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Published by apotecaris, 2019-10-02 05:59:39

Libro 75 aniversario

Libro 75 aniversario

Pórtico

Francesc Antich i Oliver

President de les Illes Balears

Sin duda, una de las principales preocupa- que, a menudo, tienen que proporcionar conse-
ciones de quienes representamos a los ciu- jos profesionales ante algunos problemas sani-
dadanos en las instituciones tiene que ser tarios. Y son también la garantía de calidad del
la calidad del sistema sanitario en nuestro país. fármaco que se dispensa al paciente, y esto sin
En este sentido, no se puede olvidar de ninguna olvidar que la Administración puede contar con
manera la importancia del sector farmacéutico. ellos para la difusión de sus campañas en el
Los apotecarios no son funcionarios, ni la terreno de la salud pública.
Oficina de Farmacia es de titularidad pública,
pero la labor del apotecario está estrechamente Por lo tanto, tenemos buenos motivos para
ligada a los objetivos generales de la salud públi- celebrar este setenta y cinco aniversario de exis-
ca: la universalidad, la igualdad y la solidaridad. tencia de la Unión Farmacéutica Balear. Induda-
blemente, el futuro nos depara retos importan-
Gracias a los farmacéuticos cada paciente tes y estoy convencido que se resolverán con
tiene su medicación a menos de doscientos cin- éxito. Mientras tanto, este es un buen momento
cuenta metros de casa. Son los apotecarios los para honrar un pasado lleno de aciertos.

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Presentación

Vicenç Thomàs Mulet

Conseller de Salut i Consum del Govern de les Illes Balears

Con la edición de este libro, se conmemo- el punto de vista económico, comercial y profe-
ra un importante aniversario para el sec- sional. El objetivo de la distribución es prestar un
tor farmacéutico de nuestra comunidad y servicio integral a las oficinas de farmacia y, por
para todos los profesionales que hoy, y durante tanto, a los ciudadanos. El cooperativismo en
todos estos años, han colaborado para que la dis- este sector es, por tanto, un pilar necesario para
tribución farmacéutica balear se consolide como mantener los niveles de calidad con los que
un servicio indispensable para nuestros ciudada- cuenta la prestación farmacéutica y, gracias a
nos en un ámbito tan esencial como la salud. este, nuestro país ofrece hoy uno de los mejores
modelos de atención farmacéutica de Europa.
Fue en el año 1933 cuando se creó la Unión
Farmacéutica Balear, origen de la actual Coope- Actualmente en España, el modelo de distri-
rativa d’Apotecaris, una institución que en los bución farmacéutica tradicional está en un proce-
últimos años ha conseguido realizar un constan- so de cambio y, por eso, la distribución farmacéu-
te esfuerzo por modernizarse y por adaptarse a tica ha de adaptarse a una nueva realidad, en la
la necesidades del mercado y lo ha hecho a tra- que desarrolle, día a día, una oferta más competi-
vés de la introducción de la tecnología más tiva adaptada a las nuevas necesidades del sector.
avanzada. Todo ello ha permitido automatizar al
máximo el proceso de distribución de los medi- En este sentido, después de estos años
camentos y productos farmacéuticos y, conse- estoy convencido de que la Cooperativa d’Apo-
cuentemente, mejorar la productividad y la com- tecaris sabrá asumir los nuevos retos del presen-
petitividad de la Cooperativa en el servicio que te para, así, continuar con un futuro prometedor
presta a las oficinas de Farmacia. al servicio de nuestra comunidad. De esta mane-
ra, seguirá cumpliendo con aquella máxima que
El sector de la distribución se ha afianzado hace ahora 75 años hizo constar en su acta fun-
como uno de los soportes estructurales más dacional: «Nació no sólo en beneficio de la clase
importantes para las oficinas de farmacia desde farmacéutica, sino del público en general».

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Un futuro ilusionante para
la distribución farmacéutica

en las Illes Balears

Eladio González Miñor

Presidente de la Cooperativa d’Apotecaris, UFB y BAMESA

Las conmemoraciones plantean, por nor- lo que, a mi juicio, constituye un hecho objetivo
ma general, el riesgo de caer en una cier- e irrefutable, como es la constatación del papel
ta autocomplacencia, fruto sin duda de la absolutamente fundamental que ha desempe-
tendencia del ser humando a juzgar con una ñado la distribución farmacéutica en el proceso
cierta benevolencia el pasado, obviando a de modernización de la farmacia balear en
menudo los momentos difíciles y las situaciones todos sus ámbitos, especialmente en su capaci-
de crisis que, inevitablemente, están presentes dad para adaptarse a las exigencias de los usua-
en cualquier obra humana. Con ello, se desvir- rios en términos de eficacia y rapidez en la aten-
túa la auténtica naturaleza de esa misma obra y ción de sus necesidades.
en consecuencia la crónica cede protagonismo
al panegírico y al elogio fácil, peligrosas trampas En realidad, el salto tecnológico y operati-
conceptuales que todos debemos saber evitar. vo que ha experimentado la distribución farma-
céutica en las Illes Balears durante el último
Al cumplirse setenta y cinco años de la medio siglo tiene difícil parangón con cualquier
fundación de Unión Farmacéutica Balear –y del otro proceso vivido por los sectores productivos
entramado asociativo que de ella se ha derivado de nuestra comunidad. Un salto histórico de
con el paso del tiempo– entiendo que los farma- cuya verdadera dimensión los farmacéuticos
céuticos isleños podemos y debemos rehuir –quizás empujados por un exceso de prudencia
cualquier tentación apologética al analizar la no siempre bien entendida por la sociedad o los
trayectoria de esta entidad, para centrarnos en poderes públicos– no hemos hecho bandera,

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cuando en puridad así nos correspondería Este dinamismo al que acabo de referirme
hacerlo, por haber sido capaces de aglutinar sólo puede entenderse, a su vez, como el reflejo
esfuerzos comunes en la tarea de crear, desde de la evolución que el propio sector farmacéutico
dentro del propio sector, los instrumentos aso- balear ha experimentado durante el último medio
ciativos necesarios para llevar a cabo la labor siglo, en un ejercicio constante de adaptación a
profesional en el seno de las oficinas de farma- los nuevos tiempos, que ha tenido su lógica tra-
cia a partir de criterios de excelencia, rigor y ducción en los mecanismos de distribución far-
máxima profesionalidad. macéutica. En este sentido, la Unión Farma-
céutica y la Cooperativa d’Apotecaris se han
Este proceso no ha estado exento –sería guiado por un único objetivo estratégico –bajo
absurdo negarlo– de dificultades y también de cuyo prisma puede y debe entenderse la meta-
algunas incomprensiones. A menudo hemos morfosis vivida por ambas entidades– y que no es
tenido que defender, ante ataques poco medita- otro que estar a la altura de las exigencias de ser-
dos, cuando no claramente interesados, las bon- vicio derivadas del papel cada vez más relevante
dades de un sistema de distribución que, más del farmacéutico isleño, desde su consideración
allá del beneficio económico, garantiza un servi- de agente activo en materia sanitaria. Esta ha
cio igualitario para todas las oficinas de farma- sido, sin duda, la idea-fuerza que ha inspirado, en
cia de nuestra comunidad, en idénticas condi- su integridad, el proceso de cambios y de moder-
ciones de eficacia y precio, coadyuvando de ese nización constante que ha vivido la distribución
modo a la universalización de unas prestaciones farmacéutica en las Illes Balears: no defraudar las
que anteponen el interés sanitario al mero lucro expectativas de nuestros socios –la verdadera
económico. En ocasiones, nos hemos sentido alma de la entidad– en su irrefrenable camino
muy solos a la hora de defender nuestras posi- para consolidarse como uno de los ejes esenciales
ciones, si bien el aliento de nuestros profesiona- en los procesos de prevención de la enfermedad y
les ha ejercido una función balsámica ante de estímulo de hábitos de conducta saludables en
situaciones hostiles, que sólo hemos podido el conjunto de la sociedad balear.
capear gracias a la unión inquebrantable de un
sector que ha sabido mantenerse firme en las En consecuencia, y llegado el momento de
coyunturas más desfavorables. hacer balance, de valorar de forma ecuánime la
trayectoria de estos años de labor en la distribu-
Sin esa unión, habría sido imposible que la ción farmacéutica, entiendo que éste deber ser,
distribución farmacéutica alcanzase en la comu- por fuerza, altamente positivo.Y ello es así –como
nidad balear el nivel de excelencia del que hoy, he dicho al principio– no como consecuencia de
legítimamente, nos enorgullecemos. Sin esas un corporativismo malentendido, ni como resul-
sinergias positivas que hemos sido capaces de tado de ceder a la tentación de un elogio fácil en
generar, desde el propio seno de la gran familia el momento de la efemérides, sino porque real-
farmacéutica, proyectos como la Unión Farma- mente estoy convencido de que los datos, las
céutica Balear y la propia Cooperativa d’Apo- cifras y los hechos avalan una labor asociativa
tecaris difícilmente hubieran alcanzado el grado ejemplar, que ha emergido desde dentro de la
de solidez que evidencian hoy, el mejor ejemplo farmacia balear para crear las bases de un siste-
de cómo pueden aunarse el dinamismo asociati- ma eficaz, riguroso y con capacidad real para
vo y la eficacia en la gestión a la hora de dotar a afrontar el futuro ilusionante que nos espera, con
un sector como el nuestro –complejo, difícil y la misma intensidad e idéntica firmeza con las
sometido a múltiples presiones exógenas– de que los farmacéuticos de esta tierra hemos sido
una autonomía plena en el diseño de sus ob- capaces de llegar hasta el momento histórico que
jetivos empresariales y en la ejecución de los hoy nos disponemos a conmemorar.
mismos.

