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Revista MOT - edición 6 web - páginas

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Published by , 2017-05-04 01:58:20

Revista MOT - edición 6 web - páginas

Revista MOT - edición 6 web - páginas

r e v i s t a d e d i s t r i b u c i ó n g r a t u iM tO Ta

EDICIÓN 6
04. 2017

La nostalgia

JOSE CARLOS YRIGOYEN LUIS FERNANDO CUETO PIERRE CASTRO SANDOVAL
ARTÍCULO ENTREVISTA CUENTO

XIMENA CANALES MARROU DIANA MARCELO
ILUSTRACIÓN FOTOGRAFÍA
1

MOT

MOT
edición SEIS / ABRIL 2017

LA NOSTALGIA

LA TRISTEZA QUE SE DISFRUTA

Una parada de autobús antes del alba, los ocasos en el malecón, la comida
que preparaba mamá, la travesura que ya no te atreves a contar, la chica que
te dijo que no, el muchacho al que le rompiste el corazón, los chistes de papá,
la mascota que olvidó el camino a casa y nunca más regresó, la chica que no
te dijo nada cuando te besó, las rieles del tren, la Kola Inglesa, las galletas
munición, aquel tiempo lejano en que sabíamos menos y preguntábamos
más, y esa, esa bendita canción. Algo así es la nostalgia, el tema que esta vez
nos convoca, hablemos de la tristeza que nos provoca una ausencia, y ese
extraño placer que nos produce su evocación.

NUEVA VIDA DE PAREJA 3 Y SI ACASO NO BRILLARA EL SOL 9
SESENTA DÍAS 4 ESE CAMINO EXISTE 10
LA HORA DEL RECREO 7 SÍNDROME DE HABANA 12
LA NOSTALGIA COMO TRAICIÓN OTRA VIDA JUNTOS 13
8 fotografía: diana marcelo 15
15
Ilustración: XIMENA CANALES

Escriben en esta edición: Rosmery Cueva, Sally Jabiel, Mirtha Pecho, Juan Osorio, Mariano Vásquez Baldassari
y nuesCtroons liansviimtaádgoesneesspdeecLiaelaens:dProieBrrreittCoa, sKtarorinSaanHduoevratal,s,LJueinsiFfeerrJnearni,dJoohCnuOetHo,!,SAtunadrrteFa lOorredsoyñeJzo,sLéuCcaíarlQosuiYsrpiegoyen.

y la colaboración especial de: Ximena Canales y Diana Marcelo.
Dirección General: Zaida Osorio * Dirección comercial y márketing: Victor Quirita * Edición General: Juan Osorio y Mirtha Pecho

* Edición Gráfica: Carla Patiño * Corrección de estilos: Rosmery Cueva y Sally Jabiel
* Diseño y diagramación: Noemí Slee * Idea original: Jorge L. Sánchez.
Visítanos en: www.revistamot.com - www.facebook.com/revistamot

2 [email protected]

Invitado especial - .M O T

NUEVA VIDA EN PAREJA

Para ser escritor a tiempo POR: Stuart Flores / Cuento que estaba teniendo muchos
problemas en el trabajo, y me
completo tuve que intercambiar Ilustración: Jenifer Jeri empezaba a tocar casi sin invitarme
roles con mi nueva mujer. A ella a hacer el amor, sino hurtándolo.
la conocí en las fiestas que daba A ella le pareció estupenda la idea de A los pocos meses, Fedra comenzó Yo simplemente accedía a sus
un amigo en común, el cual tenía que yo fuese escritor así que, luego a demorarse en llegar del trabajo, y peticiones y me dejaba hacer.
muy buena reputación de unir a de mudarme a su departamento, cuando le pedía explicaciones era Ya llevo cuatro años viviendo
solteros. Nada más tuve que asistir acordamos intercambiar roles. cortante y fruncía el ceño. Cada con ella. Hipólito va a entrar
a una de ellas para comprobarlo y Por las mañanas ella salía al vez se hacía menos cargo de su en la secundaria y aún no
conocer a Fedra. trabajo, se despedía de Hipólito, hijo, a quien yo le había tomado un logro concluir ningún proyecto
En esa primera noche, mientras su hijo, y me dejaba encargado profundo cariño, y ya ni me dejaba literario. Los problemas continúan
bebía de un inagotable vaso de que lo cuidara mucho, como si dinero suficiente para las compras pero, sin explicación alguna,
bourbon, le conté que estaba fuese mío. Después de llevar al de la semana. me he acostumbrado a ellos. A
separado de mi mujer hacía un año niño a la escuela, tenía toda la Las cosas llegaron a ser peores veces, en lugar de escribir, lloro
y que ocupaba mis días trabajando mañana y tarde para escribir, cuando, de un momento a otro, desconsoladamente. Comprendo
en el hospital por las mañanas y descontando el tiempo que me comenzó a beber. Como tu ex que todo esto que hago es un
dando clases de Odontología en la tomaba cocinar. Debo precisar marido, le espeté. Y ella me sacrificio por la literatura y tengo
universidad por las noches. que ambas cosas las tuve que golpeaba hasta verme sangrar. la secreta fe de que, algún día, esta
Sobre ella adivinaba que también aprender a punta de esfuerzo y En muchas ocasiones, luego de situación cambiará.
transitaba por las cenizas de un práctica diaria, hasta que por estos altercados, se acercaba Cierta vez fuimos a cenar con
matrimonio hace mucho tiempo fin tenía un plato delicioso o un sigilosamente a la cama y me los amigos del trabajo de Fedra,
consumado. A diferencia de párrafo respetable. susurraba al oído que la perdonara, quienes me querían conocer.
mí, que fui abandonado por mi Cuando nos arreglábamos para
cónyuge, ella abandonó al suyo por salir, fue extraño verla en el
ludópata y alcohólico. Me contó espejo con unas pinzas diminutas,
que se encontraba en tratamiento y sacándose de raíz un irremediable
que, por esa misma razón, le había bozo que le había empezado a
resultado fácil ganar la custodia de crecer —desde no sabía cuándo—
su único hijo. allí donde los hombres tenemos el
¡Ay, los hijos! Le conté que yo nunca bigote.
los tuve, jamás los planeamos y
mucho menos los quisimos. Era Stuart Flores (Huancayo, 1986) Es 3
un proyecto que jamás nos llegó licenciado en Comunicación Social
a interesar y, en lo particular, me por la Universidad Nacional Mayor
era irrelevante. Lo que más me de San Marcos en la especialidad de
interesaba en esta vida —y fue allí Periodismo. Ha publicado cuentos,
cuando saqué el tema— eran mis crónicas, poemas y traducciones
aspiraciones literarias. en revistas como Lucerna, Correo
A Fedra le conté —no esa misma Semanal, Tinta Expresa, El jinete de
noche, sino una posterior, cuando la Tortuga y Caretas, entre otras. Es
ya nos habíamos dado el beso— que autor del libro de cuentos La muerte
estaba escribiendo mis historias es una sombra (Matalamanga,
tristes, todo lo vivido se me había 2013).
estancado muy en el fondo y no
dejaba que las emociones nuevas
transitaran en paz.

