos de la familia Witier. Una
de las hijas del matrimonio era odontóloga y contrajo ma-
trimonio con el rumano Jorge Ionescu. Este hombre residió

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bastante tiempo allí hasta que se trasladó a Posadas a dictar
la cátedra de filosofía en el profesorado que aún no perte-
necía a la Universidad de Misiones. Ionescu era contador y
filósofo, al concurrir a los hogares de sus vecinos daba lar-
gas charlas sobre la importancia de vivir en paz. ¡Conoció,
convivió y sufrió con la guerra! La vivienda lamentablemente
fue derrumbada, únicamente quedan como testimonio algu-
nos árboles de eucaliptus originales de la época.















































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Un padrinazgo
presidencial

En 1944, el presidente de facto Edelmiro J. Farrel vino
a Misiones y, en horas de la mañana, pasó por Candelaria.
En esta circunstancia, hizo un alto en su viaje siguiendo
la tradición de que el séptimo hijo varón de toda familia
argentina tenga padrinazgo del Presidente de la Repúbli-
ca. Acompañado de la señora Elza Decoppet de Lagier, fue
bautizado “Coco” Aquino en la iglesia local, cumpliéndose
con todo lo establecido por el protocolo religioso católico.


Fue el único caso conocido donde hubo presencia
real de un presidente y no representado por gobernador o
intendente para este oficio.

Sin embargo, otra situación similar fue el padrinazgo
presidencial, cerca de 1950, de Juan Domingo Benzcearski,
ahijado de Perón, sin presencia efectiva con la representa-
ción del intendente local.

























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1983:Retorno a la
democracia


Candelaria no fue ajena al quehacer político de 1983,
pasada la época del gobierno militar, esto, sin dudas, me-
rece un párrafo aparte.

La movilización de distintos sectores no se hizo
esperar. La participación surgió con deseos de ser prota-
gonistas. Los grandes integrantes reconocidos fueron: el
Partido Justicialista y la Unión Cívica Radical. Sus segui-
dores acudían a todos los sectores con campañas bastan-
te importantes. Los habitantes de la localidad no perdían
oportunidad de acercarse a escuchar a los candidatos a
presidentes de la república u otros espacios políticos. Un
ejemplo de ello fue la concurrencia a la Bajada Vieja de
Posadas cuando el doctor Raúl Alfonsín dirigió sus pala-
bras a todos los asistentes. A nivel nacional los candidatos
justicialistas eran Luder y Bittel, pero se vislumbraba que
la fórmula Alfonsín-Martínez sería la triunfadora.

En cuanto a la provincia, los aspirantes a gobernador
por la Unión Cívica Radical eran Ricardo Barrios Arrechea y
Luis María Cassoni (recientemente fallecido) y por el Parti-
do Justicialista el doctor Julio César Humada. Acorde a los
candidatos anteriormente citados y en esa línea, surgieron
los que aspiraban a la intendencia de Candelaria: Salomón
Amiel por la UCR y Francisco Manuel Vidaña por el PJ. A ni-
vel local, ganó la fórmula integrada por Salomón Amiel y,
en segundo lugar, la de Francisco Manuel Vidaña. En ambas
ingresaron igual número de concejales porque hubo poca
diferencia en número de votos entre radicales y peronistas.
El triunfo de los primeros en Candelaria fue consecuente a


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lo ocurrido en el país. La alegría que desbordó en todo el
territorio sellaba el hecho, después de varios años nueva-
mente se podía festejar el advenimiento de la democracia.
Triunfaron las instituciones depuestas en 1976.

El exilio protegió a personas injustamente perse-
guidas que huyeron a otros países para salvar sus vidas.
Quedó atrás en la historia de la patria una de las etapas
más amargas y crueles registradas, a partir de entonces, la
localidad se fue transformando en muchos aspectos.

Entre otras gestiones, Amiel consiguió la crea-
ción de la escuela N°698 que hoy se encuentra frente
al barrio 13 de Julio.