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Un referente para la profesión
farmacéutica

Antoni Real Ramis

Presidente del Col·legi Oficial de Farmacèutics de les Illes Balears

Llegar a celebrar 75 años de existencia es su trabajo depende el buen hacer y la eficiente
un hito al alcance de muy pocas institu- labor del farmacéutico es lo que la ha llevado a
ciones, y más dentro de un sector como el ser tan apreciada y querida por todos los profe-
farmacéutico, acostumbrado a convivir con difi- sionales de la farmacia. En este sentido, el libro
cultades y situaciones no siempre favorables a publicado en conmemoración del 75 aniversario
nuestra profesión. Para llegar a cumplir una efe- de la Cooperativa supone el testimonio de esta
méride como la que celebra la Cooperativa unión que siempre ha existido entre Coope-
d’Apotecaris y la Unión Farmacéutica, es nece- rativa d’Apotecaris y la Unión Farmacéutica con
saria la unión de muchas personas que con su todos y cada uno de los farmacéuticos de
dedicación y esfuerzo diario han permitido con- Baleares.
vertir a la Cooperativa d’Apotecaris en el autén-
tico referente de la distribución farmacéutica de En este libro no tan solo encontraremos
nuestra comunidad. En el caso de la Coopera- la historia y la evolución de la Cooperativa y la
tiva, además, no sólo se trata de trabajar para Unión dentro del sector de la distribución balear
sacar adelante un sector últimamente atacado y nacional, sino que también podremos leer el
por batallas injustas, sino también de ayudar a la progreso de la propia farmacia y de todos los
propia farmacia a ofrecer una atención y servi- profesionales que la conformamos. Se trata de
cios a la altura de las necesidades de nuestra dos elementos inseparables, el del farmacéutico
sociedad. y la Cooperativa d’Apotecaris (y en su caso tam-
bién la Unión Farmacéutica) erigidos por una
Precisamente esta conciencia que siempre común necesidad de ofrecer un servicio de cali-
ha tenido la Cooperativa d’Apotecaris de que de dad y atención permanentes. En este sentido,

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podemos afirmar sin ningún tipo de dudas que perativa d’Apotecaris, amparados en estos 75
el sector de la distribución farmacéutica balear, años de eficiente servicio y atención constantes
encabezado por la propia Cooperativa, ha con- hacia nuestra profesión.
tribuido a cimentar el nivel asistencial que hoy
en día ofrecen las farmacias baleares, formando Desde mi responsabilidad como Presidente
parte también de su avance y actual situación. del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Baleares
quiero expresar también mi reconocimiento, y el
A pesar de esta indispensable labor que ha de todos los farmacéuticos que durante estos 75
ejercido la Cooperativa d’Apoteciaris durante años han formado parte de la farmacia profesio-
todos estos años, actualmente el sector de la dis- nal, por la dedicación y esfuerzo realizados por la
tribución ha tenido que hacer frente a situacio- Cooperativa d’Apotecaris con todas y cada una
nes complejas que han dificultado su labor y de las oficinas de farmacia de nuestra comuni-
cuestionado su servicio. Una situación totalmen- dad. Sin duda se trata de una magnífica ocasión
te injusta para la Cooperativa, que siempre ha para que el colectivo farmacéutico balear ofrezca
tenido como única prioridad el servicio y la aten- su agradecimiento más profundo hacía una enti-
ción de las farmacias baleares, consciente de que dad que se ha convertido durante todo este
de su labor dependen también los ciudadanos tiempo en su más apreciado apoyo a la hora de
de nuestra comunidad. Por todo ello, quiero ofrecer el servicio y la atención farmacéutica que
expresar el apoyo del Colegio de Farmacéuticos nos demanda una sociedad cada vez más com-
y el de los farmacéuticos en general con la Coo- prometida con nuestra profesión.

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Un ejemplo de gestión y compromiso
con los farmacéuticos

Guillem Torres Rosselló

Presidente de la Federación de Empresarios Farmacéuticos de las Islas Baleares

Quiero aprovechar la celebración de sión, quiero también elogiar la vocación de ser-
este 75 aniversario para agradecer a vicio inmejorable que siempre han mostrado
todo el personal, directivos y todos los por y para la sociedad balear. Esta disposición
miembros de la junta de Gobierno de la de la Cooperativa con nuestros ciudadanos ha
Cooperativa d’Apotecaris y Unión Farmacéu- permitido, además, que las oficinas de farmacia
tica, todos estos años que han dedicado a pres- podamos ofrecer una prestación farmacéutica
tar un servicio inmejorable a todas las oficinas cada vez más eficiente y de calidad contrastada.
de farmacia de nuestra comunidad. Es incues- En este sentido entiendo el reconocimiento que
tionable que los profesionales farmacéuticos debemos los farmacéuticos a instituciones como
que desarrollamos nuestra labor en las farma- Cooperativa d’Apotecaris y Unión Farmacéu-
cias baleares debemos gran parte del desarrollo tica, que además de haberse erigido como
y crecimiento de nuestro sector a la buena auténticos modelos de gestión durante tantos
labor que han llevado a cabo todas las personas años, siempre han ofrecido también una cara
que a lo largo de estos 75 años han formado humana y comprometida con los propios far-
parte de las instituciones de distribución far- macéuticos, haciendo siempre explícito su
macéutica de nuestras islas. apoyo y colaboración constantes.

Como Presidente de la Federación de Por todo ello, en una época donde se está
Empresarios Farmacéuticos de las Islas Baleares, cuestionando gratuitamente tanto el actual
además de felicitar y agradecer el compromiso modelo farmacéutico español como su sistema
que siempre ha caracterizado a la Cooperativa de distribución, tenemos el claro ejemplo de
d’Apotecaris con los farmacéuticos y su profe- estas dos instituciones, que después de 75 años

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de labor continua, siguen siendo auténticos refe- apoyo al que unimos nuestra reiterada defensa
rentes para todo el sector farmacéutico, además del modelo de farmacia español, todo ello
de un ejemplo dentro del sector de la distribu- amparado bajo el ejemplo de estos 75 años que
ción. Tanto Cooperativa como Unión Farma- lleva la Cooperativa generando la confianza de
céutica han ejercido sus funciones con claridad y todos los farmacéuticos, facilitando y promocio-
eficiencia, por lo que desde la Federación de nando su servicio, además de garantizar un
Empresarios Farmacéuticos de las Islas Baleares acceso a los medicamentos libre y en condicio-
queremos mostrar nuestro total apoyo al actual nes de igualdad a todos los ciudadanos de nues-
sistema de distribución de medicamentos. Un tra comunidad.

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La farmacia contemporánea
en las Islas Baleares (1891-2000)

Dr. Lleonard Muntaner i Mariano

Historiador

AGRADECIMIENTOS a remolque de la historia general de la farmacia Portada del libro Novísimo
en España, a la que diversos autores –desde los Formulario Magistral de
Hace aproximadamente cinco meses años cuarenta– han dedicado trabajos de inves- A. Bouchardat, Madrid 1874.
–escribo el día de San Jaime del año tigación y divulgación de calidad irregular. El (Biblioteca particular)
2000– que los amigos Francesc Bujosa y grueso más importante de estas publicaciones
Joan March me insistieron mucho para que tra- tienen un cariz más bien académico, con ten- Dictamen en caso de epidemia
bajase en el presente artículo, una especie –me dencia a explicar la farmacia desde la perspecti- colérica redactado por F. Manuel
sugerían– de «demografía» de la farmacia en va que proporciona la historia de la ciencia y con de los Herreros, Marqués de la
Baleares durante el siglo XX. Una vez más, por la pretensión, casi siempre sospechosa, de enal- Bastida, A. Bosch, J. Valenzuela y
no contradecir a los amigos y, sobre todo, hala- tecer la profesión.1 Otros trabajos, en cambio, F.Yllas. Palma, 1884. (Biblioteca
gado por la confianza que me brindaban, acepté fueron escritos con menos cedazos (la mayoría particular)
la propuesta y me puse manos a la obra. pertenecen al género de la memoria personal),
Inconsciente de mí, acababa de traicionar un compartiendo una característica: la preocupa-
silencio de años, autoimpuesto, que se ampara- ción por airear y resolver los grandes conflictos
ba en la máxima de algún filósofo como cotidianos de la farmacia y de los farmacéuticos
Wittgenstein, partidario de no hablar y mucho durante la época contemporánea.2
menos de escribir sobre aquellas cosas que no
conocemos. Sin embargo, cuando me di cuenta Condicionados en Baleares, como ya he
la cosa ya no tenía remedio, y con la angustia de dicho, por el modelo de farmacia que se de-
quien no puede echarse atrás de la palabra dada, sarrolló en todo el Estado, he considerado im-
acudí al amigo Agustí Josep Aguiló, que se com- prescindible dar a conocer a los lectores, aquí y
prometió a elaborar todo el tejido estadístico con ahora, los grandes conflictos que afectaron al
técnicas informáticas. Por esta razón siempre le mundo de la farmacia a lo largo de los últimos
estaré agradecido. Igualmente a los amigos ciento cincuenta años. Por una cuestión de
mencionados ut supra, no tanto por reducir mi orden, y después de analizar detenidamente
ignorancia como por la oportunidad de disfrutar estos conflictos, soy partidario de establecer una
de una temática tan sugerente como es la histo- primera periodización en términos de tres gran-
ria contemporánea de la farmacia en Baleares. des etapas que se caracterizarían de la siguiente
Digo sugerente porque es una temática virgen, manera:
aún sin desbrozar, que embarga a los investiga-
dores –incluso a los más viejos– con la ilusión de 1. 1850-1949. Se trata de una etapa de
poder ser los primeros en hablar de ella. Pero especial complejidad para la farmacia, afectada
también porque esta historia forma parte de la por el cambio más espectacular que ha sufrido a
historia de la ciencia y por tanto del desarrollo lo largo de su historia: el paso de la botica tradi-
del capitalismo en España. cional a la farmacia moderna. Este proceso, que
a mi parecer ya se había insinuado en las postri-
UN PRIMER INTENTO DE PERIODIZACIÓN merías del siglo XVIII, fue lento y, sobre todo,
fue traumático para diversas generaciones de
La historia contemporánea de la farmacia profesionales, preocupados incluso por la su-
en las Baleares se caracteriza, grosso modo, por ir pervivencia de su disciplina. Los conflictos más
trascendentes de esta primera etapa están rela-
cionados con:

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Compañía Española de a) La producción y comercialización de los 2. 1950-1960. Se trata de un período inter-
Penicilina y Antibióticos S.A. específicos (preparados a menudo fraudulentos medio, bautizado hace unos años por José Luis
Detalle de la sección de de fórmula secreta) que fueron sustituidos pau- García Delgado como el «decenio bisagra», que
envasado estéril de penicilina en latinamente por las especialidades farmacéuti- separa la autarquía franquista de los años cua-
1950. (Colección particular) cas (medicamentos fabricados en serie en los renta del desarrollismo de los sesenta.3 La etapa
pequeños y después grandes laboratorios). se caracteriza –siguiendo a este mismo autor–
Frasco de Tintura de Gengibre. por la liberalización de la economía española, en
(Colección Rafael Calafell) b) La competencia comercial establecida la que tuvo un papel destacado el tratado de
por los drogueros en la venta de específicos, 1953 con los EEUU, que sería renovado por
especialidades y otros productos quimicofarma- otros seis años (1962-1968). Cuando el fran-
céuticos. quismo comenzó a salir de su aislamiento inter-
nacional, determinadas industrias, como la qui-
c) Estos conflictos se produjeron en unos micofarmacéutica, iniciaron una carrera ascen-
momentos delicadísimos de reordenación de la dente hasta entonces desconocida. Durante esta
farmacia, tanto por lo que se refiere a los estu- etapa el gobierno promovió una campaña para
dios universitarios como a la aprobación de las el desarrollo de la industria de los antibióticos,
primeras leyes que, tímidamente, pero de mane- que fue aprovechada por grupos como Antibió-
ra irreversible, consolidaron el nuevo modelo de ticos S.A. (Llorente, Ibys, Abelló, Uquifa, Zeltia y
farmacia. En resumidas cuentas, como veremos, Leti) para colaborar con el gigante americano
también empujó a los profesionales a unirse en Schenley de Indiana, fabricante mundial de la
organismos provinciales y nacionales, algunos penicilina G. Algo parecido haría la Compañía
de los cuales a lo largo de esta etapa organiza- Española de Penicilina y Antibióticos S.A. con
ron numerosas asambleas, congresos y confe- los laboratorios norteamericanos Merck & Co.,
rencias. Inc. (Rahway, NJ).4 Los colegios provinciales se
interesaron por las experiencias de los países
Finalmente, otra variable que no puedo extranjeros, por sus estudios universitarios,
dejar de lado en este proceso de cambio es la cambiando incluso el discurso de sus publica-
influencia de la política o, mejor dicho, de los ciones periódicas. En la XIV Asamblea de la
sucesivos regímenes políticos que se sucedieron Federación Internacional de Farmacia (Roma,
desde la I República hasta la dictadura del gene- 1951), la representación española fue masiva.5
ral Franco, pasando, naturalmente, por la dicta- Esta tendencia se incrementó hacia 1959 con el
dura de Primo de Rivera, la II República y la Plan de Estabilización que dio paso al creci-
Guerra Civil. Es posible, o al menos yo así lo miento más importante del siglo XX.
mantengo, que una de las razones de la repro-
ducción casi secular de los conflictos menciona- 3. 1961-2000. Los últimos quince años del
dos se pueda relacionar con la acusada inestabi- franquismo se caracterizaron por un crecimien-
lidad política de este período. El estudio de esta to económico considerable (intenso entre 1959
reproducción, identificando los grupos econó- y 1966 y más moderado entre 1967 y 1974) que
micos y/o profesionales que la propiciaron, es alteró tanto las formas de producción como de
aún la asignatura pendiente de los actuales vida de la sociedad española.6 Este proceso
estudios de historia de la farmacia. expansivo –provocado en gran medida por el
fenómeno del turismo de masas– favoreció
también las inversiones extranjeras, una vez
abolidos los impedimentos a la introducción de
capitales. Entre 1960 y 1974, según Joseph
Harrison, cuatro países monopolizaban las tres
cuartas partes de la inversión extranjera en
España: EEUU, Suiza (que seguramente encu-
bría capital americano y español), Alemania
Federal y Gran Bretaña. Curiosamente, el sector
con más participación de capital extranjero era
el químico, tan relacionado con la industria far-
macéutica. Este mismo autor afirma que el bajo
nivel tecnológico y científico hacía el sector quí-
mico especialmente favorable a la inversión
extranjera.7

18

Durante esta etapa en Baleares se consoli- magistral seguía siendo la herramienta primor- Manuscrito de una «recepta
dó el llamado turismo de masas, un fenómeno dial de los boticarios, la que daba sentido a su magistral», firmada en Mallorca
que hizo su aparición a mediados de los años profesión, amparada, además, por un pequeño por el facultativo Vanrell,
cincuenta y que en cifras aportadas por el geó- boom de nuevas publicaciones como la primera el 31 de marzo de 1848.
grafo Bartomeu Barceló, en Mallorca, de un total edición de la Pharmacopea Hispana (1794) y la (Archivo particular)
de 3,4 millones de ocupaciones para 1960 se Pharmacopea dogmática (1794) de Tavares, aparte
pasó a 9,7 millones en 1965, tan sólo cinco años numerosas traducciones del francés y del ale- Portada del libro Farmacología
después. El crecimiento en Ibiza y sobre todo en mán como la Pharmacopea Beteana o la curiosa Chirúrgica... de J. J. Plenck.
Menorca fue mucho más lento.8 Entre 1959 y Farmacología Chîrúrgica, ó ciencia de medicamen- Madrid, 1798.
1976 el turismo proporcionó al Estado 28.091,5 tos externos é internos precisos para curar las enfer- (Biblioteca particular)
millones de dólares, pese a la crisis padecida por medades de cirugía; con un tratado de Farmacia
los países de la OCDE entre 1974 y 1980, que no relativo á la preparación y composición de los medi- Hoja publicitaria de la «Pomada
sólo provocó una ralentización del crecimiento camentos (1798), original del doctor Joseph anti-ophtálmica», impresa en
industrial, sino también un preocupante incre- Jacobo Plenck, traducida por el cirujano militar Mallorca en 1816 por Felipe
mento del paro y la inflación. En Baleares el Antonio Lavedan.10 Hago especial mención de Guasp. (Archivo particular)
turismo sustituyó paulatinamente el modelo esta última obra por la gran difusión que tuvo
económico y social imperante, casi de antiguo en Mallorca entre los colectivos de médicos,
régimen, por el capitalismo actual, transforman- cirujanos y boticarios.
do al mismo tiempo las maneras de entender el
mundo, las ideas y las opiniones de los insulares. Mientras la regulación de los estudios se
La farmacia en Baleares, como después veremos, concretaba con firmeza, del extranjero llegaban
también quedó profundamente afectada por el los primeros específicos, de fórmula secreta y
cambio, tanto a nivel económico como de locali- milagrosa, pensados para curar múltiples enfer-
zación territorial, hasta el punto de convertirse, medades a la vez. Mallorca no permaneció al
pienso, en el modelo de crecimiento económico margen de este comercio fraudulento, donde los
más emblemático de todo el Estado. preparados a menudo eran vendidos al por
menor en ferias y mercados. Un buen ejemplo
EL CONFLICTO ESPECÍFICOS/ESPECIALI- de este tráfico inicial lo encontramos en las
DADES FARMACÉUTICAS hojas de propaganda de la Pomada Anti-ophtál-
mica de la viuda Farnier de Burdeos, hechas
De las tres etapas señaladas, querría insis- imprimir en Palma en 1816 por su representan-
tir exclusivamente en la primera, 1850-1949, te D. Juan Laborie.11 De los dos ejemplares que
porque se trata de un momento de máxima ten- reproducimos, el más sencillo indicaba –de
sión para la farmacia, donde se concentran las puño y letra– que la pomada se vendía en un
grandes contradicciones entre los antiguos y los establecimiento tan inverosímil como la Fonda
nuevos conflictos. Una etapa llena de grandes del Caballo Blanco de Palma;12 la otra hoja
cambios en un mundo que también evoluciona- publicitaba la pomada, aportando numerosos
ba muy rápidamente y que, en lo que nos atañe, ejemplos de curaciones, todas ellas acaecidas en
acabaría, sin embargo, dando paso al modelo de Mallorca y certificadas –en un intento de alcan-
farmacia moderna que hoy conocemos. zar la máxima credibilidad– por la autoridad
competente del juzgado de Palma.13 Este
LOS DOS PRIMEROS TERCIOS DEL SIGLO XIX comercio desmiente una vez más a los defenso-
res del determinismo geográfico, que aún no
Durante el reinado de Carlos III, en plena entienden que nuestras Islas, con sus puertos de
Ilustración, el impulso que se dio a las ciencias gran calado, siempre han sido punto de encuen-
naturales y a la investigación en general prepa- tro de ideas y de tráfico de mercaderías. Durante
ró el paso de la figura del boticario artesano y el primer tercio del siglo XIX, Baleares se adap-
gremial a la del farmacéutico con estudios uni- tó a las nuevas estructuras, la farmacia alcanzó
versitarios. Los colegios de Farmacia de Madrid una entidad hasta entonces desconocida y la
y Barcelona se incorporaron a la Universidad figura del farmacéutico se alzaba prestigiosa,
con el nombre de facultades en 1845. En 1800, por decirlo de alguna manera, rodeada de una
sin embargo, ya se habían aprobado las prime- cierta aureola científica. Así y todo, se mantenía
ras Ordenanzas de Farmacia que de alguna la lucha contra todo tipo de específicos secretos,
manera fueron ratificadas en 1804, si bien con tanto los procedentes del extranjero como los
cambios importantes.9 Entonces la receta elaborados por profesionales y particulares. Este
prestigio era bien patente en algunas publica-
ciones sanitarias de la época, como La Medicina