MOT

SESENTA DÍAS

POR: MARIANO VÁSQUEZ BALDASSARI / cuento

Fotografía: Internet / Medios

“C inquantasei, en desechos humanos, los “Cinquantanove giorni”, dijo en y nueve días de espera. Casi
cinquantasette, cinquantotto… mismos matorrales resecos, voz alta y en correcto italiano. dos meses desde que cruzara
cinquantanove”. Amman había las bolsas de basura entre las La voz adormecida de Dabi de Argelia a Marruecos en la
casi terminado de contarse por que se abrigaban del viento salió de lo profundo de la choza maletera de un automóvil junto
sexta vez consecutiva los dedos grupos de recién llegados que a sus espaldas e intentó con a otras cuatro personas y llegara
de cada mano cuando levantó la al principio siempre dormían torpeza imitar sus palabras. a este lugar para la última etapa
cabeza. Sus ojos, que hasta ese a la intemperie, los charcos “Cincuenta y nueve días”, dijo de la primera parte de su viaje.
momento había apretado con de orina y agua estancada que esta vez Amman en el pobre Casi dos meses de observar lo
fuerza, fueron abriéndose con salpicaban un camino que la español que había aprendido en mismo o más precisamente de
languidez, como quien cree que luz de la luna hacía brillar los meses anteriores, durante formar parte del espectáculo
despierta de una pesadilla y como pequeñas lagunas, la ruta de insolación y noches de gente hacinada, miles
espera no volver a encontrarse repletas de islas de heces. Lo heladas desde el cuerno de de personas repartidas en
dentro de ella. Intuyó que ya asustó la probabilidad de no África hasta Marruecos. Esta interminables campamentos,
habría anochecido, aunque distinguir si efectivamente vez la voz a sus espaldas no le venidas de todos los confines
estaba seguro de que aún en volvía a mirar todo aquello, respondió, tal vez porque había del África y más allá. El lugar
la más profunda oscuridad o si tanta miseria se le habría entendido, tal vez porque se en el cual se encontraba era
no dejaría de recordar lo quedado finalmente grabada había vuelto a quedar dormido. el tristemente célebre monte
que le rodeaba: los mismos en la retina, como una mancha Gurugú, uno de los puntos de
4 árboles de bases inmundas en el iris. Habían pasado, pues, cincuenta frontera de Marruecos con el

enclave español de Melilla, la Amman antes de los 10 años ser capturado en el camino o de MOT
puerta de Europa, esa línea las posibilidades de aprender quedarse allí indefinidamente,
de tierra que se veía en el a disparar una AK 47 siempre gastando así el poco dinero Amman aprendió además
horizonte, tras el mar. fueron mayores que las de que tenía para transportarse. que esta realidad no solo era
El ejercicio de Amman de aprender a leer o escribir. Lo mismo ocurría con la aprovechada por los millones
contar días obedecía no solo Al principio, su viaje de ocho posibilidad de pasar a Egipto de migrantes que se movían por
a la necesidad humana de mil kilómetros a lo largo del y luego a Israel para tentar el el continente, sino igualmente
cuantificar, sino sobre todo continente africano se había cruce del Mediterráneo, ruta por contrabandistas de
era un juego para mantener caracterizado por etapas muy cada vez más difícil no solo armas y grupos armados
la cordura o la esperanza. marcadas. La primera, la salida que aprovechaban la poca
Consistía en diferenciar cada de su país, la había imaginado vigilancia o la “flexibilidad”
día pasado allí en función a como la más difícil, aunque por
algún suceso, con nada más alguna razón logró colarse sin “
que la memoria como libreta ser identificado en un grupo Cuando terminaron se miraron por
de apuntes. Esto porque hacia de personas que sí tenían fin las caras, y reconocieron en el
fines del primer mes en Gurugú en su poder el impagable otro las mismas huellas que el hambre
recordó un juego con su abuela, salvoconducto para emigrar. Si y los largos viajes les habían dejado. Y
cuando hacía 34 años él había bien en principio había decidido
sido un niño y ella no estaba cruzar solo la frontera hacia comenzaron a reírse sin parar.
muerta y entonces le había Sudán para evitar cruzarse con
enseñado a contar en la cocina los innumerables informantes ”
de su casa, en Keren, Eritrea; del gobierno, la primera noche

