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ésta reacciona en forma de vanidad; pero si se transforman esas impresiones la vanidad se hace
imposible. ¿Cómo se transformarían las palabras de un adulador?. Mediante la comprensión.
Cuando uno realmente comprende que no es más que una infinitesimal criatura en un rincón del
Universo de hecho transforma por sí mismo esas impresiones de alabanza, de lisonja, en algo
distinto; convierte a tales impresiones en lo que realmente son: polvo, polvareda cósmica, porque
comprende uno su propia posición.
Sabemos que la galaxia en que vivimos está compuesta por millones de mundos. ¿Qué es la
Tierra? Es una partícula de polvo en el infinito. Y si nosotros dijéramos que somos unos
organismos micro orgánicos de esa partícula.. Entonces ¿Qué?. Si nosotros comprendiéramos ésto
cuando nos adulan, haríamos una transformación de las impresiones que se relacionan con la lisonja
y la adulación o alabanza y no reaccionaríamos como resultado en forma de orgullo.
Tanto más reflexionemos en ésto, veremos más y más la necesidad de una transformación
completa de las impresiones.
Todo lo que vemos externo es interior. Si no trabajamos con el interior vamos por el camino
del error porque no modificaremos nuestros hábitos. Si queremos ser distintos, necesitamos
transformarnos íntegramente, y debemos empezar por transformar las impresiones. Transformando
las impresiones animales y bestiales en elementos de devoción, entonces surge en nosotros la
transformación sexual, la transmutación.
Incuestionablemente, este aspecto de las impresiones merece ser analizado en forma clara y
precisa. La personalidad, que hemos recibido o adquirido, recibe las impresiones de la vida pero no
las transforma, porque prácticamente es algo muerto.
Si las impresiones cayeran directamente sobre la esencia, es obvio que serían transformadas
porque, de hecho, ella las depositaría en los centros correspondientes de la máquina humana.
Personalidad es el término que se le aplica a todo cuanto adquirimos. Es claro que traduce
impresiones de todos los lados de la vida de un modo limitado y prácticamente estereotipado con
arreglo a su calidad y asociación.
A este respecto, en el trabajo esotérico gnóstico, se compara a veces a la personalidad con
una pésima secretaria que está en la oficina de enfrente, que se ocupa de todas las ideas, conceptos,
preconceptos, opiniones y prejuicios. Tiene muchísimos diccionarios, enciclopedias de todo género,
libros de referencia, etc.; y está incomunicada con los centros, es decir, el mental, el emocional, y
los centros físicos - intelectual, motor, emocional, instintivo y sexual, con arreglos a sus inusitadas
ideas. Como consecuencia o corolario, resulta de ello que se pone en comunicación casi siempre
con centros equivocados. Esto significa que las impresiones que llegan son enviadas a centros
equivocados, es decir a lugares que no le corresponden, produciendo, naturalmente resultados
equivocados.
Pondré un ejemplo para que se me entienda mejor. Supongamos que una mujer atiende con
mucha consideración y respeto a un caballero; claro es que las impresiones que el caballero está
recibiendo en su mente son recibidas por la personalidad y ésta las manda a centros equivocados.
Normalmente las manda al centro sexual y este caballero llega a creer firmemente que la dama está
enamorada de él, y como es lógico no tarda mucho tiempo en que él se apresure a hacerle
insinuaciones de tipo amoroso.
Indubitablemente, si aquella dama jamás ha tenido esa clase de preocupaciones por el
caballero, no deja de sentirse, con mucha razón, sorprendida. Ese es el resultado de una pésima
transformación de las impresiones. Vemos aquí cuán mala secretaria es la personalidad.
Indiscutiblemente, la vida de un hombre depende de esta secretaria que busca la transformación en
sus libros de referencia sin comprender en absoluto lo que significa en realidad el suceso y
transmite, en consecuencia, sin preocupaciones por lo que pueda ocurrir, pero sintiendo que está
cumpliendo son su deber.
Esta es nuestra situación interior. Lo que importa comprender en esta alegoría, es que la
personalidad humana que nosotros adquirimos y que debemos adquirir empieza a hacerse cargo de
nuestra vida..
Incuestionablemente, es inútil imaginar que esto sucede solamente a ciertas y determinadas
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personas; les sucede a todos, quien quiera que sea.
Se halla en la observación de que sí existen numerosas reacciones características producidas
por las impresiones que nos llegan. Estas reacciones mecánicas desgraciadamente nos gobiernan. Es
claro que cada quien en la vida está gobernado por la vida misma, no importa que se llame liberal o
conservador, revolucionario o bolchevique, bueno o malo en el sentido de la palabra.