Organizó para el Día del Niño distintas activida-
des con la participación de los más pequeños de la lo-
calidad; esto, naturalmente, atraía gran público. En el
balneario de aquel entonces se realizaron carreras de
natación, en el centro del pueblo, carreras de bicicletas
y a pie. Los ganadores recibieron premios consistentes
generalmente en medallas.

Conformó, además, distintas comisiones que se ocu-
paron de colaborar informando las necesidades de los ve-
cinos de distintos barrios, tratando de mejorar el arreglo
de caminos, la provisión de agua potable, de luz eléctrica y
la asistencia a quienes más lo necesitaban.

Su gestión duró solo un mandato, a partir de ahí
se registró el advenimiento de los representantes del
Partido Justicialista ya siendo Julio César Humada gober-
nador y Julio “Pepe” Piró, vicegobernador. La intenden-
cia quedó en manos de Alberto Ayala, Miguel Ayala (dos
mandatos) y Vidal González.


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Antes de referirnos a la sucesión de intendentes en
la última etapa de Candelaria hasta nuestros días, es im-
portante mencionar los cambios registrados después de la
construcción de la Represa Yacyretá.

La orilla y la vegetación del Paraná se transfromó,
las aguas del río son más quietas y casi siempre trans-
parentes, la pesca se redujo notablemente. En el centro
de la ciudad, se observan modificaciones en calles y ave-
nidas debido a acciones reiteradas de la intendencia. La
avenida de la costanera cuenta con playas que se utilizan
en el verano.









































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Personas y personajes

en su paso por Candelaria



San Roque González de Santa Cruz y Pedro Romero,
los naturales que trabajaban para que existiera la antigua
capital de las Misiones Jesuíticas, eran personas importan-
tes para este lugar.
La patrona, Nuestra Señora de la Candelaria fue
creada el 2 de febrero, fecha de homenaje a la misma. La
primera imagen es misterio y leyenda hasta la actualidad.
Después, prosigue el paso de Belgrano, nuestro prócer
marcó una huella profunda en Misiones y en el país con el
primer ensayo constitucional.

Andresito, como gobernador de Misiones, dejó en su
mandato los más hermosos ejemplos de triunfos militares
gracias a su persona justa y bondadosa.

En esa misma época, vivió, por poco tiempo en Can-
delaria, un irlandés llamado Pedro Campbell, que según
documentos en Cartas de Sudamérica de Robertson Parish,
tenía un carácter turbulento, pero emprendedor con proe-
zas personales. Afirman que era buen jinete, practicaba
esgrima con un largo cuchillo en lugar de florete con un
poncho envuelto en el brazo izquierdo a modo de escudo.
En los combates cuerpo a cuerpo nunca mataba a sus con-
trincantes, no obstante, más de una vez, los dejó heridos
con mutilaciones. Ésto hacía que no quisieran pelear con él
porque lo consideraban un gaucho.








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Figura destacada en el arte musical, pictórico y la poesía:
Don Lucas Braulio Areco


Don Lucas Braulio nació en Santo Tomé, Corrientes,
el 24 de marzo de 1915, sus padres fueron don Lucas Areco y
Casilda Cequeira Lima. Sin embargo, para ese correntino de
nacimiento, su lugar de adopción fue Misiones. Su familia la
formó con una docente candelarience llamada Rosa Haupt-
man. Tuvo cuatro hijos: Celia, Manolo, Marisa y Ricardo. To-
dos ellos heredaron dotes para música y el baile, que en
algún momento fueron puestos en práctica, aunque el genio
era su papá. Los hermanos de Lucas Braulio también eran
artistas, se desempeñaban en el canto, la guitarra y el arpa.