19

Curioso folleto de propaganda Ecléctica. Periódico Mensual, por una Sociedad de seis tomas.18 Vista la documentación disponible
que incluye diversos casos de Médico-Cirujanos (Palma 1849-1853), que dispo- sobre el papel de los boticarios en esta peste, me
curación en Mallorca gracias a nía de una sección precisamente titulada atrevo a sugerir a los más jóvenes un trabajo
las virtudes de la «Pomada anti- Farmacia. En general, en ella se reproducen fór- ambicioso de investigación sobre el particular.
ophtálmica». (Archivo particular) mulas magistrales de sabios especialistas
extranjeros, por ejemplo la de las Píldoras EL ÚLTIMO TERCIO DEL SIGLO XIX
Portada del primer número de la Morison; el ungüento de ratania, ideado por
revista La Medicina Ecléctica. Pal- Righini; las Gotas litontrípticas de Palmieri Las postrimerías del siglo XIX no fueron
ma, 1849. (Biblioteca particular) (Liquore litontriptico di Palmieri); las famosas fáciles para la farmacia, toda vez que los proble-
Bolas de Marte (denominadas también de mas de la competencia con los drogueros se
Pasquín facultativo sobre la peste Nancy), originales del farmacéutico Mr. Des- agravaron mucho, fruto de la división entre los
de 1820 en Son Servera (Ma- fones, y así hasta pomadas contra la tiña u otras boticarios partidarios de rechazar los específicos
llorca). (Archivo particular) bien curiosas para evitar la caída del cabello.14 y los partidarios de su producción y venta, con la
Además, en los números 21 y 22, La Medicina finalidad de plantar cara tanto a los productores
Ecléctica reproducía el plan de estudios de medi- extranjeros como a los drogueros que acabaron
cina y farmacia de 28 de agosto de 1850, no cita- aprovechando la ocasión con aquellas luchas.
dos por Gabriel Fuster Forteza y Jesús Antich
Gil.15 Finalmente, la publicación también hacía A medida que los especialistas se introdu-
mención de las necrológicas de algunos farma- jeron en el mercado, algunos profesionales esta-
céuticos mallorquines ilustres como el joven blecieron una defensa numantina de la fórmula
Sebastià Coll o el Dr. Miquel Verger. Este último magistral secundum artem, en un intento casi
había desempeñado el cargo de subdelegado de obsesivo por evitar algo que se intuía como el
Sanidad de Farmacia, inspector de sustancias finis farmaciae. Otros, en cambio, adaptaron las
medicinales en la Aduana y farmacéutico del famosas «igualas», asegurando –por un precio
Hospital Militar durante la guerra del francés. mínimo– asistencia médica, farmacéutica e,
Constitucionalista de convicciones liberales, en incluso, funeral.19 Los más espabilados, comer-
1821, durante la epidemia de fiebre amarilla cialmente hablando, de acuerdo con un médico
(sic), proveyó de medicamentos los diversos establecieron una consulta gratuita, para así
hospitales, así como a los enfermos y pobres de repartirse el beneficio de las recetas que sólo
Palma.16 El papel de los boticarios y los medica- podían ser despachadas en su farmacia. En
mentos fue de una gran trascendencia en las Mallorca, algunos inventaron específicos, reser-
epidemias. En 1820, inmediatamente después vándose el secreto de las fórmulas –muchas
de declararse la peste bubónica en Son Servera veces vulgarísimas– que no aportaban sino el
y su comarca, el Dr. Miquel Pascual estableció rejuvenecimiento de supersticiones propias de
toda una serie de precauciones, entre las cuales otros tiempos. Jaime Pizá Rosselló, un boticario
una obligaba al Ayuntamiento a garantizar los mallorquín residente en Madrid, siguiendo la
siguientes productos: vinagre, vino, aguardien- Farmacopea Española de 1865, editó Sinonimia de
te, bizcocho, carne, pan y otros alimentos. los medicamentos químicos y galénicos y de los pro-
Además: ductos naturales (1877), que alcanzó un cierto
éxito de ventas, al detallar los nombres técnicos
se hará dar al boticario de esta Villa, cuenta y y sus equivalentes en lenguaje vulgar de un
razón de todas las medicinas que tenga en su completo catálogo de medicamentos simples y
poder, señaladamente de quina buena, alcan- compuestos.20
for, tártaro emético, ásido sulfúrico, azúcar y
mostaza en crecida cantidad, para que se aco- La industria de los específicos pasó de los
pien las que faltan y no carescamos de ellas en mercados y las ferias a las publicaciones: prensa
tiempo oportuno.17 diaria, revistas, libros y guías, aprovechando un
momento álgido en la historia de la publici-
El tártaro se empleaba disuelto en las dad.21 Tomando un ejemplo tan propio como la
limonadas que eran administradas al principio Guía Manual de las Islas Baleares. Con indicador
de la enfermedad. El vinagre disuelto en agua comercial (Palma, 1891) de Pedro de Alcántara
era para las lavativas. En un segundo estadio la Peña, de un total de 72 páginas destinadas a
fórmula magistral empleada consistía en dos anuncios, 15,5 páginas –es decir, un 21,52% del
onzas de púrpura de tamarisco, una de quina total– son de anuncios relacionados con la gue-
selecta y media de tártaro soluble, todo vehicu- rra comercial entre boticarios y drogueros. En la
lado en un producto cualquiera, apropiado para distribución de páginas por anunciante, es muy
curioso observar cómo el porcentaje más eleva-
do de espacio publicitario corresponde a los

20

drogueros (32,25% del total), que sumado al del antiescrofulosa, antisifilítica y reconstituyente»),
Centro Farmacéutico S.A. (25,81%) dan una el Jarabe Almera, el Licor de Brea Arsenical, las
cifra de 9 páginas, un 58,06% del total. Píldoras Emenagogas del Dr. Solá, el Hierro
Quesada, el Vino de Peptona Ortega y, natural-
Farmacias Anuncio % mente, la Pasta pectoral infalible del Dr. Andreu
Farmacia J. Valenzuela por página de Barcelona. Todo este comercio tuvo lugar gra-
Droguerías 12,91 cias a la regularización de las comunicaciones
Centro Farmacéutico 2 29,03 marítimas con la Península, iniciadas según B.
TOTAL 4,5 32,25 Barceló en 1838.24 Una última anécdota que
5 25,81 corrobora la vista de nuestro boticario fue que,
4 100 aprovechando su relación farmacéutica con el
15,5 señor Almera de Barcelona, de alguna manera
se implicó en otro negocio entonces muy pro-
En el apartado de la Guía: «Profesiones, ductivo: la distribución de cepas americanas Portada de Sinonimia... del
comercio, industrias», el Centro Farmacéutico resistentes a la filoxera.25 boticario Jaime Pizá Rosselló
S.A. se incluye en el listado de los drogueros y (Madrid, 1877). (Biblioteca
no de los farmacéuticos, corroborando la incli- En relación con su propia producción, los particular)
nación comercial de esta sociedad, probable- hermanos Valenzuela fabricaron, entre otras, la
mente fruto de la división entre los boticarios. Al famosa Magnesia doble efervescente anisada, Cubierta de Guía de las Baleares
modo de un gran almacén de distribución, la indicada no sólo como laxante, sin también –en del escritor Pedro de Alcántara
empresa (núm. 34 y 36 de la calle Harina de pequeñas dosis– como un verdadero refresco Peña (Palma, 1891). (Biblioteca
Palma) ofrecía: veraniego.26 particular)

Surtido completo de toda clase de drogas y pro- Otros productos mallorquines de la época Anuncio de la farmacia de Juan
ductos químicos aplicables á la medicina, vete- fueron las Píldoras Barceló, contra la tos,27 el Valenzuela Alcarín, publicado en
rinaria, fotografía, artes é industria i tintorería. Jarabe vermífugo del Dr. Morey de Muro, el Pre- la Guía de las Baleares (1891) de
Objetos de cristalería, aparatos de goma, orto- parado «con la llamada en mallorquín Herba Pedro de Alcántara Peña.
pedia y cirujía. Ququere de Artá»; así como toda una caterva de
Especialidades nacionales y extrangeras. Aguas otros productos de la Farmacia Morey, premia-
minerales de todas clases.22 dos en la Exposición Farmacéutica de Madrid de
1882, a saber: las Píldoras y pastillas de savia de
Por lo que se refiere a las farmacias, desta- pino, Vino y Jarabe de quina ferruginoso, Jarabe
ca la publicidad insertada por los hermanos de fosfato de cal gelatinoso y un medicamento
Juan y Víctor Valenzuela Alcarín, con 4,5 pági- muy usado por los veterinarios, el Tópico
nas, un 29,03% del total de la publicidad. En Español «que sustituye al fuego y no daña el
realidad, la mayoría de anuncios corresponden bulbo piloso».28
al primero, Juan Valenzuela (con oficina abierta
en la Plaza de la Cuartera, 2, de Palma), el boti- La literatura sobre publicidad de específi-
cario más activo del momento, a juzgar por la cos y especialidades es muy extensa. Quizá uno
numerosa publicidad insertada en la prensa de los primeros en tratar el tema fue Enrique
periódica de Ciutat, como, por ejemplo, la Durán, que hacia 1950 aludía a la especial aten-
Revista Balear de Ciencias Medicas o la revista de ción que dedicaban los anuncios a advertir al
farmacia Las Baleares, entre otras. Sin entrar a lector-consumidor contra posibles imitaciones:
fondo en este personaje, de quien el amigo Joan «se sabe que hay villanos de mala reputación y
March ha dado a conocer una excelente biogra- droguistas poco escrupulosos que ofrecen imi-
fía,23 no puedo dejar de insistir en la capacidad taciones...» Es evidente, como señala en conclu-
comercial de Valenzuela, prototipo del boticario sión el mencionado Durán, que:
que no dio el brazo a torcer frente a la compe-
tencia de los drogueros. Los anuncios insertados Los inventores de específicos fueron a su modo
en la Guía son una buena prueba de su estrate- creadores de mitos, mitos consoladores en estos
gia comercial, basada, por un lado, en ser ven- ejemplos para calvos, desganados y feas, y si
dedor y distribuidor de específicos y especiali- bien pretendían hacerse ricos, por añadidura
dades, tanto españolas como extranjeras, y, por vendían ilusiones envasadas y las ilusiones no
otro, en fabricar productos farmacéuticos pro- tienen precio.29
pios. Entre los primeros destacaban La Marga-
rita en Loeches («antibiliosa, antiherpética, A medida que la publicidad se reglamentó
(1906, 1922, 1931, 1941...), los anuncios bajaron
de tono y muchos laboratorios adoptaron como
estrategia la edición de pequeños manuales de