Es obvio que estas reacciones ante los impactos del mundo exterior constituyen nuestra
propia vida. La humanidad, en este sentido, podemos decir en forma enfática que es
completamente mecanicista.
Cualquier hombre en la vida, se ha formado una enorme cantidad de reacciones que vienen a
ser las experiencias prácticas de su existencia. Es claro que toda acción produce su reacción,
acciones de cierto tipo, y a tales reacciones se les llama experiencia.
Lo importante sería, por ejemplo, a fin de conocer mejor nuestras acciones, poder relajar la
mente. Esto del relajamiento mental es magnífico. Recostarse uno en su lecho o en un cómodo
sillón, relajar todos los músculos pacientemente y luego vaciar la mente de toda clase de
pensamientos, deseos, emociones, recuerdos. Cuando la mente está quieta, podemos conocernos
mejor a sí mismos. En tales momentos de quietud y silencio mental, es cuando realmente venimos a
vivenciar en forma directa el crudo realismo de todas las acciones de la vida práctica .
Cuando la mente se encuentra en absoluto reposo, vemos la multitud de elementos, acciones
y reacciones, deseos, pasiones, etc.; como algo ajeno a nosotros, pero que aguarda el instante
preciso para poder realizar su control sobre nosotros mismos, sobre nuestra personalidad. He ahí el
motivo por el cual vale el silencio y la quietud de la mente.
Obviamente, la relajación del entendimiento es benéfica en el sentido más completo de la
palabra, pues nos conduce al auto conocimiento individual.
Así es que toda la vida, es decir, la vida exterior, lo que vemos y vivimos, es para cada
persona su reacción a las impresiones que llegan del mundo físico.
Es un gran error pensar que lo que es llamado vida sea una cosa fija, sólida, la misma para
cualquier persona. Ciertamente no hay una sola persona que tenga las mismas impresiones que con
respecto a la vida existen en el género humano, porque son infinitas.
La vida son nuestras impresiones de ella y nosotros podemos, si nos lo proponemos,
transformar tales impresiones. Pero como se dijo, ésta es una idea muy difícil de entender o
comprender debido a que es muy poderoso el hipnotismo de los sentidos.
Aunque parezca increíble, todos los seres humanos se hallan en estado de hipnotismo
colectivo. Tal hipnosis es producida por el estado residual del abominable órgano Kundartiguador;
cuando éste se eliminó quedaron los diversos agregados psíquicos o elementos inhumanos que en
su conjunto constituyen el mí mismo, el sí mismo. Estos elementos y sub-elementos a su vez,
condicionan a la conciencia y la mantienen en estado de hipnosis. Así pues, existe la hipnosis de
tipo colectivo. ¡Todo el mundo está hipnotizado!.
La mente está enfrascada en el mundo de los cinco sentidos y no acierta a comprender
cómo podría independizarse de ellos, cree firmemente que es un dios. Nuestra vida interior, la
verdadera vida de pensamiento y sentimiento sigue siendo confusa para nuestras concepciones
meramente razonativas o intelectivas. No obstante, al mismo tiempo, sabemos muy bien que el
lugar donde realmente vivimos, es nuestro mundo de pensamientos y sentimientos, esto es algo que
nadie puede negar.
La vida son nuestras impresiones y éstas pueden ser transformadas. Necesitamos aprender a
transformar nuestras impresiones, empero, no es posible transformar cosa alguna en nosotros si
seguimos apegados al mundo de los cinco sentidos.
La experiencia enseña a uno que el trabajo esotérico gnóstico, si es negativo, se debe a la
culpa propia.
Desde el punto de vista sensorial es que ésta o aquella persona del mundo exterior a quien
uno ve y oye por medio de los ojos y los oídos, tiene la culpa; ésta persona a su vez dirá que
nosotros somos los culpables, pero realmente la culpa está en las impresiones que nosotros
tengamos sobre las personas. Muchas veces pensamos que una persona es perversa cuando en el
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fondo es una mansa oveja.
Conviene mucho aprender a transformar todas las impresiones que tengamos sobre la vida.
"Hay que aprender a recibir con agrado las manifestaciones desagradables de nuestros semejantes".
Sabemos que existen tres clases de alimentos; los relacionados con la respiración; con los
alimentos propiamente dichos y con las impresiones.
La digestión de los alimentos trae como resultado la asimilación de principios vitales para la
sangre. El resultado de la respiración es la asimilación del oxígeno tan valioso para la vida humana..
La asimilación o digestión de las impresiones, trae como resultado la absorción de energía más fina
que las otras dos.
Los cinco sentidos corresponden a las impresiones. Existen dos tipos de impresiones:
agradables y desagradables.