De estatura pequeña, delgado, casi siempre vestido
formalmente con una personalidad y un talento gigante.
Autodidacta como pocos: pintor, escultor y poeta. Entre sus
múltiples obras podemos mencionar “Milonga de Juan de
Dios”, “Verde llanura”, “Madrugando”, “La tarde”, “Danza” y
las galopas “José del Monte”, “Mañanas en Tabay”, “Selva y
camino”, “Penas del caminante”, “Pájaro del alba”, “Tiempo
de maíz”, “Picada Azul” y “Misionerita”, esta última siempre
nos hace poner de pie constituyendo el himno de Misiones,
conocida en la provincia y a lo largo del país. Estas com-
posiciones fueron escritas para ejecutarse en guitarra, el
instrumento de los sonidos infinitos.

En su pequeño atelier se inspiraba, creaba sus obras
y era escuchado por otros como Ariel Ramírez quien en una
dedicatoria escribió: “Artista”. La magia y el talento en su
guitarra era mucho más importante que el nivel académico
porque tenía el sello de su alma. Sin lugar a dudas, fue el
mejor intérprete de sus obras.



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Ejerció por poco tiempo la función pública como se-
cretario de Cultura de la Municipalidad, trabajando en el
Palacio del Mate, lugar en el que se pueden apreciar sus
pinturas. Logró crear la Orquesta Folclórica de la Provincia,
fue autor de obras hechas para el arpa, una de sus últimas
producciones se llamó “Canción para Cecilia” en honor a la
santa patrona de este arte.

Jorge Cardozo fue uno de sus alumnos descubriendo
su carrera y destino musical, actualmente, es un concertis-
ta conocido en el mundo. Areco fue realmente un maestro
de gran intuición y sabía quiénes tenían las condiciones
para emprender el largo y costoso camino del triunfo.

Los que tuvimos el privilegio de conocerlo pudimos
aprender de su ejemplo y preocupación constante por la
ecología y la naturaleza, estos sentimientos fueron plas-
mados en su creación musical, pictórica y poética. Fue un
genio bondadoso, desinteresado de las cuestiones mate-
riales, talentoso como nadie.

En Posadas, el 23 de julio de 1994, con 79 años, falleció.
Este referente de Misiones continúa viviendo gracias a su obra.






















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Profesor Mario Roberto De Simón:

Candelariense desde sus raíces

En una fría y luminosa mañana del 25 de mayo de
1966, nació en Posadas Mario Roberto, hijo de Petrona Car-
dozo y Humberto De Simón, ambos de origen candelarien-
se. Se distinguió desde pequeño por ser un alumno brillan-
te y muy inteligente, convirtiéndose en abanderado de la
escuela primaria N°8 y del bachillerato N°5.

Desde niño demostró inclinación por la música y evi-
denció tener un oído privilegiado, es por esto que sus padres
lo enviaron a la Escuela Superior de Música de la Provincia a
partir de los nueve años. En esta institución, se moldeó hasta
adquirir una formación musical que le permitió obtener el tí-
tulo de profesor, estando a cargo de las profesoras Amelia Ro-
mero de Boldú, Eve Bonelli de Marasso y Laura Aguerrebere.

Inquieto, nunca se conformó con lo adquirido y bus-
có conocer y practicar distintos instrumentos hasta domi-
narlos, con el tiempo tuvo preferencias por algunos: vio-
lín, flauta dulce, viola, violoncelo y, en especial, el piano.
Integró el Conjunto de Cámara de la UNaM y de flauta en
7
algunas ocasiones. El canto fue otra de sus pasiones, llegó
a ser un excelente coreuta y director del coro de adultos.

Mario cobró renombre a nivel local, provincial e in-
ternacional conformando y dirigiendo coros con los que vi-
sitó lugares importantes del país: Buenos Aires, Entre Ríos,
San Juan, Mendoza. En el exterior, se trasladó hasta Brasil,
Paraguay, España y Grecia, en este último punto dirigió el
coro universitario que regresó con orgullo, inmensa alegría
e importantes menciones.


7 Universidad Nacional de Misiones.

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Lamentablemente, Mario nos dejó el 22 de abril de
2006, siendo muy joven, tenía aún mucho por brindar con
su notable sensibilidad. Su partida causó un hondo pesar
en familiares, amigos y alumnos y la falta de su quehacer
musical provocó un enorme vacío.