21

Tres ejemplos de la publicidad primeros auxilios como, por ejemplo, El amigo de El conflicto de las especialidades y los pre-
generada por los grandes la casa. Guía elemental y práctica de las familias, cios corre paralelo a la competencia de los dro-
laboratorios de especialidades donde se anunciaba toda la producción del gueros, que de momento dejo a un lado para
farmacéuticas durante la primera laboratorio J. J. Vivas Pérez.30 Lo mismo pasaba dedicarle la atención que merece en el siguiente
mitad del siglo XX. (Biblioteca con la publicidad del medicamento Urodonal, apartado.
particular) incluido en una guía sobre la circulación sanguí-
nea, que en 1938 ya llevaba trece ediciones. Otro elemento que hay que considerar en
Otros laboratorios, como los del Dr. Adolfo todo este proceso es la evolución que siguieron
Llopis, promocionaron su producto estrella –en los pequeños laboratorios desde inicios de siglo,
este caso el Histógeno Llopis– con un álbum y la introducción masiva a partir de 1950 de tec-
médico en el que se recogían las fotografías y los nología y capital extranjero. El número de labo-
comentarios laudatorios de decenas de médicos ratorios españoles en diez años (1919-1929) se
españoles y cubanos.31 había incrementado mucho, hasta alcanzar la
cifra de 2.500 empresas. Hacia 1950 estas empre-
Cuando las especialidades farmacéuticas sas, en general, eran pequeñas y de poco empu-
inundaron el mercado, la publicidad de las je financiero, seguramente producto de los perí-
empresas se dirigió hacia otro objetivo: la clase odos de autarquía económica atravesados
médica. Se trataba de convencer a los profesio- durante el Directorio y la posguerra. Quizá las
nales de la medicina de que las fórmulas prepa- excepciones de más calado las constituían los
radas en sus laboratorios eran las genuinas, las Laboratorios del Norte de España del Dr. Cusi,
únicas que podían garantizar la calidad.32 Antibióticos de Madrid y los laboratorios Abelló.
Los descubrimientos de vitaminas y sulfamidas
En determinadas épocas, específicos y crearon una demanda continuada que, junto con
especialidades tienen tendencia a confundirse. la buena disposición de los diversos gobiernos
Javier Blanco Juste, en su breve Historia de la franquistas, estimuló el crecimiento de la indus-
especialidad farmacéutica española,33 es partidario tria farmacéutica. En la III Reunión de Sanitarios
de comenzar a hablar de especialidades farma- Españoles de 1951, los laboratorios presentes
céuticas a partir del 5 de junio de 1919, momen- eran los más activos: Abelló (fábrica de produc-
to en que D. Carlos Cuerda registró con el nú- tos químicos y farmacéuticos), Laboratorios
mero 1 el Antiúnico Weis en Ocaña (Toledo). Es Amor Gil S.A., Laboratorios Andrómaco S.A.,
una opinión con la que no puedo estar de acuer- Antibióticos S.A., La Química Comercial y Far-
do por su limitación y porque el mismo autor se macéutica S.A. (Bayer), Comercial Ibero Danesa
contradice, afirmando que hacia 1899 el núme- S.A., Davur S.A., Dietéticos Max S.A., Fábrica
ro de especialidades en todo el Estado no sobre- Española de Productos Químicos y Farma-
pasaba el medio centenar (es decir, ya existían), céuticos S.A., Laboratorios Aurelio Gamir S.A.,
evolucionando de 357 especialidades para el Compañía Española de Penicilina y Antibióticos
año 1919 a 27.000 para el año 1935. En 1950 la S.A., Instituto de Biología y Sueroterapia S.A.,
última cifra se había duplicado. Laboratorio del Dr. Aristegui, Laboratorios Juan
Martín S.A.F., Laboratorios Lefa, Laboratorios
LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX Madariaga, Laboratorio Productos Pyre-Daniel
Magrané S.A., Productos Químico-Farmacéuti-
Desde 1900 hasta bien entrada la pos- cos S.A., Laboratorios Profidén S.A., Lederle
guerra, la mayoría de conflictos farmacéuticos Laboratories Division (American Cyanamid
se reiteraron, a menudo agravados por los Company), Laboratorios Reunidos S.A., Produc-
sucesivos cambios de régimen político. Pese a tos Químicos Schering S.A., Sandoz y Labora-
ello, la fórmula magistral –aquel antiguo bas- torios Ulzurrun S.A.
tión que llenaba de sentido las boticas– había
sido definitivamente sustituida por las espe- Según Albert Carreras, en 1950 el índice de
cialidades, después de una lenta y traumática producción industrial (IPI) recupera el nivel que
agonía. En Mallorca este cambio es bien había alcanzado en 1930 y desde entonces en
patente en los libros de recetas oficiales que adelante continuó creciendo. Existió también una
obligatoriamente debían llevar al día las far- tendencia pronunciada –parecida a la de la
macias. Uno de los ejemplos consultados es el Banca– a establecer los laboratorios cerca del
del farmacéutico Rafael Santandreu Planas de poder político, es decir, en Madrid. Joseph
Santa Margarita, cuyos libros oficiales precisa- Harrison es quien ha recordado esta tendencia,
mente se interrumpen en 1944, momento en que contribuyó a la creación del cinturón indus-
que la fórmula magistral tiene firmada su sen- trial de Madrid, «un hecho que no desagradaba al
tencia de muerte.34 régimen, pues erosionaba las bases económicas

22

del poder del nacionalismo vasco y catalán. A me- El artículo segundo de las Ordenanzas de
diados de los 50, el 55% de las mayores compañí- Farmacia de 1860 autorizaba la venta de los
as españolas estaban radicadas en Madrid».35 medicamentos sólo a los boticarios. Cuando se
pusieron de moda las especialidades, los dro-
En general, algunas de las más importan- gueros solicitaron al ministro de Gobernación
tes empresas de la industria quimicofarmacéuti- D. Alberto Aguilera la modificación de aquel
ca, antes y después del Plan de Estabilización de artículo con la finalidad de poder venderlas.
1959, quedaron vinculadas a las grandes fami- Aguilera accedió a la petición con el Real
lias económicas del régimen, escapando a la Decreto de 12 de junio de 1894, por el cual:
competitividad exterior a través de los recursos
del Estado, puestos al servicio de los intereses
económicos de los grupos dominantes.36

Algunos de los boticarios que vivieron
aquella reconversión no podían resignarse, en el
sentido de tener que aceptar la paradoja que
suponía una farmacia «salvada» gracias a la
implantación masiva de unas especialidades
hasta entonces combatidas o, en el mejor de los
casos, mal aceptadas por una mayoría del colec-
tivo. Los farmacéuticos o, mejor dicho, sus diri-
gentes en organismos corporativos nacionales,
como el Consejo General de los Colegios de
Farmacéuticos de España, consiguieron algo tan
preciado como la estabilización de la farmacia,
aunque se realizase desde la más insobornable
adhesión al régimen del general Franco. Pero
esto es harina de otro costal, y hablaré de ello
más adelante.

LA COMPETENCIA El art. 2º de las Ordenanzas de Farmacia se Un detalle del laboratorio del
CON LOS DROGUEROS entenderá redactado en esta forma: «La venta Dr. Llopis. (Colección particular)
de las aguas minerales y de los específicos,
En capítulos precedentes he señalado el cuando se verifique fuera de los balnearios, Exposición de las especialidades
último tercio del siglo XIX como un período de fábricas y boticas, podrá hacerse en depósitos farmacéuticas producidas por los
especial conflictividad en la lucha entre botica- autorizados por la Administración, acreditando laboratorios Llopis. Madrid, ca.
rios y drogueros por controlar el mercado de los previamente ante la misma la representación 1910. (Colección particular)
específicos y las especialidades. De esta férrea de los dueños y fabricantes.
competencia –entre un alud nunca visto de Dichos depósitos estarán sometidos a la ins-
anuncios publicitarios, promociones del dos por pección y visitas administrativas y las disposi-
uno y obsequios a los clientes– se resintieron los ciones del capítulo 8º de las citadas Orde-
precios, equiparándose incluso a los de las far- nanzas.39
macias militares y demostrando el abuso de las
tarifas aplicadas por la farmacia civil. Los bene- La competencia quedó legalizada y los
ficios farmacéuticos obtenidos por la venta de boticarios no volvieron a la carga hasta finales
las especialidades pasaron de un 10% a un 5%- de siglo, cuando los colegios provinciales re-
2%, en un negocio que hacía agua por los cua- cientemente creados comenzaron a gestionar el
tro costados.37 Testimonio de primera mano, el derecho exclusivo de la farmacia a la venta de
boticario Gustavo López García –antiguo se- medicamentos. De entrada se consiguió que el
cretario técnico de la Unión Farmacéutica ministro de Gobernación, Sr. Joaquín Ruiz
Nacional– hacia 1950 publicó una especie de Jiménez (presidente de la Junta de Gobierno y
memorias profesionales, que resultan una fuen- Patronato de los farmacéuticos titulares), dictase
te casi imprescindible para todos aquellos estu- una Real Orden (18 de febrero de 1902) por la
diosos interesados en el conflicto entre botica- cual se establecía en todo su rigor el artículo 2º
rios y drogueros.38 Este trabajo, por tanto, cons- de las Ordenanzas de 1860.40
tituye el fundamento principal de todo cuanto
narraré en el presente apartado. Haciendo un punto y aparte, este es un
buen momento para afirmar que Gabriel Fuster
Forteza y Jesús Antich Gil, en Legislación Farma-