El ser humano necesita saber vivir, pero para ello se tiene que aprender a digerir y
trasformar las impresiones, si de verdad se quiere saber vivir. Todas las impresiones que llegan a la
mente tienen hidrógeno 48. Lastimosamente, el ser humano vive mecánicamente. El hombre puede
transformar el hidrógeno 48 en 24 para fortalecer los chacras, el 24 en 12 para fortalecer la mente y
el 12 por 6 para fortalecer la voluntad.
En la actualidad se necesita transformar la mente, pasar a un nuevo nivel mental o si no, las
impresiones seguirán llegando a los lugares equivocados de siempre. La gente cree poder ver las
cosas desde diferentes ángulos y que es soberana, pero no se dan cuenta que la mente humana está
limitada por los preconceptos y prejuicios.
En estos tiempos modernos hay que transformar el aparato mental, hay que ser diferentes y
distintos. Se hace urgente y necesario la fabricación de un aparato intelectual superior, adecuado
para transformar y digerir las impresiones.
Así como el aparato digestivo tiene un estómago para que puedan ser asimilados los
alimentos, y así como el sistema respiratorio tiene pulmones para asimilar el oxígeno, el hombre
máquina deber crear un estómago mental - no se vaya a interpretar o confundir como uno físico.
Antes de digerir las impresiones hay que transformarlas. La enseñanza gnóstica permite y
facilita la creación de dicho estómago, para hacer del animal intelectual algo distinto.
La necesidad de transformación no puede nacer sin haber comprendido tal necesidad, esta
comprensión brota al tener el conocimiento gnóstico.
Cuando se piensa distinto y positivamente de las personas, es señal de que se está
cambiando. Hay que dejar de ser lo que somos para ser lo que no somos. Uno tiene que perderse
para sí mismo. El resultado de todo esto es la aparición de alguien que no es uno.
En el camino de la transformación de las impresiones hay que ser sincero consigo mismo y
no hay que persuadirse. En un principio, aparece en uno la justificación, pero hay que estudiar que
tal justificación puede ser fruto del amor propio.
Hay que descubrir las causas y los motivos de las actuaciones tenidas ante las impresiones.
Cuando se transforman las impresiones todo se vuelve nuevo.
Sólo los maestros de la Fraternidad Oculta pueden transformar inmediatamente las
impresiones, mientras que las máquinas humanas no las transforman.
El hombre consciente puede modificar las situaciones dadas por las impresiones pasadas,
presentes y futuras. Si las personas no son capaces de transformar las circunstancias, seguirán
siendo juguete de ellas y de los demás.
La vida tiene un objeto y es el de un mundo superior; las enseñanzas gnósticas enseñan a
vivir un mundo superior, a vivir en una humanidad solar e inmortal. Si uno no aceptara un mundo
superior, la transformación no tendría sentido, eso es obvio.
La mente, como ahora se encuentra, no sirve para nada. Se necesita organizarla,
remodelarla, amueblarla, etc. es decir, ponerla en un nivel intelectual superior.
Para poder transformar las impresiones hay que reconstruir la escena tal como sucedió y
averiguar que fue lo que más nos hirió. Si no hay digestión de impresiones no se tendrán alimentos,
y si no hay alimentos, los cuerpos existenciales del ser languidecerán.
El yo está gobernado y se nutre con el hidrógeno 48. Cada día, cada hora, viven naciendo
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nuevos yoes. Por ejemplo: los mosquitos nos molestan, la lluvia también, etc. Existe siempre una
suma y resta de yoes.
Las buenas impresiones también deben ser transformadas. Si se han tenido durante el día
tres impresiones que hayan afectado el estado de ánimo, éstas deberán por la noche ser estudiadas y
transformadas utilizando un planteamiento ordenado. Cada yo está ligado con otro y están
asociados. Los yoes se conjugan para formar la misma escena.
Hay que ser analíticos y juiciosos para transformar las impresiones, para que por ende
aparezcan nuevas facultades. Cuando las personas no se transforman siguen teniendo un estado
vergonzoso y ridículo. Al no haber digestiones se está involucionando.
Hay que digerir las impresiones del mismo día...- ¡No permitas que el sol se oculte sobre tu
ira!. Hay que ver las cosas como son, hay que crear el aparato mental - estómago mental -
conveniente para no ser víctimas de nada.
Es urgente y necesario transformar las impresiones del día antes de acostarnos de la
siguiente manera:
1. Relajación absoluta.
2. Llegar al estado de meditación.
3. Se revive la escena tal como sucedió.
4. Buscar dentro de sí mismo el yo que ocasionó el problema..
5. Observando serenamente, se colocará el ego en el banquillo de los acusados y se procede
al enjuiciamiento.