“La otra opción, la de cruzar hacia

uno de los campos de refugiados

de Etiopía, la había desechado casi por el control fronterizo y los de las autoridades fronterizas
muros que sellan este último para saltar de un país al otro
inmediatamente por las innumerables país –pese a que los eritreos cometiendo atrocidades.
son considerados refugiados
posibilidades de ser capturado en el de guerra- , sino además por A partir de Sudán pasó de
las cada vez más peligrosas campamento en campamento,
condiciones de viaje. Decidió de automóvil en automóvil
entonces cruzar a Sudán de allí y de grupo en grupo de
”camino seguir por el Tchad y Nigeria migrantes durante cerca de
y entrar finalmente a Argelia. tres meses hasta que conoció
Pero el terror que Boko Haram a Dabi, cerca de la frontera
impartîa ya en la región –algo entre Libia y Argelia. Habían
de lo que se enteró recién hecho juntos la cola para
en Sudán, cuando alguien recibir comida proporcionada
país en el que había nacido, su oído comprobó cómo los pudo finalmente leerle unos como ayuda humanitaria
pero en el cual no podía vivir. guardias fronterizos de su país periódicos- y el considerar que y se habían sentado juntos
En el cual casi nadie podría practicaban el tiro al blanco atravesar cinco fronteras era, a comer, todo en el más
vivir, para ser sinceros, salvo sobre otros fugitivos que en el orden de las posibilidades, absoluto silencio entre los
el dictador de turno y algunos habían tomado esa dirección. mucho más peligroso que dos. Cuando terminaron se
Señores de la Guerra. La mayor La otra opción, la de cruzar hacia cruzar cuatro; lo obligó a tomar miraron por fin las caras, y
parte de la población está uno de los campos de refugiados en el camino la decisión de reconocieron en el otro las
obligada a realizar el servicio de Etiopía, la había desechado pasar por Libia, país que luego mismas huellas que el hambre
militar obligatorio por tiempo casi inmediatamente por las del derrocamiento de Gadafi y los largos viajes les habían
indefinido y al servicio de innumerables posibilidades de tenía mucha menos vigilancia dejado. Y comenzaron a reírse
la dictadura, o sea que para militar que la de sus vecinos. sin parar.
5

MOT heridas, sino porque se habían a la primera. Ya conocían de adentró en su carne violeta. No
vuelto casi diarias y ya no valía memoria la posición de los sentía nada. El dolor se había
Dabi era Libio, y aunque su la pena contarlas, sino estar sensores de movimiento y las ido, probablemente avisando la
idea había sido asentarse en preparados para ellas. rutas y ritmos de los guardias. llegada de la gangrena. Alzó la
Argelia para buscar trabajo El agudo pitido de la alarma de Salvaron esa con facilidad. Sin cabeza con esfuerzo. Al fondo,
y estudiar –algo que muchos reloj que salía de la choza lo embargo, cuando trepaban hacia el lado de Marruecos, vio
de sus coterráneos imitaban sacó de sus recuerdos y le indicó la segunda valla –que en esa las luces del mercado de Beni
porque en su país era ya casi que la hora se acercaba. Esta sección era la más peligrosa, Enzar, en donde Dabi le había
impensable lograrlo- durante vez sólo él y Dabi intentarían coronada de alambre de púas- enseñado a buscar, al final de
su espera en la frontera había cruzar las vallas de seis metros la luz de una linterna y luego cada jornada, los pequeños
conocido a Amman y se había de alto y alambre de púas que de un reflector y los gritos de paquetes de verduras y frutas
convencido de que lo mejor protegía la frontera. Lo habían guardias o ladridos de perros, –y hasta a veces pescado- que
era, ya que estaba en plan de intentado ya una vez junto a un el inconfundible acento de Dabi los mercaderes dejaban. Por
dejarlo todo de todas formas, gran grupo que como una ola de diciéndole “Rápido, rápido!”, un momento vio o creyó ver
tentar el salto a Europa. En el gente chocaba contra las mallas sus dedos aferrándose al metal, o pensó en los manantiales en
camino hasta conocer a Dabi, y parecía dejar pasar al otro lado sus zapatillas resbalando sobre los que nadaba con su hermana
Amman había descubierto que parte de su inmenso caudal, el metal, y al final un dolor cuando eran niños. Recordó que
la mayor parte de su continente pero solo algunos lograron el punzante, luego lacerante, en tenía sed, mucha sed. Intentó
estaba dividido por muros y paso y fueron todos apresados el muslo. alcanzar la cantimplora, cuya
vallas que separaban la pobreza por la policía española. Dos Se había quedado enganchado. correa de alguna manera había
de otra pobreza, campos de murieron esa noche ahogados Ya sea por su posición o la quedado enredada en el cable
refugiados de otros campos de en el Mediterráneo. El resto altura a la que había quedado que ya envolvía su pierna. Pese
refugiados. debía conformarse con regresar suspendido, enganchado tan al dolor, que había regresado
herido pero vivo y agotado al dolorosamente a los clavos tras el esfuerzo, pudo tomarla.
Desde que llegó al campamento, a recuperarse que ni siquiera pudo pegar un Bebió a lentos sorbos. Se rindió
campamento, sin embargo, la para poder volver a intentarlo grito de dolor, Amman pasó al quinto, al comprender que
diferencia entre cada día había unos días más tarde. desapercibido para los guardias su sed era insaciable. Alzó la
comenzado a difuminarse en Un par de horas después de fronterizos, que emprendieron cabeza y echó un vistazo al
su cabeza. Entonces decidió recoger las pocas cosas que la persecución de Dabi, ya en camino en el que había visto a
diferenciarlos con eventos que podían llevar encima –a Amman territorio español. Dabi por última vez perderse,
le hubieran impresionado, que poco le quedaba encima, sobre Un ligero brillo al este, sobre el antes de desmayarse, entre la
nunca faltaban, como el día en todo luego de la frontera mar, el reflejo de un pequeño oscuridad y los haces de luz
que se terminaron las raciones entre Argelia y Marruecos, rayo del sol, lentamente subió de la linternas. Era el camino
de comida de la Cruz Roja donde había pagado con ropa por sobre sus párpados cerrados. que a él le faltaba recorrer,
compradas a precio de oro a sus y víveres su pase- y habiendo Lo despertó. Amman no estaba que nunca recorrería. Al
arrendatarios de choza, o esa calculado que llegarían a la seguro de cuánto tiempo había fondo, Europa seguía siendo
noche en que dos Ugandeses valla en veinte minutos a buen pasado, pero debía faltar muy una delgada línea imaginaria.
fueron asesinados a golpes paso, sabían que les quedaba poco para el día, con él allí El sol salió entonces por
por connacionales que los cerca de una hora hasta que el colgado. Se encaramó gracias completo, le golpeó de lleno
acusaban de ser homosexuales. sol se levantase y los dejara al a uno de los pilares, y una en el rostro bañado de sudor.
Había dejado de tener en descubierto. sección del alambre que llevaba “S essanta”, dijo en un susurro
cuenta para estos recordatorios Llegaron relativamente bien enganchado a la pierna se Amman, con su ùltimo
a las redadas de la policía aliento.
marroquí al monte, no solo
porque siempre pegaban con
la misma intensidad y dejaban
más o menos el mismo tipo de