23

Droguería de Miquel Bestard céutica Española y relacionada con todos los aspec- preceptuar que «la venta al por menor de las
(Palma, ca. 1900). Uno de los tos del ejercicio profesional. Recopilada y sistemati- especialidades farmacéuticas, cualquiera que
establecimientos que representó zada,41 manipularon la parte que les convino de sea su origen, corresponde exclusivamente a los
una verdadera competencia la legislación histórica, seguramente en «benefi- farmacéuticos», añadía un párrafo indignante
comercial para las farmacias. cio» de la farmacia. La constatación de esta ma- para los boticarios: «Se exceptúan las que por no
(Colección particular) nipulación la encontrará el lector avisado, por tener sustancias muy activas pueden ser vendi-
ejemplo, en la coincidencia de los textos del artí- das en las droguerías, pero no en otros estable-
Cubierta de Legislación culo segundo de las Ordenanzas de 1860 y la cimientos». En 1921, durante la Dictadura de
Farmacéutica... de Gabriel Fuster modificación del R.D. de 1894; en la supresión Primo de Rivera, el famoso Reglamento de 1919
y Jesús Antich, impresa en Palma de la R.O. de 18 de febrero de 1902 y, sobre todo, aún no había comenzado a regir.
en 1944. (Biblioteca particular) en la sospechosa eliminación del famoso y con-
flictivo artículo 13 del Reglamento de Especia- Pese a que un grupo considerable de los
lidades Farmacéuticas de 9 de febrero de 1924, boticarios que regentaban la Unión Farmacéu-
del cual hablaremos más adelante. tica Nacional fuesen adictos al Directorio –los
presidentes Piñerúa y Rhodes tenían cargos de
Siguiendo el hilo de lo que decía, los dro- representación política–, no les sirvió de nada a
gueros interpusieron un recurso para echar atrás la hora de enfrentarse al nuevo ministro de
la R.O. de 18 de febrero de 1902, consiguiendo Gobernación, el sanguinario general Martínez
la victoria por silencio de los farmacéuticos, y Anido, que acababa de llegar de Barcelona,
continuaron despachando especialidades en sus donde había ejercido la represión contra el sin-
tiendas. Los boticarios buscaron su salvación en dicato de farmacéuticos.42 Cuando la junta
la elaboración de una o más especialidades, directiva de la UFN expuso al general los gran-
aunque en competencia con los específicos des conflictos de la farmacia, éste salió por pete-
franceses y alemanes. Todo ello sumado resultó neras. Ante los argumentos de los farmacéuticos
en un grave abaratamiento de los precios y en para justificar el derecho exclusivo a vender
una polémica que obligó al ministro Amalio medicamentos en las farmacias, su respuesta fue
Jimeno a publicar el primer Reglamento para la contundente:
elaboración y venta de especialidades farmacéu-
ticas de 6 de marzo de 1919, tampoco citado por En las medicinas que ustedes hagan, muy bien;
Fuster y Antich. En realidad, el Reglamento no pero en los específicos no me convencen; para
satisfizo a nadie. Los especifistas extranjeros mí no hay diferencia entre una caja de pastillas
protestaban para suprimir los obstáculos en la Andreu y una lata de sardinas de Nantes. Y
exportación. Los farmacéuticos lo hicieron por- encuentro natural –añadía– que el público pre-
que el documento dejaba en el aire dos cuestio- fiera comprarlas en las droguerías porque,
nes capitales: el porcentaje de ganancia de las como venden más, los tienen más frescos.43
farmacias con las especialidades y el precio fijo
de los medicamentos. En realidad tampoco se Con estos criterios del brazo derecho del
solucionaba la cuestión de la exclusividad de Dictador, se redactó y se aprobó un nuevo
venta en farmacias, ya que el artículo 21, pese a Reglamento de Especialidades Farmacéuticas de
9 de febrero de 1924 que, una vez más, olvidaba
la pretensión más anhelada por los profesiona-
les de la farmacia: la exclusiva en las especiali-
dades. El nuevo reglamento ratificaba de una
manera precisa y concluyente el antiguo privile-
gio concedido a los drogueros en 1894 por el
ministro Aguilera. El artículo 13 de la nueva ley
se expresaba con estas palabras:

Las especialidades cuya venta al público no
requiera la presentación de receta podrán ser
expedidas indistintamente en las farmacias,
droguerías y centros de especialidades.44

Ante este rotundo fracaso la junta directi-
va de la UFN elevó su queja al presidente del
Directorio, quien a su vez la trasladó a Gober-
nación con una nota para que se impusiese una

24

sanción a los boticarios. Martínez Anido, en un pecciones, entre otros) como por su vigencia a lo
ataque de furia, primeramente decidió la depor- largo de sucesivas décadas. Las nuevas orde-
tación en masa de los directivos a Fernando Poo, nanzas fueron muy divulgadas por la prensa
cosa que no se llevó a cabo en consideración a la especializada e, incluso, criticadas en alguno de
edad de algunos de los firmantes. Este conflicto sus artículos en publicaciones de tanto renom-
provocó la dimisión de Piñerúa, desengañado bre como La España Médica.49 Hasta bien entra-
del régimen, que el mismo año fue sustituido en do el siglo XX la legislación insistió, como ya
la presidencia de la UFN por Rhodes. hemos visto, en el intrusismo (1867, 1902, 1909,
1922...), la publicidad (1906, 1922, 1931, 1941...)
En relación con el precio fijo, el artículo y, naturalmente, en los específicos y las especia-
tercero del Reglamento de 1924 especificaba lidades (1867, 1885, 1902, 1924, 1928, 1935,
especialmente que los medicamentos debían 1938, 1943...). De estos últimos destaca la Ley de
indicar su precio en pesetas y que este no podía 9 de febrero de 1924, mediante la cual se apro-
ser alterado. Este precepto sería modificado por bó el Reglamento de Especialidades Farmacéu-
el general en una R.O. de 29 de enero de 1925, ticas, del cual también he hablado en el capítu-
y en otra definitiva de 24 de abril de 1928 que lo precedente. A otros niveles marcaron la pauta
textualmente decía: la Real Orden de Colegiación obligatoria de far-
macéuticos (R.O. de 6 de diciembre de 1917), la
Queda terminantemente prohibida la venta de aprobación del Reglamento de los Inspectores
especialidades farmacéuticas a precios distintos Farmacéuticos Municipales (Decreto de 14 de
al fijado en sus envases...45 junio de 1935) y, en pleno franquismo, el De-
creto de Nuevas Farmacias (24 de enero de
Este cambio súbito del ministro a favor de 1941) y, finalmente, la Ley de Sanidad de 1944
los boticarios quizá está relacionado con un (25 de noviembre de 1944).
intento de extorsión al Colegio de Barcelona,
llevado a cabo por una persona de confianza del La limitación de farmacias se consiguió por
mismo Martínez Anido.46 Todo quedó en nada, el Decreto de 24 de enero de 1941, un documen-
y los farmacéuticos agradecidos acabaron obse- to básico para cualquier investigador estudioso
quiando al general con una escultura de su de la evolución «demográfica» de la farmacia
busto –para gloria del país– confeccionado por desde la posguerra. El régimen de limitación de
el escultor Sr. Ortells, que presidiría su despacho farmacias se sujetó a dos variables: la distancia
mientras le duró el cargo.47 mínima entre las oficinas y el número de habi-
tantes de la población donde se debía realizar el
La competencia con los drogueros se alar- servicio. Concretamente, estas distancias en fun-
gó todavía hasta el 7 de enero de 1931, en que ción de los habitantes eran las siguientes:
un R.D. establecía que las especialidades farma-
céuticas sólo se podían vender en las farmacias. + de 100.000 habitantes 250 metros
Después de una prórroga de quince días, los
drogueros llegaron a un acuerdo con los farma- 50.000 - 100.000 200
céuticos de los distintos colegios en la venta de 5.000 - 50.000 150
los stocks acumulados.