6. Pedir la desintegración del yo - problema - a la divina madre Kundalini.
Lastresclasesdealimentos
Existen tres clases de alimentos que varían en categorías: el primero lo podemos denominar
comida. Incuestionablemente, entre los alimentos que entran por la boca y la boca en sí, hay un
medio para estos aspectos que permite transformar los principios vitales, me refiero a el estómago.
Si no fuera por el estómago no sería posible la transformación de la primera clase de alimentos. Sin
embargo, el alimento que entra por la boca no es el más importante. Bien sabemos cómo se
transforman los alimentos mediante la digestión; no ignoramos que en última síntesis los principios
vitales que quedan depositados en la sangre, y que el torrente sanguíneo viene a nutrir a todos los
órganos del cuerpo.
Sin embargo, puede alguien permanecer durante algún tiempo sin comer. Mahatma Ghandi
podía permanecer hasta cuarenta días sin comer. No es pues el alimento más importante.
La segunda clase de alimentos es el prana que entra con el oxígeno dentro de nuestro cuerpo
físico; aquel que penetra por las puertas de la respiración. Incuestionablemente existe un órgano
especial para la transformación del alimento que entra por la nariz. El aire entra por la nariz,
mediante los pulmones se transforma naturalmente y ese oxígeno es depositado posteriormente en
todo el torrente sanguíneo en la sangre. Es más importante todavía la respiración que el alimento
que entra por la boca al estómago. Porque podríamos estar hasta cerca de un mes sin comer, pero no
podríamos durar mucho tiempo sin respirar. Normalmente se puede durar sin respirar durante un
minuto o dos; hay quienes llegan hasta tres; yo he podido llegar a permanecer sin respiración
durante más de cuatro minutos por entrenamiento, pero incuestionablemente más allá de este
pequeño tiempo limitado, si no respiramos, moriremos. Es más importante, de verdad, la
respiración que la comida física. Y por último existe una tercera clase de alimentos o alimento que
aún es más importante, me refiero en forma enfática a las impresiones. Incuestionablemente no
podremos demorar nosotros ni un segundo en la existencia sino existieran las impresiones; no
podemos vivir un segundo sin recibir impresiones.
Nuestro organismo se nutre muy especialmente con las impresiones. Si el aire no hiciera
impresión en nuestros pulmones, en nuestra sangre, no viviríamos. Si la comida no llegara a
impresionar al estómago y vías intestinales, tampoco podríamos vivir. Así que las impresiones son
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14) Establecer sínodos zonales de sacerdotes e Isis por lo menos dos veces al año.
15) Todos los Misioneros deberán tener una actualización en los Monasterios una vez al
año.
16) Establecer una supervisión a escala nacional de las enseñanzas que se están dando a
nivel de Primeras, Segundas y Terceras Cámaras.
17) Establecer como fundamento del Estudio el Orden Institucional, esotérico y
administrativo a todos los afiliados.
18) Instruir a todos los afiliados sobre la necesidad imperante de respeto y obediencia en el
orden piramidal, en el orden institucional y esotérico.
19) Darle prioridad a los Pensum de Segundas Cámaras, cerciorándose de que la instrucción
que se está dando satisfagan las necesidades de la comunidad.
20 ) Establecer obligatoriedad que todo santuario asuma la responsabilidad de gastos de los
sacerdotes instructores que van haciendo los recorridos en cumplimiento de sus funciones.
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10-EL HOMBRE, LA ALQUIMIA, LA
DOCTRINA EN RELACIÓN AL ARCANO
15: TIPHON BAFOMETO.
Toda persona que vaya a re-ingresar a nuestra Institución debe
comprender que el fundamento de la Doctrina Gnóstica es la persona.
La alquimia es la que lo revalora y el conocimiento, estudio y
comprensión sobre el trabajo sobre el Arcano 15 le permite quitar lo
que le sobra y poner lo que le falta, así que es interesante que estas
personas que re-ingresan comprendan de fondo sobre qué es que van
a fundamentar el trabajo en nuestra Sagrada Institución, haciendo así
una revalorización y estudio de lo que se hizo y de lo que se dejó de
hacer.
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EL HOMBRE, LA ALQUIMIA, Y LA DOCTRINA EN RELACIÓN DEL ARCANO 15: “
TIPHON BAFOMETO”
Toda persona que vaya a reingresar a nuestra Institución, debe comprender que el
fundamento de la Doctrina Gnóstica, es la persona.
La alquimia es la que revalora, y el conocimiento, estudio, y comprensión del trabajo sobre el
Arcano 15, le permite quitar lo que le sobra y poner lo que le falta, así es que es interesante que
estas personas que reingresan, comprendan de fondo sobre, en que van a fundamentar el trabajo de
nuestra sagrada institución, haciendo así una revalorización y estudio de lo que se hizo y de lo que
se dejó de hacer.