Miguel Brizuela, amigo, colega y compadre, creador de los
Grillitos Sinfónicos, hoy con prestigio internacional, le dedicó:
















































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A partir de mayo de 2006, la comunidad misionera
comenzó a reconocer su labor a través de encuentros de
músicos en la parroquia de la ciudad en el día de su cum-
pleaños o en fechas próximas al 25 de mayo. Amigos, pro-
fesores y colegas le expresan su cariño durante el acto y se
pueden escuchar poemas como la “Oda al recuerdo” escri-
ta por Bety Mondelo:

Llegó tu tiempo de pulsar tu lira
así como pulsaste instrumentos
regalando música que inspira

para brindar bellos momentos…







































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Jorge Giménez escribió: “Me parece que estás en la
sala de ensayo con el piano, con el violín, con esa mirada
buena y la suavidad para hablar, y un día me dijiste que
dabas gracias a la vida porque hago lo que a mí me gusta y
encima me pagan por esto…”




































Y Cristina Cubilla en un párrafo en “Carta a los lecto-
res”, entre otras imágenes, expresó a Marío de Simón:
Vos tuviste una certeza, la música era parte tuya, quisiste ha-
cer de ella tu vida y con ella tuviste una íntima relación de amor y de
apego.
La música te descubrió como alumno, como amigo, profesor,
como intérprete, la música dejó que te acercaras a ella y te sumergie-
ras en su mundo…

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Siempre fuiste una persona solitaria y con silencios a tu intimi-
dad: abierta a las necesidades de los demás, dispuesta a acompañar, a
trabajar, a compartir, a reír, a disfrutar. Tenías el talento de pocos y la
gran sensibilidad de quien carga dentro de sí un sinfín de sentimien-
tos… tu vida no pasó en vano, dejaste en nosotros una enseñanza… que
ni la vida te puede quitar…

En mayo de 2007, la Doctora Raquel Elizabet Amiel
solicitó que el Salón Municipal de Cultura y de Usos Múl-
tiples llevase el nombre Mario Roberto De Simón. El Ho-
norable Concejo Deliberante arbitró los medios para la
confección y colocación de una placa recordatoria que fue
descubierta el 25 de mayo.







































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Los medicos






Ya hemos nombrado a uno de los primeros médicos
de la refundación, el doctor Honorio Daverede, quien luchó
contra la fiebre amarilla. Además de él, se encontraba el
médico paraguayo Agustín Goiburú, especialista en trau-
matología que vivió muchos años en Candelaria.


Llegó con su familia a esta localidad en la década
del 60; era un hombre muy comprometido con su profe-
sión, atendía con caridad y generosidad a todos los que lo
necesitaban; unicamente pagaban los que podían y proveía
de medicamentos a los más humildes.


Acérrimo enemigo de Stroessner y de su política, fue
un exiliado en Misiones y se estableció primero en Santa
Ana y, más adelante, en nuestra localidad. Huyó de las per-
secuciones, pero fue detenido al arriesgar su vida en inten-
tos por pisar suelo paraguayo. En una oportunidad, cavó un
túnel en la prisión, se escapó y exilió en Chile, desde allí
volvió a Argentina. Se trasladó con su familia a la ciudad de
Posadas, pero entre 1975 y 1976 se instaló en Paraná, Entre
Ríos. Allá fue secuestrado por anónimos quienes lo ubica-
ron en un “Ford Falcón verdes”, convirtiéndose en uno de
los desaparecidos de la última dictadura militar sin rastro
alguno hasta la actualidad.

Sus hijos Rogelio (médico), Patricia Jazmín (aboga-
da) residen en Asunción mientras que Rolando (licenciado
en Relaciones Internacionales) se desempeña como cónsul
paraguayo y habita en la ciudad de Posadas; muchas veces
se acerca a Candelaria a visitar a las personas que lo acom-
pañaron en su niñez.


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