LOS GRANDES AVANCES LEGISLATIVOS Y en todo caso, sin que el número de far- D. Severiano Martínez Anido,
macias establecidas excediese de una oficina por Vicepresidente del Consejo de
A niveles legislativos y al margen de una cada 5.000 habitantes. En el resto de términos Ministros y Ministerio de
muy prudente R.O. de 14 de junio de 1842,48 los municipales, no se autorizaba el establecimien- Gobernación durante la
avances más trascendentes se dieron con la to de más farmacias de las que correspondían al Dictadura de Primo de Rivera.
aprobación de la ley de 28 de noviembre de número de plazas de inspectores farmacéuticos (Colección particular)
1855, la denominada Ley de Servicio General municipales, en base a la clasificación de parti-
de Sanidad, y, sobre todo, a partir del Real dos farmacéuticos señalada por Orden de 20 de Portada de La España Médica,
Decreto de 18 de abril de 1860, por el cual fue- noviembre de 1941 (BOE 22/XII/1941). revista muy crítica con las nuevas
ron aprobadas las nuevas Ordenanzas de Far- Ordenanzas de Farmacia
macia. Este último documento es uno de los Desde un principio la pugna se estableció aprobadas en 1860.
más emblemáticos de la historia de la farmacia, en las grandes ciudades y no en los pueblos (Biblioteca particular)
no tanto por fijar algunos de los retos más pequeños. A medida que la población se incre-
importantes (específicos, intrusismo de los dro- mentó, aumentó el número de oficinas. En todo
gueros y particulares, precios, publicidad e ins- el Estado, de 1900 a 1950, se pasó de un censo
de 18,6 millones de habitantes a 28,2 millones

25

respectivamente. Durante el decenio 1940-1950, grandes debates sobre la farmacia en asambleas
la población había aumentado en 2,5 millones y congresos, cuyas conclusiones se hacían llegar
de habitantes. a la administración. Entre estos organismos des-
tacaron la Real Academia de Farmacia, los pri-
Un libro interesantísimo dirigido a los far- meros colegios provinciales de farmacéuticos
macéuticos rurales es el de José Bayona Sán- que datan de 1898, 1899 y 1900, a los que siguie-
chez, titulado El farmacéutico titular (Madrid, ron las Juntas de Gobierno y Patronato (1905) y
1956),50 donde se aporta mucha documentación la Unión Farmacéutica Nacional (1912-1936),
sobre la limitación de farmacias, ampliada con el que integraba todos los colegios provinciales.
Reglamento de personal de los Servicios Sani- Esta última sería sustituida en 1936 por el
tarios Locales (Decreto de 27 de noviembre de Consejo General de los Colegios Oficiales de
1953, BOE de 9 de abril de 1954). En su artículo Farmacéuticos (Órdenes de 12 de enero de 1936
92 se especifica que las plazas de farmacéuticos y 15 de noviembre de 1939), que fue mantenido
titulares quedaban clasificadas, según el censo y fomentado por el primer franquismo con la
de población de los respectivos municipios, en aprobación de un Reglamento (Orden de 14 de
cuatro categorías: febrero de 1941) y unos Estatutos (Orden de 7
de agosto de 1948) por los cuales el Consejo
1ª categoría + de 5.000 habitantes General se convertía en la institución más
2ª categoría de 3.501 a 5.000 representativa de la «clase» farmacéutica.
3ª categoría de 2.501 a 3.500
4ª categoría La Unión Farmacéutica Nacional, de la
hasta 2.500 habitantes que ya hemos hablado, también jugó un papel
primordial, tanto en la defensa de la farmacia
El límite del número de farmacéuticos, rural (los denominados inspectores farmacéuti-
según el censo de 1950, quedó clasificado de la cos municipales, IFM) como de los primeros
siguiente manera: sindicatos farmacéuticos, a los que prestó su
apoyo en 1920, después de que el gobernador
Hasta 8.000 1 farmacéutico de Barcelona, Martínez Anido, encarcelase a la
habitantes titular junta directiva del sindicato del Colegio de
Barcelona.51 El sindicato de Baleares, entre otros
8.001 a 20.000 2a3 asuntos, se encargaba de la elaboración de las
20.001 a 50.000 3a6 tarifas mínimas de las recetas, de las que repro-
50.001 a 100.000 5 a 10 ducimos la portada de la edición de 1939.52
100.001 a 250.000 8 a 20
250.001 a 500.000 15 a 30 En cuanto al Consejo General, no hay
20 a 40 duda de que su papel fue claro durante el fran-
+ de 500.000 quismo, tanto por su frenética actividad –orga-
nizando todo tipo de acontecimientos– como
Cuando el «turismo de masas» hizo acto por su implicación interesada con la nueva dic-
de presencia en las Baleares, no sólo provocó un tadura. De esta implicación cotidiana existen
incremento del número de oficinas, sino que muchos ejemplos en la prensa especializada,
varió radicalmente el mapa de su localización pero ninguno tan ilustrativo como el que tuvo
histórica tanto en Palma como en el resto de los lugar en Madrid en 1946, durante los actos con
municipios, especialmente en los costeros, que concluyó la Asamblea Nacional de Farma-
donde la población residente y los transeúntes céuticos. Blas Pérez González, entonces minis-
se incrementó de una manera nunca vista. tro de la Gobernación, presidió la mesa de clau-
sura junto con el director general de Sanidad
Cubierta del libro El farmacéutico LAS PRIMERAS ORGANIZACIONES (Dr. Palanca), el presidente del Consejo General
titular de José Bayona Sánchez, PROFESIONALES (Dr. Turrientes), el vicepresidente (Sr. Zuaza-
Madrid 1956. goitia) y el director del Laboratorio Municipal de
(Biblioteca particular) Conforme iban encajando las piezas del Madrid (Dr. Torres Canals). D. Ramón Turrientes
nuevo modelo de farmacia moderna, los botica- de Miguel se despachó con un discurso preciso
Portada del libro Tarifa mínima de rios se vieron empujados a crear sus propios sobre las conclusiones a que había llegado la
recetas obligatoria para todos los organismos, destinados primordialmente a la Asamblea, acompañado de una adhesión que
Farmacéuticos de Baleares, editado defensa de los intereses de los afiliados y de no dejaba lugar a dudas:
por el Sindicato de la profesión. Algunas de estas instituciones,
Farmacéuticos de Baleares. sobre todo las de ámbito estatal, canalizaron los Y para acabar, señor Ministro, queremos deci-
Palma: Imprenta de Fernando
Soler Queralt, 1939. ros personalmente que el primer acuerdo de
(Biblioteca particular)

26

esta Asamblea fué elevar a Su Excelencia el Jefe un participante mallorquín de calidad, el botica-
del Estado nuestra inquebrantable adhesión. rio Juan Valenzuela.57 Las asambleas tuvieron su
Ha coincidido esta reunión con los momentos máximo brillo en tiempos de la UFN, la cual
en los que se intentaba sojuzgarnos desde el organizó al menos veintidós, escogiendo como
exterior. Y nosotros, farmacéuticos, somos sedes las ciudades de Valencia, Toledo, San
antes que nada españoles y sabemos que Sebastián, Cádiz, Barcelona, Sevilla, Oviedo, La
nuestra suerte individual y nuestro porvenir Coruña, Santander y de nuevo Sevilla y
profesional dependen antes que nada de la Madrid.58 Con posterioridad a 1946, la tenden-
dignidad y la independencia de la Patria. Por cia se dirigió hacia los macrocongresos, como la
eso señor Ministro, os rogamos que elevéis al Segunda Semana Farmacéutica Nacional (Pal-
Jefe del Estado, nuestro Caudillo Franco, nues- ma, 29 de abril-30 de mayo de 1950), que no
tra inquebrantable adhesión y decirle que los comentaré por haberlo hecho ya el Dr. Macià
farmacéuticos españoles estamos, antes que Tomàs.59 Las actas de este congreso se publica-
nada y por encima de todo, al servicio de ron en 1953, en un grueso volumen impreso en
España.53 Madrid.60

Esto no obstante, me gustaría aclarar que EVOLUCIÓN DEL NÚMERO El farmacéutico Pere Oliver i
todo este apoyo político siempre procedía de un DE FARMACIAS EN BALEARES (1891-2000) Domenge (Palma 1886-Felanitx
mismo entorno: el de los farmacéuticos que, con 1968). Fotografía colección
cierto grado de entendimiento con el régimen, ALGUNAS ADVERTENCIAS SOBRE LAS FUENTES familia Oliver Reus.
habían conseguido instalarse en los lugares de
más responsabilidad de los organismos profe- EMPLEADAS El farmacéutico Josep Serra i
sionales, como por ejemplo el Consejo General. Pastor (Sóller 1898-1962).
En los antípodas de aquellos, quedaban arrinco- La estadística relativa a la evolución de la Fotografía colección familia
nados todos los farmacéuticos republicanos farmacia en las Baleares a lo largo del período Serra.
–por utilizar un genérico– que habían consegui- 1891-2000 (conocidos los graves conflictos que
do sobrevivir a la derrota en la Guerra Civil. En sacudieron la farmacia contemporánea) alcan-
Baleares, entre los represaliados destacaron los za, ahora, una nueva dimensión, toda vez que
nacionalistas Pere Oliver Domenge (Palma, las cifras vienen a ser inteligibles y explicativas
1886-Felanitx, 1968) y Josep Serra Pastor (Sóller, de los principales acontecimientos. Antes de
1898-1962), ambos alcaldes de sus pueblos hablar de ello, sin embargo, conviene advertir al
(Felanitx y Sóller, respectivamente), firmantes lector de la provisionalidad de este capítulo,
de la Respuesta al mensaje de los catalanes entre otras razones porque es el primero de
(1936) y miembros activos de la Associació per a estas características y también porque algunas
la cultura de Mallorca.54 de las fuentes estadísticas empleadas no son
documentos digamos oficiales, aunque su fiabi-
Volviendo a la Asamblea de 1946, entre los lidad es casi indiscutible. Entre las fuentes
acuerdos aprobados destacaban: la necesidad de empleadas destacan la Guía Manual de las Islas
aprobar un Reglamento propio, la creación de la Baleares con indicador comercial (1891) de Pedro
Dirección General de Farmacia, aumentar el de Alcántara Peña, el Anuario General de España
porcentaje de ganancia de las especialidades en Bailly/Baillière/Riera de los años 1930 y 1935, la
un 35%, dotar mejor a los IFM, la venta en ex- Guia Mèdica de Catalunya i Balears de 1935, el
clusiva de los medicamentos recetados por los Anuario Comercial de 1944, la Guía Comercial e
veterinarios y otros productos químicos utiliza- Industrial de España de 1955 y los censos de far-
dos en fitopatología, seguros de enfermedad, macias de los años 1964, 1970 y 2000, proce-
publicación de los reglamentos derivados de la dentes del archivo del Colegio Oficial de
Ley de Sanidad y análisis clínicos, entre otros.55 Farmacéuticos de las Islas Baleares.61 Tratán-
En relación con los últimos existe un manual dose de una primera muestra para un trabajo de
muy usado por los IFM, titulado Métodos oficia- introducción, estas fuentes me han parecido
les de análisis de alimentos.56 suficientes. Quizá en futuras investigaciones
habría que trabajar con una seriación de años
Aunque la Asamblea de 1946 se organizó –de los siglos XIX y XX– más exhaustiva. Esta
después del vacío de una década, años atrás información se puede conseguir, con paciencia,
estas reuniones habían constituido verdaderos haciendo una pequeña búsqueda en los archi-
foros de debate, para superar todo tipo de obs- vos y bibliotecas de nuestra comunidad autó-
táculos. En 1866 se realizó el Congreso Farma- noma.
céutico Español, al que siguió la Asamblea
Farmacéutica Nacional (1904) de Zaragoza, con