Al iniciar un trabajo serio sobre sí mismos, es necesario conocer y comprender algunos
aspectos con los que tenemos que trabajar.
Nos encontramos en un momento y en un lugar en el que la reflexión, nos lleva a analizar si
continuamos haciendo un mal trabajo; y llegamos a la conclusión de que solo estamos mejorando la
feura de un señor. Este es el momento de quitarnos de la cabeza de que el Diablo es algo que está
aparte de nuestra propia creación.
Cualquier persona en una forma emocional puede decir: “ ¡es que yo soy un demonio!”, “
¡Yo tengo el ego!”. Pero no ha comprendido en el fondo que es así...
Cualquier persona puede decir: “¡ Yo soy un mísero gusano de la tierra!”, pero, ¿ha
comprendido lo que está diciendo, con la sinceridad que le debe caracterizar, para opinar así?.
Es decir, este señor nos llama a la reflexión, y es la reflexión de Dios en nosotros.
El día que uno comprende que eso es lo que hay adentro, le quedan dos caminos:
- Continuar con él, siendo así.
- O, proponerse mejorar.
Es la reflexión de Dios, porque él tiene todas las partes autónomas de Dios. Ese es el resultado
de lo que la Madre Naturaleza Inferior ha hecho en nosotros.
Dice el ritual de consagración: “... la vida de todos ellos, coincide en los puntos esenciales del
dominio de la Naturaleza Inferior y de la florescencia de la Superior”. Pero, ¿Qué es la Naturaleza
en nosotros?. Es necesario saber que a la energía, al esperma sagrado, todo el mundo le llama
“Naturaleza”. ¿Qué es la Naturaleza?. Es la creación. ¡Claro!. Allí están los animales, las plantas,
los ríos, los océanos, el aire, el oxígeno, el fuego, está todo.
Esto es la creación, porque después de la caída, el hombre quedó sometido a los sentidos,
instintos, a la mente y ellos, en proporción al trabajo que hacen en esa creación, elaboran los
mercurios o los hidrógenos que necesitan para hacer todo eso.
El día que los religiosos comprendan que la perfección de la persona no parte de aquí, sino que
parte del abismo, se acabarían tantas sectas religiosas y empezaría uno a trabajar sobre sí mismo,
para mejorar el mundo.
Tenemos que partir de mejorar esto, si esto no se mejora en nosotros, será imposible hacer la
obra.
Tenemos que partir de Lucifer, que es la reflexión de Dios, y es el único elemento que nosotros
tenemos, en este momento, para producir un cambio. Es la reflexión que hagamos con la conciencia
superlativa del Ser, para dejar de ser esto, (demonios).
Mientras tanto, ¡no!. Es decir, que el tiempo que tenemos de estudiantes Gnósticos, así
tengamos 20 años o 1 año, se ha fundamentado en una doctrina, en una enseñanza, que el Maestro
dió global, pero, que desafortunadamente no se ha sabido cómo descifrar aquel mensaje hasta
llevarlo a esto. Esto es el Abismo, el Infierno, y aquí comienza nuestro trabajo fundamentado en el
Lucifer, y en la pasión del Cristo.
Este abismo, es el mundo en que andamos.
Dentro de este señor o dentro de nosotros, hay una Esencia, que le interesa al diablo, y le
interesa a Dios, entonces, nosotros tenemos que hacer una diferenciación del trabajo que vamos a
hacer para dejar de ser esto.
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Quitémonos de la cabeza, por favor, que ser gnósticos es tener una túnica azul y asistir a un
Ritual. Eso no es más que el derecho que nos da la Venerable Logia Blanca, y la Misericordia de
Dios, de entrar a recibir los átomos Crísticos, contenidos en el Pan y en el Vino, para mantener
fortalecida una esencia que está embutida dentro de un diablo. ¡ No es más!. Quitémonos de la
cabeza, la creencia que practicando Magia Sexual, vamos a dejar de ser esto. Eso no es así. Esto es
una idea errónea, mal entendida, porque si este señor, que podemos ser cualquiera de nosotros,
come Pan y Vino, en el Altar y transmuta, se puede dar hasta el lujo de tener cuerpos solares, ¡Este
demonio!. Y ser terriblemente poderoso; pero, como demonio.
Ningún Iniciado podrá salir calificado si no cambia, dejando de ser esto. Y uno no deja de ser
esto porque transmute, o coma Pan y Vino; ¡eso es falso!.
Ha llegado el momento que quede claro que: “ Todo estudiante Gnóstico serio, tiene que
proponerse a trabajar sobre esto”, antes que pensar: “ Voy a entrar a la Gnosis para conseguir una
mujer para hacer la obra. Pero, ¿La Obra de quién?. Para seguir siendo este señor, con poderes,
inclusive con cuerpos solares, pero como diablo... con esta feura, pero con cuerpos solares, se
convierte en un “Hanasmussen”, con toda la feura del pecado y con poderes solares.