6

MOT

LA HORA DEL RECREO

POR: mirtha pecho / Relato

Ilustración: Jenifer Jeri

En la puerta del colegio, como juguito con ese ácido que solo el Pienso que dentro del uniforme el colegio en tener un celular con
limón peruano nos sabe dar. Era escolar debieron incluir un casco, cámara. Lamentablemente se le
a las seis de la tarde, una señora la gloria. Algunas veces, cuando a porque lo que se veía en el kiosco perdió a las semanas y después de
colocaba dos baldes, una fuente de papá le iba bien en su trabajo, me del colegio ni bien sonaba la tanta búsqueda se dio por vencida.
conchas y un galón con caldo de daba un sol o un sol y 50 céntimos campana no era cosa para débiles. Al año siguiente Allison apareció
pescado. A la salida, Marilin -mi de propina. Sobraba para llevar La turba actuaba de inmediato y con un celular moderno que
mejor amiga del colegio y ahora de los pescaditos en bolsa que vendía las señoras amargadas que atendían presumía por todos lados. Marilin se
la universidad- y yo teníamos que un joven hippie al costado de la apenas se podían dar cuenta si una lo pidió prestado y desde ahí marcó
armar un plan de contingencia para casera. Nuestro grado de riqueza mano misteriosa se jalaba un dulce al número que había perdido el año
pelearnos con la chiquillada que se medía por cuánto podías gastar por ahí. Marilin era demasiado pasado e increíblemente el número
luchaba por conseguir su ceviche en el recreo, pero sobre todo, por engreída como para irse a la guerra seguía habilitado. Respondió el papá
de 10 céntimos que la señora cuánto podías gastar en la hora de por una galleta o una gelatina, y yo de Allison. El colegio entero supo de
vendía en esas conchitas. Ya con 50 salida. demasiado floja como para dejar de la gritada que Marilin le dio.
céntimos la doña nos daba bastante probar mi puntería tirándole papeles Allison nunca llegó a ser parte
a los profesores desde el quinto piso de nuestro grupo. Jamás le
del pabellón de secundaria. perdonamos que nos presentara a
Pero estaba Allison. Ella siempre su mamá como su empleada. Nos
quiso pertenecer a nuestro grupo, reímos de ella cuando se le cayó la
las “Skaddex’s” que sabe dios qué media que usaba para rellenar el
significaba. Verónica se ofrecía brasier que sus pequeños pechos
pagarnos las loncheras por apenas podían. Le pedíamos dinero
pertenecer a nuestro club. Incluso se prestado que jamás fue devuelto.
ofrecía enfrentarse a la chiquillada Nunca la esperábamos a la hora de
del kiosco por solo una galleta que salida para irnos todas juntas. No la
a alguna se nos antojara. Ella era llamábamos para ir al cine, a la playa
un extraño personaje. Se armaba o a una discoteca en turno matiné.
mentiras que nadie le creía, pero Ya no sé bien qué sentimiento me
nunca desfalleció en mantenerlas provoca todo esto. Por momentos
vigentes, como por ejemplo que es una pena profunda por lo difícil
vivía en una casa grande con piscina que fue para ella crecer en medio
y llena de sirvientes. Era obvio que a de tantos niños estúpidos como lo
un colegio nacional, de 40 alumnos éramos nosotros, pero por ratos
por salón, donde el que llegaba siento un rencorcito que todavía no
último tenía que ir a otro salón a puedo esclarecer por qué. Lo que
buscar una carpeta o sentarse en sí tengo claro es el enojo que tengo
una piedra, una chica con sirvientes hacia mí. ¿Cómo pude permitirme
no iba a llegar. Pero ella se aferraba ser tan boba, incomprensiva y cruel
a esa historia y no permitía que con ella? ¿Cómo no me di cuenta
nadie más tenga “lujos” que solo ella del daño que le causaba? Porque
se podía permitir, como tener una definitivamente eso repercutió en su
caja de lápices de 24 colores o tener vida adulta. Unos amigos en común
cuadernos Stanford porque el resto me cuentan que es una mujer fría
sólo podíamos llegar a cuadernos e insegura, que su nueva pareja la
Loro. golpea y ella hace de todo para que
Un día Marilin llevó un celular al él no la deje. ¿Hasta qué punto esto
colegio. Era la primera en el salón es mi culpa? Es una espina en mi
en tener celular y la primera en conciencia con la que tendré que
caminar desde ahora.

7

M O T - Invitado especial

LA NOSTALGIA COMO TRAICIÓN

POR: JOSÉ CARLOS YRIGOYEN / ARTÍCULO

Soy un nostálgico. No tengo Ilustración: John OH!