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TABLA 1. EVOLUCIÓN DEL NÚMERO DE FARMACIAS EN LAS ISLAS BALEARES (1891-2000)

Mallorca 1891 1930 1944 1955 1964 1970 2000
Menorca
Eivissa F% F% F% F% F% F%F%
Formentera 77 82,00 106 80,30 125 83,90 157 84,46 173 85,22 189 85,52 311 80,60
TOTAL 13 13,80 19 14,40 19 12,75 21 11,35 19 9,35 20 9,04 34 8,80
4 4,20 5 3,35 10 4,94 11 4,99 39 10,10
00 7 5,30 00 7 3,79
94 100 00 149 100 00 1 0,49 1 0,45 2 0,50
132 100 185 100 203 100 221 100 386 100

Fuente: elaboración personal.

GRÁFICA 1. EVOLUCIÓN DEL NÚMERO DE FARMACIAS
EN LAS ISLAS BALEARES (1891-2000)

450 1930 1944 1955 1964 1970 2000 islas, por razones diversas, la mayoría relaciona-
400 das con la formación social y económica de cada
350 isla y, naturalmente, con los obstáculos que
300 hubo de superar la propia farmacia en toda la
250 nación. Si observamos la tabla 2, las cifras de
200 la columna de crecimiento medio anual, a gran-
150 des rasgos, confirman dos etapas de crecimien-
100 to más o menos diferenciadas: la primera de
50 1944 a 1955 (con una media de 3,48 farmacias al
año) y la segunda de 1970 a 2000 (con una
0 media de 5,85 farmacias al año). Se trata de la
1891 confirmación para Baleares de la periodización
general que he establecido al principio de este
Fuente: elaboración personal. estudio. La primera etapa se caracterizaría por
acusar los efectos de la primera liberalización
TABLA 2. EVOLUCIÓN DEL NÚMERO DE FARMACIAS económica del franquismo y por los orígenes del
EN LAS ISLAS BALEARES I CRECIMIENTO MEDIO ANUAL (1891-2000) «turismo de masas». La segunda es propia de
una sociedad desarrollada y rica que tiene como
Año Total farmacias Índice Crecimiento medio base de su economía el monocultivo del turis-
(base 100=1891) anual mo. El turismo, sin embargo, ha afectado a las
Baleares de una manera desigual y eso ha dado
1891 94 100,0 0 lugar a modelos de farmacia diversos que con-
vendría comentar.
1930 132 140,4 1,03
Volviendo a la tabla 1, el lector verá cómo,
1944 149 158,5 1,29 en todos y cada uno de los años seleccionados,
Mallorca alcanza el porcentaje más elevado de
1955 185 196,8 3,48 farmacias, espectacularmente situada siempre
por encima del 80% del total de las Baleares,
1964 203 215,9 2,12 seguido de Menorca, Eivissa y finalmente
Formentera. La macrocefalia de Mallorca hace
1970 221 235,1 3,20 que sus períodos de máximo crecimiento coinci-
dan con los referidos a Baleares, cosa que no
2000 386 410,6 5,85 sucede con el resto de las islas. Menorca, pese a
incrementar muy tímidamente las cifras absolu-
Fuente: elaboración personal. tas, ha experimentado un proceso decreciente
en cuanto a las relativas, situándose el año 2000
BALEARES casi seis puntos por debajo de los niveles que
había alcanzado el año 1930. El crecimiento de
El número de farmacias en Baleares de Eivissa es notable a partir de las postrimerías de
1891 a 2000 no ha dejado de incrementarse, los años 1960, siguiendo idéntico proceso
pasando de 94 a 386 oficinas respectivamente Formentera, que en la actualidad cuenta con dos
(cf. tabla 1 y gráfica 1). Ahora bien, este creci- oficinas. Estas cifras para el conjunto de Ba-
miento no se realizó de una manera homogénea leares, así, siempre resultan engañosas porque
a lo largo del último siglo ni en cada una de las

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cada isla tiene su propia personalidad y, en con- TABLA 3. EVOLUCIÓN DEL NÚMERO DE HABITANTES POR FARMACIA
secuencia, pienso que hay que analizarlas por EN LAS ISLAS BALEARES (1891-2000)
separado. Si a las variables utilizadas añadimos,
por ejemplo, la del número de habitantes por Mallorca 1891 1930 1944 1955 1964 1970 2000
farmacia (cf. tabla 3), nos daremos cuenta de la Menorca H/F H/F H/F H/F H/F H/F H/F
similitud de los modelos de Mallorca y Me- Eivissa-Formentera 3.224 2.601 2.500 2.079 2.346 2.434 2.052
norca, que para el conjunto de los años señala-
dos giran en torno a una media de 2.300 habi- 2.895 2.183 2.220 2.019 2.387 2.510 2.031
tantes por farmacia. Contrariamente, en Eivissa
y Formentera la media alcanza la espeluznante 5.000 4.510 7.533 5.448 4.069 4.367 2.305
cifra de 4.747 habitantes por farmacia, un poco
más del doble de la de las dos islas hermanas. Fuente: elaboración personal.
La evolución del turismo y los decretos de limi-
tación de farmacias a partir de 1941 han conse- GRÁFICA 2. RELACIÓN DEL NÚMERO DE BOTICARIOS
guido equiparar estas cifras para el año 2000: EN LA PART FORANA Y EN LA CIUTAT DE MALLORCA (1729-1730)
Mallorca (2.052 habitantes/farmacia), Menorca
(2.031 habitantes/farmacia) y Eivissa/Formen- 43%
tera (2.305 habitantes/farmacia). En realidad si
consideramos la población transeúnte, básica-
mente el turismo de temporada alta, estas cifras
aumentarían considerablemente en Mallorca y
en Eivissa y Formentera.

MALLORCA 57%

A finales del siglo XIX, Mallorca contaba Part Forana Palma
con 77 boticas, de las cuales la mayoría, un
70,13%, se localizaban en la part forana y el Fuente: elaboración personal.
resto, un 29,87%, en la ciudad de Palma. Esta era Nota: La cifra de los boticarios de la Ciutat de Mallorca no incluye los de la parroquia de sant Jaume.
una tendencia histórica que, aproximadamente,
se venía repitiendo desde la Edad Moderna. sobre el espacio urbano de la Ciutat de Mallorca Cubierta de la segunda edición
Hacia 1729-1730 los boticarios de Mallorca no en el siglo XVIII.64 Visto con la perspectiva que (1929) de El Libro de los remedios
eran más de 35, distribuidos un 57,14% del total dan los años, el verdadero interés de aquel tra- del virtuoso Fray Anselmo de gran
en los pueblos y un 42,85% en la Ciutat de bajo gira en torno a una fuente documental circulación en el siglo XVII.
Mallorca (cf. tabla 4 y gráfica 2).62 En una econo- excepcional: el padrón de Palma de 1729-1730, (Biblioteca particular)
mía de antiguo régimen, era natural que algunas en el que se especifican nombres, apellidos y
villas, e incluso la mayoría, no tuviesen botica- profesión de todos los cabezas de familia, con
rio. Las más privilegiadas, como Llucmajor y indicación de la manzana en que residían. Este
Felanitx, tenían 4 y 3 boticarios respectivamen- hecho me permitió localizar y representar en un
te, seguidas de cerca por Inca, Manacor y Po- antiguo plano de Palma todos y cada uno de los
rreres, con 2 boticarios cada una. Finalmente, oficios, entre los cuales no faltaba la «clase sani-
Algaida, Artà, Muro, Petra, Pollença, Sineu y taria», es decir, médicos, cirujanos, practicantes
Sóller tan sólo tenían uno. A juzgar por la fuen- de cirugía, barberos y, naturalmente, los botica-
te consultada, la mayoría de estos profesionales rios (gráfica 3).
pertenecían a un grupo social pudiente, tanto
económicamente hablando como en lo referen- Los quince boticarios localizados65 forma-
te al prestigio social. Este prestigio en ocasiones ban parte de un gremio más bien pequeño,
permitía a los profesionales quedar libres del equiparable en volumen a otros gremios como
pago de determinados impuestos, especialmen- los de los talabarteros, confiteros, boneteros,
te si la farmacia que regentaban pertenecía a medidores de aceite, tintoreros y torcedores de
una orden religiosa o a un hospital público.63 seda. La diferencia tal vez más relevante en
relación al resto de los artesanos que vivían
En la Ciutat de Mallorca era un poco dis- concentrados en barrios era precisamente su
tinto, seguramente por la competencia estable- dispersión por toda la Ciudad de Mallorca. Se
cida entre los boticarios de las distintas barria- trataba de una estrategia comercial loable –hoy
das. Mi primer contacto con su pasado data de
1977, momento en que publiqué un estudio

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