Es decir, los que siempre han acabado con la Obra del Cristo, los que siempre han perseguido al
Cristo, los que siempre acaban con las Instituciones, porque son criaturas que tiene una convicción
y tiene una fuerza, inclusive en sus palabras. Porque para la creación de cuerpos solares, basta que
una persona sea bien fuerte en la Alquimia, o en la transmutación, lo cual no es difícil, eso lo hace
cualquiera.
El día que por una razón y otra, a esa criatura lo agarre la Involución, ¡qué lo tiene que agarrar!;
sufre veinte veces más, que una persona que no ha trabajado con la Alquimia, con la energía. Eso
no se desintegra fácil, porque tiene esa sólida fuerza, que le da la energía. Entonces, un demonio de
esos sufre veinte veces más, porque tiene que ingresar a una involución donde primero, la
Naturaleza tiene que desintegrarle esos cuerpos solares. Entonces primero hay que desintegrarle los
poderes que ha adquirido y por último, desintegrarlo como si fuera un Ego común y corriente.
Nosotros tenemos que ser realistas, para poder cambiar, y para poder cambiar, necesitamos
comprender quién es ese aspecto del Cristo, que es Lucifer, Tiphon Bafómeto, el macho cabrío de
Méndez, el Diablo.
- Lucifer, es escalera para subir; Lucifer, es escalera para bajar. Ley es Ley, y la Ley se cumple.
- Lucifer, es la reflexión del Cristo en nosotros.
- Lucifer, es el hacedor de Luz.
- Lucifer, Tiphon Bafómeto, corresponde al arcano 15. El Arcano 15 aparece después del 13, que
es la muerte del Yo, del Ego, del mí mismo; y del Arcano 14, que es la Temperancia o
Templanza, la castidad que resulta después de la muerte del Ego.
El Arcano 15, es pues, el ANDRÓGINO DIVINO, que vuelve a resplandecer, es el latón
blanqueado.
- Lucifer, ( LUCI = LUZ; FER = FUEGO), es el guardián de la puerta y las llaves del Lumisial
(centro de luz), para que no penetren en él sino los ungidos que poseen el secreto de Hermes...
- Quienes maldicen temerariamente a Lucifer, se pronuncian contra la Cósmica Reflexión del
Logos, anatematizan al Dios Vivo, manifestado en la materia, y reniegan de la siempre
incomprensible sabiduría, revelándose por igual en los contrarios de Luz y Tinieblas. Semblanza,
parecido, similitud: Sol y Sombra, día y noche. Ley de los contrarios...
- Lucifer Prometeo, integrado radicalmente con todas las partes de nuestro Ser, hace de nosotros
algo distinto, diferente, una exótica criatura, un Arcángel, una potestad terriblemente divina.
Lucifer, es el elemento capaz de ubicar al iniciado frente al camino de su regeneración.
Ningún hombre o mujer lograría su salvación o autorrealización, si desestimara la ayuda que este
ser le puede prestar en el camino.
- A Lucifer, lo conocemos como el elemento iniciador, el cual nos proporciona dificilísimos
momentos, en los cuales es necesario ejercer mucha voluntad, e integración con la Madre Divina,
para poder salir victoriosos.
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La Obra que cada uno de nosotros va haciendo, permite que Lucifer vaya despojándose de
todos aquellos elementos infrahumanos, abismales, confiriéndole al discípulo o caminante del
sendero, voluntad y dominio sobre sí mimo.
Con mucha razón un Venerable Maestro de la Blanca Hermandad dice: “ ES NECESARIO
PARARNOS FRENTE AL DIABLO, PARA VER QUIEN ES MAS GRANDE”. La respuesta a
éste interrogante, la tenemos en cada uno de nosotros, de acuerdo a la voluntad y seriedad con que
empecemos nuestro trabajo, será la medida con la cual podremos definir la capacidad o incapacidad
que vamos a ejercer sobre nuestra OBRA.
La lógica más elemental, nos indica que si nos estamos integrando con las partes autónomas de
nuestro Ser, el diablo está en nosotros, en menor escala de poder que el Cristo. Esto nos permitirá
deducir que el Lucifer, como elemento iniciador, nos ayudará a salir del abismo, de lo contrario
lograremos sumergirnos cada día en infradimensiones más inferiores, para nuestra muerte segunda
o desintegración final.