era impune en todos los espacios
problema en decirlo y muchas de la vida diaria. No digo que
de las cosas que he escrito han hoy no exista intensamente, pero
ocurrido por una necesidad en ese entonces la sanción social
de resucitar alguna escena del era inexistente. Lo mismo con
pasado, un rostro, un nombre, el odio al homosexual quien era
una sensación triste o alegre que un auténtico paria que cuando
secretamente me definió. Creo que era escolar había licencia para
el futuro no existe, que el pasado golpearlo y humillarlo hasta
siempre es engañoso, pero lo que extremos indecibles, y cuando
vivimos, con los años, va forjando era adulto era visto en el mejor de
poco a poco una narrativa, una los casos como un divertimento,
historia larga y compleja con que debía ocultar su vida sin
episodios y capítulos que afloran posibilidad de redención. En ese
según el curso de las cosas; y los aspecto algo, muy poco, hemos
acontecimientos, una historia progresado.
que podemos organizar y obtener
conclusiones de ella mucho Me hubiera encantado que el Perú
más instructivas que la eventual donde viví hubiera sido como en
planificación de lo que será. esas obras a las que me refiero.
Un país quizá jodido en muchos
Dicho esto, también hay que aspectos, pero donde había un
reconocer que la nostalgia, cuando consenso sobre ciertas cuestiones
se manipula convenientemente, básicas que nos otorgaran un
puede ser tendenciosa, sesgada y rumbo preciso y general. No
edulcorar circunstancias que en fue así, no es así todavía, y
realidad fueron bastante difíciles cualquiera lo puede ver. Por
de superar. Esta es la impresión que eso no puedo dejar de sentir la
me causa cierta ola de nostalgia etcétera. Es decir, hay algo que de relaciones sociales más o incongruencia entre esas ficciones
literaria, cinematográfica y de añorar en ese periodo, lo que menos armónicas, ¿cuándo nos y mi experiencia personal. Quizá
otros canales por retratar los años vivimos como país no fue tan convertimos en el horrible país necesitamos más que trabajos que
ochenta y noventa como algo malo como lo recordamos y te lo que somos, donde el racismo, la nos doren la píldora de nuestras
muy distinto a lo que fueron (y vamos a demostrar. homofobia, la violencia sexual y deudas, alguno que nos refleje tal
esto lo puedo decir con amplio tantas otras taras nos infestan? como fuimos con toda la crudeza
conocimiento de causa, pues estas Sé que me refiero a obras de necesaria para despertarnos.
décadas son el preciso objeto de ficción, y que la ficción no está Si algo definió esas épocas, Porque de eso carecemos, y
mi recurrente nostalgia). Los obligada a contar los hechos como de manera menos veladas y mucho.
ochenta y los noventa, propugna fueron, sus licencias son infinitas: eufemísticas que la actual, fue la
este revisionismo, fueron años puede cambiar la cronología, profunda intolerancia que nos
complicados, sí, había una crisis los hechos, sus consecuencias, impedía reconocernos como una
económica atroz y un terrorismo nombres, edades y, desde luego, sociedad, ya no digo de iguales,
que parecía imposible de conjurar, las relaciones humanas como se sino de gente que podía mantener José Carlos Yrigoyen nació en
muy pocas cosas estaban bien, dieron alguna vez. Sin embargo, una mínima vida civilizada en Miraflores en 1976. Ha escrito
de acuerdo, pero había cierto aun aceptados estos códigos, común. El racismo de hoy es libros de poesía, narrativa
romanticismo, una juventud que no dejo de sentir que algo no sin duda vergonzoso, pero el de y crónica. Escribe también
a pesar de todo mantenía una termina de convencerme, que los ochenta tenía menos filtros comentarios de libros en Perú21
esperanza en el porvenir y en una gran incoherencia salta a la sociales de los que hemos puesto: y conduce el programa Entrelibros
los valores más nobles como la vista: si hace treinta años éramos el choleo, exclamado, vociferado, en TvPerú. Tiene una hija y un
8 amistad, la solidaridad, el trabajo, así, si nuestro país era un lugar escupido en la cara de la víctima, gato.