- Lucifer, en el pasado fue el Arcángel más luminoso, más resplandeciente del espacio infinito, él
en si mismo es decir, es la parte más importante de nuestro Ser, es nuestro mismo Ser, quien fue
resplandeciente y luminoso; desafortunadamente cuando caímos en la degeneración animal, él
fue precipitado al averno, ahora es negro como el carbón, somos nosotros mismos los que lo
tenemos en ese estado de miseria, ahora podemos explicarnos porque aparece Lucifer en la
divina comedia, metido allá en el corazón de la tierra, llorando con sus seis ojos, es seis (666),
repetido tres veces, la gran ramera.
INTERPRETACIÓN DEL ÓLEO DEL TIPHON BAFOMETO:
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A este señor le vemos:
1- LOS CACHOS.
Los cachos representan la maldad de la mente. Si nosotros continuamos utilizando la mente
para planificar el mal, somos demonios. Si nosotros utilizamos la mente y la imaginación para estar
premeditando cualquier error que pensemos cometer, no estamos eliminándole los cachos, o sea el
poder que la mente ejerce en nosotros.
Tiene que estar claro que a nuestra mente no le vamos a dar campo de que se ponga a
divagar con cuestiones que no nos interesan.
Es decir, el “Despertar”, no se sucede solo. El despertar, es una disciplina que uno se forma
y que lo hace mantener en la misma tónica, en la misma constante, con relación al trabajo externo e
interno que se está haciendo.
Debemos dejar de ser esos perezosos, que no quieren tener ninguna reflexión, que no
quieren meditar, que no quieren hacer respiraciones para llenar su cerebro de optimismo, de
oxígeno, de todo aquello para mantener esa alegría, esa expectativa. En una persona que tenga
arterioesclerosis, sería razonable que tenga mala memoria, pero ¡el que no!, no tiene porque estar en
esas condiciones. Si quieren mejorar la memoria, respiren mucho diariamente.
Es necesario, formarse una disciplina, una auto disciplina sobre la mente. No se dejen llevar
de esa mente loca, vagabunda, sensual, instintiva, porque ahí están los cachos de Satán.
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2- EL CHORRO DE FUEGO.
Le vemos un “chorro de fuego”, que sale de la corona que se proyecta arriba. Ahí
encontramos aquello de que: “sexo contra mente, mente contra sexo”.
Ese fuego no es otro que el que este individuo tiene aquí (las bajas pasiones); se proyecta
por la columna, llega a la cabeza, y se proyecta. De allí la íntima relación de la Mente con el sexo, y
la íntima relación de la mente con el fuego.
Ese fuego no tiene porque estar saliendo arriba. ¿ Por qué sale?. Por la proyección de tanta
sinvergüenzura a nivel mental. Este fuego tendría que quedar dentro de nosotros, elaborando la
perfección y purificándonos y no dejarlo salir, mandando pensamientos, por bueno que sea, no
dejemos escapar ese fuego con esos pensamientos.
De nada nos sirve transmutar, si dejamos escapar la energía por la mente. Nosotros nos tenemos que
convertir en una bola de fuego. Eso es lo que nos dá el “Aura”. Esa aura que se compenetra con el
aura del universo. Y somos como estrellas emitiendo Luz en las noches oscuras.
3- UNA ESTRELLA.
Le vemos una “Estrella”, en la frente. En el Tiphon de los brujos, la estrella está invertida.
Al Tiphon de nosotros, como por caridad, la ponemos como estrella ahí, con la parte superior
arriba.
El pentagrama, en la frente, nos está indicando la expresión de la Esencia que hay adentro.
La palabra Penta, significa “cinco”. Y este pentagrama se refiere a que nosotros tenemos los
elementos: “Tierra, fuego, agua, aire, éter”. En esos cinco elementos, está la materia prima de la
obra que vamos a hacer. Me quiero referir a la parte sáttwica de los elementos, esos que vamos a
emplear en el hidrógeno Si 12. entiéndase la parte sáttwica de los alimentos, y la parte sáttwica de
los elementos:
• La parte Tamásica de la Tierra, es la inercia.
• La parte Tamásica del Aire, son los movimientos que se salen, es decir, el exceso de
trabajo, y las luchas mentales.
• La parte Tamásica del Agua, es la lascivia.
• La parte Tamásica del Fuego, es la violencia.
• La parte Tamásica del Éter, en este caso vendría a ser la cristalización de nuestros
pensamientos en el sexo, que al invertirse, aparece este señor con esa Pentalfa en la
frente.
Nos podemos preguntar: ¿Qué saca una persona con ponerse a trabajar, a querer quitarle la
feura a este señor, si no trabaja sobre la pereza, la lascivia, etc.?; ¿Qué hace este señor para hacer un
cambio, si no hace una organización de sus pensamientos?. Necesitamos dejar de derrochar la
energía en los elementos, ejemplo; el elemento aire, haría un derroche si no organizamos los
pensamientos.