Invitado especial - .M O T

Y SI ACASO NO BRILLARA EL SOL

POR: PIERRE CASTRO SANDOVAL / ARTÍCULO

Tuve un profe de literatura que me Ilustración: Karina Huertas “¡Ohhhhhh!” Los globos subían como
espermatozoides buscando la luna. Yo
dijo: “Nunca escribas historias tristes este ya viene puesto, si lo destrozo iluminado por unos farolitos lejanos. me quedé mirando el cielo incluso 9
cuando estés triste. Cuando estés igual le queda su gintonic”. Como Entonces alguien recogió todos los después de que la noche se había
triste intenta con el humor y deja a decía Hemingway: “Escribe borracho, globos de helio que habían quedado tragado al último. Fue una de las pocas
la tristeza reptar en paz. El dragón de edita sobrio”. Pero nunca te revientes de la fiesta. Tenía por lo menos dos veces que me salieron las lágrimas
Komodo muerde a su presa y sigue el cerebro de un escopetazo como él. docenas de globos atrapados. Los por algo tan tonto. Pero no era tonto.
el rastro de la herida durante días. Uno empieza a escribir mientras se sostenía emocionado como si fueran Ese día en la boda me di cuenta. Un
La tristeza irá por ti. No la busques”. ata los zapatos, al despertar de una pájaros exóticos. Vino corriendo y globo es el resumen de todo lo que
Así que cuando me pidieron 4000 pesadilla, cuando cruzas un puente y cuando estuvo en medio de nosotros hemos perdido. Porque un globo no
caracteres sobre la nostalgia, y yo no ves el final de tu ciudad. Sentarte los liberó. La velocidad de ascenso de es más que un retazo muy pequeño
andaba como un cubo de Rubik al a tipear las palabras es un mero acto un globo inflado con helio tiene la de plástico. El resto le pertenece a la
que han quitado todos los stickers, burocrático. Pero volviendo a lo de los aceleración exacta para que creas que atmósfera. Todo lo que tú crees que
me dije: “Vamos a esperar, vamos a globos, recordé que estaba yo en otra puedes detenerlo. Pero no puedes. es el globo, no es el globo. Es el cielo.
recostarnos sobre esta roca caliente”. fiesta en un club campestre, como 10 Allí estábamos todos con la cabeza Y por eso escapa de ti. Adoro todo lo
Y esperé junto a mi planta carnívora. años atrás. Nos había dado la noche vuelta hacia el firmamento gritando: que no es mío. Tú por ejemplo. Blanca
Aprendí de ella la paciencia. Esperé y bailábamos sobre el césped apenas Varela. Cuando tenía 23 años me
hasta que nos alcanzó la noche del fui a vivir a Río de Janeiro. Antes de
domingo. La noche del domingo no irme un amigo me dijo: “Oye, ¿sabes
es un dragón de Komodo. La noche que en Brasil hay una palabra que
del domingo es el Godzilla de la no se puede traducir a otro idioma?
nostalgia. ¿Podríamos pensar en una Saudade, loco”. La saudade es la
hora de la semana menos pendeja alegría de estar triste. “Fuera mierda”,
para escuchar a Coltrane tocar My one le dije. Pero cuando llegué a Río lo
and only love? Y ayer nomás estaba entendí. Hasta la lluvia te hacía feliz.
en el matrimonio de dos amigas. Mi Daban ganas de empaparse de todo
primera boda lesbiana. Me sentía lo que cayera del cielo porque al fin y
como en ese capítulo de Seinfeld en al cabo había bossa nova para curarlo.
el que Elaine va a una boda leca y Pienso en los globos que se van
dice: “Yo no soy lesbiana, odio a los como todas las escenas finales de tus
hombres pero no soy lesbiana” ¿No películas favoritas. Ahora reemplaza
es bello cuando los actos cotidianos las películas por los momentos de tu
coinciden con escenas de nuestros vida en que perdiste a alguien. Trata
sitcoms favoritos? No se le puede de que no se te desdibuje la sonrisa.
pedir más a la vida. En la fiesta estoy
tirado en un comodísimo sillón Pierre Castro Sandoval (Trujillo,
blanco mientras todas mis amigas 1979). Escribe, monta bici y gusta
bailan. Me recuesto, miro hacia arriba del pan con queso. Ha publicado
y descubro los globos. Decenas de los libros de cuentos Un hombre
globos de colores colgando del toldo feo (Borrador, 2010) y Orientación
árabe. Y me digo: “Esto es. Así tiene vocacional (Paracaídas, 2015). Se
que empezar mi historia”. Fui y le pedí graduó de publicista pero renunció y
un gintonic al barman. Le puso una ahora es profe de literatura. Pueden
rodaja de pepinillo y una estrella de leer más historias suyas en su blog:
anís y yo volví a mi mueble. Nunca huesohueso.blogspot.com o en su
se empieza a escribir delante de la cuenta página de Facebook.
hoja en blanco. La hoja en blanco
huele tu miedo igual que las chicas.
En cambio si te le acercas con un
gintonic en la mano dice: “Bueno,

M O T - Invitado especial

Fotografía: Juan Osorio

ESE CAMINO EXISTE

ENTREVISTA A LUIS FERNANDO CUETO / POR: JUAN OSORIO

C on Ese camino existe, Luis de la Literatura, le robamos diversos oficios? decir que mi quehacer esencial
unos minutos para indagar Empecé escribiendo mi es la literatura y mi hobby es el
Fernando Cueto, ex policía, sobre sus varios y diversos primera novela cuando derecho.
abogado y escritor, alcanzó el oficios, su labor literaria y sus estudiaba derecho y todavía era ¿Ya puede vivir de sus libros?
reconocimiento de la crítica recuerdos infantiles, esos que policía. Cada cierto tiempo la Creo que ahora son una gran
y el más importante premio inevitablemente conducen a la retomaba y cuando me retiré de ayuda para mi economía. No
nacional de literatura en 2011: nostalgia. la institución ya tenía la novela vivo exclusivamente de ellos
el Copé de Novela. Varios años lista: Lancha varada, de la cual pero me ayudan bastante. Las
y varias novelas después, Luis Usted fue policía, ahora no quedan más ejemplares. editoriales me pagan al publicar
Fernando visita Lima para es abogado y, sobre todo, Pienso que ahora estoy más mis libros y siempre que estoy
presentar una reedición de su escritor, ¿se pueden dedicado a escribir. Se puede
más premiado libro. En una desempeñar tantos y tan
mesa del añejo local de la Casa