En la vida tenemos que aprender a no lamentarnos, porque el lamento no es más que
sinónimo de debilidad.
A la vida hay que tomarla como es y no más. No hay que enredarse en que si las situaciones
que nos tocan vivir son pruebas o no. Pasa lo mismo con los hermanos que piensan: “Yo creo que la
mujer que tengo no es la que me corresponde”. No se dan cuenta que la mente les está engañando,
porque los quiere poner a conseguir otra, y pasa lo mismo con la mujer. Si está esa persona, no es
por una casualidad. Esos no son más que demonios disfrazados de buenas intenciones, para hacerlos
ir a un infierno más denso.
4- LOS OJOS CHISPEANTES.
Los ojos de Tiphon, son así. Bolas de fuego hasta que nosotros no aprendamos. ¡Hasta eso!.
Acuérdense que el gesto más terrible que hay de la ira, es la mirada.
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“La vista es el espejo del Alma”. Se necesita tener una educación en la forma de ver, porque
la mirada son llamas de fuego. La vista es el sentido que se relaciona con la mente.
Hay que aprender a mirar, hay que aprender a observar con “serenidad y con mística”; todos
los dramas que se presentan a través de éste sentido; y si no, se estará avivando esa mente loca, y
por ende dándole existencia real a esos cachos que tenemos que dejar de ver.
Uno ve venir a una persona y por la mirada y por la actitud que trae, ya conoce cual es el
estado anímico de esa persona.
5- LA CARA DE BECERRO O DE BESTIA.
Es la representación del pecado que tenemos. Por eso es que a Lucifer lo ven feo. El no es
feo, él asume esto, porque en el rostro de nosotros está el pecado que tenemos.
Aquel que a todo momento está poniendo la palabra como testigo de sus propios errores, se
está haciendo merecedor de venir con el rostro deformado en la próxima vida, como un monstruo.
Hay que analizar todas estas cosas, acordémonos que el futuro está atrás de nosotros. El
futuro no está adelante. Si nosotros queremos hacer un futuro mejor, no hagamos lo que ayer
hicimos, porque sino se nos convierte en un mañana. Hay que vivir el presente, mejorar el presente
para que no repitamos mañana lo que hemos sido.
6- LA MANO QUE TIENE LEVANTADA SEÑALANDO A “CHESED”, ES UNA MANO
DE VARÓN.
El seno de este brazo de varón, es un seno de mujer. El varón señala la Luna Blanca, con su
mano derecha, pero no por eso deja de tener un seno femenino. Todo lo hace basado en una forma
instintiva, de pensar, de actuar y de ser.
Quiere llegar a Dios, así invertido como está y arrastrando sus bajas pasiones. Es decir,
señalo allí, pero me llevo mi opuesto.
7- LA MANO IZQUIERDA SEÑALA A GEBURAH (La Luna Negra).
Allí lleva un seno masculino. Cuando asumamos el trabajo en la Gran Obra, tenemos que
dejar de ser duales. Tenemos que dejar la dualidad, de los conceptos y la mente.
El Cristo dijo: “ Nadie puede servir a dos señores”. Es necesario que tengamos definido a
que señor le vamos a servir, para dejar de ser invertidos, para dejar de tener en nosotros la acción de
esas dos fuerzas a la vez, y así evitar dejar de trabajar por la fuerza neutra, que en este caso, es
nuestro Cristo Intimo; la redención o el camino que llevamos.
8- EL CADUCEO QUE ASCIENDE DE ABAJO DEL HUESO SACRO.
Este caduceo es el símbolo del trabajo. Nos indica que en nosotros está latente la facultad de
una regeneración; es decir, está presente, en nosotros, la ciencia de los Mercurios, la forma de
elaborar nuestros propios mercurios. “El Arché de la Gran Obra”, como diría el Maestro.
9- LAS ALAS.
Representan lo que fuimos antes de caernos y solo nos queda una silueta. También hay que
reconocer que los venerables Maestros de la Logia Negra, simbólicamente tienen unas alas, pero no
inclinadas como las alas del Ángel, sino inclinadas como las alas del demonio; hacia abajo, vuelan,
pero no hacia arriba. Un Maestro de la Logia Negra, en la capa que usa, tiene estampadas las alas
del murciélago, las alas de la muerte como símbolo.
10- EL HUESO DE LA CADERA.
Que en los términos de una Joya del Dragón Amarillo, se llama la “Cía”, representa el lugar
donde se encuentran todos los secretos para elaborar los Mercurios, y elaborar todas las sustancias
propias de la obra que estamos haciendo. Es decir, tenemos las características y tenemos todos los
implementos necesarios para hacer la Obra, pero no la hemos hecho. Eso es bueno que se tenga en