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Invitado especial - .M O T

por acabar uno muestran mi forma de ver este país. actitudes en un mismo estrellas, el desierto, las dunas,
interés por mi trabajo, con ¿Sus colegas policías sabían escenario? todo tenía una explicación casi
voluntad de editarme. Es como de su afición literaria? fabulosa, mítica a través de mi
un ahorro para el futuro, más Cuando uno está en la abuela. Creo que eso me ha
adelante quizá viva solo de lo Algunos de ellos sí porque guerra sufre un proceso de servido mucho en mi ejercicio
que escribo. incluso escribía en los días de deshumanización. Es un de escritor. De alguna manera
guardia o cuando estaba de escenario que va destruyendo tengo ese germen inoculado de
Usted dijo que cuando entró franco. Sucede que no tenía aquellos elementos que la ficción, de dar explicaciones
a la policía su conocimiento casa en Lima, hasta ahora no componen los rasgos de la casi fabulosas a todo lo que
sobre el Perú era limitado, la tengo, vivía en pensiones, en humanidad, se actúa por me rodea. Mi abuela, en su
parcial, y que es allí donde cuartos alquilados y en algunas instinto, con reacciones escaso conocimiento, en su
aprendió mucho de cómo unidades de la policía a las primitivas, pero a pesar de ello, poca capacidad de expresión
era el país, cómo es la gente que llegaba. Cuando estaba en incluso en los momentos más porque hablaba en quechua y
en realidad. Esto se parece la escuela salíamos de franco crueles y más sórdidos, salen en castellano y en un idioma
un poco a lo que le sucede a los fines de semana y yo no a flote rasgos de humanidad. que ella había inventado, me
Vargas Llosa cuando ingresa tenía a dónde ir. Dar vueltas A pesar de que la violencia explicaba todas esas cosas. No
al Leoncio Prado. por el parque universitario nos aplasta y nos trata de sabía decirme, por ejemplo,
me aburría, muchas veces bestializar, siempre hay un por qué estaba la isla al frente,
Claro, es cierto. Uno no prefería quedarme dentro, rasgo humano en nosotros. Es entonces me inventaba un
termina de comprender el hacía la guardia de otros, me como una lucha sorda entre mito, una historia. Yo aprendí
país hasta que no está reunido traía unos cuantos regalos de el proceso de deshumanizarse a descubrir el mundo así, de la
con todos los componentes la calle, un poco de comida y y un espíritu de humanidad mano de mi abuela.
culturales, raciales y sociales tenía todo el día incluso para que nos quiere rescatar, una
que lo integran. Yo era un hacer poesía. Me dedicaba lucha constante, por eso Luis Fernando Cueto Chavarría
muchacho provinciano del mucho a escribir como una incluso después de una batalla, nació el 9 de marzo de 1964 en
norte del Perú, de un distrito forma de entrenamiento, leía entre los cadáveres, entre los Chimbote. Se graduó de abogado
muy chico, y cuando vine a libros de autores conocidos o heridos, siempre se ven gestos en 1987. Ha publicado los
Lima me deslumbró toda esta no tan conocidos que a mi me de nobleza, de bondad, incluso libros de poesía Labra palabra
monstruosidad. Sin embargo, gustaban y trataba de escribir hay lugar para el amor, para el y Raro oficio; las novelas
no comprendía el país porque largas páginas de acuerdo amor filial, maternal y para el Lancha varada, en 2005; Llora
no es suficiente conocer a cómo ellos escribían, a lo amor físico también. corazón, primera edición en
cómo está configurado Arguedas, a lo Ciro Alegría, a 2006; y, posteriormente, Días
geográficamente, sino que es lo Tolstoi, a lo Carlos Fuentes, Hay una persona que está de fuego, entre otras.
necesario también conocer la a lo Vargas Llosa. Trataba muy presente en su vida, su
geografía humana. La conocí de imitar cómo escribían y abuela, ¿cómo fue su infancia
desde el primer día de internado no me daba cuenta de que cuando usted vivió con ella?
en la policía. Viví con gente inconscientemente estaba
que venía de los lugares más buscando mi propia forma de Mi abuela era una mujer
recónditos del país, estaban e s c r i b i r. quechuahablante. Teníamos Ganó el Premio Copé de novela
allí todas las sangres, todas largos paseos. Yo vivía en su en el 2011 por su novela Ese
las idiosincrasias, todas las En Ese camino existe casa y ella me iba descubriendo camino existe.
culturas, todas las naciones. habitan personajes muy el mundo con sus palabras, con
Fue un proceso violento, duros, gente muy cruel, su voz. Todo lo que me rodeaba Además es profesor visitante
traumático, vertiginoso, con pero también hay varios en ese entonces, el mar, las en diversas universidades
un aprendizaje aceleradísimo y actos de nobleza, ¿cómo es islas, la playa, las noches de de nuestro país, desarrolla
creo que eso cambió totalmente posible que existan ambas cielo despejado, la luna, las ponencias, cátedra y talleres de
literatura.

Calle Libertad 130, Miraflores
Teléfono: 215-5593

[email protected]
FB/FundacionEuroidiomasCultural

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MOT SÍNDROME DE HABANA

Ilustración: Lucía Quispe

POR: SALLY JABIEL
/ RELATO

Hay lugares donde el tiempo es una anciana fumando entre sábanas certezas para soportar otra Navidad en esta revolución ya rota, en estas
tiendas de juguetes sin juguetes, en estos restaurantes sin langostas, ni
rosa, las mismas que tiende luego en el balcón como bandera. Hay tiempos, leche, ni café. Qué espera más inmóvil, más intacta; decadente.
también, derruidos en medio siglo que ya es nada, en la ansiedad de no A menos de una hora para medianoche, la lejanía de todo aquello que
esperar que se repita, en mi necesidad de Habana. Porque todo lo que llamamos cotidianeidad nos suscita melancolía. “¿Un mojito más?”,
está por desaparecer me da nostalgia. Tanta soledad, tanto odio y tantas pregunta él y me envuelvo en su manera de mirarme. Esperamos
cosas. Como si nunca hubiera dejado la isla, como si supiera que volvería pero la navidad nos encuentra primero, gracias a un teléfono cubano
pronto, pero sabiendo que no regresaría, al menos no a la misma que que no queremos devolver. Incluso a kilómetros de casa, mamá me
parece bombardeada por los años, la miseria que solo existe para quienes aturde hasta que mi minuto se termina. La suya se sorprende por
la sobreviven. la hora. Permanezco cerca de él, intentando descifrar las frases que
“¿De dónde vienen?”, grita una mujer desde un sofá en la calle. “Espera, intercambian, pero es un francés muy quieto. Su dolor se vuelve mi
dame algo”, la escuchamos procurando que su voz se seque, pero es idioma, se traduce en mi abuelo enfermo, en la sala en caos, en ese
contundente. Un repertorio que ya reconocemos bien, muy amargo, muy pasillo de hospital donde la lógica no tiene orden. Qué vulnerabilidad.
difícil.

Y hay dolores que trascienden, como si caminar por esta nación cansada Sí, hay Navidad en La Habana, nada más distante, más nuestra, más
nos hiciera sentir más vivos. La Habana es eso, un dolor para quienes la incierta. Días de esperar y esperar, sus pies mojados y mis desvelos
quieren, un instante que fascina y, a la vez, desilusiona porque aquello que por revelarlo en mi memoria. Eso que ya padecí, sin saber que era él.
está afuera es el final. Siempre ha sido él y yo, mi reivindicación.

“Me llevarás en esta postal”, sugiere él con una fotografía de un auto rojo Solo el amor engendra la maravilla, dispara una voz como despedida en
que podría pertenecer a cualquier lugar, a cualquier año. “Me llevarás como la radio. Él pregunta qué significa engendra y yo no sé bien qué decir.
un secreto, mon amour impossible”, dice con atrevida inocencia y no sabe, Ay, Habana. Lo cierto no se borra, no imagina otra forma, otra piel,
o tal vez sí, que acaba de crear mi anclaje a esta ciudad. otro olor. Porque al llegar a esa ciudad, supe que jamás la olvidaría.
Hay amores. Sí, hay amores en La Habana que conservan su tristeza, como No podría. La falsa utopía. De eso se trata el amor, de esa mujer en el
si resolver esta distancia fuera intranscendente. Amores que esconden sus sofá, de mi postal, tu abuelo enfermo, las luchas que no resistiremos,
La Habana y su espera.
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MOT

OTRA VIDA JUNTOS

POR: Rosmery cueva / Relato

Tu imagen la llevo impresa en Ilustración: Andrea Ordoñez

cada retina pero igual me hace “¡Qué me miras. No me asustas!”.
falta verte. Dime, ¿nos volveremos Ante su silencio, continuaste
a encontrar? Ha pasado más de un con la marcha desconocida y lo
año desde que partiste y aún me dejaste atrás. Cada vez te veías
duele, aún me oprime el pecho más próximo a las montañas,
cada vez que te pienso, aún me donde se alzaban pequeñas casas
lamento por no haberte declarado rústicas. Estabas dispuesto a llegar
mi amor absoluto cuando todavía ahí hasta que alguien te llamó por
estabas despierto. tu nombre: “¿Adrián?”. Te costó
¿Recuerdas nuestra despedida? reconocerlo porque hacía varios
Fue un jueves, en agosto, pasadas años que no lo veías. Era un primo
las seis de la tarde. Yo caminaba lejano, que había muerto tiempo
de la mano con tu hija por el largo atrás. Lo saludaste con confusión y
pasillo que nos llevaba a tu cama, te preguntó “¿qué haces aquí?, este
cuando un enfermero le dijo “su aún no es tu lugar”. Tú respondiste:
papá se está yendo”. Me tembló “Sí, tienes razón, no es mi lugar”.
cada célula del cuerpo y sentí la Él te tendió la mano y tú la tocaste.
piel tan fría como un témpano. Después todo fue repentinamente
Había llegado el momento. Tus oscuro, no pudiste ser consciente
signos vitales descendían cada de cuánto tiempo pasó hasta
vez más rápido anunciando que despertaste en el cuarto de
tu inminente muerte, esa que cuidados intensivos.
imaginé por varias semanas y que
pedí seis días antes entre lágrimas. asegurarme de que nada te hiciera viaje espiritual: Mientras pasaste Sabes, pienso mucho en esa
Tomé con fuerza tu mano aún tibia falta. Tú decías que era quien unos días en coma, producto de historia y siento nostalgia, me
y me abalancé sobre ti, rodeando mejor te cuidaba y yo atesoraba un infarto cerebral, llegaste a un acuerdo de tus ojos claros, la
con mis brazos tu enorme torso, con amor tus palabras. campo verde, llano y rodeado de energía que transmitías con cada
el que te caracterizó siempre y me Cada semana, antes de que la montañas, donde las personas abrazo, las flores que me diste en
hizo creer que eras el hombre más enfermedad te carcomiera los caminaban en aparente busca cada cumpleaños y los huaynos
fuerte de la tierra. Diste tu último tejidos y te impidiera caminar, de algo perdido. Tú empezaste a que tocabas con tu guitarra cuando
suspiro y te lloré solo como una mirábamos la televisión juntos caminar junto a ellas, intrigado. creías que nadie te veía. Quisiera
nieta sabe llorar a su abuelo. y me compartías en la sala de A lo lejos viste un cuerpo grande que alguien te toque la mano
“Señora, su papá tiene tres tipos tu casa las mismas historias de y poderoso. Te acercaste a él y dentro de ese cajón frío donde
de cáncer: a la piel, la sangre y siempre, entre risas y expresiones distinguiste una especie de bestia descansa tu cuerpo y regreses
los ganglios linfáticos; los más de asombro. Nunca te lo dije, roja, con dos cuernos enormes, que para tener otra vida juntos. Así
destructivos de todos los que pero la más fascinante era la de tu te miraba de manera desafiante. viajaríamos a tu casa en las alturas
existen”, fue la sentencia que el No tuviste miedo y le gritaste: de la sierra, caminaríamos por la
médico le dio a tu hija en febrero. plaza del pueblo donde naciste y
Desde entonces todo dio un giro todos dirían: “Ahí va Adrián con
fulminante. su nieta”.
Sentí la necesidad de hacerte feliz,
de permanecer a tu lado el mayor Semanas antes de tu muerte
tiempo posible antes de perderte. me dijiste que siempre sería
Los viernes eran nuestros, ¿cierto? tu corazón. Ahora yo, con la
Esos días iba a tu casa para resiliencia que adopté tras tu
desvelarme a los pies de tu cama y partida, te confieso que siempre
serás mi más bonito recuerdo,
abuelito mío.

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M O T - Invitado especial

FOTOGRAFÍA

POR: DIANA MARCELO

Diana Marcelo es licenciada en periodismo por la Universidad Jaime Bausate y Meza. Comenzó en el fotoperiodismo como practicante en

la agencia de noticias Andina y en el diario El Peruano. Ganó el primer puesto en Perú del concurso No Filter de OXFAM sobre desigualdad en
América Latina. Actualmente trabaja como reportera gráfica en el diario Correo.
El proyecto “Nostalgia” nace por la búsqueda de evocar los recuerdos de fotografías en slide de un viaje por Áncash de hace más de 30 años.
Utilizando un proyector, de los años cincuenta, se reconstruyó las escenas sobre el cuerpo de las mismas personas o sus descendientes. El
resultado final es el encuentro entre dos generaciones y el paso del tiempo.

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Invitado especial - .M O T

ILUSTRACIÓN

Por: XIMENA CANALES MARROU

Ximena Sol Canales Marrou estudia Dirección y Diseño Grafico en el instituto Toulouse Lautrec. Actualmente trabaja como ilustradora para el juego

de rol “Expiatora” y es diseñadora gráfica freelance.
Parte de su trabajo está disponible en:
https://www.behance.net/ximenacanales/
http://ximsol182.deviantart.com/

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MOT

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